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AS AR TES
TES
P L ÁST ICAS
Y S U FU
FUNCIÓN EN LA ESCUELA
Luisa
Luisa Mª Martínez
Martínez García
García
Rosario
Rosario Gutiérrez
Gutiérrez Pérez
Pérez
EDICIONES
A L J I B E
LAS ARTES PLÁSTICAS
Y SU FUNCIÓN EN LA ESCUELA
Colección: BIBLIOTECA DE EDUCACIÓN
2ª edición, 2002
© Luisa
Luisa Mª
Mª Mart
Martíne
ínezz Garcí
Garcíaa y Rosa
Rosario
rio Gutiér
Gutiérrez
rez Pérez
Pérez
© Edi
Edicion
ciones
es Alji
Aljibe
be,, S.L
S.L..
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citados derechos.
Luisa Mª Martínez García
Rosario Gutiérrez Pérez
EDICIONES
ALJIBE
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN ............................................
...................................................................
...........................................
.................... 11
CAPÍTULO I: NATURALEZA
NATURALEZA DEL ARTE ARTE INFANTIL ...........................
........................... 17
1. El arte del niño como forma de representación..................
representación .....................................
......................
... 17
2. Factores
Factores que favorece
favorecenn el desarrollo
desarrollo de la expresión
expresión artística
artística ........
.............
.........
.... 18
3. Componentes
Componentes que integran el proceso creador..................
creador .......................................
......................... 20
4. El arte como medio educativo .........................................
..............................................................
.........................
.... 22
CAPÍTULO II: ORIGEN Y EVOLUCIÓN EVOLUCIÓN DE LOS LOS PRIMEROS TRAZA- TRAZA-
DOS. ESTADIO
ESTADIO PSICOMOTOR:
PSICOMOTOR: DE 18 MESES A 4 AÑOS .................... .................... 27
1. Génesis del grafismo ..........................................
................................................................
......................................
................ 27
2. Etapa
Etapa de expansió
expansiónn cinestésic
cinestésicaa no controlad
controladaa ..........
...............
..........
.........
.........
..........
..........
......... 28
Características
Características gráficas: origen y descripción....................
descripción .........................................
....................... 29
Resumen gráfico: nivel motor ....................................
.......................................................
..............................
........... 30
3. Etapa inicial
inicial de control viso-motriz: control simple y control corelacional corelacional 32
Características
Características gráficas: origen y descripción....................
descripción ........................................
........................ 32
Control simple y control correlacional...................
correlacional .......................................
..................................
.............. 33
El significado
significado de los trazados
trazados en este período período ..................................
.........................................
....... 33
Resumen gráfico: nivel perceptivo ........................................
...........................................................
................... 35
4. Etapa celular o constructiva:
constructiva: control doble .......................................
..............................................
....... 36
Características
Características gráficas: origen y descripción....................
descripción ........................................
........................ 36
El ideograma
ideograma como referente
referente simbólico ........................................
..................................................
.......... 38
El color en esta etapa ........................................
.............................................................
........................................
................... 40
Resumen gráfico:
gráfico: nivel de control
control doble .....................................
.................................................
............ 40
8 Las artes plásticas y su función en la escuela
3. Los objetivos
objetivos generales
generales de desarrollo en los procesos de de producción
producción ar-
tística y de aprehensión
aprehensión estética ........................................
............................................................
.......................
... 105
4. Los contenidos
contenidos en el curriculum de Educación Artística .........................
......................... 108
5. La programación
programación de actividades
actividades .......................................
............................................................
........................
... 110
BIBLIOGRAFÍA ..........................................
.................................................................
..............................................
......................... 151
INTRODUCCIÓN
protagonizaron
protagonizaron un intento de cambio en sus respectivos contextos que no llego a
dejar ningún tipo de huella en nuestra práctica escolar.
Una situación similar se produce con las tendencias que marcan el curricu-
lum de las dos últimas décadas. Las líneas más influyentes en estos períodos van
desde el proyecto Kattering de la Universidad de Stanford, coordinado por H. Eis-
ner, hasta el movimiento D.B.A.E. auspiciado por el Getty Center, pasando por la
propuesta de H. Gardner parapara el desarrollo
desarrollo de
de las artes
artes en Secundaria,
Secundaria, denominado
denominado
Art Propel, o por las últimas corrientes de tendencia multicultural. Todos estos
movimientos sólo han tenido repercusión
re percusión en el campo teórico y en el marco univer-
univer -
sitario, sin tocar hasta ahora el ámbito real de la escuela en nuestro país (a no ser en
pequeños núcleos
núcleos experimentales).
experimentales). Aquí
Aquí hemos pasado de sistemas
sistemas de copia deci-
deci-
monónicos a las fichas y otras estrategias mecanicistas, sin olvidar algunos islotes
de psuedo-progresismo no-oficial, cuya metodología consiste en cambiar cada día
de técnica, de estilo, de materiales y de objetivos, en una especie de reverso esqui-
zofrénico del mortecino panorama oficial. Depouilly, J. (1981, 9) comenta de for-
ma muy acertada, a nuestro juicio, esta pedagogía sin objeto:
«Un día se pretende que los niños recreen la pintura prehistórica; otro,
que pongan la misma pasión que Alberto Durero en el estudio documental;
otro, todavía que revivan la experiencia de Paul Klee, de Matisse o de
Rouault.
Rouault. A su estilo se han imaginado obras “manipulables”. Para que se
familiaricen
familiaricen mejor con ciertas producciones
producciones de la escultura contemporá-
contemporá-
nea, se les incita a escalar, y para que gocen plenamente del color, se les da
a comer... En una palabra, no pasa una semana en que una nueva “anima-
ción” no sea considerada, esperando quedar reducidos a practicar la reani-
mación en esos grandes enfermos que son los sistemas educativos ».
sobre las que se debe ejercer la acción didáctica; podemos variar los métodos y es-
trategias, pero no el núcleo de la cuestión
cuesti ón que tiene que partir del respeto a la lógica
de un sistema que se impone desde cada nivel madurativo. Por ello y utilizando las
palabras de R.R. Arnheim
Arnheim (1980, 230), consideramos
consideramos queque «la
«la conclusión más útil que
puede obtenerse
obteners e del estudio
estud io de los estadios
es tadios de desarrollo
des arrollo es que toda enseñanza
ense ñanza
debería estar basada en la conciencia de que la concepción visual del alumno crece
conforme a principios propios, y que las intervenciones del profesor deben estar
guiadas por
por lo que en cada
cada momento exige individual »».
exige el proceso de crecimiento individual
Consideramos, por otra parte, que la dimensión productiva dentro del desa-
rrollo curricular de las artes plásticas ha sido siempre maltratada como lenguaje
específico y parece ser que no se perciben cambios en este sentido; por el contrario
se corre el peligro de que siga siendo desconsiderada o subordinada a otras dimen-
siones como la educación visual y estética que, siendo básicas en la formación del
niño, no sustituyen sin embargo la experiencia artística individual.
Defendemos en consecuencia que, junto a esta dimensión semiótica de la
producción artística de los niños, hay que considerar a determinados niveles la
educación estética como formación indispensable para entender la dimensión cul-
tural y como instrumento para el desarrollo
desarr ollo de la sensibilidad y de la emoción ligada
a la expresión formal de las artes. Ahora bien, lo que se ha dado en llamar educación
visual no puede traducirse en un inventario de recetas sobre como mirar la obra de
arte, sino que debe apoyarse en la búsqueda formal de orden y en el sentimiento
estético que caracteriza la realización de una actividad artística. La dimensión pro-
ductiva propia aglutina, a nuestro juicio, otras facetas del curriculum del arte y no
debe ser considerada un epifenómeno en si misma. Creemos en un curriculum
equilibrado no sujeto a corrientes extremas que tiendan a descompensarlo.
Este texto tiene como eje principal el estudio de los procesos madurativos en
relación con las artes y pretende clarificar algunos de los aspectos que definen a la
educación artística como parte del curriculum escolar. Para ello hemos dividido
nuestro trabajo en dos partes: la primera, trata sobre la función del arte y los procesos
de desarrollo gráfico en los distintos niveles de maduración, y la segunda, sobre los
planteamientos
planteamientos didácticos
didácticos que determinan
determinan las estrategias para abordar
abordar la expresión
expresión
plástica como área de de conocimiento
conocimiento que se trabaja en la escuela.
escuela. Nuestros
Nuestros plantea-
plantea-
mientos son el resultado de numerosas experiencias
experi encias realizadas con niños de diversas
edades y de diferentes entornos sociales y culturales, así como de la investigación
sistemática de los dibujos infantiles como un sistema simbólico autónomo y emer-
gente que apunta a los valores formales que caracterizan la experiencia artística.
El trabajo se ha elaborado con la intención de aportar algunas referencias
básicas a aquellos
aquellos maestros y padres sensibles a la experiencia
experiencia artística y a la com-
prensión de su papel en la escuela. Del mismo modo, esperamos que complete la
bibliografía
bibliografía utilizada por los estudiantes de la Facultad de Ciencias de la Educa-
ción y que su contenido les ayude a desarrollar de manera más adecuada el conoci-
miento estético y artístico de sus futuros alumnos.
PRIMERA PARTE
INTRODUCCIÓN A LA FUNCIÓN DEL ARTE
Y A LOS PROCESOS DE DESARROLLO GRÁFICO
EN LOS DISTINTOS NIVELES MADURATIVOS
CAPÍTULO I
2. FACTORES
FACTORES QUE FAVORECEN
FAVORECEN EL DESARROLLO
DESARROLLO DE LA EXPRE-
EXPRE-
SIÓN ARTÍSTICA
cho al que pocos niños se resisten si tienen la oportunidad de hacerlo, apunta hacia
la existencia de un componente de tipo de biológico que provoca de manera natural
el nacimiento del arte infantil; sin embargo, hay que distinguir en este factor no
sólo un matiz de tipo motor que sin duda existe por lo gratificante que son las
descargas cinestésicas del garabateo en si mismas, sino también, un componente
de tipo gestual o expresivo que es el que lleva al niño hacia la búsqueda de un
soporte donde dejar la huella que provoca su actividad. Sin este segundo matiz los
niños podrían limitarse a realizar cualquier otro tipo de movimientos que diera
satisfacción a su necesidad de descarga motora y, sin embargo, no es así; todos
buscan un lugar
lugar que sirva como soporte de sus
sus trazados,
trazados, ya sea
sea el papel, la pared,
pared, la
tierra del parque o la arena de la playa. Es decir, buscan un marco de incidencia y
en consecuencia el modo de hacer permanecer sus signos y símbolos que muestran
una tendencia, aún implícita, a la comunicación.
2. La tendencia
tendencia lúdica:
lúdica: el juego es una forma de expresión
expresión libre,
libre, la menos
menos
mediatizada quizás por el adulto, ya que transcurre fuera de las reglas escolares y
de las obligaciones familiares impuestas al niño. Pero ¿es el arte una forma de
juego? Ya en 1953
1953 la ponencia
ponencia del Grupo Francés de Educación
Educación Nueva
Nueva se debatía
en estos términos: ¿es verdaderamente la espontaneidad artística del niño una ver-
dadera manifestación artística en el sentido real que le damos a la palabra? ¿No es
más bien uno de los medios de que se vale el niño para tomar posesión de su cuerpo
y del mundo, un medio entre otros al igual que los juegos? ¿No es en realidad un
simple fenómeno de crecimiento?
Ciertamente los limites entre la experiencia lúdica y las primeras manifesta-
ciones artísticas espontáneas son bastante difusos, por ello el arte infantil tiende a
identificarse con una forma de juego sobre todo en las primeras etapas del desarro-
llo gráfico; sin embargo y aceptando ese componente lúdico, si entendemos el
juego como una actividad
actividad que es un fin en si misma, el arte infantil
infantil deja de ser un
proceso exclusivamente
exclusivamente lúdico desde el momento
momento en que sus
sus efectos
efectos permanecen
permanecen y
sirven para satisfacer la necesidad de comunicación y de expresión de sus autores.
Así pues, si bien el arte del niño es una forma de juego fácilmente observable que
hace de éste una actividad divertida y gratificante, también es, simultáneamente,
una forma de lenguaje que el propio niño fija y perfecciona a lo largo de toda la
primera infancia
infancia y mediante el cual enlaza lala función
función de lo real con las
las raíces de su
propia personalidad.
3. La necesidad
necesidad dede integrarse:
integrarse: las
las manifestaciones
manifestaciones artísticas son, como
como dice
Read (1982, 124) «el« el esfuerzo de la humanidad para lograr una integración con
las formas básicas del universo físico y con los ritmos orgánicos de la vida ». Por
otra parte, y bajando a un plano mas concreto y socializado, el arte sirve como
vehículo de representación de nuestro entorno más inmediato (Hernández, F.,
1997) y además contribuye a que los individuos fijen las representaciones sobre si
mismos, sobre el mundo y el modo en que se relacionan con él. La expresión de
20 Las artes plásticas y su función en la escuela
nos preguntamos si la creatividad que el niño desarrolla a través del arte apunta en
esa única dirección.
Según Lowenfeld y Lambert (1980), parece ser que todas las investigacio-
nes realizadas en ese sentido llevan a la conclusión de que sólo existe una facultad
general creativa y que los factores responsables de esta facultad, son los mismos
que intervienen en cualquier proceso de creación artística. A la inversa, según él,
puede decirse que los procesos puestos
puestos en juego en la creación artística estimulan
la facultad creadora en general.
A nuestro juicio dichos procesos son, como corresponde a todo lenguaje, de
naturaleza cognitiva, emocional y senso-perceptiva, pero también hay que tener en
cuenta que hablamos de un modo de representación que se materializa en un medio
determinado y que exige una aplicación perceptiva específica y una especializa-
ción cognitiva que es la que determina, entre otros, el factor estético. Efectivamen-
te, el niño construye sus representaciones utilizando sus sentimientos, sus sensa-
ciones, y sus conocimientos, pero lo hace en el formato de la imagen que implica,
como defiende Eisner (1987), una forma particular de representación, introducien-
do indicadores cognitivos que apuntan a una modalidad de la inteligencia que se
desarrolla en el campo de las artes y no en otros. En este sentido, nuestra posición
está más cercana a los planteamientos de Eisner y Gardner (1987) que a los de
Lowenfeld y Lambert (1980).
Respecto a la integración de todos estos factores en el proceso creativo, Lo-
wenfeld y Lambert (1980) entienden
entie nden que el dibujo de los niños supone una referencia
al entorno en el que estos se desenvuelven; así, cuando comienzan su obra realizan
una confrontación con su propio yo y con su medio. Sus pensamientos se centran en
la experiencia que quieren representar, y de ese modo se estimulan tanto el proceso
mental como su capacidad cognitiva. Este proceso intelectual inicial es una parte
fundamental de las actividades creadoras.
creador as. Es evidente que el niño sólo incluirá lo que
conoce y es significativo para él, por tanto sus representaciones harán referencia a
las cosas con las que ha establecido una relación más o menos sensible
s ensible y emocional.
¿De dónde procede entonces la conceptualización que el niño realiza en sus
representaciones? Consideramos que la primera referencia se produce a partir de
los procesos perceptivos,
perceptivos, ya que como dice
dice Arnheim (1993,
(1993, 32) « ver implica pen-
sar ». Así pues, entendemos que todo proceso cognitivo tiene como base el univer-
so de las imágenes y que la percepción es un elemento fundamental para par a el desarro-
llo del conocimiento que suele empezar por la captación de los rasgos generales
para desembocar finalmente en los específicos.
