Liberalismo y Nacionalismo

SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XIX

Luego de las
revoluciones de A su vez, el
1848, se inició una surgimiento del
nueva etapa nacionalismo
política en Europa, reformuló el mapa
caracterizada por geopolítico del
la difusión del continente.
liberalismo político.

EL LIBERALISMO
POLÍTICO EUROPEO
Esta corriente de pensamiento tuvo sus
orígenes en el siglo XVII como
fundamento teórico del
parlamentarismo inglés. El filósofo
John Locke (1632-1704) definió los
principios básicos del liberalismo:

IGUALDAD PROPIEDAD COMO

LIBERTAD ANTE LA LEY
CRITERIO DE
DIFERENCIACIÓN SOCIAL

Reflejada en el Idea contraria a los "Solo los que poseían

reconocimiento de privilegios de los propiedades contribuían
los principales estamentos. al Estado", por ello,
derechos de las únicamente ellos tenían
personas. derecho a participar en
el sistema político.

En Francia, España y Alemania fue adoptado de forma interminente y con profundas

limitaciones; En países orientales, el predominio de las monarquías autoritarias de
Austria y Rusia no permitió la implantación plena de los principios del liberalismo. Los
focos del liberalismo político mundial fueron Gran Bretaña y Estados Unidos.

EL LIBERALISMO LA DEMOCRACIA
INGLÉS EN EUA

El primer paso se produjo con la La originalidad del sistema político

reforma electoral de 1832, que
amplió el cuerpo electoral: de 440
mil electores pasó a 700 mil, en un
total de 15 millones de habitantes.
Los partidos políticos, tories
(conservadores) y whigs (liberales),
fortalecieron su organización
interna e incorporaron en la política
a nuevos sectores sociales. Lo
siguiente fue la reforma electoral de
1857, bajo la dirección del 1er
ministro Benjamin Disraeli, que
signifcó el acceso al voto de un
tercio del electorado.
estadounidense estuvo en su
capacidad de combinar libertades
individuales con la regulación de
las relaciones sociales de forma
objetiva e igualitaria.
La Tradición Política Anglosajona:
permitió afirmar las libertades
individuales.
La Ausencia de una Sociedad de
Antigua Régimen: facilitó la rápida
instalación de una política
democrática.
 LA IDEOLOGÍA
NACIONALISTA
Las raíces del nacionalismo sostenían
que la soberanía de un Estado no
reposaba en una dinastía gobernante,
sino que el pueblo lo constituía. Así se
fue esbozando una idea de nación,
conjunto de individuos que conforman
una entidad política autónoma y
soberana.
Las guerras napoleónicas influyeron en el
surgimiento del nacionalismo: la defensa de la
patria ante la agresión extranejra despertó e
intensificó los sentimientos por la tierra natal en los
pueblos agredidos. España, Alemania, Italia y Rusia
desarrollaron ese sentimiento nacional frente a la
invasión napoleónica.

TIPOS DE NACIONALISMO

N. ORGÁNICO
Postulado por Johann Gottfried
Herder. Decía que la humanidad
estaba formada por pueblos y no por
individuos; los pueblos habían forjado
un particular denominado volkgeist o
espíritu del pueblo. Su posición se
reforzó en Alemania por la lucha de
liberación nacional que Prusia llevó a
cabo contra el expansionismo
napoleónico. Durante la ocupasión
francesa, el alemán Johann Gottlieb
Fichte agregó 2 ideas a la propuesta
de Herder: ningún poder externo
tiene derecho a imponer sus normas a
un pueblo, y todo pueblo que dispone
de un carácter cultural propio tiene el
derecho a convertirse en Estado
nacional.
N. LIBERAL
Caracterizada por el protagonismo
que concedía a la voluntad del
individuo para formar parte de una
nación. Estuvo influido por la
ilustración, en especial por el
pensamiento revolucionario francés.
Una nación se constituía por la suma
de ciudadanos iguales ante la ley,
como consecuencia de una desición
voluntaria de los miembros de una
comunidad política.

LAS POLÍTICAS NACIONALIZADORAS

Los Estados nacionales iniciaron un proceso de creación y afirmación de las
tradiciones culturales en el que asumieron como tarea principal la difusión de los
elementos y símbolos de identidad que debían conformar el “único y verdadero” ser
nacional.
Como en los Estados de Europa se hablabn diferentes lenguas locales, se trató de
institucionalizar y consolidar una única lengua nacional, así surgieron también las
academias oficiales que establecían las reglas de la lengua. Todas las lenguas
regionales fuera de la categoría de nacionales desaparecieron o se transformaron
en simples dialectos.
Para la construcción de una historia nacional, se rebuscó en el pasado marcas de la
"presencia inmemorial"de la comunidad nacional.

