Está en la página 1de 9

Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A.

Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

INTRODUCCIÓN

El ejercicio consiste en realizar un comentario crítico sobre un artículo de Juan A. Barceló


titulado: “En defensa de una arqueología explícitamente científica”.

OBJETIVOS

 Reflexionar y proporcionar una visión personal sobre la riqueza historiográfica de la


disciplina
 Aplicar los conocimientos adquiridos con el fin de proporcionar una opinión científica
argumentada sobre un tema de carácter arqueológico
 Demostrar la capacidad de discusión sobre aspectos historiográficos
 Ofrecer una valoración crítica presentada bajo estándares científicos

METODOLOGÍA

Tras realizar una lectura y reflexión crítica del artículo, se busca información sobre las
diferentes posiciones teóricas al respecto de otros autores, incluidos los que menciona en
dicho artículo en libros, blogs y páginas webs, usando como base el libro de JOHNSON,
Matthew: “Teoría arqueológica. Una introducción”. Editorial Ariel, 2000, Barcelona.
También se ha tomado muy en cuenta el artículo de HERNANDO GONZALO, Almudena:
“Enfoques teóricos en arqueología” cuyo artículo constituye un resumen de un curso sobre
“Enfoques teóricos en Arqueología” celebrado en 1991 en Madrid por la Fundación Ortega y
Gasset de dicho Ayuntamiento.

DESARROLLO EXPOSITIVO

Juan A. Barceló comienza su artículo criticando la cantidad de posiciones teoréticas que


existen en la profesión de Arqueólogo, prácticamente hay tantas como Arqueólogos, y que tal
diversidad de opiniones en vez de enriquecer son perjudiciales, porque no han sido
demostradas ni por sus autores. Por ello califica a la arqueología de “disciplina marginal,
que ve con envidia cómo otras ciencias producen conocimiento, lo validan, y crecen
acumulando aquella información que supera las pruebas a que ha sido sometida” Barceló
(2009: 175).

El debate de la búsqueda de la verdad debería estar superado en su opinión a través de un


conocimiento validable y objetivo, admitiendo que los errores son detectables y corregibles, y
que no por ello la Arqueología deja de ser una Ciencia.

Se considera afín a los planteamientos Postprocesuales de Manuel Domínguez-Rodrigo


(Departamento de Prehistoria de la Universidad Complutense de Madrid) y de Almudena
Hernando (Departamento de Prehistoria e Instituto de Investigaciones Feministas en la
Universidad Complutense de Madrid), con su búsqueda de verdades diferenciadas, con la
única crítica de que la Ciencia busca los errores, no la verdad; o lo que es lo mismo, busca el
error del sistema elegido, no la verdad particular en sí.

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 1


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

La Arqueología Postprocesual (o Radical o Neoprocesual), surge como una crítica a la


Nueva Arqueología y a la Arqueología Procesual. El término recoge enfoques marxistas de la
Teoría Crítica y el neomarxismo; también recoge enfoques estructuralistas de la Arqueología
Estructural, Cognitiva y Contextuales (Arqueología Simbólica); por último recoge también
enfoques de la Arqueología interpretativa.

Todos estos enfoques tienen en común su oposición a los fundamentos epistemológicos,


teóricos y metodológicos de la Nueva Arqueología (Hernando Gonzalo 1992:23), de la cual
hablaré posteriormente.

Los defensores de la Teoría Crítica (TC), adoptan una visión marxista en el análisis histórico
y aceptan que el conocimiento humano está históricamente determinado. Sirven de base para
este pensamiento los escritos de Habermas, Marcuse o Adorno (Hernando Gonzalo 1992:24).

El Neo-marxismo surge de los escritos de Marx, según los cuales, la posibilidad de cambio
creativo es esencial para hacer posible la revolución. Considera que el comportamiento
humano sólo se comprende dentro de contextos culturales específicos, en los que la
motivación humana deriva de la estructuración (clasismo) social de la realidad.
Representantes de esta corriente de pensamiento han sido arqueólogos como Tilley, Shennan,
Miller y Shanks. Igual que en el resto de los enfoques marxistas, la contradicción y el
conflicto son esenciales para comprender un proceso cultural, pero para los neomarxistas, la
ideología juega un papel primordial como motor de tales contradicciones: la ideología es un
factor activo en las relaciones sociales, en la realidad, colocándose en el extremo opuesto del
resto de enfoques marxistas (materialismo vulgar). La ideología y su importancia en la
configuración cultural, constituye para ellos un instrumento de poder en manos de la clase
dominante del momento, por ello una de sus críticas es precisamente la inmutabilidad de la
naturaleza humana que de ello se deriva (Hernando Gonzalo 1992: 25).

