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LA CARTERA DE SERVICIOS
Y SU NECESIDAD DENTRO DE LA
CONFIGURACIÓN DEL
DERECHO A LA SALUD:
CONFIGURACIÓN Y CATEGORIZACIÓN
Jesús Esteban, Cárcar Benito
Doctor en Derecho
Facultativo No Sanitario del Servicio Murciano de Salud
SUMARIO: 1. La cartera de servicios y el alcance del derecho a las prestaciones sanitarias en el con-
texto actual. 2. Consideraciones generales sobre la configuración de las prestaciones sanitarias del Sistema
Nacional de Salud. 2.1 El catálogo de prestaciones. 2.2 Categorización y modalidades de la cartera de servicios
del Sistema nacional de salud. 3. Configuración de la cartera de servicios. 3.1 Los contenidos. 3.2 Necesidad de
su determinación. 3.3 Su naturaleza. 3.4 El rango. 4. El problema de los recursos y la cartera de servicios. 4.1
El problema de la sostenibilidad. 5. Una cartera de servicios inclusiva: los colectivos que merecen especial
protección en la cartera de servicios. 6. Exclusión, universalidad y solidaridad en el acceso a la cartera de
servicios. 7. La cartera de servicios como forma de intervención. 8. Una reflexión final sobre la cartera de
servicios. 9. Bibliografía.
RESUMEN
El vigente Real Decreto 1030/2006 que estable- de la Constitución Española (CE) para lo que exige
ce la cartera de servicios comunes del sistema nacio- a los poderes públicos que desarrollen medidas para
nal de salud (SNS) tendrá que adaptarse a una nueva garantizar su acceso (prestaciones sanitarias). Los
realidad, creada por el Real Decreto Ley 16/2012 servicios se cubrirán principalmente con financiación
de medidas urgentes para garantizar la sostenibili- pública. El problema radica en los límites de conte-
dad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la ca- nido del derecho, incluso cuando los expertos ha-
lidad y seguridad de sus prestaciones Los usuarios yan llegado a un consenso, dado que el derecho a las
del SNS tendrán acceso a la cartera de servicios co- prestaciones sanitarias o, en concreto, a la asistencia
munes reconocida en este real decreto siempre que sanitaria, es un derecho de configuración legal.
exista una indicación clínica y sanitaria para ello,
en condiciones de igualdad efectiva, al margen de PALABRAS CLAVE
que se disponga o no de una técnica, tecnología o
procedimiento en el ámbito geográfico en el que re- Cartera de servicio, sostenibilidad, sistema na-
sidan. Nuestro régimen constitucional reconoce el cional de salud.
derecho a la protección de la salud en el artículo 43
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La cartera de servicios y su necesidad dentro de la configuración del derecho a la salud: configuración...
alcanza cierto nivel de desarrollo y que considera a de servicios fue adoptado como concepto normati-
las prestaciones sanitarias un derecho adquirido sin vo en la década de los noventa y sobre todo por la
límites y, por último, el problema demográfico que normativa autonómica de ordenación de las zonas
supone el aumento de la esperanza de vida”4. básicas de salud de la atención primaria, en la autori-
zación y homologación de los centros. Este término
Ahora bien, la sostenibilidad del SNS y la me- pasa a incluirse en las normas autonómicas generales
jora de la calidad y seguridad de sus prestaciones de ordenación sanitaria en las que las comunidades
comprenden una serie de normas programáticas y de autónomas (CCAA) reconocen su competencia para
gestión en diversos ámbitos de actuación de las Ad- aprobar la cartera de servicios de los centros sanita-
ministraciones públicas sanitarias encargadas de ges- rios del servicio de salud correspondiente.
tionar y financiar la prestación pública en sí misma.
El compromiso que los poderes públicos tienen con Por tanto, su significado en la LCC viene obli-
la ciudadanía puede ser entendido mediante la com- gado al juego de catálogo de prestaciones-cartera
plementación del estatus prestacional básico estatal, de servicios, mediante el que se trata de concretar
hasta el límite de mantener los niveles de protección, el contenido positivo de las prestaciones sanitarias,
que opera ahora de forma más consciente, buscando tal como se había experimentado anteriormente para
los mayores niveles de transparencia que debemos priorizar la financiación. El listado positivo, porme-
asociar a la gestión pública. norizando las técnicas y los procedimientos sanita-
rios incluidos, permite excluir aquellos que no se
Las políticas sociales se han enfrentado a lo largo consideran, evitando asimismo la inclusión de téc-
de los últimos años a transformaciones importantes nicas y procedimientos por la vía de hecho por los
del entorno en el que operan. Estas transformaciones propios profesionales cuando éstos los incorpora sin
incluyen cambios institucionales y el análisis de la previa comunicación ni aprobación por las autorida-
naturaleza, y características de los recursos emplea- des competentes.
dos. La necesidad de controlar el gasto público y de
racionalizar los recursos surge en un momento en el
que además hay una creciente inadecuación entre la 2. CONSIDERACIONES GENERALES
oferta y la demanda, que hace aconsejable la revisión SOBRE LA CONFIGURACIÓN DE LAS
de las políticas de salud y de los modelos de gestión PRESTACIONES SANITARIAS DEL SISTEMA
sanitaria. Por otra parte, la “extensión de la asistencia NACIONAL DE SALUD.
sanitaria es una cuestión de política legislativa en la
que, dadas las circunstancias actuales de crisis eco-
nómica y de reorganización de medios y recursos, 2.1. El catálogo de prestaciones.
parece hacer necesario una racionalización del siste-
ma además de la individualización de las diferentes El contenido de este derecho se desarrolla, en
situaciones que puedan darse”5. primer lugar, en la Ley 14/1986, de 25 de abril, Ge-
neral de Sanidad (LGS) cuyo artículo 3.2 señala que
El concepto de cartera de servicios se ha forjado el acceso y las prestaciones sanitarias se realizan en
tradicionalmente en el ámbito de la gestión sanita- condiciones de igualdad efectiva, y que recoge en su
ria en cuánto listado de actividades que cada unidad artículo 18 las diferentes actuaciones sanitarias que
o servicio de las estructuras del sistema sanitario han de desarrollar los servicios públicos de salud
ofertan a sus usuarios (así, se habla de la cartera de dentro del SNS.
servicios de cada centro sanitario, de la cartera de
servicios de atención primaria)6. El término cartera Por su parte, la LCC en su Capítulo I articula a
través del catálogo de prestaciones del SNS la ga-
4 BACA BALDOMERO, E. “La crisis y las deficiencias rantía de las condiciones básicas y comunes para
del sistema” en Claves de razón práctica, n. º 226, 2012, pp.9- una atención integral, continuada y en el nivel ade-
21.
cuado de atención, definiendo las prestaciones de
5 GARCIA VICENTE, F., “Informe del Justicia de Aragón atención sanitaria del SNS los servicios o conjunto
con motivo de la Queja –DI- 1186/2012-5”, en el que proceda a
examinar el contenido del Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de de servicios preventivos, diagnósticos, terapéuticos,
abril, de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del
Sistema Nacional de Salud y mejorar la calidad y seguridad de
sus prestaciones de 12 de julio de 2012.,
PALOMAR OLMEDA, A., VAQUER CABALLERÍA, M.,
6 VIDA FERNÁNDEZ, J., “Las prestaciones del SNS: (coords), La reforma del Sistema Nacional de Salud., Madrid,
catálogo de prestaciones”. en PAREJO ALFONSO, L., Marcial Pons, 2004, p.62.
