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Las islas se ubican en una de las zonas geológicamente más inestables y complejas del planeta. En
general, es un país altamente sísmico a causa de su ubicación en el Cinturón de Fuego del Pacífico.
Existen alrededor de 200 volcanes; sesenta de ellos están en actividad, el más famoso es el Fujisan, de
3776 metros de altura, coronado de nieves perpetuas. Casi la tercera parte del país consiste de terrenos
de origen volcánico.
Los temblores de tierra son frecuentes (con una intensidad reducida a moderada) y la actividad volcánica
ocasional se siente en forma activa en las islas. Resultan sumamente destructivos los terremotos, a
menudo dando como resultado los tsunamis, con una frecuencia de varias veces en un siglo; se han
presentado 5 importantes terremotos en los últimos 20 años.
Cerca del 73 % del país es montañoso y poblado de bosques. Debido a que existe tan poco terreno llano,
muchas colinas y laderas son aprovechadas en su totalidad para el cultivo. Solo cerca de ¼ del territorio es
llano y donde se concentra la población, estando situada a lo largo de la costa.
Esta pequeña parte de tierra habitable sufrió diversas modificaciones en su terreno a lo largo de los siglos.
Las tierras próximas al mar y a los ríos tiene numerosas construcciones de diques y drenajes, muchas
colinas y montañas están cortadas en terrazas escalonadas para aumentar el terreno cultivable y para
aumentar el terreno edificable. Este proceso de modificación del medio continúa actualmente con la
extensión de la línea costera y la construcción de islas artificiales para las industrias y para el crecimiento
del puerto.
La cooperación entre el gobierno y las industrias, la costumbre japonesa del trabajo duro y el dominio de la
tecnología han llevado a Japón al éxito económico del que hoy disfruta.
Los sectores estratégicos de la economía japonesa son los productos manufacturados y tecnología, sobre
todo los vehículos, artículos electrónicos e industria del acero.
Este éxito ha sido el resultado de un control exhaustivo de las importaciones, una inversión muy elevada
en el interior y una política de exportación muy agresiva.
Otra característica notable de la economía japonesa incluyen una fuerte unidad entre productores,
manufactureros y distribuidores, reunidos en grupos.
En la pesca comercial de peces, se sitúa en segundo lugar en el mundo detrás de China en el tonelaje de
pescado capturado. Mantiene una de las flotas pesqueras más grande del mundo, y representa casi el
15 % de las capturas mundiales
El transporte está muy desarrollado. A partir de 2004, hay entre otros 173 aeropuertos, y 23 577 km de
ferrocarriles. Nos ha llamado la atención su extensión y eficacia uniendo las ciudades e innumerables islas.
Japón sufre en la actualidad de un descenso en su índice de natalidad (1,3 hijos por mujer), si a lo anterior
se le añade el hecho de que posee el tercer puesto en la población más longeva del mundo (82años), hace
temer por la viabilidad de su sistema de pensiones y la disponibilidad en el futuro de mano de obra
suficiente.
Como plan a largo plazo, las compañías invierten grandes sumas de dinero en investigación y desarrollo de
robótica. Actualmente, Japón posee 410.000 de los 720.000 robots industriales en todo el mundo.
Punto de encuentro entre Asia continental y el océano Pacífico, el archipiélago japonés ha desarrollado a
través de los siglos una cultura propia, enriquecida a partir del contacto con las culturas china, coreana y
con Occidente.
Un centro donde
conviven perfectamente
esos edificios modernos
con callecitas estrechas
y edificios bajitos por
donde se puede pasear
con tranquilidad, al
mismo tiempo que se
puede descender a otra
enorme ciudad
subterránea y paralela
por donde también las
personas se desplazan
con orden y calma.
Aquí nació Tadao
Ando, uno de los
arquitectos mas
importantes de la
arquitectura
contemporánea,
Premio Pritzker de
arquitectura en 1995,
cuyos edificios de
hormigón nos
deslumbraron por su
estética depurada,
limpia, utilización de la
luz natural, su
grandiosidad.
Pudimos ver el bello castillo de Osaka del siglo XVl, ahora fielmente
reconstruido, en su inicio fue el mayor de su época.
