Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓNY CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Objetivos
del aprendizaje
Saber implantar una Unidad de Dolor Agudo (UDA) para el manejo del dolor
postoperatorio.
Conocer los principios básicos relacionados con el funcionamiento de las UDA.
2
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Índice
3
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
4
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
6
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Las Guías de Práctica Clínica (GPC) son directrices elaboradas sistemáticamente para
asistir a los clínicos y a los pacientes en la toma de decisiones sobre la atención sanitaria
adecuada para problemas clínicos específicos. También se puede considerar que son
herramientas disponibles para facilitar la toma de decisiones, teniendo en cuenta las
preferencias y los valores de los pacientes, los valores y la experiencia de los clínicos y la
disponibilidad de recursos1.
Las GPCnos aportan un importante soporte a la hora de desarrollar protocolos y nos dan
un aval de eficacia basada en ensayos clínicos, metaanálisis y, por supuesto, la expe-
riencia de otras UDA.
El primer paso para resolver un problema clínico -y el método más eficiente para decidir
la mejor actuación sanitaria- sería la búsqueda de una GPCválida. Se considera que es
válida si cuando se siguen sus recomendaciones, se obtienen sus objetivos1.
La GPCes un componente esencial de la práctica clínica y de la planificación de la UDA.
Para que una GPCtenga validez debe basarse en revisiones sistemáticas de la literatu-
ra, estar avalada por centros o grupos de GPCnacionales o regionales, estar realizada
por representantes multidisciplinarios de las materias implicadas e indicar las recomen-
daciones y la evidencia científica.
En la estimación de la calidad de una GPC, se tienen en cuenta varios aspectos: que los
sesgos potenciales del desarrollo de la guía hayan sido señalados de forma adecuada,
que las recomendaciones sean válidas, tanto interna como externamente, y dichas
recomendaciones se puedan llevar a la práctica. Este proceso incluye la valoración de
beneficios, daños y costes de las recomendaciones, así como los aspectos prácticos
que conllevan. Por tanto, la evaluación incluye juicios acerca de los métodos utilizados en
el desarrollo de las guías, el contenido de las recomendaciones finales y los factores
relacionados con su aceptación1.
Actualmente disponemos de tres tipos deGPC:
1) Basadas en opiniones de expertos.
2) Basadas en consenso.
3) Basadas en la evidencia.
7
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Se acepta que las GPCdeberían basarse, siempre que sea posible, en la identificación y
síntesis sistemática de la mejor evidencia científica disponible. Además, en las GPCbasa-
das en la evidencia deben cumplirse determinados requisitos:
Especificar la identificación y composición del panel de expertos que las elabora.
Protocolizar el sistema de identificación, recogida y evaluación crítica de las publica-
ciones analizadas.
Efectuar una formulación individualizada sobre el nivel de evidencia en el que se sus-
tenta cada recomendación por separado.
8
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
En los últimos años se han producido grandes avances en el conocimiento de los mecanis-
mos neurofisiológicos del dolor, se han sintetizado nuevos medicamentos, nuevas vías de
administración y se han desarrollado técnicas que permiten tratar el dolor postoperatorio
con seguridad y eficacia, en la mayoría de lospacientes6.
Sin embargo, y a pesar de los progresos alcanzados en los conocimientos fisiopatológi- cos,
farmacológicos y en el desarrollo de técnicas más eficaces para controlar el dolor
postoperatorio, muchos pacientes no reciben una analgesia adecuada. La incidencia del
dolor postoperatorio moderado-intenso en nuestro país continúa siendo muy elevada.
Según diversas encuestas el 30- 50% de los pacientes presentan dolor moderado-intenso
durante el periodo postoperatorio7.
9
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Esta ha sido una de las principales conclusiones del Comité Interdisciplinario de expertos
formado por el National Health and Medical Research Council of Australia, el Royal Colle-
ge of Surgeons of England, el Royal College of Anaesthetists, el US Department of Health
and Human Services y la IASP. Una de las principales recomendaciones de este comité
fue la necesidad de crear servicios de dolor agudo7.
