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INSTITUTO SUPERIOR TECNOLOGICO “AMERICANA DEL CUSCO”

LA IGLESIA VIRGEN PURIFICADA


DE
CANINCUNCA

DOCENTE: LIC. MIGUEL UCAÑANI SOTO.

CURSO: HISTORIA DEL PERU Y UNIVERSAL.

CARRERA: GUIA OFICIAL DE TURISMO II.

INTEGRANTES:

 PACHECO HUAMAN, JESUS.

 CCOA COLLADO, JENNIFER FIONA.

 CONDORI OCHOA, ELIZABETH.

 ,MESIAS.

CUSCO – PERU

2018
Introducción
LA IGLESIA VIRGEN PURIFICADA DE CANINCUNCA

La “Ruta del Barroco” nos muestra las más hermosas cualidades de diferentes iglesias que
muestran en su arquitectura y en el interior la ornamentación excesiva, clara característica del
estilo barroco, de todas estas excepcionales iglesias existe una muy interesante que es la
iglesia Virgen Purificada de Canincunca, que no solamente a través de sus expresiones
artísticas nos muestra la riqueza del barroco mestizo sino de cómo a través de los siglos este
patrimonio junto a la población nos muestra una clara identidad con las tradiciones y
costumbres de nuestro ancestros.

UBICACIÓN:

La Capilla de Canincunca se encuentra ubicada en el distrito de Huaro, provincia de


Quispicanchi a 40 kilómetros de la ciudad del Cusco en dirección sureste, a 3200
msnm. Este monumento religioso es paso obligado en la ruta principal Cusco-Puno.
DESCRIPCIÓN:
Etimológicamente proviene de la fusión de dos vocablos quechuas: Canin que significa morder
y Cunca, cuello. Significa el recorte de la fusión de los bordes inferiores de dos cerros,
considerados como míticos nombres por identificar, con tres finalidades: religioso,
económico y cultural. En la época pre-Inca fue conformante del dominio Wari, cultura
desarrollada entre el 600 d.C. al 1100 d.C.
Se sabe que entonces se erigió una waka (adoratorio) en forma piramidal, con pisos funerarios
Interiores, siendo la más importante de los cultos en tres valles formados por el río del
Vilcanota y de la laguna denominada Qoyllur Qocha, hoy conocida como laguna de Urcos. En
época Inca (siglo XV), el sitio fue reutilizado por estos y tuvo mayor trascendencia en lo
religioso como deidad de la agricultura.

→ Laguna de Urcos. Vista general del entorno paisajista al costado de la Capilla de la Virgen Purificada de Canincunca.

La tradición señala que en tiempos antiguos, en este lugar se realizaban festejos en la época
del crecimiento del maíz, es decir entre los meses de noviembre a marzo. En tiempos
modernos, en febrero se lleva a cabo una importante feria que lleva su nombre,
posiblemente como reminiscencia de aquella antigua festividad.

HISTORIA DE LA CAPILLA:

Los antecedentes mencionados permiten deducir que no fue casual que en este lugar se
edificara una capilla. Este sitio, que fuera lugar ceremonial importante en tiempos
prehispánicos, estaba destinado a ser lugar de devoción dentro de la política
evangelizadora que implantara España en el Nuevo Mundo. Es conocido por todos
que sobre lugares sagrados de antiguos adoratorios prehispánicos, los peninsulares
construyeron templos, capillas y adoratorios católicos, como símbolos evidentes de
imposición y dominio no sólo de la nueva religión, sino también del dominio político que
ejercerían en este territorio durante casi trescientos años.
La actual existencia del cementerio en la ladera posterior a la capilla, también nos
refiere este vínculo con sitios sagrados prehispánicos. El cementerio pudo existir desde
el momento de la construcción de la capilla. Actualmente está en uso y sirve a los
asentamientos aledaños, especialmente al poblado de Huaro y a los nuevos
asentamientos frente a la capilla formados casi 20 años atrás, denominados Virgen
Purificada y Bellavista.

→Detalle del cementerio de Huaro, detrás de la Capilla de la Virgen Purificada.

Como muchas de este tipo de edificaciones religiosas que aún quedan en la zona sur andina,
fueron construidas por los titulares de las Encomiendas, quienes inicialmente como parte
de sus funciones, tuvieron el encargo de la Corona Española de evangelizar a los
nativos en la nueva religión. Esta función luego estaría a cargo de las órdenes religiosas.

Si hubiera sido así, su construcción pudo ser temprana, es decir del último tercio del siglo
XVI.

ARQUITECTURA:

De forma rectangular alargada con contrafuertes hacia el exterior, está precedida por un
amplio atrio, consta de un recinto único como nave y sacristía en el lado del
Evangelio, con pequeño coro alto en “U”, dos torres de campanario y edificaciones
curales anexas, a las que nos referimos más adelante. El conjunto está construido con
cimentación y sobrecimentación de piedra, muros de adobe, techo de par y nudillo a dos
aguas y cubierta con teja, destacando en el interior el tratamiento integral con pinturas
murales de los siglos XVII y XVIII que cubren completamente paredes así como los
faldones y el harneruelo del falso cielo raso.
Tuvo algunas intervenciones parciales después del terremoto de 1950. Así mismo en el lustro
de 1975 se la restauró parcialmente, trabajo que estuvo a cargo del Proyecto del Instituto
Nacional de Cultura - UNESCO, tanto en la parte estructural de la edificación, como en parte
de su patrimonio mueble, especialmente la pintura mural.

