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EJEMPLARIDAD TRANSCENDENTE
DE MARIA
SOBRE LA 1BLESIA
POR LA
EDITORIAL COCULSA
MADRID-1967
148
DR. JUAN ESQUERDA El titulo mariano de «tipo de la
lglesia» entraña, pues, una
relación intima a la maternidad mariana y a su actuación en
volver sobre el mismo tema. Pero creo
parezca innecesario 1a Iglesia. Todo ello pertenece a la historia salvifica que se con-
en perspectivas apenas toca-
el texto conciliar es muy rico tinúa a través de la glesia, puesto que el Misterio de Cristo
que
das en trabajos anteriores. Así, por ejemplo, se le da al título
se prolonga en ella. u a l es, pues, el significado salvifico del
maternidad. Lo cual consta
mariano una relación intima con la titulomariano tipo de la Iglesia» ?
el mismo texto aprobado y por la relación del 3 de julio En un estudio anterior relacioné la maternidad de María
por
de 1964. El texto conciliar habla de que la Iglesia imita a Maria con la sacramentalidad de la Iglesia (5). En él estudié la cer
de Madre y Virgen, «la precedió». Y
que, en su doble titulo canía y epifanía del Misterio de Cristo que se prolonga en la
en la relación antes de aprobar el texto se dice: «est igitur ipsa Iglesia a través de Signos sacramentales. El Misterio de Cristo,
typus Ecclesiae duplici
titulo (es decir, por
connexo» Madre ser
que se prolonga en la lglesia, tiene matiz mariano que deriva
y por ser Virgen) (4). del «factum ex muliere». En el estudio a que hago alusión,
Se trata, pues, de estudiar el titulo mariano de «tipo de la planteé casi únicamente la legitimidad del problema, apuntando
Iglesia en todo su significado salvifico. Porque estamos en his- posibles lineas de solución. Entonces me quedé a las puertas
toria de salvación, con toda la complejidad que ello comporta. de una presencialidad y eficacia del misterio mariano, que ahora
Ahora bien, si el título «tipo de la Iglesia» dice relación íntima voy a abordar partiendo del titulo «tipo de la Iglesia».
a la maternidad de María y todo ello
se refiere a la historia de
El presente estudio es un paso más en la linea de mis tra-
salvación, puede ser que en el mismo título encontremos una bajos anteriores. No creo que haya llegado a una solución per-
presencialidad de María en la Iglesia o, lo que es lo mismo, fecta. Pero modestamente intento dar unos pasos más en el
una presencialidad y eficacia de María en la historia
de salva- conocimiento del Misterio de Cristo que se nos ha manifestado
ción que se realiza ahora por medio de la Iglesia. Esta actualidad y comunicado a través de signos eclesiales y circunstancia ma-
de la acción de María no es una quimera, puesto que se repite riana. Ambos aspectos enraizan en el misterio de la
en los textos aprobados del Vaticano II. Sin salirnos del número ción: el Verbo encarnado en el seno de María y prolongado en
Encarna-
citado y sin anticipar ideas, ciñámonos a una sola frase conci- su Cuerpo Místico.
liar. Explicando
el titulo mariano de «tipo de la se
Iglesia», María es prototipo de la Iglesia en cuanto que es modelo
dice: Dio a luz al Hijo, a quien Dios constituyó como primo de fidelidad a la Palabra y en cuanto que es modelo de mater
génito entre muchos hermanos; a saber, los fieles, a cuya gene nidad. Pero es también prototipo de la Iglesia, porque puede
ración y educación coopera con materno amor.» El subrayado indica de Maria,
gracias necesarias para imitarla. Esta eficacia
alcanzar las
este aspecto de actualidad o presencialidad de la acción mater- el titulo
respecto las gracias, tendrá un fundamento. De ahi que
a
nal de María, tipo de la Iglesia. mariano tipo de la Iglesia», tiene un significado muy protundo.
Marianos
«Estudios
la sacramentalidad de la Iglesia,
as maternidad de Maria y
r'Eglise en María, VII, 362-419. El tema ha pasado a divulgación gracias a algunas (Marioloi en torno La
(Mariología DA,, al Concilio), 26, 1909,233-274.
como: THuRIAN M., Maria, Mare del Senyor.figura de l Esglesia (Barcelona, 1965): SEMMELRO1Si:
Marie, archétype de 'Eglise, (París, 1965). También: LLAMERA M., La Santisima Virgen y la Igles
en
Comentarios a la Const. sobre la Iglesia, BAC., Madrid, 1966, 982 1048.
(4) Const. Iglesia, ibid.; Schema Constitutionis de Ecclesia, 1964, p. 215.
SIGNIFICADO SALVIFICo DE MARIA, TIPO DE LA 16LESIA 15
DR. JUAN ESQUERDA
150 (Gal.,se conjuga con el incarnatus est de
4,4),
ex
muliere» Spi-
Misterio de Cristo, prolongado Maria Virgine». Y es éste «el misterio divino de
Maria pertenece al la itu Sancto ex
en
como Madre y
como tupo de la Iglesia
Iglesia salvación que
se nos revela y se prolonga en la
Iglesia» (6).
