¿Por qué argumentar?
Para algunas personas, argumentar es sólo exponer sus
prejuicios bajo una nueva forma. Por eso piensan que los
argumentos son desagradables e inútiles. Una acepción de
«argumento» es «disputa» y a veces decimos que estamos
frente a argumentos cuando dos personas discuten o
intercambian argumentos. Pero una discusión no implica
necesariamente argumentar, dar un argumento significa ofrecer
un conjunto de razones o de pruebas en apoyo a una
conclusión. Aquí, un argumento no es simplemente la
afirmación de ciertas opiniones, ni se trata simplemente de una
disputa. Los argumentos son intentos de apoyar ciertas
opiniones con razones. En este sentido, los argumentos no son
inútiles, son, en efecto, esenciales.
x
El argumento es esencial, en primer lugar, porque es
una manera de tratar de informarse acerca de qué opiniones
son mejores que otras. Muchos afirmarán en contraposición,
que todos los puntos de vista son iguales, que las opiniones de
todos son válidas o que no hay por qué desechar lo que piensan
los demás. Sin embargo, no todas las opiniones se apoyan en
buenas razones, algunas tienen un sustento muy débil y, a
menudo, desconocemos cuál es cuál. En este sentido, un
argumento es un medio para indagar.
X
Argumentar es importante también por otra razón. Una vez que
hemos llegado a una conclusión bien sustentada en razones, la
explicamos y defendemos mediante argumentos. Un buen
argumento no es una mera reiteración de las conclusiones. En
su lugar, es mejor ofrecer razones y pruebas, de tal manera que
otras personas puedan formarse sus propias opiniones por sí
mismas. Si llegamos a la convicción de que está claro que
debemos cambiar la manera de criar y de servirnos de los
animales, por ejemplo, debemos usar argumentos para explicar
cómo llegamos a esa conclusión, de ese modo podremos
aventurarnos a convencer a otros. No es un error tener
opiniones. El error es no tener nada más.
Antecedentes: opinión de algunas personas
Para algunas personas, argumentar es
exponer prejuicios. [causa-efecto]
Por eso son desagradables e inútiles
Acepciones de «argumento»:
1. «disputa» o “discusión”
Pero “discusión” no implica necesariamente
argumentar [pro-contra]
2. dar un argumento significa ofrecer un
conjunto de razones o de pruebas en apoyo a
una conclusión.
- no es afirmación de opiniones,
- no es disputa. [negación-
afirmación]
3. Los argumentos son intentos de apoyar ciertas
opiniones con razones.
Tesis
En este sentido, los argumentos no son inútiles,
son, en efecto, esenciales.
Argumento 1
El argumento es esencial, en primer lugar,
porque es una manera de tratar de informarse
acerca de qué opiniones son mejores que otras.
Muchos afirmarán en contraposición, que
- todos los puntos de vista son iguales,
- las opiniones de todos son válidas o
- que no hay por qué desechar lo que
piensan los demás.[anticiparse a la refutac.]
- Sin embargo, no todas las opiniones se
apoyan en buenas razones, [pro-contra]
- algunas tienen un sustento muy débil y
- desconocemos cuál es cuál.
En este sentido, un argumento es un medio para
indagar. [conclusión preliminar]
Argumento 2
Argumentar es importante también por otra razón.
Una vez que hemos llegado a una conclusión
bien sustentada en razones, la explicamos y
defendemos mediante argumentos. [[neg-afir]
Un buen argumento no es una mera
reiteración de las conclusiones.
En su lugar, es mejor ofrecer razones y
pruebas, de tal manera que otras personas
puedan formarse sus propias opiniones por
sí mismas. [negación-afirmación]
Ejemplo: argumentar sobre la manera de criar y de
servirnos de los animales [ejemplo]
No es un error tener opiniones.