Las UDA fueron descritas por primera vez por Ready en 1988. En nuestro país, excepto
un número muy limitado de hospitales, empezaron a gestionarse, planificarse y ponerse
en marcha a partir del año 2000, no pudiéndose decir que, actualmente, el problema del
dolor postoperatorio sea un problema resuelto en España. Las UDA surgen en la
creencia de que la organización de los recursos disponibles y la sensibilización de los
profesionales podía ser el mejor argumento para el control del dolor. Desde la creación
de las primeras Unidades, las UDA han proliferado y ha sido recomendada su implemen-
tación desde algunas organizaciones reconocidas de profesionales, instancias guberna-
mentales o agencias privadas.
La presencia de estas Unidades es hoy día un prerequisito para acreditar los centros
para la formación postgraduada. Según el Royal College of Anaesthetist en Gran Breta- ña
y el Australian and New Zealand College of Anaesthetist, en la «Guía de Práctica Clíni- ca
de la American Society of Anesthesiologists» para el manejo del dolor agudo posto-
peratorio se recomienda la implantación de UDA desde, o con la participación activa, de
los servicios de Anestesiología y la disponibilidad de anestesiólogos las 24 horas del día8.
El objetivo de estas Unidades es mejorar el tratamiento del dolor agudo postoperatorio apli-
cando métodos eficaces de control analgésico, proporcionando una atención organizada,
sistemática y adaptada a cada paciente con arreglo a las evidencias científicas, la práctica
clínica y las posibilidades de cada Centro. Nacen para mejorar la calidad asistencial y, como
consecuencia de ello, se obtiene un beneficio para la salud; mejorando el confort y la satis-
facción de los pacientes, limitando y atenuando la repercusión de la agresión anestésico–
quirúrgica, disminuyendo las potenciales complicaciones postoperatorias y la morbilidad,
facilitando la recuperación del paciente con una movilización y rehabilitación más precoces y,
probablemente, disminuyendo la estancia hospitalaria y los costes. Además, se debe
encargar de la docencia e investigación sobre el control del dolor agudo. Este Servicio es
responsable de atender a los pacientes, incluyendo la visita diaria a los mismos, la evalua-
ción de la calidad de la analgesia, de los efectos secundarios, de las dosis de medicamentos
y de la inspección de los dispositivos y accesos para analgesia sistémica o regional7,9.
10
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Existen metaanálisis que demuestran que la adopción del modelo de UDA para el
tratamiento del dolor postoperatorio supone una mejora en la calidad y efectividad de
su tratamiento, elevando el grado de satisfacción de los usuarios9. Se ha visto cómo la
implantación de la UDA puede reducir la incidencia de complicaciones e incluso la morta-
lidad postoperatoria en los 30 primeros días del postoperatorio10.
La implantación de una UDA no debe ser un proceso estático, sino que requiere la reeva-
luación periódica de sus resultados, la constatación de que las técnicas analgésicas que
utilizan están basadas en la mejor evidencia científica disponible y se ajustan a la mejor
relación coste-efectividad, sin obviar la seguridad y tolerabilidad de las mismas, desem-
bocando en una mayor calidad asistencial y satisfacción del paciente. De ahí la importan-
cia, no solo de la existencia de la UDA, sino de la organización y gestión adecuada para el
centro hospitalario en el que se encuentre ubicada.
La UDA debe seleccionar la mejor técnica analgésica, individualizando su indicación,
teniendo en cuenta el tipo de intervención, si es o no ambulatoria, el grado previsto de
agresión quirúrgica y los condicionantes específicos de cada paciente, según edad, pato-
logía y tratamiento concomitante, entre otros.
Los hospitales pueden tener distintas necesidades y disponer de diferentes modelos de
UDA, que se adapten a sus condiciones particulares. Rawal señaló los principales com-
ponentes para la organización de la UDA.
11
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Las bases para el desarrollo de una UDA han sido publicadas en la Revista de la Sociedad
Española del Dolor. Por su parte, el Comité de Acreditación de la SED(CASED) ha definido
unos estándares, aprobados por la Junta Directiva de la SEDen 2002, para el desarrollo en
España del proceso de acreditación, tanto individual como institucional, en el tratamiento del
dolor, abarcando también la UDA. Este proceso se basa en las características ideales que
una UDA debería cumplir. El CASEDdetermina el organigrama que debe tener la UDA11.
10) La UDA debe disponer de hojas clínicas de evolución de los enfermos hospitaliza-
dos que estén sometidos a tratamiento del dolor por la misma.
11) Debe existir un control diario en planta de hospitalización de los pacientes bajo el
control de la vida durante 48-72 horas o más si se considera necesario.