Por este motivo los niños consideran suficientes algunas características ge-
nerales de un objeto para representarlo; para ellos la expresión pictórica no necesi-
ta más que de rasgos esenciales; sus sentidos tratan de comprender la complejidad
de lo que ocurre a su alrededor simplificando lo que perciben del mundo. Por este
motivo los primeros dibujos figurativos infantiles « lejos de ser intentos de imita-
22 Las artes plásticas y su función en la escuela
Sin duda una de las principales aportaciones del arte infantil es la que acaba-
mos de señalar. Sin embargo, para que el arte favorezca de este modo el desarrollo
de la personalidad es necesario que cada experiencia artística sea el resultado de un
proceso creador. Así pues, una escuela que respete al niño debe favorecer las repre-
repre-
sentaciones propias de éste y desterrar la copia y los conceptos ajenos al nivel en el
que se encuentra. No podemos obligar al niño a reproducir un elemento o composi-
ción que él no creo, ya que ello le impediría establecer
establece r sus propias relaciones
relacio nes con la
experiencia y con el medio. Estas relaciones como ya apuntábamos pueden ser de
muy diversa índole, incluidas las de orden estético, pero en un dibujo propuesto y
mediatizado por el adulto no habrá ninguna oportunidad para expresarlas ni para
organizar sus pensamientos, sentimientos y sensaciones, articulándolos en un len-
guaje expresivo.
Naturalmente,
Naturalmente, los niños se someten porpor costumbre
costumbre a esta
esta actividad
actividad impuesta
impuesta
y, en algunos casos, incluso se sienten cómodos copiando y coloreando dibujos,
pero a medida que lo hacen también son conscientes
conscientes de que nunca podrían crear
uno igual sin copiarlo y ello provoca la inhibición con respecto a la creación libre.
Una metodología intervencionista ahoga cualquier posibilidad creativa.
Los dibujos copiados son, como mucho, similares al modelo y no favorecen
las modalidades de representación personal, careciendo de valor educativo y artís-
tico. Ni siquiera, como se ha venido diciendo en ocasiones, promueven la habili-
Naturaleza
Naturaleza del arte infantil 23
— Producción espontánea::
Producción espontánea — Reproducción
Reproducción (literal o de imitación
de estrategias):
1. Expresió
Expresiónn ququee coinci
coincidede con
con el
el 1. Expresio
Expresiones
nes ajenas
ajenas alal nivel
nivel de
nivel de desarrollo del niño y desarrollo del niño y a sus inten-
con sus expectativas. ciones o intereses.
2. Desarrol
Desarrollolo de unun pensa
pensamien
mientoto 2. Desarrol
Desarrollolo de
de un
un pensam
pensamient
ientoo
independiente y de un universo sometido, carente de referencias
simbólico personal. subjetivas.
3. Impli
Implicac
cació
iónn afec
afectiv
tiva.
a. 3. Descon
Desconsid
siderac
eración
ión de víncul
vínculos os
4. Libertad
Libertad y flexibi
flexibilida
lidadd en la bús-
bús- afectivos personales.
queda de estrategias propias 4. Inhibici
Inhibiciones
ones o limita
limitacion
cioneses en
en la
la
(cognitivas
(cognitivas o estéticas). producción artística al no poder
5. Ada
Adapta
ptació
ciónn a nuevas
nuevas exper
experien
ien-- plantear estrategias
estrategias propias en elel
cias y medios. plano cognitivo, afectivo o esté-
tico.
5. Adh
Adheren
erencia
cia a formas
formas o línea
líneass de
actuación preestablecidas.
Figura 4
1. Barridos
Origen y evolución de los primeros trazados. Estadio psicomotor: de 18 meses a 4 años 31
3. Bucles:
3.1. Cicloides
3.2. Epicicloides
3.3. Hipocicloides
Gráfico 1
32 Las artes plásticas y su función en la escuela
3. ETAPA
ETAPA INICIAL
INICIAL DE CONTROL
CONTROL VISO-MOT
VISO-MOTRIZ:
RIZ: CONTROL
CONTROL SIMPLE
SIMPLE
Y CONTROL CORRELACIONAL
Entre los veinticuatro meses y los tres años podemos situar el momento en el
que el niño reconoce su gesto reflejado gráficamente y se inicia el proceso de con-
trol visual en el que «el
« el ojo conduce a la mano»
mano » (Lurçat, 1980), en lugar de seguirla
como ocurría en la etapa anterior.
Como admite Widlöcher (1982), en oposición a la huella sonora que, al de-
pender del acto productor
productor inmediato, se desvanece,
desvanece, la grafía permanece y absorbe
la atención del niño que siente, por primera
pr imera vez, que es producto
product o de si mismo, de su
interacción con el medio, y descubre en consecuencia la posibilidad de incidir en
éste y modificarlo. A este respecto, cabe destacar las palabras de E. Eisner (Confe-
rencia realizada en Sevilla, en 1984) que describen como la experiencia artística es
uno de los primeros recursos que los niños descubren para modificar la apariencia
de su entorno: « El
« El conocimien
conocimientoto de
de que
que una
una persona puede modificar el mundo por
medio de sus propias acciones, no es algo que esté encerrado en el córtex antes de
nacer; tal conocimiento se desarrolla por medio de la experiencia. El hacer una
raya sobre el papel o arena mojada o arcilla húmeda,
húm eda, es una alteración del mundo,
la construcción de una nueva entidad. Cuando a los niños se les da una primera
oportunidad para usar materiales, una de las cosas que aprenden es que estas
acciones pueden tener consecuencias ».
Desde el punto de vista perceptivo-motriz, según las conclusiones de Wa-
llon (1981), la dinámica de las relaciones causa-efecto, recién descubiertas por el
niño, se invierte; es decir, que si al principio los trazados son una consecuencia
residual de la acción y el gesto que tienen su raíz en el nivel motor, después será la
voluntad perceptiva la que justifique las grafías, que dejan así de ser un resultado
fortuito para ser controlados visualmente desde el nivel de control perceptivo.
Las conquistas viso-motoras descritas dan como resultado las primeras es-
tructuras lineales controladas voluntariamente a las que denominamos « trazados
de control simple»
simple ». Son el resultado de aquellas grafías en las que el niño es capaz
de elegir el punto de partida del trazo y dirigir la mano hacia un trazado anterior y
cortarlo, es decir, adquiere el control inicial. También permite vincular dos o más
trazos haciéndolos converger.
Siguiendo la clasificación de Lurçat (1980, 25-26), podemos distinguir los
siguientes trazados de control inicial simple:
— Complementarios:
Complementarios: se incide en un trazado rectilíneo
rectilíneo ya realizado, modi-
ficando su estructura inicial con nuevos trazos de orientación ortogonal a
éste (Fig. 5).
— De proyección
proyección radial:
radial: se disponen segmentos oblicuos con tendencia
tendencia a la
simetría radial en torno a una forma circular fortuita en la que no se ha
establecido aún el control final del trazo (Fig. 6).
— Segmentos sucesivos:
sucesivos: se relacionan
relacionan pequeños
pequeños trazos
trazos rectilíneos
rectilíneos o curvos
encadenando unos con otros (Fig. 7).
1. Traz
Trazos
os de disc
discon
onti
tinu
nuid
idad
ad vo
volu
lunt
ntar
aria
ia.. 2. Traz
Trazos
os co
comp
mple
leme
ment
ntar
ario
ios.
s.
3. Tra
Trazo
zoss de pro
proye
yecc
cció
iónn radi
radial
al.. 4. Traz
Trazos
os de en
enca
cade
dena
nami
mien
ento
to suce
sucesi
sivo
vo..
5. Cruces 6. Paralelas
7. Entramados
Gráfico 2
36 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 8 Figura 9
— El concepto no figurativo
figurativo de la forma partiendo de un geometrismo de
origen viso-motriz.
— La investigación de estructuras gráficas en dos vertientes: la lineal y la
espacial, es decir, los límites de cada unidad monográfica y su interior
como espacio potencial.
— El establecimiento
establecimiento de las primeras relaciones espaciales topológicas en
la expresión de conceptos como: inclusión, cerrazón, etc.
— La existencia de indicios de orden espacial interoceptivo, no-figurativo,
no-figurativo,
en la distribución interna de algunos monogramas (Mandalas: gráfico 3).
— La tendencia al ritmo compensatorio (equilibrio) en combinaciones y
agregados.
— La persistencia ocasional de trazados de origen cinestésico procedentes
pr ocedentes
del nivel motor y perceptivo.
— La aparición del ideograma.
ideograma .
Figura 10 Figura 11
40 Las artes plásticas y su función en la escuela
4. Mandalas: 5. Soles
contenedores con orden interoceptivo
Gráfico 3
CAPÍTULO III
1. PRIMERA
PRIMERA ETAPA
ETAPA EXPERIM
EXPERIMENT
ENTAL:
AL: LOS TRAZA
TRAZADOS
DOS ENTRE
ENTRE LOS 4
Y LOS 6 AÑOS
Figura 12a.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 43
Figura 12b.
desde el punto de vista gráfico, siendo necesarios los comentarios de su autor para
que podamos entender cual es el contenido narrativo de la representación. Sin em-
bargo, al final de la etapa se tiende a pasar
pasar del nexo verbal al gráfico iniciándose
iniciándose las
las
relaciones contextuales, de manera que ya no son necesarios las explicaciones del
niño sobre su composición para entender visualmente lo que ésta representa. En la
figura 13 encontramos un ejemplo aún primario (dada la limitada diferenciación de
los símbolos utilizados), de este tipo de vínculos gráficos; en ella aparece un torero
que porta en sus manos la espada y la muleta.
La figura
La figura humana
humana es es el símbolo primordial a través del cual el niño expresa
directamente su disposición psico-física; por este motivo, la tomaremos en nuestro
estudio como patrón de forma.
Los primeros iconogramas representativos del hombre suelen estar consti-
tuidos por óvalos (cabeza-cuerpo) y trazos longitudinales (miembros en extensión)
(Figs. 12a y 14a) De acuerdo con la ley de diferenciación de Arnheim (1980), la
forma circular es la más universal e inespecífica, y en tanto que otras formas no
están diferenciadas (cuadrado, triángulo), representará indistintamente a todas
ellas. Esta preferencia por las formas ovales es general en los niños de esta fase,
pudiéndose
pudiéndose observar que, incluso después de diferenciados
diferenciados otros diagramas, los
niños eligen el círculo para las primeras representaciones de la figura humana.
Quizás, como apunta también este autor, el círculo no representa en estos casos la
44 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 13.
redondez en particular,
particular, sino la «cosidad»,
«cosidad», es decir,
decir, « la compacidad del objeto sóli-
do frente al fondo indiferenciado » (1980, 20).
20). Los trazos
trazos longitudinales
longitudinales expresan
extensión y dinamismo. Estas primeras representaciones de la figura humana son
genéricas y no atienden a caracteres específicos como el ropaje hasta el final del
período. A lo largo de
de éste,
éste, y partiendo de los
los monogramas
monogramas geométricos
geométricos que se van
diferenciando desde la fase celular, la figura humana y otros iconogramas que van
apareciendo, evolucionan por la adición de símbolos complementarios, es decir: el
niño procede por síntesis, de modo que la suma de partes va constituyendo un todo
más complejo (Fig. 14b, 14c, 14d, 14e).
Figura 14a.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 45
Figura 14b.
Figura 14c.
46 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 14d.
Figura 14e.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 47
La definición de espacio
Figura 15.
48 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 16.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 49
Figura 17.
Figura 18a.
Figura 18b.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 51
Figura 18c.
Figura 19.
52 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 20.
La transparenc
transparencia es un caso especial de organización interoceptiva en la que
ia es
el niño muestra simultáneamente el interior y exterior de algo como si apareciesen
seccionados. Supone la integración espacial de elementos que aparecían disocia-
dos y un ejemplo de cómo el espacio gráfico tiene sus propias leyes dentro de la
lógica conceptual (no visual-óptica) que rige el período (Fig. 21).
Figura 21.
— La creación
creación consciente y selectiva
selectiva de conceptos
conceptos gráficos figurativos
figurativos (ico-
nogramas).
— La evolución permanente
permanente de los iconogramas
iconogramas iniciales hasta alcanzar
alcanzar un
mayor grado de diferenciación y estabilidad al final de la etapa.
— La expresión de conceptos topológicos,
topológicos, euclidianos
euclidianos y métricos.
— La organización significativa
significativa de unidades
unidades espaciales que implican el or-
den interoceptivo y el orden correlacional; ejemplo: cara con rasgos.
— El carácter preminentemente
preminentemente disociado
disociado y enumerativo de la formulación
formulación
iconográfica.
— El paso del nexo verbal al gráfico al final del
del período.
— El control inicial del espacio contextual
contextual a partir de los nexos parciales y
el orden compositivo preliminar.
2. SEGUNDA
SEGUNDA ETAPA
ETAPA DE CONSOL
CONSOLIDACIÓ
IDACIÓN
N DEL CÓDIGO GRÁFICO
GRÁFICO
(6-9 AÑOS)
Un vocabulario de imágenes
Durante la primera fase de este estadio hemos podido observar cómo, de-
pendiendo
pendiendo de la progresiva
progresiva maduración
maduración psico-motriz,
psico-motriz, el niño creaba
creaba y diferenciaba
diferenciaba
los términos de un vocabulario iconográfico a la medida de sus necesidades expre-
sivas y comunicativas. Estos iconogramas tenían un carácter provisional dada la
54 Las artes plásticas y su función en la escuela
{
{
básicos simples
símbolos primarios
básicos complejos
Símbolos unitarios:
iconogramas
{
adicionales
símbolos secundarios
complementarios
1. Símbolo unitario:
unitario : es el que representa cada concepto gráfico o iconogra-
ma. Constituye un símbolo complejo construido a su vez por una serie de
símbolos parciales.
2. Símbolos parciales:
parciales : estos se subdividen en primarios y secundarios.
2.1. Símbolos primarios:
primarios : son los que constituyen la estructura esencial
de un iconograma, es decir, aquellos que configuran los rasgos bási-
cos que permiten reconocer un ser u objeto en su representación icó-
nica. Estos símbolos se dividen a su vez en simples y complejos; los
simples son aquellos que constituyen unidades aisladas, por ejem-
plo: un ojo,
ojo, un brazo, etc.;
etc.; los complejos
complejos son aquellos
aquellos que aglutinan
aglutinan
de modo significativo una serie de unidades simples, por ejemplo: la
cabeza, con los rasgos de la cara, el cuerpo con sus miembros, etc.
2.2. Símbolos secundarios:
secundarios : son los que constituyen indicadores de se-
gundo orden en el proceso de diferenciación iconográfica. Estos
símbolos marcan el carácter específico en la representación de un
concepto gráfico. Se pueden diferenciar dos tipos: adicionales y
complementarios. Los adicionales son aquellos que están constitui-
dos por unidades o conjunto de monogramas que son insignificantes
56 Las artes plásticas y su función en la escuela
Luquet (1927), hasta los llevados a cabo por Lowenfeld (1957). Los recursos que
modifican el esquema genérico son los siguientes:
a) Énfasis: supone
supone la ampliación de partes significativas:
significativas: este recurso puede
puede
aplicarse a aspectos parciales de una figura (por ejemplo, para represen-
tar los brazos de una nadadora) o para destacar un elemento del dibujo en
relación con los demás. Esto último es lo que ocurre en el caso de la
figura 22a en la que el tamaño
tama ño del sol lo convierte en el protagonista
prot agonista de la
escena, tal y como su autora quería expresar al tratar de representar un
día de verano en el parque infantil.
b) Omisión: se observa
observa cuando se excluyen
excluyen o reducen partes no significati-
significati-
vas; el uso de esta modificación del esquema base se pone en práctica del
mismo modo que el anterior, es decir, en relación a aspectos parciales de
las figuras o a su totalidad. Ambas aplicaciones aparecen en la familia
que se representa en la figura 22b; en ella podemos constatar como se
omiten los brazos de los personajes representados, al tiempo que se dis-
minuye el tamaño de una de las figuras: la del hermano pequeño.
c) Anexión:
Anexión: supone la creación
creación de símbolos secundarios,
secundarios, necesarios
necesarios en lala
transcripción de una experiencia concreta. Las figuras 23a y 23b mues-
tran como, con la inclusión de un par de símbolos adicionales como son
Figura 22a.
58 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 22b.
Figura 23a.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 59
Figura 23b.