X
Las reglas que rigen los argumentos no son arbitrarias,
tienen un propósito específico: dar razones para sustentar las
opiniones. Pero los estudiantes (al igual que otras personas que
tienen que escribir) no siempre comprenden este propósito
cuando se les asigna la realización de un ensayo escrito basado
en argumentos; y si no se entiende la finalidad de una tarea, es
poco probable que se realice correctamente. Muchos
estudiantes, invitados a argumentar en favor de sus opiniones
respecto a determinada cuestión, transcriben elaboradas
afirmaciones, pero no ofrecen ninguna auténtica razón para
pensar que esas sus propias opiniones son las correctas.
Escriben un ensayo, pero no un ensayo basado en argumentos.
X
Los estudiantes llegan a la universidad esperando
encontrar la posibilidad de “repetir” lo que otros dicen. Pero
muchas materias, especialmente aquellas en las que se asignan
trabajos escritos, tienen un objetivo diferente. Estos cursos se
interesan por los fundamentos de nuestras creencias y exigen
que los estudiantes cuestionen sus propias certezas, y que
sometan a prueba y defiendan sus propios puntos de vista. Las
cuestiones que se discuten en los cursos de las universidades no
son tan claras y seguras como “cuáles son los poderes del
Estado”, los asuntos son más complejos: ¿debe tener el Poder
Judicial, realmente, la posibilidad del veto sobre los otros
poderes estatales? Pueden darse diferentes respuestas de
acuerdo a las razones y pruebas. En estos cursos, los
estudiantes tienen la tarea de aprender a pensar por sí mismos,
a formar sus propias opiniones de una manera responsable. La
capacidad para defender sus propias opiniones es una medida
de esta capacidad, y, por ello, los ensayos basados en
argumentos son tan importantes.
x
En efecto, para escribir un buen ensayo se debe usar
argumentos tanto como un medio para indagar, como para
explicar y defender las propias conclusiones. Debemos pensar
el trabajo examinando los argumentos de los posibles
contrincantes y luego debemos escribir el ensayo mismo
defendiendo nuestras propias conclusiones con argumentos y
valorando críticamente algunos de los argumentos de la parte
contraria.
El error es no tener nada más. [neg-afir]
Apoyo al argumento 2
Las reglas que rigen los argumentos
- no son arbitrarias,
- sino dan razones para sustentar las
opiniones. [neg-afir]
Pero los estudiantes no comprenden este propósito
- transcriben elaboradas afirmaciones,
- pero no ofrecen razones [neg-afir]
- escriben un ensayo, [neg-afir]
- pero no basado en argumentos
Los estudiantes llegan a la universidad esperando
encontrar la posibilidad de “repetir” lo que otros
dicen.
Pero muchas materias tienen un objetivo
diferente. [brinda razones]
1. Se interesan por los fundamentos de nuestras
creencias
- y exigen que los estudiantes cuestionen
sus propias certezas,
- y que sometan a prueba y defiendan sus
propios puntos de vista.
2. Las cuestiones
- no son tan claras y seguras: ej.
- son más complejas: ej.
3. Pueden darse diferentes respuestas de
acuerdo a las razones y pruebas.
4. En estos cursos, los estudiantes tienen la tarea
de aprender a pensar por sí mismos, a formar
sus propias opiniones de una manera
responsable.
La capacidad para defender sus propias
opiniones es una medida de esta capacidad, y,
por ello, los ensayos basados en argumentos son
tan importantes. [Esto no lo entiende ni
Marinkovich: mostrar esta redacción confusa y
corregir el texto con los estudiantes]
En efecto, para escribir un buen ensayo se debe
usar argumentos
como un medio para indagar,
para explicar y defender las propias
conclusiones. [resume cada argumento]
Procedimiento:
pensar examinando los argumentos de los
posibles contrincantes
escribir defendiendo nuestras propias
 conclusiones con argumentos y valorando
críticamente algunos de los argumentos de
la parte contraria.
[da la sensación de que se trata de un
cierre que brinda nueva información]

Además, mientras se analiza el texto, se debate sobre la importancia de la argumentación.

Sería bueno discutir también la orientación de este ensayo, un poco instruemtalista, medio
gringa, y poco orientada al consenso.
 ¿Por qué argumentar?