Atrio:

Amplio espacio que precede las construcciones de la capilla, la casa cural al lado
izquierdo y el descanso hacia el lado derecho. Tiene pavimento con piedras de canto rodado.
Al costado izquierdo se prolonga ligeramente, donde crecen tres Pisonay y algo más
allá se encuentra una pequeña cruz de piedra tallada, sobre podio del mismo material. Dicen
los pobladores de la zona, que esta cruz se ubicaba donde actualmente está situada la
capilla. Es posible que durante la Colonia, en este sitio inicialmente se hubiera implantado
la cruz, para luego construir el recinto religioso.

→ Amplio atrio que da acceso a


la Capilla y a la Casa Cural.

Por el atrio se accede hacia la parte lateral derecha de la capilla, en cuyo muro se
encuentra una hornacina con restos de pintura mural del siglo XVIII, así como una
pequeña puerta, hoy clausurada, que llevaba a la torre de campanario del lado de la Epístola,
que contiene dos campanas.
Fachada:
Es sencilla, con sobre cimientos de piedra, capilla abierta a modo de pequeño balcón definida
por cancela de madera, con puerta central y adosadas al cuerpo de la capilla y torres de
campanario a cada lado. El acceso al recinto religioso se da a través de la portada de piedra
en arco de medio punto que arranca del atrio y que está algo retirada en relación a
las torres campanario. A los costados, en la parte inferior, se encuentran podios corridos
de piedra, a modo de asientos.

→ Fachada con capilla abierta y dos torres campanario. Nótese las leyendas a los costados de la
portada.

Hacia la izquierda se encuentra la recova, una construcción en adobe, de una planta, cuyo
acceso se sitúa en un volumen ligeramente más alto que el resto de dicha
construcción, que en conjunto da hacia el amplio espacio que la precede. El acceso exterior
a esta edificación es un vano con dintel de piedra y monogramas de María y Jesucristo,
posiblemente del siglo XVII, y los laterales construidos con algunos petroglifos de
origen prehispánico. En el 2013, por iniciativa de la autoridad municipal de Huaro, se ha
construido al lado derecho de la capilla un recinto abierto, con techo a dos aguas, según se
informa como lugar de descanso para los peregrinos que visitan tanto la capilla como el
cementerio.
A ambos costados de la portada se leen dos carteles con leyendas invocando al
hombre que pasara por aquella carretera saludar a la Virgen:

Lado del Evangelio:

POR CIERTO MAL HARIA


QUIEN POR AQUÍ PASASE SI
POR DESCUIDO DEJASE DE
SALUDAR A MARIA

Lado de la Epístola:

SI DESEAS QUE TU TRISTEZA SE


CONVIERTA EN ALEGRIA NO
PASES ALMA INGRATA
SIN REZAR UN AVEMARIA

Nave:

Se accede por el atrio. Tiene 30 m de largo y seis de ancho y pequeño presbiterio


delimitado de la nave por una grada y cancela de madera tallada policromada y
acabado en pan de oro. En este espacio se encuentra el retablo barroco. Al costado
izquierdo del presbiterio se encuentra la sacristía, a la que se accede por una pequeña
puerta de madera. Nave y presbiterio tienen piso de ladrillo pastelero, cambiado en
1979, a raíz de la intervención de la capilla en aquel año.
→La nave desde el coro alto. Nótese la estructura del techo de par y nudillo y tirantes.

En el acceso y a los costados de la nave se encuentran empotradas, en cada lado, piezas de


origen inca, posiblemente morteros de piedra labrada, que sirven como recipientes de
agua bendita.

En el lado del muro del Evangelio se encuentra una alacena con puerta de madera tallada
del siglo XVIII, seguidamente el retablo dedicado a la Sagrada Familia, compuesto por
hornacina empotrada con remate externo de talla en madera y altar de yeso del siglo XIX.

En el lado del muro de la Epístola está ubicado el retablo dedicado a San Roque. Es una
hornacina donde se encuentra la escultura del santo, del siglo XVII y tiene altar de yeso del
siglo XIX.

En 1977 la capilla contaba con un púlpito con pequeña escalinata, ubicado antes de la puerta
que da a la sacristía, construido en el siglo XX y que fue retirado en el proceso de
intervención de la capilla, por no contar con la calidad que el recinto ameritaba.
Sacristía:

De pequeñas dimensiones, con techo de par y nudillo, óculo sobre el muro de


cabecera y piso de ladrillo pastelero, consta de altar en la cabecera del muro,
dedicado al Cristo de Los Temblores. El altar es de factura contemporánea y sobre el mismo
se encuentra el lienzo del Señor de los Temblores, pintura de la escuela cuzqueña del
siglo XVIII.

→Interior de la Sacristía con lienzos de pintura cusqueña del siglo XVIII.

→Oleo del Señor de los Temblores. Escuela Cusqueña de Pintura. Siglo XVIII.
Se ubica en el muro de cabeceras de la Sacristía.
Al costado izquierdo de este recinto, se encuentra otro altar dedicado al Señor de la
Caída. Altar de factura contemporánea, lienzo del siglo XVIII de la Escuela Cusqueña de
Pintura, al lado un vano. Por este mismo lado se encuentra la puerta que da a la
construcción lateral a la capilla.

Al costado derecho está situado un mueble-armario de madera tallada


contemporáneo, donde se guardan los objetos litúrgicos. Sobre el mismo se
encuentran lienzos de la Escuela Cusqueña de Pintura, del siglo XVIII.

Casa Cural:

Es una construcción en adobe, de una planta con techo a dos aguas y cubierta de teja.
Tiene dos accesos, desde el exterior por el atrio y por el interior desde la sacristía. La
construcción está compuesta por un pequeño patio alrededor del cual, en tres frentes, se
construyeron varios ambientes con puertas independientes que dan al espacio
abierto. Del exterior se accede a este por un corto zaguán y desde el interior por una
puerta lateral de la sacristía que da a una galería con arcos.

