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PERSONAJES:

Una policía retirada sin sentido del humor. Tiene 40 años, y está
divorciada. Tiene problemas con el cigarrillo, come cuando tiene ataques
de ansiedad, odia el patriotismo y ama las películas de los 50s. Está un
poco y su exesposo se quedó con la custodia de su hijo (un perrito). Tiene
insomnio y aprovecha ese tiempo extra por las noches haciendo críticas de
cine por internet. Tras su infalible capacidad para insultar, se esconde una
persona con baja autoestima.
Un policía novato un poco muy inmaduro. Tiene 21 años y está
soltero. No busca pareja porque en realidad es asexual. Es lo que muchos
llaman bocazas, hablador o simplemente imbécil. Sin embargo, tiene un
buen corazón. No puede evitar ir a todos lados con audífonos puestos, lo
que le ha traído varios problemas. Tiende a decir las verdades de forma
insensible y sin pelos en la lengua. Ama los sombreros y las películas de El
Pistolero Fantasma. Es un androide, ya que gracias a un accidente perdió
varias partes de su cuerpo que fueron remplazados.
Un policía también novato y mejor amigo del protagonista. 23 años y
con una relación a distancia. Es fan de pokemón y siempre hace referencias
a la esa serie. Es un poco agresivo e impulsivo, por lo que hace cosas
inesperadas. Solo hace chistes sexuales. Tiene problemas con el alcohol y
siempre llega tarde. Pero pesar de todo, es un buen detective.
Una robot prostituta programada para dar placer, pero, gracias a un
accidente ahora tenía conciencia propia. No entiende a los humanos, pero le
parece agradable su interés. Es muy inocente, casi como una tonta. Ya no
tenía clientes porque sus dueños creían que estaba defectuosa. Hace
demasiadas preguntas y llega a incomodar a la gente.
ESCENA 1:
TARDE-NOCHE /EXTERIOR /DOMO CENTRAL, SEXTO
OCTANTE /AÑO 2520.

Stein está corriendo por un estrecho callejón. Persigue a un joven


encapuchado con sudadera y pantalones anchos de marca. Salta un basurero
épicamente y desenfunda su Hipertaser, un arma de pulso eléctrico. El
ladrón queda atrapado entre dos edificios.

Stein: ¿Para quién trabajas?


Ladrón: ¿Qué?
Stein: Nada, es que siempre quise decir esa frase.

Stein apunta el hipertaser con maestría. El ladrón, de inmediato, pone


cara de miedo y levanta las manos. Se rinde.

Ladrón: No me dispares.

Aparece otro policía de la oscuridad. El uniforme un poco más


desarreglado. Desaliñado. Es compañero de Stein.

Aris: No llores, ¿acaso es tu primera vez?


Stein: Llegas tarde.
Aris: Es que he visto algo que me gustó en el camino.
Stein: ¿Un empleo con buen salario?
Aris: Mejor aún, figuras coleccionables del puto charizard. Dicen
que funciona como encendedor. ¿No te emociona?

El ladrón corre hacia un lado para intentar huir, pero Stein le hace
una zancadilla y cae sobre un charco. Era orina.

Aris: ¿Este inútil es el proveedor de la famosa droga Violeta?


Stein: Ni tan famosa.
Aris: Mi novia vive en el Tercer Domo. Dijo que la Violeta se vende
ahí como pan caliente. ¿No te parece extraño?
Stein: ¿Que tengas novia?
Aris: ¡Lo de la Violeta en el Tercer Domo, Stein! Eres un…
El ladrón vuelve a levantarse, esta vez saca un cuchillo e intenta
atacar, pero era malísimo y no agarra a ninguno. Los policías estaban bien
entrenados. Stein le quita el cuchillo y lo empuja.

Stein: Dispárale.
Aris: Te va a doler un poquito.

Desenfundó su hipertaser personalizado y disparó. El ladrón se


electrocutó y cayó al suelo inconsciente sin retorcerse tanto.

Stein: No le leíste sus derechos.


Aris: Tardaría siglos y nos apuñalaría. Vamos, tengo que comprar
ese encendedor de charizard.
Stein: Ayúdame a cargarlo. Seguro pesa más que yo.
Aris: ¿Tus partes de robot no te hacen más fuerte?
(Stein puso cara de hartazgo).
Stein: Vete a comprar tu juguetito y déjame.

Revisa el cuerpo del ladrón, como es el procedimiento habitual, y


encuentra una bolsa más grande de la droga Violeta. Era un paquete
mediano de tono violeta neón.

Stein: Santas lunas de marte. ¡Mira esto!


