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MANUAL DE ESTUDIO

Semana 1: Etapas constructivas obras viales

Carrera: Técnico en Construcción


Módulo: Construcciones viales
Total de horas del Módulo: 66 horas
Índice

INTRODUCCIÓN ...................................................................................................................... 3
1. APRENDIZAJES DEL MÓDULO ........................................................................................ 4
1.1 Aprendizaje general del módulo. ............................................................................. 4
1.2 Aprendizaje esperado de la semana. ....................................................................... 4
2. CONTENIDOS .................................................................................................................. 5
2.1 Primera Unidad: Trabajos previos ........................................................................... 5
2.1.1 Localización y replanteo de obra ...................................................................... 5
2.1.2 Escarpe del terreno .......................................................................................... 8
2.1.3 Excavaciones ..................................................................................................... 8
2.2 Segunda Unidad: Subrasante ................................................................................... 9
2.2.1 Preparación de la subrasante ........................................................................... 9
2.2.2 Ensayo granulométrico ................................................................................... 16
2.2.3 Ensayo de compactación Proctor ................................................................... 18
2.3 Tercera Unidad: Base y subbase ............................................................................ 22
2.3.1 Bases ............................................................................................................... 22
2.3.2 Subbases. ........................................................................................................ 23
2.3.3 Ensayo de resistencia CBR .............................................................................. 24
3. ACTIVIDADES TEÓRICO-PRÁCTICAS............................................................................. 26
3.1 Primera Unidad. ..................................................................................................... 26
3.2 Segunda Unidad. .................................................................................................... 26
3.3 Segunda Unidad. .................................................................................................... 26
4. COMENTARIOS FINALES............................................................................................... 27
5. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS ................................................................................... 28
INTRODUCCIÓN

Las carreteras están construidas sobre franjas de tierra, el cual su uso y finalidad es permitir
la circulación de los vehículos de manera continua y permanente en tiempo y espacio de
forma segura y cómoda. Para eso la estructura de pavimento se construye sobre varias
capas de material correspondiente a la subrasante, bases y subbases. Por lo cual existen
trabajos de escarificación, nivelación y compactación de las diferentes capas de relleno del
terreno.

En la Unidad I, se mencionan los aspectos generales asociados a la preparación del terreno


de trabajo, en relación al despeje del terreno para proceder a los movimientos de tierra
necesarios, cortes y terraplenes relacionados al perfilado del paquete estructural.

En la Unidad II se aborda la subrasante, la cual consiste en un terreno natural, debidamente


perfilado y compactado. Por otra parte, en la Unidad III se abordan las bases y subbases,
que corresponden a las capas niveladas que recogen en forma directa cargas por la acción
del tránsito vehicular y la transmiten al subsuelo en forma uniforme.
1. APRENDIZAJES DEL MÓDULO

1.1 Aprendizaje general del módulo.

• Identificar sistemas constructivos presentes en proyectos viales asociados a


caminos, de acuerdo a especificaciones técnicas, procedimientos de trabajo y
ensayos de control.

1.2 Aprendizaje esperado de la semana.

• Definir los aspectos previos a la instalación de las carpetas de rodado, en la


construcción de un pavimento; trabajos previos, bases y subbases.
2. CONTENIDOS

2.1 Primera Unidad: Trabajos previos

2.1.1 Localización y replanteo de obra


Toda vía ha de tener una geometría determinada que permita su correcto
funcionamiento para la demanda de trasporte que debe satisfacer. Por sus
características de obra lineal, la geometría de las calles y pasajes normalmente se
adaptarán a la topografía del lugar mediante alineamientos horizontales y verticales
conformados por curvas, rectas, pendientes y gradientes, además de una sección
transversal que defina el ancho y cantidad de pistas de la vía

Por lo tanto esta partida consiste en la ubicación y trazado exacto sobre el terreno
expuesto en los planos; es decir, el establecimiento de los niveles de excavación,
taludes, pendientes transversal y longitudinal, referidos a la planimetría y altimetría
de diseño y aprobación por supervisor técnico.

Los equipos empleados deben ser de alta precisión, requiriendo exactitud en las
medidas y una adecuada señalización para marcar niveles, ejes y parámetros de la
vía.
En particular el alineamiento horizontal presenta el desarrollo en planta de la obra
vial compuesto de una sucesión de curvas, rectas y cruces con otras vías.

