Está en la página 1de 17

El Templo Colonial de Huaro

UBICACIÓN

El templo de San Juan Bautista de Huaro, fue declarado "Monumento Histórico" mediante
Resolución Suprema N° 2900-72-ED de fecha 28 de diciembre de 1972. Se encuentra
ubicado en la Plaza Principal del distrito de Huaro, provincia de Quispicanchis, departamento
del Cusco, a 40 Km. de la ciudad de Cusco.

De clima templado, con 10º C  de Tº promedio, con dos estaciones definidas, una de lluvias
y la otra seca.

La actividad principal del poblador de Huaro es la agricultura, por lo cual mantiene una
operación comercial constante con Cusco y los distritos aledaños a ella, siendo el maíz la
principal producción.

REFERENCIA HISTÓRICA

Edificado bajo la advocación de San Juan Bautista patrón de los sumisos y desposeídos. Se
infiere por los elementos arquitectónicos que posee, que su fundación podría haber sido en
la segunda mitad del siglo XVI, época en que los religiosos Jesuitas llegan a Cuzco (1571) Y
luego se dirigen al pueblo de Huaro para hacerse cargo de la reducción indígena
encomendada por el Virrey Toledo.

Posterior a su construcción, este templo fue decorado con pintura mural hacia el interior.
Posiblemente las primeras decoraciones fueron elaboradas entre 1675-1699, tiempo en el
que los jesuitas inician el equipamiento de sus templos con retablos, pinturas murales o
lienzos y ornamentos a todas las diócesis.

Huaro, en el pasado incaico, formaba un importante eslabón en la cadena de posadas o


tampus que sucedían por todo el curso superior del Vilcanota, conjuntamente con sus
vecinas aldeas de Quiquijana, Chupanhuaroc, Urcos hasta Rumicolca, incluyendo
Andahuaylillas.
A partir del S. XVI, cuando los españoles tomaron posesión de estas comarcas, la
conformación urbana del conglomerado rural incaico de Huaro sufrió una transformación de
acrecentamiento, acorde con los modos de producción implantados por los conquistadores.

CARACTERÍSTICAS DEL TEMPLO.

Frente a un amplio atrio al que se accede a través de tres gradas de piedra labrada, se
encuentra el ingreso principal al templo al que se desciende por dos desniveles y un
descanso de piedra labrada. La portada principal conduce hacia el primer espacio o
sotocoro. Hacia la derecha de éste se encuentra una escalinata con tres gradas de piedra y
el resto de tierra apisonada que nos conduce al coro.

Adosada a la iglesia en forma perpendicular se hallan los ambientes pequeños del


bautisterio (muro del evangelio), dos capillas laterales, la sacristía y el depósito de andas a
manera de contrafuertes que hacen un juego de volúmenes característica de las iglesias de
la región.

El mayor espacio interior está ocupado por la nave de planta rectangular. La cubierta de la
nave se halla limitada por el arco triunfal o toral que se encuentra más elevado con
referencia a la nave principal. A continuación se ubica el presbiterio al que se accede por un
podio escalonado de piedra labrada, a los costados se hallan los accesos a la sacristía y
depósito de lienzos que custodian la capilla, las puertas son de madera color verde colonial,
en el muro testero se ubica una ventana con derrame, marco de madera y vidrios simples.

La portada lateral está diseñada con arco de medio punto trabajada en piedra, puerta de
madera.

ELEMENTOS CONSTRUCTIVOS

Construido con cimiento de piedra simple y sobrecimiento de piedra labrada: muros de


adobe, con revoque de barro seleccionado y encalado al interior y exterior; el artesonado
está estructurado con madera rolliza y cañas tipo kur-kur, que se mantiene hasta la fecha y
están cubiertas con pintura mural a nivel del cielo raso. El techo es en estructura de par y
nudillo con cubierta de teja tipo colonial. Los pisos de ladrillo han sido intervenidos en todos
los ambientes excepto en el piso del presbiterio donde subsiste el ladrillo pastelero y
graderías de lajas de piedra. Los espacios exteriores están empedrados con piedra tipo
"canto rodado".

En la fachada del templo resaltan dos elementos bien definidos:

a. La portada: Trabajada en piedra labrada, tipo retablo de un cuerpo que remata en una
hornacina y elementos decorativos simétricos.

Cuerpo: Formado por un arco de medio punto que descansa sobre dos pilastras simples
pareadas y nervadas, con nervadura en el extrados; en los intercolumnios presenta
hornacinas con veneras en la parte superior y sostenidas por la parte inferior con peanas,
las pilastras exteriores de la portada rematan en esbeltos pináculos.

Coronación: Pequeña hornacina con peanas y venera, arco de medio punto sostenido por
dos pilastras nervadas. La hornacina remata en un frontón trilobado que sostiene en la
parte superior un relieve del AGNUS-DÉI. En el hastial se ubica un pequeño óculo u ojo de
buey.

b. Espadaña: La base está constituida por un cuerpo de factura mestiza, trabajado en


adobe, con embarre y encalado, sobre el que se ubica la espadaña construida de manera
escalonada, con una estructura lítica de tres niveles y tres arcos de medio punto en la base
que se desarrollan gradualmente para rematar en un arco. Estos arcos servían para
sostener las campanas.

