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El documento habla sobre el valor de uso de los productos creados por el trabajo humano. Explica que los objetos que satisfacen necesidades materiales o espirituales, ya sea para uno mismo o para un grupo, tienen valor de uso independientemente del sistema social. Sin embargo, cuando los productos se crean para intercambiarlos en el mercado, adquieren un valor además de su valor de uso como mercancías que pueden ser compradas o vendidas.
El documento habla sobre el valor de uso de los productos creados por el trabajo humano. Explica que los objetos que satisfacen necesidades materiales o espirituales, ya sea para uno mismo o para un grupo, tienen valor de uso independientemente del sistema social. Sin embargo, cuando los productos se crean para intercambiarlos en el mercado, adquieren un valor además de su valor de uso como mercancías que pueden ser compradas o vendidas.
El documento habla sobre el valor de uso de los productos creados por el trabajo humano. Explica que los objetos que satisfacen necesidades materiales o espirituales, ya sea para uno mismo o para un grupo, tienen valor de uso independientemente del sistema social. Sin embargo, cuando los productos se crean para intercambiarlos en el mercado, adquieren un valor además de su valor de uso como mercancías que pueden ser compradas o vendidas.
El trabajo humano crea productos, valores de uso, objetos que satisfacen
una necesidad, material o espiritual -si me tejo unos calcetines, o si en mi colectivo editamos un libro que queremos leer, o si en mi bloque construimos un aerogenerador para abastecernos de energía-. Y esto se da en cualquier tipo de sociedad. En estos casos no nos preguntamos cuánto valen esos productos, solo si nos sirven o no porque satisfagan una necesidad, o no. Cuando ese producto se estropea o pudre o ya no sirve, deja de tener valor de uso. Sin embargo, cuando el trabajo humano produce objetos para intercambiarlos en el mercado, (calcetines, libro o aerogenerador para venderlos) el producto creado es una mercancía que, además de valor de uso, tiene valor. Esto ocurre sólo en sociedades que tengan sistema mercantil (ya sea por trueque, por dinero…).