REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN

UNIVERSIDAD DE LAS CIENCIAS DE LA SALUD “HUGO CHAVEZ FRÍAS”

MEDICINA INTEGRAL COMUNITARIA

5TO AÑO

CÁTEDRA: MEDICINA DEL DE DESASTRE

SALUD MENTAL Y
DESASTRE

GILBER ANGULO
Los desastres se pueden considerar como un problema de salud pública que
puede afectar el comportamiento psicosocial de una población, principalmente
los niños los niños, adolescentes, mujeres y ancianos como grupo vulnerables;
todos ellos desarrollan diferentes tipos de respuesta psicológicas al desastre
según su capacidad de superación de una crisis.

Los desastres son situaciones generadas por efectos adversos de origen

natural( terremotos, tsunamis, inundaciones, ciclones, etc.) o producidos por el
hombre( terrorismo, violencia social, contaminación química) , que exceden la
capacidad de respuesta de una comunidad o país , ocasionando efectos en la
salud pública debido que causan numerosas muertes, lesiones, discapacidades
y enfermedades de forma inesperada, además, afectan y destruyen las
infraestructuras sanitarias y servicios de agua, incrementan el riesgo de
padecer enfermedades transmisibles

Los desastres afectan La salud mental de la población ya sea de forma directa,

debido a la perdida de un familiar o a la destrucción de algún objeto material; o
indirecta por los efectos inmediatos del suceso que afectan a la persona, pero
sin que sufra perdidas familiares o bienes materiales.

Las alteraciones de la salud mental se pueden ir presentando con síntomas

psicosomáticos, Como la falta o exceso de apetito, problemas digestivos,
erupciones cutáneas, náuseas, palpitaciones, entre otros síntomas como
dificultad para dormir, estrés, irritabilidad, problemas familiares y laborales. Los
síntomas pueden ser variados, dependiendo de la vulnerabilidad de las
personas, su experiencia previa al hecho, el grado y tiempo de afectación que
por lo general los sucesos inesperados como los conflictos armados y
terremotos generan una situación de estrés prolongado

¿Que personas se encuentran más expuestas a estos desastres?

Los grupos de personas que están más expuestas son:

- Mujeres embarazadas, madres solteras y viudas.

- Niños y adolescentes, siendo los más vulnerables aquellos que han
perdido a su familia.
 - Personas desempleadas.
- Ancianos, especialmente si han perdido a las Personas que los
cuidaban.
- Personas desplazadas de su lugar de vivienda.
- Personas que pierden su sistema de apoyo social y Psicológico.

¿Cuáles son los factores que influyen en el impacto psicosocial de los

desastres?

- La naturaleza del fenómeno adverso que produce el desastre, pidiendo

diferenciarse entre desastres de inicio súbito cómo terremotos y
tsunamis; y otros de inicio lento y curso insidioso, cómo las
inundaciones.
- Las características de personalidad de los afectados. Los desastres no
afectan a todas personas por igual: Algunas tienen mayor probabilidad
de desarrollar Problemas psicológicos que otras que pueden tener
Mayor capacidad para enfrentar mejor la situación.
- El entorno y las circunstancias: condiciones Ambientales y familiares de
las víctimas, y las redes sociales existentes, previas al desastre

Respuestas psicológicas a los desastres.

Las personas afectadas por los desastres tienen diferentes tipos de respuesta:
algunas se hacen evidentes en las primeras 72 Horas después del desastre,
como crisis emocionales, Incremento de la excitación, apatía, ansiedad difusa y
Temor a conocer la realidad.

Al primer mes, se observa Duelo, tristeza, aflicción, miedo, manifestaciones

somáticas diversas, irritabilidad, pérdida de sueño y apetito, y problemas en el
desempeño laboral y las relaciones interpersonales.

A los dos o tres meses, se evidencia tristeza, manifestaciones Somáticas,

ansiedad, y pérdida de confianza debido a dificultades en la adaptación o ante
la falta de solución a sus problemas derivados del desastre. A partir de Los tres
meses, se podría observar duelos patológicos, Conductas que indican riesgo
de suicidio, síntomas de Estrés postraumático, fatiga crónica, inhabilidad para
Trabajar y apatía.

En los casos de situación traumática generada por el desastre y desborde la

capacidad de la persona, se puede presentar una crisis psicológica,
denominada Desorden de estrés agudo, que se caracteriza por miedo intenso,
impotencia, horror, ausencia total de emociones, sentimiento de desconexión,
sentido de Irrealidad y amnesia. Aquellas personas que sufren de este tipo de
desorden, se muestran ansiosas, excitables, agitadas, irritables y
desesperanzadas; además, presentan sueños recurrentes con escenas
repetitivas y recuerdos del hecho traumático, dificultad para concentrarse,
sentimientos de culpa por haber sobrevivido, y dificultades para integrarse a su
medio laboral y familiar.

Cuando la persona es diagnosticada y tratada oportunamente, los síntomas

disminuyen o desaparecen al mes. En los otros casos, los síntomas persistirán,
y si la duración está entre uno a tres meses, se le denomina desorden de
estrés post Traumático, pudiéndose convertir en crónico cuando las
manifestaciones están presentes por más de tres meses.

Intervenciones psicológicas post desastre

Son los procesos que sirven para ayudar a una persona a sobrellevar un
acontecimiento traumático, para así lograr que se presenten menos
consecuencias saludables, y se manifieste una mayor probabilidad de
crecimiento y superación. Está se caracteriza por presentar 4 fases, las cuales
son:

- Fase pre-crítica: la cuál corresponde a horas previas al desastre. La

intervención se orienta a las medidas de protección preventiva, a fin de
lograr prevenir los daños producidos por el potencial desastre
 - Fase crítica: corresponde durante el desastre y las 72 horas posteriores,
sus intervenciones se centran en la protección física, orientación sobre
las reacciones psicosociales, la evaluación rápida de las necesidades
emocionales y la ayuda psicológica de personal no especializado

- Fase post-crítica: la cuál puede durar varios meses dependiendo del tipo
de desastre y la cantidad de población afectada. Las intervenciones se
centran en apoyar a la propia comunidad, educando y capacitando sobre
la salud mental, atención psicosocial para grupos vulnerables y la
atención a personas con trastornos mentales

- Fase de recuperación: después de 6 meses de la tragedia hasta por 5

años cuando son complejas. Las intervenciones más importantes son el
desarrollo de proyectos ocupacionales y productivos, la educación,
capacitación y atención a personas con trastornos mentales

Las intervenciones que se hagan con la población afectada pueden ser

realizadas por un personal no especializado que tenga un previo entrenamiento
en atender las más frecuentes manifestaciones psicológicas que se pueden
presentar después de un desastre. Cuando interviene un especialista es
cuando hay personas que presentan trastornos persistentes, psicosis, riesgo de
suicidio alto, abuso de alcohol o drogas.

El personal no especializado puede realizar intervenciones comunitarias

preventivas en dónde se informa y se realizan actividades grupales con niños y
adolescentes para desarrollar grupos de apoyo de ayuda ; así como también
realizar intervenciones en aquellas personas que presenten duelos, conductas
violentas y otros trastornos tales como ansiedad, crisis de pánico, depresión,
drogadicción y trastornos de estrés postraumático