Figura 24.
Figura 25.
1 2 3
Figura 26.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 65
Figura 28a.
66 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 28b.
Las teorías defendidas por Lowenfeld y Lambert (1980, 176) adjudican tam-
bién a la línea-base un valor como símbolo social en cuanto muestra la compren-
sión inicial del niño acerca del medio: lo que le afecta a él, afecta también a otros
seres y cosas. El niño intuye el sometimiento a leyes comunes como las que deter-
mina la gravedad.
Recordando lo dicho para la forma, la línea de base podemos considerarla
como un esquema substancial en la representación del espacio; un símbolo recu-
rrente y universal que adquiere un valor constante en éste estadio.
Cuando la transcripción gráfica de una experiencia espacial es más compleja
y no responde a algunos de los conceptos que justifican la línea-base: apoyo, nexo
o dirección lineal , ésta no resulta válida como símbolo para esa experiencia con-
creta y es sustituida total o parcialmente por otras soluciones espaciales.
Las utilizadas más frecuentemente por los niños son:
a. La omisión
omisión de la línea-base.
línea-base. Este
Este abandono ocasional puede tener su ori-
gen en una experiencia emocional relacionada con una desvinculación del suelo:
ejemplo, columpiarse, viajar en avión, o en orden a razones de tipo cinestésico
complejo, es decir, en experiencias direccionalmente variadas y múltiples (como
las representadas en un partido de fútbol), en las que las dos direcciones sugeridas
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 67
por la trayectoria
trayectoria lineal de la línea-base
línea-base no son suficientes.
suficientes. El ejemplo
ejemplo de la figura
figura
29 representa un espacio multidireccional como es el de una clase; en ella, tanto la
disposición de las mesas, como los recorridos que realizan los alumnos, no se
adaptan a un sólo vector con dos sentidos como el que representa la línea de base.
También puede omitirse, ocasionalmente, la línea base cuando el niño se
limita a dibujar un solo elemento o a enumerarlos sin situarlos en un contexto.
Figura 29.
b. Consideramos
Considera mos también como solución espacial el plano-elevado que
consiste en la representación simultánea en un objeto de la parte frontal y superior,
integrando en un mismo iconograma dos puntos de vista distintos. Tal es el caso
que presentamos en la figura 31 en la que se muestra la visión en planta de un
campo deportivo. Otro ejemplo es el de la figura 30 en el que se presenta la vista
superior del campo de fútbol y el perfil de los jugadores y las porterías.
c. Abatimientos plegados . Consisten en representar los esquemas de obje-
Abatimientos o plegados
tos o personas como si hubiesen sufrido un giro de 90º respecto a su base de apoyo;
pueden representarse, por ejemplo, de modo global elementos situados perpendi-
cularmente en los dos sentidos respecto a una línea base o dos, aunque aparezcan
éstos invertidos o al revés a los ojos del espectador adulto. Un ejemplo se observa
en las porterías de un campo de fútbol (Fig. 31).
68 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 30.
Figura 31.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 69
Figura 32.
Figura 33.
Estadio del realismo
realismo conceptual: de 4 a 9 años 71
derecha, mata con su escopeta a un pájaro; éste aparece representado dos veces: en
el cielo antes de morir, y después, en el suelo, una vez que ha recibido el disparo.
En este caso, el transcurso de la acción se acentúa por la descripción gráfica de la
trayectoria que describe la bala desde que sale del arma (representada de forma
bastante ideográfica) hasta que llega al pájaro, y por el desplazamiento de éste
hasta caer al suelo muerto.
Esta fórmula última no surge del deseo de comunicar algo como primera
intención, sino más bien, del vínculo emocional con la representación en el acto
mismo de expresarse.
A C
Figura 35.
1. PRIMERA
PRIMERA ETAPA:
ETAPA: REALISMO
REALISMO PERCEPT
PERCEPTUAL
UAL O DESCRIPTI
DESCRIPTIVO
VO (9-
12 AÑOS)
Figura 36.
a los nueve años muchos niños siguen utilizando estos recursos para expresar valo-
raciones o emociones, esto no ocurre en general de después de los diez años. El
niño comienza ahora a sustituir las desviaciones o medios de expresión anteriores
por una concentración
concentración de detalles
detalles en aquellas
aquellas partes de sus dibujos
dibujos que tienen
tienen sig-
nificación para él. Un ejemplo de ello lo encontramos en la figura 37, en la que
aparecen representadas con los detalles más significativos que las caracterizan,
cada una de las componentes del grupo musical «Spice Girls».
Resumiendo, los cambios de la forma en este período suponen:
1. Una representación
representación más orgánica
orgánica y analítica de la forma, en detrimento
de la formulación sintética del estadio anterior.
2. Un abandono
abandono paulatino
paulatino de
de los recursos
recursos subjetivos
subjetivos (énfasis,
(énfasis, reducción...).
reducción...).
3. Un interés
interés más específico por la caracterización objetiva de la forma:
detalles, rasgos, peinados, etc., que recogen indicadores sociales o
ideosincráticos.
Del mismo modo que la forma evoluciona hacia estructuras más orgánicas,
por ser más cercanas a una percepción
percepción más objetiva del entorno, el concepto de
línea de base se sustituye progresivamente por el concepto de plano, que actuará, a
partir de ahora, como soporte de los dibujos infantiles. Como consecuencia, el
Estadio de realismo analítico:
analítico: de 9 a 14 años 79
Figura 37.
espacio existente entre la línea de base y el borde inferior del papel, deja de ser un
topograma para convertirse en un plano en el que se representa el contexto.
Sin embargo, es común en los dibujos de transición entre las dos etapas la
ubicación de seres y cosas en la línea límite del plano y no sólo transitando dentro
de él, es decir, que la línea de base suele coexistir con las primeras representacio-
nes del plano como concepto espacial, delegando gradualmente en éste. Este hecho
podemos observarlo
observarlo en la figura 38, en la que
que el espacio que define
define el plano no se
utiliza como único soporte de los elementos del dibujo; por el contrario, tanto las
montañas como la casa que aparece en el borde inferior de la hoja, continúan estan-
do sujetas a sus correspondientes líneas de base.
Ahora el abatimiento, las transparencias y otros recursos simbólicos aparecen
apare cen
como insuficientes. El cielo ya no está simplemente encima sino que llega hasta el
suelo (Fig. 39), lo que no significa, sin embargo, que el niño tenga conciencia clara
de los efectos ópticos. A esta edad todavía no se ha desarrollado una percepción
visual consciente de la profundidad,
profundidad , pero el niño ha avanzado un primer paso en ese
sentido. «Concibiendo el cielo desde arriba hasta la tierra, el niño advierte que un
árbol que crece en el suelo debe cubrir parcialmente a aquel» (Lowenfeld y Lam-
bert, 1980, 220). De ahí que adquiera la conciencia de la superposición
superposición o solapa-
miento, con lo que avanza otro paso hacia el concepto de profundidad.
En las figuras 38, 39 y 40, podemos ver como se pone en práctica el concep-
to de superposición o de solapamiento como forma de representar los conceptos
delante y detrás, y de iniciarse en la representación óptica de lo cercano y lo lejano.
80 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 38.
Figura 39.
Estadio de realismo analítico:
analítico: de 9 a 14 años 81
Figura 40.
Figura 41.
El concepto de color
Motivación y técnicas
a través del arte (que empieza a ser sustituida por otros medios de expresión de
mayor reconocimiento social como son el lenguaje oral y escrito), nos ha parecido
importante dedicar una especial atención a la motivación en este período, con obje-
to de tratar de reforzar el uso del código plástico y evitar así la extinción a la que
éste suele someterse con la llegada de la preadolescencia.
En este sentido, debemos plantearnos la motivación desde el punto en que se
halla el niño, con objeto de poder conectar con sus intereses y reforzar sus posibi-
lidades de expresión artística. Así pues, en este caso, el descubrimiento del yo
como parte del grupo, aunque éste se limite a la «pandilla», su intento de definir el
ambiente y de construir una nueva concepción del espacio, serán cuestiones impor-
tantes a tener en cuenta a la hora de incentivar a los niños de este estadio.
Ejemplos de temas a sugerir que favorecen la expresión del «yo» en relación
con otros pueden ser los siguientes:
— ¿Qué hacemos el domingo?
— Preparando una fiesta.
Ejemplos de temas que exigen soluciones espaciales propias de este perío-
do: plano y superposición:
— Viendo la televisión.
— Subiendo al autobús.
— Viendo un desfile.
— Cruzando la calle.
— Saludo desde mi ventana.
Respecto a las técnicas también existen novedades, ya que el creciente con-
trol de los trazados ha permitido al niño conseguir las destrezas psicomotoras sufi-
cientes como para poner en práctica algunos procedimientos artísticos que hasta
ahora sólo utilizaba de forma gestual y sin demasiadas posibilidades representati-
vas. Nos referimos, fundamentalmente, a las técnicas al agua; éstas, además de ser
interesantes por la novedad de su uso controlado, sirven también para satisfacer la
necesidad de llenar espacios que el niño tiene desde el descubrimiento del plano
que se produce en esta etapa. Ahora el cielo llega hasta el suelo de la representa-
ción y esto hace que los lápices por sí solos no sean un material adecuado en este
período, ya que no se prestan a pintar con rapidez y eficacia grandes espacios.
espacios. En
cambio, las ceras y temperas son medios excelentes para cubrir los planos del dibu-
jo. Las pinturas fluidas
fluidas darán también oportunidad
oportunidad al niño
niño de mezclar colores, he-
cho que ahora es importante. Como el niño se concentra más en los detalles, es
aconsejable el uso de pinceles de pelo, en lugar de los de cerda, y otros materiales
que lo permitan, siendo útiles las técnicas mixtas.
La técnica del recortado de papeles o collage, es también muy importante en
este período pues, como ya hemos dicho, es el medio más idóneo para estimular en
el niño el significado de la superposición, que es el primer contacto con la concep-
ción tridimensional del espacio, y, en este sentido, ninguna otra técnica puede
reemplazarla.
84 Las artes plásticas y su función en la escuela
De lo dicho resulta evidente que los niños pueden optar por las experiencias
objetivas o subjetivas. Si muchos niños demuestran en sus trabajos de creación
ambas características, también es verdad que la mayoría de ellos indican preferen-
cia, consciente o no, por una u otra.
Figura 42a.
Figura 42b.
Estadio de realismo analítico:
analítico: de 9 a 14 años 89
ciones) y se concentrarán más en los detalles de los dibujos, en los que estén emo-
cionalmente interesados.
En la figura 43a presentamos un ejemplo de tendencia subjetiva en el que se
realiza una descripción detallada de las articulaciones y de la anatomía en general;
la tendencia subjetiva queda manifiesta tanto en el propio tema del dibujo, como en
las exageraciones que presentan algunas partes de la figura humana (como los bra-
zos y el cuello), por ser las más significativas
significativas a juicio del autor. Otro ejemplo en la
misma línea es el de la figura 43b; en él se acentúan los rasgos de la cara del gato,
exagerando su boca y consiguiendo así darle la expresión de terror que el autor
desea transmitir.
En ambas tendencias las representaciones son más complejas que en la etapa
anterior, y debe quedar claro que el tipo subjetivo no es un tipo regresivo; simple-
mente aplica a la representación reglas no sujetas a la apariencia óptica.
1. El
1. El espacio en la tendencia
tendencia objetiva
Figura 43a.
90 Las artes plásticas y su función en la escuela
Figura 43b.
Figura 44a.
Figura 44b.
92 Las artes plásticas y su función en la escuela
la perspectiva como son los puntos de fuga. Su uso se pone en práctica, tanto en el
dibujo del plano por el que discurren los coches, como en el propio diseño de los
automóviles, cuyos perfiles acentúan este efecto. Por su temática podríamos hablar
de una cierta tendencia subjetiva que se manifiesta, sobre todo en la figura 44a, al
representar un espacio imaginario; sin embargo, los recursos técnicos puestos en
práctica responden
responden a un planteamiento visual de los objetos, las figuras y del pro-
pio espacio, sea cual sea su contenido.
contenido.
a. En general,
general, el concepto
concepto de espacio
espacio en esta
esta tendencia
tendencia remite
remite a las caracte-
rísticas de un medio personalizado en el que se desarrolla la acción sin alusiones
objetivas como puede ser la perspectiva. En cualquier caso la organización espa-
cial de los niños con esta tendencia no se rige por reglas ópticas.
b. En algunos casos se ha observado que niños que han sobrepasado el es-
quema de «línea-base» vuelven a expresarse utilizando nuevamente el mismo con-
cepto espacial. Este aparente «retroceso», sólo puede ser comprendido si pensamos
que este mismo concepto del espacio se encuentra
encuentr a en formas y estilos del arte adulto
de tendencia subjetiva de distintas épocas. Consideradas de este modo esas expre-
siones representan una forma determinada de conciencia personal y no un retroce-
so. Según Lowenfeld y Lambert (1980) que denominan como « háptica» háptica» esta ten-
dencia, estas nuevas representaciones en línea-base pueden ser las antecesoras de
una expresión artística más consciente y por lo tanto el retraso no es más que apa-
rente. En realidad representa el mismo paso, dentro de la esfera subjetiva, que la
tendencia tridimensional en la representación del espacio por los individuos de
tendencia objetiva. La figura 45 nos muestra como el uso de múltiples líneas de
base no impide al autor del dibujo representar de forma completa la totalidad del
espacio que desea incluir en su obra. Se trata, en este caso, de una transparencia,
transpare ncia, que
permite ver el interior de una
una casa
casa y mostrar así todo
todo lo que
que en ella esta sucediendo.
sucediendo.
Figura 45.
En cualquier caso, tanto unos como otros van a prosperar en el uso del color,
entrando en el conocimiento de gamas, tonos y matices que enriquecerán sus pro-
ducciones, ya tengan una intención de tipo objetivo o subjetivo.
Motivación y técnicas
algún momento, será realizada por el mismo niño. Con ello habremos evitado a
éste un salto brusco.
En general, puede lograrse este fin haciendo que el niño conozca cuál es su
capacidad para crear en un momento en que aún no lo ha advertido por sí mismo.
En la motivación este hecho se produce de modo semejante
sem ejante a los siguientes: «Dime
qué has hecho para que tu casa (haciendo referencia al dibujo) parezca estar tan
lejos» o «¿Cómo conseguiste esos matices en el rojo?»...
Todo consiste en hacer simplemente que el niño adquiera conciencia de sus
logros. Se sobrentiende que las motivaciones destinadas a elevar el enfoque cons-
ciente del niño no deberán realizarse nunca durante el proceso de producción, pues,
en este momento, interferiría en el carácter intuitivo del arte. Siempre se procederá
en dichas observaciones después.
Otro punto a tener en cuenta es que cuando en el análisis referente a la moti-
vación se distinga la tendencia objetiva y la subjetiva, debe recordarse que, en
realidad, ambos grupos no presentan por lo general una separación definida aunque
se manifiestan preferencias hacia uno u otro en lo que a la expresión artística se
refiere. Si tratamos ambos grupos por separados es con el fin de aclarar mejor los
distintos aspectos.
Para que el niño adquiera sentido de la proporción, se evitarán las enseñan-
zas con métodos rígidos. La forma más natural y flexible de que el niño valore por
sí mismo las relaciones de tamaño es mediante la elección de temas que permitan
la comparación.
Otro medio muy eficaz en el momento en que se produce la conciencia de
los tamaños y proporciones, es el uso de los modelos situados en diferentes poses.
Este tipo de referentes no es útil sólo para los niños de tendencia objetiva, sino que
para estimular
estimular a los de
de tendencia
tendencia subjetiva,
subjetiva, también
también debe darse
darse una significación
significación a
la pose. Como ejemplo pondremos: «levantando algo pesado». Las preguntas para
dar significación a la pose serían entre otras:
1. ¿Habéis visto alguna
alguna persona
persona levantando
levantando algo pesado?,
pesado?, ¿habéis
¿habéis llevado
llevado
vosotros mismos una carga pesada?, ¿cuándo ocurrió y por qué lo hicis-
teis?, ¿qué trabajadores son los que cargan pesos?
