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1. INTRODUCCIÓN
Con la aparición del tiristor y del IGBT se han mejorado en rendimiento y tamaño
los equipos que funcionan por los procedimientos citados, y se ha posibilitado la
regulación de cualquier motor de c.a. mediante la alimentación con frecuencia y tensión
variable. El principal inconveniente con que tropieza el control de motores de c.a. es el
precio y complicación del convertidor electrónico, más elevado que para un regulador de
c.c..
Existen otros dos puntos importantes relacionados con la característica de par del
motor, concretamente el par de arranque (Mst) y el par de bloqueo o par máximo (Mmáx).
Esta es la característica de par obtenida al conectar el motor de inducción con la red de
suministro, es decir con una tensión y frecuencia fijas.
Figura N° 1
Para regular el par tendremos que actuar, por tanto, en dicha característica,
siendo una aplicación el uso de un convertidor de frecuencia que haga variar la frecuencia
y la tensión de la red manteniendo la misma relación entre ellas. Existen en el mercado
reguladores que cumplen esta relación, como es el caso de los reguladores de velocidad
de DANFOSS. Esto hace que el campo magnético giratorio del motor tenga una fuerza
constante, pero sin embargo girará a una velocidad variable con la frecuencia. Salvo la
velocidad del campo magnético las otras características del rotor permanecen sin cambio.
Por consiguiente, la característica de par mantiene su aspecto, simplemente se desplaza
paralelamente a sí misma en el sentido horizontal, en función de la frecuencia (figura 2).
Figura N° 2
Figura N° 3
Las tres características de par que representan un interés son las siguientes:
M = Constante
En la figura 4, podemos observar las dos curvas características de esta carga, siendo
la curva 1 la ideal, o sea, sin tener en cuenta la fricción de los líquidos, y la 2 la característica
de carga con par de arranque y fricción debida a líquidos.
Figura N° 4
Figura N° 6
Son frecuentes las aplicaciones industriales del motor de inducción que exigen la
parada más o menos brusca. Otros motores, por razones de seguridad personal, exigen la
parada prácticamente inmediata seguida de una inversión del sentido de giro. El frenado
puede llevarse a cabo mediante frenos mecánicos, aunque normalmente es más utilizado
el freno puramente eléctrico, existiendo básicamente tres métodos:
Figura N° 7
El par de frenado puede ser fácilmente regulado al valor deseado eligiendo una
resistencia rotórica conveniente. La figura n° 8 muestra el esquema de conexiones de
este tipo de frenado.
Figura N° 8
Los contactores de marcha directa y marcha inversa (C.D. y C.I.) están enclavados
eléctrica y mecánicamente para evitar que los dos estén cerrados simultáneamente. Los
contactores de cortocircuito de las resistencias rotóricas CR1 y CR2 están controlados por
un relé temporizado que fija la secuencia de su cierre. En el momento del cierre del
contactor de marcha directa C.D., la resistencia rotórica estará insertada en su totalidad y
sólo parcialmente, según las exigencias del frenado, cuando se trata del contactor de
marcha inversa C.I..
Evidentemente si se mantiene la conexión de marcha inversa del motor, éste no
se detendrá en la posición de reposo, sino que tenderá a girar de nuevo en sentido
opuesto al anterior, por lo que es indispensable añadir siempre un dispositivo que
desconecte automáticamente el motor de la red tan pronto tienda a iniciar un nuevo giro
en sentido opuesto. Estos dispositivos suelen ser detectores de parada de fricción,
detectores de parada centrífugos, dispositivos cronométricos, etc...
Con este sistema es posible retener una carga movida a una velocidad moderada.
La característica es muy inestable (fuertes variaciones de velocidad para pequeñas
variaciones de par).
Figura N° 9
Este tipo de frenado es interesante usarlo nada más que para motores de mediana
o gran potencia.
Basta para ello con mantener el estator conectado a la red y tan pronto la
velocidad del rotor exceda en un ligero porcentaje a la de sincronismo, la máquina pasa a
funcionar como generador entregando a la red la energía que el descenso de la carga
mecánica supone.
4.1. Introducción
Con el motor síncrono se obtienen velocidades precisas que vienen dadas por:
Por tanto, las únicas maneras de ajustar la velocidad son cambiar el número de
polos o la frecuencia. El cambio de velocidad por inversores de frecuencia variable se dará
detalladamente en el apartado de control de velocidad de motores de inducción.