→Pequeña portada de la Casa Cural al costado de la Capilla. Nótese el dintel de


piedra inca reutilizada con monogramas de Jesús y María.
↓Patio de la casa cural. Alrededor se ubican las edificaciones de una planta en
tres frentes. Hacia la izquierda la galería de acceso desde el interior de la
Capilla.
De esta galería también arranca la escalera de piedra de tres tramos que llevan a una pequeña
habitación que se usa como depósito, al coro alto y a la torre campanario del lado del
Evangelio con tres campanas, dos coloniales y una contemporánea, donada por residentes de
Huaro en la ciudad de Lima, como reza una placa situada en uno de los muro del campanario.
Es estrecha y algo baja, lo que obliga a quien suba tener que hacerlo algo agachada.

Coro Alto:

→Coro alto con pintura mural representando a


San Pedro y San Pablo. S. XVII.

Espacio en forma de “U” es de pequeñas dimensiones como toda la capilla y está


sostenido por canes. Se accede al mismo por la escalera externa situada en la galería de la
casa cural. Tiene puerta central en el muro de pies que lleva a la capilla abierta. Su piso es
de madera y cuenta con un órgano recientemente restaurado, temporalmente
ubicado en el templo de San Pedro Apóstol de Andahuaylillas. En este espacio se ubica el
esquilón.

↑Detalle de la cancela que delimita el


espacio del coro alto. Nótese la pintura del
cielo raso.
VALORES PATRIMONIALES:

Pintura mural:

Los murales de la Capilla de Canincunca, además del retablo principal, son lo más
destacado de su patrimonio artístico.

Como se ha señalado en anteriores descripciones de los templos vecinos a


Canincunca, se deben tener en cuenta dos aspectos que explican la presencia de
pintura mural en recintos religiosos como el que nos ocupa: que la pintura mural es parte de
la arquitectura e importante vehículo evangelizador.

En la capilla de la Virgen Purificada, la pintura mural tuvo dos momentos, la del siglo XVII de
estilo barroco llegado de la península y posteriormente en el siglo XVIII, graciosa
muestra del barroco andino.

Los murales del siglo XVII cubren las tres cuartas partes de los muros de la nave. Son
pinturas que los historiadores del arte han denominado “murales-textil”, que a modo de
“tapices” que cuelgan, han sido ejecutadas en paños verticales con dos temas
decorativos diferentes que están divididos por cintas en pan de oro.

→Mural del lado de la Epístola, con decoración a


modo de colgadura de “tapiz” y zócalo con
“grutescos”.
→Detalle del mural del lado del
Evangelio. S. XVII.

El obispo Manuel de Mollinedo y Angulo, en la segunda mitad del siglo XVII, mandó que
varias parroquias y recintos religiosos rurales tuvieran las paredes decoradas en forma de
“colgaduras” o damascos. Es el caso no sólo de Canincunca, sino de otros templos
cercanos en el área como los de Pitumarca y Cay Cay, cuyos interiores poseen el
mismo tipo de decoración.

Los temas intercalados son motivos vegetales que cubren profusamente cada sección, son
de color marrón y fondo beige. El otro diseño está compuesto por un patrón que se repite
representando un florero con ramas de hojas a modo de flores y follaje. Es un diseño de
tradición greco-latina, muy bien ejecutado, cuyo fondo es de color rojo y blanco con
toques de verde.

Resumiendo, las superficies de los paramentos están tratados con un denso y


repetitivo patrón para dar la impresión de suntuosos tapices colgando desde el techo.

→Cenefa con pintura mural del siglo XVII. Recorre el muro del Evangelio. “Grutescos”. Hombres follaje y rostro de
Venus, que representará a la Virgen en la pintura sur andina.
→Hombre follaje. Iconografía de tradición greco-latina.
Detalle de la Pintura mural. Cenefa muro del Evangelio.
Siglo XVII.

Las pinturas murales del siglo XVIII están representadas debajo del tema “tapiz”, en el zócalo
de la nave. Son decoraciones con motivos que muestran un patrón de tradición greco-latina,
llamado “grutesco”, representando hombres follaje, roleos vegetales, grullas, la
representación de Venus como caritas de mujer que simbolizan la Virgen María en la
tradición cristiana y que están coronadas con veneras y decoración a modo de
plumaje. Igualmente se pueden observar vizcachas andinas, iconografía de los murales del
barroco andino tan extendido en territorio sur peruano.

→Pintura mural con escena de la vida de la Virgen S. XVIII. Fue restaurada hacia
1980.

Así mismo, los frisos que se ubican en el límite superior de las paredes en el
encuentro con el techo, tienen decoración de “grutescos”. Además de tramo en tramo, se
visualizan escenas posiblemente de la vida de la Virgen, muy poco identificables
por el mal estado de conservación de la pintura.
→Cielo raso de la capilla con decoración mural polícroma del siglo XVII.

El falso cielo raso está realizado en tela, conocida como Yanasca, que fue un material muy
usado durante la colonia y presenta pintura mural en toda su extensión. Presenta rombos con
apliques circulares centrales en cada uno de ellos, trabajados en relieve, en yeso con
acabado en pan de oro. El harneruelo, parte central y plana del techo, presenta secciones
rectangulares con decoración a modo de escudos con círculos centrales. Tiene rica
policromía en rojo, azul y blanco, además de detalles decorativos en relieve realizados a
base de cola tela y yeso con acabado en pan de oro. Los tirantes que cruzan la nave
también están pintados.

