Introducción

Se conoce como una cooperativa a la forma de organización social integrada por

personas físicas con base en intereses comunes y en los principios de solidaridad,
esfuerzo propio y ayuda mutua; este tipo de organizaciones tienen el propósito de
satisfacer necesidades individuales y colectivas, a través de la realización de
actividades económicas de producción, distribución y consumo de bienes y
servicios (Gobierno de México, SAT, 2022).

Si bien estos beneficios son variables y se ajustan a la necesidad de un conjunto

poblacional o de una comunidad específica, se pueden agrupar en tres grandes
grupos, de acuerdo con su función y a la vez para su regulación dentro del país,
estos son: cooperativas de productores, de consumidores y de ahorro y préstamo.
Además, hay una innovación en el área de las cooperativas lo que ha permitido el
desarrollo de nuevas empresas que pueden tener la misma importancia que
cualquiera perteneciente a las categorías principales (Gobierno de México, SAT,
2022).

En este ensayo se desarrollará la definición y clasificación de las cooperativas

para poder explicar posteriormente su importancia dentro de la sociedad y resaltar
su relación con el trabajo social, así como explicar su rol en este tipo de
organizaciones a la par de exponer los lineamientos que siguen dentro de la
sociedad, su forma de funcionamiento y de administración.

Es importante aclarar que todas las personas que pertenecen a un tipo de

cooperativa contribuyen activamente en la economía, sin embargo, con los
cambios sociales y políticos es necesario que se amplie el panorama de estas
organizaciones, ya que, si bien pueden acumular ingresos y deducir gastos, tienen
que cumplir obligaciones legales y sociales, para estas últimas resulta necesario la
intervención de un agente con amplio conocimiento de los usos y costumbres de la
población en donde se desarrolla la cooperativa, como lo es el trabajador social.
La importancia de las cooperativas

Las cooperativas son empresas de producción, obtención o consumo que

permiten la participación libre, pero están regidas por intereses y principios del
cooperativismo, el cual promueve la libre asociación de individuos y familias con
intereses comunes, para construir una empresa en la que todos tienen igualdad de
derechos y en las que el beneficio obtenido se reparte entre sus asociados según
el trabajo que aporta cada uno de los miembros (Fernández S., 2016).

Las sociedades cooperativas tienen una amplia consideración de sus miembros

para procurar su bienestar y beneficio total durante los actos que realice el
movimiento u organismo, por lo que se rigen mediante los principios de libertad de
asociación y retiro voluntario de los socios, administración democrática, limitación
de intereses en caso de ser necesario, distribución de los rendimientos en
proporción a la participación de los miembros, fomento de educación cooperativa y
económica, integración cooperativa, respeto a derechos e intereses individuales
de los miembros y promoción de la cultura ecológica (Ley General de Sociedades
Cooperativas, 2018). Esto les permite realizar sus acciones con orden y con
pautas estipuladas en el código legal del país, regulando así las acciones de sus
miembros y promoviendo la democracia y justicia en casos necesarios.

La importancia de las cooperativas en la sociedad radica en la intervención de la

economía contribuyendo con la distribución de productos necesarios para la
supervivencia de la población y algunos casos de recursos monetarios que
benefician a ambas partes. Este tipo de organizaciones permiten el impulso y
desarrollo económico tanto de zonas rurales como urbanas y lo más importante es
que se adecuan a las normas y costumbres de las regiones en donde se
desarrollan, además de seguir estrictamente la ley que las rige.

De acuerdo con la Ley General de Sociedades Cooperativas, 2018 hay tres

diferentes tipos de sociedades cooperativas, las cuales se distinguen por su
acción principal, así como la función y el beneficio de sus miembros para con la
sociedad. Entre el grupo principal de clasificación de sociedades están:
 Sociedades cooperativas de consumo

Sus miembros se asocian con el objeto de obtener en común artículos, bienes o

servicios para ellos, sus hogares o sus actividades de producción. Destacan el
mayoreo para beneficio de una comunidad significativa y permiten realizar
operaciones con el público como es el intercambio de estas mercancías. El papel
más importante de estas es contribuir a la regulación de precios locales, facilitar el
acceso a productos o servicios de difícil obtención y entre sus beneficios está el
evitar la paga de impuestos a excepción de ciertos casos. Significan mucho para
las poblaciones en donde se establecen, pero es necesaria la regulación y
normatividad para evitar abusos hacia las personas beneficiadas.

