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Tema 6: Sistema de tratamientos de aguas residuales

Los sistemas de tratamiento de aguas residuales consisten en una serie de procesos calificados: físicos, químicos,
biológicos, que permiten extraer de las mismas todos los residuos efluentes del ser humano, eliminando así los
contaminantes depositados en el agua. El objetivo de estos sistemas consiste en remover las impurezas de tipo biológico
(virus, bacterias), de tipo físico (fango, polvo) y de tipo químico (metales pesados, sustancias químicas que puedan alterar
la composición); y buscar como resultado un agua tratada que pueda ser reutilizable.

El mejor enfoque de tratamiento general depende de la fuente y la naturaleza de los desechos, como las tasas de
producción, los componentes y las concentraciones relativas. Como tal, los procesos óptimos deben ser lo más simples
posible en diseño y operación, a la vez que sean eficientes para eliminar contaminantes clave y minimizar el consumo de
energía y los subproductos negativos. Las operaciones más complejas solo se usan cuando es absolutamente necesario.

El tratamiento general depende de la fuente y la naturaleza de los desechos, como las tasas de producción, los
componentes y las concentraciones relativas. Como tal, los procesos óptimos deben ser lo más simples posible en diseño
y operación, a la vez que sean eficientes para eliminar contaminantes clave y minimizar el consumo de energía y los
subproductos negativos. Las operaciones más complejas solo se usan cuando es absolutamente necesario.
Tratamiento preliminar

Es la técnica que comienza con un tratado preliminar, para preparar las aguas para un proceso más avanzado, destinado
a la eliminación de residuos fácilmente separables y en algunos casos un proceso de pre-aireación. Según Ahammad,
Graham y Dolfing (s.f.), el tratamiento preliminar se utiliza principalmente para proteger los equipo de bombeo y
promover el éxito de los pasos de tratamiento posteriores. Para estos procesos se emplean rejillas, tamices, microfiltros
y desarenadores.

• Rejas, tamices y microfiltros


Este proceso de tratamiento preliminar comienza en las alcantarillas de la ciudad donde se tratarán las aguas,
inicialmente con rejas que separan de las aguas los objetos grandes suspendidos o flotantes, principalmente desechos.
Las rejas se utilizan solamente en los desbastes previos, y tienen la finalidad de retener desechos que puedan dañar las
máquinas de bombeo, válvulas y aireadores, entre otros equipos (ver Figura 1).
Posteriormente a las rejillas se emplean los tamices, que funcionan de forma similar; sin embargo, la diferencia radica
en que las aberturas de los tamices son de menor tamaño, para así remover un porcentaje más alto de sólidos y evitar
atascamiento de tuberías.

Una vez en la planta de tratamiento, inician otros procesos como el uso de microfiltros, mallas de acero que tienen el
propósito de remover material orgánico de menor tamaño como algas.
Figura 1.Algunos modelos de rejas utilizadas en el tratamiento preliminar de aguas residuales

• Desarenadores
En el funcionamiento correcto de las plantas de tratamiento de aguas residuales es necesario separar las arenas y otros
materiales minerales transportados con el agua.
Debido a la gran cantidad de materia orgánica adherida en la arena, se usan desarenadores para removerlas. Actualmente
los desarenadores (ver Figura 2), se suelen airear para evitar la sedimentación de volátiles y reducir el contenido de
materia orgánica en la arena separada. La aireación también ayuda a desemulsionar las grasas y eliminar flotantes. El
tiempo de residencia es un parámetro básico para el diseño de los desarenadores aireados.
Existen varios tipos de desarenadores, como lo son el desarenador longitudinal y el de vórtice. El funcionamiento del
desarenador longitudinal se basa en la reducción de la velocidad y la turbulencia del agua, de modo que el material
solido transportado pueda depositarse en el fondo. Los desarenadores de vórtice se basan en la formación de un remolino,
inducido mecánicamente, que atrapa los sólidos en un tanque circular.
Figura 2. Modelo de un desarenador