LA PINTURA MURAL

Constituye una de las primeras formas de expresión artística del hombre. Usada desde
tiempos prehispánicos. En tiempos hispanos, durante los siglos XVII a XIX, Huaro, recibió
diferentes influencias artísticas tanto de las escuelas europeas como la influencia indígena.
Desde la llegada de los españoles al territorio de los Incas, se mezclaron técnicas hispanas e
indígenas en la ejecución de obras de arte.

Los primeros dibujos ejecutados en el templo de Huaro fueron al parecer en el presbiterio,


de autores anónimos. Posteriormente se ampliaron las obras hacia los muros de evangelio y
la epístola, muro de pies para luego ascender hacia el coro y el cielo raso. La mayoría de las
pinturas murales son obra de Thadeo Escalante y de sus discípulos.

En el siglo XVIII, la decoración subió hasta los techos y bóvedas. Como una evocación al
cielo. A partir de entonces, la decoración se ejecuta en todo el espacio interior (muros.
Techos, cielo raso, columnas. etc.)

Tanto mestizos como indios son cada día más numerosos en los gremios de pintores. La
creciente presencia de éstos modificará las características arquitectónicas de la región y
producirá el fenómeno que se ha definido como "Barroco mestizo". Estilo que se prolonga
hasta mediados del siglo XIX.

THADEO ESCALANTE nacido en Acomayo posiblemente en 1770 y muerto en 1840,


descendiente de los incas, ejecutó sus obras entre fines del siglo XVIII e inicios del Siglo
XIX. Fue discípulo de los muralistas mestizos Zapata. Gutiérrez y Vilca.

El conjunto de Huaro es un buen ejemplo de pintura programática, donde los temas se


tratan episódicamente en torno a un asunto o grupos de asuntos, que deben interpretarse
siguiendo una a una las escenas. En Huaro los grupos pictóricos son cinco, colocados en las
siguientes partes de la iglesia: arco triunfal con la apoteosis de San Juan Bautista, patrón de
la iglesia, nave, arcos que sostienen el coro, sotocoro y artesonado del techo.

Los tres arcos que sostienen el coro, están decorados en el anverso y reverso. Reverso:
Reiteran la temática del Arco Triunfal con San Juan Bautista y San Pedro, como
protagonistas. Anverso: En el lado izquierdo están representados Arcángeles. En la parte
media "La Sagrada Familia", y al lado derecho la representación de "Los Ángeles" y "Las
Virtudes".

El Coro Alto.
Corresponde al S. XVIII. Las pinturas están trabajadas sobre los muros de adobe y el cielo
raso.
Al igual que la nave, el cielo raso del coro se encuentra dividido en unidades menores por
vigas construidas con troncos de árboles, tejidas con caña tipo "kur-kur", cubiertas por
gruesas capas de barro y cal.

La iconografía está representada por fruteros, animales, santos (San Pedro, Santa Rosa,
San Miguel, La Coronación de la Virgen, La Anunciación), querubines y mascarones.

Sobre las paredes, pintaron once motivos textiles de paños verticales o tapices de tonos,
ocre, naranja, verde y azules sobre los que representaron escenas mundanas.

Arco triunfal.

Está representado el ensalzamiento de San Juan Bautista de pie entre los Doctores de  la
Iglesia, que son seis: San Gregorio, San Agustín, San Ambrosio, San Jerónimo. Santo
Tomás de Aquino, San Buenaventura.

A los extremos del arco se encuentran los Evangelistas: María está representada con
atributos papales (tiara y llaves).

La referencia al papado es reiterativa, pues en la nave, bajo el friso, están pintados los
Papas. En el intradós del arco se ve el cielo: ángeles, luna, sol y estrellas.

La gama de colores que son utilizados es diversa, predominando el rojo y azul.

Cielo raso

La decoración se concibió en franjas horizontales trazadas de arriba hacia abajo.

Trabajadas sobre estructura de madera rolliza, caña tipo "kur-kur" y mortero de barro con
fibras vegetales.

La iconografía está representada por simbología cristiana (apóstoles), fruteros, cestos,


querubines, follajes.

Los colores que predominan en la obra son el rojo, verde y azul sobre el fondo blanco.

Ejecución de obras de conservación y restauración


1. “Las pinturas murales son las primeras obras a intervenirse. Los trabajos se realizan
en los muros del Evangelio y de la Epístola, el cielo raso, friso del presbiterio. El tiempo de
ejecución está comprendido entre el 01 de junio del 2004 al 30 de abril del 2005.