12) Se debe informar a los pacientes en la consulta de preanestesia de las actuacio-
nes de la UDA.
13) Se debe disponer de una base de datos donde se tenga acceso a la valoración de
la analgesia y efectos secundarios debidos a los tratamientos administrados.
14) Se deben realizar sesiones clínicas periódicas de todo el personal que interviene en
la UDA para tratar problemas relacionados con la Unidad.
15) La UDA debe establecer programas educacionales dirigidos a médicos y Enferme-
ría relacionados e interesados en el tema. El modelo de UDA debe basarse en un
anestesiólogo con dedicación a tiempo completo, que coordina y supervisa a enfer-
meras y a los diferentes equipos quirúrgicos. Dentro de las funciones de la UDA se
encuentran la formación y docencia, no solo del personal de la UDA, sino también de
todo aquel directa o indirectamente relacionado.
La Joint Commission on Acreditation of Healthcare Organizations (JACHO) de-
termina como estándar de calidad en el tratamiento del dolor postoperatorio, la
necesidad de garantizar la competencia del personal sanitario. Se deben diseñar
planes de formación continuada dirigidos a la actualización de conocimientos sobre
la fisiología del dolor, la farmacología de los analgésicos, las técnicas de administra-
ción y los métodos de evaluación del dolor12.
La elaboración de protocolos, utilización, adaptación e implementación de guías de
práctica clínica son una práctica que enriquece la labor asistencial y docente de la UDA.
La evaluación del dolor como una constante vital más, el registro de los datos de los
pacientes, su evaluación y confrontación con el de otras UDA, ayuda a la mejora continua
de la calidad de la UDA y debería ser una práctica habitual de la misma. La información y
adiestramiento de los pacientes en la técnica analgésica seleccionada para su tratamien-
to permite obtener su colaboración y conseguir un control más efectivo del dolor9.
13
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Se han diseñados diferentes modelos para dar respuesta al tratamiento estructurado del
dolor postoperatorio13.
Unidades según el servicio del que dependan:
Unidades específicas de dolor agudo.
Unidades integrales de dolor.
Unidades de cuidados perioperatorios o reanimaciones ampliadas.
Modelos de Unidades:
Modelo diseñado por Ready; se basa en un servicio multidisciplinar encabezado por
anestesiólogos y que incluye a: Enfermería especializada, residentes, farmacólogos,
fisioterapeutas, personal administrativo y especialistas en material biomédico. Este
modelo se considera de coste elevado.
UDA de “bajo coste”, basado en la Enfermería y supervisado por Anestesiología. El
90% de los hospitales holandeses siguen este modelo, sin embargo, en el 46% no
se ofrece formación continuada de dolor en el hospital y el 13% no informan a los
pacientes sobre el dolor después de la cirugía14, en comparación con Reino Unido
(83%) y EE.UU (74%). La enfermera especialista en dolor lidera las UDA en el 45% de
los casos en EE.UUyen el 91% en ReinoUnido14.
Actualmente se buscan modelos donde la eficiencia ocupe un lugar destacado y los
profesionales tengan una alta implicación.
En el estudio de Powel y cols, el 30% de los médicos encuestados en 2002, describía su
UDA como floreciente, el 52% como poco reconocida y el 17% como inexistente. La ma-
yoría habían realizado grandes esfuerzos para poder implantar la UDA. El 66% de los que
respondieron, reconocían que los pacientes tenían niveles inaceptables de dolor postope-
ratorio y que las UDA eran a menudo servicios confusos y desestructurados (59%)15.
El 85% consideraba que las UDA deberían ser servicios multidisciplinares, que trataran el
dolor de todos los pacientes postquirúrgicos y a tiempo completo. El 95% consideraba que
se necesitaba un mejor acercamiento de la Organización para mejorar el problema15.
14
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
En Canadá se realizó una encuesta que recogía el período de junio de 2000 a enero de
2001, respondieron a la misma 50 de los 62 hospitales universitarios encuestados
(81%). El 80 % de los hospitales tenían al menos 200 camas. El 90 % de los mismos
había puesto en marcha la UDA, que dependía del servicio de Anestesia. Cada UDA estaba
formada por un anestesiólogo (100 %), una enfermera (56%) y un farmacéutico (33%)16.
