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UNIVERSIDAD YACAMBÚ

VICERRECTORADO ACADÉMICO

FACULTAD DE HUMANIDADES

LICENCIATURA EN PSICOLOGÍA - PEPS2016.

Ensayo crítico sobre la atención.

ESTUDIANTE:

VERGARA ROSEVIANNEY

SECCIÓN ED02DOV

PROFESORA. ALINE NÚÑEZ RIVERO

PSICOLOGIA DE LOS PROCESOS COGNITIVOS

LA MORA, 2022-3.
El asombroso cuerpo humano está diseñado de tal manera que resulta
cada vez más fascinante el entender cómo este funciona y como desempeña
todas y cada una de las acciones que es capaz de realizar, siendo una de ellas
el proceso de atención, el cual se convierte por si sola en una de las
herramientas más impresionantes del mismo.
A modo de ejemplo se puede hacer el ejercicio de imaginación de un
universo alternativo, donde imaginad que un sujeto despierta dentro de una
habitación hecha solo de cuatro paredes, sin puertas, ni ventanas, en donde
de repente comienzan a salir pequeñas bolas disparadas desde y hacia todas
las direcciones sin detenerse, rebotando una a una, pero este sujeto siendo
capaz de percibir de que dirección vienen todas y cada una de ellas, a pesar
de no poder dejar la vista fija en una sola bola para así esquivar una a la vez,
incapaz de seleccionar cual sería el siguiente objetivo, este sujeto continúa
siendo bombardeado por tantas bolas que se convierte en un ambiente caótico
en donde la atención en un solo objeto no existe.

Como esa situación, así de caótica seria la mente humana sin la


capacidad de seleccionar y concentrarse en los estímulos relevantes, en otras
palabras, sin la capacidad de focalizar y dirigir la atención de la manera en la
que lo hace, es así como se puede entender su importancia como un proceso
cognitivo, pues este al caracterizarse por tener una capacidad limitada para
procesar la información a la que el ser humano puede atender de manera
eficiente a su alrededor en un momento determinado, se convierte en el
proceso que se puede controlar intencionadamente al existir importantes
limitaciones en la cantidad de información que puede procesar, puesto a que
la atención consiste en que la mente toma posesión, de manera clara y lúcida
de un objeto o situación, lo que implica dejar a un lado algunas cosas con el
fin de abordar otras eficazmente, sin propensión al caos, pues este ejerce
control sobre la capacidad cognitiva.
Es así como en la vida cotidiana los seres humanos reciben estímulos
procedentes de un gran número de objetos y eventos, presentados todos ellos
de forma simultánea. Sin embargo, sólo una pequeña parte llegan a ser
relevantes, ya que por ejemplo sólo se puede mirar en una dirección a la vez
y sólo se percibe parte de la escena visual, esto es una característica esencial
de la actuación humana y al mismo tiempo así es como la atención trabaja tal
como un organizador de la estructura vital del día a día del mismo, además de
ser un mecanismo de descarte y también de priorización, es un mecanismo
neuronal cuya capacidad podría irse desarrollando progresivamente desde la
infancia hacia la adultez.
Como se puede observar, definir lo que es la atención resulta ser una
tarea muy compleja que en el ejercicio de la creación de conocimientos a
través de la historia ha evolucionado conforme lo hace el entendimiento de la
mente humana, pues la atención se puede definir en base a sus características
tales como la amplitud, que no es más que la cantidad de información a la que
se le puede atender a la vez; la selectividad, siendo entonces el tipo de
estímulos o de tareas que se seleccionan; la intensidad, como la cantidad de
atención que se le presta a un objeto o tarea y finalmente; el control, el cual es
una de las funciones más importantes de la atención pues responde a los
objetivos que requieren unas respuestas determinadas.
De manera breve y concisa entonces, se puede afirmar que el proceso
de atención es aquella facultad de la mente humana que permite concentrar la
capacidad de relacionar las sensaciones con la percepción y los recursos
mentales hacia algún estimulo mientras se ignoran todos los demás,
asegurando un procesamiento perceptivo adecuado de los estímulos más
relevantes.