2. "Las pinturas de caballete": En la nave se ubican cuarenta y nueve lienzos que se


encuentran en franco proceso de deterioro, de los cuales diez requieren prioritaria atención.
Los trabajos se ejecutaron entre mayo del 2005 - junio del 2006.

3. "Los retablos": Existen seis retablos y un altar mayor. Sobre los mismos se ubican
esculturas atribuidas a diferentes santos y vírgenes. Los trabajos están programados para el
período 2005 - 2006.

Actividades desarrolladas por el I.N.C. durante el 2004:

LOGROS

Se ha ejecutado a la fecha las siguientes actividades:

- Registro fotográfico.
- Limpieza superficial.
- Limpieza profunda.
- Consolidación del soporte y capa pictórica.
- Reintegración cromática.

Estas actividades han sido ejecutadas en los siguientes sectores: sotocoro con un avance de
77.60m", Nave con un avance de 96.42m", Coro con un avance de 80.02 m2.

El Proyecto está diseñado para generar espacios de diálogo e interacción con la población a
través de visitas guiadas, concursos de dibujos y pintura dirigidos a niños y jóvenes, charlas
explicativas que muestren la importancia y significado artístico del templo en la
recuperación del "Patrimonio Histórico" e incentivará a las autoridades locales para que
comprometan presupuestos que sirvan para actividades complementarias de difusión y
promoción orientadas a la revaloración del patrimonio local y sus atractivos.

Huaro, Cusco (Perú)


El 26 de octubre de 2014 tuvo lugar la inauguración de la iluminación artística
del Templo de San Juan Bautista en Huaro, Cusco, patrocinado por Edelnor y
la Fundación Endesa.

Este Templo forma parte de la Ruta del Barroco Andino junto con el Templo
de la Compañía de Jesús de Cusco y el Templo San Pedro Apóstol de
Andahuaylillas.

Se han instalado luces de tecnología LED de última generación que supone


una alta eficiencia energética pero un gran ahorro en consumo eléctrico.

Templo de San Juan Bautista

El Templo colonial de Huaro, construido entre los siglos XVI y XVII, es de


estilo barroco y en su interior se conservan murales empleados durante el
proceso de evangelización y firmados en 1802 por el artista cusqueño Tadeo
Escalante. Fue el máximo representante del arte mural cusqueño de fines del
siglo XVIII e inicios del siglo XIX. Es un verdadero prodigio del arte mural.
Los murales miden, aproximadamente, de 3 a 4 metros de largo por 2 metros
de altura. El arte es de una belleza desconcertante y terrorífica.

No se conoce otro templo en el país que presente como tema conceptual la


presencia del demonio y la muerte, cuyas presencias obedecerían mas bien a
una advertencia para que los feligreses optaran por el buen camino.

El techo del Templo de Huaro es uno de los más hermosos de toda la pintura
andina….es un rococó tardío y desenfrenado, donde el horror al vacío puebla
todos los rincones con colores.

En la inauguración del encendido estuvieron presentes el presidente y el


director gerente general de Edelnor, Reynaldo Llosa e Ignacio Blanco,
respectivamente, así como el párroco de Huaro y Andahuaylillas, Carlos Silva
y todo el pueblo de Huaro quienes lo celebraron con música y baile. Todos
coincidieron en afirmar que esta iluminación fortalecerá la devoción del
pueblo y potenciará el turismo de la zona.

La Fundación Endesa, fiel al compromiso que figura en el art. 5 a) de sus


estatutos: “La iluminación, así como actividades conexas de bienes integrantes
del patrimonio histórico – artístico español o de los países en los que Endesa o
sus empresas participadas están presentes, especialmente en Iberoamérica”,
ha colaborado con Edelnor en iluminar más de 23 monumentos religiosos y
civiles de Perú, siendo los más relevantes el Palacio de Gobierno, el Palacio
Arzobispal y la Catedral de Lima.

Huaro, la iglesia con historias pintadas en las paredes


 10 SEPTIEMBRE, 2016
El arte barroco andino nace de la fusión de las iconografías y cosmovisiones del mundo de los Andes con
el catolicismo venido con los españoles. Ambas se juntan en paredes, pinturas, esculturas y
expresiones artísticas con un fin muy concreto: la evangelización de la población indígena en el tiempo de la
conquista y la colonia.

Varias de las expresiones más impresionantes de este arte se encuentran a pocos kilómetros de Cusco. Son tres
iglesias, San Pedro Apóstol de Andahuaylillas, San Juan Bautista de Huaro y Virgen Purificada
de Canincunca. Estas iglesias, junto a La Compañía ubicada en la plaza de armas de Cusco, conforman la
Ruta del Barroco Andino.
No son las únicas y su ubicación geográfica responde a significaciones que vienen de épocas muy remotas.  En
la sierra norte del departamento de Lima, por ejemplo, se encuentran las llamadas iglesias doctrinarias, con
paredes repletas de coloridas pinturas y profundo afán evangelizador. En el caso de las iglesias  cusqueñas, se
encuentran ubicadas en la ruta que une la capital del imperio incaico con el Titicaca y con la selva de Madre de
Dios. Dos rutas o suyos por donde circulaban, desde hace siglos, los comerciantes de oro, plata y coca, y
después, a partir del siglo XIX lo obrajes, lanas y tejidos. En ellas también se encuentran bellísimas
expresiones barrocas, tanto en el sur de Puno como en varias localidades que cruza la IIRSA Sur hacia Puerto
Maldonado. Es el corazón del comercio, las relaciones sociales y la religiosidad andina donde también destaca
el Ausangate, el nevado más alto de Cusco y el apu o señor más importante en la religiosidad andina.