La Arqueología Contextual liderada por I. Hodder, fue una aplicación muy importante en
Arqueología de tradición estructuralista, cuyo máximo exponente es el antropólogo Levi-
Strauss, el cual defiende que la mente humana está regulada a nivel inconsciente, por una
serie de estructuras que se manifiestan en las actividades conscientes, las cuales quedan
reflejadas en las manifestaciones materiales. Los objetos arqueológicos se convierte en
símbolos de las estructuras inconscientes: en significantes de un significado que se trata de
conocer. Pueden diferenciarse actualmente tres enfoques derivados de esta base: arqueología
estructural (Leroi-Gourhan), la cognitiva y la simbólica. Los tres coinciden en considerar la
cultura material como un “texto”, un conjunto de símbolos codificados con las leyes que
organizaban la vida de las gentes que la crearon; pero la estructural y la simbólica se interesan
mucho más por la interacción entre los grupos sociales y los sistemas simbólicos que la
cognitiva (Hernando Gonzalo 1992: 26).

Si los restos materiales a través del simbolismo, pueden utilizarse con fines opuestos dentro
de un grupo social, será imposible conocer su significado, y por ende esa organización social,
a no ser que se examinen todos los aspectos del registro arqueológico: es necesario conocer

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 2


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

todos los componentes de cada cultura arqueológica, todo el contexto, para entender el
significado de una parte. Niegan la validez de los trabajos en los que sólo se analizan
aspectos concretos de una cultura. Sólo se puede comprender una cultura adoptando su punto
de vista interno, lo que es imposible, por lo que no existe explicación en Arqueología, sólo
interpretación. Siguiendo este razonamiento, los datos arqueológicos son interpretaciones
basadas en nociones actuales que influyen en la teoría que debe ser probada, por lo que no hay
posibilidades de verificación científica. De ello se deduce que en Arqueología no se pueden
aplicar los procedimientos de la Ciencia. Los críticos de esta corriente denuncian su falta de
cuerpo teórico (Hernando Gonzalo 1992: 27).

La arqueología interpretativa pretende superar las carencias de la arqueología procesual y


de la postprocesual, al respecto de la falta de sensibilidad para la interpretación de los
significados históricos internos y específicos y la despreocupación por el contexto social e
ideológico del arqueólogo. Ahora I. Hodder propone un nuevo modelo que incorpore los
logros de otras tendencias, basado en tres premisas fundamentales:

1. Reconocimiento de la existencia de una cierta objetividad del pasado.


2. Necesidad de comprender al Otro en sus propios términos, para lo que parece
imprescindible un componente interpretativo.
3. Debe incorporarse la auto-crítica y el diálogo con otras posiciones (Hernando Gonzalo
1992: 29).

Para Johnson (2000: 132), el pensamiento postprocesual se caracteriza por ocho afirmaciones
clave, con las cuales no estarán de acuerdo todos los postprocesualistas, lo que refleja y
explica la crítica de Barceló, que son:

1. Rechazan el punto de vista positivista sobre la ciencia y la separación entre teoría y


datos. Rechazan que la Ciencia sea la única forma de conocimiento y sugieren que no
hay manera de confrontar la teoría con los datos.
2. Para ellos, todos los arqueólogos al interpretar objetos, lo hacen asignado un
significado a tales objetos, suponiendo que esos significados coinciden con los que
daban los pueblos antiguos a tales objetos.
3. Rechazan la oposición entre material e ideal.
4. Sugieren que hay que indagar en los pensamientos y valores del pasado.
5. Los postprocesualistas no están conformes con la manera en que se aborda lo
individual, los cuales quedan reducidos a meras comparsas dentro de un sistema
adaptativo o de unas estructuras profundas, abocados a seguir las reglas sociales
ciegamente, sin posibilidad de cambio. Hay que intentar captar las sociedades pasadas
observándolas de abajo hacia arriba, no de arriba abajo. Los partidarios de la teoría de
sistemas buscan las élites que dirigen estos sistemas, los postprocesualistas indagan en
los conflictos de los grupos sociales, involucrando al género o a las clases por
ejemplo.
6. Los postprocesualistas piensan que la cultura material se puede leer como un texto.