Iglesia. Y pertenece
salvifico de esta pertenencia? Es un acontecimiento, no una idea o una abstracción. No
es el significado
Cuál
conciliares encontramos la fe de la Iglesia un adorno mas o menos acertado
la exposición en
En los textos es tampoco
este misterio. La teologia que
quiera elaborar cien- Si Maria es po y modelo destacadísimo
de la
respecto a de un tema.
acerca de este hecho ecla
tificamente toda una rica reflexión si «la 1glesia catolica la
Iglesia», y honra, enseñada por el Espi-
antes de elaborar
cientificamente el dato, lo h riru Santo, con filial afecto de piedad como a Madre amanti-
sial, primero,
Si la especulación humana no puede
de constatar y respetar. sima, no es por otro motivo queunida
por el hecho de que Maria
síntesis cientihca, con ello no podrá negar es Madre de Dios Redento.., a El con vinculo indiso-
luego realizar una
Ahora bien, el hecho es que la Iglesia miembros de Cristo,
la existencia del hecho. luble.., madre de los porque cooperó con
se reconoce a sí misma como dependiendo de Maria, que es su su amor a que los fieles, miembros de Cristo Cabeza, nacieran
Y en este reconocimiento hay
tipo (por ser Madre y Virgen). en la Iglesia» (7).
una dependencia actual
en el orden de la gracia salvifica. El gran acontecimiento salvífico de la muerte y glorificación
el hecho eclesial: los
Primeramente, pues, constataremos de Cristo se resume en la expresión «Misterio de Cristo que se
textos conciliares, que parten
de la Revelación. Luego estu- prolonga en la Iglesia». Pues bien, no es otra la perspectiva que
diaremos con alguna detención el mismo dato revelado en su se propone el Vaticano, al estudiar da misión de la Bienaven-
fuente. Sólo después intentaremos realizar una síntesis que for- turada Virgen María en el misterio del Verbo Encarnado y del
zosamente habrá de ser más pobre que
el mismo hecho cons-
tatado. Pero ahí queda la tarea abierta para una investigación
Cuerpo Mistico». Esta perspectiva que enfoca todo el misterio
mariano hace posible que los privilegios excelsos, correspon-
posterior sobre los datos revelados o sobre el hecho eclesial, dientes a quien es Madre de Dios Redentor, la coloquen en
para elaborar una síntesis mejor. eel lugar más alto en la Iglesia después de Cristo, y el más cer-
cano a nosotros» (8).
No es posible hablar de «cercanía» de los privilegios de la
I. LA FIGURA BIBLICA DE MARIA, COMO
Santisima Virgen si no se la considera en la perspectiva de sal-
HECHO SALVIFIC0
vación. El hecho salvifico de Cristo Redentor llega a nuestra
circunstancia, precisamente porque Cristo se ha acercado hasta
. Los TEXTOS DEL VATICANO II el hombre como hermano y responsable. Cristo es el hombre
más cercano a los hombres. Sus cualidades divinas no le alejan,
Una de las características del texto mariano del Vaticano IM
Sino que hacen posible nuestra salvación. Quien esté más
cerca
más de sus cualidades y está más cerea acnrenden del «gratia plena, es decir, de
de Cristo, participa de una gracia corres-
caso de María, la Madre de Dios Re ondiente quien habia de ser Madre de Dios Redentor (10).
los hombres. Tal es el
a
a la obra
Elconsentimiento de María en la Encarnación tiene un OCumentos anteriores al texto definitivo se desprende la linea
marcado sentido salvifico central de historia de salvación, en la que es posible estudiar
y maternal, como se dice
en la relación del
3 de julio y del 16 de
expresameente Maria como formando parte del hecho salvífico. No hemos
septiembre de 10 agotado todavía los textos, como podrá verse en los apartados
(17) Schema, . 213t. Kelatio siuper caput VIII schematis de Eeclesia, 1964, p. 6.
(18) Ibid., 214. 19 Ibid., 211.
(20) Relatio., 6.
(21) Ibíd.,
(22) 18
relationes, 1964, P.
23 semendatus
Ibid., 61. capitis Vill schematis constitutionis de Eclesia et
158 DR. JUAN ESQUERDA SIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA IGLESlA 159
siguientes de este trabajo. De momento baste añadir a los ya ser Ella la que ha puesto en contacto la salud mesiánica con
citados estos otros dos: María «in historiam salutis intime in- la humanidad. No es de extrañar que todo el cántico rezume
gressa» (n.° 65), «quae mysteriis Christi interfuit» (n.° 66). ideas mesiánicas, como diremos a continuación (24).
Maria da gracias por la obra de salvación (v. 46-48) reali-
2. EN TORNO AL NUEVO TESTAMENTO zada en Ella. Obra de salvación que deriva de la omnipotencia
y misericordia salvifica de Dios (v. 49-53). Y, de esta manera,
Acabamos de ver el texto conciliar, remarcando la figura de se inaugura el Reino mesiánico esperado y anunciado
María dentro del hecho salvifico. Las afirmaciones del Concilio (v. 54-55) (25). Maria sigue una norma constante en la historia
se apoyan principalmente en los textos bíblicos. Ahora,
pues, de las figuras bíblicas: pasar de su caso a toda la historia salvi-
nos detendremos en estos mismos textos para hacer resaltar la fica. Pero, en esta ocasión, su caso ya no es tan particular, sino
figura biblica de María como hecho salvífico. Pero, de momen-
que es el mismo acontecimiento salvífico de la Encarnación, de
to, nos ceñiremos al Nuevo Testamento; es decir, nos interesa
mirada universal. Verdaderamente se puede decir que el Mag-
más estudiar la figura histórica de María, desde la
que es nificat es la maduración literaria de conversación que sostuvo
posible luego partir para analizar las figuras biblicas que la con el ángel. La reflexión de María sobre el gran acontecimiento
prepararon.
