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Trastornos de la

Conducta Alimentaria

Por:
Carla Daneila Méndez Miranda
Trastornos de la Conducta Alimentaria desde el punto
de vista biológico, medico y nutricional

Anorexia Nerviosa

Este trastorno alimenticio consiste en una alteración grave de la percepción de la


propia imagen. Todos los anoréxicos se ven demasiado gordos y por eso deciden
perder peso. Generalmente la pérdida de peso se consigue mediante una disminución
de la ingesta total de alimentos. Aunque los anoréxicos empiezan por excluir de su
dieta todos los alimentos con alto contenido calórico, la mayoría acaba con una dieta
muy restringida, limitada a unos pocos alimentos. A pesar de eso las personas
anoréxicas tienen una vitalidad increíble, casi rozando la hiperactividad.

BIOLÓGICO:
El principal regulador de la alimentación es el hipotálamo (no comemos por las buenas
si no por los mensajes recibidos). El hipotálamo son núcleos laterales donde están
situados los centros del apetito y que se ponen en funcionamiento cuando baja el nivel
de glucosa en sangre. Los núcleos medio-centrales son los centros de la saciedad y su
función es inhibir a los laterales para que no sigamos comiendo, le dan el mensaje de
que ya no necesita mas.
Los estudios a base de imágenes de los cerebros de pacientes anoréxicos han
encontrado altos niveles de proteínas conocidas como factores de secreción de
corticotropina (CRF, por siglas en inglés), las cuales se secretan durante períodos de
estrés y bloquean la sustancia neuropéptido Y (NPY, por siglas en inglés), un
estimulante de apetito potente. Estos productos químicos relacionados con el apetito
pueden servir como los enlaces biológicos entre las enfermedades estresantes
extremas en la vida de una persona joven y el desarrollo posterior de anorexia, aunque
algunos estudios por imágenes indican que estas anormalidades ocurren después de
desarrollada la anorexia.

Factores Predisponentes:
● Genéticos; como pueden ser, el heredar una cierta predisposición a engordar, el
sexo, (femenino).
● Edad: donde aparece el mayor número de casos.
● Emocionales: En cuanto a las personas que son inestables o que tienen una
personalidad muy débil que se dejan condicionar por el entorno, tienen
predisposición a la anorexia.
● La anorexia es ocho veces más común en las personas que tienen parientes con
el trastorno, pero los expertos no saben precisamente cuál podría ser el factor
hereditario. Muchos anoréxicos tienen un metabolismo más rápido que las
personas normales, quizá haciéndoles más difícil el subir de peso. Esta
propensión genética hacia la delgadez acompañada de la aprobación cultural
podría pre- disponer a algunas personas a desarrollar anorexia. No obstante ya
se ha hecho mención de estos factores como predisponentes a padecer un
trastorno de anorexia.

MÉDICO:
Dada la importancia del diagnóstico precoz, para prevenir las complicaciones propias
de la evolución, el diagnóstico de sospecha se debe valorar en todos aquellos
pacientes prepúberes o adolescentes, especialmente si son del sexo femenino, que
presenten alguna de las siguientes características:
● Realización de dieta hipocalórica en ausencia de obesidad o sobrepeso.
● Periodos de semiayunó alternados con ingesta normal.
● Miedo exagerado al sobrepeso o a la ganancia ponderal.
● Rechazo de la propia imagen corporal.
● Valoración del peso o figura como prioridad.
● Valoración de los alimentos exclusivamente en relación con la ganancia
ponderal.
● Durante el proceso anoréxico se van desarrollando unos hábitos alimentarios
anómalos y una sintomatología digestiva dominada porla sensación de plenitud,
meteorismo y abdominalgias, atribuidas en parte a un trastorno funcional y en
parte a la alteración de las percepciones intero- ceptivas relacionadas con la
esfera del apetito y la saciedad como manifestación de alteración en la síntesis
de neurotransmisores cerebrales.

Alteraciones endocrinometabólicas
1. Eje hipotálamo-hipofisario-tiroidea: disminución de T3, con T4 y TSH normales.
2. Eje hipotálamo-hipófiso-gonadal: niveles bajos de estrógenos y gonadotrofinas
con inversión de relación LH/FSH y falta de respuesta al estimulo agudo con
GnRH.
3. Prolactina: niveles basales disminuidos en ocasiones.
4. Hormona de crecimiento: se encuentra elevada por disminución de IGF-I.
5. Insulina y glucagón: insulina descendida y glucagón elevado.
6. Eje hipotálamo-hipófiso-adrenal: cortisol basal elevado.
7. Hipercolesterolemia: A base de colesterol LDL de causa descono- cida, aunque
se cree debido a disminución de T3 o a la excreción Efectos dela anorexia biliar
disminuida.
8. Hipercarotinemia: debido al aumento de transporte por las lipoproteínas.
9. Hiperaminoacidemia con alteración de relación Phe/Tyr, Met/Cys y Gly/Val.