En una encuesta realizada en Alemania sobre las UDA, de los 773 departamentos de
anestesia encuestados, respondieron 446 y, de ellos, 161 disponía de UDA. La UDA se
encontraba implantada con mayor frecuencia en los grandes hospitales. Sólo la mitad de
las UDA cumplían los criterios básicos de calidad. El 68,3% contaba con anestesiólo- gos
asignados a la UDA y, el 23,6%, con enfermera.
En 1994, se realizó una encuesta con seguimiento telefónico en Nueva Zelanda, de los
79 hospitales preguntados respondieron 62, de ellos sólo 12 contaban con médico y
enfermera asignados a la UDA y correspondían a hospitales de más de 150 camas.
Además, había 28 UDA que no cumplían los requisitos exigidos.
Hay diferentes modelos asistenciales válidos, entre las que se encuentran las Unidades
de Bajo Coste, Unidades de Cuidados Perioperatorios, las Unidades de Reanimación am-
pliadas; incluso se puede recurrir a protocolos de analgesia sin necesidad de que exista
una Unidad específica. No obstante, la UDA es el modelo asistencial más defendido en la
actualidad para el tratamiento del dolor postoperatorio. La existencia de la UDA conlleva
la dedicación de una serie de profesionales, a mitigar el dolor agudo y, dentro de éste, el
postoperatorio17.
En Reino Unido, en una encuesta realizada en 2002, del 83% de los hospitales que
respondieron al cuestionario, el 81% tenían UDA. La mayoría de éstas ofrecían un
servicio completo de lunes a viernes durante el día, con un servicio reducido el resto del
tiempo. En la mayoría de los hospitales (68%), el anestesiólogo de guardia era el único que
atendía la UDA fuera del horario ordinario. Solo el 6% tenían personal de Enfermería
específico los fines de semana.
15
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
En España, solo el 45% de los pacientes de hospitales de más de 200 camas, recibe
información sobre el dolor postoperatorio, siendo informados por anestesiólogos el 78%
de los mismos.
Según Puig y cols, la responsabilidad del dolor postoperatorio recae sobre los anestesiólo-
gos en el 71% de los casos, sobre los cirujanos en el 40% y sobre enfermeros en el 33%,
solapándose los cuidadores del dolor. En los hospitales españoles solo se mide el dolor en el
36% de las salas de cirugía, quedando reflejado en la historia del paciente en el34%18.
La analgesia más utilizada en las salas de recuperación postanestésica en el territorio
español es la administrada por vía intravenosa (83%), epidural (78%), intravenosa conti-
nua (69%) e intramuscular (58%).
Solo el 28% de los servicios de Anestesiología están satisfechos con el tratamiento del
dolor realizado en los hospitales españoles.
17
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
IMPLEMENTACIÓN DELAUDA
La implementación de la UDA y los cambios que supone deben adaptarse a cada hospital.
Se debe valorar el contexto, la estructura y los objetivos. Se han identificado 6 posibles
barreras o retos con los que habría que enfrentarse3,13:
Estructural: el reto que supone introducir una nueva actividad y unidad en un hospital
con una estructura ya definida, donde hay que hacer hueco a un nuevo proyecto.
Político: la dificultad en las negociaciones para conseguir el cambio deseado y la adop-
ción de acuerdos que permitan alcanzar los objetivos comunes. Se produce cuando
hay disputas entre los diferentes especialistas y estamentos asistenciales.
Cultural: la dificultad para construir una conciencia compartida del problema y de com-
promiso con la mejora de la calidad de la asistencia.
Educacional: las dificultades para planificar y conseguir la formación de losprofesionales.
Emocional: la motivación de los profesionales para adherirse y mantener el esfuerzo
de cambio.
Físico/tecnológico: las dificultades para la disponibilidad de recursos físicos y tecnoló-
gicos que posibiliten la mejora del servicio.
El paso previo para implementar una UDA es determinar los factores subyacentes que
condicionan la práctica clínica en cada hospital y dirigir los esfuerzos hacia el modelo
organizativo que mejor permita alcanzar los objetivos prefijados.
Se han descrito algunas condiciones mínimas que se deben cumplir para la implementación
de una UDA13:
Participación activa de la dirección en el programa.
Apoyo de las jerarquías profesionales.
Alineamiento con los objetivos estratégicos del servicio u organización.
Compromiso de todos los profesionales, especialmente de los facultativos.
Inversión significativa en formación y entrenamiento del staff.
Adecuados recursos informáticos.