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de rehabilitación y de promoción y mantenimiento de servicios comunes para todo el SNS y las carteras
de la salud dirigidos a los ciudadanos (art. 7). El ca- de servicios complementarias que pueden aprobar las
tálogo comprende las prestaciones de salud pública, CCAA que incluirán, como mínimo, la cartera de ser-
atención primaria, atención especializada, atención vicios del SNS. El contenido de la cartera de servi-
sociosanitaria, atención de urgencias, prestación cios comunes del SNS se encuentra fijado en el Real
farmacéutica, ortoprotésica, productos dietéticos y Decreto 1030/2006, de 15 de septiembre, que asimis-
transporte sanitario. El catálogo de prestaciones es el mo contiene las bases para su actualización cuyo pro-
instrumento, al que se le asigna la función de concre- cedimiento se define en la Orden SCO/3422/2007, de
tar la garantía de las condiciones básicas y comunes 21 de noviembre, de manera que su contenido pue-
en el ejercicio —en el Sistema Nacional de Salud— da adecuarse a los avances tecnológicos y a las ne-
del derecho a la protección a la salud7. Se establece cesidades de la población cubierta por el SNS. Los
la definición, el modo y el contenido básico de las Servicios de Salud que no puedan ofrecer alguno de
distintas modalidades en que se puede proporcionar los servicios contemplados en la cartera común en su
la atención sanitaria8. ámbito geográfico establecerán los mecanismos ne-
cesarios para remitir al usuario que lo precise al cen-
El contenido de las prestaciones sanitarias se es- tro donde le pueda ser facilitado, en coordinación con
tablece, por lo tanto, a través de las carteras de ser- el Servicio de Salud que lo facilite. En los diferentes
vicios comunes, como se ha indicado, para cada una anexos se recogen las carteras de servicios comunes
de ellas que incluyen el conjunto de técnicas, tecno- correspondientes a las prestaciones de salud pública,
logías o procedimientos, entendiendo por tales cada atención primaria, atención especializada, atención
uno de los métodos, actividades y recursos basados de urgencia, prestación farmacéutica, ortoprotésica,
en el conocimiento y experimentación científica, de productos dietéticos y de transporte sanitario. Es-
mediante los que se hacen efectivas las prestaciones tas carteras, en función de sus propias característi-
sanitarias. La cartera de servicios comunes que se es- cas, se contemplan con diferente grado de desarrollo,
tablece en esta norma pretende garantizar la equidad previéndose la posibilidad de detallar posteriormente
y la accesibilidad a una adecuada atención sanita- los aspectos que se considere conveniente median-
ria en el Sistema Nacional de Salud, recogiendo los te orden ministerial. Pero además del contenido de
principios establecidos en la Constitución Española. las prestaciones, la LCC regula las garantías sobre la
Los servicios contenidos en dicha cartera no tienen la manera en que deben ofertarse, entendiendo que el
consideración de mínimos, sino de básicos y comu- reconocimiento de un derecho tiene el valor que le
nes, es decir, los fundamentales y necesarios para lle- concede su garantía10 (garantías sobre accesibilidad,
var a cabo una atención sanitaria adecuada, integral y movilidad, tiempo, información, seguridad, calidad y
continuada a todos los usuarios del Sistema Nacional servicios de referencia).
de Salud. Recoge las técnicas, tecnologías o proce-
dimientos que en estos momentos facilitan todas las Lo anterior no implica que la Administración sa-
Comunidades Autónomas, de forma que pretende ser nitaria haya de cubrir todas y cada una de la presta-
una imagen de la situación actual de las prestaciones ciones de modo gratuito. Se trata de garantizar, sim-
del Sistema Nacional de Salud. Asimismo, la cartera plemente, que ante una enfermedad nadie quede sin
de servicios estatal actúa como elenco de servicios de asistencia médica que sea considerada esencial, o se
oferta obligatoria por todas y cada una de las CCAA, vea abocado a la pobreza para pagarla, como dicen
con lo que se garantiza la homogeneidad de la aten- LÓPEZ I CASANOVAS, y ORTÚN RUBIO11. Esto
ción sanitaria en todo el territorio nacional. no significa la inatacabilidad, o no, de las conquistas
sociales ya existentes o, desde otro punto de vista,
La cartera de servicios es, así, concebida como la posibilidad de “retroceder” en las mismas es una
instrumento para la efectividad de las prestaciones cuestión que se mueve fundamentalmente en el plano
previamente determinadas en el catálogo9. Dentro de de lo político, pues como indica LÓPEZ MENUDO,
las carteras de servicios se pueden distinguir la cartera no estimo que existan argumentos jurídicos de
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suficiente base como para impedir que lo decidido la tecnología, no siempre es el problema, y no puede
por Ley (o reglamento) en un determinado momento, ignorarse que es la solución. No obstante, desde el
no pueda ser afectado en otro momento por norma campo de la ética hablamos de valores instrumenta-
del mismo rango jerárquico, al menos12. La solución les o por referencia, meros valores, como la técnica,
del problema es la concepción política que sobre la que están siempre al servicio de los llamados valores
materia sustente quien ejerce la mayoría parlamenta- intrínsecos o valores en sí. Estos son aquellos que
ria en cada momento. valen por sí mismos, que no están al servicio de otras
cosas, (la salud, la vida)14. En referencia a la asis-
El grado de detalle de los diferentes anexos es tencia sanitaria intervienen siempre hechos y valo-
variable, llegando a un gran desarrollo en algunas res, y la relación clínica ha de concebirse como una
prestaciones, como la ortoprotésica o la de productos relación de deliberación, en la que se identifiquen los
dietéticos. En otros casos, como en atención prima- hechos y se delibere sobre los valores.
ria, atención de urgencias o transporte sanitario, se ha
llegado en el anexo a un grado intermedio de desarro-
2.1.1. El sistema de información y la cartera de
llo que supone un avance en su concreción respecto a
servicios: su problemática.
la anterior regulación, el Real Decreto 63/1995.
En otras prestaciones, como la de atención espe- Si bien se contempla que en el Ministerio de Sa-
cializada, se ha optado por una descripción genérica nidad y Consumo existirá un sistema de información
de los diferentes servicios, señalando las exclusiones de cartera de servicios en el que se recogerá el con-
y acotando algunas indicaciones, lo que permite cla- tenido de la cartera de servicios comunes del Siste-
rificar si determinadas técnicas, tecnologías o proce- ma Nacional de Salud, así como el de las diferentes
dimientos se hallan incluidos o no entre las presta- carteras complementarias de las Comunidades Au-
ciones del SNS. tónomas y de las Mutualidades de Funcionarios, al
que podrán tener acceso los Servicios de Salud, las
La salud pública se recoge por primera vez entre Mutualidades, los profesionales y los usuarios; Final-
las prestaciones del SNS. Sin embargo, no se trata mente, no quiero dejar de mencionar la Comisión de
de nuevas actuaciones, sino de las que venían siendo Prestaciones, Aseguramiento y Financiación, depen-
aplicadas por el Sistema Nacional de Salud, como la diente del Consejo Interterritorial, a través de la cual
prevención de enfermedades o deficiencias, o bien se pretende hacer efectiva la participación de las ad-
las asumidas desde hace tiempo por las administra- ministraciones implicadas en la protección de la sa-
ciones sanitarias en función de sus competencias, lud de la población española en la definición y actua-
modelos organizativos y recursos. lización de las prestaciones y la cartera de servicios
del Sistema Nacional de Salud. En esta Comisión,
Por otro lado, los avances tecnológicos y las ne- están representados los responsables de la cartera de
cesidades cambiantes de la población cubierta por el servicios en el Ministerio de Sanidad, Comunidades
Sistema Nacional de Salud exigen una actualización Autónomas, Instituto de Gestión Sanitaria y Mutua-
continua de la cartera de servicios comunes, como he lidades de Funcionarios, así como otras unidades del
indicado. Cabe interpretar que estamos ante un crite- Ministerio cuyas competencias tiene relación con las
rio de reflexividad, en el sentido de modificación de diferentes prestaciones ofertadas en la cartera de ser-
las acciones propio del sistema. Ha de reconocerse, vicios.
no obstante, que el actual desarrollo de los avances
biotecnológicos ofrecen también una vertiente pre- En esta competencia, ha existido una fragmenta-
ocupante, dado que a menudo no tienen un conoci- ción irremediable con la lesión consiguiente de valo-
miento previo de las consecuencias, que su aplica- res básicos de cualquier sistema nacional de salud: la
ción puede producir sobre la vida, la salud de los unidad del modelo y la equidad15.Además, como in-
individuos y su efectividad en el sistema13. Empero, dica BACA BALDOMERO, es evidente que ”hincar
el análisis a fondo del problema desborda totalmente
las posibilidades, dado que el sistema sanitario es-
12 LÓPEZ MENUDO F., “Los derechos sociales en los pañol carece de un sistema de información que per-
Estatutos de Autonomía”, Administración de Andalucía: Revista mita manejar datos fiables que posibiliten comparar
andaluza de administración pública, n º. 73, 2009, pp. 71-19.
13 MARCOS DEL CANO, A. M., “Derechos humanos. 14 GRACIA GUILLEN, D., “Construyendo la salud”, en
Biotecnología. Derechos humanos una compleja interacción Claves de razón práctica, n. º 226, 2012, pp. 42-51.
circular” en MARCOS DEL CANO, A. M (coord.), Bioética y
derechos humanos, Madrid, UNED, 2012, p.55 ss. 15 BACA BALDOMERO, E., op cit..pp.9-21.