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 3


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

7. Lo importante para ellos es el contexto.


8. Los significados que se deducen, se sitúan para ellos siempre en el presente político,
por lo que conllevan resonancias políticas. La interpretación del pasado siempre es
política.

Los postprocesualistas rechazan el valor que se da a la contrastación, por lo que son tildados
de relativistas, revindican que en la práctica ningún arqueólogo contrasta de forma rigurosa la
teoría con los datos brutos. Sus máximos representantes fueron Ian Hodder, Christopher
Tilley, Michael Shanks y Robert W. Preucel.

La Nueva Arqueología se aplica a una escuela de pensamiento que barrió a lo largo y ancho
de la arqueología anglo-americana en los 70, que reunió a un grupo diverso de arqueólogos
con diferentes ideas y enfoques, a los cuales les unía una insatisfacción con la situación de la
arqueología, y pensaban que las cosas tenían que cambiar: “debemos ser más científicos y
más antropológicos” era su lema. Algunos temas clave se fueron repitiendo en los textos de
sus proponentes, que Johnson (2000: Aspectos clave de la Nueva Arqueología) resume en
siete:

 Se puso énfasis en la evolución cultural.


 La cultura se interpretaba como un sistema, no como un saco lleno de normas
adquiridas.
 Si la cultura era adaptativa, lo era en relación a un entorno externo.
 Se insiste en el enfoque científico.
 Se insiste en la noción del proceso cultural (preguntarse por el porqué de las cosas en
vez de sólo el cuándo, indagar en los procesos fundamentales en vez de quedarse en el
“ruido de fuera y observar el cambio a largo plazo).
 Tendencia a ser más explícitos con respecto a las influencias recibidas y a los propios
prejuicios.
 Comprender la idea de variabilidad, la intelección del material arqueológico en
términos estadísticos.

Cuando la Nueva Arqueología desarrolló un corpus teórico propio, pasó a denominarse


Procesualismo, debido al énfasis puesto en los procesos culturales (punto 5 anterior). Éstos
últimos buscaban las generalizaciones y tendían a usar modelos sistémicos o funcionales. Las
principales críticas del Procesualismo, es que al referirse a un sistema por su función, se
oculta su origen; las relaciones entre sistemas y funciones pueden no funcionar en cuestiones
específicas; el funcionalismo tiene implicaciones políticas muy cuestionables; la teoría de
sistemas comprende a las sociedades desde fuera, no desde dentro, y sobre todo, que el
funcionalismo no explica los cambios que se producen en los sistemas. Sus máximos
representantes fueron Lewis Binford, Kent Flannery, David L. Clarke, Colin Renfrew y Clive
Gamble.

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 4


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

Volviendo al artículo de Barceló, continúa explicando que lo que se hace en Arqueología es


poner en duda lo que creemos, no buscar la verdad como indican Manuel Domínguez-Rodrigo
y Almudena Hernando, y que las formas de superar las dudas o los errores, es a base de
nuevas creencias que vuelven a ser sometidas a la investigación para encontrar sus nuevos
errores, este proceso tiene una naturaleza estadística, probabilística, de variabilidad como
indica la Nueva Arqueología en su punto siete. Por lo que Arqueología y Matemáticas
deberían ir unidas, tal como afirmó hace cuarenta años David Clarke. Justo lo que no se hace
en los planes de estudio actuales de Arqueología, en donde se registra el mayor número de
analfabetos matemáticos (Barceló 2009:175). Por ello, se podría decir que Barceló es
Procesualista.

Posteriormente realiza una crítica sobre la apuesta de Óscar Moro (Departamento de


Arqueología de la Universidad de Cantabria) y su arqueología moderna postmoderna, cuyo
nombre tan rimbombante simplifica el autor como algo ya inventado: la historia.