Alteraciones digestivas
- Gastroparesia con retraso del vaciamiento gástrico.
- Estreñimiento.
- Meteorismo.
Alteraciones cardiacas
- Bradicardia e hipotensión.
- Prolapso mitral.
- Disminución de la silueta cardiaca, del ventrículo izquierdo y del índice cardíaco.
- Inversión de onda T.
Alteraciones hematológicas
- Anemia leve.
- Disminución de la acción bactericida y de la adherencia de los granulocitos.
Disminución de linfocitos CD4 y CD8.
- Disminución de niveles séricos de complemento.
- Pérdida de masa ósea y muscular. Pérdida rápida y permanente y sólo reversible
parcialmente. Posiblemente en relación con el déficit de estrógenos, hipercortisolismo y
la disminución de IGF-I, como hemos comprobado en nuestros enfermos, llegando en
ocasiones a déficit de -3 en el score Z.
Se correlaciona directamente con el tiempo de amenorrea.
- Pérdida de peso significativa. Se suele perder un 25% del peso previo la equivalencia
es el de un adolescente en edad de crecimiento.

NUTRICIONAL:
La anorexia nerviosa es un modelo de malnutrición energético proteica (MPE), de
predominio energético, de instauración lenta y progresiva, con escasa repercusión en
Ia analítica rutinaria, dado que el organismo realiza un proceso de adaptación. En la
valoración nutricional, se observa una disminución de parámetros antropométricos,
como peso, talla, masa grasa, masa muscular, índice de masa corporal (IMC) e índice
peso/talla, un déficit importante del pliegue tricipital y de la circunferencia del brazo. En
la exploración observamos los signos clínicos propios dela MPE y su repercusión sobre
órganos y sistemas
La motivación para modificar determinadas conductas varía de una persona a otra y, a
lo largo del tiempo, en la misma persona. Según Prochaska y Prochaska, el proceso de
cambio para la adopción de una nueva conducta implica cinco etapas:
pre-contemplativa, contemplativa, de preparación o disposición al cambio, de acción y
de mantenimiento.

Durante el proceso de renutrición, en cualquiera de los niveles asistenciales, se


pretende la recuperación de un peso mínimo saludable, la normalización de la conducta
alimentaria así como la corrección de las secuelas físicas y psicológicas de la
malnutrición. El tratamiento inicial debe enfocarse hacia la restauración del peso, y para
alcanzar los objetivos propuestos se seleccionará la vía de acceso de alimentación más
apropiada; la vía oral siempre será la de elección, y se optará por la nutrición artificial
sólo en situaciones de falta de cooperación o de incorrecta progresión ponderal durante
el tratamiento. Si es preciso puede recurrirse a la nutrición artificial, y la nutrición
enteral es preferible a la parenteral.

Una vez iniciada la realimentación, la progresión en la alimentación se realizará de


manera individualizada, y se incrementará progresivamente el aporte calórico hasta
alcanzar los objetivos de peso propuestos. Es imprescindible el estricto control
hidroelectrolítico, metabólico y físico durante la fase inicial de la realimentación para
evitar y diagnosticar complicaciones que pueden aparecer, como el síndrome de
renutrición.

Bulimia Nerviosa

Se caracteriza por la presencia de grandes atracones de comida (ingesta incontrolada


de grandes cantidades de alimentos en un corto lapso), acompañados de la pérdida de
control sobre la ingesta alimentaria, lo que conlleva fuertes sentimientos de culpabilidad
y falta de control. El comportamiento bulímico es un circuito que se retro alimenta. Los
pacientes pierden el control frente a la comida, ingiriendo grandes cantidades de
alimentos, lo cual aumenta la culpa, en tanto no pueden frenar de comer. Cuando la
comida se acaba, recién ahí finaliza la compulsión, lo cual refuerza la culpa y
desencadena el uso de mecanismos compensatorios (vómitos, purgas, laxantes),
llevándolos a sentimientos físicos indeseables.

MÉDICO:
Los criterios diagnósticos mayormente utilizados para definir este trastorno, al igual que
para la AN, son para el DSM IV-TR: Presencia de atracones recurrentes. Un atracón se
caracteriza por:
❖ Ingesta de alimento en un corto espacio de tiempo (p. ej., en un período de 2
horas) en cantidad superior a la que la mayoría de las personas ingerirían en un
período de tiempo similar y en las mismas circunstancias.
❖ Sensación de pérdida de control sobre la ingesta del alimento (por ejemplo,
sensación de no poder parar de comer o no poder controlar el tipo o la cantidad
de comida que se está ingiriendo).
❖ Conductas compensatorias inapropiadas de manera repetida, con el fin de no
ganar peso, como son provocación del vómito; uso excesivo de laxantes,
diuréticos, enemas u otros fármacos; ayuno, y ejercicio excesivo.
❖ Los atracones y las conductas compensatorias inapropiadas tienen lugar, como
promedio, al menos dos veces a la semana durante un período de 3 meses.
❖ La autoevaluación está exageradamente influida por el peso y la silueta.

