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• Grupo segundo: PENSIONES: Establecimientos que no reúnen las condiciones del grupo de
hoteles y se clasifican en dos categorías, identificados por una y dos estrellas
La empresa hotelera, como cualquier otra, es un sistema abierto, con una organización
habitualmente lineal, en la que pueden diferenciarse sin dificultad los subsistemas de
aprovisionamiento, de producción, comercial, administrativo y financiero.
Objetivos de mercado
Todos los hoteles nacen con la idea de concurrir en un mercado determinado, entendiendo por
tal, el tipo de clientes que pretenden captar. Como “objetivos de mercado” pueden plantearse, en
primer lugar, la consolidación de la clientela del tipo de mercado elegido – cliente vacacional, de
negocios, congresos y convenciones –, etc. En segundo lugar, el mantenimiento en el tiempo de
dicho mercado. Y, por último, la permanente inquietud de búsqueda de nuevos mercados, en
cuanto a la obtención de pequeñas cuotas de participación en ellos, con el fin de poder adaptarse
lo más rápidamente posible a los mismos, en el sentido de minimizar el tiempo que transcurre
entre la caída del mercado en el hotel opera normalmente y el aumento de cuotas de
participación en dichos mercados alternativos.
Objetivos de adaptación
Los objetivos de adaptación deben plantearse necesariamente en toda empresa hotelera, pero
más a nivel de cambios en el proceso productivo que a niveles de reconversión. La adaptación en
cuanto al proceso productivo puede sintetizarse en dos grandes apartados:
1. Ductilidad del mismo para acoplarlo a los gustos cambiantes de los clientes con los que
opera un hotel.
Objetivos de producto
Como objetivos principales en cuanto al producto resultante de la explotación, podemos
establecer:
4. Adopción del precio de venta para cada servicio más conveniente en cada temporada, de
modo que se maximice el beneficio de la explotación a largo y muy largo plazo.
Objetivos comerciales
Los objetivos comerciales son inherentes a la imagen que se pretende dar del producto en el/los
mercados en que se vaya a operar. Es importante reseñar que las acciones comerciales y de
promoción nunca deben iniciarse al tiempo que comienza el proceso productivo sino con un año o
más de antelación, debido a que, en hotelería, por diversas circunstancias, los efectos de las
mismas nunca son inmediatos.
1. Lanzamiento de la imagen del hotel y del producto ofrecido por el mismo con eficacia,
plasmada en la idoneidad de la campaña en cuanto a los mercados en que ésta deba
efectuarse, y en las condiciones de precio-calidad-diferenciación que deben establecerse
para conseguir la efectividad deseada.
4. Coordinar las diferentes campañas de imagen, de modo que con un coste razonable y
teniendo en cuenta el tiempo de efecto de las mismas, se conjuguen las campañas de
promoción intensivas con las de mantenimiento. Para ello será fundamental establecer
con suficiente anticipación y fiabilidad el comportamiento futuro de la demanda,
aplicando uno u otro tipo de campaña en función de estas previsiones.
Entre los objetivos sociales de la empresa hotelera, debe hacerse hincapié en lo importante que es
en este tipo de industria mantener la estabilidad en el empleo, ya que esta propicia una mayor
capacitación profesional del personal, factor de producción fundamental y pilar básico en cuanto
al mantenimiento y progresiva mejora de la calidad de los servicios.
Como objetivos políticos deben establecerse, las buenas relaciones con medios de comunicación a
nivel local, el cuidado y la preservación del medio ambiente, estableciendo acciones que no
degraden y tiendan a mejorar el mismo, el mantenimiento de relaciones de cordialidad con todos
los poderes políticos, sindicales, fácticos, etc. y la cooperación con la política
turística institucional tanto del país como de la región, propugnando formas de operación que no
vayan en contra de la misma.
PRINCIPIOS DE LA ORGANIZACIÓN:
DISEÑOS ORGANIZATIVOS:
Matricial: que combina la división por subsistemas empresariales con la división por
departamentos según las tareas a realizar.
En caso de que el número de hoteles pertenecientes a la cadena sea muy elevado y estén
dispersos por diferentes áreas geográficas, se pueden crear divisiones de negocio (por ejemplo,
división Europa, división América, división Asia, ...), estableciendo las direcciones funcionales una
serie de objetivos para cada división y controlando y dirigiendo éstas cada uno de los hoteles
pertenecientes a la división.
Además de esta estructura intencionada y organización formal, también se suele encontrar una
organización informal, bien sea por lazos de amistad, por relaciones de compañeros dentro de
cada departamento, etc.