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El Ejecutivo al Minuto

El Ejecutivo al Minuto es un sencillo relato que contiene conceptos aparentemente


fáciles de implementar que convierten al ejecutivo promedio en una persona
eficiente, es decir, genera el trabajo requerido en el tiempo solicitado y con la
calidad especificada. Algo, en términos prácticos a veces complicado de hacer,
sobre todo porque esto se logra mediante la colaboración del personal.

En su camino encontró jefes duros y otros bondadosos. Pero no eran lo que


buscaba o no le compartían sus secretos. Finalmente, en una ocasión escuchó
sobre un director del que la gente decía que le gustaba trabajar con ese hombre y
que, juntos, conseguían resultados.

Existen muchas técnicas y tácticas hasta cierto punto manipuladoras para lograr
que la gente cumpla con los objetivos de la gerencia. Se tienen los sistemas de
incentivos, las prestaciones, bonos por resultados, etc., todo lo anterior como una
retribución externa al mérito.

El planteamiento que hace el autor es el reconocimiento desde adentro, es hacer


sentir al empleado como un ser humano capaz de crear, de lograr, de hacer que
las cosas sucedan y funcionen, y aporta al crecimiento del individuo la satisfacción
de cumplimiento, favoreciendo la espiral virtuosa y ascendente del crecimiento.
Hacer uso de metodologías conductuales humanizadas nos acerca más a la gente
y a ganarnos su confianza. Sobre todo cuando somos empáticos y sinceros sobre
lo que deseamos obtener de los demás “El líder eficaz es sincero, sabe
exactamente lo que quiere que haga la otra persona, es empático, considera los
beneficios que le traerá a la otra persona hacer lo que el líder está sugiriendo,
hace coincidir estos beneficios con los deseos de la otra persona y al hacer el
pedido, destaca estos beneficios”

Algunos de los puntos que se comentan son:


 Lema: Las personas que se sienten satisfechas de sí mismas logran
buenos resultados.
 No tomar decisiones por sus subordinados.
 Volverse un Director al Minuto. Esto es dedicar el menor tiempo con la
gente posible para lograr resultados.
 Primer secreto: La previsión de Objetivos de un Minuto. Consiste en
acordar las necesidades que hay que satisfacer y debe expresarse de tal
manera que quepa en una sola hoja de papel. Se formula una por cada
objetivo. Se utiliza el principio del 80-20 (priorizar) y solo se establece un
Objetivo de un Minuto para el 20% relevante. Esto incluye definir los medios
para la realización, las normas de actuación.
o Concretar los objetivos.
o Prever los medios para su realización práctica.
o Escribir en una sola hoja de papel, no más de 250 palabras.
o Leer y releer el objetivo. No debe tomar más de un minuto cuando se
haga.
o Dedicar al menos un minuto al día a revisar como marcha la tarea.
o Cerciorarse que la ejecución práctica concuerda con el objetivo.
 Segundo secreto: Los Elogios de un Minuto. Dedicar tiempo a la gente, al
inicio. A la hora de definir la tarea y la responsabilidad.
o Lema: Ayude a la gente a alcanzar su máxima eficacia. Sorpréndala
mientras hace algo bien.
o Decir a la gente que se les dará su opinión, sin rodeos, sobre la
marcha del trabajo.
o Elogiar inmediatamente cuando la gente lo merezca.
o Decir de manera concreta qué es lo que se hizo bien.
o Expresar la satisfacción por el trabajo bien hecho y como eso
beneficia a la organización y al resto de los colaboradores.
o Hacer una pausa para que perciban la satisfacción sobre el trabajo
bien realizado.
o Animar a que continúen procediendo del mismo modo.
 Tercer secreto: Las Reprimendas de un Minuto. Esto es reaccionar
oportunamente cuando una persona que sabe hacer una tarea comete un
error. Siempre comprobando de antemano los hechos.
o Avisar al persona que les hará saber claramente cuando trabajen
bien, pero también cuando lo hagan mal.
o Primera parte de la reprimenda:
 Realizarla de inmediato.
 Mencionar en concreto lo que se hizo mal.
 Comunicar lo que se piensa respecto a lo que se hizo mal.
 Hacer una pausa para que perciban la molestia o
insatisfacción sobre la tarea mal realizada.
o Segunda parte de la reprimenda:
 Dar la mano o una palmada en la espalda para expresar que
se encuentra de su lado.
 Recordarle que le tiene en gran estima.
 Reafirmar que lo tiene en buen concepto, pero que no es
posible elogiar el trabajo.
 Hacer ver que cuando la reprimenda se terminé no habrá más
por ese concepto.
 Lema: «El mejor minuto del día es el que se invierte en el personal«.
 Recomendación a la gente: Invierta un minuto en examinar sus objetivos,
en comprobar el rendimiento de su tarea, en comparar la adecuación de su
trabajo con sus objetivos.
 Recomendación al director: Las previsiones de objetivos determinan
ciertos comportamientos. Las consecuencias (elogios y reprimendas)
refuerzan esos comportamientos.

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