→Detalle del harneruelo en el cielo raso de la


Capilla. Pintura del siglo XVII.
Son también murales del siglo XVIII:

- El intradós de la portada de acceso, con una paloma en el centro,


representación de la Trinidad.
- Las hornacinas de los retablos de la Sagrada Familia y de San Roque,
situados en la nave.
- Los murales del coro alto que representan a San Pedro y San Pablo.
- Los casetones de madera debajo del coro (sofito).
- Las ménsulas (elementos arquitectónicos en madera tallada que sostienen el coro
alto y se visualizan desde el coro bajo).

→Pintura mural. Intradós de la puerta de acceso a la


Capilla con la representación del Espíritu Santo. S. XVIII.

→Detalle del cielo raso del coro bajo. Casetones en madera policromada. S. XVII.

En relación a la técnica de estos murales, es la misma que se utilizó en los murales de los
templos vecinos de Andahuaylillas y Huaro, es decir, pintura al temple sobre soporte de
adobe, con pigmentos de tierras naturales de la zona y de plantas nativas andinas. Fueron
manos indígenas y mestizas que pintaron los muros, siguiendo patrones de tradición
europea y andina.
Retablo Principal:

El retablo original de la capilla fue una pintura mural del cual sólo queda como
evidencia la hornacina central con la iconografía de la Virgen de la Candelaria o
Purificada en la advocación local. Fue reemplazado por el actual retablo que
constituye el bien patrimonial más importante del recinto. De estilo barroco ricamente
decorado, es de fines del siglo XVII.

La estructura de madera tallada y sobredorada con pan de oro, es de dos cuerpos, (parte
horizontal), tres calles (parte vertical) y sotabanco (parte más baja del retablo que está a nivel
del altar). Las calles están definidas por columnas salomónicas y los cuerpos diferenciados
por cornisas de las cuales penden piñas a manera de pinjantes. Rematan a cada lado, tallas
de veneras, piñas y roleos con profuso sobredorado.

Completan el conjunto seis lienzos de la Vida de la Virgen y el Niño Jesús con sus
respectivos marcos tallados y acabados con pan de oro y siete óleos en los dos
cuerpos del retablo. Son de la Escuela Cusqueña de Pintura del siglo XVII, de autor anónimo.

→Retablo en el muro de cabecera. Talla en madera con sobredorado. Siglo XVII.


En la hornacina central pintura mural de la Virgen Purificada.
Los óleos de la serie de la Vida de la Virgen se ubican: Lado del Evangelio de
arriba hacia abajo:

- La familia de la Virgen, Joaquín, Ana y la Virgen Niña.


- Al centro, una escena cotidiana de la Sagrada Familia, donde María, en
labores de tejido, ocupa el lugar principal de la escena, los niños Jesús y
San Juanito con su iconografía del Cordero Pascual; José en su labor
de carpintero.
- Abajo, la Sagrada Familia en el encuentro de los niños Jesús y Juan el
Bautista, rodeados de angelitos.

En el lado de la Epístola de arriba hacia abajo:

- Los Desposorios de la Virgen con San José.


- Al centro la Virgen Pastora.
- Abajo la escena de la Huida a Egipto de la Sagrada Familia.
En el lado del Evangelio de arriba hacia abajo se encuentran:
- La Sagrada Familia
- San Agustín
- San Antonio de Padua con el Niño en el brazo izquierdo y en el otro lleva en la
mano la azucena, su símbolo iconográfico, enmarcado en medallón.

En el lado de la Epístola de arriba hacia abajo se encuentra:

- San Francisco de rodillas ante la Virgen


- San Juan Bautista con el Cordero Pascual
- San Francisco de Asís con la calavera en la mano izquierda y el crucifijo en
alto con la derecha, lienzo que originalmente no perteneció a este lugar y
está enmarcado en medallón.

Estos lienzos son de la Escuela Cusqueña de Pintura, del siglo XVII y de autoría
anónima.

En la calle central, en el primer cuerpo, se observa una falsa hornacina con la imagen de
la Virgen de la Candelaria pintada sobre el muro testero, única muestra del retablo
original, que como señalamos estuvo pintado en el muro. A manera de marco, destaca la
talla que simula una aureola. Remata este cuerpo el frontón partido conteniendo la
cartela con el monograma de María.
En la parte superior de la calle central, se encuentran dos ángeles esculpidos en yeso
policromado con pan de plata, imágenes del siglo XVII, de autor anónimo y de gran
calidad escultórica. El segundo cuerpo contiene un lienzo del Arcángel San Gabriel óleo
de gran calidad artística, de la segunda mitad del siglo XVII. Corona esta calle la
escultura del Padre Eterno.

→Virgen Purificada de Canincunca. Pintura mural de inicios del siglo XVII. Retablo Principal
de la capilla.

Rematan el retablo otras dos esculturas de ángeles, una a cada lado. Son de yeso
policromado con acabado en pan de plata, técnica conocida como “chinesco”.

El altar del retablo principal es de mampostería con acabado de yeso y


decoración floral policroma en relieve, de estilo Rococó (finales del siglo XVIII) y define el
nivel del Sotabanco. El tabernáculo original ha sido reemplazado por pequeña urna
tallada en madera, factura de la primera mitad del siglo XVII, conteniendo la escultura del
Niño Jesús, proveniente de otro recinto religioso.
Debajo se encuentra el pequeño Sagrario donde se venera permanentemente la
Sagrada Hostia, dado que la capilla está abierta permanentemente para los cultos
católicos. Esta pieza tallada en madera con sobredorado, también es del siglo XVII,
trabajados en talleres cusqueños.
Dos gradillas de madera con pintura policromada, que pertenecían al conjunto del
altar, han sido retiradas de su posición original y actualmente se ubican a los costados del
sotabanco.

A ambos lados del altar y para guardar la simetría del conjunto, falsas pilastras
continúan las columnas salomónicas, en medio de las cuales flanquean los lienzos
enmarcados en medallones ya mencionados.