y sobre su respuesta generosa (esperada por Dios) le han es-
El Magnificat mariano nos descubre la
su existencia histórica
figura de María en ponjado más en toda la historia salvifica y hasta en la formula-
y aún en su figuración veterotestame CiÓn de la misma, según las ideas
taria. Vamos a partir de él y expresiones de los salmos (26).
para entender mucho mejor el sen- Magnificat es una síntesis de la historia de la salvación.
tido salvifico de las demás escenas
marianas. En cuanto a la postura personal de María es una ampliación
Parece como si toda la
expansión mariana se centrara en el
fecit mihi
magna». Las maravillas de Dios, obradas a traves dfe ofiat»
su en la Anunciación. Y si por los otros textos del
numerosos trazos mesianicos de historia de salvación amos Maria forma parte del signo salvifico o
epifanía del Señor
el «llena d remi nacimiento y en la adoración de los
niscencias biblicas. Tanto el «alégrate», como en el Magos y pastores
como el Señor es contigo»
son frases repetidas
en el
gracia Lc., 2. 1-20.22-38). En la presentación queda señalada como
Testamento cuando se habla del gozo y salud mesiánica Antiguo iada la lucha entre la uz y las tinieblas,
a
que desembo-
cará en la cruz. Y en la misma pérdid del Niño en el
la acción especial de Dios. La sombra del Espíritu, aue u templo
bre se remarca la trascendencia
del plan salvífico de Cristo
a María en la Encarnación, recuerda la nube que cubria el t (Lc., 2,
bernáculo (Ex., 40,35) y el Espíritu que crea y vivifica 41-52).
(Gen., 1. 21 El mismo autor del tercer evangelio es también autor de
Y este es el mesiánico que se propone a María en orden
plan los Hechos. Si a María se dijo que el Espíritu Santo la cubri-
a que dé su «fíab. Maria responde con disponibilidad
total a ria con su sombra, a los Apóstoles se dijo que recibirían el Espi-
los planes salvificos de Dios. Si toda la historia de salyación
se va posando en diversos si» de figuras biblicas
ritu Santo (Act., 1, 8). En el momento de ser otorgado el Espí-
(Abraham ritu a los Apóstoles, Maria esta presente y operante con suu
Moisés, etc.), el «si» de María comienza una nueva y definitiva oración (Act., 1, 14).
etapa y resume y personiica toda la antigua preparatoria. De ahi
la tan sabida frase de S. Agustín: «Virgo Christum non carnali- No es menos rica la mariología de S. Juan, el evangelista
de la Encarnación. Los exegetas recalcan el paralelismo entre
ter concupiscendo, sed spiritualiter credendo
concepit (28). la mujer de Caná, del Calvario, del Apocalipsis en parangón
La visitación (Lc., 1, 39-56) también descubre trazos
de con la mujer del protoevangelio. No podemos resumir aquí las
historia de salvación en el actuar de María. El gozo de Isabel
ricas perspectivas que van encontrando los autores en la escena
y del Bautista son por infusión del Espíritu Santo y son
de inauguración de los tiempos mesiánicos
signo de Caná. El plano cristológico (suscitar la fe en los
Apóstoles),
(29). María tiene su el plano eclesiológico-sacramental y el plano mariano se entre-
parte en la comunicación de este gozo. Y si algunos exegetas
cruzan en la perspectiva de historia salvífica, en la que no se
quieren ver en la escena un paralelo de la subida del arca de la
Alianza (II Sam., 6, 1-11), queda el sentido salvifico todavía más puede negar la importancia de la intervención de María
relevante. En toda la escena campea la fe de María de la (To., 2, 1-12).
que se Son muchos y de mucha hondura los trabajos que se han
hace depender (es continuación del
Del Magnificat hemos hablado
fíat»),
la historia salvifica
realizado en torno a la presencia de María en el Calvario. En
anteriormente. Todo é gira
en torno a la historia de
salvación, y María encarna las esperan estos últimos tiempos se ha revalorizado el sentido literal de
la maternidad espiritual de María y su colaboración en la his-
zas mesiánicas del Pueblo (30).
toria de salvación. El ambiente de la escena del Calvario (lo., 19,
(28) In. Ps., 67; PL., 36, 826.
29)Cfr.
2, 10. 25.