En todas estas localidades se levantaron iglesias a partir del siglo XVI para evangelizar a la
población indígena. Una de esas iglesias, quizá la más espectacular por la riqueza de arte mural, las pinturas de
la Escuela Cusqueña y varias docenas de esculturas religiosas, es la que se encuentra en Huaro. Las
pinturas muestran las postrimerías religiosas: la Muerte, el Juicio, el Infierno y la Gloria, murales cargados de
color y figuras de todo tipo. Desde monstruos devoradores de personas a ángeles. De dragones a unicornios.
De flores a sapos. La entrada al templo y la visión de este arte religioso sigue provocando, 500 años
después, absoluto sobrecogimiento.

Ficha técnica
 Señalización: sí.
 Visita: 2 horas con el templo de Andahuaylillas.
 Ubicación: Cusco. Kilómetro 1016 de la IIRSA Sur tramo 1.
 Acceso: desde Cusco son 30 minutos (42 km). Dos kilómetros antes de llegar a Huaro
se encuentra Andahuaylillas.
 Servicios de alojamiento: no.
 Servicios de alimentación: sí.
 Servicios de guiado: sí.
  Ingreso: 15 soles (estudiantes y turistas nacionales: 10 soles).
 Departamento: Cusco.

HUARO

Es un pueblito situado a tan sólo cuatro kilómetros de Andahuaylillas. El mayor atractivo de


Huaro es, sin duda, su iglesia, a un lado de la amplia plaza. Para poder visitarla es necesario
buscar al ecónomo, que es el encargado de las llaves. En la plaza se encuentra también la
municipalidad y un gran reloj.

UBICACIÓN GEOGRÁFICA:
 " El distrito de HUARO se localiza en la provincia de Quispicanchi, en la zona Sur Oriental
Andina del departamento del Cusco, constituyéndose en el eje principal de caminos entre el
Altiplano y la Ciudad del Cusco, a 13º 41´01´´ de Latitud Sur y a 71º 38´22" Longitud Oeste con
respecto al meridiano de Greenwich; abarca una extensión superficial de 106.28 Km2. , y
representa el 1,4% de la superficie de la provincia.

 El paisaje de la zona aledaña al poblado muestra un piso quechua que en la parte baja
comienza sobre los 3,080 m. Sobre el nivel del mar y se encuentra ubicada sobre una terraza
aluvial, cultivada en casi toda su extensión con maíz, mientras que las partes altas de los
cerros adyacentes que sobrepasan los 4200 m.s.n.m., presenta pequeñas planicies para la
crianza de camélidos sudamericanos y cultivos rotatorios de papa en Sullumayo y junto a las
lagunas de Pumacocha y Yanacocha.

 La configuración Urbana en forma de damero tiene su centro en la Plaza de Armas, donde se
ubican el Municipio, la Iglesia, la Escuela y algunas casas de la época colonial. Sus calles
angostas son pavimentadas o empedradas y tienen canales de riego que las recorren
longitudinalmente.

 La carretera Cusco - Urcos atraviesa el pueblo dividiéndola y formando la calle principal del
pueblo, la Avenida Huascar, en la que se encuentran la mayor parte de las actividades
comerciales, los centros telefónicos comunitarios, La Comandancia Policial, el Mercado.

Origen de Huaro
 La zona en su etapa primitiva estuvo poblada por manadas de wanakus silvestres que
pastaban en las lomadas, el río y la laguna ofrecían cardúmenes de peces en considerables
cantidades, las primeras bandas de hombres andinos fueron atraídos por la generosa oferta de
la madre tierra, y para completar sus bondades tuvieron que cultivar la tierra y arrancarle sus
opimos frutos.

 Fausto Espinoza Farfán, ensaya una explicación etimológica en los términos siguientes:
"¿ Waroq de Wari ? Parece probable lingüísticamente al mantener la radical del sustantivo,
pero en sus actuales acepciones qheshwa, significa oroya i lugar pedregoso. El vallecito
acumula piedras pequeñas desmoronadas de los cerros que la circundan" .
 Los primeros pobladores del antiguo WARO, fueron los CHUCCHIS, tienen su origen en la
cultura WARI que se estableció en esta zona, posteriormente recibieron influencia de los
TIAHUANACUS , que dejaron como testimonio una huaca en forma de pirámide invertida frente
a la actual Capilla de Canincunca, de los NAZCAS, de los PARAKAS y de los Siete Reynos
Aymara.