Aunque por motor Brushless debe entenderse todo motor que no posea
escobillas, es habitual reconocer con la denominación DC-BRUSHLESS al sistema de
regulación constituido por convertidor de frecuencia, motor síncrono de imanes
permanentes y transductor de posición.
Figura N° 10
Este método simple necesita alterar el valor del ángulo δ para la producción de
par, con riesgo de pérdida de sincronismo si el valor de éste ángulo supera un valor límite
determinado, que depende de las características constructivas del motor.
Figura N° 11
En un motor DC-BRUSHLESS el ángulo δ permanece constante o sensiblemente
constante, de igual modo a como ocurre en un motor de c.c., siendo el par y la velocidad
respectivamente proporcionales a la intensidad y f.c.e.m. de inducido.
Ondulador/Rectificador Ondulador/Rectificador
mecánico (colector) electrónico (ondulador)
Una vez salvadas las dificultades que implica la necesidad de incluir una
realimentación de la posición del rotor, se puede afirmar que el control de velocidad de
un motor DC-BRUSHLESS es idéntico al de un motor de c.c., con las ventajas inherentes al
hecho de que en realidad se está controlando un motor de c.a..
- Menor mantenimiento.
- Mejor dinámica (menor momento de inercia).
- Ausencia de problemas de conmutación.
- Mejor rendimiento.
- Mayor potencia por unidad de volumen.
De igual modo a como se hace en los motores de c.c. y dada la analogía que con
ellos existe en el control de motores DC-BRUSHLESS, el tipo de control ejercido es por
corriente, imponiendo el valor y forma senoidal de ésta a la máquina.
- Encoder incremental.
- Encoder absoluto.
- Resolver.
Los dos primeros son dispositivos ópticos que incluyen electrónica en el propio
transductor, mientras que el tercero es un dispositivo electromecánico.
- Principio de la regulación.
Estas tres consignas de intensidad, tras ser comparadas con los valores reales
provenientes de los transductores de intensidad y pasar por los respectivos reguladores
de par, dan origen a las tres señales que, moduladas en ancho de impulso (PWM),
constituyen las órdenes de mando de los transistores de potencia.
Solidario con el eje del rotor del motor se instala un resolver al que se alimenta
mediante una señal senoidal de referencia de alta frecuencia. Esta señal da origen a dos
señales desfasadas entre sí 901 de la misma frecuencia que la de referencia y cuya
amplitud depende de la posición del rotor.
La salida del limitador constituye la señal de consigna de par (I*) que entra en el
generador de posición/velocidad y da origen a tres señales senoidales que son las tres
consignas de intensidad del motor. Estas señales, cuya amplitud es proporcional al valor
de la consigna de par (I*), están desfasadas entre sí 1201 autopilotadas por la posición del
rotor.
El valor real de las corrientes del motor es detectado por dos transductores de
intensidad de efecto Hall situados en dos fases del motor.
Las tres señales de intensidad (Iu, Iv, Iw) junto con las tres consignas de par (Iu*, Iv*,
Iw*) entran en tres reguladores de par del tipo PI con constantes fijas y dan origen a las
tres salidas (Ju, Jv, Jw) que entran en el bloque PWM.
5.1. Introducción
Nos vamos a referir a las dos últimas, ya que la primera depende de las
características constructivas del propio motor.
Los inconvenientes que presenta este método limitan su aplicación a unas pocas
aplicaciones. El primer inconveniente, es la imposibilidad de controlar la velocidad en
vacío; el segundo es que el par motor disminuye cuadráticamente con la tensión y por lo
tanto se reducen las cualidades del motor. Finalmente, las pérdidas por efecto Joule en el
rotor son proporcionales al deslizamiento, por lo que como hemos mencionado
anteriormente, este tipo de regulación se efectuará con rendimientos muy bajos.
Figura N° 13
Para cambiar el sentido de las fases se deben conmutar dos de ellas, bien
mediante conmutadores o añadiendo a dos fases del convertidor dos pares más de
tiristores en antiparalelo que conmutan electrónicamente las dos fases según se
representa en la figura 14.
Las fases R y S actúan mediante el disparo de los tiristores TH1, TH4 y TH3 ,TH6
respectivamente. Cuando se quiere cambiar la sucesión de fases, estos cuatro tiristores
quedan bloqueados y las parejas TH1'-TH4' y TH3'-TH6' entrarán en conducción
conectándose U a S y V a R.
