Está en la página 1de 8

Trabajo Práctico

Integrantes: LUQUE Agustín; GARCIA Lucas; RODRIGUEZ Facundo

Curso: 1ro

Carrera: Profesorado de educació n secundaria en Historia

Docente: CHERNAK Maximiliano

Instituto: U.E.P Nº55 Instituto Don Orine


Batalla de Salta 1813
Accidente Geográfico Quebrada de Chachapoyas

Manuel Belgrano había aprovechado la victoria patriota de la Batalla de


Tucumán, librada los días 24 y 25 de septiembre de 1812, para reforzar el ejército
a su mando. En cuatro meses logró mejorar la disciplina de las tropas,
proporcionarles instrucción y reclutar suficientes efectivos como para duplicar su
número. El parque y artillería abandonados por Tristán en la anterior batalla le
había permitido organizarse con mucha mayor soltura. A comienzos de enero,
buscando marchar tranquilamente para no fatigar a las tropas, emprendió la
vanguardia la marcha hacia Salta. El 13 de febrero, a orillas del río Pasaje(luego
paso a llamarse Rio Juramento), el ejército prestó juramento de lealtad a
la Asamblea Constituyente que había comenzado a sesionar en Buenos Aires
pocos días antes, y a la bandera albiceleste diseñada por Belgrano. La bandera
fue conducida por el mayor general Eustoquio Díaz Vélez, a quien llevaba en
medio el coronel Martín Rodríguez y el general Belgrano escoltados por una
compañía de granaderos que marchaban. La victoria se consiguió gracias a que
las tropas avanzaron por la quebrada de Chachapoyas hasta la Hacienda
Castañares donde tomaron casi por sorpresa al ejercito realista.
https://www.youtube.com/watch?v=-pnpZaBHNT4

http://mapoteca.educ.ar/.files/wp-content/mapas/salta/historico/download/
salta_historico.jpg?dl
Batalla de Paraguarí 1811
Accidente geográfico: Cerro Porteño (Antiguamente Cerro Mba'e o
Rombado)

Cuando Belgrano llegó al Paraguay al frente de un ejército de 1.200 hombres en


diciembre de 1810, en el ejército de Belgrano había más fusiles que en toda la
provincia del Paraguay.

En todo el Paraguay no había 500 fusiles, dijo el historiador Julio César Chaves,
quien se apoyaba en un informe del gobernador Bernardo de Velasco de 1810.

En cuanto a la artillería, el Paraguay tenía unos 20 cañones, pero solamente uno


de hierro, según el informe de Velasco. Como punto de referencia, podemos
señalar que, cuando los ingleses tomaron Montevideo en febrero de 1807,
encontraron en la ciudad más de 300 cañones, incluyendo piezas de gran calibre y
en buen estado.

POCAS ARMAS. Pero Montevideo era la ciudad más armada de la América del
Sur hispánica. Las potencias europeas, Inglaterra y España mantuvieron a sus
colonias cortas de armas y de municiones.

En la provincia del Paraguay las había menos que en el sur del Río de la Plata,
armado a partir de las invasiones inglesas de 1806 y 1807.

Precisamente la milicia armada para enfrentar a los ingleses fue la que disolvió el
Virreinato del Río de la Plata en mayo de 1810.

Algo similar le sucedió al gobernador Bernardo de Velasco: él armó a los


paraguayos para enfrentar a los porteños; los paraguayos armados depusieron a
su gobernador.

Como oficial de carrera, Velasco trazó el plan de batalla correctamente.


El ejército de Belgrano tenía más armas de fuego y soldados mejor disciplinados.
¿Dónde enfrentarlo? En la llanura de Paraguarí, donde la caballería paraguaya
podía desplegarse para atacar al enemigo por los flancos. Esto ocurrió en la
batalla de Paraguarí, pero no de la manera prevista por Velasco.

LA BATALLA. El 18 de enero de 1811, tanto Velasco como Belgrano decidieron


iniciar el ataque en la madrugada del día siguiente.