El comienzo de la construcción de
un templo donde actualmente está el
complejo Tōdai-ji puede remontarse
a 728 .
Durante la Segunda Guerra Mundial fue la única gran ciudad japonesa que no resultó
bombardeada por la Fuerza aérea estadounidense. Por esta razón, a día de hoy sigue siendo una
de las importantes urbes japonesas, con un rico patrimonio histórico, artístico y arquitectónico.
Desde el año 1994 parte de sus monumentos están reconocidos por la Unesco como Patrimonio
de la Humanidad.
A partir de 1964, con la llegada del Shinkansen y la inauguración de la Torre de Kioto, empezaba
la modernización del tradicional Kioto, suponiendo la desaparición progresiva del Kioto tradicional,
que está siendo sustituido por nuevos estilos arquitectónicos como el polémico complejo de
la Estación de Kioto, inaugurado en 1997, que a nosotros nos fascinó.
El Templo del Pabellón Dorado, fue construido originalmente en 1397 como villa de descanso .
Posee un magnífico jardín japonés adyacente. El estanque es llamado Kyōko-chi (Espejo de
agua), donde existen numerosas islas y piedras que representan la historia de la creación budista.
El templo Nishi Honganshi construido en el siglo XVl, destaca por su gran Salón del fundador. El
salón mide 45 metros de largo, 42 metros de ancho y 25 metros de alto y en su altar central se
encuentra consagrada una imagen en madera de Amida Buda acompañada de los retratos de
seis de los Siete Maestros de la Tierra Pura
El templo Nanzen-i en un principio fue una villa privada del emperador Kameyana, a partir de
1291 se convirtió en un complejo budista zen; es de gran encanto, rodeado de vegetación y
misticismo. Sus jardines están en la lista de Bellezas Escénicas
El Fushimi Inari-Taisha es el
principal santuario sintoísta
dedicado al espíritu de Inari.
Desde las épocas más antiguas de
Japón, Inari era vista como patrona
de los negocios aunque en primer
lugar fuera diosa del arroz. Los
comerciantes y artesanos ofrecían
culto a Inari a cambio de obtener
riqueza en sus negocios, por lo que
donaban numerosos torii que
actualmente forman parte de la
vista panorámica del templo. De
este famoso templo se dice que
posee más de 32.000 pequeños
torii, llamados santuarios.
Esta curiosa maquina robotizada para hacer pastelitos en una tienda a pie de calle, donde se
iban sirviendo en la medida que salían, es otra imagen que ilustra a que punto la idea del robot
esta implantada en el país.
La calle del mercado de Nishiki tiene
una longitud de 390 metros. Muchas
tiendas ofrecen degustaciones. A
pesar de que el mercado de Nishiki
tiene un toque tradicional japonés, hay
también tiendas muy famosas de cada
tipo de compras. Es un mercado al aire libre aunque cubierto por una cristalera que lo aísla incluso en los días
de peor tiempo. Se puede visitar cada establecimiento y probar algunas especialidades, disfrutando de la
gastronomía y la tradición en este mercado.
Su origen se remonta al siglo Vlll, que aprovechaban la gran cantidad de aguas subterráneas cercanas al
mercado para conservar el pescado, y suministrar a la corte imperial.
El Castillo Himeji
localizado en la ciudad de Himeji es una de las estructuras más antiguas del Japón medieval que aún
sobrevive en buenas condiciones; fue designado como Patrimonio de la Humanidad por
la Unesco en 1993, y es uno de los tres castillos mas importantes de Japon.
Se le conoce a veces con el nombre de Hakuro-jō ("Castillo de la garza blanca") debido al color blanco
brillante de su exterior.
El castillo es un ejemplo del
prototipo de un castillo japonés, ya
que posee muchas de las
características defensivas y
arquitectónicas asociadas con los
castillos japoneses. Las altas
fundaciones de piedra, paredes
encubiertas de cal y la
organización de los edificios dentro
del complejo, son los elementos
estándares .
El castillo de Matsuyama es
particularmente extenso y se puede
entrar a casi todas sus habitaciones,
alberga una exposición permanente
con piezas únicas de las épocas Edo y
Meiji, entre ellas varias armaduras
samurái auténticas y unas cuantas
espadas.