Sociedades cooperativas de producción

Sus miembros se asocian para trabajar en común en la producción de bienes o

servicios, aportando su trabajo personal, físico o intelectual, independientemente
del tipo de producción que realicen. Requieren de un mínimo de socios y tres tipos
de órganos internos, una asamblea general, un consejo de administración y un
consejo de vigilancia; al igual que las cooperativas de consumidores.

Sociedades cooperativas de ahorro y préstamo

Son aquellas sociedades constituidas y organizadas conforme a la Ley General de

Sociedades Cooperativas que, independientemente del nombre comercial, razón o
denominación social que adopten, tengan por objeto realizar operaciones de
ahorro y préstamo con sus socios, y quienes forman parte del sistema financiero
mexicano con el carácter de integrantes del sector social sin ánimo especulativo.

Es importante destacar que en estas el número de socios para formarse es mayor

y requieren de más comités, además de personal que ejerza puestos de gerencia
y gestión de labores, así como auditores para permitir su funcionamiento, siendo
de gran importancia el seguimiento de las normatividades para permitir el beneficio
común de la sociedad contemplada como objetivo.
 Otro tipo de sociedades cooperativas

También se han catalogado como sociedades ciertos tipos de cooperativas

originados de la innovación social y empresarial, en los cuales destacan las
cooperativas de plataforma, que son aquellos proyectos que funcionan de manera
digital mediante el uso de aplicaciones o sitios web, pero entre sus desventajas
está la necesidad del acceso a internet y dispositivos tecnológicos.

Otro ejemplo importante son las cooperativas de cuidado, en las que se realiza
préstamo de servicio de cuidado a población diversa con necesidades específicas,
muchas de ellas tienen contacto con medios internacionales para proveer de estos
servicios. Finalmente destacan las cooperativas de transportes en las cuales los
medios de transporte, desde autos hasta aviones y trenes, son operados de forma
colectiva para beneficiar a las personas que ofrecen el servicio, a los miembros de
la comunidad a la que va dirigido e incluso al medio ambiente por la
implementación de energías renovables (Instituto Nacional de la Economía Social ,
2022).

Administración y organización

Las cooperativas son reguladas y revisadas por distintos organismos

gubernamentales, fiscales y sociales para el cumplimiento de sus obligaciones, a
su vez, tienen diversos derechos los cuales son mediados por personal interno de
la cooperativa, entre los que destacan el nombramiento y la exclusión de
miembros, este último puede ser ocasionada porque estos no desempeñan sus
labores con calidad o de manera adecuada, la falta de cumplimiento a los
acuerdos establecidos o que no tengan causa justificada para hacerlo, que
incumplan las normas impuestas en la cooperativa, todo esto está regulado por ley
y debe proceder de acuerdo con el protocolo estipulado (Ley General de
Sociedades Cooperativas, 2018).

En la constitución de las sociedades cooperativas se observará lo siguiente: Se

reconoce un voto por socio, independientemente de sus aportaciones, serán de
capital variable, habrá igualdad esencial en derechos y obligaciones de sus socios
e igualdad de condiciones para las mujeres, tendrán duración indefinida y se
integrarán con un mínimo de cinco Socios, o más dependiendo el tipo de
cooperativa; además a partir del momento de la firma de su acta constitutiva, las
sociedades cooperativas contarán con personalidad jurídica, tendrán patrimonio
propio y podrán celebrar actos y contratos, así como asociarse libremente con
otras para la consecución de su objeto social (Ley General de Sociedades
Cooperativas, 2018).

Las cooperativas y el trabajo social

Una cantidad importante de trabajadores sociales han encontrado en los

programas de economía social/ popular un espacio ocupacional en el que se
sienten a gusto e inclusive lo han privilegiado sobre otros espacios ocupacionales.
Entonces se puede decir que se han ido construyendo experiencias de
intervención (Barberena, Scabuzzo, & Blanco, 2020).

