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Este segundo cuatri continué un poco el camino que había estado recorriendo el primero pero con

un desafío que sentí mucho más presente en este: el cansancio de la cursada y las 4 horas diarias
de viaje. Aunque no me afectó en términos de escucha a compañeros cuando pasan escenas, ni a
la hora de investigar los textos y roles (porque ya tengo incorporado el hábito de hacerme muchas
preguntas y buscar las respuestas para construir el sentido de la escena), si sentí que me modificó
mucho en las pasadas en tanto energía disponible. Muchas veces sentí que me he ido "vaciada" lo
cual considero que es por un lado positivo porque no tengo dudas de que en el aula lo doy todo
pero de Lunes a Miércoles (y con la cantidad de materias que hay en el medio y más horas de
viaje) me cuesta recuperar esa energía con la que comienzo la semana. Esto lo vi muy claramente
con las devoluciones de Claudio en cuanto a la voz (cosa en la que me enfoqué para solucionar
inclusive en vocal, donde recibí la misma devolución de la profesora) y en cuanto a que mi proceso
no pasara únicamente “por adentro”. Lo relaciono con el cansancio porque hasta ahora nunca me
lo habían marcado en ninguna materia y tampoco lo había registrado, pero este año que fue el
primero en el que volvimos a las materias presenciales y el primero que vivo al 100% la
experiencia después de la pandemia, noté mucho este agotamiento en la recta final.

De todas formas continué con el proceso, aprendí mucho de las devoluciones a otros, por ejemplo
una de las pasadas más productivas con Rosario fue hecha después de haber escuchado la
devolución (la misma clase) a Rocío y Guada. Fue muy divertido todo el proceso con Ro, desde
juntarnos a desglosar “La Ropa” y sus personajes a pensar en el armado de este patio que a pesar
de que fuera un lugar común, tuviera esas características que se iban desarrollando en el texto y
que abrirían mundo para nuestra imaginación a la hora de decir el texto y llevar a cabo las
acciones.

Me sentí en constante búsqueda con la compañera.

Después con Mateo también analizamos el mundo de Tina, buscamos las motivaciones de los dos
personajes y sus conflictos, personalmente imaginé este espacio un poco más allá de lo que
planteaba la obra, no quería quedarme en la idea común de espacio desorganizado, por eso
busqué los objetos que remitieran a la vida que ella tenía, tal como su vestuario distintivo de las
funciones y como su vida estaba influida y construida a partir de este trabajo y su gran conflicto: la
perdida de memoria.

En las pasadas me registré buscando, accionando, conflictuada y atravesada por las circunstancias
dadas, y también relacionándome con Mateo a pesar de que el proceso fuera un poco más
interior. Para la muestra quería negociar un poco más con esto último y agregarle más teatralidad
cómo me lo ha marcado Claudio muy claramente.

Finalmente en la muestra con Ro me sentí muy cómoda, estaba tan concentrada y relajada con el
trabajo que habíamos construido que solo disfruté la pasada y me di espacio para jugar, que fue
también lo que siento que hice en el año: trabajar, disfrutar y jugar. Fue un placer Claudio y
compas haber transitado este año con ustedes.

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