Tratamiento primario
Los tratamientos primarios de aguas residuales eliminan ciertos contaminantes y reducen las variaciones de caudal y
concentración de las aguas que llegan a las plantas, y preparan las aguas residuales para su tratamiento biológico. Durante
este proceso, la velocidad horizontal del agua a través del asentamiento se mantiene a un nivel que proporciona a los
sólidos el tiempo adecuado para asentarse y el material flotante se elimina de la superficie. Por lo tanto, los pasos de
tratamiento primario consisten en tanques de sedimentación, de filtración y clarificadores o tanques de flotación, que
envían sólidos separados a las unidades de digestión y el sobrenadante

• Sedimentación
La sedimentación de aguas residuales consiste en la separación, por la acción de la gravedad, de las partículas suspendidas
cuyo peso específico es mayor que el del agua (Shamrock Water Treatment, 2003). Esta operación se emplea para la
eliminación de arenas, de la materia en suspensión en flóculo biológico en los sedimentadores secundarios en los procesos
de lodos activados, sedimentadores primarios, de los flóculos químicos cuando se emplea la coagulación química, y para la
concentración de sólidos en los espesadores de lodos.
En la mayoría de los casos, el objetivo principal es la obtención de un efluente clarificado, pero también es necesario
producir un lodo cuya concentración de sólidos permita su fácil tratamiento y manejo. En el proyecto de diseño de
sedimentadores, es preciso prestar atención tanto a la obtención de un efluente clarificado como a la producción de un lodo
concentrado (ver Figura 3).

Figura 3. Modelo de un sedimentador-desarenador

• Filtración
La filtración es una de las principales operaciones unitarias empleadas en el tratamiento de efluentes procedentes de
procesos de tratamiento de aguas residuales. Se emplea, en forma generalizada, para conseguir una mayor eliminación de
sólidos en suspensión y precipitados del agua a tratar
En los procesos de filtración se emplean cuatro tipos de material filtrante: filtros granulares, láminas filtrantes de papel o
redes de alambre, filtros rígidos y filtros compuestos de membranas semipermeables (ver Figura 4).
La operación completa de filtración consta de dos fases: filtración y lavado a contracorriente. Para una operación de filtración
semicontinua, la fase de filtración en la que se elimina la materia particulada se lleva a cabo haciendo circular el agua través
de un lecho, con o sin la adición de reactivos químicos; posteriormente, se debe lavar el filtro a contracorriente para eliminar
la materia acumulada. En una operación de filtración continua, ambas fases se realizan simultáneamente.

Figura 4. Tratamiento primario para aguas


• Flotación
La flotación es una operación unitaria que consta de la separación de partículas sólidas o líquidas del agua en proceso de
tratamiento. Este proceso se emplea para la eliminación de materia suspendida y la concentración de fangos biológicos en
aguas residuales. La aplicación de la flotación en las instalaciones de tratamiento se limita a la introducción de finas
burbujas de aire que se adhieren a las partículas y flotan hasta la superficie. De esta forma, es posible hacer ascender a la
superficie incluso partículas cuya densidad es mayor a la del agua.

Estas burbujas de aire se pueden añadir o formar según alguno de los siguientes tres métodos:
a) Flotación por aire disuelto. En estos sistemas, el aire se disuelve en el agua residual a alta presión, y luego esta
presión se libera hasta coincidir con la atmosférica. Al reducir la presión, el aire deja de estar en disolución y se concentra
en pequeñas burbujas distribuidas por todo el líquido.

b) Flotación por aireación. Las burbujas de aire se introducen directamente al líquido por medio de difusores o turbinas.
Este sistema resulta exitoso para el tratamiento de aguas residuales con tendencia a generar espumas
c) Flotación por vacío. Consiste en saturar de aire el agua residual directamente en el tanque de aireación o permitiendo
que el aire penetre en el conducto de aspiración de una bomba. Al aplicar un vacío parcial, el aire disuelto abandona la
solución en forma de burbujas diminutas (ver Figura 5).
Figura 5. Ejemplos de sistemas de flotación