Figura N° 14
Figura N° 15
La resistencia media entre los anillos rozantes del rotor varía entre cero y R,
dependiendo del ritmo de conmutación del tiristor activado por impulsos rápidos. Solo
son necesarios un tiristor principal y un tiristor auxiliar para la desconexión. Aunque bien
es cierto que también se podría utilizar únicamente un G.T.O., ahorrando así el tener que
utilizar dos tiristores.
Este método tiene dos de los inconvenientes que presentaba el método anterior:
La velocidad en vacío es cercana a la de sincronismo y el aumento del deslizamiento se
hace en detrimento del rendimiento, al aumentar las pérdidas. Pero presenta algunas
ventajas. Permite variar la velocidad de giro de una carga cualquiera ya que la parte
utilizada de la característica es siempre estable, y las pérdidas debidas al aumento del
deslizamiento se disipan en resistencias externas al motor, por lo que éste puede
desarrollar el par máximo a cualquier velocidad.
Figura N° 16
Figura N° 17
5.2.3. Recuperación de energía rotórica
Numerosos son los esquemas desarrollados con esta finalidad, todos los cuales, en
esencia, tratan de inyectar una tensión en el circuito rotórico, de magnitud y fase
apropiadas y regulables, y cuya frecuencia sea constantemente igual a la del circuito
estatórico.
En nuestro caso, nos vamos a centrar en el primer caso por tratarse de un sistema
más puramente electrónico.
Figura N° 19
Los impulsos de control del punto C de la figura se utilizarían para disparar los
tiristores, con corrientes iG1, iG2, ....., iG6.
El motor de inducción se construye para que trabaje con una densidad de flujo
dada, y, puesto que el par electromagnético es proporcional al flujo magnético, es
necesario que haya una alta densidad de flujo, pero sin que se produzca una saturación
excesiva, ya que si el hierro se satura magnéticamente el motor dejará de funcionar
satisfactoriamente y se recalentará rápidamente. Lo usual es trabajar en el codo de la
curva de magnetización para obtener el par más elevado con pequeñas pérdidas.
donde es una constante, el máximo flujo por polo y la tensión eficaz aplicada a
los bornes del motor. A fin de que el flujo magnético se mantenga constante con
cualquier frecuencia, la tensión aplicada al motor de inducción debe ser ajustada
proporcionalmente a la frecuencia, es decir, ésta ecuación expresa que la relación entre la
tensión y la frecuencia debe ser constante. A bajas frecuencias, es importante el efecto de
la resistencia estatórica frente a la inductancia, por lo que la relación V/f debe ser
incrementable para compensar el efecto de la caída de tensión que en ella se produce.
de donde:
Figura N° 20
Constituye una desventaja tener que alterar separadamente dos variables para
obtener un ajuste de velocidad eficiente. Para motores pequeños o cuando el margen de
velocidad es pequeño esto no tiene importancia pero para motores grandes es
imperativo variar la tensión de acuerdo con la frecuencia.
Figura N° 21
Para poder trabajar con el par máximo a cualquier velocidad se debe mantener el
flujo en su valor nominal y para ello al variar la frecuencia se debe variar la tensión para
mantener constante la relación tensión/frecuencia.
Estos convertidores utilizan (al igual que el convertidor que se usa en el ondulador
de corriente) el mismo principio básico (figura n° 22).
Figura N° 22
Figura N° 23
- Regulación de tensión.
- Control de la frecuencia.
Figura N° 25
La tensión en cada fase y entre fases tiene igual contenido de armónicos. Los
armónicos pares se cancelan debido a la simetría de estas ondas, también los armónicos
triples desaparecen debido a la conexión en estrella con neutro aislado del motor,
quedando sólo los armónicos de orden k, siendo:
donde representa un número entero.
Figura N° 27
La mejora puede verse claramente en la corriente del motor que tiene ahora una
forma más senoidal (figura n° 29).
Figura N° 29
- Limitación de la corriente.
- Frenado.
El motor actuará como generador al ser impulsado por la carga. Si el motor está
conectado directamente con la fuente de suministro de electricidad, la energía generada
se devuelve a la red y esto frena al motor.
Un convertidor de frecuencia tipo PAM no permite que esta energía producida sea
devuelta a la red porque el rectificador la bloquea. La energía llega sólo al circuito
intermedio y por tanto el frenado está limitado. Si se desea aprovechar el efecto de
frenado, la energía producida debe ser extraída del circuito intermedio.
- Ventajas e inconvenientes.