Cabe destacar que la atención no es un proceso unitario o excluyente,


sino que por el contrario la mayoría de las tareas requieren de la acción
conjunta de distintos tipos de atención que han sido propuestos bajo diferentes
criterios de clasificación pues estos hacen referencia a aspectos más
concretos y detallados de la misma, a modo de resumen, destacan las
siguientes categorías.
Según el origen y la naturaleza del estímulo que se va a atender se
puede hablar si el objeto es externo al individuo, como bien podría ser el
programa que se está observando en la televisión; o si se trata de algo físico
interno del organismo, tal como una digestión pesada.
Según la actitud del sujeto, se le llama atención activa y voluntaria,
ya que esta siempre responde a una motivación pues se orienta y proyecta
hacia un objeto con un fin práctico o por curiosidad. Esta motivación no
siempre implica interés por el estímulo, como, por ejemplo, el deseo de aprobar
un examen de una materia que no genera mucho interés, en cambio la
atención pasiva e involuntaria, es aquella que se deriva del hecho de que no
requiere ningún esfuerzo enfocar la atención, responde involuntariamente a un
estímulo intenso, es decir que el sujeto no interviene en la decisión de atender
al mismo como podría ser, girar la cabeza hacia la dirección de donde viene
un fuerte ruido.
Según las manifestaciones motoras y fisiológicas, se conoce que la
atención abierta, a la que viene acompañada de una serie de respuestas
motoras o fisiológicas que hacen posible su detección, pues el foco de la
atención y los receptores de interés tienen la orientación en la fuente de
atención, como cuando hay un grupo de personas hablando de frente
atendiendo tanto a su lenguaje verbal como no verbal, mientras que la
atención encubierta, por su parte logra pasar inadvertida a quienes no son el
sujeto que la presta, en teoría, el ejemplo más representativo de la atención
encubierta es el de un jugador de póker que tiene una buena mano y logra
disimularlo de forma magistral, controlando incluso la dilatación de las pupilas.
Según los intereses del sujeto, se habla de atención selectiva, para
referirse a la capacidad del individuo de centrarse en una única fuente de
información, ignorando todo lo demás que no resulta relevante evitando así la
distracción. Mientras que la atención dividida, es la que permite al sujeto
atender simultáneamente a varios objetos o tareas, como lo que sucede
cuando se escucha música mientras que al mismo tiempo el sujeto se está
lavando las manos y se preocupa por revisar cuando le llegue una llamada
importante al móvil.
Según la modalidad sensorial, se puede hablar de la atención
visual/espacial, el cual es un proceso cognitivo que facilita la detección de
estímulos en una escena visual compleja, como la que habitualmente se
presenta en el medio externo, por el contrario, la atención auditiva/temporal
está directamente relacionada a la temporalidad del estímulo.