Adhesión a las líneas de mejora continua de la calidad.
18
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
19
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
La creación de la UDA en nuestro hospital nació con el objetivo de tratar el dolor posto-
peratorio, gestionándolo de forma efectiva, para tratar de aliviarlo, reduciendo los efectos
secundarios y las complicaciones, evitando la analgesia insuficiente y las crisis dedolor.
20
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
La UDA se configuró como una Unidad Multidisciplinar, pero de bajo coste, donde las
funciones de cada profesional implicado están claramente definidas. La instauración de
la UDA, en el HUPR, se realizó de forma progresiva, por especialidades. Comenzamos
por el servicio de Traumatología y se fue ampliando progresivamente hasta, finalmente,
atender a todos los pacientes postquirúrgicos y los sometidos a técnicas intervencionis-
tas del servicio de Radiología, siendo incluidos en los protocolos de valoración, trata-
miento, y seguimiento durante las 24 h del día, todos los días de la semana, durante el
periodo que requirieran hasta el control satisfactorio del dolor6.
OPORTUNIDADES DEMEJORA
21
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
22
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
La valoración y el manejo del dolor postoperatorio son habilidades que se deben desa-
rrollar tanto en el equipo médico como el de Enfermería. El objetivo principal de cualquier
actividad enfermera es el conseguir el bienestar del paciente y, en nuestro caso, de los
pacientes postquirúrgicos.
El exhaustivo registro de los cuidados de Enfermería permite poner de manifiesto el
papel que desempeña la enfermera en dicha unidad:
- evaluar el dolor,
- detectar precozmente los efectos adversos,
- identificar déficit de cuidados en los distintos métodos invasivos empleados,
- reconocer y tratar las necesidades de la familia (apoyo familiar) y resto del equipo de
Enfermería (si ha habido algún error en el cumplimiento del protocolo analgésico de la
UDA, por ejemplo),
- fomentar una cultura del control del dolor con una base de evidencia científica.
Entre los factores que afectan a la magnitud del dolor postoperatorio podemos citar los
siguientes: la propia idiosincrasia del paciente, tipo de cirugía realizada, tipo de aneste-
sia, localización de la herida quirúrgica y la actuación de los profesionales sanitarios que
intervienen en los cuidados del paciente. Una mala evaluación y seguimiento del dolor
postoperatorio repercute en todos los órganos y sistemas del paciente.
El dolor, como cualquier otro síntoma o signo clínico, debe evaluarse adecuadamente. La
evaluación requiere una apropiada comunicación entre el paciente, los cuidadores de
salud y / o los familiares. Cuando un paciente presenta dolor postoperatorio lo primero
que debemos hacer es comprobar la cualidad, intensidad y localización del mismo. Por
tanto, debemos ser capaces de identificarlo utilizando los instrumentos más adecuados
para evaluarlo. De una correcta medición y valoración del dolor depende la instauración
de un tratamiento analgésico adecuado, individualizado y eficaz.
23
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
ORGANIZACIÓN DELAUDA
• Información prequirúrgica
El paciente debe recibir información prequirúrgica de las medidas propuestas para tratar el
dolor y del proceso perioperatorio, en la consulta de preanestesia. Esta información debe ser
oral yescrita, donde se explique la importancia del tratamiento del dolor ylas consecuencias de
un tratamiento inadecuado.
Sepregunta sobre las expectativas del paciente sobre el dolor postoperatorio.
Se informa sobre los diferentes métodos de tratamiento y se apoya en un Tríptico Infor-
mativo de la UDA (Figuras 1 y2) sobre el tratamiento yseguimiento del dolor después de
la cirugía, para que los pacientes conozcan las diferentes alternativas analgésicas para el
tratamiento del dolor. El tríptico informativo sirve para dar a conocer, a los pacientes y/o
familiares, el funcionamiento de laUDA.
Se informa al paciente de los componentes, objetivos del tratamiento y sus beneficios,
metodología, procedimientos a seguir, (escalas, circuitos de trabajo), resultados a conseguir,
tratamientos utilizados en la UDA y las posibles complicaciones y efectossecundarios.
Enel HUPR el trípticoinformativo se ha traducido al inglés, francés, alemán y árabe para
facilitar la comunicación en los pacientes multiculturales (Figura 3)12.
Figura 1. Tríptico informativo (anverso).