2. Otra alternativa
alternativa es
es hacer que
que el propio niño
niño se identifique
identifique con la
la postura
a la que se hace referencia; para
par a ello hay que tratar de que éste haga como
si levantase una carga: «no podrías levantarla con el cuerpo erguido ¿ver-
dad? Separas los pies, ¿por qué lo haces?, ¿para mantener el equilibrio?,
¿para aumentar la base de apoyo?», …
Todas estas preguntas servirán para dar un contenido a la pose que despierte
un mayor grado de conciencia en ellos. Los niños en los que predomina la tenden-
cia objetiva tratarán de expresar conscientemente lo que ven, mientras los otros se
concentrarán más en sus propias experiencias, el gesto y la expresión.
Los temas más apropiados para estimular los aspectos gráficos más signifi-
cativos de esta etapa son los siguientes:
Estadio de realismo analítico:
analítico: de 9 a 14 años 95
1. ANÁLISIS
ANÁLISIS HISTÓRIC
HISTÓRICO-CRÍ
O-CRÍTICO
TICO DE LAS PRINCIP
PRINCIPALES
ALES TENDEN-
TENDEN-
CIAS EN LA EDUCACIÓN DE LAS ARTES PLÁSTICAS
Del mismo modo que las concepciones educativas han ido cambiando, adap-
tándose a las necesidades y a los imperativos de cada época, también la enseñanza
del arte ha experimentado ciertos cambios a lo largo de su historia. En general, y
siguiendo el planteamiento que realiza Eisner (1995) sobre este tema, las corrien-
tes de pensamiento que han justificado la enseñanza del arte han sido fundamental-
mente dos: la contextualista y la esencialista.
La primera hace hincapié sobre las necesidades
necesi dades sociales y de grupo como prio-
ridad en la orientación del curriculum de las distintas disciplinas; así pues, el arte
planteado desde esta perspectiva debería encauzar
encauzar y potenciar
potenciar los
los valores exigidos
exigidos
por la sociedad. Sin embargo,
embargo, este planteamien
planteamiento to tiene
tiene difícil
difícil explicitación,
explicitación, ya que,
que,
como advierte Eisner (1995,
(1 995, 4) el concepto de necesidad no es algo objetivo y « sólo
« sólo
puede determinarse
determinarse lo que es una necesidad en relación con un conjunto de valores ».
Para los esencialistas, lo que el arte aporta a la educación es una experiencia
privilegiada
privilegiada y distinta de representar el mundo, que provoca en el individuo una
serie de conocimientos y de sentimientos que otras disciplinas no pueden generar.
Desde esta perspectiva
perspec tiva se resalta el valor del arte en si mismo y no de sus aplicacio-
nes prácticas, ya que «al
« al emplear para otros fines, objetos y acontecimientos aque-
llo que aporta la experiencia estética, se están violando las características propias
posee » (Eisner, 1995, 5).
que el arte posee»
Próximos a una de estas dos corrientes, los cambios que han determinado la
educación artística, lejos de ser fortuitos, han sido la respuesta a los planteamientos
subyacentes a cada época; nos estamos refiriendo a cuestiones como:
100 Las artes plásticas y su función en la escuela
— La concepción cultural
cultural del momento.
— Los valores sociales y éticos.
— La situación política
política y económica.
— Las tendencias educativas dominantes.
— Las propias tendencias artísticas y estéticas.
Sin embargo, a pesar de la importancia de todas estas causas y de su papel
determinante para definir la concepción del arte y de su enseñanza en cada época,
algunos modelos han sido perpetuados a lo largo del tiempo desconectándose de
los intereses educativos, sociales y culturales del momento. Así pues, si tratamos
de rememorar las diferentes tendencias que han marcado el carácter de la educa-
ción artística a lo largo del presente siglo (Hernández, F., 1997, 37-40), no hay
duda de la influencia que sobre ellas ha tenido la enseñanza académica del arte que
llega a las escuelas a principios del siglo XIX. Dicha tendencia que tiene como
objetivos principales la adquisición de destrezas manuales y el desarrollo del gusto
estético clásico, ha sido la que más ha marcado la enseñanza del arte durante nues-
tro siglo, aún habiéndose desarrollado paralelamente a otras corrientes educativas.
Si hacemos un poco de historia podemos constatar, por ejemplo, como dicho
modelo académico convivió con los planteamientos que impulsaron algunos peda-
gogos de la Escuela Nueva (Pestalozzi, Fröebel, R. Steiner y Dewey); los objetivos
de ésta eran transformar la racionalidad tecnológica propia del momento a través
de la educación estética.
Quizás los planteamientos más distantes del academicismo y que han su-
puesto un mayor esfuerzo de cambio
cambio se dan con la Segunda Guerra Mundial.
Mundial. Una
vez terminado este período de conflictos bélicos, surge la necesidad de rescatar un
modelo más libre y democrático de la educación artística y de la propia conviven-
cia humana: « La guerra representó un reto especial para los educadores
educadores de arte
que tuvieron que demostrar que el arte estaba ideológicamente comprometido con
el esfuerzo de preservar la libertad y la democracia, la verdadera libertad que
permitía la auto-expresión
auto-expresión artística»
artística » (Efland, 1990, 24-25).
Con esta inquietud, autores como Read, Lowenfeld, A. Stern y Pierre Du-
quet, hacen prosperar un nuevo planteamiento no intervencionista de la enseñanza
del arte, basado en el talante expresionista; su principal objetivo es el desarrollo de
la creatividad y de la imaginación, a través de la expresión libre e independiente de
las limitaciones impuestas por el adulto.
Sin embargo, y pese a la bondad inicial de sus planteamientos, este modelo
se ve cuestionado por la revolución cognitiva de la década de los sesenta y por la
importancia que empieza a otorgarse, a partir de ese momento, al aprendizaje con-
ceptual. Esta nueva situación lleva a la Educación Artística a organizarse y definir-
se en función de cuatro disciplinas, todas ellas relacionadas con el estudio del arte:
la Estética, la Historia del Arte, la Crítica y el Taller. Posteriormente, esta configu-
ración conceptual de la enseñanza del arte se ve reforzada en la década de los
La programación en el área de las artes plásticas 101
ochenta por la Fundación Getty dando lugar al enfoque curricular conocido como
DBAE (Discipline-based Art Education) (Getty Center, 1984).
Actualmente los diseños curriculares de la materia de artes plásticas siguen
diferentes opciones; los más recientes pretenden dotar de autoridad y de seriedad la
materia siguiendo un planteamiento conceptual y analítico, en algunos casos cer-
cano a un neo-conductismo, que fomente la percepción y la apreciación estética;
otros intentan sobrevivir con planteamientos expresionistas que, en la mayoría de
las ocasiones, no pasan de ser una mera referencia teórica que nunca se hace efec-
tiva en la práctica docente. A nuestro juicio, la realidad actual muestra que, en la
mayoría de los casos, la enseñanza del arte se reduce casi siempre a posiciones
orientadas al desarrollo de destrezas y habilidades motrices que no hacen sino rele-
gar la verdadera función de la educación artística, limitándola a la adquisición de
recursos favorables y útiles a otras áreas de conocimiento, y reduciéndola en defi-
nitiva a un mero instrumento. Este hecho, que despoja al arte de los niños de sus
componentes expresivos y creativos, se acentúa sobre todo en la educación infantil
en la que «el arte», convertido en una actividad guiada y excesivamente
exces ivamente dirigida, se
limita a ser el instrumento que permite conseguir el control psicomotor suficiente y
favorable al desarrollo de la expresión escrita. Esta misma circunstancia podemos
constatarla en la Educación Especial, en la que se niega cualquier atisbo de expre-
sión creadora al alumno con deficiencias.
2. LAS ARTES
ARTES EN EL CURRICU
CURRICULUM
LUM ACTUAL:
ACTUAL: PROPUE
PROPUESTA
STA PARA
PARA UN
MODELO INTEGRADOR
dría ser el punto de arranque de una labor docente coherente en este área, es, sin
embargo, el que la lleva a ser considerada una parcela carente de interés en la
práctica para la formación del individuo
individuo.. Los planteamientos,
planteamientos, a nuestro
nuestro juicio
juicio erró-
erró-
neos, que generan esta infravaloración son entre otros:
1. Considerar el potencial
potencial artístico
artístico y creativo
creativo como
como una dotación natural del del
individuo, ajena a los procesos de enseñanza-aprendizaje.
2. Plantear que,
que, de cara a la escolarización,
escolarización, la actividad
actividad artística
artística se puede
abordar mediante una actividad predeterminada y dirigida, que permita
al alumno adquirir simplemente un mínimo de técnicas. De este modo se
«remedia» la falta de cualidades innatas para el arte.
3. Entender que las habilidades
habilidades artísticas
artísticas y los
los recursos expresivos que és-
tas generan, no son elementos tan indispensables para el desarrollo social
como el lenguaje discursivo leído o escrito.
Considerar que sólo los «genios» son los que pueden desarrollar una labor
artística digna y de interés social nos ha llevado a marginar el papel de las artes en
la escuela. La capacidad de expresión y representación entendida como una cues-
tión genética, convierte al área de educación artística en un espacio curricular sin
repercusiones didácticas, ya que, con este planteamiento, el arte no se puede apren-
der ni enseñar; sólo pueden desarrollar destrezas artísticas los que nacen con la
capacidad natural de poder expresarse plásticamente. Así pues, esta materia ha sido
considerada, en el mejor de los casos, el privilegio de unos pocos cuya mentalidad
visual y habilidad técnica les ha permitido realizar labores generalmente
generalme nte basadas en
el realismo y en la figuración. Tales planteamientos «disculpaban» la carencia de
conocimientos artísticos de aquellos alumnos que no tuvieran una disposición es-
pontánea hacia el arte (entendiendo
(entendiendo siempre
siempre dicha predisposición
predisposición bajo
bajo los patrones
estéticos del realismo y en relación a la habilidad en el uso de técnicas).
Pero la raíz del problema estriba verdaderamente en el papel que desarrolla
la Educación Artística de cara al desarrollo social del individuo; en este sentido es
obvio que la falta de reconocimiento que padece este área, contribuye en gran
modo a que el arte se entienda como un adorno curricular y no como una verdadera
aportación al desarrollo global del alumno: « Los« Los objetivos
objetivos y contenidos
contenidos de lala Edu-
cación Artística hacen referencia a un conjunto de experiencias agradables, diver-
tidas, incluso interesantes, pero que no constituyen un conocimiento útil que con-
lleva reconocimiento social. Lo que se aprende en la Educación Artística parece
tener muy poco que ver con las estrategias de racionalidad que reclama la socie-
dad competitiva, productiva y de eficacia » (Hernánd
(Hernández,ez, F., 1997,
1997, 95).
95).
Esta demanda social, condicionada por el progreso de la ciencia moderna y
la creciente racionalización (Araño, J.C., 2002), ha hecho que la escuela potencie
las parcelas técnicas y científicas, y el uso de lenguajes consensuados y que relegue
a segundo plano las áreas artísticas, por su escasa utilidad en el ámbito social.
En relación a los contenidos nos parece erróneo considerar que en el terreno
de la Educación Artística no haya cosas que enseñar, o que su docencia pueda
La programación en el área de las artes plásticas 103
mismas (Gardner, 1994, 37): «Si se les deja con sus propios dispositivos, los niños
no muestran una “tendencia natural” a centrarse en los aspectos estéticos: rasgos
de tamaño destacados, asunto temático, realismo y color inicialmente con mayor
probabilidad atraerán su atención ».
probabilidad
Analizando las características de ambas vertientes, Hargreaves (1991, 24,
25), desde un enfoque cognitivo, trata de explicar si los procesos de pensamiento
que promueven el desarrollo de la conducta artística son los mismos si se trata de
aprehender la obra de arte, que si se trata de crearla. Según este autor « esta cues-
tión sólo puede responderse en último extremo, en áreas de contenido específico,
pero disponemos
disponemos ya de algunas claves que indican que tiene sentido pensar en
términos de procesos generales que subyacen tanto a la producción como a la
percepción». Las claves a las que alude no son exclusivas de las artes
percepción a rtes visuales, sino
sin o
que están relacionadas con otras parcelas artísticas como, por ejemplo, la música;
recogiendo las especulaciones de Dowling (1984), parece posible afirmar que las
estructuras mentales de la percepción y de la producción musical en el área del
canto de los niños son comunes.
Otra aportación en la misma línea es la propuesta de Serafine (1979) quien,
desde el contexto educativo norteamericano, considera que los aspectos producti-
vo y receptivo del arte son dos elementos inseparables que tienen como denomina-
dor común la comprensión estética. Una opinión similar es la Gardner (1994) y su
teoría del desarrollo simbólico; este autor propone la existencia de tres sistemas
que interactúan en el desarrollo:
1. El sistema de creación
creación,, propio del autor de
de la obra y por el que se gene-
ran los actos de producción artística.
2. El sistema de percepción, relacionado con el terreno de las valoraciones
percepción, relacionado
estéticas y próximo a la labor del crítico.
3. El sistema de sensación,
sensación, determinado por factores de tipo afectivo y pro-
pio del público
del público que
que observa la obra.
En su opinión el grado de interacción que existe entre estos tres sistemas es
mayor a medida que evoluciona el desarrollo, y termina por ser tan estrecho que
resulta imposible separar uno de los efectos de los otros dos. En opinión de Wolf
(1991, 40-60), quien plantea un enfoque cercano a la teoría de Gardner, la perspec-
tiva del autor, la
autor, la del investigador reflexivo (crítico) y la del observador (público),
observador (público),
serían diversos caminos de entrada a la experiencia estética.
Respetando este modelo integrador de la vertiente productiva y apreciativa,
consideramos que es importante que el curriculum en materia artística potencie
ambos aspectos de manera que los procesos que generan las dos vertientes del área,
sean fructíferos
fructífer os para el desarrollo de la personalidad del individuo: « En
« En la enseñanza
artística no basta sólo con los conocimientos de aproximación
aproxim ación a la obra de arte; su
estudio y compresión han de ir unidos a la realización de trabajos que son productos
de unos procesos que tienen unas características
caracterí sticas superiores a las de la simple adqui-
La programación en el área de las artes plásticas 105
3. LOS OBJETI
OBJETIVOS
VOS GENERALE
GENERALESS DE DESARROLL
DESARROLLOO EN LOS PROCE-
PROCE-
SOS DE PRODUCCIÓN ARTÍSTICA Y DE APREHENSIÓN ESTÉTICA
2. La Dimensión Apreciativa-Cultur
Apreciativa-Cultural:
al: es
es la que provoca las actuaciones de
valoración estética y de reconocimiento del entorno significativo por parte del
alumno, y por tanto la responsable más directa de la vertiente aprehensiva y crítica
del arte infantil. Los objetivos generales de desarrollo que proponemos en este
ámbito son los siguientes:
— Potenciar la valoración de cualidades plásticas.
plásticas.
— Desarrollar conceptos
conceptos sobre cualidades
cualidades y aspectos estéticos de los objetos.
— Procurar la emoción estética y la conciencia
conciencia de esa emoción.
— Desarrollar la sensibilidad
sensibilidad y comprensión hacia la expresión ajena.
— Distinguir
Distinguir entre las cualidades
cualidades expresivas
expresivas y estéticas,
estéticas, y las funcionales
funcionales y
utilitarias.
— Comprender
Comprender los mensajes
mensajes que emiten
emiten los
los medios audiovisu
audiovisuales
ales adecuán-
adecuán-
dolos al nivel de comprensión del alumno.
— Acceder a los significados
significados culturales
culturales vehiculiza
vehiculizados
dos a través
través de la imagen
artística.
— Iniciar una lectura
lectura comprensiva de las
las obras
obras de arte, evitando el formalis-
formalis-
mo vacío y atendiendo a las relaciones significativas desde una aproxi-
mación intuitiva.