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la efectividad de los sistemas autonómicos en primer previstos para aquélla19 En los servicios accesorios se
lugar, y de los dispositivos concretos de la red sani- recogen todas aquellas actividades, servicios o técni-
taria en segundo”16. Es difícil saber cuantos profesio- cas que no se consideran esenciales pero que ayudan
nales trabajan en un momento dado en un dispositivo a la mejora de una patología crónica, quedando suje-
concreto y desde luego falta una reafirmación de la tas a aportación y/o reembolso por parte del usuario.
contabilidad analítica que suponga cuánto y en qué
se gasta el dinero de un centro sanitario, dado su au- Asimismo, se establece que las Comunidades
sencia o el escaso rigor por la fragmentación en com- Autónomas podrán aprobar sus respectivas carteras
partimentos estancos. Para algunos autores, debería de servicios debiendo incluir, cuando menos, la car-
existir “una propuesta que pretenda ofrecer una alter- tera común del SNS en las tres modalidades citadas,
nativa a la disolución de los sistemas de protección destinando los recursos necesarios para asegurar su
social universales que se ha producido por la cesión efectividad, y pudiendo ampliarla con servicios com-
de la gestión de los servicios públicos que forman plementarios, no incluidos en la financiación general
parte del Estado de Bienestar a las CCAA sin mante- de las prestaciones del Sistema, para cuya aproba-
nerse sobre los mimos ninguna garantía de control y ción será preceptiva la garantía previa de suficien-
cohesión por parte de la Administración General del cia financiera en el marco del cumplimiento de los
Estado”17. Sin información no hay, no puede haber, criterios de estabilidad presupuestaria. El TC ya ha
medidas correctoras que serán siempre tomadas por captado esta novedad cuando en su ultima jurispru-
la presión de la coyuntura18. dencia sobre la estabilidad presupuestaria derivada
de la resolución de distintos recursos contra la vieja
legislación ha recordado la modificación de la con-
2.2 Categorización y modalidades de la cartera de sagración constitucional del art. 135 y hablo, consi-
servicios del Sistema nacional de salud. guientemente, de la consagración constitucional del
principio de estabilidad presupuestaria20.
El Capítulo segundo del Real Decreto-ley
16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes para Por su parte, el citado Real Decreto-Ley, modi-
garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de fica el ar. 8 de la LCC de modo que se diferencia
Salud y mejorar la calidad y seguridad de sus presta- una cartera común suplementaria en la que se inclu-
ciones, a través de la modificación de la LCC, proce- ye, por ejemplo: la prestación ortoprotésica mediante
de a articular la cartera común de servicios del SNS dispensación ambulatoria. Asimismo, prevé que el
en torno a tres modalidades: básica, suplementaria y porcentaje de aportación del usuario para esta cartera
de servicios accesorios, delimitando en cada caso las suplementaria se regirá por las mismas normas que
prestaciones que incluye y su forma de financiación. regulan la prestación farmacéutica, tomando como
Conforme a la categorización introducida, la cartera base de cálculo para ello el precio final del producto
común básica comprende todas las actividades asis- y sin que se aplique el mismo límite de cuantía a esta
tenciales de prevención, diagnóstico, tratamiento y aportación. De este modo, se diferencia en el contex-
rehabilitación que se realicen en centros sanitarios to de una prestación la ortoprotésica, aquella que se
o sociosanitarios, así como el transporte sanitario proporciona a los asegurados de modo ambulatorio,
urgente, siendo cubiertos de forma completa por la que constituye parte de las prestaciones suplementa-
financiación pública; la suplementaria incluye todas rias sujetas a aportación del usuario, de la que se uti-
las prestaciones cuya provisión se realiza mediante liza en centros sanitarios sin aportación del usuario,
dispensación ambulatoria: prestaciones farmacéuti- fundamentalmente implantes quirúrgicos.
ca, ortoprotésica y con productos dietéticos, así como
el transporte sanitario no urgente, estando sujetas a No debemos dejar de lado que el Real Decreto
aportación por el usuario en los términos regulados 1506/2012, de 2 de noviembre, por el que se regula
para la prestación farmacéutica —que se verá más la cartera común suplementaria de prestación orto-
adelante— aunque sin aplicación de los límites protésica del Sistema Nacional de Salud y se fijan
las bases para el establecimiento de los importes
16 BACA BALDOMERO, E., op. cit., p.21.
17 REY BIEL, P.; REY DEL CASTILLO, J., “La sanidad 19 Vid. disp. adic. segunda RDL 16/2012
y el pacto fiscal catalán”, en Claves de razón práctica, n.º 226,
2012, pp.52-61. 20 EMBID IRUJO, A., op cit., p.83. El autor comenta
que la narración que ha llevado a cabo, se suma con la STC
18 BACA BALDOMERO, E., Las cuatro lógicas del 157/2011, de 18 de octubre Fj 1º, tras citar la STC 134/2011
sistema sanitario español: médico, enfermo tercer pagador e que es la que consagra los poderes del Estado en la defensa de
industria, Claves de la razón práctica, 2006, pp. 42-47. este principio).
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21 EMBID IRUJO, A., op. cit, p. 84 ss.. Como se acaba de constatar, la Administración
22 Para ello, se considera necesario crear la Oferta sanitaria ha venido implementando diversas presta-
de productos, como ha sido el acaso de los ortoprotésicos, ciones complementarias y determinadas garantías
susceptibles de financiación por el Sistema Nacional de Salud
y establecer los criterios para la inclusión de los productos en respecto de las prestaciones que ofrece el sistema
dicha Oferta. Todo ello con el objetivo de proporcionar una sanitario. No obstante, ha de insistirse en que el con-
prestación más racional a los usuarios del Sistema Nacional junto de prestaciones sanitarias y de sus garantías,
de Salud. Lo que se plantea no es una cuestión de negación
de políticas (sociales) sino un problema de elección de medios
instrumentos y, obviamente, objetivos con el presupuesto.
24 QUADRA SALCEDO, T., “Igualdad, derechos de
23 BOHIGAS SANTASAGNA. LL., “Cartera de servicios los pacientes y cohesión del sistema Nacional de Salud”, en
ofertados y edquidad de prestaciones en el Sistema nacional de PAREJO ALFONSO, L., PALOMAR OLMEDA, A., VAQUER
Salud”, Revista d Administración Sanitaria, 2007, Vol. 5 nº 3, CABALLERÍA, M., (coords.), La reforma del Sistema Nacional
pp. 451-458. de Salud., Madrid, Marcial Pons, p. 13 ss.
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disperso en multitud de normas de distinto rango, al- accesibilidad de los servicios y la atención sanitaria
gunas de ellas con bastante antigüedad (doce, quince más adecuada a los grupos de población con mayor
años, y más) y, por lo tanto, acomodadas a los pará- riesgo respecto al mantenimiento de su salud; 4. in-
metros asistenciales del momento, está muy lejos de tervenir en la calidad de una oferta sanitaria prestada
poder entenderse formalmente como un “Catálogo de por profesionales cualificados, poniendo a su dispo-
Prestaciones sanitarias” y una “Cartera de Servicios”. sición las tecnologías y procedimientos que faciliten
Se trata de un conjunto de textos normativos secto- su desarrollo profesional, su formación continuada y
rializado y disperso referido a diferentes ámbitos ma- el desarrollo de sus capacidades y conocimientos; 5.
teriales concretos, carente de una regulación general procurar facilitando, en todos los ámbitos de deci-
que establezca un marco común y aglutinador. De ahí sión, la participación y corresponsabilidad de ciuda-
que la interpretación y aplicación de ese complejo y danos y profesionales, al objeto de que la oferta de
abigarrado conjunto normativo, tanto por el propio servicios sanitarios sea acorde con sus necesidades
ciudadano perceptor de las prestaciones, como por y aspiraciones; 6. dotar de un procedimiento para la
los órganos administrativos que lo han de operar, no autorización y actualización de la cartera de servicios
es nada fácil desde el punto de vista técnico-jurídico, sanitarios lo suficientemente ágil para evitar que la
ya que muchas de las normas, que abordan similares intervención pública constituya un barrera que difi-
ámbitos, se solapan y se confunden, sin que sea fácil culte que los usuarios se beneficien de los avances
determinar en qué medida se complementan o, por científicos y tecnológicos; 7. garantizar que ninguna
el contrario, se sustituyen con las correspondientes nueva actividad, procedimiento, técnica o tecnología
derogaciones tácitas. relevante se generalice en el sistema de salud de una
comunidades autónoma sin una previa evaluación de
Por último, no quiero dejar de mencionar el au- su efectividad y seguridad por parte de órganos de
mento de cartera de servicios, que tuvo lugar, en di- evaluación de tecnologías sanitarias25. Empero, ha-
ferentes CCAA sin consenso previo en el Consejo bría que añadir que las CCAA establecerán los recur-
Interterritorial de Salud. De nuevo en épocas de su- sos financieros adicionales necesarios. En todo caso,
peravit económico en las administraciones públicas estos servicios complementarios, que deberán reunir
se procedió por parte de muchas CCAA a mejorar y los mismos requisitos establecidos para la inclusión
ampliar sus carteras de servicios en muchas ocasio- en la Cartera de servicios comunes, no estarán inclui-
nes para obtener ventajas políticas y sociales, pero dos en la financiación general de las prestaciones del
sin que dichas ampliaciones de carteras de servicios Sistema Nacional de Salud, como he indicado ante-
hayan sido refrendadas para todo el SNS, lo que ha riormente.