Lo postmoderno fue definido por François Lyotard como la incredulidad hacia las
metanarrativas, que caracteriza al conocimiento de las sociedades capitalistas occidentales.
Una metanarrativa es un discurso planteado como una reivindicación de la verdad absoluta:
ejemplo, la creencia en el progreso científico o la creencia de que las sociedades evolucionan
de una fase cultural a otra o la creencia de un sistema moral absoluto derivado de la religión,
la nación o la etnia, etc.

Para los postmodernistas todas estas ideas se remontan a la Ilustración del siglo XVIII, los
cuales pensaban que usando la Razón se accedía a cualquier problema humano de forma
racional y objetiva.

Algunos postmodernistas han desmontado la barrera que existe entre la historia y la literatura,
ya que todos los documentos históricos son textos literarios y todos los historiadores escriben
narrativas, y toda literatura se enmarca en un contexto histórico, así, puede no existir una
distinción entre historia y ficción. Arguyen que no se puede confiar en los textos.

Piensan los postmodernistas que el pensamiento occidental ha entrado en lo postmoderno a


finales del siglo XX y que ya no quedan historias verdaderas ni certezas en las que se pueda
confiar. No centran sus críticas en un sistema exclusivamente, sino que critican la confianza
en un único método científico (Johnson 2000: Arqueología en un mundo postmoderno).

El postmodernista comparte con el postprocesualista ideas como la pérdida de confianza en la


Ciencia, la crítica al esencialismo, el énfasis en la diversidad de lecturas y la dificultad de fijar
el significado. Las implicaciones que este pensamiento tiene en la arqueología se resumen en
los siguientes interrogantes: ¿se puede hablar de un “método arqueológico” específico distinto
del de otras disciplinas? ¿Existe en arqueología algo parecido a un método unificado? Si ya
no hay una única Verdad esperando a ser descubierta, no se entiende cómo puede haber una
forma correcta y otra incorrecta de hacer arqueología. El postmodernismo sugiere que hay
que atender a otras formas de conocimiento fuera de la esfera de la arqueología o la ciencia.

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 5


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

No se puede escribir sobre el pasado como pensamos que debió ocurrir, independientemente
del presente, debemos atender al contexto social, político y cultural de la arqueología
(Johnson 2000: Fantástico; pero ¿qué tiene que ver todo esto con la arqueología?).

Apunta Barceló en su artículo que la teoría de probabilidades permite la aplicación de un


método científico que pueda validar las interpretaciones realizadas y que se pueden cometer
errores interpretativos sin perder el carácter científico por ello. Critica también que no se
hayan probado los modelos referenciales de la teoría arqueológica y se sigan utilizando. Para
ello hay que transformar las creencias en hipótesis estadísticas: cuantificar las evidencias
disponibles nos permite descubrir la probabilidad de cometer un error. Se suma a Manuel
Domínguez en la denuncia del engaño postmoderno, lo que no significa que todo el
postmodernismo sea un error científico, su crítica va dirigida a todos aquellos que renuncian
al método, a la validación, a los que creen que no puede aplicarse un “método científico” a los
seres humanos para obtener información útil (Barceló 2009:176).

Explica Barceló en su artículo que defiende un estudio de la realidad humana en términos de


hechos, conductas, producciones sin dejar de lado las creencias o valores. Si la arqueología es
una ciencia tiene que abandonar las interpretaciones y construirse en términos de problemas a
resolver:

 Qué tipo de acción social se puede poner en relación con un conjunto material.
 Por qué esa acción social cambia o por el contrario permanece estable.

Si no se sabe qué acciones se produjeron en un lugar, difícilmente se podrá averiguar por qué
cambiaron: primero hay que saber qué pasó para resolver el por qué pasó. Cita a continuación
que defender una arqueología científica no significa ser Procesualista, sino que se siente más
vinculado al materialismo histórico (Barceló 2009: 177).