LOS MOVIMIENTOS NACIONALISTAS

MOVIMIENTOS
DISGREGADORES
Ocurrieron en grandes Estados integrados
por pueblos diversos, como los imperios
austrohúngaro y otomano. En el primero
surgieron movimientos nacionalistas, pero
no lograron disolver la unidad del imperio
en el siglo XIX. En cambio, el Imperio
otomano se fue fragmentando a lo largo
de ese siglo: Grecia se independizó en
1829; luego lo hicieron Serbia, Rumania,
Montenegro, Bulgaria y Albania.
MOVIMIENTOS
UNIFICADORES
Estos pretendían unir en un solo
Estado nación diversos territorios que
eran independientes o que estaban
bajo el dominio de otro Estado. Los
dos casos más destacados fueron las
unificaciones de Italia y Alemania.
 LA UNIFICACIÓN ITALIANA

PRIMERA SEGUNDA TERCERA

FASE
1849 - 1860
Desde 1948, Victor Manuel II de
Saboya, rey de Piamonte-
Cerdeña, dirigió el proceso
unificador. Se alió con Francia
para luchar contra Austria.
Austria fue derrotada en las
batallas de Magenta y Solferino
(1859). Pero el temor de Francia
a Prusia, aliada de Austria,
redujo el alcance de los
acuerdos: Piamonte solo recibió
algunos territorios de
Lombardía. En 1860 se produjo
la anexión de Parma, Módena y
Romaña a Piamonte, tras un
referéndum en estos territorios.
Luego se creó un Parlamento
común para las zonas de Italia
que dominaba Víctor Manuel II y
que se declaró Parlamento
italiano.
FASE
1860 - 1865
Se centró en la campaña de
incorporación de Sicilia. En
1860, los campesinos sicilianos
se sublevaron contra el rey de
Nápoles. Cavour aprovechó el
descontento campesino y envió
a Sicilia un contingente armado
llamado Expedición de los Mil
(cuyos integrantes se conocían
como “camisas rojas”) al mando
de Garibaldi. Sicilia en el sur, y
Las Marcas y Umbría en el
centro de Italia fueron
incorporadas al reino de
Piamonte. El nuevo Parlamento
reconoció a Víctor Manuel II
como rey de Italia.
FASE
1865 - 1871
La guerra de Prusia e Italia
contra Austria (1866) finalizó
con la derrota austriaca, que
cedió Venecia a Italia. Roma
quedó unida a Italia y
proclamada capital del nuevo
Estado en 1871 tras la derrota
de Francia ante Prusia en Sedán
(1870). Pero el papa Pío IX no
reconoció la anexión de Roma,
situación que se resolvió con los
Tratados de Letrán (1929), que
crearon el Estado de la Santa
Sede en Roma.

LA UNIFICACIÓN ALEMANA

A causa de las revoluciones de 1848, se instauró un Parlamento en Fráncfort que reunió

a los Estados alemanes con el fin de constituir un Estado unificado bajo los ideales del
liberalismo y el nacionalismo. Para ello, el Parlamento ofreció el trono al rey de Prusia,
Federico Guillermo II, quien lo rechazó porque no quería ver limitado su poder. Desde
entonces, Prusia lideró un proceso de unificación alemana de carácter conservador y
autoritario.

PRIMERA SEGUNDA TERCERA

FASE
1859 - 1865
Los Estados alemanes,
excepto Austria, habían
formado en 1834 una unión
aduanera (Zollverein) para
fomentar la cooperación
económica. Prusia era el
principal Estado alemán y
pretendía liderar la
unificación, para lo que inició
un proceso de
industrialización, de
reforzamiento del ejército y
de reformas políticas. En
1862, Otto von Bismarck fue
nombrado canciller de
Prusia. Era un defensor del
aumento de la autoridad del
rey frente a las tendencias
democráticas y al
predominio social de la
aristocracia terrateniente.
Dos años después, Bismarck
logró la anexión de los
ducados daneses de
Schleswig y Holstein a Prusia.
FASE
1866 - 1869
Prusia tenía una rivalidad con
Austria, el otro gran Estado
alemán. Bismarck,
aprovechando que Austria
afrontaba la rebelión de los
Estados italianos bajo su
dominio, propició la invasión
del ducado austriaco de
Holstein. La derrota de
Austria en la batalla de
Sadowa (1866) materializó la
anexión y la creación de la
Confederación de la
Alemania del Norte en 1867.
FASE
1870 - 1871
Bismarck firmó una alianza
militar con los Estados
alemanes del sur. Napoleón III,
emperador de Francia, se
oponía a que estos fueran
anexados por Prusia debido
al peligro que un país
unificado podía suponer para
Francia. Bismarck provocó
una guerra con Francia, que
fue derrotada en Sedán
(1870). Como resultado,
Alemania se anexó Alsacia y
Lorena, territorios que fueron
causa de disputa con Francia
hasta la Primera Guerra
Mundial. Nacía así el Segundo
Imperio alemán o II Reich,
cuyo rey era Guillermo I.