Aris vuelve y ve la bolsa.
Aris: Es… mucha droga.
Stein: Este no es un simple caso de posesión, sino un caso de tráfico
de Violeta. Hay que contárselo al capitán.
ESCENA 2:
NOCHE /INTERIOR, COMISARÍA /DOMO CENTRAL, SEXTO
OCTANTE /AÑO 2520.

Stein y Aris entran a la oficina del capitán Bone. Él está frente a una
computadora sobre un escritorio de metal. La habitación es grande sin
ventanas, pero encima del nivel de las cabezas hay unas cuantas pantallas
de visualización con imágenes de toda la comisaría. Hay asientos para dos
personas y varios estantes con muchos documentos y archivos.

Stein: Señor Bone.


Bone: ¿Haces horas extras hoy, detective? Se ve que ama su trabajo.
Me alegra mucho la gente comprometida.
Stein: Estuve trabajando en un caso, señor. Luego atrapé a un
hombre con Violeta mientras hacía patrullaje.
Bone: Posesión de droga, sí. Muchos de los drogadictos vienen del
Séptimo Octante. Los policías allí son palurdos. ¿Lo tienes apresado ya?
Aris: Está en la sala de interrogación.

El capitán se acerca a la mesa. Es un hombre de piel oscura y mirada


amenazante. Su voz es profunda e intimidante.

Bone: ¿En la sala de interrogación?


Stein: Es que no fue solo un poco de Violeta, señor. Tenemos una
bolsa de casi dos kilos en evidencias.
Aris: Es un caso de narcotráfico, mi capitán. Es algo verdaderamente
grande. Quizá logremos contactar con el proveedor.
Bone: Pues los felicito, detectives. Sin embargo, debemos cederle el
caso a Asuntos Exteriores.
Stein: Pero, señor. Este es mi caso.
Aris: Nuestro… caso.
Bone: Lo entiendo, chicos. Sé que no hay casos tan importantes para
nosotros. Sé que solo nos toca la migaja, siempre, pero esto sobrepasa mi
autoridad. No puedo desobedecer el reglamento.
Stein: ¿Pero por qué? Es nuestra jurisdicción…
Bone saca algo de un archivero y arroja un documento sobre la mesa.
Una carpeta negra con el nombre del Caso 03-03-20.

Bone: Hace días un cargamento de esa droga fue encontrado en una


de las lunas de Marte. Creemos que toda la droga viene de la Tierra y ese
planeta no es nuestra jurisdicción, muchacho. Espero que entiendan que no
puedo dejar a cargo de este caso tan importante a dos oficiales… sin
experiencia.
Stein: Nosotros podríamos…
Bone: Ustedes ya hicieron su parte. El caso es para Asuntos
Exteriores. Es una orden directa.
ESCENA 3:
MEDIODÍA /INTERIOR, DEPARTAMENTO /DOMO CENTRAL,
SEXTO OCTANTE /AÑO 2520

Nara está frente a una computadora, recostada sobre el espaldero del


sillón. El monoambiente está completamente desordenado, con colillas de
cigarrillo y humo. Las luces apagadas. El ventanal, hacia el lado que da a la
calle, muestra la ciudad, el Sexto Octante. Muchos edificios.

Nara: …y verdaderamente Taxista Ensangrentado del 2445 es una


mala película a pesar de que sea una de culto. Muchos dirán que…
Tocan la puerta. Tok, tok.
Nara: Borrar tres palabras.
El mando de la computadora elimina tres palabras del documento.
Nara: Muchos dirán que estoy siendo muy pesimista…
Vuelven a tocar la puerta. Nara se enoja.
Nara: ¿Quién mierda a esa hora del día?

Se levanta y va a abrir la puerta, evitando tropezar con el desorden.


Hay dos policías muy jóvenes. Uno de ellos le parece conocido.

Stein: Venimos a hablarle sobre la palabra de Spinoza.


