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eras culpable
Miedo
Esta es una de las armas más populares que el enemigo usa contra
nosotros. La preocupación, la ansiedad y el miedo pueden
abrumarnos con una espesa sombra de oscuridad, controlando cada
uno de nuestros movimientos y decisiones. La Biblia nos dice: “Así
que no temas, porque yo estoy contigo; no te desanimes, porque yo
soy tu Dios. Te fortaleceré y te ayudaré; Te sostendré con mi diestra
justa ”. (Isaías 41:10). Si bien hay innumerables versículos que nos
recuerdan que con Dios, no tenemos que temer, los cristianos
tendemos a tener mucho miedo. Tenemos miedo constante de tomar
decisiones o de enfrentar situaciones peligrosas porque tememos el
resultado. Esto no es lo que Dios pretendía para la iglesia. El amor de
Dios y nuestra fe en Dios deben expulsar todo temor.
Comodidad
Amamos la comodidad. Nos gusta que las cosas se queden como nos
gustan. ¿Quién realmente quiere ser expulsado de su zona de
confort? Pero no podemos discipular a otros cuando estamos
enganchados a estar cómodos. Demasiadas personas en la iglesia
convierten la comodidad en un ídolo. Cuando esto sucede, es muy
fácil que pequeñas diferencias de opinión sobre asuntos
insignificantes provoquen que las personas luchen y las cosas se
rompan.
Preocupación
Como cristianos, somos preocupadores crónicos. A menudo estamos
convencidos de que podemos manejar todo por nuestra cuenta, lo que
nos da una falsa sensación de que tenemos el control, cuando solo
Dios tiene el control. La Biblia nos dice: "Echa sobre él todas tus
ansiedades, porque Él se preocupa por ti" (1 Pedro 5: 7). Nuestro
Padre Celestial no nos llama a llevar esta pesada carga. Dios cuida de
nosotros.
Al hablar con sus discípulos, Jesús nos dio dos razones por las cuales
no debemos preocuparnos. Primero, dice que no debemos
preocuparnos por quienes somos. “Mira las aves del aire; no siembran
ni cosechan ni almacenan en graneros, y sin embargo, su Padre
Celestial los alimenta. ¿No eres mucho más valioso que ellos? (Mateo
6:26). Si cuida a los pájaros, ¿no nos cuidará a nosotros? Jesús
finalmente nos dice que cuando nos preocupamos, disminuimos
nuestro valor. A continuación, no debemos preocuparnos porque no
nos lleva a ninguna parte. "¿Quién de ustedes al preocuparse puede
agregar una sola hora a su vida?" (Mateo 6:27). Preocuparse es como
poner los frenos y pisar el acelerador simultáneamente cuando la
realidad es, podría disminuirlo.
Glotonería
A menudo asociamos la gula con el peso y la comida es mucho más
grande que eso. La gula es realmente una condición del
corazón. Cuando somos glotones, tratamos de encontrar todo lo que
podamos para llenar el vacío que se supone que Dios debe
cumplir. Esto nos aleja de Jesús, el que realmente necesitamos.
Apatía
Los cristianos a menudo caemos en la trampa de dar por sentado el
amor de Dios. Como resultado de esto, perdemos la pasión que una
vez tuvimos con respecto a nuestra relación con Dios y comenzamos
a dar por sentado su amor. La apatía espiritual, la frialdad o la
indiferencia pueden afectar incluso al cristiano más sincero. Algunas
veces estos sentimientos pueden reemplazar el fervor que una vez
sentimos por las cosas de Dios. Si nos falta esta pasión cuando se
trata de nuestra propia relación personal con Dios, ¿cómo podemos
esperar inscribir a otros para que tengan una relación con Dios? Una
de las principales causas de la apatía espiritual es el pecado en la vida
del creyente. Cuando David pecó, se sintió desconectado de Dios
(Salmo 51:11). Cuando confesó su pecado a Dios, David oró para que
Dios "renovara un espíritu firme" dentro de él y le pidió: "Devuélveme
el gozo de tu salvación y concédeme un espíritu dispuesto a
sostenerme" (Salmo 51:12). Un creyente que se siente espiritualmente
apático debe confesar cualquier pecado conocido y pedir la limpieza y
renovación de Dios.