producido cierta fragmentación de las prestaciones
sanitarias, siendo muchas distintas según las CCAA.; En consecuencia, cualquier mandato estatal esta-
algunas en temas importantes como puede ser el ca- blecido en el marco de una legislación básica dictada
lendario vacunal y las vacunas incluidas en el mismo. al amparo del artículo 149.1.16ª CE, que atribuye al
Estado las bases en materia de sanidad para asegurar
No obstante, los decretos de desarrollo de las di- el establecimiento de un mínimo igualitario de vigen-
versas comunidades autónomas detallan y facilitan cia y aplicación en todo el territorio nacional para
los criterios que rigen la acción política y gestora de el disfrute de las prestaciones sanitarias, no es más
la oferta sanitaria en los servicios de salud autonómi- que un instrumento del Sistema Nacional de Salud
cos, y que pueden resumirse en los siguientes princi- que no contradice ninguna de las previsiones compe-
pios de lege ferenda: 1. señalar una oferta sanitaria tenciales y se inscribe en el deber de mutua colabo-
permanentemente actualizada con las innovaciones ración entre Administraciones, que se expresa en el
y avances tecnológicos que se producen en el cam- mismo. Las propuestas e iniciativas autonómicas no
po de la salud, en la que se incluyan todos aquellos puede influir de ningún modo negativo sobre el de-
servicios en los que se haya demostrado su eficacia, venir ordinario que tenga establecida la aplicación de
efectividad y seguridad; 2. disponer de una oferta de la normativa correspondiente del Sistema Nacional
servicios que satisfaga las nuevas demandas y nece- de Salud, ni por supuesto deben influir sobre el man-
sidades de salud de los ciudadanos y que sea acorde tenimiento escrupuloso de las garantías de equidad
con el desarrollo social, cultural y económico de la e igualdad efectiva en el acceso a la prestación en
comunidad autónoma; 3.clarificar y ordenar la oferta
de servicios de forma coherente y consecuente con
las características territoriales y demográficas de la 25 Vid. Decreto 65/2007, de 8 de mayo, del Gobierno de
comunidad, al objeto de garantizar la equidad y Aragón, por el que se aprueba la cartera de servicios sanitarios
del Sistema de Salud de Aragón
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todo el Sistema Nacional de Salud26. Por otra parte, declaración de contenido preciso alguno, como es el
es también una finalidad de la legislación autonómi- art. 43, a mi juicio, es clarificador, dado que repre-
ca en esta materia, profundizar en un desarrollo del senta un límite a la acción del legislador. Este límite
ordenamiento básico que permita en una comunidad es sin duda de contornos imprecisos, en tanto depen-
autónoma consolidar sus propias directrices de po- dientes éstos de la interpretación de principios direc-
lítica sanitaria. A tal fin, y siempre desde el respeto trices constitucionales para la determinación por la
al principio de legalidad y a los objetivos y princi- legislación ordinaria de aquel contenido. Pero activa
pios sobre racionalización del gasto público, que he en todo caso, en términos absolutamente imperati-
analizado, y que ha transmitido la normativa básica vos, cuando la legislación pretenda una dilución tal
estatal, pudiendo extender, a mi juicio, el compromi- del régimen establecido que implique el vaciamiento
so con la ciudadanía mediante la complementación incluso del simple reconocimiento constitucional del
del estatus prestacional básico estatal, hasta el lími- correspondiente derecho.
te de mantener los niveles de protección acordados
socialmente. El contenido de la cartera de servicios es, por
tanto, el quantum prestacional del sistema. Por ello,
debe contener, como mínimo, el Catálogo de Presta-
3. CONFIGURACIÓN DE LA CARTERA DE ciones y la Cartera de Servicios comunes y, además,
SERVICIOS. debe describir las prestaciones complementarias ya
establecidas y que convenga establecer, así como las
técnicas y procedimientos para hacerlas efectivas. El
3.1. Los contenidos contenido debe ajustarse al nivel clínico-asistencial
existente en el momento de su elaboración en térmi-
El reconocimiento directo de derechos en el Ca- nos de investigación, recursos tecnológicos, econó-
pítulo III del Título I CE, aunque no comporte micos, etcétera.
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derechos fundamentales, que, por tanto involucra argumentaciones es el rasgo de que los derechos so-
una técnica de garantía de los derechos humanos tra- ciales no se reducen a una simple obligación del Es-
ducida en una técnica de regulación de los bienes, ya tado, sino también que involucra a los particulares.
también en una integración social; b) una estructura Por un lado, el derecho a la salud podría caracterizar-
social dentro de la cual se reconozca las peculiarida- se por establecer algún tipo de regulación, sin la cual
des que permitan identificar la problemática de salud el ejercicio de un derecho no tiene sentido.
y, dentro de ellas, las peculiaridades que entraña la
estructuración de un sistema de derechos y poder, Ahora bien, la respuesta a su naturaleza puede
propios de un contexto determinado; c) una estruc- ser resuelta desde diferentes fórmulas doctrinales:
tura económica a partir de la cual puedan discutirse de un lado, la posición negadora del carácter de ver-
las racionalidades del gasto público de la participa- daderas normas jurídicas para los derechos sociales,
ción privada en la gestión de la salud pública y de los y, por tanto, justificadora de una falta de protección
mercados de servicio de salud; d) por último, una es- jurisdiccional; y de otro lado, la posición que recono-
tructura política inscrita dentro de un modelo de es- ce carácter normativo a los derechos sociales y por
tado en el cuál tenga lugar las diversas relaciones de tanto exige su defensa y protección judicial. En otras
salud. A lo que se agrega la complejidad proveniente palabras, se trata de reconocer que los derechos so-
del mayor o menor grado de internacionalización del ciales gozan de tutela, pero no de la forma como lo
ordenamiento27. tienen los derechos civiles. En realidad los derechos
sociales se encuentran en un período de transición30.
En este estudio, el cuestionamiento de si es posible
3.3. Su naturaleza. destacar el carácter normativo y no descriptivo del
derecho a la salud con la consiguiente implicación
La cartera de servicios surge como un derecho entre el derecho y sus garantías, podemos partir del
público subjetivo dada la posibilidad de su exigibi- razonamiento de la definición de los derechos como
lidad. Se evidencia para ciertos autores dentro de un expectativas positivas y negativas de prestaciones o
derecho fundamental “prestacional”. Ello, principal- de no lesiones, es decir, de modalidades imperativas
mente, implica y conlleva una serie de obligaciones (obligaciones y prohibiciones: garantías primarias de
positiva (de hacer) por parte de los poderes públicos. los derechos), y se desarrolla con las tesis de que una
Así, la primera pregunta sería: ¿a quién obliga el de- expectativas y otras modalidades imperativas, en el
recho a la salud, sólo a los poderes públicos? La na- plano teórico, se implican respectivamente, que son
turaleza de los derechos sociales nos muestran como dos caras de la misma moneda, es decir, que las pro-
relevante un tema que de alguna manera se ha seña- hibiciones y las obligaciones correspondientes a los
lado tangencialmente: la responsabilidad de los ter- derechos son deducibles de la enunciación de estos
ceros en el esquema de los derechos sociales. Ya PE- últimos31. La propuesta de redefinición del concepto
CES BARBA señalaba que los particulares pueden de derecho subjetivo planteada por FERRAJOLI, se
estar a cargo de la prestación de un derecho social28. inspira precisamente, en la exigencia de resolver este
También es de resaltar que los derechos sociales go- tipo de problema. Para tal redefinición, utilizamos el
zan de una “doble cara” porque se hacen valer tanto término expectativa, por otro lado, ya identificado
hacia los poderes públicos como en las relaciones como equivalente a “pretensión”, en su definición; si
entre particulares 29. Lo que hay detrás de estas bien la noción de expectativa tiene un alcance mucho
más vasto32. En su sentido más habitual, expectati-
27 OMS, Oficina del Alto comisionado de las Naciones va es la previsión de lo que verosímilmente puede
Unidas, El derecho de la salud, folleto nº 31, Geneve, Junio, ocurrir; es decir, relacionado con la redefinición de
pp. 33-37. Vid también, MARTÍN MARTÍN, “Nuevas fórmulas derecho subjetivo, el término adquiere un específica
de gestión en las organizaciones sanitarias”. Fundación
Alternativas. Documento de Trabajo nº14. 2003. Vid. PEMAN
GAVIN, J.: “Hacia nuevas formas de gestión de los servicios
sanitarios “, en la obra colectiva Reforma y liberalización 30 RUIZ MIGUEL, A., “Derechos liberales y derechos
económica. Los Decretos-Leyes, junio de 1996.Ed. Civitas, sociales”, Doxa, Cuadernos de Filosofía del Derecho, Vol. 2 nºs.
Madrid 1996, pp. 297. 15-16, 1994, pp. 670-671.
28 PECES BARBA MARTÍNEZ, G., Derechos Sociales 31 En este sentido, CASTRO CID, B., (vid. Los derechos
y Positivismo Jurídico,Escritos de Filosofía Jurídica y Política, económicos, sociales y culturales: análisis a la luz de la
Cuadernos Bartolomé de las Casas, n.º 11, 1999.Madrid, teoría general de los derechos humanos, León, Servicio de
Dykinson, pp.20 ss. publicaciones Universidad de León, 1993, pp. 74- 101)
29 CASCAJO CASTRO, J. L., La Tutela Constitucional 32 FERRAJOLI, L., “Expectativas y garantías: primeras
de los derechos sociales, Madrid, Centro de Estudios tesis de una teoría axiomatizada del Derecho”, Doxa, nº 20,
Constitucionales 1988, pp.58 ss. 1997, pp. 226 ss.
