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HíóV.- Tomo #V 2.° Trini, de 1915 Núm. 18

REVfeSTR CHILEMrV
^E

PÜBLKrKIÓM TRIMESTRAL

de la Sociedad Chilena de Historia y Geografía

SÜMRRIOr _

**'--■• Pégs.
Extracto de la obra intitulada «La Venida del Mesías en Gloria y
Majestad (Escrita por el abate Lacunza, ex -Jesuíta español.
. .

Año de 1808)........ \ -

.
6,
Gajardo R., Ismael—Sobre coordenadas geográficas de varios
puntos de Chile ,....,.....>...'... ;..„..,..... 82
Cuadra Gormaz, Guillermo. Origen de doscientas familias colo-
—

niales de Santiago (Conclusión).

. ..¡^.. 46
Latcham, Ricardo £.—Una estación paleolítica en Taltal 85
Varas Velísqufz, Miguel.—El Reglamento Constitucional de
A-18Í2. -Nuevos documentos... 1.. :.,<•. .r „,. 107
Ayala, L., A.—Influencias que ejercen' la altitud y el clima sobre
el desarrollo del organismo en los habitantes de Bolivia... 142
Vicuña Mackenna, Corto».—El territorio de Chile. El «utl possi-
* -

detlsdel810. ....,..-....,.. 148

Portales y la noticia dé la acción de Lircay... 159
Covarrubias, Luis— Monedas chilenas desde la Independencia
-. : hasta la fecha. ... :. .>...... "..:..."?.....-. 161
Discursos pronunciados en la inauguración del monumento al
--': \ General don Juan Mackenna. ...>.'.. 186
de Montessus de Ballore, Fernando. Bibliografía general de
—

temblores y terremotos, „.. 198

Blanco. Fombona, Rufino.—Bolívar y sus ¿mulos 814
Errázuriz, Crescente.—El cerco de Concepción... ..,....._.... 829
García Huidobro G, Elias— Un» casa colonial a mediados del
•—,;■. SlglO XVIIL: ...^.... 848
Koheooyen £roract'o¿^Sobre el roce a fuego' y la explotación libre '

de los bosques en el sur de Chile. 368

Santa~Cruz, Joaquín.—Las piedlas horadadas 893
Amunateoui Solar, Domingo.—Bosquejo histórico de 1a Literata»
Chilena (Continuación) -.. .-. 897
Vicuña Cifuentes, Julio: Mitos y supersticiones recogidos de
—

-
la tradición oral chilena (Continuación) ,. 412
Zenteno, /(wéii/naefo.—El General Zenteno. (ConUnuacimH. 460
Bibliografía.-. :....?..:.
....... .;........... .:.......: .¡. 468
Actas de la Sociedad Chilena de* Historia y Geografía.. ....... *,..... ..... 479