Is., 32, 15; 44, Ez.,
3; 36, 26 s; Jocl, 3, 1; Lucas recalca cste gozo: 1, 25-27) es plenamente mesiánico y expresa la misión salvinca
14.28.4
(30) Cfr. FEULLET, A., La Virerge Marie
E autor scnala los siguientes
paralelos: 1, 46, b. dans
le
Nouveau Testanent, emA. 4R (Gen. 30, ae risto. Sería un contrasentido que únicamente esta escena
15ant,6,9; Mal., 3, 11);1,54 (Is. 41, 8; Ps. (Habacuc, 3, 18);1,47 Deut. 26, )
98, 3);1, 55 (Abrahan; Mich., 7, w; 177: Tuera una excepción en todo el Evangelio de Juan. Cierto que
d la persona de Maria puede enriquecerse con una figuración de
SIGNIFICADO SALVIFIco DE MARIA, TIPO DE LA IGLESIA 165
DR. JUAN ESQUERDA
164
y eclesiales. De ahí que Maria, precisamente por el don
la Iglesia, pero esta figuración hace resaltar más el aspecto sal-
ula che ahí..., he:
La misma de su maternidad..., se une a su Hijo Redentor., y también
vifico de la
escena.
queda unida íntimamente a la Iglesi Por eso se llama «tipo
2, 25; ler., 24, 7; 31, 33;Ez.,
förmula de Alianza (Os., 36, 28; de la Iglesia». Si a la Iglesia se la llama madre y virgen, «María
Cristo Salvador da en el Calvario a e
II Sam., 7, 14). precedi a la Iglesia, mostrando en forma eminente y singular
pulos lo mejor que
Madre, su
iene: su Espíritu, su Madre. Jesia, de la virgen y de la madre» (32).
sus
sacramentos. Tal es la linea joánica. el modelo
María, como tipo de la Iglesia, no puede separarse de su
La mujer del Apocalipsis
de Juan tiene relación con la minia maternidad sobre la misma Iglesia. Maria, es tipo de la Iglesia
del Calvario, de Caná, de Gen., 3, 15. La victoria de Cristo
luz al Hijo, a quien Dios constituyó como
Salvador está siempre relacionada con esta mujer peculiar madre porque «dio a
que, primogénito entre muchos hermanos, es decir, los fieles, a cuya
en los momentos cumbres, se concreta en María, al menos
como personificando a la Iglesia. generación y educación coopera con materno amoro (33). Por
es ejemplar de la Iglesia Madre, porque ha dado
De todo el resumen neotestamentario puede concluirse que tanto, María
Maria forma parte integrante del acontecimiento salvífco. Dios aluz a quienes formamos la Iglesia. Y la maternidad de Maria
continúa paralelamente a la maternidad ministerial de la Iglesia.
la ha escogido para ser no sólo modelo, sino también instrumento
La Iglesia aprende de María a ser Madre. Maria fue Madre
de su salvación. El hecho queda claro. La explicación tendrá
que centrarlo todo en Cristo y notar que no se trata de limi- por su fidelidad a la Palabra de Dios. La Iglesia es madre
porque por la predicación de la Palabra y por hacer presente
tación de Cristo, sino una mayor epifanía y cercanía a nuestra
lo que anuncia la Palabra (sacramentos), «engendra para la vida
manera de ser.
nueva e inmortal a los hijos concebidos por el Espiritu Santo
y nacidos de Dios. La fidelidad de Maria a la Palabra de Dios
la hizo instrumento de gracia (por esto es nuestra Madre); la
II. MARIA TIPO DE LA IGLESIA EN LA HISTORIA
fidelidad de la Iglesia a la misma Palabra la hace instrumento
DE SALVACION
de gracia porque pone los signos eficaces de gracia. Por esto,
la Iglesia imita de Maria su virginidad, es decir, la entrega
1. Los TEXTOS DEL VaTICANO II
total al Esposo Cristo en una vida de fe, esperanzay caridad (34).
Cristo pertenece a la Iglesia porque es su Cabeza. María
Maria, como tipo y ejemplar de la Iglesia, forma parte del
hecho salvifico. Es el matiz que debemos añadir a lo anterior- pertenece a la Iglesia porque, además de ser redimida por
es Madre de Cristo Cabeza y, consecuentemente, de los demás
Cristo,
mente expuesto. Se
podría recalcar el aspecto de maternidad miembros. Por eso, la Iglesia se contempla a si misma en María
sobre la Iglesia, pero lo hemos hecho en otra
ocasión (31). como en el grado supremo de perfección al que puede llegar
El hecho salvifico tiene matiz
cristológico, eclesial y mariano.
El misterio de Cristo 32) Const. Iglesia, núm. 63.
llega hasta nosotros en circunstancias ma (33) Tbid.
(34) Ibid., núm. 64.
(31) Articulo citado en nota 1.
DR. JUAN ESQUERDA
166 1CNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA
IGLESIA 167
una persona
humana que pertenece a la Iglesia. Pe
Pero con Ila la quae est Mater Dei et
simul mater eorum qui "populum Dei"
particularidad de que esta persona es, a
vez, la s Constituunt ac typus et exemplar Ecclesiae... (37).
por ser tipo (y Madre) de la Iglesia, entra de leno en el hecho Deinde Maria proponitur ut virgo, non tantum corpore sed etiam
salvifico como instrumento de gracia. corde, scilicet fide et oboedientia, fidelitate et caritate. Est simul mater,
El motivo porque se incluye la doctrina mariana al inal de Scilicet
hristi ipsius secundum carnem, at etiam mater fratrum Eius
cooperatione sua spirituali. Est igitur ipsa typus Ecclesiae duplici ti-
la Constitución sobre la Iglesia es por ser María Madre del
Pueblo de Dios y tipo de la Iglesia:
tulo connexo» (40).
ttulos que ha atraído más la atención de los escritores. El mismo Const. Iglesia, núm. 55. CAZELLES, H., Fille de Sion et theo-
citada en la nota 3, véase: de Sion aaria,
Concilio ha garantizado su uso: ...«con Ella, excelsa Hija a aemás de la bibliografía
Etudes Mariales, 1964, 51
71. DEISs, L., María hija M., 1emas ae
1964).T s la Biblie, de Lc. I-II (París, 1957). PEINADOR,
et théologie
Sructure
mariolooia
marioiogia biblica (Madrid, 1963), cap. I! y Vl.