El desarrollo vertical desde el alineamiento se presenta a través del perfil


longitudinal. Este perfil corresponde a la vista en alzado de eje longitudinal de la vía.
Normalmente se traza a partir de un perfil topográfico del terreno por donde pasará
la vía, sobre el cual de definen las futuras pendientes y gradientes de los pavimentos,
además de las curvas verticales (cóncavas o convexas) en los encuentros de éstas.
Generalmente el perfil longitudinal tiene una escala horizontal diferente con
respecto a la vertical, llegando a ser en ocasiones de una relación 10:1. Dicho alcance
sólo tiene el objeto de poder presentarla en una gráfica adecuada a las dimensiones
de los planos normalmente utilizados.

Además de los alineamientos antes descritos, la geometría debe indicar con detalle
el futuro ancho de la vía. Esto se logra mediante la sección o perfil transversal del
proyecto. Si bien el alineamiento horizontal visto en planta permite definir el ancho
de la vía, la sección transversal se presenta a modo de plano de detalle indicando
claramente los anchos de faja, plataforma, calzada, aceras, veredas, espesores de
los materiales componentes de la superestructura, solución de cunetas, bombeo,
inclinación de taludes de corte y terraplén (cuando corresponda), sección
longitudinal de alcantarillas, etc.
2.1.2 Escarpe del terreno
Consiste en el desbroce, desbosque y limpieza del terreno, es decir, la remoción de
material inadecuado correspondiente a todos los árboles, arbustos, troncos,
matorrales, pastizales y la capa vegetal superficial del terreno a lo ancho y largo del
área de construcción cuidando no mover los puntos levantados por la topografía. La
operación se realiza con medios mecánicos o manuales, la disposición del material
retirado en un sitio es indicado por el contratante

2.1.3 Excavaciones
Comprenden la excavación y el emparejamiento de todos los materiales que
requieran este proceso en la zona donde debe formarse la subrasante de la vía. Las
excavaciones se realizan de forma mecánica o manual; de acuerdo a los
alineamiento, niveles y dimensiones, indicadas en los planos.

Todo pavimento requiere, además de sus propias bases de apoyo, una preparación
general del terreno que permita obtener tanto la resistencia adecuada como las
cotas del futuro perfil longitudinal. Estas cotas traducidas en elevaciones o
depresiones del terreno son el resultado de la ejecución de la infraestructura (u obra
básica) por medio de cortes (excavación) o terraplenes (rellenos).

Si la cota del nivel de subrasante se encuentra bajo el nivel de terreno se deben


ejecutar faenas de corte del terreno, es decir, sacar terreno hasta llegar al nivel
deseado.

Por otra parte si el nivel de subrasante se encuentra sobre el nivel de terreno se


deben ejecutar faenas de terraplén, es decir, colocar terreno hasta llegar al nivel
deseado.

Existe la posibilidad que el nivel de subrasante se encuentre en el punto medio entre


realizar corte y terraplén, en este caso la subrasante se dice que es mixta. Otro caso
se presenta cuando el nivel de subrasante se encuentre al mismo nivel del terreno
natural, en este caso sólo se realiza el rebaje necesario para lograr el perfil del
camino.

Toda utilización de material para rellenos puede ser usado de zonas de corte del
mismo proyecto, siempre y cuando cumplan con las características de resistencia y
especificaciones técnicas indicadas en el proyecto, de lo contrario se deberá recurrir
a material de empréstito que cumpla con estas indicaciones.
2.2 Segunda Unidad: Subrasante

2.2.1 Preparación de la subrasante


La subrasante se puede definir como la fundación o cimiento de los pavimentos, ya
que debe soportar las cargas que transmite el paquete estructural del pavimento,
además de darle sustentación. Se extiende hasta una profundidad en que no le
afecte la carga correspondiente al tránsito previsto.

Corresponde a una capa de terreno, el cual puede ser natural debidamente perfilado
y compactado, o puede ser un material de préstamos cuando el suelo natural es
deficiente en su capacidad de soporte por condiciones mecánicas e hidráulicas
identificadas en el estudio geotécnico, o por diseño geométrico de la vía a proyectar,
por ejemplo un suelo con un alto contenido de arcilla de alta plasticidad, con fuerte
cambios volumétricos debido a la humedad y con una deficiente granulometría sin
ninguna fricción homogénea y poca capacidad de soporte.

Entre mejor calidad se tenga en esta capa, es decir, que ofrezca un apoyo uniforme
(que los materiales que se coloquen sobre ella se acomoden en espesores
uniformes), con resistencia adecuada (y homogénea en toda la superficie para evitar
fallas en los pavimentos) y que mantenga sus propiedades bajo la acción del clima,
tendremos que el espesor del pavimento será mas reducido, obteniendo un ahorro
en costos sin dejar de lado la calidad.