Y un inconveniente:
La tensión del motor es una señal de seis pulsos que se representa en la figura n°
26. Con un rectificador controlado se obtiene la ventaja de que la energía de frenado del
circuito intermedio puede ser devuelta a la red eléctrica. Sin embargo, esto requiere un
inversor de frenado con seis tiristores conectados en paralelo con el rectificador. El
método de funcionamiento es el mismo que en el inversor, pero la energía se devuelve a
la red eléctrica en lugar de suministrarse al motor (figura n° 31).
Figura N° 31
Y los inconvenientes:
Los problemas que presentan los convertidores PAM quedan reducidos utilizando
inversores que proporcionan a su salida tensiones formadas por pulsos de anchura
modulada (Pulse Wide Modulated, PWM). La topología del circuito de potencia (figura n°
32) es la misma que la utilizada para el inversor PAM, pero ahora los semiconductores son
puestos en conducción y bloqueados varias veces en cada ciclo de la tensión de salida.
Figura N° 32
Se observa que la tensión es constante hasta el inversor. Esto significa que tanto la
tensión como la frecuencia deben ser cambiadas en el inversor porque el motor debe,
como se ha indicado anteriormente, estar sometido a una tensión y a una frecuencia
variables.
Existen numerosos tipos de inversores PWM, la elección del más conveniente
dependerá sobre todo de los requerimientos que exija cada aplicación en concreto. En
general, los esquemas de control utilizados responden a dos grandes familias:
- Técnicas PWM portadora-moduladora o modulaciones generadas (Carrier
Reference Comparison, CRC).
Figura N° 33
Figura N° 34
- PWM senoidal.
j Armónico
1 15fc
15fc 2f
15fc 4f
15fc 6f
2 30fc f
30fc 3f
30fc 5f
3 45fc
45fc 2f
45fc 4f
45fc 6f
Siendo = 2, 3, 4, ...
Con esto se consigue simetría de semionda en la tensión entre fases y que las tres
tensiones entre fases sean similares.
- Muestreo uniforme.
Una característica del muestreo senoidal es que la anchura de los pulsos restantes
es proporcional a la amplitud de la señal moduladora en los instantes de conmutación.
Esto provoca dos importantes inconvenientes:
- Los centros de los pulsos resultantes no son equidistantes.
- La anchura de los pulsos sólo puede definirse mediante ecuaciones
trascendentes.
Figura N° 37
El método SHE tiene variantes como son limitar el campo de validez de los ángulos
de conmutación para la primera semionda a los primeros 601 y alguna otra que difiere de
la expuesta en los criterios de selección de los ángulos de conmutación, menos
importantes en la práctica.
Figura N° 38
El ondulador de corriente es un convertidor que consiste en un puente rectificador
trifásico controlado en la entrada, que alimenta una bobina para formar una fuente de
corriente continua ajustable. En este circuito intermedio no hay condensador. La misión
del condensador en los circuitos anteriores era mantener la tensión constante a una
frecuencia dada. Por tanto, la carga determinaba la corriente del motor. Aquí la situación
es inversa. La tensión variable procedente del rectificador controlado de la entrada se
transforma por medio de la bobina de valor de reactancia elevada, en una corriente
continua ajustable adaptada a la frecuencia. Por tanto, la carga es la que determina la
tensión del motor. Las cargas elevadas exigen tensiones de motor elevadas. Esta bobina
alimenta otro puente rectificador controlado, actuando como ondulador (inversor), que
va conmutando la corriente a las distintas fases del motor de inducción. Como en este
caso la red del lado de alterna del rectificador funcionando como ondulador es una red
pasiva, la energía reactiva necesaria para la conmutación de los tiristores se debe aportar
mediante unos condensadores de conmutación. El puente rectificador de entrada
controla la corriente que alimenta al motor y el puente ondulador controla la frecuencia
de estas corrientes, es decir se controlan el par y la velocidad
Una ventaja de este tipo de ondulador es su capacidad de reversibilidad:
Figura N° 39
Todos lo tiristores del rectificador se desconectan por sí mismos, porque el cambio
de polaridad que se produce a cada periodo de la tensión de la red polariza los tiristores a
un valor de bloqueo que da lugar a la interrupción de la corriente. Los condensadores del
inversor contienen la energía necesaria para la desconexión. El tiristor de una fase se
desconecta automáticamente cuando el tiristor de otra fase se dispara. Los diodos aíslan
los condensadores de la carga.