Todos los lienzos pertenecen a la Escuela Cusqueña de Pintura de la segunda mitad del
siglo XVII y primera del siglo XVIII.

La estructura del retablo se encuentra anclada al muro testero mediante yugos,


los cuales han sufrido desecamiento de los amarres por efecto del tiempo y el clima seco
de la zona, evidenciado por el desplazamiento de algunas piezas del mismo.

Altares:

Dos pequeños altares se encuentran a ambos costados de la nave. El del lado


del Evangelio está dedicado a la Sagrada Familia y el del lado de la Epístola a
San Roque.

En ambos casos, hornacinas empotradas en la pared, contienen las esculturas de la


Virgen, San José y el Niño, formando la Sagrada Familia y la imagen de San Roque. Los
altares que sobresalen en la nave son de mampostería de yeso, con detalles
decorativos polícromos en el frontis y son del siglo XX.

En el muro del Evangelio y al costado del altar de la Sagrada Familia se encuentra una
alacena con puerta de madera tallada del siglo XVIII, pintada de verde.
→Altar de yeso con relieves
policromados del siglo XX.
Hornacina con la imagen de San
Roque. Muro al lado de la Epístola

Lienzos:

Además de los lienzos existentes en el retablo, están los situados en la Sacristía


y son:

En el muro del lado izquierdo:

 San Juan de Dios (S. XVIII)


 Cristo de la Caída (S. XVIII)
 San José al lado de la puerta hacia la casa cural (S. XVII)

→Cristo de la Caída. Óleo sobre lienzo.


Siglo XVIII. Escuela Cusqueña de Pintura.
Sacristía.
En el muro del lado derecho:

 La Trinidad (S. XIX)


 El Señor de la Caña (S: XVIII)
En el muro de cabecera
 El Señor de los Temblores al centro (S. XVIII)
 El Cristo Crucificado a la izquierda (S. XVIII)
 El Señor de la Caña a la derecha (S. XVIII)
 Encima del óleo del Señor de los Temblores, se encuentra el lienzo de la
Virgen del Rosario (S. XVIII).
 La Inmaculada cuyo soporte es un pequeño remate de mueble en madera.
(S.XVIII)

→San Juan de Dios. Óleo


sobre lienzo. Siglo XVIII.
Escuela Cusqueña de Pintura.
Sacristía.

Debemos añadir los óleos que pertenecen a esta capilla, que en la actualidad y por
razones de seguridad, se encuentran exponiéndose en el Museo del Templo de San Juan
Bautista de Huaro, ambiente que fue la antigua Sacristía, situado en el presbiterio
de aquel templo.

Estos son:

Dos importantes series de pintura de la Escuela Cusqueña, la serie de los Doce


Apóstoles, del siglo XVII, de autoría anónima y la serie del Credo, once lienzos
del siglo XVIII que muestran escenas alusivas a la oración católica llamada “El
Credo”, que es una confesión de fe y cuyas frases están escritas debajo de las escenas.
Es una serie poco frecuente en la producción de la Escuela Cusqueña. Ambas
fueron restauradas en el último tercio del siglo XX.
Imaginería:

Son pocas imágenes las que se encuentran en la capilla. Estas son:

Cuatro en la hornacina de la Sagrada Familia: dos vírgenes, San José y el Niño Jesús y
San Roque en su hornacina, todas del siglo XVIII, producidas en talleres cusqueños.

Igualmente en la Sacristía se encuentran la imagen de Santa Rosa de Lima y


San Francisco, ambas de factura cusqueña del siglo XVIII. Un Cristo Crucificado
de pequeñas dimensiones se encuentra en este mismo ambiente. No pertenece a
la Escuela Cusqueña de Escultura, es probable que sea de origen español del
siglo XVIII.

→Imágenes de La Virgen, San José y el Niño, →Escultura de San Roque en hornacina


en la hornacina del lado del Evangelio. lado de la Epístola. Imagen de la Escuela
Esculturas del siglo XVIII de la Escuela Cusqueña de escultura del siglo XVIII.
Cusqueña.

→Par de ángeles en hornacina central del retablo


→Cristo Crucificado. Siglo XVIII. principal. Escuela Cusqueña de Escultura. Siglo XVII,
detrás óleo del Arcángel San Miguel, Escuela Cusqueña
Sacristía.
de Pintura. Siglo XVII.
Muebles:

Pocos muebles de valor patrimonial pueden mencionarse: Dos confesionarios, la cancela


del presbiterio, el esquilón, un pequeño espejo con marco, las campanas y el órgano.

El par de confesionarios del siglo XIX están trabajados en madera, con ligera talla en la parte
superior, coronados con cruz, están pintados en verde y rojo, llevan en el espaldar el
monograma de Cristo –JHS. Se sitúan en la nave, están enfrentados al costado de las
hornacinas de la Sagrada Familia y de San Roque.

→Confesionario. Madera
policromada. Siglo XVIII. Muro del
lado de la Epístola.

La cancela que divide la nave del presbiterio, corre a lo ancho de la capilla y tiene
pequeña portañuela central de acceso al presbiterio. Es un trabajo en madera tallada y
torneada, con policromía y acabado en pan de oro. Posiblemente fue trabajada en el siglo XIX
en el taller de artesano de la ciudad de Cusco.

→Cancela. Talla en madera


policromada. Siglo XVIII. Divide la nave
del pequeño presbiterio.
El esquilón, es una pequeña rueda de madera de la cual penden campañillas que
giran por efecto de una soga que se jala de la manija del objeto y que producen
secuencia de sonidos, en momentos importantes de la liturgia de la misa y
posiblemente en otras ceremonias religiosas. Fue reutilizada hasta la primera mitad del
siglo XX. Actualmente está en desuso y en regular estado de conservación. Se ubica
en el coro alto, como se mencionó anteriormente.

