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La neurotransmisión es el proceso que usan las neuronas para comunicarse entre ellas. Los
impulsos nerviosos se transmiten de una célula a otra a través de la sinapsis.
La sinapsis puede ser de tipo química o eléctrica. En las sinapsis químicas existe una hendidura
sináptica que separa la terminación de la célula presináptica con la célula postsináptica.
Estas sustancias son conocidos como neurotransmisores que son almacenados en vesículas
sinápticas para luego ser liberados. Algunos ejemplos de estos neurotransmisores son la
acetilcolina, la serotonina, la dopamina y la noradrenalina.
Una vez que los neurotransmisores cumplen su función de transportar las señales de una neurona
emisora a una receptora, estos se desprenden de los receptores y quedan libres para después
unirse a otro receptor, metabolizarse a través de enzimas o algunas vuelven a la neurona emisora
por medio de un transportador que la ingresa de nuevo a la neurona para ser usada en futuras
ocasiones.
En una persona libre de alcohol, drogas o cualquier sustancia psicoactiva, el ciclo de liberación,
desintegración y reingreso de los neurotransmisores a la neurona se encuentra dentro de los
limites normales, por lo tanto, estas sustancias causan un desequilibrio en esto límites.
Podemos identificar varios factores como pueden ser los factores personales, sociales y globales.
Adolescentes que se muestran inconformes con su medio ambiente, tienen bajo rendimiento
académico, necesitan sentirse independientes y por consecuencia crean rebeldía son más
propensos a ser víctimas de estas sustancias.
Jóvenes con un bajo desarrollo personal que se manifiesta por bajo nivel de autocontrol, bajo
autoestima, baja autoconfianza son personas que se catalogan como de alto riesgo para el
consumo de las sustancias psicoactivas.
Dentro de los factores micro sociales podemos determinar que cada joven vive y se desarrolla en
un entorno interpersonal y social único, este entorno incluye a los padres, hermanos, compañeros
y algunos otros adultos que son importantes en la vida d ellos jóvenes.
El hecho de que los padres o personas con cierta autoridad, consuman drogas legales como
alcohol o tabaco favorece a que se adopte esta tendencia de consumo y pueda evolucionar a
drogas de abuso.
El interés por ser parte de un grupo social del joven y el desconocimiento de los efectos o
consecuencias que las drogas producen llevan al joven a su consuma, ya que la mayoría de esas
sustancias se obtiene por personas de su misma edad y no por personas mayores.
El entorno familiar es el más importante para el desarrollo de estos malos hábitos ya la falta de
comunicación entre padres e hijos favorece al consumo de estas sustancias por parte del
individuo.
Dentro de los factores globales tenemos la normalización del consumo de medicamentos para
tratar cualquier padecimiento médico, esto favorece a la creación de un mal hábito farmacológico.
La persona que se droga siempre es víctima de una situación social de la cual busca liberarse a
través de las sustancias psicoactivas.
Según la cantidad tipo y frecuencia del consumo de cierta sustancia serán los cambios
fisicoquímicos en el cerebro. De igual manera estos cambios afectaran al entorno persona y
social.
Las sustancias psicoactivas en su mayoría producen adicción, esta adicción se da por las
sensaciones que experimentan los individuos al permitirles evadir su realidad, por lo cual se
considera que el abuso de sustancias psicoactivas se da por que el individuo persigue una meta
psicosocial.
El consumo de estas sustancias se relaciona con lesiones y varias enfermedades como son VIH,
hepatitis B y C, cirrosis, enfermedades cardiovasculares, cáncer y enfermedades mentales.
Estos individuos también se caracterizan por desarrollar una conducta violenta que muchas veces
los lleva a vincularse con el crimen organizado y otras actividades delictivas.
Algunas otras conductas que se aprecian en estos individuos es la pérdida del humor, perdida de
la autoestima, descuido de la salud bucal y general y perdida de la memoria.
Algunas de ellas imitan a los neurotransmisores, por ejemplo, la heroína y los opioides.
Existen drogas que alteran la neurotransmisión ya que interactúan con los componentes
moleculares de los procesos de emisión y recepción, ejemplo de ellos es la cocaína.
Estos cambios nos permiten entender el por que dichas sustancias causan sus efectos y el por
que pueden llegar a crear adicción y ser muy difícil de abandonarlas por las personas que las
consumen.
Se ha identificado que las edades tempranas de la adolescencia son el foco para el inicio de
consumo de estás sustancias y el motivo para su consumo es multifactorial, desde el ambiente
en el que se desarrolla el individuo, así como factores personales que van influidos por el entorno
familiar y social.
Estas drogas son generadoras de conductas violentas y que afectan al desarrollo de la persona
tanto individual como social, hasta el grado de destruir su vida y también afecta a las personas
que las rodea.
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