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Dominicana
Nelson Arciniega
Helen Liria
6TO A GAT 25/11/2022
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Contenido
Introducción ................................................................................................................. 2
Tesis: Almorzar a las 12 una “bandera dominicana” ................................................ 3
Argumento .................................................................................................................... 4
Helen Liria
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Introducción
República Dominicana es uno de los
países latinoamericanos más
visitados. Nuestras hermosas e
increíbles playas, entre las mejores
playas del mundo, y que se
caracterizan por su interminable arena
fina y sus cálidas aguas cristalinas,
han hecho que República Dominicana
y Punta Cana sean destinos muy
reconocidos casi por cualquiera. Pero
este nuestro hermoso país no solo
cuenta con hermosas playas, mi país
es rico por su cultura, tiene mucho
que ofrecer y, si la conoces, te enamorarás aún más del país caribeño.
La cultura dominicana es una mezcla de culturas. Esta se une con:
• La cultura taína: Esta nos dejó herencia su actividad artesanal y una
agricultura de cultivo de productos como la yuca, maíz, batata o el ají.
• La cultura española: De esta conservamos algunos que otros alimentos, tales
como el café, el trigo, la cebada y la caña de azúcar.
• La cultura africana: Nos dejó algunos vocablos tales como: los sofritos, el
escabeche, la cultura de las velas, los altares, el mal de ojo, el culto a los
muertos.
La República Dominicana es una joya
caribeña que oculta unas prácticas bastante
singulares. Adentrarnos en la cultura
dominicana es conocer las influencias taínas
e hispanas que han llegado hasta nuestros
propios días y que realizan de esta una
bonita isla con un enorme llamativo turístico.
Preferencias musicales, sabores
fundamentales, bailes tradicionales y
celebraciones emblemáticas definen a un
territorio cuya historia cuenta con raíces
españolas y africanas.
Son muchas y muy diversas las costumbres de esta hermosa isla y cada pueblo tiene
las suyas.
Helen Liria
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Helen Liria
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Argumento
Los principios de este plato se remontan a un
oscuro lapso de la historia dominicana
denominado "España Boba", como producto de
una crisis económica en el que estaba la isla y
de sus carencias, los habitantes han tenido que
ingerir lo poco que producían: Habichuelas,
arroz de sus regiones pantanosas y la carne de
los hatos ganaderos que abundaban en el
territorio.
La gastronomía criolla, que degustamos hoy, tiene su punto de inicio tras el principio
del cultivo de arroz en la isla. A los españoles se les agradece el hecho.
A la llegada de los conquistadores, los primeros habitantes de la isla (taínos)
consumían fundamentalmente yuca y maíz y como la oferta de alimentos era tan
reducida, determinaron meter el arroz a América, especialmente por el Caribe; aunque
a Cristóbal Colón no le terminó tan simple.
Al llegar la corte de la virreina María de Toledo, mujer de Diego Colón, todo ha
cambiado. Sus mujeres de compañía y cocineros procedían del sur española, donde
por 800 años gobernaron los moros (árabes) que consumían mucho este cereal.
Entre los platos que hacían estaba la paella y el arroz con habichuelas nombrado
“moros con cristianos”. Tal, emergen el locrio y el moro que consumimos hoy los
dominicanos.
Para sorpresa de varios, el locrio, una diversidad de la paella de España, y que se
prepara en esencia a base de la mezcla de arroz y cualquier tipo de carne, por años
ha sido el plato más consumido, obviamente, producto de la marcada predominación
de España en la isla.
El término locrio deriva de locro y criollo. Locro: un guiso de carnes con papas, maíz o
judías, vegetales u hortalizas, consumido en diversos territorios de América del Sur y
criollo, el descendiente de cualquier europeo y nacido en las colonias.
Bastante más de 300 años más tarde, justo, a lo largo de la tiranía de Ulises Hereaux
(Lilís) el cultivo y consumo de arroz consiguió su máxima plenitud. El tren, construido
por el dictador, permitió llevarlo de una zona a otra de la nación y, por ende, servirlo en
las mesas.
El locrio, en tanto, alcanzó tal fama que era considerado el plato nacional, explica el
arquitecto, pintor y artista dominicano Cristian Martínez Villanueva, en un artículo
titulado “El arroz en la República Dominicana”.
Según cuenta Martínez Villanueva, la popularidad y preferencia del locrio era tanta que
a lo largo de “la firma del Manifiesto de Cerro Cristi en 1895, protagonizado por José
Martí y Más alto Gómez, el ilustre invitado cubano ha sido agasajado con un sabroso
locrio dominicano”.
Y de esta forma nació la ‘bandera dominicana’. Ciertos textos hablan de que los
principios de este plato se remontan a la “España Boba”, en 1809-1821, mucho frente
a gubernamental de Lilís.
El arroz, las habichuelas y carne se convierte en el plato nacional, ‘La bandera”, a lo
largo de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo.
Helen Liria
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Como producto de la crisis económica en que estaba la isla, los habitantes han tenido
que ingerir lo poco que producían: habichuelas, arroz de las regiones pantanosas y la
carne de los hatos ganaderos que abundaban en el territorio.
Sin embargo, señala Martínez Villanueva, ha sido a lo largo de la dictadura de Rafael
Leónidas Trujillo una vez que se convierte en el “plato nacional dominicano”, a tal
punto de ser denominado por el poblado, ‘la bandera’.
Para dicha época- dice- predominaron las habichuelas, que junto al arroz eran
servidas con carne y ensalada.
Helen Liria
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Conclusión
El poblado dominicano ha denominado al plato primordial de su comida del mediodía
la “bandera dominicana”. El arroz, las habichuelas, la carne, identificando al poblado
dominicano pues al llamarle de esta forma se está identificando: “bandera nacional”,
plato típico dominicano.
Esto nos sugiere cómo hemos de ver nuestra Bandera, la de los 3 colores, empero,
además, cómo hemos de ver esta parte de la dieta dominicana.
Ciertos no le anhelan ofrecer el costo que tiene, sin embargo, la cultura dominicana, a
lo largo de largas décadas, la llama de esta forma, se le conoce de esta forma, se le
aprecia de esta forma.
El que una persona, por diferentes causas, no logre consumir arroz, alubia o carne
esto no desmerita de ni una forma la dieta dominicana, ni desmerita tampoco este
plato. El que ciertos comerciantes quieran incorporar nuevos productos, o que en otras
piezas se tenga otro tipo de dieta, otro tipo de bandera, esto no elimina ningún costo a
la “bandera dominicana”, hace parte de nuestra cultura, hace parte de nuestra dieta,
ha en compañía al poblado dominicano, nos hemos sostenido con aquel plato típico o
aquellos platos normales que realizan del poblado dominicano algo propio que le da
igual costo.
De la misma forma que poseemos una bandera tricolor y una cigua, exclusiva ave
tradicional de esta nación, además poseemos platos habituales nuestros propios: la
“bandera dominicana”.
Helen Liria