 "Huaro, fue asiento de unos sabios legendarios, los Waros. Estos hechiceros fueron famosos
por sus predicciones y leían el futuro en el fuego, soplando las llamas con larguísimos canutos
de plata. Fueron también expertos curanderos y conocían las propiedades de una serie de
plantas medicinales que usaban para curar las enfermedades" .

 Varios cronistas describen al pueblo Yakarqa (?) de Waroq, como grupo de costumbres
diferentes a los demás, destacando como célebres curanderos, hechiceros y adivinos, al
extremo que los emperadores siempre los llevaban en sus campañas de conquista para que
auguren acontecimientos y contrarresten sortilegios de los rivales.

 Queda descrita una ceremonia Yakarqa: Como quince sacerdotes formaban círculo alrededor
de una hoguera, provistos de phukunas (tubos) largas cuya boquilla era de oro, el cuerpo de
plata y extremo de bronce que introducían a las brasas. El sumo sacerdote colocaba encima un
cántaro de cuello largo (especie de puytu) e iniciaba invocaciones. Soplaban al unísono
elevando las llamas y por el cuello asomaba un ser humanoide formado por las lenguas
semimovientes que respondía las preguntas.

 En los campos de los WAROS, se establece un sistema de irrigación en WARU WARUS que
se utilizan en la actualidad en los campos de cultivo de maíz. Mejoraron el MAIZ y
posteriormente fueron llevado al VALLE SAGRADO por los INCAS.

 En un cónclave de americanistas a iniciativa de Chavez Ballón, se comparó, un ceramio


encontrado debajo de la capa Wari, las formas y decoraciones, advirtiendo Rowe y los
concurrentes, que a fines de la etapa formativa, por la zona se desarrolló un señorío,
denominándolo CULTURA WARO.

LEYENDA DE LA LAGUNA QOYLLURURMANA


 Antiguamente el área que hoy ocupa la laguna era un terreno con ligeras pendientes dedicado
al cultivo de cereales, tubérculos, contados árboles frutales y ornamentales. En la parte baja de
Canincunca existía un pequeño manantial que prodigaba vida a huertos y jardines.
 Durante la época colonial, sustituidos las huacas por templos y capillas en buena parte del
territorio nacional, un indígena noble de Urcos llamado Ttitu Cusihuallpa, encargado de labrar
una pequeña fracción de tierra como recompensa por sus servicios a un usurpador peninsular,
se encontraba en plena actividad agreste un 25 de marzo, día de la Anunciación de Nuestra
Señora y Encarnación del Señor; en abierto desafío a los cánones españoles impuestos en el
Perú, se puso a fustigar una yunta para remover la tierra y preparar el vientre de los surcos que
fecundarán la semilla, los bueyes reacios al trabajo en un día sagrado respondieron: "Hoy no,
mañana sí", sin embargo más pudo la intransigencia del labrador, después de un breve
recorrido sintió que algo se desprendía del suelo, grande fue su sorpresa al ver que el agua
emergía a borbotones cada vez más crecientes, colmando toda la microcuenca raudamente,
sepultando a la vez, al osado agricultor y a los bueyes inocentes.
 Se dice que en las enigmáticas noches de luna llena se oye el mugido frenético de los bueyes,
sembrando el pánico en los humildes moradores de las inmediaciones.

ORIGEN DE LA CADENA DE HUASCAR


 (Tarquino Guevara)

 Refiere la historia que el Inca Huayna Cápac, en el apogeo de su gobierno, mando fabricar en
uno de los talleres de orfebrería una "waskja" de donde deriva el nombre de Huáscar, de unas
200 brazadas de largo y de un grosor del antebrazo - que bien ha podido ser fabricada en la
orfebrería de Batan Orqo - pero que en una fiesta, en la que debía tomar nombre el
primogénito, en la Plaza Aukcaypata abarcó todo el contorno suspendida de las manos de los
nobles. En medio de cánticos e himnos al Sol, fue paseado el futuro heredero del trono; como
diríamos, la ceremonia del bautizo o "sutichay". Como que fue coronado el Príncipe Huáscar a
la muerte del Inca Padre Huayna Cápac.
 El Inca Huáscar llegó a ocupar, en el poco tiempo de su reinado el Amaru Cancha, actual
Universidad del Cusco, Capilla de Lourdes y el Templo de la Compañía de Jesús; en ese
palacio se conservaba la cadena, en una sala sagrada o sea en la de los Amarus o serpientes.
Con la caída del Imperio a la vez de su hermano Atahuallpa después de una carnicería
espantosa, profanaron los súbditos del invasor la ciudad sagrada, los templos y demás
edificios; hallaron la cadena, y se supone, que conduciéndola pesadamente ya en las cercanías
de Huaro, se supo de la invasión española y de la codicia de éstos, de sus exigencias y sed de
oro; fue entonces que se recibió la orden de sepultar la cadena, lo cual pudo haberse hecho en
la laguna.( Q´oyllururmana)

EL TEMPLO COLONIAL DE HUAROEs un verdadero prodigio del arte mural y, sobre todo, del
talento del gran Tadeo Escalante. El interior está íntegramente decorado y, aunque no todo se
deba a su mano, una de las mayores cualidades de esta iglesia es la sensación de armonía,
que obedece al hecho de que la mayor parte de la obra estuviera a su cargo. Los murales
están fechados en 1802.