Rocío Arenas Carrillo1

Para algunas personas, argumentar es sólo exponer sus prejuicios bajo una
nueva forma. Por eso piensan que los argumentos son desagradables e inútiles. Una
acepción de «argumento» es «disputa» y a veces decimos que estamos frente a
argumentos cuando dos personas discuten o intercambian argumentos. Pero una
discusión no implica necesariamente argumentar, dar un argumento significa
ofrecer un conjunto de razones o de pruebas en apoyo a una conclusión. Aquí, un
argumento no es simplemente la afirmación de ciertas opiniones, ni se trata
simplemente de una disputa. Los argumentos son intentos de apoyar ciertas
opiniones con razones. En este sentido, los argumentos no son inútiles, son, en
efecto, esenciales.
El argumento es esencial, en primer lugar, porque es una manera de tratar
de informarse acerca de qué opiniones son mejores que otras. Muchos afirmarán en
contraposición, que todos los puntos de vista son iguales, que las opiniones de
todos son válidas o que no hay por qué desechar lo que piensan los demás. Sin
embargo, no todas las opiniones se apoyan en buenas razones, algunas tienen un
sustento muy débil y, a menudo, desconocemos cuál es cuál. En este sentido, un
argumento es un medio para indagar.
Argumentar es importante también por otra razón. Una vez que hemos
llegado a una conclusión bien sustentada en razones, la explicamos y defendemos
mediante argumentos. Un buen argumento no es una mera reiteración de las
conclusiones. En su lugar, es mejor ofrecer razones y pruebas, de tal manera que
otras personas puedan formarse sus propias opiniones por sí mismas. Si llegamos a
la convicción de que está claro que debemos cambiar la manera de criar y de
servirnos de los animales, por ejemplo, debemos usar argumentos para explicar
cómo llegamos a esa conclusión, de ese modo podremos aventurarnos a convencer
a otros. No es un error tener opiniones. El error es no tener nada más.
Las reglas que rigen los argumentos no son arbitrarias, tienen un propósito
específico: dar razones para sustentar las opiniones. Pero los estudiantes (al igual
que otras personas que tienen que escribir) no siempre comprenden este propósito
cuando se les asigna la realización de un ensayo escrito basado en argumentos; y si
no se entiende la finalidad de una tarea, es poco probable que se realice
correctamente. Muchos estudiantes, invitados a argumentar en favor de sus
opiniones respecto a determinada cuestión, transcriben elaboradas afirmaciones,
pero no ofrecen ninguna auténtica razón para pensar que esas sus propias opiniones
son las correctas. Escriben un ensayo, pero no un ensayo basado en argumentos.
Los estudiantes llegan a la universidad esperando encontrar la posibilidad
de “repetir” lo que otros dicen. Pero muchas materias, especialmente aquellas en
1
En: Noemágico. Un lenguaje hacia otro entendimiento. http://noemagico.blogia.com/2006/122801-de-la-
argumentacion.php 14 de marzo de 2008.
las que se asignan trabajos escritos, tienen un objetivo diferente. Estos cursos se
interesan por los fundamentos de nuestras creencias y exigen que los estudiantes
cuestionen sus propias certezas, y que sometan a prueba y defiendan sus propios
puntos de vista. Las cuestiones que se discuten en los cursos de las universidades
no son tan claras y seguras como “cuáles son los poderes del Estado”, los asuntos
son más complejos: ¿debe tener el Poder Judicial, realmente, la posibilidad del veto
sobre los otros poderes estatales? Pueden darse diferentes respuestas de acuerdo a
las razones y pruebas. En estos cursos, los estudiantes tienen la tarea de aprender a
pensar por sí mismos, a formar sus propias opiniones de una manera responsable.
La capacidad para defender sus propias opiniones es una medida de esta capacidad,
y, por ello, los ensayos basados en argumentos son tan importantes.
En efecto, para escribir un buen ensayo se debe usar argumentos tanto como
un medio para indagar, como para explicar y defender las propias conclusiones.
Debemos pensar el trabajo examinando los argumentos de los posibles
contrincantes y luego debemos escribir el ensayo mismo defendiendo nuestras
propias conclusiones con argumentos y valorando críticamente algunos de los
argumentos de la parte contraria.