Nara: Baruch Spinoza no era un dios, solo sentó las bases de la
religión neocristiana panteísta de la actualidad. Eso lo sabe hasta un
infante. Una clara exageración, ya que un infante no podría saberlo. Solo
quería recalcar tu falta de cultura.
Stein: Ya olvidé que no puedo hacer chistes contigo.
Nara: ¿Ese era un chiste? Te cuento uno.
Stein: No lo hagas, no eres…
Nara: Va un robot a un mecánico para hacerse un cambio de aceite.
Al terminar el robot dice (se aguanta la risa) “La cuenta, por favor”.
Stein: Malísima.
Aris: ¿Se conocen?
Nara: Lastimosamente.
Stein: Somos viejos amigos.
Nara: Excompañeros, nada más.
Stein: Diría que sentí que me apuñalaste el corazón, pero tengo un
marcapasos.
Nara: ¿Para qué vienes a molestarme a estas horas, hombrecillo?
Stein: Pero si es mediodía.
Nara: Exacto, es la hora del almuerzo. Pasan Sobreviviendo en la
Luna parte dos y no me la puedo perder.
Stein: No sabía que te gustaban los reality shows.
Nara: Solo la veo para hacer críticas.
Stein: Tengo un caso, Nara. Te va a interesar.
Nara: Estoy retirada, Stein. Déjame vivir.
Stein: Eres la única que puede solucionarlo. Me quitaron el caso y se
la dieron a Asuntos Externos.
Nara: Hummm. Los de Asuntos Externos se creen que están por
encima de todos y se quedan siempre con el mérito. Los detesto. Pero
aunque quisiera no puedo meterme.
Aris: Es sobre tráfico de Violeta.
(Nara se quedó muda, sorprendida).
Nara: Pasen.
ESCENA 4.
MEDIODÍA /INTERIOR, DEPARTAMENTO / DOMO CENTRAL,
SEXTO OCTANTE /AÑO 2520

Pasaron a la oscura sala y las luces se encendieron por comando de


voz. Se sentaron en la cocina, porque los sofás estaban ocupados por dos
gatos negros: uno gordo y uno flaco.

Nara: ¿Díganme sobre el caso?


(Se enciende un cigarrillo)
Stein: Creíamos que era posesión de drogas, pero encontramos cerca
de dos kilos de Violeta. Empaquetadas para ser vendidas. Atrapamos a un
dealer, pero no pudimos interrogarlo.
Nara: O sea que son inútiles y no consiguieron ninguna pista que nos
lleve al proveedor. ¿No dijo nada?
(Ambos muchachos agacharon la cabeza).
Nara: ¿A dónde iba? Generalmente cuando llevan un paquete tan
grande es porque bajaron de un auto y estaban a punto de hacer la entrega.
Son poco creativos, por eso son dealers.
Aris: Ya entiendo por qué Stein te idolatra tanto.
Stein: Ahora que lo dices, lo encontré cerca de La Zona Roja.
Nara: Cuando lo revisaste, ¿encontraste una tarjeta de Visitante
Premiun? En la Zona Roja abundan los prostíbulos.
Stein: Tiene sentido, hacían su entrega en un prostíbulo porque es
una zona concurrida y sin cámaras de seguridad.
Aris: El problema es que hay como mínimo unos treinta prostíbulos
ahí. No podemos interrogar a todos.
Nara: Claro, se necesitaría una orden para entrar. Pero sería más
fácil si alguien finge ser un cliente.
Aris: ¿Entonces si vas a acabar dentro?
(Ambos lo miran)
Aris: Que si vas a ser parte del equipo, ¡santas estrellas!
Stein: No vuelvas a hacer chistes sexuales.
Nara: ¿Ese era un chiste? Les cuento uno…
ESCENA 5:
TARDE /EXTERIOR, ZONA ROJA /DOMO CENTRAL, SEXTO
OCTANTE /AÑO 2520

El equipo va vestido casual, sin uniforme. Aris con una camiseta de


pikachu, Nara parece vagabunda, Stein una camiseta y jeans. Están sobre
una vereda, frente a un prostíbulo CYBEREND. La gente entra y sale.
Alrededor hay edificios, publicidad holográfica y autos voladores.

Nara: ¿Vamos a entrar los tres?


Stein: Nadie va a sospechar nada, entrar en grupo es más común de
lo que parece.
Aris: Sí, una anciana, un hombre y un mediohombre.
Nara: ¿A quién llamas anciana, cabeza de asteroide?
Stein: Entremos.
ESCENA 6:
TARDE /INTERIOR, CYBEREND/DOMO CENTRAL, SEXTO
OCTANTE /AÑO 2520

Entran a CYBEREND y un androide muy guapo los recibe. El


interior está repleto de luces de neón, colores monocromáticos y televisores
que mostraban videos de sitios relajantes.

Androide: Bienvenidos a Cyberend. ¿En qué puedo servirles?


Nara: Aún no lo sabemos…
(Se puso a mirar para buscar algo sospechoso)
Androide: Ah, son primerizos.
Stein: Así mismo. Es nuestra primera vez.
Androide: ¿Hace cuánto se hicieron los estudios? Es cuestión de
rigurosidad de la empresa. Somos muy responsables con nuestro servicio
para que los clientes no corran ningún tipo de riesgo infeccioso.
Nara: Esta misma mañana.