Acostado
Con demasiada frecuencia pensamos que mentir es aceptable
siempre y cuando nadie sepa que cometimos la mentira.
ARROGANCIA
ALTIVEZ - ALTANERÍA
AYUNAR
Joel 2:12 Convertíos a mí con todo vuestro corazón, con ayuno y lloro y lamento
FUEGO ETERNO
TORMENTO ETERNO
Apocalipsis 14:11 Tormento por los siglos de los siglos sin reposo
CHISMEAR
San Mateo 7:2-5 Con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados
San Lucas 6:37 No juzguéis y no seréis juzgados
Dios Padre está sentado en el trono y en su mano derecha tiene un libro, nadie lo puede abrir, Jesús el Cordero está en pie y viene caminando y toma de la mano d
Pie. Lea Apocalipsis 5:1 y 5:6-7
San Lucas 9:33-35 – San Mateo 17:5 – San Marcos 9:7 Dios Padre le dice a Jesús: Este es mi Hijo amado
San Lucas 3:22 Dios Padre le dice a Jesús: Este es mi Hijo amado
San Mateo 3:17 Dios Padre le dice a Jesús: Este es mi Hijo amado
San Marcos 1:11 Dios Padre le dice a Jesús: Este es mi Hijo amado
San Juan 5:22 Dios Padre no juzga, su Hijo Jesús si juzga
San Juan 5:30 Porque no busco mi voluntad, sino la voluntad del que me envió, la del Padre
San Juan 8:28 Jesús dijo: Nada hago por mí mismo, sino que según me enseñó el Padre, así hablo
San Juan 8:49 Jesús dijo: Antes honro a mi Padre
San Juan 8:54 Jesús dijo: Si yo me glorifico a mí mismo, mi gloria nada es; mi Padre es el que me glorifica
San Juan 10:17-18 Este mandamiento recibí del Padre
San Juan 11:41-42 Jesús dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído
San Juan 12:27-30 Dios Padre le habla a su Hijo Jesús
San Juan 12:49 Jesús dijo: Porque yo no he hablado por mi propia cuenta; el Padre que me envió, él me dio mandamiento de lo que he de decir, y de lo que he de
San Juan 12:50 Jesús dijo: Lo que yo hablo, lo hablo como el Padre me lo ha dicho
San Juan 14:23 Jesús dijo: Vendremos a él, y haremos morada con él
San Juan 17:5 Glorifícame tú aliado TUYO, con aquella gloria que tuve CONTIGO antes que el mundo fuese
San Juan 17:11 Para que sean uno, así como NOSOTROS
ANALICE LOS VERSÍCULOS
EL ATAVÍO CRISTIANO
EL CONGREGARSE
Salmos 84:10 Mejor es un día en tus atrios, escogería estar a la puerta de la casa de mi Dios
Salmos 122:1 Yo me alegré con los que me decían: A la casa de Jehová iremos
Salmos 133:1 Mirad cuán bueno y cuán delicioso es habitar los hermanos juntos en armonía.
Isaías 33:15-16 El que cierra sus ojos para no ver cosa mala.
EL DIABLO
2 Timoteo 2:25-26 Escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a voluntad de él
Job 1:6-9 y 2:2 y 2:4 Satanás se presentó delante de Jehová
EL DIVORCIO
San Marcos 10:2-12 y San Mateo 19:1-11 Lo que Dios juntó no lo separe el hombre
San Lucas 16:18 El que se divorcia de su mujer y se casa con otra, adultera
1 Corintios 7:10 La mujer no debe separarse de su marido
1 Corintios 7:11 El marido no abandone a su mujer
Hechos 10: 19-20 y 11:12 - Timoteo 4:1 El Espíritu Santo habla
EL ESPÍRITU SANTO ES UNA PERSONA
EL FRUTO
San Mateo 12:33 - Lucas 6:44 Porque por el fruto se conoce el árbol
San Lucas 3:8 Haced frutos dignos de arrepentimiento
San Juan 15:2 El que no lleva fruto será quitado, y el que lleva fruto será limpiado, para que lleve más fruto
San Juan 15:4-5 El que permanece en Cristo, éste lleva mucho fruto
EL PERDÓN
EL PERDÓN
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