3. La Dimensión Senso-Perceptiv
Senso-Perceptiva: su repercusión en la labor artística tie-
a: su
ne dos matices; por una parte, abarca las destrezas psicomotoras que se ponen en
juego en el proceso creador
creador y que dan lugar a un determinado
determinado producto
producto artístico,
artístico, y
por otra, se refiere a los recursos perceptivos que el alumno ha de desarrollar de
cara a la producción y a la aprehensión de la obra artística y de su entorno en
general. Por sus aportaciones de cara a la adquisición del control psicomotor, la
dimensión senso-perceptiva ha sido la que más se ha potenciado y se sigue promo-
viendo en las primeras etapas del desarrollo (sobre todo en el período de la Educa-
ción Infantil), llegando a identificarse erróneamente la educación artística con una
educación de las destrezas viso-motoras y manuales. A nivel general consideramos
que los principales objetivos de desarrollo en este ámbito (relacionados sobre todo
con la Educación Infantil y Primaria) son:
— Desarrollar habilidades perceptivas y motrices orientándolas hacia un
objetivo expresivo.
— Favorecer el desarrollo
desarrollo de conceptos
conceptos perceptivos-cinestésico
perceptivos-cinestésicoss y de la psi-
co-motricidad
co-motricidad precisa para representarlas.
— Distinguir
Distinguir cualidades sensitivas en los materiales.
— Favorecer la experimentación
experimentación y la manipulación
manipulación de objetos.
— Facilitar la discriminación
discriminación a partir de experiencias
experiencias visuales y hápticas.
— Desarrollar conceptos
conceptos sobre la función de las cosas a través de la obser-
vación y la manipulación.
— Establecer relaciones de valoración
valoración cuantitativa
cuantitativa y cualitativa
cualitativa con el mun-
mun-
do físico: comparar, enumerar, juntar, separar objetos y elementos, dis-
108 Las artes plásticas y su función en la escuela
4. LOS CONTEN
CONTENIDOS
IDOS EN EL
EL CURRICULU
CURRICULUM
M DE EDUCACIÓ
EDUCACIÓN
N ARTÍS-
ARTÍS-
TICA
En este área los contenidos de los que partimos son, en primer lugar, los que
determinan la expresión espontánea del niño partiendo de sus tres dominios bási-
cos: afectivo, cognitivo y senso-perceptivo. Esta circunstancia se acentúa en las
primeras etapas del proceso educativo, es decir, en la Educación Infantil y en la
Educación Primaria, por tratarse de períodos en los que prolifera la producción
artística y con ella el proceso creador que permite la confluencia y la potenciación
de estos tres factores o indicadores de primer orden (como los hemos denominado
en el capítulo referido a la evaluación).
evaluación).
Sin embargo, y pese al protagonismo de la vertiente productiva en estos
períodos, no podemos desestimar el valor de la apreciación
apreciación estética que el niño
pone en juego durante el propio
propio proceso de producción
producción y en la valoración estética
de sus creaciones y de su entorno. Para ello necesita utilizar determinados patrones
estéticos, que ha tenido que elaborar aunque sea de un modo intuitivo.
Así pues, los componentes del desarrollo son determinantes no sólo de la
expresión espontánea, sino también de la apreciación estética que los niños rea-
lizan, ya que dentro del proceso de valoración se dan cita también indicadores de
tipo afectivo, cognitivo y perceptivo, que, de un modo integrado, permiten al niño
ir formando su propio juicio estético, entendiendo éste como el modo intuitivo en
que el niño selecciona y organiza mentalmente forma, espacio y color. Pero, el
desarrollo cronológico hace que esta labor apreciativa, guiada en un primer mo-
mento por los mismos indicadores que protagonizan la creación artística, se vea
sometida a la influencia que ejercerán sobre ella los denominados indicadores de
segundo orden (sociales, estéticos y creadores), ya que una parte importante de
nuestros juicios estéticos adultos viene dada a partir de la interacción social y cul-
tural que experimentamos con nuestro entorno. Esta circunstancia comienza a ser
relevante a partir de la etapa de la preadolescencia (9-11 años), por ser un período
en el que la participación y la adaptación social empiezan a primar sobre la actitud
egocéntrica infantil predominante hasta ese momento. Es a partir de entonces cuan-
do el nivel madurativo alcanzado permite al niño utilizar sus juicios estéticos, no
sólo durante el proceso creador (como ocurre al inicio de su desarrollo gráfico-
plástico), sino también
también en relación con el producto artístico
artístico de la obra acabada.
Tratando por tanto de integrar la apreciación y la producción, los contenidos
planteados
planteados han de elaborarse en función de las tres dimensiones curriculares
curriculares a las
que hacíamos referencia al hablar de los objetivos: la semiótica, la apreciativa y la
sensomotriz. Como se ha expuesto en el apartado anterior, estas tres dimensiones
La programación en el área de las artes plásticas 109
3. La dimensión sensoperceptiva implica
sensoperceptiva implica el desarrollo de habilidades mo-
trices y la sensibilización perceptiva, útiles tanto en la producción como en la apre-
ciación de imágenes. Junto a estas dos funciones, esta dimensión tiene como objeto
básico la aproximación
aproximación a las cosas del mundo y la discriminació
discriminaciónn y diferenciación
diferenciación
del origen natural o cultural de los elementos con los que el niño se relaciona. Los
contenidos propuestos en este sentido tienen, por tanto, la finalidad de favorecer
cada una de estas vertientes:
— Asimilación
Asimilación de cualidades
cualidades perceptibles.
perceptibles.
— Experimentación
Experimentación directa con materiales sensibles del entorno cotidiano.
— Utilización
Utilización de procedimientos
procedimientos técnicos
técnicos que potencien
potencien la expresión
expresión desar-
desar-
ticulada y el contacto directo con los materiales artísticos.
— Establec
Establecimie
imiento
nto de las relacion
relaciones
es causa-efe
causa-efecto
cto entre
entre un objeto
objeto y su función.
función.
— Experimentación
Experimentación y simulación de cualidades
cualidades cinestésicas.
— Discriminación
Discriminación visual de relaciones estructurales y de color.
— Secuenciación
Secuenciación comprensiva de procesos de acción; por ejemplo, distin-
guir fases en la función de un objeto o en el transcurso de una situación o
experiencia.
Cada una de estas dimensiones del curriculum exige el desarrollo concreto
de sus contenidos (definidos como conceptuales, actitudinales y procedimentales,
si nos atenemos al diseño curricular
curricu lar elaborado por el M.E.C.), a través de la progra-
progr a-
mación secuenciada de actividades, y pretende el establecimiento de relaciones
comprensivas entre lo que el niño siente, conoce y percibe de un modo integrado.
5. LA PROGRAMACIÓN DE ACTIVIDADES
nivel cognitivo, perceptivo y afectivo del niño y su capacidad para imponer reglas
lógicas, de un modo intuitivo.
2. Actividades
Actividades no articuladas. Las constituyen
constituyen aquellas técnicas plásticas
que tienden prioritariamente a satisfacer impulsivamente la expansión emocional y
la expresión indiferenciada que nace del simple goce del contacto con la materia y
la capacidad de modificarla incidiendo en ella.
Son técnicas pertenecientes a este grupo la pintura, el esgrafiado digital, el
chorreo y expansión de pintura con pinceles gruesos y, en general, la manipulación
experimental y holística de materiales diversos.
Por otra parte, hemos de diferenciar las actividades en tres grupos depen-
diendo de la dimensión del área que estas potencien:
1. Actividades
Actividades de expresión representación : éstas se realizarán con las
expresión y de representación
diversas técnicas y procedimientos plásticos bidimensionales y tridimen-
sionales, eligiendo en cada caso aquel que más se ajuste a los objetivos
de desarrollo, a las necesidades particulares del aula y al nivel madurati-
vo que presenten los alumnos.
2. Actividades de sensibilización
sensibiliz ación perceptiva psicomotr iz : el reconoci-
perceptiv a y psicomotriz
miento de formas, colores, texturas, tamaños, aspectos compositivos,
etc, será el núcleo principal de este grupo de actividades. La aprehensión
de las cualidades físicas de las cosas es en este caso el objetivo que persi-
guen este tipo de actividades, claramente dirigidas a la vertiente aprecia-
tiva del área. Otras tareas serán las destinadas al control y a las destrezas
fisio-perceptivas,
fisio-perceptivas, necesarias para el progreso en los primeros estadios de
desarrollo gráfico; en estos casos la precisión psicomotora que se preten-
de facilita la ejecución y la elaboración de la obra artística y la adquisi-
ción de metas igualmente útiles a otras áreas de conocimiento.
3. Actividades
Actividades de aprehensión
aprehensión y reconocimiento
reconocimiento cultural: al igual que en
las otras vertientes de la actividad plástica, en la parcela de la valoración
estética las actividades han de plantearse en función del desarrollo global
del alumno. Así pues, éstas habrán de ir evolucionando en su compleji-
dad a medida que el niño progrese en el análisis consciente de los valores
estéticos del arte y de su comprensión en un contexto cultural.
En este sentido, desde los comienzos de la Educación Infantil, se debe inten-
tar aproximar al niño intuitivamente a la valoración de la emoción que produce la
forma y el objeto percibido en si mismo o, en su caso, una obra de arte plástica. El
niño tiene desde el principio una disposición innata que tiende a la búsqueda de la
armonía y el equilibrio, ya sea en la propia realización,
r ealización, ya sea en la selección visual
vis ual
que, de manera implícita, realiza sobre aquello que observa. En los primeros años
de la Educación Infantil y Primaria no se puede pretender que las actividades re-
quieran un análisis formal, pero intentar explicar lo que sentimos ante algo es un
modo de empezar a tomar conciencia y de iniciar el camino hacia una formación
estética más explícita y concreta.
CAPÍTULO VI
1. CONDICIONES DE PARTIDA
Este capítulo trata de ofrecer una imagen del concepto de evaluación que
permita la valoración cualitativa,
cualitativa, justa y útil de las producciones
producciones artísticas de los
niños. Estamos con ello abordando un problema que resulta difícil no sólo por la
complejidad que entraña todo proceso de evaluación, sino por la singularidad del
arte como materia dentro del curriculum
curricul um escolar. Se trata de una disciplina compleja
tanto en su definición como en su desarrollo dentro de la escuela, ya que sus com-
ponentes expresivos, en parte asociados al sentimiento y a la intuición,
intuición, provocan
muchas dudas acerca de su posible enseñanza
ense ñanza y un gran debate sobre su evaluación.
En nuestra opinión una de las cuestiones fundamentales de la educación ar-
tística es el cultivo de las construcciones espontáneas y de la búsqueda de solucio-
nes creativas. Sin embargo, ello no tiene porque ser incompatible con la enseñanza
de aquellos recursos técnicos que el alumno por su madurez pueda asimilar y utili-
zar. La labor del maestro en este sentido será encontrar cuales son los medios que
pueden satisfacer
satisfacer mejor esas necesidades
necesidades de expresión
expresión y de comunicación,
comunicación, depen-
diendo de la etapa de desarrollo en la que el alumno se encuentre.
A lo largo del siglo XIX y durante un período importante del presente los
criterios seguidos a la hora de evaluar las producciones artísticas han estado basa-
dos en la idea de mimesis, potenciando así la elaboración de trabajos cuyo parecido
con el modelo fuese lo más exacto posible. Sin embargo, hacia los años cuarenta la
corriente expresionista trata de diluir este criterio de evaluación favoreciendo el
desarrollo de formas de representación más espontáneas y libres que fomentasen la
creatividad y diesen a los niños la posibilidad de mostrar su mundo interior. Con
este nuevo planteamiento la evaluación se quedaba sin criterios objetivos de valo-
114 Las artes plásticas y su función en la escuela
2. EVALUACI
EVALUACIÓN
ÓN DEL PROCES
PROCESO
O Y DEL PRODUCT
PRODUCTO
O EN LA REPRE-
REPRE-
SENTACIÓN ICONOGRÁFICA
3. LA EVALUACIÓ
EVALUACIÓNN DEL PROCES
PROCESO
O CREADOR:
CREADOR: UNA
UNA FUENTE
FUENTE DE
DATOS SOBRE EL DESARROLLO INFANTIL
A partir de aquí haremos un recorrido por los distintos indicadores que nos
informan acerca del desarrollo global, para definir como se manifiestan en los di-
bujos infantiles. Así pues, aunque nuestra fuente de información sea el producto
artístico, el primer objetivo que perseguimos es conocer la naturaleza del proceso
creador que lo genera como lenguaje específico.
Los diferentes indicadores que confluyen en la experiencia creativa los he-
mos clasificado en dos grupos dependiendo de su relevancia dentro del proceso de
producción
producción artística:
— Los indicadores
indicadores de primer
primer orden: son la esencia misma del proceso crea-
orden: son
dor y sin ellos no podría tener lugar la producción artística. Nos referi-
mos a los indicadores de tipo afectivo, cognitivo y físico-perceptivo.
— Los indicadores de segundo orden: forman parte también del proceso
creador pero de un modo más sutil. Se trata de los componentes socio-
culturales, estéticos y creadores que se generan como productos asocia-
dos al conocimiento del medio y a la aprehensión de sus peculiaridades.
1. Indicadores
Indicadores afectivos: el componente o carga emocional que se libera en
afectivos: el
cada actividad creativa espontánea, está directamente vinculado a la significación que
la experiencia tenga para el niño. Es lo que Lowenfeld y Lambert (1980) llaman la
«autoidentificación»,
autoidentificación», es decir el nivel de relación íntima del niño con lo representado.
Esto supone no sólo liberación de las manifestaciones de expansión positiva
(afecto, placer, etc.) sino que actúa así mismo como catarsis o liberación de tensio-
nes, miedo frustraciones, etc. que encuentran un cauce en los mecanismos de ex-
presión gráfica. Tomando como referencia los grados de libertad emocional des-
El concepto de evaluación en la materia artística 117
d. El cuarto
cuarto nivel de
de los enunciad
enunciadosos al principi
principioo será aquel
aquel en el que se
muestra el grado más alto de vinculación emocional. En él los niños se proyectan
de modo espontáneo en sus dibujos, representándose en ellos, o bien, transfiriendo
sus sentimientos a algo o alguien de lo representado, o incluso, de un modo menos
diferenciado y en otro orden, a la propia composición en sus componentes forma-
les. Podemos decir para concluir que, en el nivel narrativo de la representación, la
valoración del nivel emocional está relacionada directamente con la capacidad
para vincularse a los aspectos significativos
significativos de la experiencia
experiencia vivida o imaginada,
con la flexibilidad necesaria para expresarla aplicando nuevas estrategias y recur-
sos y con la emoción artística que se produce de un modo intuitivo en la organiza-
ción de los componentes formales.
2. Indicadores
Indicadores físico-perceptivos: entendemos este indicador como la con-
físico-perceptivos: entendemos
fluencia de los factores sensitivos y de los factores físicos ya que ambos aspectos del
desarrollo participan de manera conjunta en la coordinación psicomotora. La inte-
racción de ambos componentes es mayor en el primer estadio del desarrollo gráfico
ya que es en este período donde se realizan los mayores logros de cara al control de
los movimientos óculo-manuales. Al comienzo del estadio psicomotor la coordina-
ción inicial de los movimientos corporales con los trazos realizados sobre el papel,
serán una indicación del crecimiento físico infantil, que va desde la satisfacción de
la actividad psico-motora espontánea, hasta llegar posteriormente a un nivel de
actividad corporal coordinada en la que se generan pautas de acción que permiten
repetir secuencias de movimiento. En etapas posteriores esta coordinación de la
actividad corporal se hace más compleja; la sensibilidad necesaria
necesar ia para producir los
cambios más sutiles e impulsar los procesos de diferenciación de las estructuras
formales y espaciales, exige una regulación precisa de la coordinación visual y
muscular, estrechamente ligada al nivel de desarrollo del campo perceptivo.
