Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
D’Annuncio “Influencer”
D'Annunzio puede ser considerado el primer "influencer" de la sociedad de
masas, pero con una aparente paradoja subyacente: despreciaba a las masas...
Así como despreciaba el mercado (en nombre del arte puro), y sin embargo,
mejor que nadie, era capaz de entender y explotar todo su potencial
promocional.
Era 8 años más joven que Pascoli, otro rostro del decadentismo italiano: dos
figuras antitéticas y a la vez complementarias, también por la forma en que
interpretaban de manera personal la poética simbolista derivada del francés y
la lección del clasicismo.
D'Annunzio no habría sido "D'Annunzio" si hubiera mantenido su verdadero
nombre: Gabriele Rapagnetta. Ya era su padre quien adoptó el apellido más
noble D'Annunzio de su tío adoptivo: su padre era un rico terrateniente, pero
también era un dongiovanni y un derrochador (características que legará a su
hijo).
En 1889 publicó "Il piacere", la primera (y más famosa) de sus muchas novelas.
Tenía 26 años (Verga publicó en ese año su "Mastro don Gesualdo", mientras
pascoli estaba a punto de publicar "Myricae").
D'Annunzio, sin embargo, tuvo que abandonar Roma para escapar de los
acreedores, y pasó los años 90 en Nápoles, donde publicó nuevas novelas y
colecciones poéticas, pero sobre todo descubrió la filosofía de Nietzsche y la
música de Wagner (autores que serán instrumentalizados por el
nacionalsocialismo alemán). Forjó nuevas relaciones y tuvo una hija con una
princesa siciliana.
Entre los continuos traslados, estaba el encuentro con el Duse, que acercó a
D'Annunzio al mundo del teatro.
Allí D'Annunzio compuso sus obras maestras poéticas (los tres primeros libros
de los Laudi), y la novela "Il fuoco" (cuya protagonista femenina, Foscarina, está
inspirada en Duse). La relación terminó y D'Annunzio tuvo muchos nuevos
amantes.
La villa fue requisada y el poeta se vio obligado a huir a Francia, donde fue
recibido con honores por salones parisinos y círculos intelectuales (conozca a
Gide y Proust). Lavorò a opere teatrali in francese e collaborò con il Corriere
della Sera.
El incidente no le impidió, sin embargo, lucirse con las famosas hazañas del
"soldado poeta": la burla de Buccari y la huida sobre Viena, dos actos
imprudentes y provocativos contra el enemigo, explotando las "armas" de la
propaganda.
Al final del conflicto fue uno de los más ardientes partidarios de la "victoria
mutilada" (suya era la consigna "O Italia o morte").
Pero más tarde fue socavado por un "duce" políticamente más hábil (20 años
más joven): Benito Mussolini.
Siempre fue muy crítico con la alianza con Hitler, a quien consideraba un
"payaso feroz", un plebeyo loco. A D'Annunzio no le gustaba mucho la cultura
germánica, se sentía más "francés".
La última reunión con Mussolini tuvo lugar en 1937 (el año anterior a la muerte
de D'Annunzio) e incluso en esa ocasión probablemente tuvo la oportunidad de
criticar la alianza con Hitler.