112
La cartera de servicios y su necesidad dentro de la configuración del derecho a la salud: configuración...
acepción normativa: en el ámbito y a partir de un balance sobre el tema de la tutela de los derechos so-
cierto ordenamiento normativo, el derecho de un su- ciales nos lleva admitir que tienen dificultades para
jeto no es otra cosa que una expectativa de no sufrir su cumplimiento, pero que hay evidencias claras –
lesiones o de tener algunas prestaciones, a cargo de tanto en los ordenamientos internos como internacio-
otro sujeto, relativas a un interés del primero. Natu- nales– que este proceso se viene revertiendo a favor
ralmente, la expectativa del derecho puede no coinci- de su cabal ejercicio.
dir con la lo que pueda ocurrir, resulta prácticamente
inevitable una falta de correspondencia entre las dos.
La amplitud de la divergencia entre los dos tipos de 3.4. El rango.
expectativas mide el grado de eficacia del derecho.
GARCÍA DE ENTERRÍA afirma que “... todos
Ello significa que configurar sin más la cartera los sujetos públicos o privados, en cuanto vinculados
de servicios dentro del derecho a la salud no basta. a la Constitución y llamados a su aplicación. deben
Los derechos exigen garantías idóneas, que deben ser aplicar la totalidad de sus preceptos sin posibilidad al-
establecidas y hechas valer eficazmente por el mismo guna de distinguir entre artículos de aplicación direc-
ordenamiento que atribuye los derechos. Desde este ta, y otros meramente programáticos, que carecerían
punto de vista, la existencia de “derechos sin garan- de valor normativo...(–ya que si bien–) no todos los
tías” parece una especie de aporía dentro de un orde- artículos de la Constitución tienen un mismo alcan-
namiento, que, por un lado, crea, expectativas nor- ce y significación normativas... todos, rotundamente,
mativa, y por otro lado, las ignora (o no las satisface enuncian efectivas normas jurídicas... sea cual sea su
adecuadamente). Pero el derecho a la salud, incluso posible imprecisión o indeterminación... es un reco-
entendido sin garantías, no puede ser considerado nocimiento preciso de que los principios constitucio-
inexistente, existe en cuanto aparece establecido (o nales... son algo más que meras normas –programá-
predispuesto, como es el caso actual), por una norma ticas–, en el sentido tradicional que les negaba todas
positiva, los derechos “de papel” no son no derechos, aplicación judicial”35.. Sin embargo, habría que tener
sino que es tarea de la teoría identificarlos, y propo- en cuenta que el derecho a la protección de la salud,
ner la solución a las aporías en que consisten33. La ubicado en el Capítulo III (De los principios rectores
pregunta que surge es la siguiente: ¿es la cartera de de la política social y económica), no se configura
servicios una solución al problema de fijar y garanti- estrictamente en la CE como un derecho subjetivo en
zar su contenido? el mismo sentido que es predicable de los derechos
y libertades reconocidos en el Capítulo II del mismo
A mi juicio, dentro de los ordenamientos jurídi- título. Se está, más bien y como su ubicación indica,
cos nacionales hay notables avances sobre la tutela ante un principio rector que comporta un mandato
judicial efectiva de los derechos sociales. Tampoco vinculante a los poderes públicos. En consecuen-
es ajeno a este proceso el ámbito internacional en el cia, “no es irrazonable sostener –como se hace en
que si bien se reconoce los limitados recursos con el preámbulo del Real Decreto-ley 16/2012– que la
que cuentan los Estados para cumplir sus obliga- materia sobre la que versa pueda regularse mediante
ciones, esto no es óbice para excusar la tutela que Real Decreto-ley, siempre que se den los presupues-
ejercen los órganos de control internacional34. Un tos habilitantes, porque el derecho a la protección de
la salud no constituye, en sentido estricto, un dere-
33 BOVERO, M., en “Derechos fundamentales y
cho subjetivo constitucional con el significado esta-
democracia en la teoría de Ferrajoli. Un acuerdo global y una blecido en el artículo 86 CE de límite material a esta
discrepancia concreta”, en FERRAJOLI, L., Los fundamentos clase de normas de urgencia”36. En el desarrollo del
de los derechos fundamentales, Madrid, 2005, pp. 226-227. derecho, como es la cartera de servicios, estamos
34 ORGANIZACIÓN DE LA NACIONES UNIDAS,
ONU,”Instrumento internacional de derechos humanos”,
Recopilación de las observaciones generales y recomendaciones 35 GARCÍA DE ENTERRÍA, E., La Constitución como
generales adoptadas por órganos creados en virtud de tratados norma y el Tribunal Constitucional, Madrid, Civitas, 2006,pp.
de derechos humanos, GE.04-41305(S) 010604, 070604,HRI/ 68-69.
GEN/1/Rev.7 12 de mayo de 2004, p.8-183. A modo de ejemplo
podemos mencionar el pronunciamiento del Comité de Derechos 36 Informe del Letrado Mayor C. Foral de Navarra en
Económicos, Sociales y Culturales de Naciones Unidas sobre relación con el emitido el día 8 de junio de 2012, sobre si el
el tema: “el Comité reconoce que los programas de ajuste son Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes
muchas veces inevitables y que a menudo suponen un elemento para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud
importante de austeridad. Ahora bien, en tales circunstancias, y mejorar la calidad y seguridad de sus prestaciones, respeta las
los esfuerzos por proteger los derechos económicos, sociales y competencias de la Comunidad Foral de Navarra en materia de
culturales más fundamentales adquieren una urgencia mayor, sanidad, solicitado por Acuerdo de la Junta de Portavoces de 2
no menor” de mayo de 2012
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Jesús Esteban, Cárcar Benito Volumen 24, número 2. Julio-Diciembre 2014 | ESTUDIOS
ante instrumentos de corte jurídico más convencio- ámbito de la abstracción de los derechos naturales,
nal (reglamentario), dirigido, como dice PAREJO enraizados en la Ley natural, cuando de suyo el texto
ALFONSO, a la concreción funcional del SNS como jurídico, las normas que reconocen las prestaciones,
tal y, por tanto, del estatus ciudadano37.El artículo 8 a lo largo de su articulado pretende positivizar aque-
de la LCC preceptúa que las prestaciones sanitarias llos que para algunos podría haber sido una simple
del catálogo se harán efectivas mediante la cartera de abstracción conceptual más propia de la escolástica
servicios comunes que, según prevé el artículo 20, se que de los momentos presentes”38.
acordará en el seno del Consejo Interterritorial del
Sistema Nacional de Salud y se aprobará mediante Además, la reforma del artículo 135 de la CE, de
real decreto, teniendo en cuenta en su elaboración la 27 de septiembre de 2011, ha supuesto una profunda
eficacia, eficiencia, efectividad, seguridad y utilidad modificación de este precepto, el cual se encuadra en
terapéuticas, así como las ventajas y alternativas el Título VII relativo a las materias de Economía y
asistenciales, el cuidado de grupos menos protegidos Hacienda. Esta supone articular con detalle el princi-
o de riesgo, las necesidades sociales, y su impacto pio de estabilidad presupuestaria, introduce una serie
económico y organizativo. de principios a continuación de este, que permiten
crear un marco coherente y completo. Estos princi-
pios son: el de sostenibilidad financiera; eficiencia en
4. EL PROBLEMA DE LOS RECURSOS Y la asignación y utilización de los recursos públicos;
LA CARTERA DE SERVICIOS. responsabilidad y lealtad institucional.