Por otra parte y desligados de los componentes perceptivos, los indicadores
físicos tienen también sus propias manifestaciones en los dibujos, que nada tienen
que ver con los movimientos corporales necesarios para su realización. Nos referi-
mos a la proyección corporal consciente o inconsciente del niño, así como al tono
y a la dinámica implícita o explícita en el dibujo. Es comprensible que cuando un
niño imprime movimiento a sus esquemas es porque siente esa dinámica en su
propio cuerpo. A la inversa, los niños
niños que sufren
sufren de alguna anomalía o atonía
atonía física
suelen proyectarla simbólicamente en sus trabajos, destacando u omitiendo en sus
representaciones las partes afectadas de su propio cuerpo.
Del mismo modo los componentes perceptivos tienen también sus propias
manifestaciones. Podemos observar este tipo de indicadores en las respuestas grá-
ficas que el niño da a los estímulos visuales que recibe; en este sentido las reaccio-
nes son cada vez más complejas, evolucionando de lo general a lo específico en los
procesos de diferenciación de la forma. En el inicio de su desarrollo iconográfico
iconográfico
serán suficientes las características esenciales de un objeto para representarlo, ya
que, según Arnheim (1980), el niño representa conceptos que tienen su origen di-
El concepto de evaluación en la materia artística 119
cimientos que estos proyectan de forma activa nos proporcionan una idea de su
nivel intelectual. Estos conocimientos se formulan a través de datos y detalles que
nos muestran los significados que construye el niño acerca del medio y de si mis-
mo. El nivel de comprensión es lógicamente progresivo de un estadio a otro de
desarrollo, sin embargo, podemos observar una gran diversidad de conocimientos
activos en niños de la misma edad cronológica.
Un dibujo lleno de información temática
temá tica proviene, por lo general,
general , de un niño
con mayor actividad intelectual que otro de su misma edad cronológica que aporte
menos datos en las mismas condiciones situacionales. Sin embargo, su trabajo
puede no ser «bonito»
«bonito» y los detalles quizás sean escasamente reconocibles desde
un punto de vista figurativo. En otras palabras: el sentido estético del niño y su
habilidad para el dibujo y otras formas de representación plástica
plástica pueden ser infe-
riores a su desarrollo cognitivo.
Por otra parte, la «cantidad» no es el único indicador a tener en cuenta; así,
debemos atender a la «calidad» de los datos aportados, a la densidad de los signifi-
cados como indicadores del grado de comprensión y no sólo de información, que
se muestra en lo representado. Siguiendo esta idea, un niño que dibuje varios co-
ches iguales presenta
prese nta sólo dos conceptos: el de «vehículo» y el de «muchos», o sea,
el nominal y el de cantidad, mientras que otro que dibuje sólo uno pero más elabo-
rado, definiéndolo, por ejemplo, como una ambulancia o un coche de bomberos, al
añadirle todos los símbolos que permiten identificarlo está incluyendo en el dibujo
la comprensión de la función social del objeto representado; de este modo se mues-
tra un nivel cualitativamente mayor en cuanto al grado de diferenciación formal y
en cuanto a los significados.
Igualmente, no debemos cometer el error de concluir que la falta de detalles
en el dibujo libre y autónomo del niño significa siempre un bajo nivel cognitivo. Es
frecuente encontrar otras causas como son: restricciones en el ámbito familiar y
escolar, bloqueos de índole emocional, algunas anomalías de tipo perceptivo, o
bien, un ambiente escasamente motivador.
1. Indicado
Indicadores
res socio-cu
socio-culturales:: siguiendo los planteamientos que reciente-
lturales
mente realiza en su libro sobre educación y cultura visual Fernando Hernández
(1997), tanto en el ámbito adulto como en el infantil, el arte es una manifestación
cultural y tiene un papel importante en la construcción de las representaciones
sociales. Así una forma de comprender nuestra cultura y nuestro entorno es a través
de la comprensión de la diversidad de imágenes que lo componen.
En este sentido el primer paso en el desarrollo social y en la comprensión de
su medio cultural lo efectúa el niño encarando sus propias experiencias ya que
éstas suponen la asimilación y la interpretación de determinados símbolos y varia-
bles contextuales.
contextuales. Mediante
Mediante la actividad creadora
creadora que procura
procura el arte, no sólo des-
El concepto de evaluación en la materia artística 121
texturas. Igual que en el arte adulto, los criterios estéticos infantiles están en per-
manente evolución, pero al contrario que éste, no están sujetos a esquemas cultura-
les y biográficos, sino que progresan a medida que lo hace la habilidad técnica del
niño y su desarrollo global. De este modo, la expresión artística ofrece al niño la
oportunidad de poder relacionar en cada momento, sus percepciones mentales y
sus sentimientos según los principios que gobiernan los procesos de maduración.
3. Indicadores creativos : la capacidad creadora consiste principalmente en
Indicadores creativos:
poder utilizar y aplicar libremente
libremente y con independencia los distintos
distintos componentes
componentes
del desarrollo que hemos definido como indicadores, con el fin de producir un
esfuerzo integrado.
Esta capacidad creativa se manifiesta en el arte infantil en la originalidad de
su enfoque y en la ausencia de cualquier tipo de influencias externas al propio
proceso creador.
creador. « El niño creativo no necesita
necesita demostrar
demostrar gran destreza porpor ser un
creador » (Lowenfeld, V., 1961, 68), sin embargo, es fundamental que exista cierto
grado de autonomía, pues no se concibe la capacidad de crear si no hay libertad de
acción y de medios. La tendencia a experimentar con los materiales evidencia una
mente inclinada a la creación.
Por el hecho mismo del carácter intuitivo y libre de la capacidad creadora, su
evolución no se produce en proporción al crecimiento cronológico del individuo;
por el contrario, esa capacidad está más arraigada y es más espontánea, por lo
general, en el niño que no ha sido sometido aún a las reglas sociales restrictivas y
dirigistas, propias del mundo adulto.
4. PROPUEST
PROPUESTA
A DE EVALUACIÓN
EVALUACIÓN CUALITAT
CUALITATIVA
IVA DEL LENGUAJ
LENGUAJE
E
ICONOGRÁFICO
Evaluación
Evaluación de los indicadores de desarrollo
• Indicado
Indicadores
res emociona
emocionales
les
— ¿Se observa goce y libertad cinestésica durante
durante el proceso creativo?
— ¿Se muestra
muestra interesado
interesado el niño
niño en
en el seguimiento
seguimiento y control visual de los
los
trazados que produce?
El concepto de evaluación en la materia artística 123
• Indicadores
Indicadores estéticos
— ¿Aparecen los trazados distribuidos
distribuidos por toda la superficie?
— ¿Organiza
¿Organiza intuitivamente
intuitivamente los trazados
trazados mostrando
mostrando sentido
sentido del equilibrio
equilibrio
y del ritmo?
— ¿Prefiere el uso del color si tiene la oportunidad?
oportunidad?
— ¿Se observan estructuras mandálicas?
• Indicadores
Indicadores creativos
— ¿Muestra independencia
independencia durante el proceso?
— ¿Investiga
¿Investiga con el material que tiene a su alcance?
— Cuando adjudica nombre a los trazados o formas, ¿lo hace por propia
iniciativa?
— ¿Elige libremente
libremente el color?
Evaluación
Evaluación de los componentes estructurales
estructurales
• Anális
Análisis
is de
de la forma
forma
1. ¿Se muestra un doble control
control de la coordinación visomotriz?
visomotriz? Es decir
¿existe dominio inicial direccional y final de los trazados?
2. ¿Aparecen ya unidades
unidades básicas cerradas
cerradas (diagramas) aislados de los
trazados cinestésicos (garabatos)?
3. ¿Se relacionan
relacionan y combinan
combinan los diagramas
diagramas básicos?
4. ¿Se observan estructuras abstractas experimenta
experimentales?
les?
5. ¿Pueden observarse ideogramas?
ideogramas?
6. ¿Se crean iconogramas
iconogramas primarios, es decir, conceptos
conceptos gráficos
gráficos figurati-
vos?
7. ¿Aparecen diferenciados
diferenciados loslos símbolos primarios?
primarios? Por ejemplo: ¿se in-
dican con diferentes signos y diagramas las partes del cuerpo, rasgos de
la cara, etc. ... de un iconograma?
8. ¿Se observan símbolos
símbolos secundarios: adicionales
adicionales o complementarios?
complementarios?
Por ejemplo: botones y bigote, o bolso y paraguas.
9. ¿Se muestra simetría a nivel parcial?
10. ¿Se genera un vocabulario
vocabulario gráfico inicial
inicial diferenciado?
diferenciado?
11. ¿Crea el niño
niño nuevos
nuevos iconogramas?
iconogramas?
12. ¿Se hace un uso flexible
flexible y experimental de los términos
términos gráficos, va-
riando éstos con frecuencia?
13. ¿Aparecen loslos esquemas disociados,
disociados, de forma enumerativa,
enumerativa, o se obser-
van nexos gráficos parciales?
14. ¿Existe una intención
intención narrativa manifestada
manifestada oralmente, antes
antes de la rea-
lización del dibujo?
El concepto de evaluación en la materia artística 125
Evaluación
Evaluación de los indicadores de desarrollo
• Indicado
Indicadores
res emociona
emocionalesles
— ¿Aparecen iconogramas
iconogramas primarios
primarios que
que indiquen
indiquen la relación
relación afectiva del
niño con su medio?
— ¿Está libre la expresión de estereotipos gráficos?
— ¿Existe flexibilidad
flexibilidad en el uso de conceptos gráficos?, es decir, ¿varían
éstos con frecuencia?
— ¿Muestra el niño
niño su vinculación
vinculación emocional
emocional a una
una experiencia,
experiencia, median-
te algún tipo de nexo gráfico?
— ¿Pone de mayor tamaño las partes significativas?
— ¿Surgen otros símbolos como respuesta a nuevas experiencias?
experiencias?
126 Las artes plásticas y su función en la escuela
Evaluación
Evaluación de los componentes
componentes estructurales
• Análi
Análisis
sis de la
la forma
forma
1. ¿Tiene el niño fijado su vocabulario
vocabulario gráfico?
gráfico? Obsérvese
Obsérvese si repite
repite los
mismos esquemas base para representar conceptos como: hombre,
casa, árbol, etc. de modo constante.
2. ¿Podemos decir que su uso es es flexible?,
flexible?, o sea,
sea, ¿aparecen
¿aparecen vinculados
vinculados los
esquemas a distintas experiencias?
3. ¿Utiliza los mecanismos
mecanismos de expresión característicos
característicos en este estadio?
estadio?
Observar si se utilizan los recursos de:
— Énfasis: aumento o exageración de partes significativas.
significativas.
— Omisión: exclusión
exclusión o disminución
disminución de partes menos significativas.
significativas.
— Sinonimia:
Sinonimia: empleo
empleo de distintos
distintos iconogramas
iconogramas para un mismo concepto
concepto
o sustitución puntual de símbolos ya establecidos, por otros nuevos.
— Anexión:
Anexión: crea nuevos
nuevos esquemas
esquemas o símbolos
símbolos secundarios,
secundarios, adicionale
adicionales.s.
4. ¿La estructura
estructura de los esquemas
esquemas sigue
sigue estando
estando constituida
constituida por formas
geométricas básicas unidas por adición lógica?
5. ¿Se observa
observa una progresiva diferenciación
diferenciación de la forma desde loslos prime-
ros a los últimos dibujos?
6. ¿Se empiezan
empiezan a generar líneas
líneas más orgánicas al final
final del estadio, en
sustitución de los diagramas geométricos?
• Análisis del espacio
1. ¿Tiene definido gráficamente
gráficamente el espacio global o exteroceptivo?
exteroceptivo?
2. ¿Se relacionan
relacionan los elementos
elementos gráficos
gráficos entre
entre sí componiendo
componiendo un tema?
3. ¿Se muestra
muestra constante
constante la estructura-base
estructura-base del espacio: línea base-aire-
cielo?
4. ¿Utiliza ocasionalmente
ocasionalmente soluciones
soluciones espaciales distintas?
— Plegados o abatimientos.
— Elevación de planos.
— Transparencias.
— Doble línea base.
— Cosificación
Cosificación de parcelas espaciales.
5. ¿Prescinde de la estructura espacial básica (línea base-aire-cielo)
base-aire-cielo) cuan-
cuan-
do la experiencia representada es dinámica y multidireccional?
6. ¿Muestra
¿Muestra globalmente
globalmente los concept
conceptos:
os: izquierda-de
izquierda-derecha,
recha, delante-
delante-de-
de-
trás, cerca-lejos?
7. ¿Se comienz
comienzaa a ocupar
ocupar el espacio
espacio entre
entre dos líneas
líneas de base?
base?
8. ¿Se observan
observan indicios de solapamient
solapamientoo o superposición?
superposición?
128 Las artes plásticas y su función en la escuela
Evaluación
Evaluación de los indicadores de desarrollo
• Indicado
Indicadores
res emocion
emocionales
ales
— ¿Se identifica el niño con sus propias experiencias?
experiencias?
— ¿Utiliza con flexibilidad
flexibilidad los conceptos adquiridos?
— ¿Se muestra la expresión libre de estereotipos gráficos?
— Con respecto a la forma ¿se utilizan los mecanismos expresivos pro-
pios del
del lenguaje
lenguaje plástico
plástico en
en este estadio? (ver cuestionarios
cuestionarios de evalua-
evalua-
ción de estructuras).
— ¿Se observa flexibilidad en las soluciones
soluciones espaciales? (ver cuestiona-
cuestiona-
rios de evaluación de estructuras).
— ¿Refleja el niño gráficamente
gráficamente sus relaciones con el medio social?
— ¿Se observan
observan desviaciones
desviaciones de
de los
los esquemas
esquemas de color
color debido
debido a experien-
experien-
cias emocionales significativas?
— ¿Se muestra seguridad
seguridad en los trazados y en el uso del color?
• Indicadores
Indicadores cognitivos
cognitivos
— Tras el análisis de estructuras realizado, ¿se muestra correspondencia
entre el nivel madurativo y la etapa de desarrollo a la que corresponda?
— ¿Han evolucionado los iconogramas primarios expresándose
expresándose aspectos
como el ropaje a través de símbolos secundarios?
— ¿Es capaz de relacionar los iconogramas en el espacio gráfico hasta
constituir un tema?
— ¿Muestra el niño un conocimiento
conocimiento adecuado de su entorno inmediato?
inmediato?
Ej.: familia, escuela, etc.
— ¿Se expresan conceptos
conceptos gráficos que impliquen comprensión
comprensión de situa-
ciones , reales o imaginarias?
• Indicadores
Indicadores perceptivos
perceptivos
— ¿Se muestra la observación
observación visual
visual del medio a través de datos
datos descrip-
tivos?
— ¿Se empiezan a abandonar los diagramas geométricos
geométricos utilizándose
utilizándose lí-
neas más globales y descriptivas?
— ¿Se observa la expresión de movimiento o sensaciones cinestésicas?
cinestésicas?
El concepto de evaluación en la materia artística 129
Evaluación
Evaluación de los componentes estructurales
estructurales
• Anális
Análisis
is de
de la forma
forma
1. ¿Tienden a eliminarse
eliminarse las
las formas geométricas?,
geométricas?, es decir, ¿se observan
observan
estructuras gráficas más integradas y orgánicas?
2 ¿Las parte
partess conservan
conservan su signi
significad
ficadoo cuando
cuando se las separa
separa del
del conjunt
conjunto?o?
3. ¿Se han dejado
dejado de
de utilizar
utilizar los mecanismos
mecanismos dede expresión
expresión vigentes
vigentes en el
el pe-
ríodo anterior, tales como: exagerar partes significativas,
s ignificativas, omitirlas, etc.?
4. ¿Empieza a representar el niño posturas corporales
corporales y no sólo
sólo posiciones?
posiciones?
5. ¿Se observan
observan másmás detalles
detalles en las partes
partes signifi
significati
cativas?
vas?
6. ¿Persiste
¿Persiste el esquema
esquema en la expresió
expresiónn de conceptos
conceptos genéri
genéricos?
cos?