Si la subrasante no cumple con los requerimientos de calidad mencionados, es decir,


cuando en estado natural el material de corte del lugar es de muy baja calidad o
inadecuado, se debe realizar un mejoramiento de suelo, es decir se requiere
estabilizar, para lo cual se corrigen las deficiencias para darle mayor resistencia al
terreno, o bien disminuir su plasticidad; y conseguir condiciones de humedad
adecuadas, y por consiguiente, aumentar su durabilidad.

La estabilización dependerá de la naturaleza del suelo y de que tan viable es a nivel


técnico y económico; en donde se puede reemplazar el terreno, de manera parcial
o totalmente, con materiales previamente aprobados, compactándolos para cumplir
con las especificaciones del terreno

Podemos encontrar

a) Estabilización mecánica: Que consiste en mezclar diversos materiales para


obtener uno nuevo
b) Estabilización química: Que consiste en mezclar el suelo con un aditivo,
generalmente cal o cemento, los cuales actúan física y químicamente sobre
el material

c) Estabilización con geosinteticos: Que consiste en materiales que buscan


cambiar o mejorar las características del suelo con el que interactúan

d) Construcción de un terraplén: Que consiste en un relleno que permite


levantar el nivel del terreno y brindar un apoyo adecuado a la estructura de
pavimento.

• Terraplén

En los terraplenes se distinguirán tres partes o zonas constitutivas:

− Base o cimiento, parte del terraplén que está por debajo de la superficie
original del terreno, la que ha sido variada por el retiro de material
inadecuado. La base tiene la superficie de contacto con el terreno.

− Cuerpo o núcleo, parte del terraplén comprendida entre la base y la corona


o coronamiento.

− Coronación (capa subrasante), formada por la parte superior del terraplén,


construida en un espesor mínimo de treinta centímetros (30 cm), salvo que
los planos del proyecto o las especificaciones especiales indiquen un espesor
diferente.
• Requisitos de los materiales

Todos los materiales que se empleen en la construcción de terraplenes deberán


provenir de las excavaciones de la explanación, de préstamos laterales o de fuentes
aprobadas; deberán estar libres de material en descomposición o meteorizado, libre
de materia orgánica, raíces y otros elementos perjudiciales como materiales de
características expansivas; ya que los cambios de volumen en un suelo expansivo
pueden ocasionar graves daños a las estructuras que se apoyan sobre éste, por esta
razón al construir el pavimento hay que intentar al máximo controlar las variaciones
volumétricas del suelo por causa de la humedad.

El material para la conformación de terraplenes, debe provenir prioritariamente del


material de las excavaciones de la faja del camino (compensación transversal o
propia y longitudinal, dentro de la distancia libre de transporte).

En caso que no puedan usarse los excedentes de corte se podrá usar material de
cantera, pozo lastrero o cauces de rio autorizado., siempre que resulte más
económico para el proyecto. En caso de encontrar material inadecuado bajo el
horizonte de fundación, este debe extraerse hasta la profundidad especificada en el
estudio de mecánica de suelos, reponiéndolo con el material apto y compactándolo
a una densidad no inferior al 95% de la densidad máxima compactada seca
(D.M.C.S.) del ensayo Proctor Modificado (NCh 1534/2), o al 80% de la densidad
relativa (NCh 1726), según corresponda.

Por material inadecuado ha de entenderse: rellenos no controlados, suelos


naturales con una Relación de Soporte de California (CBR), según NCh 1852, inferior
al CBR de la subrasante especificado en el proyecto, materiales con porcentajes de
arcilla perjudiciales para el comportamiento de la estructura -según su potencial de

hinchamiento-, suelos con materia orgánica, entre otros. Cuando la mecánica de


suelos arroje CBR de subrasante inferior al de diseño, será el proyectista quien
evaluará, en cada caso, la mejor solución en costo, rendimiento y facilidades
constructivas en función del clima, tiempo de ejecución y mejor estándar de
funcionamiento. Esto es fundamental para no paralizar la obra por indefiniciones
que se pueden prever en la etapa de estudio.

Por lo tanto, en caso que el material de excedente de corte no cumpla las


especificaciones de terraplenes o tengan un rendimiento bajo y no pueda ser usado
para la conformación de terraplenes; el Contratista realizará los sustentos del caso,
mediante ensayos de laboratorio, en caso que corresponda, para obtener mezclas
de materiales que cumplan.
El material, en definitiva, debe tener propiedades que produzca una superficie firme
y compacta. El equipo a usarse deberá ser el idóneo que garantice el afirmado. El
esparcimiento se hará en dos capas sucesivas de 15 cm cada una, humedecida y
uniformemente compactada, cumpliendo con las cotas de espesores en todas las
secciones de lo ancho y largo de la vía.