BLOQUEODENERVIOS Tratamiento
¿Cómo Evitar el Dolor Postoperatorio?
Menos Complicaciones
• Proporciona anestesia a nervios indivi-
duales o pequeños conjuntos de nervios.
• Representan un alivio eficaz del dolor
Mayor Grado de Satisfacción del Dolor
sobre una área específica de su cuerpo
(pierna o brazo).
• Se pueden administrar mediente una
Menos Estrés Quirúrgico Después de la
dosis única o a modo de repetición Educación Sanitaria Cirugía
manteniendo el catéter en la zona que
precise analgesia.
• Previamente se podrá utilizar un
instrumento o estimulador nervioso para
Estancias Más Cortas UDA
localizar dicho nervio. Menos Efectos Secundarios Unidad de Dolor
Movilización Más Precoz Agudo
Más Rápida Recuperación de la
UDA Unidad de Dolor Agudo
U.G.C Bloque
función Intestinal Quirúrgico
Tratamientos Adaptados a HospitalUniversitario
Cada Paciente Puerto Real
Mayor Comunicación
Paciente-Personal Sanitario
24
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
¿Qué es la UDA? Escala de valoración del dolor con caras Tratamientos epidural
Tratamiento del Dolor Después de la Cirugía
25
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
• Protocolos
La analgesia postoperatoria se inicia cuando el paciente ingresa en el HUPR y se adminis-
tra lapremedicación.
La pauta analgésica la prescribe el anestesiólogo que ha realizado la anestesia durante
la intervención quirúrgica, habiendo sido consensuada con el cirujano. La analgesia se
determina según la intensidad prevista de dolor, la intervención quirúrgica realizada y las
características individuales del paciente.
Los protocolos están disponibles en los quirófanos, la URPA y las plantas quirúrgicas.
Están en continua revisión y sujetos a las nuevas evidencias científicas disponibles y a
actualizaciones periódicas.
El tratamiento analgésico postoperatorio se inicia en el periodo intraoperatorio y contem-
plan la analgesia de rescate. Tras el alta de la URPA, los pacientes son trasladados a planta
de hospitalización con el protocolo analgésico postoperatorio seleccionado. Los protocolos
contemplan los fármacos prescritos, su dosificación, los rescates y posibles efectos adver-
sos, así como la conducta a seguir en cada caso. Asimismo, se hace una recomendación
para el tratamiento oral tras el alta de la UDA y/o la retirada de la analgesia parenteral.
Las clasificaciones del tipo de intervención quirúrgica e intensidad de dolor pueden llevar
a importantes errores en la toma de decisiones. Esto puede ser debido a no considerar
factores que condicionan la respuesta a la agresión quirúrgica y la percepción del dolor
por parte del paciente. A pesar de ello y teniendo en cuenta estas limitaciones, pueden
ser útiles si trabajamos de forma flexible con su interpretación.
Por nuestra parte, hemos considerado la clasificación en tres grupos: dolor leve-mode-
rado, dolor moderado-intenso y dolor intenso. Esto nos ayudará a seleccionar el protoco-
lo analgésico a utilizar, pero siempre realizando una selección individualizada de la pauta
analgésica. Para ello, consideraremos las particularidades individuales de cada paciente.
26
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
27
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
En el dolor moderado se añade al AINE un opiáceo débil o bien se realiza una analgesia
multimodal, donde podemos utilizar la analgesia epidural o troncular asociada o no a la
analgesia intravenosa. En ciertas circunstancias donde los opiáceos débiles no están
indicados y no son posibles las técnicas analgésicas regionales, utilizamos opiáceos
mayores adecuadamente dosificados y adaptados a la intensidad del dolor y a las carac-
terísticas del paciente. Si el dolor es intenso, utilizamos analgesia multimodal, asociando
técnicas regionales a la analgesia intravenosa o bien opiáceos mayores.
28
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
29
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Cirugíaprogramada Cirugíaurgente
Intervención quirúrgica
Protocolo analgesia postoperatoria
URP
Hospitalización
UDA
Alta UDA
Recomendación tratamiento oral
30
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
• Recogida de Datos
El mismo anestesiólogo se encarga de cumplimentar la hoja de recogida de datos de la
UDA: datos de filiación (NUHSA, nº Historia clínica hospitalaria, nombre, apellidos, edad,
sexo,), fecha de ingreso en UDA, número de habitación de ingreso, diagnóstico, tipo de
intervención, tipo de anestesia (general, regional, local y sedación), si la intervención
quirúrgica es o no programada, la fecha de la intervención quirúrgica, la especialidad
quirúrgica que realiza la intervención, antecedentes personales y si el paciente tiene o no
alergias medicamentosas y a qué fármaco, si el paciente presentaba dolor previo a la
intervención quirúrgica y su causa, el protocolo analgésico administrado (previamente
codificado), si se administra otro fármaco suplementario al protocolo e indicación del
mismo y registra el riesgo ASA del paciente.