130 Las artes plásticas y su función en la escuela
Evaluación
Evaluación de los indicadores de desarrollo
• Indicad
Indicadores
ores cogn
cognitiv
itivos
os
— Tras el análisis de estructura
estructura realizado,
realizado, ¿se observa
observa que
que las característi-
característi-
cas gráficas de las representaciones realizadas por el niño se correspon-
den con las descritas en esta etapa del desarrollo?
— ¿Comienza el niño a utilizar
utilizar detalles
detalles específicos
específicos para caracterizar el yo
y el medio?
— ¿Representa
¿Representa las diferencias entre sexos atendiendo a características
características fí-
sicas substanciales?
— ¿Apunta las características
características sexuales secundarias (pelo, bigote, etc.)?
— ¿Coordina las figuras en el espacio
espacio con ausencia de línea-base, es decir,
decir,
considerando el plano?
• Indicadores
Indicadores emocionales y sociales
— ¿Se identifica el niño con sus dibujos?
dibujos?
— ¿Expresa situaciones personales significativas?
— ¿Están las técnicas al servicio de sus necesidades expresivas?
expresivas?
— ¿Acumula el niño
niño detalles en aquellas
aquellas partes de sus dibujos
dibujos que tienen
significación emocional para él?
— ¿Elige temas que muestren su vinculación afectiva?
— ¿Muestra el niño en sus dibujos la identificación
identificación con su grupo?
— ¿Tiene conciencia
conciencia social de su medio?
El concepto de evaluación en la materia artística 131
— ¿Coopera en en el trabajo
trabajo del grupo
grupo subordinando
subordinando su participación
participación al pro-
yecto de todos?
• Indicadores
Indicadores perceptivos
perceptivos
— ¿Correlaciona
¿Correlaciona las figuras entre
entre sí utilizando
utilizando el plano
plano como soporte grá-
grá-
fico?
— ¿Muestra conciencia
conciencia de la línea de horizonte como efecto óptico?
— ¿Utiliza la superposición
superposición para crear profundidad?
profundidad?
— ¿Expresa la distancia introduciendo
introduciendo gradientes de tamaño?
— ¿Va adquiriendo
adquiriendo conciencia
conciencia de los efectos variables de lala luz
luz y el movi-
movi-
miento?
— ¿Utiliza el color añadiendo matices?
— ¿Expresa las cualidades de textura del material?
— ¿Mantiene
¿Mantiene la flexibilidad
flexibilidad en la representación de movimientos
movimientos corpo-
rales?
• Indicadores
Indicadores estéticos
— ¿Usa el niño motivos
motivos decorativo
decorativoss en los
los vestidos
vestidos o en
en otros elementos?
— ¿Adapta el material y las técnicas al diseño?
diseño?
— ¿Mezcla los colores entre sí buscando nuevas tonalidades?
tonalidades?
— ¿Interpreta en términos plásticos la estética medio ambiental (moda,
publicidad,
publicidad, etc.?
• Indicadores
Indicadores creativos
creativos
— ¿Elige el niño sus propios temas?
— ¿Experimenta
¿Experimenta con medios diferentes?
— ¿Inventa sus propias formas creando un estilo propio?propio?
— ¿Tiene capacidad inventiva en el uso de los distintos materiales con
nuevos propósitos?
Evaluación
Evaluación de los componentes estructurales
estructurales
4. ¿Muestra intención
intención de representar escorzos o detalles
detalles como:
como: articula-
articula-
ciones o pliegues en la ropa?
5. ¿Ha desaparecido
desaparecido totalmente
totalmente la tendencia al esquematismo
esquematismo geométrico?
geométrico?
• Análisis de la forma: tendencia subjetiva
subjetiva
1. ¿Se distancia
distancia en la representación
representación de la apariencia objetiva de seres y
cosas?
2. ¿Muestra
¿Muestra la subjetiv
subjetividad
idad de sus concepto
conceptoss bien simplifica
simplificado,
do, o bien
haciendo más complejas sus representaciones gráficas?
3. ¿Aprovecha
¿Aprovecha los detalles
detalles para marcar rasgos psicológico
psicológicoss tales como la
expresión facial o gestual?
4. ¿Es capaz de introducir
introducir transferencias
transferencias afectivas a través de los datos
más significativos, o personificando elementos inanimados?
5. ¿Aprovecha
¿Aprovecha la luz luz y el claro-oscuro
claro-oscuro para
para reforzar subjetivamente
subjetivamente los
elementos representados?
• Análisis del espacio: tendencia objetiva
objetiva
1. ¿Trata el niño de introducir la perspectiva
perspectiva en la representación
representación deldel es-
pacio?
2. ¿Muestra
¿Muestra en la composici
composición ón concienc
conciencia
ia de profundida
profundidad?d?
3. ¿Dispone espacialmente
espacialmente los elementos en coherencia
coherencia con las caracte-
rísticas objetivas de la percepción óptica?
4. ¿Es sensible
sensible a los cambios observados
observados en relación
relación con la distancia,
distancia, la
atmósfera, o el movimiento, en el conjunto de la representación?
• Análisis del espacio: tendencia subjetiva
subjetiva
1. ¿Desconsidera
¿Desconsidera las apariencias ópticas introduciendo
introduciendo un un orden subjeti-
vo en la composición?
2. ¿Es sensible
sensible la disposición
disposición espacial a los efectos
efectos bien decorativos,
decorativos, o
bien dramáticos, en la representación?
3. ¿Utiliza el color
color con fines
fines prioritariamente
prioritariamente estéticos o como refuerzo
emocional en la configuración espacial?
4. ¿Las reglas utilizadas
utilizadas en la disposición
disposición de los
los componentes
componentes obedecen
obedecen a
tendencias expresivas personales o a la búsqueda de un estilo propio?
• Análisis del color . En el uso del color habrá que tener en cuenta si está
subordinado a una representación naturalista, respetando las reglas ópticas
que impone la luz en un determinado medio y en determinadas condicio-
nes objetivas, o bien, se utiliza como un componente expresivo simbólico
o decorativo sólo sujeto a un orden impuesto subjetivamente.
Evaluación
Evaluación de los indicadores de desarrollo
• Indicad
Indicadores
ores cogn
cognitiv
itivos
os
— Tras el análisis
anális is de estructuras
estructur as realizado, ¿se
¿s e muestra correspondencia
corr espondencia
entre las características observadas y las descritas en ambas tendencias?
El concepto de evaluación en la materia artística 133
• Indicadores
Indicadores emocionales y sociales
— ¿Se identifica
identifica el niño no
no sólo con sus experiencias,
experiencias, sino también con el
medio social?
— ¿El significado de la experiencia
experiencia se expresa a través de recursos gráfi-
cos objetivos o subjetivos?
— ¿Sirve el color como medio para expresar estados de ánimo, bien me-
diante recursos descriptivos o bien mediante soluciones personales?
— ¿Es capaz de de integrar sus
sus realizaciones
realizaciones en un proyecto
proyecto común
común aportan-
aportan-
do sus recursos técnicos y creativos?
• Indicadores
Indicadores perceptivos
perceptivos:: aspectos comunes a las tendencias subjetiva y
objetiva
— ¿Adquirió conciencia
conciencia del uso de de las articulaciones
articulaciones al
al trazar
trazar sus figuras?
— ¿Muestra en sus representaciones
representaciones tener conciencia
conciencia de las diferencias
producidas
producidas por edad, tamaño, fisonomía, etc.?
• Indicadores
Indicadores perceptivos de la tendencia objetiva
— ¿Ha adquirido conciencia
conciencia de la apariencia de su ambiente?
— ¿Expresa la profundidad
profundidad en sus dibujos?
— ¿Representa
¿Representa los efectos de luz y sombra?
— ¿Observa las arrugas de los pliegues que se producenproducen en las ropas con
el movimiento?
— ¿Cambia la intensidad
intensidad de las
las líneas, el color
color y las sombras enen los obje-
tos distantes?
— ¿Se ha apartado completamente
completamente de la línea de base?
• Indicadores
Indicadores perceptivos de la tendencia subjetiva
— ¿Expresa las sensaciones cinestésicas
cinestésicas propias y ajenas?
— ¿Manifiesta
¿Manifiesta experiencias táctiles o de textura?
— ¿Comunica a través de sus representaciones
representaciones las sensaciones
sensaciones corporales?
— ¿Contrasta
¿Contrasta claros y oscuros como medio de expresión?
expresión?
— ¿Utiliza en algunos casos la línea de base u otras soluciones gráficas
personales para representar el entorno?
— ¿Distingue
¿Distingue los elementos
elementos en el espacio gráfico
gráfico según reglas
reglas subjetivas,
subjetivas,
sin tener en cuenta la perspectiva óptica?
• Indicadores
Indicadores estéticos
— ¿Distribuye
¿Distribuye de manera equilibrada las distintas partes de su trabajo de
creación?
— ¿Vincula las características
características del diseño con el significado del trabajo?
— ¿Usa la técnica más apropiada al tema?
— ¿Utiliza los colores en relación
relación a la expresión objetiva o subjetiva?
— ¿Es experimental en las formas de expresarse? (Estilo)
• Indicadores
Indicadores creativos
— ¿Se mantiene
mantiene el niño
niño libre
libre de inhibiciones
inhibiciones pese
pese a su creciente
creciente conscien-
cia crítica?
134 Las artes plásticas y su función en la escuela
Llevar a cabo la evaluación del producto final del proceso artístico tiene
como finalidad completar la información obtenida a partir de la evaluación de es-
tructuras y del análisis de los indicadores de desarrollo que se manifiestan en los
dibujos infantiles. Se trata en este caso de evaluar de un modo más objetivo (aun-
que sin olvidar nunca quien es el autor de los trabajos), el resultado último del
esfuerzo realizado. Sin embargo, debemos destacar que los criterios que se barajan
en esta parte de la evaluación y los datos que de ella se desprendan sólo deben
entenderse como una información complementaría a la ya obtenida tras la observa-
ción del proceso creador.
En la evaluación del producto artístico estimaremos la relación entre técnica
y destreza o aptitud manifestada por el niño; para ello plantearemos las siguientes
cuestiones:
a. ¿Es la técnica
técnica adecuad
adecuadaa al nivel?
nivel?
b. ¿Está la técnica subordinada
subordinada a la expresión o viceversa?
c. ¿Suponen los procedimient
procedimientos os artísticos
artísticos empleados un medio
medio para
para la
representación de aspectos descriptivos y/o normativos?
d. ¿Ha asimilado
asimilado el niño las
las estrategias
estrategias técnicas
técnicas adecuadas
adecuadas a cada proce-
proce-
dimiento?
e. ¿Representa el producto
producto final
final el límite de
de su capacidad?
capacidad?,, en otras
otras pa-
labras, ¿lo ha hecho al límite de sus posibilidades?
Para abordar estas preguntas es necesario recordar que, en primer lugar, es la
técnica la que debe adecuarse al nivel del niño y no a la inversa. Por otro lado, una
técnica debe constituir parte integrante del trabajo creador y nunca considerarse
disociada de éste, bien por conferirle excesivo protagonismo o por considerarlo en
un último plano. Por último hay que temporalizar adecuadamente el proceso de
adquisición de dominio técnico básico, de modo que se de oportunidad al niño de
convertir una técnica en un instrumento eficaz de mediación simbólica.
En definitiva consideramos que la evaluación de la producción artística in-
fantil debe entenderse como una fuente de información que aporte datos concretos
y que refleje la realidad particular de cada niño. Con este planteamiento descarta-
mos cualquier tipo de valoración que lleve apareado el sentido de calificación; no
se trata de medir los resultados artísticos, sino de que la valoración
valoración de los mismos
y del proceso que los genera, ofrezca al maestro los recursos necesarios para mejo-
rar su labor docente tanto en el ámbito de la materia artística, como en el resto de
las parcelas que se abordan en aula.
CAPÍTULO VII
MOTIVACIÓN E INCENTIVOS DE LA
EXPERIENCIA ARTÍSTICA EN LA ESCUELA
3. Por proporcion
proporcionarar al sentimiento
sentimiento,, siempre tan
tan escurridizo,
escurridizo, un vehícul
vehículoo
adecuado, que sólo el juego y la expresión libre permiten.
4. Por posibilitar
posibilitar la formación de conceptos
conceptos perceptivos
perceptivos a través de expe-
expe-
riencias sensoriales.
5. Por facilitar la aprehensión
aprehensión estética
estética y la cultura visual
visual a partir
partir de la va-
loración consciente de los aspectos formales de la propia obra y de la
ajena.
6. Por encauzar
encauzar los aspectos
aspectos socio-culturales
socio-culturales a través de la recreación
recreación artís-
artís-
tica.
7. Por permitir al educador
educador la posibilida
posibilidadd de un mayor y mejor
mejor conocimien-
conocimien-
to de los niños, tanto a nivel de grupo como individualmente, a través de
un material analizable.
2. DIFERENT
DIFERENTES
ES RESPUEST
RESPUESTAS
AS DE LOS NIÑOS
NIÑOS FRENTE
FRENTE AL TRABAJ
TRABAJO
O
ARTÍSTICO
Dentro del diseño curricular del área de expresión plástica existen dos tareas
fundamentales a desarrollar por el profesor; una es la evaluación y análisis perma-
nente de las representaciones gráficas infantiles (que ya tratamos en capítulo ante-
rior), y otra la motivación de las mismas.
El propósito de la motivación preliminar en las fases de producción artística
es conseguir la autoidentificación inicial del niño con el trabajo creador y su parti-
cipación activa en el mism
mismo. o. Por ello la función del educador en
e n este campo es la de
incentivar el proceso de representación y expresión iconográfica, actualizando la
experiencia y dotando al alumno de los recursos técnicos y del conocimiento esté-
tico-artístico necesario para comunicar sus sentimientos, sus conocimientos y sus
percepciones.
percepciones. Al mismo tiempo, el maestro será el encargado de seguir seguir los proce-
sos, potenciando las diferencias individuales y el pensamiento independiente, favo-
reciendo así la diversidad de respuestas y el potencial creativo de sus alumnos.
En este planteamiento no tienen cabida ningún tipo de ortopedias gráficas
como la reproducción literal de esquemas o de composiciones, o como la imitación
de estilos o de estrategias. El uso de láminas, ilustraciones o cualquier otro tipo de
referencias visuales objetivas podrán utilizarse sólo como estímulo inicial de la
capacidad creadora, siempre que se trate de una motivación previa a la representa-
ción (proyecciones,
(proyecciones, ilustraciones, etc.), y sin que sirvan como pretexto para forzar
al niño a la imitación mecánica, ya que un uso indebido de imágenes estandariza-
das tiende a unificar las respuestas iconográficas y no a potenciar la individualidad.
Por el contrario, recursos tales como la dramatización de experiencias acordes con
los intereses del nivel madurativo en que se encuentren los alumnos, y sobre todo
la motivación oral a través del diálogo, serán los más acordes a nuestros objetivos
de expresión y representación creativa.
Motivación
Motivación e incentivos de la experiencia artística
artística en la escuela 137
Para ello habrá que tener en cuenta que la motivación esté adecuada al nivel de
desarrollo y a los intereses del niño, ya que la única motivación significativa es
aquella que se adapta a su etapa de desarrollo y a su ambiente. En este sentido, sería
absurdo motivar por imaginación visual a un niño en la etapa del garabateo, o
intentar que un alumno de siete años conciba el espacio en perspectiva, así como
pretender que
que un niño
niño de seis
seis años se identifiqu
identifiquee espontáneamente
espontáneamente con
con situaciones
situaciones
y contextos ajenos a sus intereses. Así pues, a la hora de realizar la motivación
habrá que ser consecuente, por una parte, con los intereses individuales determina-
dos por las circunstancias personales de cada niño, y por otra, tanto con los intere-
ses de grupo dependientes del ciclo de desarrollo en el que se encuentre la clase,
como con los aspectos pertinentes de la comunidad cultural en la que debe inter-
pretarse el incentivo docente.