Tratamiento secundario
El tratamiento secundario de aguas residuales se basa en una serie de procesos biológicos y químicos empleados para
remover la mayor parte de materia orgánica disuelta en el agua, transformando dicha materia en sólidos suspendidos que
son capaces de eliminarse fácilmente. El objetivo de éste tratamiento es lograr que se evacúe aproximadamente el 90% de
los contaminantes que siguen presentes después del tratamiento primario, el cual se basa en su mayoría en procesos
mecánicos. En este tipo de tratamiento, se utiliza una especie de tanque semejante como un embalse el cual proporciona
grandes descargas de agua expuesta al aire, actuando de diferentes formas según el proceso trabajado.
Entre los procesos de tratamiento secundario cabe resaltar los siguientes:
• Lagunas de estabilización

En tiempos pasados, las primeras lagunas de estabilización fueron embalses construidos como sistemas de riego. En vista
del resultado de este proceso y de la mejoría de la calidad del agua, se evaluó la posibilidad de utilizar las lagunas como un
mecanismo calificado para el tratamiento del agua. La laguna de estabilización es uno de los métodos más simples que
existe, el cual es empleado la mayoría de las veces debido a que tiene un bajo costo de inversión.

Las lagunas de estabilización están constituidas por excavaciones con un nivel determinado de profundidad (Por lo general,
poco profundas) cercadas por muros de tierra. Estas lagunas generalmente tienen forma cuadrada, algunas veces pueden
encontrarse de forma rectangular y son expuestas directamente al sol y al aire. El agua al ser descargada en la laguna
comienza un proceso de autodepuración en el que tienen lugar varios fenómenos: físicos, químicos y biológicos en su
totalidad. Las lagunas de estabilización también son las encargadas de la eliminación de una gran cantidad de
microorganismos patógenos que se encuentran en el agua residual

Las lagunas de estabilización se clasifican en cuatro tipos:


• Laguna aerobia: Es un tipo de laguna en la que la estabilización de la materia orgánica se realiza en presencia de
oxígeno disuelto (este puede suministrarse de forma natural o artificial). Esto significa que en ellas se produce la
degradación de la materia mediante las bacterias aerobias (ver Figuras 6 y 7).
Figura 6. Imagen de una laguna de estabilización

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La lagunas aerobias se clasifican dependiendo del método de aireación (natural o mecánica); su diferencia es que en la
natural el oxígeno es suministrado por intercambio de interface aire-agua y por acción de las algas, mientras que en la
mecánica (aireación), como el suministro de oxígeno por medio de la interface aire-agua no es suficiente, se necesita un
aporte de oxígeno por medios mecánicos. Las lagunas aerobias tienen aproximadamente de 1 a 1.5m de profundidad.

• Laguna anaerobia: La depuración en este tipo de laguna se realiza mediante la acción de bacterias anaerobias con
ausencia de oxígeno libre. En estas lagunas, el material orgánico suspendido se encuentra ubicado en el fondo y su
digestión anaerobia conduce a la descomposición de los diferentes ácidos orgánicos generados, dando paso al dióxido de
carbono y metano. El objetivo es retener la mayor cantidad de estos sólidos y eliminar parte de la materia orgánica
restante. Las lagunas anaerobias tienen aproximadamente de 2 a 5m de profundidad

• Laguna facultiva: En este tipo de lagunas, la estabilización ocurre tanto por condiciones aerobias como por condiciones
anaerobias. La estabilización de la materia orgánica ocurre de tal forma que, mientras que en la parte inferior se realiza la
degradación con ausencia de oxígeno disuelto (degradación anaerobia); en la parte superior o superficie se realiza la
aerobia, debiéndose ésta a la acción conjunta del viento y de la actividad fotosintética que pueda contener el cuerpo de
agua residual

• Laguna de maduración: Conocida también como laguna de pulimento, tiene el propósito de eliminar la mayor cantidad
posible de bacterias y microorganismos patógenos, además de actuar como efecto desinfectante para el agua residual. Las
lagunas de maduración están diseñadas para cumplir además otros objetivos, como son la eliminación excesiva de
nutrientes, la nitrificación, entre otros.
Suelen constituir la última etapa del tratamiento, por medio de una laguna facultiva primaria o secundaria. Estas lagunas
tienen aproximadamente de 1 a 1.5m de profundidad(ver Figura 8).

