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Sedimentación

La sedimentación es el proceso por el cual los sólidos que se encuentran en


suspensión en el agua caen al fondo del recipiente donde el agua esté
contenida. La sedimentación es un proceso natural que ocurre por el efecto de la
gravedad. Aunque sucede en ríos y lagos, las personas hemos utilizado este
fenómeno para conseguir un agua más pura y segura.

Para que se produzca la sedimentación de las partículas es necesario que la


velocidad del flujo del agua sea menor de la velocidad de sedimentación de los
sólidos en suspensión que contienen.

La sedimentación se basa en la Ley de Stokes, según la cual las partículas más


grandes o más pesadas que el agua tendrán una mayor capacidad de
sedimentación. También influye la viscosidad del líquido, a menor viscosidad
mayor capacidad y velocidad de sedimentación.

La sedimentación es muy empleada en procesos de separación.

Una aplicación de especial interés se produce en el tratamiento de aguas


residuales, donde puede realizarse de dos formas: la sedimentación simple y la
sedimentación inducida o decantación.
La Sedimentación Simple tiene por objeto reducir la carga de sólidos
sedimentables cuyos tamaños de partícula son relativamente grandes. Mediante
esta operación se eliminan partículas simples, no aglomerables, por disminución
de la velocidad y turbulencia del fluido, es decir, la eliminación se da simplemente,
cuando la fuerza de gravedad que obra sobre las partículas prevalece sobre la
fuerza de arrastre del fluido. Esta operación se realiza en unidades conocidas
como "desarenadores" o "clarificadores".

La Sedimentación Inducida, se refiere a la sedimentación de partículas coloidales,


cuya coagulación o aglomeración, ha sido inducida previamente por agentes
químicos, tales como alumbre o hidróxido férrico, entre otros. Esta operación se
realiza en unidades llamadas decantadores. La decantación es inherente a la
coagulación y a la floculación.

Con la coagulación se obtiene una masa gelatinosa que atrapa o une a las
partículas, aumentando su tamaño para que sea más fácil atraparlas en el filtro, o
bien, en la etapa de sedimentación. Por su parte, con la floculación (que es el
paso posterior a la coagulación) se mueve o agitan las partículas para que se
unan y se formen masas mayores que sedimenten o sean filtradas con más
facilidad.

Filtración

La filtración de agua es un principio básico de utilizar un medio (membrana, malla,


pantalla u otro medio) para filtrar o atrapar físicamente las partículas en función de
su tamaño. Estos filtros se clasifican según el tamaño de los poros una malla o
membrana, que se mide en micras; cuanto menor sea el número de micras (es
decir, cuanto menor sea el tamaño de los poros), más retendrá sedimentos de
líquido que se esté filtrando.

La filtración es un proceso de separación sólido-líquido que se utiliza en


los sistemas de tratamiento de agua para disminuir la concentración de sólidos
suspendidos (partículas) que se encuentran en ella. Existen varios tipos de filtros y
cada uno de ellos tiene su aplicación dependiendo del tamaño y concentración de
partículas que a retener.

Filtración es la operación mecánica empleada para realizar separación de


partículas sólidas en sustancias líquidas mediante el uso de un medio permeable
que sea capaz de retener las partículas y permita únicamente el paso de líquidos.
La filtración, tiene diversas aplicaciones, especialmente en actividades cotidianas
de los seres humanos, así como también se usa en actividades industriales.

Funciones aireación

El uso de oxígeno en plantas de aguas residuales, con el objetivo de aumentar el


contenido de oxígeno disuelto, consigue mejores resultados de rendimiento
operativo y de la propia planta. El oxígeno puro logra un buen nivel de tratamiento,
reduce molestias, impulsa las cargas volumétricas y mejora la calidad,
sedimentación y concentración de los fangos.

Un bajo nivel de aireación puede provocar la muerte de peces, la permanencia de


gases que el agua absorbe como el dióxido de carbono y el sulfuro de hidrógeno,
la aparición de olores desagradables, producto del estancamiento del líquido,
enturbiamiento y la aparición de bacterias y algas; además, así sean marinos,
diversos organismos y especies necesitan del oxígeno para funcionar
correctamente.
La aireación en efluentes y lodos, son bastante importantes ya que ponen en
movimiento los nutrientes y separan el agua de los sedimentos alojados en el
agua sin tratar. Además, facilita la extracción de gases para la limpieza del agua.

Las plantas de tratamiento que utilizan aireación ahorran hasta un 60% de energía
en comparación con los sistemas que no utilizan este proceso.

La aireación ayuda a expulsar todos los gases y materiales orgánicos que


producen los malos olores en el agua. Así como los componentes perjudiciales
para la potabilización apropiada del agua.

El proceso de aireación beneficia la purificación y la separación de mezclas


heterogenias por diferencia de densidades. La oxigenación en el agua ayuda a
expulsar y drenar las impurezas.

Unitario

En los procesos de aireación encontramos entre otras las siguientes operaciones:


absorción y desorción.

Absorción: Entendemos como absorción aquella operación unitaria de


transferencia de masa que consiste en poner un gas en contacto con un líquido
para que éste disuelva determinados componentes del gas y quede libre de los
mismos.

Pueden observar un ejemplo de un proceso de absorción de gases de combustión


el objetivo de este proceso de absorción es la limpieza de los gases que pueden
visualizar que entran en la parte inferior de la torre donde tenemos una torre de
pulverización aquí el agua y la caliza que se encuentra pulverizando se en la parte
superior de la columna en las que el líquido entra a presión por un sistema de
ducha circulando el gas en sentido contrario todos estos equipos propician la
puesta en contacto de un gas y un líquido que no están en equilibrio realizando
una transferencia de masa entre ambos una vez que la solución de agua y caliza
descienden como lluvia se ponen en contacto con los gases para retirar a los
componentes el óxido nitroso y el dióxido de azufre.

Desorción: el proceso físico de separación en el cual una corriente de vapor


remueve componentes de una corriente líquida es aquel al cual llamamos
desorción puede suceder con un único componente así como con dos o más. Es

la operación unitaria contraria a la absorción. La idea de usar este proceso es


hacer en la fase líquida las condiciones de transferencia favorables para que uno o
varios componentes sean transferidos a la parte de vapor.

Estas operaciones se pueden llevar a cabo en columnas de platos y de relleno y


también en torres de pulverización, que son columnas vacías en las que el líquido
entra a presión por un sistema de ducha, circulando al gas en sentido contrario.

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