Otra cuestión sería sí el derecho a la salud como De esta forma, resulta innegable la dependencia
derecho social está condicionado a los recursos con de los derechos sociales de los recursos económicos
que cuenten los Estados para su implementación, con los que cuente el Estado para su implementa-
mientras que los derechos civiles no enfrentan esta ción39. Sin embargo, es apresurado establecer como
dificultad. Los derechos económicos, sociales y cul- argumento para el incumplimiento de los derechos
turales se encuentran condicionados a los recursos sociales la ausencia de recursos económicos. En este
económicos que cuente el Estado para lograr su im- contexto, un “derecho cuyo reconocimiento y cuya
plementación. Cuando esos recursos abundan no hay efectiva protección son reenviados sine die y con-
riesgos para su cumplimiento; en cambio la escasez fiados a la voluntad de los sujetos cuya obligación
de recursos imposibilita materialmente el goce de los de realizar el programa es solamente una obligación
derechos sociales. Esta crítica a los derechos sociales moral o, cuanto máximo, política ¿pueden llamarse
tienen dos aspectos relevantes: por un lado, resalta correctamente derechos?”40 Para ello, señalamos una
la estrecha relación entre recursos económicos del serie de argumentos: “cabe preguntarse si el Estado
Estado y goce de los derechos sociales; y, por otro puede ser exonerado del cumplimiento de sus obliga-
lado, los costos que suponen poner en funcionamien- ciones –ya sea de acción o de abstención– en la satis-
to, aplicar métodos, medidas, etc., para llevar algo facción de los derechos económicos, sociales y cul-
a cabo los derechos sociales, la cartera da servicios turales a causa de la existencia de recursos limitados.
sería, entonces, lo financiado. Asimismo, se postula Una lectura desprevenida del artículo 2.1 del Pacto
que los derechos civiles no se encuentran condicio- Internacional de Derechos Económicos, Culturales y
nados a los recursos económicos del Estado para su Sociales (PIDESC) podría sugerir que la satisfacción
goce y que no representan grandes costos la garantía de estos derechos está condicionada a la disponibilidad
de estos derechos. Hay que exponer claramente lo
condicionable de los recursos para los derechos so-
38 RAGA, T., “Efectividad de los derechos económicos
ciales: “reconocen y proclaman derechos cuya efec- y sociales”, en Derechos y Libertades, Madrid, Universidad
tividad está subordinada al quehacer económico, ha- Carlos III-Boletín Oficial del Estado, Año III, nº 6, Febrero
cen que venga a nuestra consideración, no la raigam- 1998, p. 194.
El autor comenta que ello lleva a una fundamental
bre jurídica del derecho reconocido, la cual para mi preocupación por consolidar y crear grandes sistemas sin
está fuera de duda, sino la efectividad real del mismo, contradicción interna.
conscientes de que la dudosa eficacia de un derecho 39 BOBBIO, N., El tiempo de los derechos, Madrid,
a la salud, no se salda con el reconocimiento de una Sistema, 1991, pp. 122 ss. Para el autor es todavía más
prestación, aunque éste fuera de alcance universal. importante y vastísima la tarea de los sociólogos del Derecho
en lo que se refiere a otro tema fundamental, la aplicación de
Por otro lado, nos resulta difícil circunscribirnos al las normas jurídicas, o sea, el fenómeno que es cada vez más
estudiado con el nombre intraducible de implementatión.
37 PAREJO ALFONSO, L., op cit p. 242 40 BOBBIO, N., op. cit. p. 123.
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La cartera de servicios y su necesidad dentro de la configuración del derecho a la salud: configuración...
de recursos. Sin embargo, el mismo Comité de de argumental la satisfacción de los derechos sociales
Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la no depende de la disponibilidad de recursos, sino
ONU ha sostenido que “para que cada Estado Parte más bien de la asignación de los recursos disponi-
pueda atribuir su falta de cumplimiento de las obli- bles43. A lo dicho cabe agregar la complejidad técni-
gaciones mínimas por falta de recursos disponibles, ca especifica de la salud, lo que determina que sobre
debe demostrar que ha realizado todo esfuerzo para esta materia de nociones y relaciones técnica sociales
satisfacer, con carácter prioritario, estas obligaciones y económica y. finalmente, jurídicas, se atiende una
mínimas”. Además, no basta con que los estados de- problemática que requiere para su compresión, de
muestren la existencia de recursos limitados; tienen ciertas nociones básicas. Una de ellas, sería admitir
que evidenciar un uso eficaz, equitativo y oportuno el derecho a la salud, como un concepto, más amplio
de esos recursos. Por otra parte, aún en aquellos ca- que el derecho a la protección a la salud, como obli-
sos en los que el Estado evidencia una inequívoca gación que tiene el Estado de desarrollar acciones
limitación de recursos, ello no agota las posibilidades positivas tendentes justamente a proteger la salud o
de satisfacción de los de derechos económicos, so- repararla cuando ha sido afectada.
ciales y culturales, ya que éstos pueden ser cubiertos
mediante programas desarrollados a través de la coo- Finalmente, hay pasos relevantes en el plano
peración y la asistencia internacional. “Las obliga- internacional como es Protocolo Adicional al PI-
ciones de satisfacción de los derechos económicos, DESC44 que establezca un procedimiento de examen
sociales y culturales corresponden, por tanto, a los por el Comité de Derechos Económicos, Sociales y
Estados, considerados estos individualmente, y en el Culturales, otorgándole competencia para comunica-
conjunto integrado por la comunidad de las naciones. ciones o reclamaciones presentadas por los Estados
En este segundo grupo deben incluirse los organis- y los particulares sobre violaciones a los derechos
mos multilaterales de los sistemas internacional y sociales. Se ha admitido progresivamente que el PI-
regional”41. DESC no sólo obliga a los Estados a dar realización
progresiva de los derechos económicos, sociales y
En cuanto al tema de los costos de los derechos culturales dentro de los límites derivados de los re-
sociales que imposibilitan su implementación para cursos disponibles sino que impone obligaciones de
la salud, enfatizo la debilidad de esa argumentación efecto inmediato. En una reclamación individual se
porque “el recorte jurídico-estructural de un derecho podría verificar si un Estado cumple o no esas obli-
no puede ni debe confundirse con la cuestión de su gaciones, las cuales serían “justiciables”45.
financiación. Si estas dos dimensiones fuesen indi-
sociables, entonces no se comprendería que ciertos Por último, la diversidad de técnicas de garantía
derechos –como los derechos de acceso a los tribu- para el desarrollo del modelo de derecho social pone
nales y de acceso al derecho– pudiesen ser considera- su acento, según los diferentes autores, en la garantía
dos tranquilamente derechos directamente aplicables institucional, la garantía jurisdiccional o la garantía
cuando, sin embrago, dependen de prestaciones es- social, mediante la movilización constante de los
tatales (tribunales, procesos, etc.). (...)”. La “reserva
de las arcas del Estado” supone problemas de finan-
43 CARAZO, R. A., “Los derechos económicos, sociales
ciación pero no implica el grado cero de vinculación y culturales”, en Memoria I Curso Interamericano de Sociedad
jurídica de los preceptos que consagran los derechos Civil y Derechos Humanos, San José (Costa Rica), Instituto
fundamentales sociales” 42. En esa misma línea Interamericano de Derechos Humanos, 1999. p.190.
44 ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS,
ONU, Pacto adoptado y abierto a la firma, ratificación y
41 BOLIVAR, L., “La justiciabilidad de los derechos adhesión por la Asamblea General en su resolución 2200 A
económicos, sociales y culturales: el papel de la sociedad (XXI), de 16 de diciembre de 1966. Entrada en vigor: 3 de enero
civil”, en Memoria I Curso Interamericano de Sociedad de 1976, de conformidad con el artículo 27.
Civil y Derechos Humanos, San José (Costa Rica), Instituto
Interamericano de Derechos Humanos, 1999, pp.57-58. 45 MARIÑO, F. M., “Avances jurídicos en la protección de
los derechos económicos, sociales y culturales dentro del marco
42 GOMES CANOTILHO, J.J., Teoría de la constitución, de las Naciones Unidas, Revista de Derechos y Libertades,
Bartolomé de la Casas, nº 31, Madrid, Dykinson, 2003, Madrid, Universidad Carlos III-Boletín Oficial del Estado,
pp. 40 ss... Para el autor el planteamiento de nuevos tópicos Año III, Febrero, nº6, 1998,p. 94. Vid el Protocolo Facultativo
ha servido, como fácilmente se deducirá, para destacar la de la Convención sobre los Derechos de las Personas con
permanente fragmentariedad, incompletud y apertura de Discapacidad (OP-CRPD, por su sigla en inglés) es una parte
los temas y problemas de la Constitución. Vid. del mismo de acuerdo a la Convención sobre los Derechos de las Personas
autor:“Metodología Fuzzy y Camaleones normativos, en la con Discapacidad. Fue adoptado el 13 de diciembre de 2006, y
problemática actual de los derechos económicos, sociales y entró en vigor al mismo tiempo que su padre Convención el 3
culturales “, en Derechos y libertades Madrid, Universidad de mayo de 2008. En diciembre 2012, tienen 91 signatarios y
Politécnica, año III, 1998, febrero nº 6, p. 45. 76 partes
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Jesús Esteban, Cárcar Benito Volumen 24, número 2. Julio-Diciembre 2014 | ESTUDIOS
individuos y los grupos portadores de estos intereses servicios “surgen de inmediato valores legales y va-
y valores. La garantía institucional, cuando el reco- lores económicos que no siempre coinciden con los
nocimiento jurídico de un derecho social se entiende clínicos”48.Por tanto, esta norma recogida expresa, a
como un mandato dirigido por el poder constituyente mi juicio, que el objeto radica actualmente en afirmar
al legislativo y la administración para que actúe posi- que la eficacia y la eficiencia de estas prestaciones no
tivamente. Según LORA, para el caso de vulneración deben medirse por el alcance de la protección, sino
a la protección de la salud cabría reprochar al legis- porque tales prestaciones sean disfrutadas por sus le-
lador y a la administración el que no proporcionen gítimos destinatarios y no por otros. Como toda nor-
cobertura sanitaria a todos los ciudadanos46. En ello, ma sanitaria debe tener en cuenta, nuestro marco ju-
consistiría, por tanto, el derecho que nos ocupa: en rídico de referencia parte del artículo 43 de la Cons-
un mandato o desafío lanzado a los poderes públicos titución, que reconoce el derecho a la protección de
para que se pongan manos a la obra y organicen la la salud y que confiere a la posterior y programática
asistencia sanitaria. configuración legal del mismo la respuesta que tal
compromiso de los poderes públicos traslada en tér-
Sin embargo, la CE no reconoce un derecho a las minos de derechos y obligaciones. De tan importante
prestaciones sanitarias, ya que en el propio artículo misión se ha ocupado el ordenamiento estatal desde
43.2 CE se establece un mandato a los poderes pú- la Ley 14/1986, de 25 de abril, General de Sanidad,
blicos para que organicen y tutelen la salud pública a así como la normativa autonómica.