Imprenta Universitaria
Bandera 150
1915 &&■
 490 ACTAS DE
bajo, y en a su gran inte
atención
rés, se para la mejor diluci
acordó,
dación del tema, continuar su lectura
en la próxima sesión, e invitar a
ella al autor del trabajo, conjunta
mente con los señores Federico Al
bert, Maldonado y Francisco Fuen
tes, con el objeto de que contribu
yan con sus luces al mejor esclare
cimiento del problema propuesto
por el señor Echegoyen.
Aclararon algunos puntos de la
materia en debate los señores de
Montessus de Ballore, Walker Kno
che, Ricardo Latcham y el presbíte
ro don R. Ortiz prometió traer para
la sesión próxima algunos datos so
bre el arbolado de la provincia de
Coquimbo.
Se levantó la sesión. —
F. de
tessus de Balloee.
39.a Sesión, en 22 de Mayo de 1915
Se abrió la sesión a las 6 P.
SECCIÓN DE ANTROPOLOGÍA, ARQUEOLOGÍA
35.a Sesión, celebrada en 27 de
Marzo de 1915
Se abrió la sesión a las 6 P. M.,
en la Biblioteca Nacional. Presidió
don Fernando de Montessus de Ba
llore y asistieron los señores Luis
Riso Patrón, Max Uhle, R. Rengi
fo, Tomás Thayer Ojeda, Ricardo
E. Latcham, E. C. Eberhardt, Is
mael Gajardo Reyes, Enrique Mat
ta Vial, A. Knudsen, Gmo. M.
Wicks, R. Monserrat, Carlos E.
Krag P., Sta. Amelia Sauval, Alejan
dro Ayala L., José María Medina,
Víctor G. López G., Leotardo Ma
tus Z. y F. Figueroa y el secretario
don Ricardo E. Latcham.
Se leyó y aprobó el acta de la se
sión anterior.
En seguida se ofreció la palabra
al señor Ricardo E. Latcham para
que desarrollara su conferencia so
bre Vna estación paleolítica en Tal
tal. El conferencista presentó un
numeroso material de objetos de
piedra paleolíticos y neolíticos des
LA SOCIEDAD
en la Biblioteca Nacional, presidió
don Fernando de Montessus de Bal
lore y asistieron los señores Ramón
A. Laval, Ricardo E. Latcham, José
María Medina, Alejandro Ayala,
Walter Knoche, Carlos Sage, Cami
lo Roca, J. Vicente Salas, O. Sepúl-
da, Tomás Monsalve, Gmo. M.
Wicks, Emilio Zaier, D. Grillet, A.
Monsalve M., Stas. Celmira Zúñiga
Leonila M. Avalos I. En represen
tación de la Inspección de Bosques,
Pesca y Casa asistieron los señores
Carlos E. Nazarit y Alberto Veloso
R., inspector e ingeniero de dicha
Inspección.
Se leyó y aprobó el acta de la se
sión anterior.
El señor Horacio Echegoyen con
Mon tinuó y terminó la lectura de su in
teresante trabajo sobre el «Roce de
los bosques en el sur de Chile».
M.,
Y ETNOGRAFÍA.
cubiertos en Taltal por el señor Au
gusto Capdeville y que formaban
parte de una gran colección traída
a esta ciudad por dicho señor y ge
nerosamente obsequiada a personas
interesadas en los estudios arqueo
lógicos. Observó el señor Latcham,
que antes de fraccionarse había te
nido amplia oportunidad de estu
diar detenidamente toda la colec
ción y presentó dibujos de las más
importantes piezas que no estaban
a la vista de los concurrentes.
Desarrollando su tema, hizo ver
la enorme importancia que tenía
este descubrimiento pava la prehis
toria del país, puesto que era la pri
mera vez que, de una manera clara
y precisa, se había comprobado la
existencia en Chile de una época
paleolítica, lo que se había llegado
a dudar por la absoluta carencia de
datos hasta ese momento. Al pro
bar la presencia en el suelo chileno
de restos paleolíticos se echaba por
tierra la teoría corriente de que este
país se había poblado sólo en épo-
 ACTAS DE LA
ca relativamente reciente y la anti
güedad del hombre prehistórico de
Chile queda aumentada en miles
de años, sin poderse precisar fe
chas.
Por otra parte, este descubri
miento es de suma importancia,
pues demuestra que la localidad
fué ocupada continuamente por un
largo período; encontrándose en
ella una sucesión de culturas, per
fectamente representadas por nu
merosos objetos típicos, que co
menzando a principios de una épo
ca en que sólo se usaban artefactos
de piedra de tipo mousteriano, con
tinúa sin interrupción hasta la épo
ca neolítica. Cada época intermedia
está debidamente representada por
los instrumentos típicos correspon
dientes.
La ocupación de esa localidad pa
rece haberse terminado abrupta
mente a principios de la época neo
lítica, posiblemente porque se se
caron las vertientes o cursos de
agua en la vecindad inmediata, con
secuente a un cambio de clima.
Sin embargo, a una legua y me
dia más a) Sur, se encuentra otra
estación que principiando en la
época en que se terminó la ante
rior, continuó hasta la Conquista y
quizás después y no sería extraño
que los pobladores de la primera
se hayan transladado a la segunda
al encontrarse inhabitable su pri
mitiva morada.
El señor Latcham describió el
tipo de instrumento que caracteri
zaba cada una de las épocas en re
ferencia, ilustrándolos por medio
de grabados y fotografías y compa-
rándalos con los objetos hallados
en Taltal, dejó establecida la iden
tidad de tipo con los hallados en
otras partes del mundo.
Terminada la exposición del con
ferencista, siguió una animada dis
cusión sobre los puntos tratados,
en que tomaron parte los señores
Montessus de Ballore, Max Uhle,