A veces, después de una motivación preliminar general en la que se han
tenido en cuenta los intereses del colectivo, nos podemos encontrar con algún niño
que centra su atención en algo sólo significativo para él. En estos casos intentar
desviar su atención hacia intereses ajenos o sustituir los significados que construye
por fórmulas vacías de contenido, implicaría crear un conflicto que le haría plan-
tearse su propia competencia simbólica y podría llevar a una ruptura del proceso.
La intervención del educador se justifica sólo en la medida en que consiga dar
sentido y comprometer al niño en una empresa compartida, sin forzar el abandono
de sus propias construcciones.
Por esta causa, debemos motivar teniendo en cuenta las tendencias genera-
les del grupo, pero respetando los intereses específicos que, ocasionalmente, se
aparten de los del conjunto de la clase.
3. LA ACTUALIZ
ACTUALIZACIÓ
ACIÓN
N DE LA EXPERIE
EXPERIENCIA
NCIA COMO
COMO FORMA
FORMA DE
MOTIVACIÓN
Antes de abordar esta labor el maestro deberá tener en cuenta los siguientes
aspectos:
1. A qué
qué nivel
nivel de desarrollo
desarrollo se dirige motivación: para ello será necesario
dirige la motivación:
que conozca las condiciones de partida con que cuentan los niños:
— Por sus características
características generales
generales u objetivas,
objetivas, es decir, teniendo
teniendo en cuenta
cuenta
la fase de desarrollo gráfico que atraviesan, en razón de su edad cronoló-
gica.
— Por sus componentes
componentes subjetivos,
subjetivos, es decir, respetando las características
características
particulares
particulares de maduración de cada niño, que nos muestran los distintos
indicadores de su desarrollo global.
2. Cuáles son sus objetivos: éstos deberán estimular los distintos aspectos
del desarrollo y, sobre todo, aquellos que toman parte más activamente en el proce-
so de creación. Nos referimos a los indicadores afectivos, cognitivos y físico-per-
ceptivos, denominados en el capítulo anterior como indicadores de primer orden.
Atendiendo a las hipótesis de trabajo que el maestro haya planteado, la motivación
se adecuará a cada nivel y será progresiva y diferenciada en cada una de sus fases
en relación con los objetivos de desarrollo.
3. Cómo va a desarrollar la motivación desde el punto de vista práctico:
una vez decidido que tipo de estímulo va a realizar, el maestro habrá de conocer el
material didáctico útil a sus objetivos, los obstáculos que previsiblemente pueda
tener y las condiciones espacio-temporales con que cuenta para realizar la expe-
riencia. Los estímulos iniciales se podrán desarrollar en tres modalidades:
a. De forma oral, es decir, hablando
hablando con los niños sobre algún
algún tema. En este
sentido, al utilizar la pregunta como recurso incentivador, deberá tener
en cuenta, en primer lugar, que ésta no debe mostrar al niño la ignoran-
cia, desfase o incomprensión de éste hacia el tema planteado, y en segun-
do lugar, que nunca debe hacer preguntas dirigistas que lleven implícitas
las respuestas y resten al niño la libertad inherente a la creación.
b. A través de la apreciación
apreciación sensorial que realice el niño de los objetos
relacionados con la experiencia.
c. Mediante la reproducción
reproducción vivencial
vivencial que permiten
permiten la simulación y la dra-
dra-
matización; ésta se realizará atendiendo a dos planos en la propuesta de
partida:
1. El directo,
directo, que aborda la realidad inmediata al niño y su nivel
nivel de inte-
gración.
2. El indirecto,
indirecto, que
que pretende
pretende la complicidad
complicidad con lo imaginario y la intro-
ducción de la fantasía como marco para la proyección psico-física.
Para ilustrar lo anteriormente expuesto proponemos el siguiente ejemplo;
éste podría definirse como una motivación preliminar o inicial, para un nivel de
educación infantil:
1 40 Las artes plásticas y su función en la escuela
4. OTRAS
OTRAS FORMAS
FORMAS DE ESTÍMUL
ESTÍMULO:
O: LA COMPET
COMPETENCI
ENCIA
A INDUCIDA
INDUCIDA Y
LOS CONCURSOS ARTÍSTICOS
Las funciones del profesor en este área son fundamentalmente dos: la moti-
vación de los procesos de representación y de expresión y la evaluación de los
mismos. Ambas funciones serán el centro de la labor docente de cualquier maestro,
sobre todo en los ámbitos de la educación Infantil y Primaria, donde los objetivos
objetivo s de
la actividad docente han de estar destinados a conseguir que el alumnado se identi-
fique con el medio artístico como lenguaje y que sea capaz de utilizarlo y de reco-
nocerlo tanto en su vertiente productiva, como en su dimensión apreciativa. La
Motivación
Motivación e incentivos de la experiencia artística
artística en la escuela 145
visión de conjunto de la materia artística debe guiar los esfuerzos docentes de ma-
nera que el alumno entienda el arte como una parcela amplia en la que se dan cita
diferentes actuaciones, todas ellas relativas al ámbito artístico: « Como investigado-
res preocupados por el curso y la calidad del desarrollo artístico, tenemos que dejar
de lado la tradicional y, por ahora, cómoda separación entre crear,cre ar, mirar y pensar.
Hemos de considerar
considerar como podemos sorprender y comprender
comprender las las conversaciones
conversaciones
que se producen entre tales capacidades complementarias » (Wolf, (Wolf, D.P., 1991,
1991, 57).
Frente a este compromiso el docente necesita sentirse identificado
identifi cado con la labor
artística y contar con una sensibilidad estética y una actitud creativa que lo configu-
ren como profesor de artes plásticas. Este hecho no obliga a los profesores de este
área a ser «artistas» en el sentido literal de la palabra, pero si a que reúnan una serie
de condiciones
condiciones básicas que le permitan
permitan desarrollar su labor: « Cuando hablamos de
personalidad
personalidad artística del profesor, no exigimos de él la realización
realización de una obra de
categoría artística (si la incluyese tanto mejor). Lo que si es inevitable como exigen-
cia es que dicho profesor debe tener alma de artista, y debe estar dotado de sensi-
bilidad hacia el arte y para el arte; debe de tener capacidad para crearcre ar un clima de
creatividad artística en el que el alumno encuentre las apropiadas motivaciones y
pueda desenvolverse en un ambiente estético » (Sánchez Méndez, M., 1991, 37).
La afirmación anterior sobre la personalidad
personalidad artística, parece dejar fuera de
juego a todos aquellos
aquellos docentes
docentes cuyas «dotes» naturales
naturales hacia el arte
arte no son espe-
cialmente evidentes; sin embargo, nuestro planteamiento, y la necesidad de crear
maestros generalistas en un área que hasta hoy carece de especialidad en los cursos
de formación del profesorado, es la de alentar cada uno de estos aspectos de la
personalidad
personalidad artística en la formación de los futuros docentes. Junto al desarrollo
de sus cualidades artísticas, el docente en este área necesita tener una preparación
adecuada sobre los procesos artísticos infantiles, para que, de este modo, sea capaz
de reconocer y de entender cuáles son las aportaciones del arte al curriculum esco-
lar. Esta es, a nuestro juicio, la característica que debe primar en el perfil del profe-
sor de educación artística: valorar la educación por el arte y conocer la magnitud de
sus repercusiones en el desarrollo infantil.
Es evidente que el desarrollo de este planteamiento nada tiene que ver con la
labor docente que, en la mayoría de las ocasiones, nos encontramos en las escuelas.
Nos referimos al uso tan extendido
extendido de láminas, fichas y, en general, de material
didáctico prefabricado que trata de imponerse en los centros, limitando así la labor
docente y, por supuesto, coartando las respuestas infantiles. Ni que decir tiene que,
si ya el uso de este material curricular resulta insuficiente e inadecuado en la mayo-
ría de las áreas, tanto o más lo es si observamos las actividades que se proponen
para la educación
educación artística.
artística. En este ámbito
ámbito (y sobre todo
todo en el terreno
terreno de la Educa-
Educa-
ción Infantil), cualquier tarea que se propone tiene un enfoque conductista cuyo
objetivo no es otro que el del control psicomotor y el de la habilidad manual y
técnica; con ello se ahoga cualquier intento de desarrollo creativo y el fomento de
1 46 Las artes plásticas y su función en la escuela
las cualidades estéticas individuales, para dar paso a unos patrones estrechos que
carecen de todo sentido de cara a la expresión y a la representación personal. Al
igual que en otras áreas de conocimiento, todo está programado y planteado para
ejercer lo que Apple (1982, 1989, 1992) denomina
denom ina el control técnico de la enseñan-
za: el control que los expertos (no docentes) ejercen sobre el profesorado, determi-
nando su labor educativa. En este sentido, los materiales curriculares, como por
ejemplo las fichas y los libros de texto, en general, suponen un medio perfecto para
llevar a cabo este control y determinar la actuación docente. Nieves Blanco (1994,
267) realiza un análisis sobre los libros de texto que define con bastante claridad
este matiz controlador que caracteriza a los materiales curriculares: « Los
« Los materia-
les curriculares, sobre todo los denominados “a prueba de profesores” y de los
que un ejemplo serían los libros de texto, representan uno de los instrumentos
fundamentales
fundamentales a través de de los que se ejerce
ejerce el control
control técnico en
en la enseñanza.
enseñanza. En
ellos se especifican los objetivos a cubrir, la selección, la secuenciación y organi-
zación del contenido
contenido a enseñar,
enseñar, las actividades
actividades más
más adecuadas
adecuadas para aprenderlo
aprenderlo y
los criterios de evaluación de su aprendizaje... ».
Es evidente que al maestro se le deja poco espacio para la toma de decisio-
nes. Las propuestas creativas no tienen cabida en este planificación y, en caso de
producirse, resultan
resultan más un trastorno que un beneficio
beneficio para la buena marcha de la
labor docente, sobre todo si tenemos en cuenta que cualquier programación en este
sentido ha de convivir necesariamente con la dinámica que genera el uso impuesto
de fichas (y materiales similares) en el aula como único material curricular. Así
pues, la labor docente se ve limitada al seguimiento de un texto que indica lo que
hay que hacer en cada momento, sin tener en cuenta las condiciones y los intereses
particulares de cada grupo: «Con
« Con un tipo de materiales así, la mayor parte de las
funciones
funciones consideradas
consideradas propias de la labor
labor de un profesor
profesor han desaparecido
desaparecido por-
que no son necesarias: planificar el trabajo, decidir qué actividades son más apro-
piadas para los estudiantes
estudiantes que tiene, diseñarlas, adaptarlas...;
adaptarlas...; todo ello ya está
previsto en los materiales»
materiales» (Blanco, N.,
N., 1994, 267). Con este
este tipo de
de recursos se
olvida que el aula es un espacio dinámico y cambiante cuyo componente humano
esta sujeto a aspectos difícilmente predecibles por su natural complejidad. Por ello
«el maestro y el profesor no pueden concebirse como meros técnicos sino como
intelectuales que indagan en el aula, en su estructura
estruc tura y funcionamiento, en la natu-
raleza de sus componentes y en la singularidad de las interacciones. Esta tarea
exige trasladarnos desde la lógica de la homogeneidad a la lógica de la diversi-
dad » (Pérez,
(Pérez, A.,
A., 1994,
1994, 75).
75).
A nuestro juicio, el punto de arranque para iniciar una labor adecuada
adec uada de cara
a la educación artística ha de ser el respeto a las cualidades personales y a la expre-
sión particular de cada niño. Este hecho constituye en nuestra opinión una pieza
clave sobre todo para el desarrollo de los primeros inicios de representación artís-
tica: « Antes de la edad escolar, cualquier
cualquier tipo
tipo de formación artística formal parece
Motivación
Motivación e incentivos de la experiencia artística
artística en la escuela 147
innecesaria.
innecesaria. Tal y como hemos señalado, los los niños pequeños están soberbiamente
soberbiamente
dotados para aprender acerca del mundo de los objetos y de las personas, y pueden
hacer descubrimientos importantes
impor tantes –e incluso novedosos– sin necesidad de la inter-
vención de adultos, si se exceptúa lo que atañe a los tipos más generales de apoyo
y provisión de materias (...) Las modalidades
modalidades de conocimiento
conocimiento intuitivas
intuitivas y de primer
orden, operarán sin necesidad de nada excepto de ricas oportunidades » (Gardn (Gardner,
er,
1994, 74-75). Con el inicio de la escolarización es posible iniciar también un acer-
camiento a los conocimientos formales
form ales del arte. Sin embargo, de acuerdo con Gard-
ner (1994, 76-77), consideramos que la aproximación a los aspectos de aprehensión
estética no debe producirse desligada de la vertiente productiva del arte: « En « En la
medida en que se elige introducir las formas escolares de conocimiento del arte, la
forma de introducirla
introducirla se convierte en esencial. No es preciso que este conocimiento
conocimiento
se presente aislado de las facultades artísticas productivas
product ivas del niño. Más bien al
contrario, hay mucho que ganar ampliando el conocimiento artístico del niño a
través de cierta forma de aprendizaje bien “situado”. (...) En mi opinión es en el
decurso del trabajo en sus propios proyectos cuando se debe introducir a los estu-
diantes de un modo gradual y sensible en los aspectos notacionales y formales del
análisis artístico. Cuando los niños experimentan con diferentes colores, pueden
recibir instrucciones para aprender algo de la teoría de los colores; en la produc-
ción de variaciones sobre un tema, pueden encontrar de interés otras variaciones
llevadas a cabo por los artistas maestros; en la investigación de la antigua Roma
antes de un viaje a Italia, puede ser especialmente significativo un examen de las
formas arquitectónicas o de las clases de estilos ».
Para poder iniciar el conocimiento de los conceptos artísticos a partir de la
propia producción infantil, el maestro ha de ofrecer a los alumnos un contexto
adecuado que favorezca el aprendizaje de dichos conceptos, al tiempo que fomente
su capacidad creadora y productiva; así mismo, será necesaria la enseñanza de
aquellas técnicas e instrumentos que, siendo apropiados al nivel madurativo del
niño por su dificultad de ejecución, le permitan realizar satisfactoriamente sus re-
presentaciones.
presentaciones. La labor del maestro supondrá, por tanto, un esfuerzo por ofrecer
diferentes recursos procedimentales y por generar situaciones apropiadas de
aprendizaje en la que cada niño pueda elaborar su producción personal: « La « La nece-
sidad de educación
educación no significa
significa enseñar un conjunto
conjunto de formulas
formulas para
para cada
cada objeto
objeto
concreto; implica más bien la observación de objetos en todas las orientaciones
posibles. Lejos de debilitar
debilitar la imaginación
imaginación,, la educación
educación puede
puede ayudar a liberarla.
liberarla.
Incluso los grandes
grandes artistas han seguido un período de aprendizaje
aprendizaje en el que han
estudiado y asimilado las técnicas utilizadas hasta entonces. La innovación suele
basarse en un claro dominio de las técnicas básicas » (Cox,(Cox, M.V.,
M.V., 1991,
1991, 77).
77).
Como indica Ricardo Marín (1997, 147), consideramos que el maestro nece-
sita poner en práctica una metodología que atienda a tres cuestiones fundamentales
para la enseñanza artística:
1 48 Las artes plásticas y su función en la escuela
1. La actividad,
actividad, es
es decir la elaboración de obras, ya que la producción es la
mejor manera de generar conocimiento y destrezas artísticas, tanto a ni-
vel formal como intuitivo.
2. La individualidad, « porque
individualidad, « porque en las artes plásticas lo decisivo es aquello
que cada uno puede aportar como propio y singular» y sólo el desarrollo
de un trabajo personal permite la expresión particular de cada individuo
y un verdadero aprendizaje significativo.
3. La creatividad, porque la propia idiosincrasia de la materia pone de ma-
creatividad, porque
nifiesto la necesidad de que el arte se transmita utilizando unos recursos
creativos que fomenten su naturaleza intrínseca.
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