Los principios y valores que se manejan en este tipo de sociedades coinciden en

gran medida con los inculcados a los trabajadores sociales, entre ellos sentido de
ayuda mutua, el grupo que asume una cooperativa mantiene una interrelación de
apoyo, de trabajo individual en función de la meta común, responsabilidad: todas
las personas que son miembros deben cumplir el trabajo que les corresponde,
democracia participativa, igualdad, todos los miembros de un grupo cooperativo
tienen los mismos deberes y derechos, equidad y solidaridad, la cual consiste en
el apoyo que deben proporcionarse entre sí los miembros de la cooperativa, así
como el que deben dispensar a la colectividad en general (Fernández S., 2016).

Conclusión

En conclusión, hemos visto que la evolución de las cooperativas ha ido a la par

con la modernización de la sociedad, viéndose afectada por la globalización, pero
adaptándose a ella, han mejorado sus métodos de trabajo y formas de
organización para explotar al máximo los recursos disponibles, a la par, ha sido
necesario el acompañamiento de personal que ponga un límite en los procesos o
condiciones desiguales, estas obligaciones son un claro ejemplo de la labor que
puede desarrollar un miembro del trabajo social en este tipo de sociedades, pues
son quienes tenemos la capacidad de relacionar la importancia de las personas
con su entorno y visualizar sus fortalezas y áreas de oportunidad.

Esto no significa que podamos realizar el trabajo de consejeros o asesores, ya que

dentro de los miembros clave de las cooperativas tiene que haber este tipo de
funcionarios, pero podemos apoyar a la población que tiene la oferta de verse
involucrada con la cooperativa para realizar la función de mediadores, viendo por
sus derechos y los de las condiciones que los rodean debido a la amplia formación
que tenemos en este campo.

Entonces, cabe señalar que a pesar de lo que se pueda entender, muchas de las
cooperativas son a nivel local, es decir que trabajan de forma individual o familiar y
que se enfocan en la recuperación de antiguos negocios o empresas que habían o
estaban en el borde de la desaparición, lo que permite renovar la economía sin
agotar recursos que son limitados. En este tipo de sociedades el trabajador social
tiene un papel más importante, pues permite que los miembros de esta clase de
cooperativas mantengan el enfoque que requiere, sin afectar su ingreso
económico ni su papel dentro de la sociedad.

Finalmente, el papel de los trabajadores sociales dentro de las cooperativas va

más allá de lo económico, ya que ellos son los representantes que están
preocupándose por los recursos naturales y la implementación de métodos que
beneficien a la sociedad donde se establecen en los proyectos desarrollados, son
quienes defienden unas condiciones laborales que protejan la calidad de vida de
los demás trabajadores, lucha por la productividad de la tierra como forma de vida,
preservación de la flora, fauna, sobre todo en zonas rurales o donde estos
recursos son el principal ingreso de la sociedad que puede verse afectada o
beneficiada por estas organizaciones.

Bibliografía
Barberena, M., Scabuzzo, A., & Blanco, C. (2020). El trabajo social en los
programas de la Economía Social/Popular., (págs. 1-10). Fundamentos y
objetivos del curso, articulación horizontal y vertical con los ontenidos de las
materias.
Fernández S., M. E. (2016). Las cooperativas: organizaciones de la economía
social e instrumentos de participación ciudadana . Revista de Ciencias
Sociales, 237-253.
Gobierno de México, SAT. (2022). Orientación. Obtenido de Conoce qué es una
Sociedad Cooperativa: https://www.sat.gob.mx/consulta/08326/conoce-que-
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%20y
Instituto Nacional de la Economía Social . (29 de Marzo de 2022). Instituto
Nacional de la Economía Social . Obtenido de Tipos de Cooperativas en
México: https://www.gob.mx/inaes/articulos/tipos-de-cooperativas-en-
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Ley General de Sociedades Cooperativas. (19 de 01 de 2018). Cámara de
Diputados del H. Congreso de la Unión. págs. 1-35.