(41) Relatio., p. 5.
42) Textus emendatus..., p. 19.
DR. JUAN ESQUERDA SIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA IGLESIA 171
170
Testamento se habla de la
Hija de Sión«como tipo de la 1glesa. La ambivalencia de la mujer
En el Antiguo Maria como
(45). personificación del Pueblo
Esta afrece dificultad en los procedimientos narrativos del Anti-
madre del futuro pueblo no
identificarse con la mujer excepcional, Mad. Testamento, que conoce bien S. Juan. Además, la escena
de Israel podria guo
del futuro Salvador (protoevangelio, protecia_del Emmanuel), del Apocalipsis ofrece un paralelo con el protoevangelio (Gen., 3),
asociada a El en la ucha y en la victoria. Tanto esta mu niues se trata de los mismos protagonistas y del mismo ambiente
como la Hija de SiÓn se aplican perfectamente de enemistad. Y si se describe a la mujer en trance de parto,
excepcional a
Maria. Pero todo depende de la luz que aporte el Nuevo Tes un castigo, sino, más bien, el nacimiento de
ello no significa
tamento. Para todo ello es necesario confrontar lo que decimos nuevo (ctr. Is., 26, 17s; 66, 7s). Juan es el mismo
un pueblo
ahora con cuanto llevamos dicho en el capitulo anterior.
autor de la escena
del Calvario (Ilo., 19, 25). Se trata de la misma
El titulo de Hija de Sión, aplicado a Maria, enriquece el lucha entre la luz y las tinieblas, profetizada en Gen, 3, 15.
La doctrina mariana de S. Juan se podria resumir diciendo que
otro titulo de figura de la Iglesia, pero teniendo en cuenta el
sentido colectivo y eclesial de María como Madre de Cristo Maria es Madre de Cristo y de los suyos, puesto que María
Cabeza. María puede personificar al Pueblo de Israel, en este es la emujer», «Hija de Sión», madre del nuevo pueblo que es
caso, a la Iglesia del Nuevo Testamento, por su especial rela- la Iglesia. Entonces la Sagrada Biblia seria un resumen de la
ción de maternidad y de asociación con Cristo Salvador, Cabeza historia salvifica en torno a un nuevo pueblo (la Iglesia, cuya
de la Iglesia. Cabeza es Cristo y cuya madre y tipo es María).
Con esta panorámica es fácil ampliar el campo mariano de Me parece ver una confirmación del sentido mariano sal-
los Cantares, de los libros sapienciales, del salmo 44 y aun de vifico de Apoc. 12 (y, por tanto, del titulo de Maria como figura
las mujeres que son tipo en la historia de Israel (Rebeca, Abi- de la Iglesia e Hija de Sión) en un texto de S. Ignacio, disci-
gail, Bersabé, Judit, Ester, etc.). Y si estos textos marianos del pulo inmediato de S. Juan:
Antiguo Testamento quedarían valorados, muchisimo más aque-
os textos que pueden tener un sentido mariano literal.
Y quedó oculta al principe de este mundo la virginidad de Maria
y el parto de ella, del mismo modo que la muerte del Señor: tres miste-
El mismo Mesías se considera como la personificación de rios sonoros que se cumplieron en el silencio de Dios. Ahora bien,
cómo fueron manifestados a los siglos? Brilló en el cielo un astro mas
Israel en las esperanzas mesiánicas. De ahí la unión de Maria a resplandeciente que los otros astros. Su luz era inexplicable ysu nove
Cristo, precisamente en la figuración del
nuevo o Iglesia. pueblo dad produjo extrañeza. Y todos los demás astros, juntamente con elso
y la luna, hicieron coro a esta nueva estrella... Desde aquel punto,
Por este camino
podria llegarse
a una valoración superior, quedó destruída toda la hechicería y desapareció el antiguo imperio,
del texto de
Apoc.
12. Todo el contexto es un tejido de
textos desde el momento en que se mostró Dios hecho hombre para llevarnos
lo que en
proféticos del Antiguo Testamento, la novedad
aDios de la vida perdurable, y empezó a cumplirse
La
con una proyección a
iu- era obra consumadav... (46).
turo. mujer se presenta como madre de un nuevo pueblo.
