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Tipos de Oxigenoterapia de bajo y alto flujo convencional

Ilustración 1 Tipos de Oxigenoterapia

S de Bajo Flujo

1. Cánula Nasal (1,2,3)

Consiste en un tubo o manguera plástico suave y flexible con dos salidas o puntas que
se adaptan a las fosas nasales y que se mantiene sobre los pabellones auriculares. Es
de fácil uso y en general muy bien tolerado. Permite hablar, comer, dormir y expectorar
sin interrumpir el aporte de O2.
Composición: Tubo o manguera en PVC, grado médico extra suave, de 2.10 metros,
puntas nasales curvas y extra suaves y conector universal de 4 milímetros de diámetro
interno.

Las cánulas nasales se usan por su simplicidad y el cumplimiento de que el paciente


recibe el oxígeno complementario. El aire ambiental entra en las fosas nasales con el
FiO2 obtenido, proporcional al ritmo de oxígeno (1-6 l/min), el volumen de espiración
del paciente, el ritmo de flujo inspiratorio y el volumen de la faringe. A un ritmo de flujo
de oxígeno de 2 l/min, la concentración de oxígeno en la hipofaringe de una persona
en reposo es del 25 % al 30 %.

Las cánulas nasales evitan la reinspiración y son cómodas durante periodos largos.
Hay un mejor cumplimiento de la terapia con las cánulas nasales, ya que los pacientes
pueden hablar, comer y beber. Se recomienda el uso de oxígeno humidificado para
reducir la incomodidad y la sequedad de la pared de la mucosa en las cavidades
nasales, particularmente cuando se usan flujos superiores a 4 l/min.

2. Máscara Simple 81,2,3):

Dispositivo de plástico blando que cubre boca y nariz, posee orificios laterales que
permiten la salida del aire espirado. El flujo a administrar oscila entre los 5-8 litros, la
FiO2 oscila entre el 40-60%.

Precauciones administración de oxígeno a través de la mascarilla facial simple:

 Se necesita una velocidad de flujo de oxígeno mínimo de 6 l/min para evitar


que el paciente vuelva a respirar el CO2 exhalado y para mantener una mayor
concentración de oxígeno inspirado.

A largo plazo puede causar irritación de la piel y producir úlceras

3. Máscara con Reservorio (1,2,3)

La mascarilla con reservorio es un sistema de bajo flujo que permite concentraciones


próximas al 90% en óptimas condiciones. Estas mascarillas se emplean en la
insuficiencia respiratoria hipoxémica porque permiten el aporte de altas
concentraciones de O2. El paciente respira sólo el gas procedente de la bolsa. No
contienen válvulas, sus bordes son atraumáticos, es libre de látex, %O2 de 60 a 80%

S. de Alto Flujo

4. Venturi (1,2,3)

Es una mascarilla de alto flujo que proporciona una FIO2 predeterminada y sostenida,
basada en el principio de Venturi.

Por lo tanto, permite obtener concentraciones de O2 inspirado de una forma más


exacta, independientemente del patrón ventilatorio del paciente. Esta indicado
especialmente en enfermos con IRA grave en lo que es preciso controlar la
insuficiencia de forma rápida y segura.

Dentro de los sistemas de alto flujo el más representativo es la mascarilla con efecto
Venturi, la cual tiene las mismas características que la mascarilla simple, pero con la
diferencia de que en su parte inferior posee un dispositivo que permite regular la
concentración de oxígeno que se está administrando. Ello se consigue mediante un
orificio o ventana regulable que posee este dispositivo en su parte inferior. En el
cuerpo del dispositivo normalmente viene indicado el flujo que hay que elegir en el
caudalímetro para conseguir la FiO2 deseada.

El funcionamiento de la mascarilla con efecto Venturi es como sigue: desde la fuente


de oxígeno se envía el gas, el cual va por la conexión que une a la fuente con la
mascarilla. Cuando el O2 llega a la mascarilla, lo hace en chorro (jet de flujo alto) y por
un orificio estrecho lo cual, según el principio de Bernoulli, provoca una presión
negativa. Esta presión negativa es la responsable de que, a través de la ventana
regulable del dispositivo de la mascarilla, se aspire aire del ambiente, consiguiéndose
así la mezcla deseada.
Objetivos Terapéuticos de la Oxigenoterapia

La oxigenoterapia se define como el aporte artificial de oxígeno (O2) en el aire


inspirado; su objetivo principal es la oxigenación tisular, que se consigue cuando la
presión parcial de O2 (pO2) en la sangre arterial supera los 60mmHg, lo que se
corresponde, aproximadamente, con una saturación de hemoglobina del 90%. Hoy por
hoy, la oxigenoterapia es la herramienta terapéutica fundamental en el tratamiento de
los pacientes con insuficiencia respiratoria, tanto aguda como crónica. (4)

Los objetivos de la oxigenoterapia son tratar o prevenir la hipoxemia, tratar la


hipertensión pulmonar (HTP) y reducir el trabajo respiratorio y miocárdico 1. La
oxigenoterapia está indicada cuando hay una situación de hipoxemia aguda o crónica
con pO2 inferior a 55–60mmHg, cifra que se corresponde con una saturación de
hemoglobina del 90%. Por debajo de estas cifras, la afinidad de la hemoglobina por el
O2 disminuye rápidamente y el contenido total de O2 y el aporte de éste a los tejidos
se ve afectado. (4)

El empleo adecuado de la administración terapéutica de O2 se basa en el


conocimiento de 2 aspectos fundamentales: los mecanismos fisiopatológicos de la
hipoxemia y el impacto de la administración de O2 con sus efectos clínicos
beneficiosos. (4)

Referencias

1. Pratto R. Oxigenoterapia a alto flujo con cánula nasal en el tratamiento


de la falla respiratoria aguda hipoxémica en una paciente embarazada:
reporte de un caso. Rev. bras. ter. intensiva 30 (4) • Oct-Dec 2018

2. Pírez C. Oxigenoterapia. Arch. Pediatr. Urug.  [Internet]. 2020  Dic; 


91( Suppl 1 ): 26-28.
3. Mejía M. Oxigenoterapia en COVID-19: herramientas de uso previo a la
ventilación mecánica invasiva. Guia sencilla. CES Med. [Internet]. 2020
Dic; 34 (esp): 117-125
4. Paredes L. Fundamentos de la oxigenoterapia en situaciones agudas y
crónicas: indicaciones, métodos, controles y seguimiento. 2019 Ago. Vol
71(2) pp: 161-174

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