La colección incluye objetos cotidianos de los
guerreros y los señores feudales que habitaban el
recinto (tazas, cerámica, palillos…), cuadros,
estancias completas reconstruidas, manuscritos,
mapas, etc.
Los jardines son muy espaciosos, con grandes extensiones de ciruelos, cerezos y arces,
además de una plantación de té y otra de arroz, estanques y pequeños riachuelos, varios
caminos y senderos.
En este bar pudimos ver un curioso robot que llenaba de cerveza las jarras que iba colocando el
camarero, pero siguiendo un estricto protocolo para que la jarra quedase con la espuma y forma
adecuadas.
El viaje de Matsuyama a Okayama en coche fue bonito, entretenido y enriquecedor . Nos permitió ver un
paisaje esplendido de la costa, con muchísimas islas, y sobre todo nos deslumbro la cantidad de grandes
y larguísimos puentes construidos para comunicar diferentes islas.
También atravesamos muchas áreas de grandes fábricas que señalan la situación industrial del país.
Kanazawa
colinda con el mar de Japón, está bordeada por los Alpes Japoneses. Tuvo cierta
relevancia histórica al albergar una de las familias feudales más importantes del
periodo Tokugawa: el clan Maeda.
Kanazawa no se vio afectada por los bombardeos durante la guerra, gracias a esto la
mayoría de sus edificios tradicionales se conservan prácticamente intactos.
Pero también resultan impactantes los nuevos edificios modernos, sobresaliendo la estación de tren,
un complejo enorme donde destacan la puerta Tsuzumi y la cúpula Motenashi, que se han convertido
es una de las imágenes más conocidas de la ciudad.
Higashiyama es el nombre del barrio más tradicional de la ciudad, el barrio de las geishas. Sin embargo,
muchas de las casas de té se han convertido en pequeños museos, restaurantes, tiendas de recuerdos,
pero vale muchísimo la pena explorarlas.
El sitio es increíblemente fotogénico, tanto por fuera como por dentro de los edificios. Aún tiene vida la
misteriosa tradición de las geishas, aunque solo quedan unas pocas de las 200 que solía haber en la
ciudad.
Omicho Market , con
mucha actividad
como todos los
mercados que vimos
en Japon.
Pudimos ver el día a
día de la gente,
admirando lo que
compran y lo que
comen y haciendo
nosotros lo propio.
El Jardín Kenroku es uno de los tres jardines más
hermosos de Japón. Su historia se inicia en el periodo
Edo.
Tradicionalmente, en el
ático, se criaban
gusanos de seda,
actividad que todavía
podemos ver hoy
reflejada en algunas
casas-museo.
He intercalado varios gravados a lo largo del libro, porque me encantan, encuentro
que son obras bellísimas, por lo que nos pasamos varios tardes en antiguas librerías
curioseando libros y gravados antiguos con este tipo de dibujos.
El ukiyo-e era accesible, dado que podía ser producido de forma masiva. Por lo
general, eran adquiridos por personas sin suficiente nivel económico como para
poder comprarse una pintura original.
La fusión entre la impresión tradicional en madera y el arte occidental condujo a
la creación del manga, un formato japonés de historieta popular dentro y fuera de
Japón.
El interior del castillo se encuentra bien conservado; la pendiente y estrechez de las escaleras
transmite el sentir y obsesión por la defensa durante la época de los estados combatientes. Además,
también se exhiben armaduras y armas de mecanismo de mecha de aquella época.
Después de un periodo de paz, los castillos militares pasan a ser lugares-símbolo y de prestigio.
Los castillos japoneses eran fortificaciones construidas principalmente con piedra y madera. Estos
evolucionaron a partir de las edificaciones de madera de siglos anteriores hasta las formas que
surgieron a finales del siglo XVI y principios del siglo XVII. De la misma forma que los castillos de
otras partes del mundo, los castillos japoneses eran construidos para vigilar lugares
estratégicos o importantes como puertos, ríos, o caminos y casi siempre tenían en cuenta las
características del lugar.