La infantería paraguaya ocupaba el centro; la caballería los extremos (era la


distribución habitual de las tropas en la época). Según el plan del gobernador, las
fuerzas de caballería debían esperar que Belgrano atacara el centro paraguayo,
para caerle entonces por los flancos, rodearlo y vencerlo.

Planeando una celada, los dos trozos de la caballería se mantenían algo alejadas
del centro y en parte ocultas a la vista del enemigo. El ala izquierda, mandada por
Manuel Cabañas, se encontraba cerca del cerro de Santo Tomás. El ala derecha,
mandada por Juan Manuel Gamarra, se mantenía cerca de Ñuatí.

La casi totalidad de los jinetes iban armados de lanzas -mayormente, varas a las
que se les había atado un cuchillo en la punta-. (Por falta de armas, la lanza fue el
arma más utilizada por los americanos en las guerras de la independencia.)

El ejército de Velasco tenía de cinco a seis mil hombres, según Chaves. En la


infantería estaban los oficiales superiores, españoles y españolistas; en la
caballería (el contingente mayor), los criollos.

El plan de batalla era bueno, pero no todo salió bien para Velasco. Belgrano
adelantó el ataque. Su vanguardia, dirigida por el oficial paraguayo Juan Machaín,
atacó y dispersó a la infantería paraguaya en la madrugada. Con los soldados
huyeron los jefes y oficiales, incluido el propio gobernador Velasco.

Alguien llevó a Asunción la noticia de que Belgrano había triunfado y marchaba


hacia Asunción. Los miembros del Cabildo decidieron embarcarse para huir. (El
Cabildo, por entonces, gobernaba el Paraguay porque Velasco le había cedido el
mando político.) La fuga fue prematura.
LA ESTRATEGIA. Antes que a los viejos oficiales, Velasco prefirió a los hombres
con menor formación profesional pero con don de mando, como Gamarra y
Cabañas, hábiles y respetados por sus soldados. Esta fue una decisión afortunada
del desafortunado gobernador y capitán general (comandante en jefe) don
Bernardo de Velasco, último gobernador intendente del Paraguay.

Su plan de batalla fue bueno; la ejecución fue mala y el desastre se evitó gracias a
la iniciativa de los oficiales de la milicia local. Esta victoria militar paraguaya tuvo
consecuencias políticas nefastas para los españoles.

Aparentemente, los paraguayos habían luchado para defender la causa del Rey
de España.

Ellos no apoyaban al Rey, sino que rechazaron una invasión extranjera.


Terminada la invasión, decidieron enfrentar al Rey y sus representantes, contra
quienes tenían numerosos motivos de agravio.

La batalla de Paraguarí fue un antecedente directo de la revolución del 14 de


mayo de 1811.

YEGROS, CABALLERO Y OTROS HÉROES

Abandonados por el jefe superior (Velasco), Cabañas y Gamarra decidieron


emprender el ataque y pusieron en fuga a los soldados enemigos. Belgrano se
retiró para el sur, por donde había venido.

Además de Cabañas y Gamarra, en esta acción se destacaron los oficiales más


jóvenes que habían de encabezar la conspiración de mayo de 1811: Fulgencio
Yegros, Pedro Juan Caballero, Vicente Ignacio Iturbe, Juan Bautista Rivarola,
Mauricio José Troche y otros.

Varios de ellos eran jefes de las milicias urbanas; esas milicias sólo debían prestar
servicio dentro de las ciudades o pueblos, pero en esto no se cumplió el
reglamento. Troche, por ejemplo, dirigió la milicia de Curuguaty, que tendría una
intervención decisiva en la insurrección de mayo. Tampoco se había tomado en
cuenta el escalafón militar, y por eso Cabañas y Gamarra tuvieron mayor mando
de tropa que oficiales más antiguos.
https://www.youtube.com/watch?v=YOzjEBE1yuo

https://es.wikipedia.org/wiki/Batalla_de_Paraguar%C3%AD

También podría gustarte