En las palabras de S. Ignacio que acabamos de citar
I esta mujer puede ser la Iglesia (cfr. Gal., 4, 27) y tambien Verse a María formando parte del misterio de Cristo. Este mis-
puede
%. 4Véase, por ejemplo: Is. 54, 1s. (citado por Gal. 4, 27); Mich. 4, 2s; Sph. 3, 14; Zach..9
(citado por Mat. aT GNACIO, Ephes., 19, 1-3; cft. Ruiz, D., Padres Apostólicos,
B AC 458. Mas adeantc
21, 6). O S la
traducción de S. Ignacio segün el mismo traductor
DR. JUAN ESQUERDA
cIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA IGLESIA 173
172
Encarnación (nótese
terio es
manifestado en la ncluye prerrogativa de Esposa
de Dios;
pero este sentido es-
en la misma manifestación). Y la tiene la
de María metá- ponsal llega al grado supremo en María por su unión esponsal
la virginidad la misma que la la de su
su
S. Ignacio es maestro: con Cristo Redentor. La Encarnación, las bodas de Caná, la
fora que usa cielo más
brilla en el que los otros stros sencia de María en el Calvario, presentan a la Virgen como
unpersonaje que Cristo, del que forma parte Maria).
misterio de asociada, esposa del Verbo Encarnado Redentor. Así, el pueblo
(es el
San Pablo en Gal.,
4, 4, se refhere ciertamente a A Tsrael, la esposa primera, se personifica eminentemente en
Hijo hecho hijo de mujer.» En el versicul
Envió Dios a su 26 Maria.Y si el nuevo Pueblo (la lglesia) se llama esposa, virgen
a la a]erusalen de arriba, que es nuestra mad
se hace referencia estas perspectiv se encuentran en María como
Ahora bien, Pablo cita a Ts madre, todas
ciertamente, la glesia. 54,1 Madre de la misma Iglesia.
que es, como
relacionar la maternidad de Jerusalén tipo y
(en el v. 27), para Si la maternidad de Jerusalén
Con De esta suerte se ha ido enriqueciendo el concepto de María
la maternidad de la Iglesia. está
como figura
de la Iglesia. Dios ha ido dirigiendo la historia de
descrita en Isaías al hablar de la Hija de Sión, de ahí se podria
maternidad de María salvación y ha preparado las realizaciones futuras a través de
concluir el paralelo entre la y la mater.
María, la Hija de Sión, personificaria a la sucesos y de personajes figurativos. Las personas y la misma
nidad de la Iglesia. comunidad (personificada en un personaje femenino), represen-
salvación. Estudiar hondamente la rela.
Iglesia en la historia de la tan la colaboración
a los planes de Dios por la fidelidad a su
ción María-Iglesia seríia entonces ir descubriendo en su plena
Palabra y a su voluntad. Pero todo ello llega a su cenit en María,
luz el misterio de María en el misterio de Cristo y de la Iglesia,
es decir, Maria Madre de Dios Redentor y, por ello, Madre al decir fiat» en el momento de la Encarnación del Redentor.
Entonces, precisamente cuando Maria recoge todas las figuras
el aspecto de maternidad no se puede
y tipo de la Iglesia. Que anteriores y las personifica eminentemente, es cuando colabora
separar del de tipo se concluye de que el mismo titulo de Hija
de una manera singular a los planes de Dios. Esta colaboración
de Sión tiene un sentido explícito (aunque sólo llega a plena es tan singular que es instrumento de gracia, y María merece
luz en el Nuevo Testamento, sobre todo con la escena del Cal-
lamarse, en toda la tradición, con el titulo de Nueva Eva. Por
vario). eso, Maria, figura de la Iglesia, Hija de Sión, es, por ello mismo,
En el titulo de Hija de Sión, bajo la luz del Nuevo Testamen- la «Madre de los vivientes», porque ha colaborado a transmi-
to, María queda indisolublemente unida a la Iglesia, precisa-
tir la vida sobrenatural.
mente por su maternidad salvifica, puesto que es Madre del No es de extrañar que los Padres prefieran llamar a María
Redentor, Cabeza del Cuerpo Místico. Asimismo, las escenas Nucva Eva o figura de la Iglesia, en lugar de Hija de Sión.
del Nuevo Testamento pueden vislumbrarse con más perspec-
La Hija de Sión del Antiguo Testamento, figura femenina que
tiva salvifica desde el momento que se considera a María como
personificaba al pueblo y que se aplica bien a la mujer privi-
la Fija de Sión que personifica a todo el nuevo Pueblo o Igle legiada del protoevangelio y de Isaías, recibe una nueva uz
sia. Porque María aparece siempre como asociada a Cristo Re- en la Encarnación y Redención. Esta nueva luz convierte a
dentor, y esta asociación es de tipo esponsal. La Hija de Sión
Maria, la mujer privilegiada que puede calificarse de Hija de
DR. JUAN ESQUERDA
174 SIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA
IGLESlA 175
la Nueva Eva o Madre de los vivientes y, Ta mariologia clásica española se distingue, entre otras
concen
Sión, en
relacIÓn de maternidad para aquellos
ecuente- notas,
mente, con una for porrecalcar la relación María-Iglesia. Esta relación se encuentra
mamos la Iglesia y para la misma igles1a, que no puede exiss ampliamente expuesta en loS comentarios a los textos marianos
la componen. Por esto, repito, lne D
sin los miembros que del Antiguo Testamento, concretamente los comentarios a los
llamar a María figura de la Iglesia y Nneua dres Cantares, en los que se ve la doble significación eclesial y ma-
prefieren (47).