• Asentamiento por consolidación

Cuando sometemos al suelo a cargas y estas aumentan, se incrementa la presión


hidrostática (presión del agua) en los poros. El suelo, paulatinamente, irá liberando
la presión en los poros, expulsando gradualmente el agua que contiene. Esta pérdida
de agua produce un cambio de volumen (reducción), por lo cual es importante que
el suelo se encuentre bien compactado.

• Compactación

En la actividad de compactación se desarrolla con riego de agua para humedecer el


terreno con la cantidad de agua requerida para lograr la máxima comprensibilidad
del suelo y la adecuada humedad para el trabajo eficiente del vibro-compactador
para conseguir la máxima densidad.

El grado de compactación consiste en relacionar la densidad seca del suelo


compactado en obra, con la densidad máxima seca obtenida en laboratorio

Se deben utilizar materiales granulares no contaminados, de plasticidad mínima;


compactado entre el 95 y 100% de la máxima densidad seca obtenida. Es decir, el
ensayo de densidad en obra deberá estar por encima del 95 % del Proctor
modificado

Una buena densificación de la subrasante, es decir, mientras más compacto esté, se


puede lograr un buen comportamiento de la estructura de pavimento, evitando el
posterior asentamiento de consolidación.

Algunas consideraciones:

− El material y el espesor de la capa serán determinados por la maquinaria a


utilizar.
− Cada capa será humedecida para lograr el contenido de humedad óptimo. El
material de mejor calidad será utilizado en las capas superiores del terraplén.

− El número de pasadas que se requiere para obtener una compactación


adecuada depende de los espesores de las capas:

o Para un espesor menor a 25 cm sin compactar, el equipo deberá


efectuar un mínimo de 3 pasadas. Para un espesor de 60 cm sin
compactar, el equipo deberá efectuar un máximo de 8 pasadas.

o En suelos arenosos con finos poco plásticos los rodillos neumáticos


son los que rinden mejores resultados. En limos poco plásticos los
rodillos neumáticos también resultan eficientes.

o Para compactar grandes masas de arcilla el mejor método es el uso


de los rodillos pata de cabra.

o El material por compactar se deposita por capas, generalmente de


espesor comprendido entre 10 y 30 cm, siendo común de 20 cm.

• Ensayos para determinar las propiedades del material de la subrasante.

Para evaluar que tan efectiva es la subrasante para el proyecto vial, es decir si nos
sirve en su estado natural o si requiere algún tipo de mejoramiento, se deben
conocer las propiedades físico-mecánicas de los suelos que conforman la
subrasante. Esto es de vital importancia al momento de diseñar la estructura de
pavimento.

Para conocer dichas propiedades es necesario tomar muestras a lo largo de la obra,


para posteriormente en el laboratorio determinar sus propiedades, entre las cuales
se destacan:

− Granulometría, que nos permite conocer la distribución de los tamaños de


las partículas que componen dicho suelo. Este se determina mediante el
ensayo de Análisis granulométrico por tamizado. Este ensayo consiste en la
clasificación del terreno natural para compararlo con la clasificación de
materiales de suelos, de acuerdo con las normas ASTM D 422 / AASHTO T 88
− Plasticidad, que se define como la propiedad de deformarse
indefinidamente sin romperse al ser sometido a un esfuerzo que supere un
nivel dado. Esta se determina mediante el ensayo de límites de Atterberg.

Estos ensayos junto con la granulometría por tamizado se requieren para la


clasificación del suelo, en este caso su consistencia con respecto al contenido
de humedad. A estos contenidos de humedad en los puntos de transición de
un estado al otro son los denominados límites de Atterberg, de acuerdo con
las normas ASTM D 4318/ AASTHO T 89:

− Límite líquido: el suelo pasa de un estado semilíquido a un estado


plástico y es posible moldearse.

− Límite plástico: el suelo pasa de un estado plástico a un estado


semisólido y se produce el rompimiento.

− Límite de retracción o contracción: estado en que el suelo pasa de un


estado semisólido a un estado sólido y deja de contraerse al perder
humedad, según ASTM D 427/ AASHTO T 92.