→Esquilón. Mueble ritual con campanillas.


Se usaba en ciertos momentos de la
liturgia. Siglo XVIII.

ANEXOS

1. PLANOS DE LA CAPILLA:

→Plano de ubicación y perimétrico 1977.


↑Dibujo de fachada 1977.

↑Plano primer nivel 1977.


↑Plano segundo nivel (coro alto) 1977.

LEYENDAS DE LA LAGUNA DE URCOS:

La Cadena De Oro:
La Laguna de Urcos, en provincia de Quispicanchi, encierra la leyenda que relata como el Inca
Huayna Cápac, en el apogeo de su gobierno, mando fabricar para su primogénito una cadena
de oro, de unas 200 brazadas de largo y de un grosor del antebrazo. Fabricada en uno de los
talleres de orfebrería, una “waskja” (de donde deriva el nombre de Huáscar), presumiblemente
fabricada en la orfebrería de Batan Orqo. Esta cadena la utilizó el Principe Huáscar tanto en la
ceremonia del bautizo o “sutichay” como durante su coronación a la muerte del Inca Padre
Huayna Cápac. El Inca Huáscar llegó a ocupar, en el poco tiempo de su reinado el Amaru
Cancha, actual Universidad del Cusco, Capilla de Lourdes y el Templo de la Compañía de
Jesús; en ese palacio se conservaba la cadena, en una sala sagrada o sea en la de los Amarus
o serpientes. Antes de que fueran profanados este y otros templos de la ciudad de Cusco, se
supone, que llevaron la pesada cadena y ya en las cercanías de Huaro, cuando se supo de la
invasión española y de la codicia de éstos, de sus exigencias y sed de oro se recibió la orden
de sepultar la cadena, lo cual pudo haberse hecho en la laguna de Urcos.
El Origen De La Laguna De Urcos:
La laguna de Urcos hace muchos años atrás era una chacra donde vivía un campesino, él
trabajaba arando la chacra. Eran días de fiestas y se acostumbraba a que todos los
campesinos no trabajarán , pero el campesino muy caprichoso decidió trabajar ese día,
mientras eso ocurría el toro le dijo al campesino : Hoy no , mañana sí, el campesino no le hizo
caso y siguió trabajando hasta que en un momento que se encontraba golpeando el suelo,
movió una piedra y empezó a salir mucha agua, el campesino no se dio cuenta que estaba
saliendo agua, cuando lo hizo ya era muy tarde, se encontraba rodeado de agua, y murió de
esa manera ahogado, dicen que ese fue el motivo de la existencia de la Laguna de Urcos.

La leyenda de la laguna de Urcos:


Todo comenzó en un pueblo ubicado en la cordillera de los andes, su tierra era estéril ya que
las lluvias eran escasas. Un día el dios Sol vio el sufrimiento de su pueblo y les quiso hacerles
un obsequio. El dios bajo a la tierra en forma de humano e hizo un pequeño sapo de barro que
produjera agua de su vientre.

Ala mañana siguiente todos los habitantes vieron un pequeño riachuelo. todos los pobladores
vieron tal acontecimiento y se pusieron felices, recogieron el agua en sus cantaros y bailaron
hasta la noche, pero, Samin que era el más curioso de todos fue a buscar el origen de tan
misterioso riachuelo. Cuando llego al lugar de donde se originaba el misterioso riachuelo vio a
un pequeño sapo que expulsaba agua por su boca. Samin asombrado atrapo al sapo y lo llevo
a su pueblo.
Todos los allí presentes vieron como el pequeño sapo expulsaba grandes cantidades de agua
por su boca. Todos utilizaron todo el agua para sus cultivos, para beber e incluso para jugar, el
agua poco a poco comenzó nuevamente a escarcear y el agua que producía el sapo no era
suficiente para todos. La población muy preocupada buscaron a Samin par que resolviera el
problema. Samin comenzó a examinar al sapo y descubrió que tenía una bolsita que expulsaba
el agua, apresurado comunico lo descubierto a los jefes del pueblo. Después de una gran
asamblea todos acordaron matar al sapo para poder sacar más agua. Samin se opuso pero el
destino del sapo estaba marcado. Un poblador tomo un cuchillo y abrió el vientre del sapo y
extirpo el pequeño saco, muy pronto se dieron cuenta que cometieron un error ya que no salía
nada de la glándula.
El dios Sol observó el hecho, muy triste se puso a llorar. Los pobladores vieron como el cielo se
nublaba y caía la lluvia, pronto los pobladores se alegraron. La lluvia era incesante, y muy
pronto se comenzó a acumular en la plaza de la ciudad sin que los pobladores se den cuenta.
Samin, quien se había percatado de lo que estaba sucediendo advirtió a los demás, pero ellos
que se habían embriagado de licor por la alegría no le hicieron caso.
La gente quedo sumergida bajo el agua junto con el pueblo, pero Samin, logro escapar junto
con algunos jóvenes. Ellos edificaron otro pueblo alado de la laguna que se formó (Qoyllur
Urmana), respetando a los dioses y sus regalos.
GLOSARIO DE TÉRMINOS:

ÁBSIDE: Capilla semicircular y generalmente abovedada que sobresale en la cabecera del


templo. Parte del templo situada en la cabecera o fachada posterior, generalmente de
planta semicircular y a veces poligonal, cubierta por bóveda de cuarto de esfera.
ADARAJA: Diente que se deja en una obra para que pueda trabar bien con la construcción
que ha de seguir.
ALEGORÍA: Ficción en virtud de la cual una cosa representa y significa otra diferente.
ALFARJE: Techumbre de madera, generalmente con decoración policromada de lacería o
lazos. Techo plano de madera, generalmente decorado, consistente en un tablado.
ARCO: Elemento constructivo y de sostén, de forma generalmente curva, que cubre un
vano entre dos puntos fijos.
ARCO TRIUNFAL: Estructura arquitectónica en forma de arco que divide la nave del
presbiterio en un recinto religioso católico.
ARMADURA A DOS AGUAS: La que tiene dos vertientes.

