Está en la página 1de 2

Los aceites esenciales de flores y plantas son el 

eje fundamental de la
aromaterapia. Se trata de sustancias que, dado su potente olor,
pueden utilizarse como ambientadores e inundar el hogar de una
fragancia de lo más agradable. Incluso se dice de ellos que tienen
propiedades medicinales.

 
Por ello, ya queramos poner unas gotas en un humidificador, elaborar
champús y suavizantes caseros o prepararnos baños relajantes,
debemos tener en casa una buena variedad de esencias de este tipo.
Aquí queremos explicar en detalle qué son, cuáles son sus cualidades
y cómo elegirlas.

Qué son los aceites esenciales


Los aceites esenciales, también denominados aceites volátiles o
esencias, son sustancias líquidas oleosas extraídas directamente de
las hojas, las raíces, las flores, los tallos de las plantas o la madera de
los árboles. Para ello, es necesario aplicar técnicas de prensado o
arrastre en corriente de vapor de agua.

EC
El aceite esencial se encuentra en el interior de la planta de forma
natural, aunque en muy poca cantidad. De media, representa
solo entre el 0,1 % y el 1 % de su peso seco. De ahí su gran valor.
Suele ser secretada por células oleíferas, pelos glandulosos o
cavidades secretoras de sus estructuras histológicas especializadas.

 
Esa sustancia destaca, principalmente, por contar con un aroma muy
potente. De hecho, su uso principal es como aromatizante. Igual de
contundente es su sabor, si bien es cierto que no suele ingerirse salvo
en casos muy puntuales.

Propiedades de los aceites esenciales


Para definir sus propiedades es necesario, en primer lugar,
explicar cómo actúan los aceites esenciales en el organismo según la
aromaterapia. Principalmente, estas sustancias penetran al organismo
a través del contacto con la piel o por el olfato. Esto genera un impulso
en el sistema circulatorio o respiratorio que envía una señal al límbico,
lo que afecta positivamente a las regiones cerebrales asociadas con
los procesos vitales básicos y las emociones.

Pueden utilizarse como ambientadores, pero hay


quien les atribuye propiedades medicinales

 
Dicho esto, según la variedad de aceite esencial del que estemos
hablando, será posible disfrutar de los siguientes beneficios:

 Relax. Por ejemplo, el aceite esencial de lavanda reduce los


niveles de excitación y estrés cerebral.
 Suavización del dolor. El incienso consigue este efecto
analgésico.
 Reducción de la inflamación. Ofrecida por los derivados de
cítricos como el limón y la naranja.
 Reactivación de la circulación sanguínea. Originada por el
romero y el ciprés.
 Estimulación orgánica. La esencia de albahaca y de menta
pueden ayudarnos a sentirnos más activos.
 Cicatrización. Favorece la reparación natural de las estructuras
naturales de la piel. Los mejores ejemplos son los aceites
esenciales de geranio y de rosa mosqueta.

También podría gustarte