− Clasificación de los suelos, que corresponde a una división en grupos


homogéneos con propiedades y características similares. Podemos
diferenciar: Clasificación AASHTO y Clasificación USCS (Sistema unificado de
clasificación de suelos). De estos dos, para obras viales se aplica la
clasificación AASHTO.
− Resistencia de los suelos, que se puede medir mediante el ensayo de
relación de soporte de California (CBR), Ensayo de plato de carga,
Penetración de cono dinámico, entre otros.

− Densidad y humedad, que nos permite determinar las características de


compactación de la subrasante, a través de la Densidad Máxima Compactada
Seca (DMCS), obtenida del ensayo Proctor, la cual corresponde a la mayor
densidad que puede alcanzar un suelo al ser compactado a la humedad
óptima.

Mediante esta prueba se puede determinar la compactación o densidad


máxima de un suelo o agregado en relación con su contenido de humedad.
Existen dos tipos de ensayo Proctor normalizados: Ensayo Proctor Estándar,
de acuerdo con las normas ASTM D 698 / AASTHO T 99, método C y el Ensayo
Proctor Modificado, de acuerdo con las normas ASTM D 1557 / AASTHO T
180, método D. La diferencia entre ambos ensayos radica en la distinta
energía utilizada, debido al mayor peso del pisón y mayor altura de caída en
el Proctor Modificado
Esta densidad obtenida en laboratorio se comprueba mediante la
determinación in situ de la densidad por el método de arena o densímetro
nuclear, la cual debe tener un cierto porcentaje con respecto a la DMCS.

Con los datos obtenidos se elabora un perfil estratigráfico, en el cual se detallan los
distintos tipos de suelos y a que profundidad se encuentran.

A continuación se presentan de manera general, dos de los ensayos relevantes para


caracterizar un terreno para ser usado como subrasante.

2.2.2 Ensayo granulométrico


El ensayo más común de la mecánica de suelos es el análisis granulométrico por
tamizado, basado en la norma AASHTO T27 T88 y ASTM D-422.

Es un ensayo que permite determinar el tamaño de las partículas o granos que


conforman un suelo y mostrar en porcentaje de su peso total la cantidad de granos
de diferentes tamaños que el suelo contiene.

Es un método de separación de las partículas de suelo basado en el tamaño de los


granos que lo conforman. Aplica para los suelos que pasan los distintos tamices
hasta el tamiz N°200, ya que los que pasan dicho tamiz se les aplica otro ensayo por
ser material muy fino.

¿Qué es un tamiz?

Es un utensilio, tipo malla, empleado para separar las partes finas de las gruesas de
una muestra. Está formado por una rejilla metálica que está sujeta a un aro.

Estos se clasifican según el número de mallas o agujeros que lo componen, los cuales
pueden separar la muestra en dos secciones: la que pasa a través de la malla y la
que queda retenida en él
• Serie de tamices

A los tamices, se les conoce mediante la abertura del tamiz, éste corresponde a la
distancia entre los ejes centrales de dos alambres continuos que lo componen. Las
mallas que conforman la serie fina se les denomina según el número de malla, el
cual indica la cantidad de hilos por pulgada o milímetro lineal que tiene la malla

• Equipos
• Consideraciones

− Según las características de los materiales finos de la muestra se puede ensayar


toda la muestra por la serie de tamices o por partes, después de separar los finos
por lavado. Para ello, se toma una porción del material y se introduce en un
horno, cuando se encuentre seca, se saca para examinar su resistencia con ayuda
de los dedos. Si se puede romper con facilidad los terrones y el material fino se
pulveriza, se puede realizar el ensayo sin previo lavado.

− El tamaño de la muestra depende de lo indicado según Manual de carreteras


sección 8.102. Una vez acondicionada se procede a realizar el ensayo.

− Se arma la serie de tamices en orden decreciente (de mayor abertura al mas


fino). Si se realiza de manera manual, se deben realizar movimientos laterales y
verticales, acompañados de vibración, simulando una circunferencia, de manera
que la muestra mantenga un movimiento continuo. Si se utiliza tamizador
mecánico, esta debe operarse por 10min. Si el ensayo se realiza por partes, se
cuenta con una porción retenida en el tamiz N°10 y otra que pasa dicho tamiz.
La porción que queda sobre el tamiz N°10 se le aplica el procedimiento anterior
y la porción que pasa se realiza un proceso de tamizado por lavado.

− Una vez culminado el proceso de tamizado, se procede a desmontar cada tamiz


de la serie, para pesar el material retenido en cada uno de ellos. Con estos datos
y cálculos correspondientes se obtiene la curva granulométrica, la cual en
conjunto con otros ensayos nos permite clasificar el suelo.

