DIPLOMADO PARA LA FORMACIÓN DE EDUCADORAS Y EDUCADORES DE

PERSONAS JÓVENES Y ADULTAS

Análisis de la lectura “Vine a hacer el curso de magisterio porque no tuve otra oportunidad”
Freire, Paulo (1998).

Por: Gilder Marcelino Alonzo Pérez

Por muchos años la carrera a nivel medio es un dilema para elegir y decidirse en lo que se
desea graduarse; sin embargo, es una situación en el que todavía existen aspectos en el que
se deben poner mucha atención a efecto de elegir una carrera que permita desenvolverse
como profesional, así como tener satisfacción laboral que en muchas ocasiones no se da.
No cabe duda que la profesión docente es un oficio noble, humano y especial que
básicamente permite el desarrollo de las habilidades, destrezas y conocimientos lo que hace
que cada persona que se dedica a la educación bien sea formal o informal pueda
considerarse un agente de cambio sobre un espacio de liderazgo y coaching.

Por lo tanto, la tercera carta de Freire hace énfasis sobre los docentes que toman la carrera
porque no encontraron otra profesión. Se hace acotación que si se toma esta carrera debe
ser algo serio, con responsabilidad puesto que es una profesión donde se va a formar
personas que sean de bien en la sociedad, personas críticas, capaces de tomar sus propias
decisiones. Por lo cual se debe tener una formación excelente para luego enseñar y de la
misma forma seguir aprendiendo de quien se enseña como lo afirma él mismo en su
primera carta.

Por consecuencia no se trata de elegir una carrera al azar, o porque de plano es la nunca
forma de ocuparse en la etapa de estudios de los últimos años en el nivel medio, se trata de
decidir sobre el futuro de la profesión y por ende del futuro que espera a cualquier
profesional egresado de las carreras del nivel medio. Para el efecto es necesario analizar
incluso desde la educación básica, la carrera que se desea elegir y por supuesto consultar
con personas adultas y con madures a efecto de recibir consejos y orientaciones; por otro
lado, también están las pruebas vocaciones que ayudan mucho a la orientación de la
elección de una carrera a nivel medio.

El asunto en este caso es en momento de que un estudiante elige la carrera del nivel medio
y por supuesto, la carrera de magisterio en el que quizás no posee la mayor idea de lo que
se trata y aun así es por supuesto para educar a otras personas que en muchos de los casos
calificaran como poca vocación en el área de la formación y de la docencia. Para aquellos
que han elegido la carrera del magisterio y saben lo que esto implica, es decir que trabajará
con estudiantes y alumnos en el que ayudará a desarrollar sus capacidades y habilidades,
tendrá la satisfacción amplia de lo que se trata ser un humanista.

Por otro lado, Freire también hace énfasis o hace una crítica de cómo el sistema de
gobierno tiene marginada la educación de un país, en la carta hace referencia a Brasil y es
un flagelo que se extiende a muchos países de Sudamérica como en Guatemala, puesto que
en estos países se viven realidades similares y la población poseen características que
poseen ciertas semejanzas lo que hace que el análisis se aplique al sistema guatemalteco.
En muchos de los casos los problemas educativos y los fenómenos que existen en el
sistema educativo y que ocasiona la baja calidad de la educación no radica en lo
pedagógico o didáctico, sino en un sistema político, económico de moral y ética en el que
muchos países de América latina se viven y Guatemala no esta exento de esta situación.

No cabe duda que el sistema político es más importante que le sistema educativo, que la
moral y la ética debe influir de manera positivo en el sistema de desarrollo en todos los
países de amera latina y por supuesto del mundo en general, esto hace que la raza humana
sea más noble, más humana y consciente de la realidad para mejorar el entorno y el
contexto donde se desarrollan los procesos educativos. Por otro lado, el bajo sueldo que
gana un docente y el argumento que usa el gobierno con ideas ya obsoletas, para no
aumentarlo; pero frente a esto también se reconoce la fuerza y el ánimo en esta tercera
carta.
En esta carta claramente se menciona que aquellas personas que son docentes y que a la vez
ejercen las funciones como tales, es decir que ejerza claramente la tarea debe hacerse con
gusto y entusiasmo, que, al preparar, formar, instruir o compartir conocimientos con
responsabilidad para convertir a los estudiantes en sujetos empoderados y esa será la forma
de poder alcanzar las metas en los estudiantes como a los docentes mismos.

Al momento de elegir la carrera de docentes, tutores, instructores y toda profesión que

implica una labor de compartir y desarrollar conocimientos, habilidades, destrezas; se debe
tener claro que en muchos de los casos no es bien remunerado, sin embargo, la satisfacción
de ser parte del desarrollo de las personas hace que exista gran satisfacción, de hecho se
debe hacer bajo la perspectiva de que satisfacción personal en el que se pueda tener claro la
satisfacción de aportar a otro sujeto.

El ser docente genera una satisfacción enorme al ver los progresos de los estudiantes o de
los participantes del que se atiende, al notar cómo se interesan más en un tema y aprenden
sobre ellos mismos. Al estar frente a un grupo de estudiantes o participantes de una
actividad de enseñanza obviamente se ayudan a moldear el futuro, con lo cual se genera un
impacto en cómo los alumnos perciben el mundo que les rodea. Por lo tanto, se tiene el
poder de fomentar la imaginación y la creatividad, forjar el carácter y proporcionar a los
estudiantes las herramientas que necesitan para desenvolverse en su vida que es el fin
último del proceso educativo.