Figura 8. Esquemas de los diferentes tipos de lagunas

• Lodos activados
Los lodos activados constituyen un proceso biológico que permite el desarrollo de una depuración de origen natural,
basado en la eliminación de sustancias biodegradables que están disueltas en el agua residual, en la que los
microorganismos son capaces de pasar del agua residual contaminada a su estado natural. Este proceso ocurre a través de
condiciones aerobias, aireación prolongada y la circulación de fangos activos. Comienza cuando un grupo de
microorganismos es mezclado con una parte de la materia orgánica del agua, encontrando en estas sustancias su alimento.
Por ello, es necesaria la aireación prolongada. Debido a que este proceso es mecánico (aireación), puede producir el
oxígeno que el microorganismo adherido en el agua necesita. Después de esto, los microorganismos transforman los
contaminantes biológicos en biomasa y dióxido de carbono, eliminando a su vez compuestos como el amonio y otros
compuestos nitrogenados. Posterior a ello, los microorganismos oxidan la materia orgánica disuelta y los coloides se
coagulan formando sedimentos (ver Figura 9).
Figura 10. Proceso de tratamiento de aguas residuales con lodos activados
Este proceso biológico ocurre en una especie de tanque llamado reactor biológico, donde se produce la aireación prolongada
y la agitación. Posterior a este primer proceso de lodos activados, se lleva a cabo un tratamiento en el que en la superficie se
encuentra ya clarificada el agua, ocurriendo en la misma la filtración y la re-oxigenación para posteriormente ser reutilizada,
agrupándose en flóculos (Grumo de materia orgánica), que a su vez, constituyen los llamados lodos activados.

• Filtros percoladores
El filtro percolador es un mecanismo utilizado en el tratamiento de aguas residuales basado en la interacción y agitación de
las bacterias depositadas y las sustancias contenidas en el interior. Las bacterias realizan el trabajo de intercambiar o
degradar las sustancias por otras de menor riesgo. El objetivo del filtro percolador es poner en contacto las bacterias con las
sustancias predichas por medio de la distribución del agua en zonas donde se encuentren las bacterias. Los filtros
percoladores pertenecen a un tipo de reactor de crecimiento biológico o asistido. El filtro percolador se describe como un
relleno cubierto de sedimentos, específicamente “limo biológico” a través del cual se percola el agua residual, donde el
resultado del efluente se obtiene en el fondo del filtro. Por lo general, el agua se distribuye en forma de pulverización sobre
el lecho del relleno mediante un mecanismo rotativo del flujo.
Tratamiento Terciario
La finalidad de los tratamientos terciarios es eliminar la carga orgánica residual y aquellas otras sustancias contaminantes
no eliminadas en los tratamientos secundarios, como por ejemplo, los nutrientes, fósforo y nitrógeno.

La reutilización de agua residual mediante tratamientos terciarios es una buena alternativa para el ahorro de agua y reducir
considerablemente el consumo. Para ello es fundamental adecuar el agua de salida de la depuradora a unos parámetros
adecuados para su uso con otros fines como el riego del jardín debido a que, fundamentalmente, el agua depurada
presentará cierto contenido bacteriológico y por tanto necesita ser desinfectada.

Existen varios métodos de desinfección de agua que pueden ser complementados con una filtración apropiada estudiando
cada caso concreto por separado en función del tipo de agua residual y las necesidades concretas

• Desinfección
El objetivo principal de los procesos de desinfección en el tratamiento de aguas residuales es la destrucción o
desactivación de microorganismos patógenos que puedan encontrarse en ellas.