El materialismo histórico es un término creado por Gueorgui Plejánov, que alude al marco
teórico de Karl Marx para comprender la historia de la humanidad. Aunque se halla ligado al
marxismo, historiadores, sociólogos e intelectuales, han tomado elementos de él para elaborar
sistemas y enfoques materialistas en el estudio de la historia (Según Wikipedia 2016
Materialismo histórico)

Continúa explicando Barceló, que el estudio de la arqueología tendrían que ser todas las
consecuencias materiales de la acción humana, es decir, del trabajo de mujeres y hombres,
visión efectivamente, muy de acuerdo con el materialismo histórico. En todos los productos
materiales quedan reflejados los procesos del trabajo humano, que a través de la ingeniería
inversa, se pretende averiguar la causa partiendo de la observación del efecto (Barceló 2009:
177).

Para Barceló, el primer problema es resolver hasta qué punto lo que se observa es el resultado
de lo que tuvo lugar o de lo que se produjo después de la acción social que lo originó.
Después se puede plantear el problema arqueológico del qué pasó. Matiza que no todas las

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 6


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

acciones sociales tienen una evidencia material observable, pero que al contrario de lo que
piensa Almudena Hernando al respecto, cree que las motivaciones y la intencionalidad de la
acción se podrían analizar siempre y cuando se disponga de suficientes observaciones de la
repetición de dicha acción a través del tiempo: algo que no es observable en un aspecto,
tendrá otro que sí es observable. No podremos ver en el registro arqueológico el poder
coercitivo de una parte de la población, pero sí que podrán medirse algunos de sus efectos,
así, la Ciencia permite predecir lo no-observable a partir de lo observable y esa predicción
tiene una naturaleza probabilística. Para Barceló la arqueología es una Ciencia experimental
que estudia en el laboratorio o a través de simulaciones computacionales, al igual que en el
registro documental etnográfico e histórico, las múltiples maneras que una acción produce un
efecto (Barceló 2009: 178).

Barceló se centra en el estudio de las acciones colectivas, no en el estudio de las acciones


individuales como hace Almudena Hernando, que a su entender son mucho más
determinantes para saber cómo esa acción se transformó a través del tiempo hasta nosotros,
fin último de la Arqueología: estudiar el pasado para construir el presente. Para él, el
propósito de la historia y la arqueología tendría que ser el estudio de la continuidad que existe
entre el pasado y el presente: cómo las sociedades pasadas se convirtieron en nuestra sociedad
(Barceló 2009: 179)

Acaba el artículo declarándose también determinista y recalca su definición de Arqueología:


disciplina que estudia la variabilidad estadística de los efectos materiales de la acción social.
Estudia las trayectorias históricas de la acción colectiva y deja de lado la acción individual
(Barceló 2009:180).

El determinismo es una doctrina filosófica que dice que todos los acontecimientos físicos
(incluido el pensamiento), está causalmente determinado por una irrompible cadena de causa-
efecto. Para el determinismo fuerte no existe el azar y el futuro es predecible a partir del
presente. Para el determinismo débil, la probabilidad determina los hechos presentes y admite
los sucesos aleatorios e impredecibles. Éste último determinismo es por el que se postula
Barceló (Según Wikipedia 2016 Determinismo).

CONCLUSIÓN

Según el artículo de Barceló, podríamos decir que su pensamiento tiene enfoques de:

 Materialismo histórico: Ya que según su visión la arqueología tendría que atender las
consecuencias materiales de la acción humana, (entiende esta acción como la realizada
por un colectivo, no por un individuo), ya que en todos los productos materiales
quedan reflejados los procesos del trabajo humano. Debido a este materialismo
histórico podría incluirse también como postprocesualista pero las críticas que vierte a
Almudena y a Manuel me hace pensar que ni los integrantes de una misma corriente
están de acuerdo con todos sus postulados, como para intentar yo clasificarlo…
Dentro de esta corriente de pensamiento lo declararía también como:

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 7


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

o Neomarxista: porque para él la ideología es un factor activo en las relaciones


sociales, en la realidad. La ideología y su importancia en la configuración
cultural, constituye para él un instrumento de poder en manos de la clase
dominante del momento, por ello una de las críticas es precisamente la
inmutabilidad de la naturaleza humana que de ello se deriva.
 Determinismo ya que para él “todo aquello que existe está determinado por sus
causas” y dentro de esta corriente le atribuiría un:
o Determinismo débil, porque para él la probabilidad determina los hechos
presentes.
 Podría decirse que también es procesualista, por su empeño en practicar un método
científico y su tendencia a generalizar. Para él Arqueología y Matemáticas deberían ir
unidas, tal como afirmó Clarke.

