Esta entrevista constituye el medio principal de que dispone el
psicólogo clínico para comunicarse con sus pacientes, conversar con ellos. Se desarrolla en el marco que se establece entre ambos y es una modalidad de las relaciones interpersonales. Tiene objetivos psicodiagnósticos y psicoterapéuticos, es decir, cumple una doble vía en el proceso que le brindan características específicas. En la entrevista clínica intervienen diversos factores. La personalidad del psicólogo y el paciente, el padecimiento o enfermedad del paciente o trastorno psicológico y la técnica empleada por el psicólogo.
El carácter de actividad fundamental a través de la cual se establece
la comunicación entre el psicólogo y sus pacientes, para lograr los objetivos psicodiagnósticos y psicoterapéuticos, hace a la entrevista clínica uno de los procedimientos más importantes del trabajo de la especialidad. Sin embargo, el mal manejo que de ella se hace, el desconocimiento de la mejor forma de conducción y los aspectos formales que la asemejan a una conversación, contribuyen a que en ocasiones no se tengan en cuenta la complejidad técnica necesaria para dirigirla exitosamente; esta complejidad es la que intentamos que asimile, practique y reflexiones el estudiante de nuestra Facultad para que no se encuentre en su práctica social concreta haciendo un Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
trabajo profesional mediocre. Es nuestro deber asumir esa
responsabilidad académica y profesional con mucha propiedad.
FACTORES DE LA ENTREVISTA PSICOLÓGICA
CLÍNICA
PERSONALIDAD DEL PSICÓLOGO CLINICO Y EL
PACIENTE: El psicólogo debe considerar las actitudes del paciente y la modificación que en ellas crea la enfermedad, para evaluar la distorsión de la información que ésta le brinda y valorar la que posiblemente se produzca de lo informado por el paciente. Es decir, la habitual alteración de la información brindada por el paciente de forma consciente o inconsciente, se acentuará grandemente si no se comprenden las causas. La distorsión también puede producirse con lo que el psicólogo intenta comunicar al paciente. Por ejemplo, un afectuoso apretón de manos puede ser muy reconfortante para un individuo con características de inseguridad y búsqueda de apoyo; sin embargo, será valorado como hipócrita, artificial y mal intencionado, por otro paciente, introvertido o desconfiado. Estos factores hacen inoperante por simplistas, las fórmulas generales. Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
No es menos importante el conocimiento que el psicólogo tenga de
sus propias actitudes o tendencias, porque su descuido puede ocasionar rupturas en la comunicación. No sólo interviene el hecho tan conocido de que cuando un paciente irrite, cree hostilidad o "caiga pesado", algo anda mal en el psicólogo.
La situación es más compleja de lo que la trampa frecuente para un
estudiante o profesional sin experiencia que se produce cuando los pacientes se hacen agradables al comunicarle la gran confianza y la admiración que les tienen a los psicólogos, que la psicología es una ciencia, es una ciencia muy importante y que siempre desearon conocer la psicología…que siempre les ha gustado la psicología…, lo que no es otra cosa que un maniobra para responsabilizar al psicólogo con el resultado de un proceso de atención psicológica que inconscientemente desean que fracase, que se siente interesado cuando está en la sesión, que hace creer que hace lo que se le sugiere; pero en la realidad, no hace nada, lo que le permite continuar con sus alteraciones y sentirse tranquilo, como liberado, porque la responsabilidad es del psicólogo.
Obviamente, con este tipo de paciente el profesional y el estudiante
en formación profesional deben tener mucho cuidado porque de ellos es que sale aquello de que " el psicólogo no sirve para nada", Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
puesto que él demuestra que sigue con sus problemas, a pesar de
haber consultado y estar en psicoterapia con un profesional de salud mental. Es la resistencia del paciente.
TECNICA EMPLEADA. Esto se refiere a los recursos técnicos
utilizados para obtener una comunicación clara y efectiva, con el fin de complementar los objetivos de la entrevista, que en general, son los siguientes:
1.- ¿Cómo lograr que el paciente nos comunique la información que
necesitamos?
2.- ¿Qué grado de distorsión existe en la información?
3.- ¿Cómo y en qué momento de la entrevista y de qué forma
podemos lograr que el paciente comprenda lo que debemos comunicarle?
4.- ¿Cómo lograr todo lo anterior sin producir rechazo, distorsión de
la comunicación u hostilidad, lo que rompería la relación: (incluir guía de entrevista clínica)? Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
Los aspectos técnicos descansan en un profundo conocimiento de la
comunicación verbal y extraverbal, que permite reducir a un mínimo la distorsión de los mensajes recibidos y enviados. Unido a esto es imprescindible conocer las características del paciente y su enfermedad que van a determinar el enfoque del caso, lo que podemos preguntar, si le hacemos las preguntas en forma directa o indirecta, o, si por el contrario, se debe esperar un momento más propicio. Siempre se debe recordar que una entrevista clínica no es un interrogatorio bajo presión para obtener información, y muchas veces, resulta más adecuado posponer una pregunta, que causarle malestar al paciente y peor aún malograr una buena entrevista.
