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Teatro leído 2º EP

El dragó n Botijo
NARRADOR 1: Si visitáis este reino, veréis en medio de la plaza al
dragón Botijo convertido en fuente de agua fresquísima.
El que bebe de esta agua se pasa tres años riendo, saludando a sus
vecinos y manteniendo limpia la ciudad.
NARRADOR 2: Todo ocurrió como os lo voy a contar:
¡Atención! Este era un país en el que habitaba un dragón llamado Botijo.
Como todos los dragones arrojaba fuego por la boca y humo por la nariz.
El fuego, lo aprovechaban los habitantes para calentarse las manos y los
pies, y el humo, para toser, toser y toser.
(Entra un grupo de vecinos tosiendo, protegiéndose la boca con
pañuelos)
VECINOS: (Sin dejar de toser) ¡Este humo nos impide respirar!
NARRADOR 1: Lo malo no es que arroje fuego y humo.
VECINOS: (Todos a la vez) No, no lo es. Ronca por las noches y no
nos deja dormir. (Ronquidos muy fuertes del dragón)
NARRADOR 1: No solo eso. Como es un comilón entra en los viñedos
de los campesinos y se come las uvas.
NARRADOR 2: Entra en los huertos y se zampa los tomates y las
lechugas. Se sube a los árboles y termina con toda la fruta.
BOTIJO: (Se le oye cantar) Qué dulces tomates, qué lechuga
espectacular. ¡Qué gran manjar!
(Aparece el rey Botón, muy nervioso, sin dejar de toser. Tras él vienen
la princesa Laurel y Saco, el ministro)
REY BOTÓN: ¡El dragón Botijo va a terminar con mi real paciencia!
PRINCESA LAUREL: ¡El dragón Botijo va a terminar con mi
princesal paciencia!
REY BOTÓN: ¡Ya estoy harto!
PRINCESA LAUREL: ¡Ya estamos hartos!
REY BOTÓN: Le volveré a llamar para prohibirle que se coma los
frutos de nuestros campos.
PRINCESA LAUREL: Le volveremos a llamar para prohibirle que se
coma los frutos de nuestros campos.
REY BOTÓN: Y si no me obedece… (más enfadado) ¡le destierro de
mi reino para siempre! He dicho.
PRINCESA LAUREL: ¡Hemos dicho!
MINISTRO SACO: ¡Majestad! Yo, un día, fui a decirle que no roncara
tan fuerte y … ¡y me sacó la lengua!
REY BOTÓN: ¡Vaya por Dios!
MINISTRO SACO: Una tarde le sorprendí llorando.
PRINCESA LAUREL: ¿Un dragón llorando? ¡Tiene gracia!
REY BOTÓN: ¡Tiene gracia! ¿Por qué lloraba?
PRINCESA LAUREL: ¿Por qué lloraba?, ¿por qué lloraba?
MINISTRO SACO: Porque se quería comer la Luna y no alcanzaba a
tocarla. Cree que la Luna es una naranja. ¡Le gusta tanto la fruta!
REY BOTÓN: (Paseando, pensativo) Un dragón llorón… tiene que
llorar muchas lágrimas.
(En medio de la plaza se ve al dragón llorando subido en un gran
pedestal, los vecinos ríen y se saludan, otros barren la plaza.)

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