¿Quién fue Tadeo Escalante?


"A caballo entre dos siglos y entre dos mundos, política e ideológicamente diferentes, nos da
un arte nuevo y valedero que entronca con lo popular"
 José de Mesa y Teresa Gisbert, historiadores del arte.

 Para estos historiadores del arte fue el último "gran pintor cusqueño" y, pese a ese mérito
indiscutible, es muy poco lo que se sabe de él. Se le atribuyen también los murales del
convento de Santa Catalina en el Cusco y de la iglesia de Acomayo. Pero fue aquí, en Huaro,
donde realizó su obra más importante, y puso de manifiesto sus innovaciones y los rumbos que
tomó la pintura cusqueña en los albores del siglo XIX.

El techo
 "Es una pintura juvenil, alegre, diurna, inmersa en el mundo de flores, frutos y follajes que
Escalante escogió como sus elementos decorativos dominantes."
 Pablo Macera, historiador peruano, 1993.
 Según Pablo Macera, el techo de Huaro es uno de los más bellos de la pintura andina. No es
de estilo mudéjar (salvo el techo del presbiterio que es también el más antiguo) pero tampoco
barroco. Según Macera, pertenecería más bien a un “rococó andino”, que se libera de los
convencionalismos y da rienda suelta a la imaginación. Aquí también parece primar el criterio
de "horror al vacío", tan propio de la tradición andina.
 Algo notable en este techo es que, al haber sido asumido por un solo pintor, parece
corresponder a un diseño global.

Los murales
 En buena parte fueron pintados por Escalante, y si bien no se ocupó directamente de todo, es
seguro que dirigió la obra.
 La decoración principal es la del bajo coro y las zonas próximas a éste. En esta zona habrían -
según el análisis de Macera- siete grandes unidades, entre las que destacan los murales El
Infierno y Las Dos Muertes.

Las Dos Muertes


 "Con respecto a los murales alusivos a la muerte, que flanquean la puerta de entrada, se
puede decir lo siguiente: a mano derecha hay una curiosa escena con tres parejas de amantes
que cenan en torno a una mesa; el grupo que es sorprendido por la Muerte está encaramado
sobre un árbol. Del árbol pende una campana que Cristo toca anunciando el fin; la Virgen María
de rodillas ruega por los comensales. La Muerte corta el árbol y el demonio tira de él para que
sea más rápida su caída...
 Al otro lado de la puerta hay dos escenas superpuestas: la Muerte en la casa del Rico y
Muerte en la casa del pobre. En la primera se muestra un festín al que asisten varias damas y
engolados caballeros, vestidos todos a la usanza del tiempo sin arcaísmo alguno.

 Sin que su compañero de mesa se aperciba, distraída como está llevándose a la boca unos
manjares, la Muerte ha cogido a una mujer. Es un esqueleto que sujeta por los pies a su
víctima. En la parte superior del muro se muestra la “muerte del pobre”. El moribundo yace en
su lecho que se ve gracias a que el pintor ha suprimido oportunamente una pared de la casa.
Hacia él y atravesando la plaza, va una lucida procesión con el viático. La arquitectura y todos
los tipos dan un cuadro de encantadora ingenuidad y sencillez."
 Teresa Gisbert y José de Mesa.

Las postrimerías
 Según Macera, nada puede compararse en calidad con la representación del Infierno, con la
que Escalante se inserta en una tradición pictórica muy típica del mundo colonial, pues el tema
del juicio final fue muy frecuente.
 Lo que primero llama la atención es el esqueleto, entre cuyos huesos asoma su pobre alma. A
su lado yacen los símbolos de la vanidad terrenal: mitra, tiara y corona. La decoración lleva al
espectador a la escena final, el infierno, en donde los pecadores se precipitan unos sobre otros
y son sometidos a severas torturas antes de pasar a una olla hirviente. Un elemento muy
importante en la composición es el dragón que devora a los pecadores.

La nave
 La decoración podría describirse así de abajo hacia arriba: primero aparecen los papas, luego
una cenefa con corderos y más arriba las escenas de los santos, entre los que se cuentan San
Alberto, San Martín de Porras, Santa Rosa de Lima y el apóstol Santiago.
 Estas escenas se barajan con escenas civiles de la vida cotidiana, típicas del siglo XIX.