La hoja iniciada por el anestesiólogo se verifica y se termina de cumplimentar al día
siguiente en la visita postquirúrgica.
En ella, se anotan los datos recogidos en las incidencias de Enfermería y la evolución del
paciente. Se registran: la fecha de la evolución, la intensidad del dolor en reposo ydinámico.
Los sistemas utilizados son: la escala visual analógica (EVA), la escala verbal numérica
(EVN), la escala de Andersen y/o escala de Caras en pediatría; tipo de dolor (nociceptivo,
neuropático o mixto), grado de bloqueo motor (escala de Bromage), aparición de efectos
secundarios (náuseas, vómitos, prurito, retención urinaria, íleo, paresia, depresión respira-
toria, otros efectos secundarios y cuáles), el grado de sedación del paciente, la calidad del
sueño y su duración y si ha requerido rescate de analgésicos (Figuras 5 y 6).
31
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
32
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
33
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Tabla 1. Diagnósticos/NOC.
Para obtener un control satisfactorio del dolor postoperatorio se debe tener presente:
Esta información permitirá al equipo sanitario, conociendo la intensidad del dolor, pro-
porcionarle el mejor tratamiento posible y prevenir los posibles efectos secundarios.
34
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
35
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
36
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
La aplicación informática permite una exacta, veraz y útil mecanización del proceso de
los pacientes durante su ingreso y estancia en el hospital por el servicio de Anestesia.
37
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Se deben marcar unos objetivos a cumplir, establecer una medida para conocer si
alcanzamos dichos objetivos, que no es otra cosa que un indicador y monitorizar periódi-
camente el logro o no de dichos objetivos. Para ello, se determina un rango dentro del
cual el nivel de calidad es el aceptable, constituye el estándar de calidad. Esta metodolo-
gía permite adoptar medidas correctoras para una mejora continua de la calidad20.
39
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
40
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Tabla 2. Indicadores de evaluación de dolor postoperatorio y sus estándares (Guía de mejora del control del
dolor postquirúrgico en atención especializada, Servicio Cántabro de Salud)(402).
Indicador de satisfacción
Satisfacción del paciente con la forma en que se trató su dolor:
porcentaje de pacientes encuestados que manifiestan estar satisfechos o muy satisfechos (≥ 7
en la escala) (estándar, ≥ 95%)
Indicador de efectividad
Porcentaje de pacientes que abandonan la URPA con EVN ≤ 3 (estándar, 100%)
Porcentaje de pacientes en planta con EVN ≤ 3 en reposo (estándar, ≥ 90%)
Porcentaje de pacientes en planta con EVN ≤ 5 en movimiento (estándar, ≥ 80%)
Porcentaje de pacientes que precisan modificaciones del protocolo analgésico pautado en
URPA (estándar, ≤ 10%)
Indicador de confort
Porcentaje de pacientes tratados con opiáceos y libres de efectos adversos leves (náuseas y
vómitos, prurito o retención urinaria) (estándar, ≥ 75%)
Indicador de seguridad
Porcentaje de pacientes tratados con opiáceos y libres de efectos adversos graves (sedación,
depresión respiratoria) (estándar, ≥ 99%)
Indicador de calidad percibida
Porcentaje de pacientes que consideran ≤ 15 min el tiempo desde que solicitaron analgesia has-
ta que se les administró (estándar, ≥ 95%)
Indicador de adecuación
Porcentaje de pacientes con analgesia con pauta horaria
Porcentaje de pacientes en tratamiento con opiáceos con profilaxis antiemética pautada
Porcentaje de pautas analgésicas con medicación de rescate pautada
Porcentaje de pacientes con evaluación de dolor por turno de Enfermería en reposo y movimien-
to (mínimo primeras 48 h) (estándar, 100%)
42
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
43
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
Bibliografía
1. Neira F, Ortega JL. Guías de Práctica Clínica en el 7. Ahmed A, Yasir M. Role of acute pain service in
Tratamiento del Dolor. Una herramienta en la prác- optimizing postoperative pain relief in tertiary care
tica clínica. Rev Soc Esp Dolor2008;15;6:399-413. teaching hospital. JPMA 2015;65,11:1164-1168.