En relación con aspectos específicos sobre la conducción de la
entrevista que aquí nos ocupa, se puede señalar a modo de orientación lo siguiente:
1.- El psicólogo clínico le demostrará respeto e interés profesional y
humano al paciente 2.- Señalará que es necesario conocerlo a él y explorar a profundidad su problema para poder ayudarlo, aunque en algunos momentos esto puede resultar difícil. Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
3.- Evitará los aspavientos o las muestras de afectividad que el
paciente pueda sentirlas como artificiales, de poca afectividad o de un interés diferente al hecho de ser paciente. 4.- Sin atormentarlo con un interrogatorio rígido, irá llevando con paciencia la conversación hacia los elementos importantes, de manera que el paciente sienta que el profesional sabe lo que hace y no se trata de una conversación habitual. 5.- En la medida que el paciente vaya exponiendo los distintos aspectos de interés, el entrevistador irá haciendo comprobaciones con preguntas que enfoquen el problema desde diversos ángulos, de forma indirecta, o pidiendo descripciones, ejemplo e ilustraciones. 6.- Cuando el psicólogo no esté seguro de lo que quiere decir el paciente, le preguntará o pedirá aclaraciones porque no le ha comprendido. Es importante, que el entrevistador esté atento a las manifestaciones del paciente que puedan distorsionar el mensaje. 7.- Un aspecto que entraña más dificultades que los anteriores, es que habitualmente el psicólogo clínico conoce bastantes elementos del paciente, los que sería importante hacerle conocer, mucho antes de que sea oportuno señalárselos. 8.- Para lograr el punto anterior, el psicólogo clínico, debe ir haciendo que inicie una toma progresiva de conciencia partiendo del más sencillo e ir poco a poco profundizando Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
9.- Ese progreso de conciencia se puede lograr por medio de
preguntas que lo hagan enfocar el problema desde otro ángulo; por ejemplo, ¿y qué habrá pensado la otra persona de esto? ¿Y qué pensarán los hijos de los padres muy rígidos?, planteando primero la situación de manera impersonal y después relacionándola con la que había expuesto tiempo antes. Se tendrá en cuidado de que el paciente no sienta que tratamos de "salirnos con la nuestra", pero todavía, "manejarlo". Lo cual lo llevaría a reafirmarse y distorsionar la comunicación. 10.- Si se incurriera en errores técnicos, o al evaluar las características del paciente y su trastorno o enfermedad éste se disgustará, es oportuno preguntarle qué ocurre, y decirle que parece que hemos hecho algo que lo ha molestado y lo ha obligado a ponerse de esa forma.
Si se considera oportuno puede ofrecerse una disculpa, si no puede
hacerse un comentario en el sentido de que el futuro se tendrá más cuidado en lo que hace; pero se evitará dar una amplia explicación sobre el hecho, ya que esto, por lo general, denota inseguridad y el psicólogo debe ser una persona firme y sólida en sus argumentos, aún en su explicación del error aparentemente cometido. Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
Con lo que se ha planteado sólo se pretende despertar el interés del
estudiante de psicología clínica de la Sección de Psicología de la Facultad Multidisciplinaria Oriental de la Universidad de El Salvador y que comprenda la importancia que revisten estos elementos, para un profesional de calidad. Otros documentos registran conceptos que se encuentran implícitos en lo descrito; como es el logro de un buen rapport, la empatía, la comprensión, las buenas relaciones humanas con el paciente, el no juzgar, o hacer valoraciones sobre el paciente y su problema psicológico. Sin embargo, con lo mencionado hasta aquí se considera posible hacer y conducir una entrevista desarrollando una técnica adecuada.
ENFERMEDAD O TRASTORNO DEL PACIENTE. Este es
otro elemento que debe tomarse en consideración, pues no se puede tratar a todos los pacientes de igual forma. A los pacientes deprimidos se les escuchará con simpatía y evitando acosarlos con interrogatorios incontrolados, puesto que muchas veces obtenemos más, demostrándole que comprendemos sus dificultades para comunicarse y que podemos pasar un rato acompañándolo, sin aturdirlo más con una serie de preguntas mecánicamente planteadas.
Con los pacientes delirantes, no podemos discutir, pero tampoco
apoyarlos y seguirles la corriente, no es conveniente y no da buenos Psicología clínica René Campos Quintanilla FMOUES
resultados el reforzar sus delirios. Es más adecuada una actitud de
comprensión que les demuestre el conocimiento de la correncia frecuente de estos trastornos, sin que por ello los consideremos "locos" ni que todo lo que dicen es ilógico.
En los casos, de pacientes paranoides o suspicaces, desconfiados o
negativos, no debemos demostrar un excesivo interés o afecto, pues esto les crea gran angustia y lo pueden considerar una intromisión; es más efectiva una actitud de respeto y disposición de ayuda, manteniendo en la relación cierta distancia afectiva. No quiere decir tampoco que realmente no nos interesa el paciente y su enfermedad, es nada más usar una técnica de trato adecuado de acuerdo al tipo de paciente que tenemos en consulta en ese momento. Los pacientes muy inmaduros, nerviosos, temerosos; con conductas inadecuadas, requieren de una actitud firme, por parte del psicólogo que exprese comprensión, pero sin ser permisiva, cuidando que el paciente no reaccione con enojo o miedo a una agresión.
Estos son procedimientos de cómo tratar a las personas no a los
problemas abstractos y conducir de una forma más adecuada la entrevista el tratamiento en general.