Las lineas maestras del paralelismo, María-Iglesia, se riana (49). Pero el paralelismo María-Iglesia no impedía ver en
rizan en dos: virginidad y maternidad, con las consecuente
pola
Maria una causalidad, respecto a la misma Iglesia, hasta el
semejanzas y diferencias. Porque María es una personave punto de llamarla «madre de la Iglesia» (50).
la Madre de Dios Redentor, Cabeza del Cuerpo Mistico, v a
Iglesia es una comunidad. María es figura o tipo de la Ielesia
por su maternidad virginal y esponsal; es decir, queda asociada
III. PRESENCIALIDAD Y EFICACIA ACTUAL
intimamente como Madre a la obra redentora y es fiel a estos
DE MARA, TIPO DE LA IGLESIA
planes de Dios. La Iglesia se reconoce a sí misma en el culto
a Maria, porque María es el arquetipo de la Iglesia, como media-
. Los TEX1OS CONCILIARES
nera, corredentora y redimida. Pero Maria supera a la Iglesia
de modo inigualable, puesto que es la Madre de Dios.
En los capítulos anteriores hemos constatado la presencialidad
La Hija de Sión personificaba todas las esperanzas mesiá- y eficacia de María durante el desarrollo de la historia de sal-
nicas. Maria, Hija de Sión, figura de la Iglesia, es ahora el vación hasta Pentecostés. Esta presencialidad y eficacia de María
polo al que se dirige toda la dinámica escatológica de la misma
tenia precisamente el matiz de Maria, tipo de la Iglesia. María,
Iglesia. La Inmaculada, la Asunción, la Realeza, etc., son el asociada a Cristo Redentor, colaboró a nuestra redención, den-
arquetipo de lo que la Iglesia espera ser en la resurrección de tro de los planes salvíficos de Dios, en Cristo Cabeza de la
los cuerpos. Por esto termina así el texto conciliar sobre la Iglesia o Cuerpo Místico. Nos resta ahora analizar la actual
Virgen: «Entre tanto, la Madre de Jesús, de la misma manera presencia y eficacia de María como tipo de la Iglesia.
ya glorificada en los cielos en cuerpo y en alma, es la imagen María pertenece al Misterio de Cristo. No puede separarse
yel principio de la Iglesia que ha de ser consumada en el futuro de él ni tiene razón de ser fuera de él. Pero precisamente de
siglo;asi, en la tierra, hasta que llegue el día del Señor, ante- ahi podremos sacar la actual presencialidad y eficacia de Marira
cede con su luz al pueblo de Dios peregrinante, como signo de en la Iglesia. Porque el Misterio de Cristo, tal como es, se pro-
esperanza segura y de consuelo.» (48) longa en la Iglesia. Este Misterio de Cristo efactum ex mulieres,
499 EsquERDA, J., Exégesis de textos marianos escrituristicosen FeRNANDO QURINO DE SALAZAR
a sco1. c955
:poreiemplo:S.JusTINO, Diálogo 100, 4 -6; PG 6, 709s. s. RENEO, Adv. Haerexces Estudios Marianos, 24, 1963, 231 310. Véase especialmente p. 2415, 269s.
, 10 (Harvey, I, 120s); II, 22, 3-4 (Harvey, II, 120s); V, 19, 1 (Harvcy,s a s e : EsQuERDA, J., El tratado sobre la Iunaculada de Diego Përez Valdivia, Ephemc
de
respectivamente, en PG 7, 955, 958, 1.175. TERTULIANO, Adv. Marc. II, 4, PL 2, 289, A, BRO rides Mariologicae, 14, 1964, 225-361; especialmente: p. 76. DicgoPérez es discipul de
quia est Ecclesiae 87
quis irg 89, PL 16, 326; Exp. Lc. 2,7, PL 15, 1.555(CSEL 32. TV, p. 45): Virgo
typus.
daeAvila con cuya doctrina mariológica ticne grandes puntos de contacto, cir. Sins
O g 1 C a de los escritos del Beato Juan de Avila, ibíd., 11, 1961, 169 191; especialmente:
-
p. 187s.
(48) Const. Iglesia, núm. 68.
DR. JUAN ESQUERDA SIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA IGLESIA 177
176
es el que «se nos revela y continia en la ellos, que sufrieron y
fueron glorificados con Cristo, pro-
do en
Maria Virgine», sus ejemplos, todos por Cristo
los cuales atraen a
ane a los fieles
ex
Iglesia» (51).
No podemos
meternos en
honduras
sobre elel
filosóficas sobre .
tiempo al Padre, y por los méritos de los mismos implora los benefi-
Pero en sana teologia, patrocinada cios divinos» (54).
la teoria de Casel.
y sobre
se debe
hablar de la presencialidad e. ya
y Los textos no son
mas explicitos. Tal vez por hablar con-
a María como parte integrante del Misterio: «En la celebración interesa estudiar esta segunda 2tapa en los mismos textos con-
de este circulo anual de los misterios de Cristo, la santa Iglesia ciliares.
venera con amor especial a la bienaventurada Madre de Dios, El Concilio habla de un infuxus» de Maria en los creyen-
la Virgen María, unida con lazo indisoluble a la obra salvifica tes. Ciertamente se trata de un influjo que deriva de los méri-
de su Hijo; en ella, la Iglesia admira y ensalza el fruto más tos de Cristo, que son sobrenaturales. Y este influjo de María
no hace más que demostrar la eficacia de la única mediación
espléndido de la Redención y la contempla gozosamente comno de Cristo (en este sentido es ella Medianera). Es un «influjo
una purisima imagen de lo que ella misma, toda entera, ansía
y espera ser.» (53) salvifico», por el que María sigue cumpliendo
su
ma-
ternal». Creo que esto no se podría decir de la mera ejempla-
«misión
La gracia de la salvación nos Ilega al ponernos «en contacto»
con los misterios de Cristo ridad, y aun intercesión, como la de los santos (55).