2.2.3 Ensayo de compactación Proctor


La resistencia de un suelo depende de que tan compacto se encuentre, es decir, que
tan juntos se encuentran los granos del suelo, a tal punto de no contar con espacios
vacíos (aire y agua). Esto se traduce en un suelo mas denso, por lo que mientras mas
compacto sea un suelo, más denso será.

La resistencia del suelo, a su vez, depende la cantidad de agua que contiene, ya que
el agua contenida en los suelos lubrica los granos, permitiéndoles deslizarse unos de
otros, mas fácilmente. Pero solo una cantidad de agua (humedad) permite el
movimiento de las partículas de los suelos y facilita su compactación.
Antes de ser empleado debe ser compactado entre el 95 y 100% de la máxima
densidad seca obtenida con el ensayo de Proctor. Por lo tanto, la finalidad del
ensayo Proctor, es determinar la cantidad óptima de agua, que permite la mejor
compactación para una energía dada.

El ensayo se basa en el hecho de que la compacidad del suelo es proporcional a la


densidad del terreno seco.

• Tipos de ensayos

Se cuenta con dos ensayos.

a) Proctor Estándar o normal (regido por la ASTM D-698)

b) Proctor Modificado (regido por la ASTM D-1557)

Se diferencian en:

− Número de capas y número de golpes por capa.

− Peso del pisón

− Altura de caída del pisón.

La elección del método está dada por las especificaciones propias de cada proyecto,
pero de manera general, dependerá de la energía de compactación requerida

El Proctor Estándar corresponde a una energía de compactación media, como por


ejemplo la que se alcanza en un terraplén. Por otra parte el Proctor modificado
corresponde a una energía de compactación mas importante, como la que se
requiere en las subrasantes o capas que conforman la estructura de pavimento

El Proctor modificado está limitado a suelos que pasen totalmente por la malla N°4
o que tengan un porcentaje retenido máximo del 10% en dicha malla, pero este 10%
debe pasar totalmente la malla 3/8”. Cuando existe material retenido en la malla
3/8” debe aplicarse el Proctor Estándar

• Equipos.

− Moldes de 4” de diámetro y 4,6” de altura o de 6” de diámetro y 6” de altura.


− Pisón o martillo, el cual se puede operar de forma manual o mecánica. Para
Proctor Estándar el pisón pesa 5,5 libras y para Proctor modificado, pesa 10
libras.

− Balanzas, hornos, recipientes, espátulas, bandeja metálica, regla

− Tamices de 2”, ¾”, N°4

• Procedimiento

− Se toma aproximadamente 2,5 – 3 kg de muestra. El tamaño de la muestra


dependerá del método aplicado.

− La muestra debe estar seca, por lo cual se extiende en una bandeja para que
las partículas se encuentren un poco separada y logren secarse más rápido.

− Una vez seco, se procede a tamizar, descartando todo material que sea
mayor a la malla N°4.

− Luego se mezcla la muestra con agua suficiente hasta obtener una muestra
ligeramente húmeda (que aún se desmorone cuando se suelte después de
apretarla con la mano)

− Se pesa el molde con la placa base, se divide la muestra según el número de


capas a usar (3 capas para Proctor Estándar y 5 capas para Proctor
Modificado)
− Se le adiciona el collarín al molde con el fin de evitar pérdida de material
durante la compactación.

− Se coloca el material en el cilindro, el cual se irá compactando capa por capa,


con el número de golpes requerido, dado por el correspondiente pisón (25
golpes por capa para el Proctor Estándar y 56 golpes por capa para Proctor
Modificado). El pisón se deja caer a una altura de 31 cm para Proctor
Estándar y 45 cm para Proctor Modificado).

− Después de la compactación se remueve el collarín de extensión y se recorta


cuidadosamente el suelo compactado que sobresalga en la parte superior
del molde, usando una regla metálica.

