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Pero la verdad es que, las personas deben pensar en un futuro acá en el planeta tierra,
es necesario de repensar los modelos de consumo que se presentan en la actualidad,
los modelos de producción, y las estrategias de protección y conservación del medio
ambiente y del planeta en general que se gestan desde los sectores público y privado.
Adicional a esto, es necesario partir de la integración de cada uno de los acores a la
hora de configurar una nueva forma de repensar el cambio de paradigma de creación
de futuro.
Si fuera posible gestionar un dialogo ante las diferentes potencias mundiales acerca de
una nueva gestión de futuro consiente y sostenible, en el que participaran líderes de
países como Estado Unidos, Brasil, Rusia, China, Japón, entre otras potencias de la
actualidad, como colombiano pensante y como persona humana perteneciente a un
país que para muchas personas es subdesarrollado, les diría que si es posible
gestionar un futuro consiente y sostenible, pero no desde ese pensamiento equivoco de
planeta que tienen.
Señores líderes de este planeta, ser líder no se trata de pasar por encima de los demás
para obtener beneficios particulares, ser un líder es direccionar las fuerzas propias y de
los demás hacia el cumplimiento de objetivos comunes, no se trata de subutilizar países
en desarrollo para cumplir sus propios objetivos, ser líder se trata de enseñar para que
todos tengamos la posibilidad de aportar a la transformación del planeta y poder pensar
en un futuro en él, no como pasa ahora que tenemos a múltiples personalidades
penando en un futuro en el espacio “que falta de conciencia por lo propio”.
Finalmente, la respuesta a la interrogante ¿es posible que la gestión del futuro sea
consciente y sostenible?, si se quisiera dar una respuesta irresponsable diría que si es
posible, pero aterrizando a los resultados que se tuvieron con los Objetivos de
Desarrollo del Milenio (ODM) que se debieron cumplir para el 2020 y que no se
alcanzaron, y con lo que va en el desarrollo de los Objetivos de Desarrollo Sostenible
(ODS) que se deberían cumplir para 2030, la respuesta seria no es posible.
Por que esta respuesta, por que es necesario ser consciente con o que se propone, no
se puede vender una idea equivoca de transformación del futuro mediante una gestión
que promueva la conciencia y la sostenibilidad cuando a millones de personas no han
querido entender que el cambio se debe dar ahora, y cuando muchos países no han
sido capaz de regular el consumismo y todavía se desborda la contaminación, la
utilización de plástico, la contaminación de las aguas, la falta de compromiso en la
separación de residuos sólidos, la falta de regulación en el tratamiento de las basuras,
la falta de apoyo al reciclaje, entre otras.
Si la conciencia de las personas, los Estados, y las empresas no cambia, por más que
unos pocos traten de consolidar una gestión de futuro consiente y sostenible, esto no se
podrá dar, y el futuro nunca llegará, o lo que llegue será algo que las generaciones
futuras no podrán disfrutar de ninguna manera. Crear una gestión del futuro consiente y
sostenible es casi una utopía, algo que muchas personas soñamos con el poder de la
mente, pero sabemos que en la realidad es algo prácticamente inalcanzable, no
imposible, pero si con un grado de complejidad alto que requiere del interés de muchos
para que pueda llegar a ser medianamente viable y realizable.
Bibliografía