(de los que forma parte Maria).
No se especifica más. No obstante, se recalca la idea de ejem- La presencialidad y eficacia de Maria como Madre en la
plaridad (imagen). Pero no exclusivamente, puesto que en historia de salvación significa que, por haber sido asociada a
Cristo Redentor como Madre, cooperó a que se restaurara la
ellospárrafo siguiente habla de intercesión (de María y de todos
se
santos): Porque, al celebrar el tránsito de los santos de este vida sobrenatural. «Por tal motivo, es nuestra Madre en el orden
mundo al cielo, la Iglesia proclama el misterio de la gracia.» Es una presencialidad y eficacia que, al menos
pascual cumpl
51) Const. Iglesia,
2 Const.. sobre lanúm. 52. bid..Const.104.
(53) Ibid., núm. 103..Sagrada Liturgia, núm. 102. (55) Iglesia, núm. 60.
12
sIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA IGLESIA 179
DR. JUAN ESQUERDA
(su obediencia,
madre y virgen,
Virgen María la precedió.
la Bienaventurada
eclesiales por los que la Iglesia es madre en el orden ministe- yentes hacia su Hijo y su sacrificio y hacia el amor del Padre»...,
rial. Podemos decir entonces que Iglesia tiene como modelo «engendró a Cristo..., precisanmente para que por la Iglesia
la nazca y crezca también en los corazones de los fieles» (n.° 65).
o
tipo aquella
a que posible (por voluntad de Cristo), que
hace
la misma Iglesia sea madre. Y en esta misma maternidad ecle Estos y otros textos que hemos citado y estudiado anterior-
sial, María sigue indisolublemente unida como tipo presente mente, dejan entrever algo del Misterio de Cristo que se mani-
y operante. fiesta en la Iglesia. Y lo dejan entrever precisamente en una
Nuestras categorías mentales no pueden
expresar con rec- perspectiva que es constante en línea biblica: el Dios Amor
titud todo este misterio. Sería más sencillo que se acerca, se manifiesta y se da al hombre con ternura ma-
quedarnos con las
afirmaciones del magisterio, basadas en la misma revelación. ternal. Es la Palabra personal de Dios Amor que se nos ha
Pero precisamente son estas afirmaciones las dicho así para que la entendiéramos mejor. Y la Iglesia conti-
que suscitan el
problema: núa prolongando esta Palabra que es siempre eficaz en todo
-«Este misterio divino de salvación se nos revela y con- su contexto también mariano
(Gen., l; Ps., 28; 33, 9; 147;
tinúa en la Iglesia» (se trata del
Misterio de Cristo en su aspecto Is., 55; Io., 1, 3; Iac., 1, 18; I Petr., 1, 23; I Cor., 1, 18; Heb., 4,
mariano del factum ex 12; Phil., 1, 15-18; I Cor., 2, 1-5).
habla de María en la
muliere»; por esto precisamente se
Constitución sobre la Iglesia) (n.° 52). María, tipo de la Iglesia, que sigue presente y operante a
uel infujo salvifico de la traves de los signos eclesiales, es en estos mismos signos el
de los Bienaventurada Virgen en favor de cercanía maternal del Misterio de Cristo. Dios se
hombres..., fomenta la unión inmediata de los aspecto
con Cristo» (se trata de creyentes na acercado hasta nosotros, hasta tal punto («sic Deus dilexitD)
un influjo que es calificado de «media"
ción») (n.° 60). que se ha hecho hombre «hecho hijo de mujer»; y no ha que-
Tido que esta mujer privilegiada, Madre de Dios, quedará al
-por su amor materno
cuida de los hermanos de su de todo su misterio redentor, precisamente porque la
que
peregrinan., hasta que sean llevados a la ru argen
na
patria 1c tomado como expresión de cercanía y epifanía. Entonces,
DR. JUAN ESQUERDA SIGNIFICADO SALVIFICO DE MARIA, TIPO DE LA IGLESIA 189
188
en la misma cercanía y epifani.
i n e a ae
Virgen y Madre. Asi como tiene significado salvifico eclesial
la Iglesia, que sigue Maauismo de Jesús también lo tiene el nacimiento de una
Cristo, ha de procurar (teniendo como tino
del Misterio de a
frase Citada mas arriba y en la que vamos a copiar
eclesiales leguen con todo el calor ma Virgen. En la
María) que los signos emos onstatar cómo S. Ignacio une ambos
ternal y con toda la expresión
inteligible hasta el hombre en a
continuación
celso tipo (y será, por tanto, signo y donación de Cristo) sola de momento, est Sin analizar apenas. Creo que la
gación que,
mente si sabe aprender de Maria la idelidad a la Palabra, Fn osCuridad no propiamente la circunstancia mariana, sino
está en