− Se pesa el molde con el suelo húmedo, incluyendo la placa de base

− El propósito de un ensayo de compactación en laboratorio es determinar la


curva de compactación para una determinada energía de compactación. Esta
curva considera en abscisas el contenido de humedad y en ordenadas la
densidad seca. A partir de ella, se podrá obtener la humedad llamada óptima
que es la que corresponde a la densidad máxima. Con estos resultados se
podrá determinar la cantidad de agua de amasado a usar cuando se
compacta el suelo en terreno para obtener la máxima densidad seca para
una determinada energía de compactación. Para cumplir este propósito, un
ensaye de laboratorio debe considerar un tipo de compactación similar a la
desarrollada en terreno con los equipos de compactación a especificar.
2.3 Tercera Unidad: Base y subbase

Se entiende por superestructura a las capas de material granular que se apoyan


directamente sobre la subrasante, incluyendo el pavimento. Estas capas, dependiendo del
tipo de pavimento utilizado (rígido o flexible) pueden ser dos; base y subbase, o
simplemente una (subbase). La subbase es la capa que se encuentra entre el nivel de
subrasante y la base, y se utiliza solo cuando el pavimento especificado es una losa de
hormigón (pavimento rígido). Cuando la solución de pavimentación considera asfalto
(pavimento flexible), la subbase debe complementarse con otra capa granular denominada
base, ubicada sobre ella. A su vez sobre la base se extenderá el concreto asfáltico para
conformar el pavimento, previa colocación de una imprimación asfáltica sobre la base
granular.

2.3.1 Bases

• Funciones

− Su función primordial es la de proporcionar un elemento resistente que


transmita los esfuerzos producidos por el tránsito, hacia la Subbase y la
subrasante, en una intensidad adecuada. Por lo que debe garantizar la
resistencia adecuada (CBR) y la permanencia de dicha resistencia con la
variación de las condiciones que se puedan presentar, como podría ser el
contenido de agua. (infiltración de napas)

− Permitir el drenaje del agua que se infiltra en el pavimento, a través de


drenajes laterales longitudinales.

− Reducir las deformaciones de tracción que las cargas por eje ejercen a la capa
de rodadura, haciendo más homogéneo el soporte del pavimento

− Reducir el espesor de la carpeta más costosa

− Muchas veces la base también debe trabajar como la sub base, respecto a la
doble función de drenaje mencionada anteriormente.

• Material

− Material granular.
2.3.2 Subbases.

• Funciones

− La función de la sub base, en un pavimento flexible, es puramente


económica, buscando así obtener un espesor, utilizando el material más
barato posible. Por lo que una de sus funciones es reducir el espesor de la
carpeta más costosa.

− Servir de transición entre la base y la subrasante; ya que el material de la


base es granular más o menos fino, (TM 1” a 1 1/2” chancado) y el de la sub
base es más grueso que el anterior, (TM 2” granular), de esta manera sirve
como filtro para evitar que el material de la base se incruste en la sub
rasante.

− Absorber las deformaciones que provienen de la subrasante y que pueden


ser perjudiciales para el pavimento general.

− Implicar una mejor capacidad de apoyo del suelo y su contribución a la


resistencia de la estructura a los esfuerzos solicitados.

− Absorber los cambios volumétricos ligados a los cambios de humedad.

− Servir, también, como drenaje para desalojar el agua que se infiltre en el


pavimento y para impedir la ascensión capilar de agua hacia la base,
procedente de la subrasante.

El material establecido como subbase debe:

− Ofrecer resistencia a la fricción.

− Presentar la capacidad de drenaje para asegurar la resistencia a la


deformación por los esfuerzos exigidos. La subbase puede funcionar como
drenaje cuando se le solicite para evitar que el agua que se infiltre en el
pavimento, llegue a la subrasante a producir cambios volumétricos.

Los cambios de volumen en el suelo por humedad pueden ocasionar graves


daños a la estructura de la capa de rodadura, por esto es necesario controlar
las variaciones volumétricas.

− Evitar la ascensión capilar del agua, que deja expuesta la capa de rodaduras
a mayor desgaste y fracturas por peso vehicular.
Podría construirse dicho espesor con materiales de alta calidad como en el caso de
la base, pero usualmente se hace aquella más delgada y se sustituye en parte por la
subbase que es de menor calidad, trayendo como resultado un aumento en el
espesor total del pavimento, pues es un hecho que cuando menor es la calidad del
material utilizado, mayor será el espesor necesario para soportar los esfuerzos
transmitidos. Por lo tanto la subbase debe estar constituida por material granular
de cantera separado por medios mecánicos (grava chancada), con la granulometría
adecuada para compactación y lograr la densidad máxima permitida.

Las gravas o rocas de la subbase se recomiendan no debe ser mayor de las 2/3 parte
del espesor, y conformada por la cantidad de finos que permitan la compactación
máxima y libre de materia vegetal, basura o terrones de arcillas u otro material
perjudicial.