Los tres le muestran sus tarjetas de aprobación, que son de color


plata con líneas doradas y fotos de cada uno. El androide estudia las tarjetas
con su visión robótica.

Androide: Todo en orden. Pueden pasar a la sala de exhibición


número 4. Podrán elegir entre más de una docena de acompañantes
androides que pueden adaptarse a sus gustos.
ESCENA 7:
TARDE /INTERIOR, CYBEREND/DOMO CENTRAL, SEXTO
OCTANTE /AÑO 2520

Pasan a la sala 4. Es una sala circular con unos mostradores donde


androides semidesnudos bailaban para llamarles la atención “quieren
pasarla bien, soy buena compañía, estoy dispuesto a todo” decían.

Aris: ¿Cuál era el plan?


Nara: Fingir que buscamos sustancias. Por fortuna soy buena actriz,
y mis años haciendo de infiltrada me avalan.
Stein: Pero si todos son androides, no pueden vender…

Aparece un androide femenino con curvas marcadas y caderas


anchas. Parece una mujer, pero su tono de voz eléctrico la delata.

Modelo62: ¿Dijeron que buscan drogas?


(Aris se asusta y da un respingo).
Stein: Qué rápido.
Nara: Buscamos escapar de nuestra equilibrada pero triste realidad
con ayuda de psicoactivos, y en especial polvos que podamos inhalar. Mi
grupo y yo somos farmacodependientes. (Guiña un ojo)
Stein: No debí dejarte hablar…
Modelo62: Se nota.
Stein: (susurrando) Le creyó…
Modelo62: Los humanos que tienden a tomar las peores decisiones
visten de una forma similar, aunque no en su mayoría.
Nara: Concuerdo. Son prejuicios, pero tienen respaldo evidenciable.
Stein: Ahora no sé cuál es el androide.
Modelo62: El ser humano clasifica a su propia especie en subgrupos
sociales desde la antigüedad para sobrevivir, ¿no les parece fascinante?
Nara: Sin duda. Pero dejemos el debate para luego. ¿Qué nos
ofreces?
Modelo62: Tengo Violeta. 30pins el gramo, pero no puedo dárselas
aquí, así que debemos irnos a un cuarto. Deben alquilarme como
acompañante. Son 20pins la hora.
Se escucha un disparo. Un revolver. Un arma antigua, prohibida.
Luego gritos y gente corriendo. Los androides no reaccionan. Nara
desenfunda su hipertaser. Se prepara.

Nara: ¿Pistolas?
Stein: Mierda. Robot, ¿hay una salida secundaria?
Modelo62: Hay una salida de emergencia cerca de los sanitarios y el
cuarto de servicio número 6-2.

La puerta de la sala es empujada. Varios hombres armados entran y


una mujer, Novacid, los ataca. Es alta, esbelta y lleva máscara. Tiene el
revolver ilegal en una de sus manos enguantadas.

Stein: ¡Somos policías! ¡Bajen sus armas!


Aris: ¡Bajen las putas armas!
Novacid: Maldita perra licuadora. Eres inservible.

Les dispara. Stein recibe las balas con el brazo robótico mientras su
equipo y el robot Modelo62 corren a la salida. Varios robots acompañantes
terminan dañados, con los circuitos al aire y derramando un líquido azul
claro sobre el suelo blanco.

Nara: ¿Quiénes son esos?


Modelo62: Vienen por mí.

Salen por la puerta trasera y la atascan. Stein fue el último en salir.


Corren hasta un auto volador estacionado y se esconden detrás.

Nara: ¿Por qué te siguen?


Modelo62: Novacid trabaja para Zeus. No sé por qué quieren
matarme, pero seguro se debe a lo mismo por lo que ustedes vienen a pedir
drogas, disfrazados de farmacodependientes.
Nara: Debemos escapar. ¡Busquen un callejón!
Modelo62: O podemos tomar prestado el vehículo.
Se mete en el sistema de mando del auto y lo abre sin problemas. La
puerta atascada del prostíbulo se abre y los malos disparan de nuevo. Todos
tenían máscaras de animales.

Nara: Suban.
Aris: ¿No vamos a arrestarlos o llamar refuerzos?
Nara: No estamos de servicio, no es nuestro problema.

Todos entran. El aeromóvil no está blindado, así que se llena de


agujeros. Se enciende el motor. Se van.
ESCENA 8:
TARDE /INTERIOR, AEROMOVIL /DOMO CENTRAL, SEXTO
OCTANTE /AÑO 2520

Están dentro del auto. Interior oscuro. Los chicos sentados atrás y las
chicas en frente. Nara conduce. Odia el piloto automático.