Los castillos vivieron varias etapas de destrucción. Durante el shogunato Tokugawa se decretó una ley
para limitar el número de castillos que cada señor feudal podía poseer, limitándose a uno por feudo, por
lo que varios fueron destruidos. Después de la caída del sistema shogunal y del regreso al poder del
Emperador de Japón durante la Restauración Meiji, nuevamente muchos castillos fueron destruidos y
algunos otros desmantelados, en un intento de romper con el pasado y modernizar el país. Durante la
Segunda Guerra Mundial, muchos castillos fueron destruidos durante los bombardeos en las regiones
de la costa del Pacífico y sólo algunos castillos permanecieron intactos.
Posteriormente a la Segunda Guerra Mundial muchos castillos han sido reconstruidos con materiales
modernos, como hormigón, aunque en algunos pocos se han utilizado los materiales originales y
siguiendo la misma técnica que en su época de esplendor.
Al día de hoy sólo doce conservan su estructura original. De los castillos existentes, muchos han recibido el
estatus de Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, otros han sido designados Tesoros Nacionales.
Shogún, era un título concedido directamente por el emperador utilizado para referirse
al general que mandaba al ejército. Durante el siglo XII el shōgun era gobernante de
facto de todo el país, aunque el emperador era el legítimo gobernante. Durante este
tiempo, el emperador delegaba la autoridad civil, militar, diplomática y judicial a quien
tuviera dicho título. Después del siglo XII, el término se utilizó para designar al líder de
los samuráis.
Durante los primeros contactos con occidente e incluso en algunos
países asiáticos como China, el shogun era considerado como «rey de Japón»,
ignorando que existían dos estructuras de autoridad.
Durante la historia de Japón existieron tres shogunatos y el primero fue el establecido en 1192 conocido como
«shogunato Kamakura». Dicho gobierno solo fue controlado por tres miembros del clan Minamoto. El segundo
shogunato es conocido como «Ashikaga» fundado en 1338. Durante este shogunato quince miembros del clan
Ashikaga mantuvieron el puesto hasta 1573.
El último fue el «shogunato Tokugawa», instituido oficialmente en 1603 y culminó
en 1868 ya que el emperador Meiji retomó su papel protagonista en la política del país
y la figura del shōgun fue abolida
En los alrededores del castillo de Matsumoto también es posible disfrutar del ambiente
de calles típicas y tradicionales, que son una reproducción de las calles del periodo
Edo.
Kamakura
a 50 km al suroeste de Tokio, es una ciudad que
se encuentra rodeada por montañas en tres
direcciones y por la bahía de Sagami en la
cuarta.
Fue creado en el siglo Xl y con el tiempo fue creciendo hasta lo que es hoy.
Al cruzar el primer torii que marca el acceso al terreno sagrado del santuario, se
puede observar un gran estanque dividido en dos, diferentes edificios, pabellones, y
altares secundarios. De los dos estanques, uno se dice que representa el clan
Minamoto (fundador del santuario), y tiene tres islas. Número que al ser pronunciado
en japonés suena igual que la palabra “vida”. El otro estanque, representa al clan
enemigo de los Tiara, y cuenta con cuatro islas. Número que al ser pronunciado en
japonés suena igual que la palabra “muerte”.
Tokio
Tokio, la ajetreada capital de Japón, combina lo ultramoderno y lo tradicional, desde los rascacielos
iluminados con neones hasta los templos históricos, centro de
la política, economía, educación, comunicación y cultura popular del país. Cuenta con la mayor
concentración de sedes corporativas, instituciones financieras, universidades, museos, teatros, y
establecimientos comerciales y de entretenimiento de todo el país.
Con una población que supera los 37 millones de habitantes, la convierte en la mayor aglomeración
urbana del mundo.
El centro de Tokio, con sus 23 barrios, ocupa un tercio de la metrópoli, con una población cercana a los
13,2 millones de habitantes. Aunque muchísimo antes ya existían en el lugar pequeñas poblaciones y
templos, es en el siglo XV que se empezó a formar la ciudad que inicialmente se llamo Edo. Durante
la Restauración Meiji el Emperador se mudó al Castillo Edo, convirtiéndolo en el gran Palacio Imperial de
Japón y cambiando de nombre de Edo a Tokio, “la capital del este”.
Entre el gran terremoto de 1923 y después el intenso bombardeo durante la segunda guerra mundial,
desde 1942 hasta 1945 la ciudad quedo devastada.