La atención a su vez ha sido estudiada a través de numerosas


metáforas, ha sido tratada como si representara un filtro, para ello se usan los
modelos atencionales, encargados de analizar cómo actúa la mente humana
cuando algo despierta la atención y se mantiene en ese estado durante un
periodo prolongado de tiempo.
Los modelos de filtro de la atención, se centran en el concepto del
filtrado, que consiste en elegir un fragmento del flujo sensorial y darle acceso
al canal central del procesamiento, mientras que el resto se pierde.
Modelo de Broadbent o de filtro rígido.
Broadbent (1958), elaboró el primer modelo de filtro de la atención
según el cual existe una estructura o filtro que regula la entrada de la
información. Se trata de un modelo de filtro precategorial, donde el filtro va
antes del análisis semántico, la probabilidad de que un mensaje sea o no
seleccionado dependerá de las propiedades de los estímulos.
Es decir, primero aparecen los estímulos, que se guardarán en el
almacén sensorial que retiene transitoriamente la información en la memoria a
corto plazo, después actuaría el filtro que es rígido y selectivo, ya que elige un
fragmento del flujo sensorial y le da acceso al canal central seleccionando así
la información que se almacenaría y pasaría a la memoria a largo plazo,
mientras que el resto de la información no relevante se pierde, este filtro solo
puede centrarse en un canal o mensaje a la vez, y su transición es de dos
segundos aproximadamente. De esta manera, los estímulos serían
procesados en serie, y nunca en paralelo, lo que significa que la información
se analiza de uno en uno y jamás de manera simultánea.
Modelo de filtro atenuado de Treisman.
Treisman (1964), a diferencia de Broadbent, consideraba que no se producía
un bloqueo absoluto del estímulo no atendido, sino que este era procesado de
algún modo pese a que la persona tratara de focalizarse sobre lo relevante.
Los mensajes inatendidos reducirían su importancia, pero no desaparecerían,
esto quiere decir que el filtro no anularía por completo el mensaje inatendido,
sino que este continuaría siendo procesado a algún nivel y puede pasar a
acaparar la atención sí aporta congruencia a lo que se estaba percibiendo
hasta ese mismo instante.
Así pues, serian determinadas las condiciones del individuo tales como
su experiencia vital o sus expectativas de futuro, las responsables de atribuir
relevancia perceptiva al estímulo. Esto quiere decir que el filtro actuaría
debilitando los mensajes menos relevantes, pero estos no serían inhibidos por
completo pues existiría por tanto un procesamiento básico a nivel semántico
con el que se optimizarían las tareas de selección sin saturar el sistema
cognitivo.
Modelo de filtro tardío de Deutsch y Deutsch y Norman.
Estos autores defendían que los estímulos son igualmente analizados
hasta alcanzar su significado y que el filtro no se encuentra en el inicio del
procesamiento de la información sino más adelante, siendo así el primer
modelo de filtro postcategorial, según el cual los procedentes del ambiente
externo que llegan a los órganos sensoriales son almacenados
momentáneamente en un almacén de memoria sensorial, a continuación,
todos estos se procesan y analizan en paralelo en el sistema analizador que
extrae de cada estimulo las características más destacables, las de mayor
importancia.
Una vez realizado este análisis opera el filtro, que recoge los estímulos
ya analizados, hace una evaluación de sus características y finalmente
selecciona el estímulo más relevante y lo transmite a la memoria activa o
atención, dándole salida. De todos los estímulos que llegan al sistema
analizador sólo el seleccionado por el filtro es percibido por el sujeto.
Así es como este modelo asegura que los estímulos se analizan y
obtienen un significado antes de elegir el input que transita a la conciencia
total. La elección del input sucede dependiendo de la importancia del estímulo
en dicho momento.
Modelo de capacidad limitada Kahneman.
Este hace parte de los modelos de recursos limitados que se basan en el
paradigma de atención dividida o doble tarea. En estos modelos el énfasis no
recae en los fenómenos receptivos sino en los limites atencionales en la
realización de tareas.
Siendo Kahneman (1973), quien propone que la atención es un recurso
limitado que se puede distribuir en función de la asignación de tareas, para
una o para varias actividades, esto sugiere que la capacidad atencional varía
en función de la motivación y de la activación o arousal, siendo este ultimo la
capacidad de estar despierto y de mantener la alerta que implica la capacidad
de seguir estímulos u órdenes a medida que aumenta la activación también lo
hace el rendimiento, pero existe un punto óptimo, que una vez superado
producirá una disminución del mismo, pues la dificultad de una tarea se puede
determinar con su grado de interferencia con una tarea coincidente.
En situaciones de estrés moderado la tensión aumenta su eficiencia y
el rendimiento es mayor, pero en situaciones de gran estrés, peligro o
emergencia grave, la capacidad atencional se reduce drásticamente con el
correspondiente deterioro de la conducta, que se vuelve poco adaptativa.
Kahneman señala las variaciones del arousal en el tamaño de la pupila y el
ritmo cardiaco como dos parámetros sensibles a los cambios en el nivel de
arousal.
Procesos controlados y procesos automáticos de Shiffrin y Schneider.
Shiffrin y Schneider (1977), propusieron la existencia de procesos
automáticos y controlados, para explicar aquellas situaciones en las que las
personas demuestran una notable capacidad para hacer dos o más cosas a la
vez. Los llamados procesos controlados son aquellos que se caracterizan
principalmente porque requieren atención y se ven limitados por las
características funcionales del almacén a corto plazo pues estos son procesos
generalmente conscientes, que se pueden dirigir y modificar voluntariamente.
Estos procesos controlados pueden producir aprendizaje permanente
tanto de nuevas secuencias automáticas como de información en general y,
además, los productos de los procesos controlados son accesibles a la
conciencia, son más lentos, ya que por definición requieren un control estricto.
Ahora los procesos automáticos, se cursan sin atención, son
involuntarios, no precisan esfuerzo y no se ven afectados por las limitaciones
del almacén a corto plazo. Estos son procesos inconscientes, que no
requieren un entrenamiento considerable para desarrollarse y que, una vez
aprendidos, son muy difíciles de modificar.
No pueden producir aprendizaje a largo plazo, aunque sí le es posible
interferir indirectamente en el aprendizaje mediante la focalización forzada de
los procesos controlados. Una característica destacable es que los productos
de estos procesos automáticos no son accesibles a la conciencia, pero si
pueden modificar la actividad consciente, mediante la activación de otros
procesos o acciones automáticas.
Relación de la sensopercepción y la atención.

Se puede decir luego de todo el proceso de investigación que la


atención es una estructura multidimensional compuesta de fenómenos tales
como el examinar estratégico de la informacion, la exclusión de estímulos
secundarios, la atención sostenida, la atención dividida, la inhibición de la
acción impulsiva, la selección y supervisión de respuesta, entre otros.
Mientras que se puede afirmar que la percepción es aquella capacidad
cognitiva del ser humano, capaz de captar y conocer los elementos del entorno
por medio de los sentidos, además de una subestructura del conocimiento.
Es gracias a la percepción que el ser humano se conecta con la
realidad, relacionándose con ella y a su vez con todos los fenómenos, objetos
e individuos que la componen.
Siendo así como de esta manera la percepción se encuentra
intensamente ligada a la atención, pues la actividad cognitiva empieza por la
percepción, pero esta continua su proceso gracias a la atención del sujeto.
Creando la experiencia del individuo con el entorno en el que vive pues
así, el aprendizaje de la persona adquiere gran importancia en su percepción
de la realidad y por consiguiente en su interpretación del mundo.
Referencias bibliográficas.

I. Fregoso, M. y Gutiérrez, M. (2008). Psicología básica: Atención. Madrid:


Paidós.
II. Pineda, D. y Ardila, A. (1991). Neuropsicología, evaluación clínica y
psicometría. En Galeano, L. Pruebas de atención y concentración
Medellín: Prensa Creativa, pp. 51-56.
III. Luria, A. (1984). Atención y memoria. Barcelona: Kairos.
IV. Mestre, N. y Palmero, F. (2004). Procesos cognitivos básicos: Una guía
académica para los estudios en psicopedagogía, psicología y
pedagogía. Madrid: McGraw-Hill.

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