CONSECUENCIAS DE LOS TCA:

 Desnutrición grave, que puede provocar: reducción de la frecuencia

cardíaca y presión arterial, disminución de la frecuencia respiratoria y
disminución de la temperatura corporal; por eso, la muerte por inanición
suele ser por parada cardio-respiratoria (sobre todo durante el sueño,
durante el cual el ritmo es aún más bajo que en vigilia).

 El organismo funciona en modo económico y, en estado de deprivación, el

organismo libera opioides* para compensarlo, lo que produce una sensación
subjetiva de bienestar. Sus sensaciones no corresponden con el estado real
que tienen; incluso, llegan a sentir euforia (como cuando se pasa una noche
sin dormir).

 Pérdida de cabello y deterioro de la piel (sequedad, envejecimiento,

rugosidad, tonalidad amarillenta,...).

 Aparición de lanugo (vello muy fino) en brazos, cara y abdomen. Se

pierde el vello axilar y púbico.

 Uñas quebradizas y deterioro dental (producido por los ácidos de los vómitos).

 Ante la desnutrición, el tiroides secreta menos T3 y T4,

hormonas implicadas en el metabolismo basal, generando
hipotiroidismo (enlentecimiento del metabolismo).

 Las hormonas hipotalámicas dejan de producirse, por lo que la menstruación

desaparece. La hipófisis no envía la señal hormonal, y los ovarios dejan de
funcionar. Esto sucede porque la hipófisis necesita cierto nivel de grasa
corporal para funcionar (por encima del 12-13%), por eso también algunas
deportistas de élite pierden la menstruación.

 Alteraciones digestivas: dolor estomacal, falta de motilidad intestinal,

regurgitaciones, lesiones esofágicas,… Ante una lesión esofágica severa, una
persona puede morir en 30 o 40 minutos sino se acude a un hospital.

 Pérdida de balance electrolítico, especialmente el potasio. Esto puede

conllevar daños en los riñones, parada cardiorespiratoria, ataques
epilépticos, edemas,…

 Anemia, pérdida de masa ósea, y disminución del número de plaquetas y

glóbulos rojos, lo cual hace que se sea más susceptible a las enfermedades.