Pero durante el periodo 1950 y 1960 se fue reconstruyendo, reestructurando y experimentó el llamado “milagro
económico” dando lugar a que Tokio sea una de las ciudades más dinámicas del planeta.
Combinados la red ferroviaria y de metro, reúnen más de 70 líneas, formando la red ferroviaria urbana más
extensa del mundo. Esta forma de transporte es la más utilizada por los habitantes de Tokio; con 20 millones de
pasajeros diarios estimados, y más de un millar de estaciones. El Metro de Tokio, es el único en el mundo
totalmente automatizado.
Nos maravillo la frecuencia, rapidez, limpieza, orden y eficacia del sistema, así como el comportamiento cívico
de las personas.
A pesar del ingente numero de personas, no hay atascos, ni gritos, ni empujones, la salida de cada vagón es
rápida, silenciosa , ordenada y de forma natural se van formando filas hacia las escaleras automáticas de salida,
una mas rápida, otra mas lenta. Lo mismo para la entrada a los vagones.
Pero también nos sorprendió la amabilidad y disposición de ayuda, en muchas ocasiones al vernos consultar un
plano o documento alguien se acercaba a auxiliarnos, a pesar de que el conocimiento de otros idiomas no era
frecuente. Esto lo experimentamos con mucha frecuencia a lo largo de todo Japón.
El nō es una de las manifestaciones más destacadas del drama musical japonés que se ha realizado desde el
siglo XIV Estas representaciones combinan canto, drama, danza y orquestación de tres o cuatro instrumentos
y tienen como principio la elegancia, belleza, misterio. El teatro nō es popular entre un grupo amplio de
japoneses.
Parece que el kabuki comenzó en 1603, con nuevo estilo de danza dramática Las ejecutantes femeninas
interpretaban tanto los papeles femeninos como masculinos en situaciones cómicas de la vida cotidiana. Estas
actrices estaban comúnmente disponibles para la prostitución. Pero pronto fueron sustituidas por actores
masculinos que hacían mas énfasis en el drama que en la danza.
En el Japón moderno, el kabuki, es el más popular de los estilos tradicionales de drama japonés.
Hoy en día, más del 50% de hombres y mujeres se gradúan en alguna de las cerca de 800 universidades que
existen en JAPON. La universidad de Tokio es la más famosa y prestigiosa, tiene aproximadamente 28.000
inscritos actualmente. También es conocida por ser la universidad con más premios Nobel, hay un total de 11
profesores en la Universidad de Tokio que han ganado el Premio Nobel.
A pesar de que Tokio puede ser una de las ciudades más caras del mundo, hay formas alternativas
para divertirse, ilustrarse y comprar cosas interesantes a precios mas baratos.
Cada fin de semana, cientos de personas salen a la calle para dar vida a la nutrida selección
de mercadillos y ferias de antigüedades que tienen lugar en la capital nipona, en general en
espacios cercanos o alrededor de templos y santuarios .
El abanico de artículos que podemos encontrar pueden convertir la experiencia en algo muy
divertido mientras nos alejamos de los itinerarios turísticos más clásicos.
Visitamos dos de estos mercadillos de antiguedads, donde pudimos disfrutar de ese particular
ambiente, donde tuvimos la oportunidad de ver curiosos artilugios, kimonos, telas, gravados, etc.
La noche de Tokio es considerada como uno
de los espectáculos lumínicos más
llamativos del mundo. Los neones que
inundan las calles y los altos rascacielos,
son algunos de los detalles que impactan
por la belleza con la que colorean la urbe;
existen determinadas zonas que de noche
transforman sus calles en pasarelas de la
moda, en las que los jóvenes lucen el look
más vanguardista.
En cada barrio existen zonas de mas
ambiente nocturno, nosotros disfrutamos
varias noches en el barrio Shinjuku, donde
por ejemplo en el curioso Golden Gai se
concentran casi trescientos pequeños
locales de unos 10 metros cuadrados,
distribuidos en varias callejuelas con casitas
adosadas, para divertirse.
No falto un local muy llamativo, de colores
estridentes que ofrecía un espectáculo de
robots.
Rosa Arregi
Rosaarregi.wordpress.com
Abril de 2020