         

 "El templo colonial de Huaro posiblemente fue construido desde el Siglo XVII y terminada en el
Siglo XVIII, pues el templo de Urcos a media torre tiene techado con el año de 1660 y la
tradición cuenta que la construcción de ambos templos se inició en el mismo tiempo. Su
estructura está conformada por una Planta Clásica de una sola nave, fachada del primitivismo
clásico con decoraciones nativas, torre españada, techo de palos armados en doble vertiente.
En su interior guarda los murales o pinturas al fresco. Las paredes y el techo se encuentran
decoradas con flores y rosetas incluido el arco triunfal . La pintura Andina con influencia
europea utiliza paisajes flamencos, se utilizan colores vivos y acaramelados haciendo de esta
forma las escenas iconográficas, así como los decorados tomen mayor importancia a la vista
del espectador. Fue pintado utilizando colores naturales, óxidos de minerales, frutos de
vegetales como la Huanca - Huanca, arbusto que crece en la zona , la cochinilla; como
adherente utilizaron el zumo de la planta denominada en quechua " Hawaq`ollay" o "San
Pedro" Entre los temas pintados encontramos imágenes de Cristo, su vida y pasión; La Virgen,
retratos de Santos como el matamoros Patrón Santiago , el Arbol de la Nueva Vida , La muerte
en la casa del pobre y del rico. Se representa el cielo, el infierno, el purgatorio, el juicio final, la
resurrección de los muertos entre otros; fue pintado por el indígena Acomayino TADEO
ESCALANTE (1770 - 1840) , cuyo estilo impresionista es único en el medio. También existen
múltiples cuadros de la escuela cusqueña que se encuentran en las paredes de la iglesia. El
altar mayor está trabajado en plata, y los tallados en madera están revestidos en pan de oro".
Antropólogo José CANAL CCARHUARUPAY.
 Respecto a la fecha de construcción no ha sido posible aún encontrar datos exactos, para el
destacado historiador Pablo Macera, según su libro, "La Pintura Mural Andina", se empezó a
construir a fines del siglo XVI al igual que el de Andahuaylillas. Sobre las características del
templo, Macera, afirma: " El techo del Templo de Huaro es uno de los más hermosos de toda la
pintura andina….es un rococó tardío y desenfrenado, donde el horror al vacío puebla todos los
rincones con colores..". Sobre Tadeo Escalante, afirma: "Fue uno de los artistas que vertió su
arte a favor del templo de Huaro. Sin embargo, uno de los murales de su autoría es el que
destaca del resto: "El Infierno"…"el cusqueño tuvo la peculiaridad de incorporar a los elementos
formales (condenados desnudos, demonios bestializados, el dragón infernal y los instrumentos
de tortura) una composición diferente"… "combinó el modelo muralista con los del retablo y los
lienzos"…" en su visión del infierno presenta cuerpos medievales, de abdomen pronunciado,
sin sexo y de extremidades delgadas hasta el raquitismo", señala el historiador.
 Para la Dra. Alfonsina Barrionuevo, la pintura mural data de 1602.
 El padre Joaquín Díez Esteban, doctor en Teología, explica que no conoce otro templo en el
país que presente como tema conceptual la presencia del demonio y la muerte, cuyas
presencias obedecerían mas bien a una advertencia para que la feligresía opte por el buen
camino. Respecto a las frases que acompañan a este mural, señala que para un cristiano no
hay mayor castigo que el no poder ver a Dios y que la presencia de autoridades de la Iglesia a
punto de ser tragadas por una bestia serviría para demostrar que la pertenencia a una jerarquía
determinada no salva a nadie de terminar en el reino de Lucifer.
 "Sus murales relatan magistralmente el ambiente del infierno y del juicio en el bíblico valle de
Josafat, ante Dios que aparece con sus profetas, sus ángeles y santos para juzgar a los seres
humanos. El propósito era catequizar a los indios y convertirlos por el temor al infierno.
 Los murales miden de 3 a 4 metros de largo por 2 metros de altura más o menos. El arte es de
una belleza desconcertante y terrorífica.
 El primer mural es majestuoso. Las almas se levantan al llamado de Dios y son juzgadas en
una audiencia universal frente al diablo que enumera sus pecados. Hay tumbas que se abren y
esqueletos que se revisten de carne. Los grupos llevan leyendas alusivas, "Aquí será el llanto,
aquí el crujir de dientes, la muerte eterna se cebará en ellos", "Venid benditos de mi Padre al
reino preparado para vosotros desde el principio del mundo". "Apartaos de mí, malditos de mi
Padre, id al fuego eterno que está dispuesto para el diablo y sus aliados".
 Los buenos suben al cielo con palmas, entonando Hosannas, su desnudez es pura, sus
rostros irradian una dulce alegría. Otros van al Purgatorio que arde en llamas blancas, donde
estarán hasta que Dios les perdone. Los malos son lanzados "al lugar se llora inútilmente,
donde el rechinar de cadenas es eterno".
 El Infierno asusta: Es ese infierno clásico, de llamaradas rojas, de potros y mesas de tortura,
de horcas y calderas de agua hirviendo. De diablos que cabalgan sobre las almas
encadenadas y cosen la boca de los mentirosos, que azotan a los viciosos de la carne y a los
avaros que se doblegan bajo el peso de sus bolsas de centavos, de bichos repugnantes que se
enroscan en el cuerpo de los envidiosos, de iracundos que son ahorcados una y mil veces,
mientras el bozal y el freno impiden comer a los afectos a la gula y los soberbios y perezosos
se arrastran azuzados por otros seres infernales.
 Las llamas iluminan el cuadro dantesco donde se mueven asquerosas alimañas y monstruos
para mayor confusión de las almas que añoran el paraíso perdido. "Ay de mí que ardiendo
quedo! ¿Ay que no pude, ya no puedo! ¿Ay que por siempre he de arder!. ¿Ay que Dios nunca
he de ver!".
 En la descomunal caldera hay de todo, escribas y poetas, comerciantes y tonsurados, mujeres
hermosas y falsas virtuosas, obispos y Papas, que pagan con la pena eterna las culpas
cometidas en vida.
 Tras un arco de flores, Tadeo Escalante pintó la apoteosis de la Gloria. En el acto final el
artista es sobrio. Quién sabe no creía del todo en ese cielo. El Padre Eterno abre las puertas
del paraíso y una multitud se precipita en procesión de luces, agitando sus palmas y
bendiciendo al Señor. Cierra la marcha el Lanlako, hombrecillo de tres cabezas que es
guardián de las almas.
 Otros pasajes religiosos llenan la iglesia que está totalmente decorada. El pintor indio debió
consumir una parte de su vida en su penumbra. Bajo su paleta brotaron la vida de Jesús, la
muerte benigna en la casa de del pobre y terrible en la casa del poderoso, el árbol de la vida, el
amor y la muerte, y muchos más que figuran en hermosos medallones y murales.
 Uno de ellos relata vívidamente la historia de la muerte que fue madrina. Hubo un hombre que
buscó cierto día un padrino para su hijo que estaba moribundo. A nadie encontró en las calles y
la casualidad hizo que le saliera al paso la muerte, vestida de caballero. Sin que él supiera su
identidad ella se ofreció para recibir al niño.
 Apenas concluyó el bautizo, la muerte le regaló un secreto, sabiendo que era muy pobre. "Has
de saber que soy la muerte y quiero ayudarte. Desde hoy harás de médico. Cuando me veas
sentada a la cabecera del enfermo, no lo cures porque no tiene remedio. Pero si no estoy
recétale cualquier mate de hierbas que sanará". Con esta fórmula, el hombre se hizo y famoso.
En agradecimiento mandó hacer una pintura con un esqueleto que lleva corazón y dentro de él,
un niño".
 Tadeo Escalante habría concluido su labor en el templo en 1802.