Agentes desinfectantes
Los agentes desinfectantes que se usan comúnmente en el tratamiento de agua potable son: (1) cloro libre, (2) cloro
combinado (cloroaminas), (3) dióxido de cloro, (4) ozono y (5) luz ultravioleta.
• Cloración
Cloración mediante medición rédox, se trata de mantener el agua depurada en un depósito final de distribución con un
contenido adecuado de cloro libre para evitar la proliferación de microorganismos con el objetivo de hacerla apta para su
reutilización. Existen varias formas de cloración del depósito que pueden pasar por un sistema automático de medición y
control de la dosificación de cloro libre en el depósito mediante sonda de cloro libre o de rédox o dosificación de cloro
proporcional al caudal de agua depurada mediante la instalación de un contador-emisor de impulsos.

La cloración del agua residual es el sistema más sencillo y económico para un tratamiento terciario de reutilización de agua
para riego de jardines y plantas. Como desventaja cabe destacar el hecho de que requiere el empleo y manipulación de un
producto químico como el hipoclorito de sodio. Además, ciertas plantas ornamentales, hortalizas o cultivos frutícolas
pueden ser susceptibles a ser dañadas a partir de ciertos niveles de cloro libre. También cabe destacar que este sistema
supone siempre el empleo de un depósito exclusivo para realizar la cloración ya que siempre es necesario un tiempo de
contacto adecuado del agua clorara para asegurar la desinfección (ver Figura 11).
• ozonización
El ozono es un poderoso oxidante y desinfectante con una velocidad de esterilización superior a la de un tratamiento
convencional de cloro aumentando su eficacia. Esto permite tratamientos con ozono con tanques de contacto muy
reducidos ya que únicamente son necesarios unos tres minutos de tiempo de contacto para asegurar la desinfección (ver
Figura 12).

Figura 12. Sistema ozono

Además, para el tratamiento de agua residual para su reutilización en riego y agricultura, el ozono aporta una mayor
oxigenación a la raíz de la planta a la vez que le transmite su carácter desinfectante. Los resultados son cultivos con un
crecimiento más rápido con mayor productividad y evitando plagas y enfermedad.
• Radiación ultravioleta
En este caso la desinfección se realiza mediante un equipo UV, Figura 13, que proporciona una desinfección inmediata y
más efectiva que la cloración. Otra ventaja añadida es que no requiere de depósitos de contacto ya que la desinfección se
realiza de forma instantánea mediante el paso de agua por el equipo de tratamiento ultravioleta lo que favorece este tipo de
tratamiento terciario cuando no se disponga de espacio suficiente para un tratamiento con cloro o con ozono. Para asegurar
el buen funcionamiento del equipo ultravioleta es necesario un correcto sistema de filtración para eliminar turbidez y
asegurar una transmitancia adecuada de la radiación ultravioleta en el flujo de agua a tratar.
• Desnitrificacion-nitrificacion

El proceso de nitrificación-desnitrificación NDN, tiene como objetivo básico la eliminación de nitrógeno que hay en un
residuo. Se trata de un proceso microbiológico en el cual el amonio es oxidado por bacterias autótrofas a nitrato en
presencia de oxigeno y carbono inorgánico(nitrificación) y es, a continuación, este nitrato es reducido por bacterias
heterótrofas a nitrógeno molecular en ausencia de oxigeno y presencia de carbono orgánico (desnitrificación /ver Figura14
y 15).

Figura 14. Sistema de desnitrificacion

• Desfosforización
Los procesos de desfosforización consisten en la oxidación del fósforo y en la combinación de este con calcio y otros
componentes, los cuales se inyectan en profundidad, formando compuestos que se transfieren a la suciedad, y de este
modo, se remueven.
Figura 15. Proceso de desnitrificacion/nitrificacion
Figura 16. Etapas de una planta de tratamiento de aguas residuales

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