EL APARATO PSÍQUICO (PARTE 1)

El aparato psíquico Freudiano consta de dos tópicas:

Primera Tópica.
Está compuesta por 3 sistemas. Los componentes de esta primera tópica
no responden a ninguna localización anatómica, ni fisiológica ni biológica,
sino que corresponden a las funciones identificables en el procesamiento
psíquico humano.
Estos tres sistemas son: el consciente, el pre consciente y el inconsciente.
a. Sistema consciente.
A partir de Freud, en psicoanálisis, lo consciente es concebido como
un lugar del psiquismo que recibe las informaciones del mundo
exterior y las del mundo interior, sin conservarlas.

Al decir lugar, se refiere no a un lugar físico, sino a que se encuentra

separado del sistema inconsciente, gracias al pasaje obligatorio a
través del sistema preconsciente, del que se encuentra separado
por la CENSURA.

El papel que tiene el consciente es el de tomar conocimiento del

mundo exterior e interior, gracias a la orientación que da la
atención, con lo cual el ser humano puede dirigir sus
comportamientos.

Sin embargo, tal como señala Freud, la conciencia no puede tomar

conocimiento de ciertos fenómenos

Es un lugar desde donde confrontamos la realidad, tomamos

consciencia de todo aquello que está al alcance de nuestros
sentidos, pero no podemos ser conscientes de todo, solo lo somos
de una parte de esta realidad.

Freud dice que al recibir la información enviada por nuestros

sentidos, primero llegan al sistema INCONSCIENTE, luego pasan por
la CENSURA, recién son captadas por el sistema PRECONSCIENTE, y
luego pasa al CONSCIENTE, para producir alguna respuesta-
movimiento.

Censura
Inconsciente Preconsciente Consciente
sentidos Respuesta

CENSURA.
Es una función psíquica que impide que los deseos del inconsciente
emerjan a la consciencia, y si llegan a hacerlo sería de manera
disfrazada porque no es impermeable.

Es una vigilancia ejercida para impedir el acceso de impulsos

nocivos o desagradables a la consciencia.

Freud la identifica como la voz de la consciencia moral, es decir que

se trata de un agente crítico, cuya función es la de impedir el paso
de contenidos o formaciones inconscientes al consciente. Es una
especie de filtro que cumple una función permanente de ser una
barrera capaz de seleccionar el paso de contenidos psíquicos entre
estos sistemas.

Se considera una primera censura la que existe entre el sistema

inconsciente y el preconsciente, y una segunda censura la que existe
entre el sistema preconsciente y el consciente.

Estas censuras se levantan durante el sueño, por lo que los

contenidos inconscientes pueden fluir libremente. Al momento de
despertar la censura se levanta nuevamente, promoviendo el olvido
que experimentamos respecto a nuestro sueño.

En la psicosis esta función no se cumple, razón por la cual los

contenidos fluyen libremente, no diferenciándose pensamiento y
realidad, es decir, al no existir la censura, todo está permitido,
desestructurándose el mundo psicótico y conformándose en calidad
de delirios, alucinaciones.
En la neurosis, en la vivencia cotidiana, el efecto de la censura hace
que los deseos inconscientes sean irreconocibles para la
consciencia, pues éstos se encuentran deformados, y es así que nos
vemos “obligados” a hacer algo que conscientemente no
queríamos, pero que inconscientemente sí.