 Como en otros sitios, rodea al templo el cementerio sectorizado en clases sociales y


pudientes, cuyas ornacinas aún encontramos en los cercos colindantes, donde cada primero de
noviembre se depositaban los despojos y las ofrendas que el sacerdote retiraba en pago, luego
del responso.

CAPILLA DE CANINCUNCA

 "El Santuario Histórico de Canincunca se encuentra en el kilómetro cuarentiuno (41), pista


asfaltada Cusco - Urcos.
 Etimológicamente proviene de la fusión de dos vocablos quechuas:
(a) Kanin = Morder .
(b) Cunca = Cuello.
 Significa el recorte de la fusión de los bordes inferiores de dos cerros, considerados como
míticos, con tres finalidades: religioso, económico y cultural.
 En la época Pre-Inca fue conformante del dominio Wari, erigiéndose una Waka (adoratorio); en
forma piramidal, con pisos funerarios Interiores, siendo la dominadora de los cultos en los
valles del Vilcanota y una Laguna denominada Qoyllur Qocha.
 En la época Inca, tuvo mayor trascendencia en lo religioso, como deidad de la agricultura.
 En la época Colonial, consta de estructura de piedra y barro que se exhibe en la actualidad.

 El Templo de Canincunca se caracteriza por representaciones pictóricas churriguerescas,


género complicado desde mediados del siglo XVII hasta fines del siglo XVIII. El paramento
frontal está conformado por doce pinturas al fresco, de escenas religiosas, al estilo escultórico
barroco. En el techo del interior figuran formas geométricas de variados colores. En las paredes
laterales se observan escenas de imágenes milagrosas. En lo escultórico se aprecian 08
columnas pequeñas que por su recargada ornamentación de líneas predominantemente curvas
( Churrigueresco - Barroco ), le dan un aspecto de libre movimiento de guirnaldas flores, rostros
y figuras".

 El culto desde la Waka de Kaninkunka dominaba tres valles y la laguna de Qoyllur Qocha. Allí
se festejaba en la época del crecimiento del maíz, con el tiempo devino en la feria que lleva su
nombre.
         

También podría gustarte