Esta misma conclusión me sirve para ponerle una pega a su pensamiento: según el artículo,
Barceló critica que existan todas estas corrientes y más, sin que ninguna de ellas sea
contrastada y se haya comprobado su validez, pero a él toda esta variedad le ha servido para
crearse su corpus teórico, por lo que para algo vale toda esta diversidad de ideologías y
pensamientos. Otra pega que le pongo deriva de su condición de neomarxista, y es que no
creo que a lo largo de TODA la historia de la humanidad, la sociedad haya estado dividida en
clases, en donde una dominaba a todas las demás, y él pone mucho énfasis en este punto, lo
que le hace buscar en todos los sitios y épocas este clasismo. Pienso que como neomarxista
tendría que incluir en su corpus la arqueología feminista, ya que es clasista también, y no lo
hace, o por lo menos yo no lo veo.

Comparto con él su pensamiento de centrarse en las acciones colectivas en vez de las


individuales (al revés de lo que se ha estado haciendo sobre todo en las épocas históricas), y
que son estas acciones las que determinan los rasgos de una determinada cultura o trayectoria
histórica. No comparto en absoluto la definición que da de la Arqueología, que a pesar de ser
este artículo un alegato a la arqueología científica, la deja relegada como “disciplina”.

Lo que me queda más claro es su rechazo a las posiciones del postmodernismo y por ende las
de Óscar, las cuales comparto. No creo que la Ciencia tenga que cuestionarse y sí creo que
hay que usar un método científico, y que éste se puede utilizar en los seres humanos (no creo
que seamos criaturas especiales ni considero que los humanos seamos el final de la
evolución). También creo en alguna Verdad absoluta, como que el método científico es para
mí la mejor manera de llegar a la Verdad o a la detección de errores, como diría Barceló. Y si
me permites una chanza, también creo que nuestra especie exterminó a los Neandertales.

Tengo dudas al respecto de su posición sobre lo que se busca con la Ciencia: si la verdad o la
detección de errores. Entiendo que como buen estadista se preocupe de la detección de esos
errores, pero también creo que con la Ciencia se pueden averiguar verdades.

También comparto con Barceló su concepción de la Arqueología como una especie de


ingeniería inversa, en donde a través de los efectos podemos discernir las causas. Al respecto

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 8


Trabajo Final. Supuesto 1. Comentario de texto/ensayo sobre el artículo de Juan A. Barceló titulado:
"En defensa de una arqueología explícitamente científica"

del uso de la estadística o probabilidad creo que puede ser útil para saber qué acciones son
más probables, pero en mi opinión no dejaría de ser nunca una probabilidad, o sea, un tal
vez…

En definitiva, con este artículo tengo claro con lo que NO estoy de acuerdo, pero se me hace
muy difícil elegir entre el resto, creo que la corriente con la que comparto más puntos es con
los postprocesualistas, pero tendré que crear una para mí, como todos ¿no? (Es una broma).

REFERENCIAS/BIBLIOGRAFÍA

Barceló, Juan A. “En defensa de una arqueología explícitamente científica” Complutum,


2009 Vol. 20 (1): 175-196.

Hernando Gonzalo, Almudena “Enfoques teóricos en Arqueología” SPAL: Revista de


prehistoria y arqueología de la Universidad de Sevilla, Nº 1, 1992, págs. 11-36

Johnson, Matthew: “Teoría arqueológica. Una introducción”. Editorial Ariel, 2000,


Barcelona.

Wikipedia (2016) Determinismo. URL: https://es.wikipedia.org/wiki/Determinismo


[Consulta: 30/12/2016]

Wikipedia (2016): Materialismo histórico. URL:


https://es.wikipedia.org/wiki/Materialismo_hist%C3%B3rico [Consulta: 30/12/2016]

Silvia Pérez Vázquez magdaleniense45@gmail.com pg. 9

También podría gustarte