ARMADURA DE PAR Y NUDILLO: La que lleva un puente o nudillo colocado


horizontalmente entre los pares para impedir su flexión y formar el almizate.
ARQUIVOLTA: Cada una de las molduras dispuestas concéntricamente en tomo a un arco
(ver archivolta)
ARROCABE: Maderaje colocado sobre los muros de un edificio que liga estos entre sí
y con la armadura que sustentan.
ARTESONADO: Cubierta decorada con artesones.
ARTESÓN: Techumbre con decoración de madera.
ATRIO: Espacio central en una ciudad romana donde confluyen las dos vías principales. Patio
central de una casa romana. Espacio generalmente porticado que precede a la entrada de
un templo, palacio, etc. Recinto cerrado, y a veces porticado, que precede a la entrada de un
edificio.
BALAUSTRADA: Serie de balaustres unidos por dos elementos corridos, uno como
base y otro como coronamiento comunes que forman barandilla o antepecho. Tiene
función decorativa o de cerramiento.
BARROCO: Estilo arquitectónico de gran riqueza decorativa, en el que se
contraponen elementos rectos y curvos para dar sensación de movimiento. Se desarrolló
desde finales del siglo XVI hasta el siglo XVIII, teniendo su mayor auge en el siglo XVIII.
CABECERA: Parte principal de una iglesia, generalmente donde se encuentra el altar,
opuesta a los pies.
CALLE: Cada una de las divisiones, en vertical, de un retablo o de una fachada.
CANCELA DE MADERA: Verja de madera que delimita espacios o cierra el acceso de un
espacio a otro.
CAPILLA: Edificio relacionado con la función del culto, normalmente de pequeñas
dimensiones, pudiendo ser exento o formar parte de otro mayor.
CAPILLA LATERAL: La que se sitúa a un lado u otro de la mayor, bien en el crucero o en las
naves laterales.
CAPILLA MISERERE: Recinto religioso de pequeñas dimensiones para el culto a los
difuntos.
CAPILLAS POSAS: Pequeños recintos religiosos, en los que se detenía el Santísimo
Sacramento durante las procesiones.
CARTELA: Tabla o recuadro sobre el que se coloca un emblema o leyenda.
CASETÓN: Cada uno de los compartimentos huecos y geométricos en que queda
dividida una cubierta, al cruzarse las vigas o molduras que la forman, generalmente con fines
decorativos.
CIELO RASO: Elemento constructivo situado a cierta distancia del techo
propiamente dicho.
CLAVE DEL ARCO: Dovela central de la curva del arco.

COLUMNA: Apoyo cilíndrico, de mucha mayor altura que diámetro, que sirve de soporte o
adorno. Se compone de basa, fuste y capitel. Sus proporciones o canon, así como
la forma de los elementos que la componen, son diversas, según el orden
arquitectónico al que pertenezcan.
COLUMNA SALOMÓNICA: La que tiene su fuste contoneado en espiral, con cinco, seis o
más vueltas y decoración de pámpanos y racimos.
CONTRAFUERTE: Construcción adosada al muro, a modo de macizo vertical o machón, que
funciona como refuerzo del mismo o para contrarrestar los empujes de un arco o bóveda.
CORNISA: Parte superior y más saliente de un entablamento, compuesta de varias
molduras. También es una moldura formada por una hilada o varias escalonadas, dispuesta
en voladizo y como remate de un edificio.
CORO: Parte de la iglesia destinada al canto de los clérigos.
CUBIERTA A DOS AGUAS: La que tiene dos vertientes.
CUERPO DE LA IGLESIA: Volumen de una iglesia referido generalmente al de la
nave central.
DINTEL: Elemento superior horizontal y de cierre de vanos de puertas y ventanas. Parte
superior de las puertas y ventanas que carga sobre las jambas.
DOVELA: Cada una de las piezas que conforman un arco.
ENLUCIDO: Revestimiento de un muro con una capa de mortero de cal y yeso.
EPÍSTOLA: Dícese del ala derecha del altar, desde el punto de vista de los fieles.
ESCALERA: Serie de escalones dispuestos para hacer practicable la
comunicación entre distintos niveles o plantas.
ESCALINATA: Escalera exterior, generalmente de grandes proporciones para dar acceso
a un edificio. Suele ser de un sólo tramo.
ESTOFADO: Representación de telas en una escultura policromada con imitación de
bordados y encajes.
FRONTÓN: Motivo decorativo de forma triangular o curva que corona los vanos o fachadas.
FUSTE: Parte vertical de la columna comprendido entre la basa y el capitel.
GALERÍA: Corredor con grandes ventanales, vidrieras o vanos abiertos con columnas o
pilares.
GRUTESCO: Composición decorativa a base de elementos animales, vegetales y humanos
entrelazados, originando conjuntos de figuras fantásticas,
HARNERUELO: Paño horizontal que forma el centro de un alfarje.
HASTIAL: Triángulo formado por las dos vertientes de un tejado en un muro testero.
HERÁLDICA: Arte y ciencia del blasón.
HORNACINA: Hueco horadado en un muro donde generalmente se coloca una imagen
religiosa o un objeto decorativo.
ICONOGRAFÍA: Estudio del significado de lo representado.