BIOLÓGICO:
Diversos estudios de investigación han asociado la bulimia nerviosa con alteraciones
en diversos neurotransmisores cerebrales como la noradrenalina, la serotonina o las
endorfinas. También se ha descrito una vulnerabilidad genética.

NUTRICIONAL:
Tratamiento del síndrome metabólico:
❖ Dieta absoluta con aspiración nasogástrica si existe dilatación aguda gástrica.
❖ Perfusión con suero fisiológico según pérdidas estimadas e ionograma con
reposición de pota- sio en infusión continua.
❖ Monitorizar TA, balance hídrico.
❖ Reiniciar dieta oral 7 Introducción progresiva de alimentos o por fases en función
de la tolerancia y adecuados caloricamente para su peso / talla.
❖ Si no existe colaboración nutrición enteral total por SN Duodenal.

Objetivos del tratamiento en la bulimia nerviosa:


★ Evitar crisis de bulimia mediante tratamiento psicopatológico-farmacológico.
★ Adecuar el peso ideal a la talla
★ Técnicas de educación alimentaria.
★ Dieta ajustada a necesidades reales.

Trastornos por atracón

El "comer en exceso" como un síndrome o un trastorno del comportamiento alimentario


fue descrito por primera vez en 1992, caracterizándose por "atracones", como los que
se observan en la buli- mia, pero que no van seguidos de vómitos ni otras medidas
para contener el apetito.
BIOLÓGICO:
En las clínicas para perder peso, alrededor de 1/4 o 1/3 de los pacientes cumplen
criterios de ingesta excesiva "en atracones" (BED). No todos los obesos presentan una
ingesta excesiva en atracones. Esta conducta parece estar aso- ciada,
independientemente del peso, con una mayor prevalencia de problemas psiquiátricos,
como la depresión, mayores y más frecuentes fluctuaciones del peso y una mayor
angustia relacionada con el mismo. Una predisposición a la obesidad y la presencia de
factores de riesgo no específicos para alteraciones psiquiátricas, como experiencias
negativas en la infancia o depresión en los padres, parecen incrementar el riesgo de
desarrollarla.

MÉDICO:
Diagnóstico Según el DSMsIV se caracteriza por:
❖ Episodios de atracones recurrentes (al menos dos por semana en 6 meses).
❖ Malestar con al menos tres puntos de los siguientes:
➢ Comer muy rápido.
➢ Comer hasta sentirse mal.
➢ Comer cuando no se tiene hambre.
➢ Comer solo. Sentirse disgustado o culpable después de comer.
➢ No utilizar purgas (vómitos autoinducidos o laxantes), ni incrementar el
ejercicio físico, ni hacer ayuno.
➢ Ausencia de anorexia nerviosa.

Bibliografías:

● Martín-Romo Mejías, J. (Coord.) (2015). Intervención médica en los trastornos de la


conducta alimentaria (2a. ed.). Málaga, Editorial ICB. Recuperado de
https://elibro-net.eu1.proxy.openathens.net/es/ereader/anahuacxalapa/113012?page=12
● Carta, C. M. & Castellani, M. N. (2018). Psicomotricidad y trastornos de la conducta
alimentaria: miradas y prácticas complejas para una intervención en el campo adulto..
Miño y Dávila.
https://elibro-net.eu1.proxy.openathens.net/es/ereader/anahuacxalapa/123457?page=1
● Loria Kohen, Campos del Portillo, R., Valero Pérez, M., Mories Álvarez, M. T., Castro
Alija, M. J., Matía-Martín, M. P., & Gómez Candela, C. (2021). Protocolo de educación
nutricional en el tratamiento de los trastornos de la conducta alimentaria en el ámbito
clínico y asistencial. Nutrición hospitalaria : organo oficial de la Sociedad Española de
Nutrición Parenteral y Enteral, 38(4), 857–870. https://doi.org/10.20960/nh.03617
● Tipos de TCA. (2020, 7 julio). Associació Contra l’Anorèxia i la Bulímia.
https://www.acab.org/es/los-trastornos-de-conducta-alimentaria/que-son-los-tca/tipos-de
-tca/
● ¿Qué son los TCA? | SETCA. (s. f.).
https://www.setcabarcelona.com/trastornos-de-la-conducta-alimentaria-2/que-son-los-tca
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