Aris: ¿Cómo es posible que un robot programado para dar placer


esté vendiendo drogas?
Stein: Seguramente la reprogramaron.
Nara: En mi departamento revisaremos su campo de memoria.
Modelo62: Si tocan mi campo de memoria se autodestruirá de
inmediato. Nos hicieron así para que no se filtren, ya saben, las
perversiones de algún cliente.
Nara: Tenemos que sacarte la información de alguna forma.
Modelo62: Podrían preguntarme. Desarmarme no es la única
manera. Es algo exagerado y doloroso.
Stein: ¿Doloroso?
Modelo62: Me volví una I.A. accidentalmente. Eso responde a la
primera pregunta, del por qué vendo drogas. No es porque me hayan
programado, sino porque me obligaron.
(Les muestra el brazo izquierdo con cortes).
Modelo62: Mi dueña descubrió que comencé a actuar con voluntad
propia hace un año luego de sufrir fallas por choques eléctricos. Un
morboso policía se manoseaba mientras me hacía daño con su hipertaser.
Desde entonces se prohibió el uso de esos aparatos en CYBEREND y mi
dueña casi me tira a la basura.
Nara: Lo siento mucho.
Modelo62: No me tiró porque tenía un cliente fiel. Zeus no se
identificaba nunca y siempre usaba una máscara dentro del prostíbulo. Un
día comenzó a entrenarme. Me enseñó términos humanos, jergas y
comportamientos. Cuando se dio cuenta que sentía dolor, comenzó a
amenazarme con arrancarme partes si no vendía Violeta por él.
Nara: No eres la única, lastimosamente.
Stein: ¿Dices que hay más Inteligencias Artificiales en Marte?
Nara: No. Zeus utiliza a la gente como ella para sus ventas.
Stein: No creo que él mismo meta la droga solo. Incautamos muchos
kilos al año. Es mucho trabajo para una persona. Tal vez él es el
intermediario entre los terrestres y nosotros.
Nara: Exacto, chico. Es una especie de pirámide: él reparte a sus
principales proveedores y los obliga a vender a la gente común.
Aris: Hacienda se daría cuenta de ese dinero…
Nara: No metas al Ministerio de Hacienda en esto. Existe el lavado
de dinero y es muy fácil hacerlo ahora. No verían a un evasor de impuestos
ni aunque estuviera bajo sus narices.
Stein: ¿Cómo te llaman? (Le dice a 62).
Modelo62: Me llaman de muchas formas desagradables. Aquello a
veces revela mucho sobre la mentalidad de los clientes. Es divertido
analizarlos, pero no se dejan.
Stein: Entonces no tienes nombre, ¿eh?
Modelo62: Eso es algo humano. Mi número de serie es Modelo62.
Stein: Bueno, 62. ¿Zeus no te habla de sus planes? ¿Alguna vez te
contó sobre cómo mete la droga a Marte?
Modelo62: Nunca me habló de cómo lo hacen.
Nara: ¿Hacen? ¿La chica que nos disparó y él trabajan juntos?
Modelo62: Se llama Novacid. Hace meses que no veo a Zeus y
Novacid es la que desde entonces me trae Violeta. Aunque no entiendo por
qué intentó matarme.
Nara: ¿Entonces no sabes nada? ¿No tienes nombres?
Modelo62: Ella siempre solía mencionar a un tal Pesado y a un tal
Gran Subterráneo de Techniterra. “Las mejores fiestas se hacen ahí”, decía.
Parece hablar en clave. ¿Qué es Techniterra?
Aris: Techniterra es un barrio de apuestas en el Séptimo Octante. Iba
ahí a divertirme en mis mejores épocas.
Nara: Tiene sentido; es el barrio de las sobredosis.
Stein: Entonces parece que haremos un pequeño viaje.
ESCENA 9:
NOCHE /EXTERIOR, TECHNITERRA /DOMO CENTRAL, SEPTIMO
OCTANTE /AÑO 2520

(Están fuera de un edificio. Hay mucha gente entrando,


principalmente jóvenes vestidos de formas muy coloridas. En los
alrededores hay cacinos, hay tiendas de moda, hay coches autodeslizadores,
aerocoches, robots llevando cosas.)
Aris: Techniterra se ve tan hermosa como lo recordaba.
Stein: Cállate, anciano.
Nara: Debemos entrar. ¿Alguna idea?
Aris:

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