INTRADÓS: Superficie interior de las dovelas de un arco.


JAMBA: Cualquiera de las dos piezas verticales que puestas en los dos lados de las puertas o
ventanas sostienen el dintel o el arco de ellas.
LACERIA: Ornamentación geométrica que consiste en una serie de líneas entrecruzadas
alternativamente unas sobre otras formando diversas figuras estrelladas y poligonales.
MAMPOSTERÍA: Obra hecha con piedras sin labrar dispuestas irregularmente.
MANIERISTA: Estilo arquitectónico que se manifestó en Italia en el siglo XVI,
caracterizado por su falta de naturalidad y afectación.
MÉNSULA: Elemento decorativo o de sostén que sobresale de un plano vertical, con igual o
más vuelo que altura.
MOLDURA: Elemento ornamental corrido y destacado, para decorar una superficie.
Puede ser curvilínea o rectilínea, simple o compuesta, lisa o decorada.
MUDÉJAR: Estilo artístico que se desarrolla en los reinos cristianos de la península
ibérica, que incorpora influencias, elementos y materiales de estilo hispano-musulmán en el
arte cristiano y se desarrolla entre los siglos XII y XVI como consecuencia de las
condiciones de convivencia existentes en la España medieval, como mezcla de las corrientes
artísticas cristianas, románicas, góticas y renacentistas y musulmanas de la época.
MURO TESTERO: Muro de cabecera.
NAVE: Espacio interior delimitado longitudinalmente por muros o series de columnas o
pilares.
NUDILLO: En una armadura de cubierta, madero horizontal que se ensambla en dos pares
gemelos, uniéndolos a la altura de un tercio a partir de los extremos superiores.
ÓCULO: Ventana pequeña de forma circular. Conocido también como ojo de buey.
ÓLEO: Pintura que emplea el aceite como aglutinante.
PAR: En una armadura de cubierta es cada uno de los maderos dispuestos con la inclinación
del tejado, para formar la vertiente del mismo.
PAR Y NUDILLO: Elemento estructural de una cubierta a dos aguas formado por dos
vigas que se unen en el vértice (los pares) Y un elemento transversal
(nudillo) que se Halla aproximadamente a un tercio del Vértice. Fue
introducida por los árabes en España, de allí pasó a América.
PARAMENTO: Construcción hecha con sillares. Cualquiera de las dos caras de una pared,
de un muro o de un sillar labrado. Superficie exterior de un muro.
PÁTINA: Tono sentado y suave que da el tiempo a las pinturas al óleo y a otras
cosas.
PEANA: Base o pie que funciona como apoyo inferior de algún elemento.
PIES EN UN TEMPLO: Parte opuesta a la cabecera.
PILASTRA: Elemento vertical adosado al muro de sección rectangular o poligonal,
generalmente con función constructiva de soporte y a veces meramente ornamental.
Puede seguir los órdenes clásicos.
PINJANTE: Elemento decorativo en forma de florón que pende del centro de una bóveda o
techo.
PORTADA: Obra de ornamentación arquitectónica y escultórica con que se enmarca un
vano de acceso o fachada de un edificio.
POTENCIA: Cada uno de los grupos de rayos de luz que se ponen en la cabeza de la esfinge
de Jesús.
PRESBITERIO: En la iglesia cristiana, área en torno al altar, generalmente en lugar elevado,
ocupando el ábside de la cabecera de la nave, y donde se disponen los elementos litúrgicos
necesarios para el rito.
PÚLPITO: Plataforma elevada, de forma circular, poligonal o cuadrada, sobre pilares o
columnas, al que se sube el predicador mediante una pequeña escalera.
RESTAURACIÓN: Conjunto de actividades llevadas a cabo de forma coordinada, para la
conservación y restitución de la imagen original de un edificio.
RETABLO: Obra arquitectónica que cubre el muro tras el altar, hecha sobre madera,
piedra o metal, con pinturas, esculturas u obras de ambos tipos.
ROLEO: Motivo decorativo en forma de voluta o espiral, frecuentemente referido a
vegetales.
SACRISTÍA: Dependencia aneja a la iglesia, a la derecha del presbiterio con el que
suele estar comunicado, cuya función es la de guardar los objetos sagrados y revestirse
el oficiante.
SOTABANCO: En un retablo, el cuerpo inferior del banco, cuando la hay.
TABERNÁCULO: Lugar sagrado, templete o edículo.
TARACEA: Decoración a base de entalles en la madera que se rellenan más tarde con
trocitos de diversos materiales que ajustan perfectamente en los entalles, creando así
policromía.
TEMPLE: Técnica pictórica que utiliza como aglutinante el huevo o la cola.
TESTERO: Cabecera de un templo.
TESTERO DE UNA CONSTRUCCIÓN: Parte superior triangular de la fachada de un edificio
en la que descansan las dos vertientes del tejado
TÍMPANO: En un frontón, la superficie de cierre comprendida entre las molduras del mismo.
Tirante: Pieza de madera o barra de hierro colocada horizontalmente en la armadura de
un tejado o entre dos muros.
TONO: Grado de luminosidad o intensidad de un color.
TORRE DE ESPADAÑA: Tipo de campanario de un solo paramento que transparenta
arquería para colocar las campanas.
TRACERÍA: Decoración arquitectónica formada por la combinación de figuras
geométricas.
UMBRAL: Parte inferior de la puerta, contrapuesta al dintel.

VANO: Hueco con que se interrumpe una pared, espacio entre las partes sólidas de una
construcción.
VENERA: Motivo decorativo consistente en una gran concha.
YESERÍA: Cualquier obra o decoración en el muro realizado con yeso.

2 febrero festividad por la virgen

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