2. Neira F, Ortega JL, Martínez J, Gálvez R, De la 8. American Society of Anesthesiologists Task Force
Torre R, Torres LM. Evaluación mediante AGREEde on Pain Management. Practice guidelines for acute
guías de práctica clínica en dolor postoperatorio. pain management in the perioperative setting.
Rev Esp Anestesiol Reanim 2005;52:75-80. Acute Pain Section. National Guidelines Clearin-
ghouse. (Actualizada on October 15, 2003; citada
3. Wioletta Medrzycka-Dabrowska, Sebastian 15 septiembre 2013. Disponible en: http://www.
Dabrowski, Andrzej Basinski. Problems and Barriers asahq.org/publicationsAndServices/pain.pdf.
in Ensuring Effective Acute and Post-Operative
Pain Management – an International Perspecti- 9. Chabás E. Dolor postoperatorio y Unidades de Do-
ve. Adv Clin Exp Med 2015,24,5:905-910. DOI: lor Agudo. Rev Soc Esp Dolor 2004; 11:257-259.
10.17219/acem/26394.
10. Store DA, Shelton AC, Poustie SJ, Colin-Thome
4. Chou R, Gordon DB, de Leon-Sasasola OA, Rosen- NJ, McIntyre RE, McNicol PL. Effect to fan anaes-
berg JM, Bickler S, Brennan T, et al. Anestesia and thesia department led critical care outreach and
Pain Medicine, and the American Society of Anes- acute pain service on postoperative serious adverse
thesiologists’ Committee on Regional Anesthesia, events. Anaesthesia 2006, 61:24-28.
Executive Committee, and Administrative Council.
Pain 2016;17:131- 157. 11. Comisión de acreditación de la SED (CASED).
Normas de la SED para el tratamiento del dolor
5. Schug SA, Palmer GM, Scott DA, Halliwell R, Trin- agudo. Rev Soc Esp Dolor 1998; 5:379-386.
ca J; APM:SE Working Group of the Australian and
New Zealand College of Anaesthetists and Faculty 12. Joint Commission on Accreditation of Health-
of Pain Medicine (2015), Acute Pain Management: care Organizations. Pain assessment and manage-
Scientific Evidence (4th edition), ANZCA & FPM, ment standards-Hospitals. Comprehensive Accre-
Melbourne. ditation Manual for Hospitals. The official Handbook
(CAMH). Oakbrook Terrace, IL: Joint Commission on
6. González Forte MªJ, Cantero Pérez AMª, Mesa Accreditation of Healthcare Organization, 2001.
Suárez P, de la Rosa Fraile MªC, Neira Reina F, Or-
tega García JL. Estrategia de implantación de la Uni- 13. Caba Barrientos F. Gestión del dolor postope-
dad de Dolor Agudo Postoperatorio en el Hospital ratorio: modelos asistenciales. En: Muñoz y Ramón
Universitario Puerto Real. En: Neira Reina F, Ortega JMª. Guía de dolor agudo postoperatorio. Editorial
García JL, Cantero Pérez AMª, González Forte MªJ. de la SED. Madrid. 2011:49-59.
Manual del Dolor Agudo Postoperatorio del Hospital
Universitario Puerto Real. Editorial Liberlibro.com.
2014:125-140.
44
MÓDULO 6
ASPECTOS DE GESTIÓN Y CALIDAD EN
EL DOLOR AGUDO POSTOPERATORIO
Neira F, Ortega M. L.
14. van Boekel RL, Steegers MA, Verbeek-van Noord 21. Galindo M, Ramos JF, Rodríguez P, Díaz NA.
I, van der Sande R, Vissers KC. Acute pain services Evaluación de la aplicación de protocolos de
and postsurgical pain management in the Nether- analgesia postoperatoria en un hospital comarcal:
lands: a survey. Pain Pract 2015;15,5:447-54. doi: estudio de calidad. Rev Esp Anestesiol Reanim
10.1111/papr.12192. Epub 2014 Mar 24. 2012;59(1):25-30.
45