través de medidas preventivas y de las prestaciones
y servicios que sean necesarios. Esto significa que el Tampoco se extiende a la posibilidad de exigir y
derecho a las prestaciones sanitarias es un derecho obtener una asistencia sanitaria conforme a las técni-
de configuración legal, como ocurres con todos los cas más avanzadas (Sentencia del Tribunal Superior
derechos de carácter prestacional reconocidos en la de Justicia de Navarra de 28 de junio de 2004 -JUR
Constitución. 1974), ni incluye las que no están disponibles en el
Sistema Nacional de Salud, ello aunque las dispon-
Estas consideraciones deben tenerse en cuenta en gan otros países más avanzados (Sentencia del Tribu-
el actual marco para enfrentar con amplitud de miras nal Supremo de 21 de diciembre de 1995 -RJ 3183-).
una de las consecuencias que en las situaciones de No obstante, preciso es tener presente la Sentencia
crisis se producen cuando se adoptan decisiones de de 12 de julio de 2001 del Tribunal de Justicia de
mantener o, incluso, incrementar el ámbito de los de- las Comunidades Europeas, por la que se admite el
rechos sociales: el endeudamiento47. Y ello, pues, es tratamiento en otro Estado miembro de la Unión Eu-
evidente que casi con generalidad, la traducción de ropea si el sistema sanitario público del Estado de
los derechos económicos y sociales tiene necesaria- origen no dispone de él, pero éste puede considerar-
mente un contenido económico, de gasto público, lo se habitual en el medio profesional internacional, o
que en situaciones de crisis desemboca usualmente no puede proporcionarlo en un plazo adecuado a las
en el necesario endeudamiento de los poderes públi- condiciones del paciente. En estos casos, el Estado
cos, pues los recursos económicos ordinarios no sue- que realiza la prestación tiene derecho al reembolso
len alcanzar, en esos momentos, a cubrir enteramente del país de residencia del ciudadano que ha recibido
las decisiones de gasto adoptadas. la prestación.
116
La cartera de servicios y su necesidad dentro de la configuración del derecho a la salud: configuración...
un camino legítimo”49. Es fundamental, por tanto, incremento acelerado del gasto sanitario, que se está
para el conjunto de los ciudadanos garantizar la sos- registrando sin que se adopten mejoras de eficiencia
tenibilidad del Sistema Nacional de Salud para lo que significativas ni tampoco cambios en el modelo de
hay que incluir reformas que puedan contribuir a su financiación ni en la forma de presupuestar, crónica-
fortalecimiento y renovado vigor. Por ello, no es de mente deficitaria.
extrañar que se hayan ido acumulando problemas y
desajustes que hacen necesario afrontar un proceso Otro factor a tener muy en cuenta en el panorama
de cambios para atender a los ciudadanos con calidad sanitario, es el de la cronicidad. Seguimos instalados
y con eficiencia. Por lo que es cierto que esa nece- en un modelo asistencial de agudos, pese a la impor-
sidad de renovación y de puesta al día del sistema tancia creciente de los pacientes crónicos. A este fin
sanitario público se ha convertido en urgente al coin- se hace necesario potenciar dispositivos ante pato-
cidir con serios problemas económicos, de deuda y logías complejas y que generan un importante gasto
morosidad, agudizados por la crisis económica y por farmacéutico. Asimismo, la cronicidad requiere me-
la caída de ingresos fiscales. didas de apoyo a los pacientes y a sus familias desde
una perspectiva sociosanitaria. Otro factor crucial a
Para dar respuesta a estas circunstancias es preci- tener presente es el del uso responsable de los recur-
so ser sensibles y consecuentes respecto de los diver- sos sanitarios por los pacientes.
sos factores que están incidiendo de modo severo en
la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario público. A mayor abundamiento de dichos factores, lo ha
Hay que señalar que la interpretación de cualquier ratificado el TC en su Auto 96/2011, de 21 de junio,
norma jurídica debe llevarse a cabo según el sentido FJ 6, en el que considera que la sostenibilidad del
propio de sus palabras, en relación con el contexto, sistema sanitario público impone a los poderes pú-
los antecedentes históricos y legislativos; y la reali- blicos la necesidad de adoptar medidas de racionali-
dad social del tiempo en que han de ser aplicadas, zación del gasto sanitario, “necesarias en una situa-
atendiendo fundamentalmente a su espíritu y finali- ción como la actual caracterizada por una exigente
dad. Así lo establece el Artículo 3 de nuestro Código reducción del gasto público”; concluyendo que con
Civil. esta situación “todas las Administraciones Públicas
con competencia en la materia tienen la obligación
La sostenibilidad del sistema sanitario es un pro- de distribuir equitativamente todos los recursos dis-
blema clásico que ahora se ha vuelto a poner de ac- ponibles a fin de garantizar la sostenibilidad del sis-
tualidad pública. Esto requiere hacer una análisis ob- tema público de salud... e instaurando políticas de
jetivo de la situación económica y sanitaria de Espa- contención del gasto...”.
ña y de sus Sistema Sanitario para saber que medidas
deberían de tomarse para garantizar la sostenibilidad Otra cosa sería si las medidas, que se aplican en
del mismo aumentando la eficiencia y disminuyendo el Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, tienen
el gasto sanitario sin afectar el resultado final de sa- como objetivo fundamental afrontar una reforma es-
lud de la población. tructural del Sistema Nacional de Salud dotándolo de
solvencia, viabilidad y cohesión para hacerlo sosteni-
Hay factores que requieren abordajes estructura- ble en el tiempo. Las preguntas serían: ¿Era preciso,
les y profundos para ser resueltos o al menos me- en el contexto socioeconómico, que dichas medidas
jorados como la estricta regulación y dimensionado se materialicen en un instrumento normativo de efec-
del sector público50. El primero de ellos, sin duda, es to inmediato? ¿Era esta una respuesta adecuada y
el cambio demográfico que está experimentando la sin demora, a las demandas internas de mejora de la
sociedad española, es decir, la mayor esperanza de equidad que exige la ciudadanía?, ¿Era una respuesta
vida es ciertamente un aspecto que debe valorarse de eficiente? ¿Era requerida para las necesidades exter-
modo positivo, pero que también obliga a dar res- nas de transparencia y viabilidad que exige la Unión
puesta a un mayor consumo sanitario, especialmente Europea? Por último cabría señalar, si en el mundo
durante los últimos años de la vida. En pocos años de la salud la relación coste-beneficio de las personas
habrá una población envejecida. El factor supone el no ha de medirse en criterios sólo económicos, sino
de bienestar, de calidad de vida, de todas las perso-
49 CORTINA A., “Sanidad sostenible”, El pais, opinión, nas, resulte su salud rentable o no para el conjunto de
4 de enero de 2012. la sociedad.