2.3.3 Ensayo de resistencia CBR


No basta con especificar el grado de compactación de un suelo. Dos suelos
diferentes alcanzarán no solo densidades secas y humedades óptimas diferentes en
el ensayo de compactación, sino que el material al estar constituido por partículas
diferentes, tendrá un comportamiento en términos de ingeniería diferente. Por ello,
se hace necesario un parámetro adicional que considere la capacidad de soporte del
suelo en sí mismo para esas condiciones de compactación.

El ensayo de soporte de California se desarrolló por parte de la División de


Carreteras de California en 1929 como una forma de clasificar la capacidad de un
suelo para ser utilizado como subrasante o material de base en construcción de
carreteras.

El ensayo CBR (la ASTM denomina el ensayo simplemente un ensayo de relación de


soporte) mide la resistencia al corte de un suelo bajo condiciones de humedad y
densidad controladas. El ensayo permite obtener un número asociado a la capacidad
de soporte.

− CBR en laboratorio: Determina la capacidad soportante del suelo (Relación


de Soporte de California, por sus siglas en Ingles), de acuerdo con las normas
ASTM D 1883 / AASHTO T 193, en el cual se mide la resistencia al esfuerzo
cortante de un suelo (subrasante), sub base y/o base granular de un
pavimento, bajo condiciones controladas de humedad y densidad.

− CBR in situ o ensayo de Anillo de carga: Realizado únicamente en la


subrasante y sirve para correlacionarlo con el CBR en laboratorio.
• Diferencia entre base y subbase

En lo sustancial la diferencia entre ambas capas granulares radica en su calidad


estructural. Mientras que la base presenta valores de capacidad de soporte hasta
100% de CBR, la subbase alcanza valores cercanos al 60%. Esta diferenciación
obedece fundamentalmente una economía de costos del diseño a través de la
racionalización de los aportes estructurales demandados para resistir las cargas de
tránsito. En el caso particular de la subbase, como capa de apoyo directo de las losas
de hormigón, su bajo valor de CBR (50 a 60%) es más bien una condición necesaria
que permite un adecuado acomodo del hormigón, evitando que su elevada rigidez
genere cargas puntuales sobre un terreno con elevada capacidad de soporte. Caso
contrario sucede con el asfalto en donde los elevados valores de CBR mejoran el
apoyo de las capas granulares para este pavimento flexible.
3. ACTIVIDADES TEÓRICO-PRÁCTICAS

3.1 Primera Unidad.

a) ¿Cuándo se realiza un terraplén y cuando un corte, en relación a la posición de la


subrasante?

3.2 Segunda Unidad.

b) Mencione los ensayos de control de la subrasante para determinar su calidad como


material de relleno.

c) ¿De qué factores depende la eficacia de la compactación? ¿Cuáles de estos factores


se estudian en el laboratorio mediante el ensayo de Proctor?

3.3 Segunda Unidad.

d) ¿Qué diferencia hay entre base y subbase?


4. COMENTARIOS FINALES

A modo resumen, podemos definir como base y subbase; para ambas, como capas de
materiales granulares, que se colocan normalmente sobre la subrasante, para formar una
capa de apoyo para la base de pavimentos asfálticos y losas de concreto hidráulico.

Dicha subrasante, además debe presentar ciertas características asociadas a la calidad que
ofrece como material de soporte para las capas que conformarán el paquete estructural,
principalmente asociadas a la humedad, densidad y resistencia.

Finalmente, cabe destacar que la calidad final en la construcción de obras viales, como
cualquier otro tipo de obra, depende de las características del suelo sobre el que esté
fundado, por lo que es muy importante determinar correctamente las características físicas
y mecánicas de los materiales que conforman la fundación de dichas obras.
5. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

- Downey C. Hernán (s.f) Curso de obras viales I. Universidad Católica del Maule

- Inacap (s.f) Técnicas de construcción de pavimentos. Área de construcción,


Tipografías y obras viales

- Universidad técnica particular de Loja (s.f) Estructuras del pavimento.


Competencias técnicas en aseguramiento y control de calidad en obras viales

- Hoyos G. Rafael (2016). Supervisión técnica de construcción en vía de pavimento


rígido con reforzamiento continuo. Universidad Santo Tomás, Cali

- MINVU (2018) Código de normas y especificaciones técnicas de obras de


pavimentación. Serie: Estándares técnicos de construcción. Obtenido de
https://csustentable.minvu.gob.cl/wp-
content/uploads/2019/01/normas_pavimentacion.pdf

- Adames C. (s.f). Consideraciones geotécnicas en obras viales. Obtenido de


https://ingcadames.com/consideraciones-geotecnicas-en-obras-viales/

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