50 ARENAS DÍAZ, A., “Sostenibilidad en el sistema
sanitario español”, Sedisa siglo XXI, n º 242, 2011, p.4 ss. http://
www.sedisasigloxxi.com/spip.php?article242
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igualando en importancia ambos derechos, algo que los miembros de pleno derecho de una sociedad en la
no está contemplado en la CE. “El derecho a la salud se hallan integrados mediante un determinado víncu-
no está dentro de los artículos 15 a 30 de la Constitu- lo de pertenencia y al margen de un origen nacional,
ción, como el derecho a la integridad física (artículo racial o étnico, así como de cualquier otra condición
15), que son derechos de primer orden, especialmen- o circunstancia social58. El nuevo marco legal no pue-
te protegidos”. de cambiar la tendencia histórico-progresista para re-
gresar a realzar la idea (nunca abandonada y de clara
Por ello de modo particular, hay que hacer men- inspiración liberal) del sometimiento del ejercicio de
ción especial los ciudadanos extranjeros, el derecho determinados derechos a la condición administrativa
a la asistencia sanitaria pública a todos aquellos ex- de autorización de residencia legal”59
tranjeros que, sin derecho a cobertura asistencial y
sin recursos, se encuentren en nuestro territorio, de
conformidad con el procedimiento que reglamenta- 7. LA CARTERA DE SERVICIOS COMO
riamente se establezca. La normativa actual supone FORMA DE INTERVENCIÓN.
que además cualquier ampliación de la cobertura de
la asistencia sanitaria pública a quienes residan en el En una teoría convencional de la justicia distri-
ámbito territorial de una comunidad autónoma re- butiva, pueden derivarse dos bases de justificación.
quiere la acreditación por el interesado o interesada Una primera base de justificación para ello estriba en
de que reúne los requisitos exigidos, acreditación que otorgar el “derecho a la salud” por el hecho de que
debería verificarse en el correspondiente procedi- éste sea necesario para preservar la vida y desarro-
miento, de conformidad con las previsiones conteni- llar los planes vitales de los individuos. Una segunda
das en una norma. Esto es así, dado que una vez obte- justificación vería en la atención a la salud no el re-
nido el reconocimiento, y con el objeto de posibilitar sultado de un derecho, sino la consecuencia normal
que el acceso a la asistencia sanitaria, la cobertura sea de una forma de altruismo en la tradición kantiana-
en iguales condiciones de calidad y con la misma ex- postulando que, de no garantizarla, se produciría un
tensión que la reconocida a las personas aseguradas o atentado a los sentimientos más elementales de equi-
beneficiarias del Sistema Nacional de Salud. De este dad y solidaridad humana60. Estos dos pensamientos
modo, entiendo, que requiere poner de manifiesto la implican que en las intervenciones en los mercados
especial sensibilidad y solidaridad que se debería te- de salud se justificarían en la medida en que garan-
ner con todas aquellas personas que vienen en bus- tizaran a todos los individuos un acceso a la salud
ca de un mejor futuro, a través del reconocimiento suficiente para conservar la vida y desarrollar su po-
y garantía de uno de los derechos de la persona más tencial humano61. Sin embargo, para que las condi-
importantes, como es el derecho a la protección de la ciones mencionadas contribuyan a la cohesión social
salud. Esto es que a pesar del endurecimiento de los y al desarrollo humano de los países, la distribución
requisitos de empadronamiento para los extranjeros de los bienes, servicios y oportunidades el acceso a la
y el mayor control el Real Decreto contempla que salud no solo debe involucrar a un número crítico de
«los extranjeros no registrados ni autorizados como personas. Debe ser además equitativa. A estos efec-
residentes en España, recibirán asistencia sanitaria tos, como señalan LÓPEZ CASANOVAS y ORTÚN
de urgencia por enfermedad grave o accidente» has- RUBIO, en cuanto a la equidad parece que es la ga-
ta que reciban el alta médica, además de “asistencia rantía individual de las capacidades básicas lo que
al embarazo, parto y postparto”. No obstante, habrá justifican una intervención pública en el mercado sa-
una especial consideración para los menores de edad, nitario. Derivar el beneficio conjunto, en términos de
que podrán recibir asistencia sanitaria en las mismas
condiciones que los españoles.
58 MARTÍNEZ ABASCAL, V. A., Ciudadanía social
El problema, por tanto, radica, a mi juicio, en el y políticas inmigratorias de la Unión Europea, Granada,
Comares, 2005, pp. 32-41.
desarrollo del derecho a la asistencia sanitaria solida-
ria para ciudadanos carentes de recursos económicos. 59 AÑÓN ROIG M.J., “Limites de la universalidad;
derechos sociales de los inmigrantes” en Añón Roig, M.J.
Su desconocimiento puede suponer un importante re- (coord.) La universalidad de los derechos sociales: el reto de la
troceso en la construcción de una ciudadanía social, inmigración, PUV, 2004,pp. 9-26
entendida como categoría sociojurídica comprensiva 60 LE GRAND, J., Equity and choice. An Essay in Applied
de un estatuto legal y un estatus social reconocidos a Philosophy, Londres, Harper Collins, 1991 a, p.20 ss.
61 AARON, H. J., “ Equity in the Finance and Delivery of
Health care”, en Journal of Health Economics, nº 4, 1992, pp.
8 de abril de 2013. 467-471..
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La cartera de servicios y su necesidad dentro de la configuración del derecho a la salud: configuración...
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Jesús Esteban, Cárcar Benito Volumen 24, número 2. Julio-Diciembre 2014 | ESTUDIOS
terapéuticos, pues no en vano está en juego un valor que desarrollan actividades de relevancia pública en
supremo para ellos: su salud e integridad física, así el ámbito sanitario. Se establece un amplio catálogo,
como la de sus familiares y allegados. Lograrlo es por tanto, que debe ser accesible, compresible, en-
una exigencia del constitucional Estado Social y de tendible para los ciudadanos, dado su carácter de ins-
Derecho. El instrumento normativo, adecuado para trumento óptimo para el control de la gestión y utili-
desarrolla el Catálogo de Prestaciones sanitarias y zación de los recursos públicos en materia sanitaria.
sus correspondientes garantías, es la Cartera de Ser-
vicios Sanitarios, que dada la trascendencia de éste Respecto al segundo principio, la finalidad de
por cuanto fija los contenidos prestacionales sanita- las prestaciones sociales y su relación con los ser-
rios en cantidad y en calidad, respecto de los que el vicios que conforman la sanidad, la cartera debe ga-
ciudadano refleja un derecho subjetivo. rantizar el acceso universal a los bienes básicos de
toda la ciudadanía puesto que los mercados a pesar
Actualmente se demanda por la ciudadanía que de su capacidad para cubrir las necesidades básicas,
el Catálogo de Prestaciones incluido en la Cartera de generan situaciones de exclusión y marginación. En
Servicios sanitarios se dé con unos suficientes niveles este sentido, la dinámica del derecho a la salud y la
de eficiencia y de calidad técnica y administrativa, de cartera de servicios pasa por aclarar el esquema jurí-
fiabilidad científica, de seguridad y de prontitud. Es, dico de las relaciones de prestación, esto es, el poner
pues, deber de una buena Administración sanitaria y, de manifiesto que quien paga no es el Estado, sino
paralelamente, derecho del ciudadano, que aquélla que son unos ciudadanos que contribuyen a que otros
gestione los servicios y realice las prestaciones con ciudadanos reciban lo que en derecho les correspon-
una calidad suficiente, calidad no sólo en la vertiente den, según el principio de eficacia de los derechos
procedimental, sino también en la material. Se trata humanos. Desde esta nueva perspectiva, el proble-
de modernizar las estructuras, de ordenar y actuali- ma de la distribución se reconduce a una cuestión de
zarlos métodos diagnósticos y terapéuticos y, como reciprocidad concreta, los principios delimitados por
prestadora de servicios a los ciudadanos, de adop- RAWLS en el ámbito de su teoría de la justicia se
tar un modelo de progresiva calidad. El centro de perfilan también como principios reguladores de la
gravedad no está ya en la incorporación de nuevas llamada “well-ordered society”67 Como índica GO-
prestaciones, sino en mejorar la cobertura real de las MES CANOTILHO “los ciudadanos de carne y hue-
prestaciones existentes. La respuesta estaría conecta- so quieren saber por qué pagan y cual es el rostro del
da con los principios de eficacia y reciprocidad con- acreedor”68. No obstante, habría que matizar si la lu-
creta. En relación al principio de eficacia colocado cha contra la crisis económica con el fuerte endeuda-
en su fase ejecutiva, como dice PAREJO ALFONSO, miento que arrastrará en su pago, necesariamente en
los asuntos públicos suponen: a) una buena o mala los próximos años, obligará a más de una generación
ejecución; b) una estrecha imbricación entre organi- a atender, en concreto, estas obligaciones. Cualquier
zación y actividad; c) y especificidad de la gestión medida puede afectar en algún sentido negativo al
de un “programa legislativo administrativo” y de su mantenimiento de ciertas prestaciones a las que está-
criterio jurídico valorativo66. bamos acostumbrados en el marco del Estado Social
de Derecho o a algunas de las nuevas otorgadas.
Por último, hay un triple alcance en la cartera de
servicios, a mi juicio: incrementa y refuerza la trans-
parencia en la actividad pública –que se articula a 9. BIBLIOGRAFÍA
través de obligaciones de publicidad activa para la
Administración Sanitaria–, reconoce y garantiza el
acceso a la información –regulado como un derecho • AGUIRE VERGARA, N., ET ALIA de “La
de amplio ámbito subjetivo y objetivo– y establece crisis de la Sanidad Pública”, Análisis prospec-
las obligaciones de buena gestión (buen gobierno) tivo, Medical economics, nº 180, 8 de mazo de
que deben cumplir los responsables y gestores sa- 2013, p.29.
nitarios, así como las consecuencias jurídicas de-
rivadas de su incumplimiento –lo que se convierte
en una exigencia de responsabilidad para todos los 67 RAWLS, J., Uma teoria da justiça, Lisboa, 1983, p. 67
ss
66 PAREJO ALFONSO, L.,.”Los principios de la 68 GOMES CANOTILHO, J.J., “Metodología fuzzy
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