Leotardo Matus y R. É. Latcham.
Se levantó la sesión a las 7.45
P. M.— Max Uhle. Ricardo E.
—
Latcham.
SOCIEDAD 491
36.a Sesión, celebrada en 27 de
Marzo de 1915
Se abrió la sesión a las 6.15 P. M.,
en la Biblioteca Nacional. Presidió
el señor Max Uhle y asistieron los
señores Julio Vicuña Cifuentes,
Walter Knoche, Abel A. Arellano
R., José Trigo, Washington Corde
ro B., José María Medina, Luis
Mendoza, Emilio E. Quevedo, Car
los Araníbar, Carlos A. Arellano,
G. Gibbs, Camilo Roca, Jacob B.
ísákowitz, Luis Leiva S., Ismael
Venegas, Guillermo M. Wicks, Mar
tín Gusinde, Leotardo Matus, José
Schmidt, Manuel M. Araya B., Víc
tor Araya, Jorge Guardia, Alejan
dro Ayala, Fernando Bruner Prieto.
Jorge Barros Bravo, Eduardo Espi
nosa, Alberto Contador, J.Vicente
Salas, etc., etc. y el secretario don
Ricardo E. Latcham.
Se leyó y aprobó el acta de la se
sión anterior.
El secretario hizo notar que el
primero que dio cuenta de un ha
llazgo de objetos paleolíticos en
Chile, fué el señor Uhle en una ex
posición que hizo el año pasado so
bre objetos de piedra paleolíticos
hallados por él on Constitución. Se
acordó rectificar el acta en ese sen
tido, aprobándose en lo demás.
El doctor don Alejandro Ayala
dictó su conferencia sobre las «In
fluencias que ejercen la altitud y el
clima sobre el desarrollo del orga
nismo en los habitantes de Boli
via», que ilustró con proyecciones.
En síntesis la conferencia versó so
bre los siguientes puntos:
1.° Después de haber demostra
do por medio de varias proyeccio
nes la topografía del territorio bo
liviano y demostrar que consta de
dos regiones bien distintas, una de
las cuales es el de la Meseta o Alti
plano boliviano qu¿, comenzando
en el límite con Chile concluye en
el último contrafuerte andino, con
poblaciones situadas a 3,000 y 5,000
metros sobre el nivel del mar y cu
yos habitantes autóctonos son los
Quechuas y Aimarás. La otra región
es la de las grandes llanuras y cuya
 492 ACTAS
altura es de 200 a 400 metros sobre
el nivel del mar con un suelo cer
cado de grandes ríos, cubierto de
una exuberante vegetación y po
blado por un sinnúmero de tribus
salvajes que viven de la caza y la
pesca y en lucha continua unas con
otras.
Hace notar igualmente las dife
rencias de cantidad de oxígeno, de
altitud, de luminosidad,etc,
tar enseguida de las modificacio
nes que como médico ha podido ob
servar en distintas regiones de su*
patria natal.
a) La estatura es tanto
cuanto más elevada es la
que viven, los quechuas y aimarás
de talla más pequeña viven entre
los 4,000 y 5,000 metros y su esta
tura es de 1.59 y los de mayor esta
tura viven a 2,800 metros alcanzan
do a tener 1.70. En las razas del
oriente boliviano los yuracarés que
viven a los pies del último contra
fuerte andino a 600 metros de altu
ra tienen 1.66, los chiquitanos que
viven a 300 metros tienen 1.66.3 y
los mójenos que están a 236 metros
alcanzan una estatura de 1.67.7.
b) Los quechuas y aimarás que
viven a más de 3,000 metros pre
sentan una notable desproporción
entre el largo excesivo de su tron
co y la pequenez de sus extremida
des, así como por la anchura de
sus espaldas y lo sobresaliente de
su pecho.
c) Los quechuas y aimarás tie
nen la nariz pequeña y encorvada
sobre el labio superior y los senos
maxilares y frontales muy desarro
llados.
d) El color de la piel es olivo
verdoso en las razas quechua y
aimará, mientras que es olivo ama
rillento en las tribus que pueblan
el oriente, fenómeno que explicó el
conferenciante atribuyendo que los
pobladores del altiplano por estar
expuestos a las vivas radiaciones
solares necesitan de este filtro ver
de que absorbe los rayos nocivos,
mientras que sería innecesario para
los habitantes de la otra región por
vivir a la sombra y bajo la protec
DE LA SOCIEDAD
ción de filtro verde constituido
un
por las de los
hojas entretejidas
bosques que habitan.
e) El número de glóbulos rojos
está también aumentado en los ha
bitantes del altiplano y este hecho
observado ya por Wolf, Miescher y
Egger es el factor que hace tal vez
experimentar ese malestar tan mo
lesto a los que llegan a las ciudades
para tra del altiplano, aun sin sufrir el so-
rocchi.
f) La natalidad es muy pequeña
en el altiplano y en cuanto a la vi
da de los niños, es un hecho obser
menor vado que cuando ellos proceden de
región en padres extranjeros, no llegan a vi
vir sino una vez que sus progenito
res han sufrido las modificaciones
impuestas por el nuevo medio de
vida, es tal, que pueden trasmitir
las al germen, es por esta razón
que los primeros hijos siempre se
les mueren.
g) La vista muy desarrollada en
los habitantes del altiplano así
como el oído en los del oriente.
h) La fisonomía con un sello de
tristeza en los del altiplano, alegre.
franca y expresiva en los del orien
te que se creen los superhombres.
Siguió a esto una interesante y
animada discusión sobre las cau
sas, efectos, síntomas, etc., de la
puna o soroche, en que tomaron
parte los señores Latcham, Knoche,
Matus, Uhle y Ayala.
Se levantó la sesión a las 7.45
P. M— M. Uhle.
37a. Sesión, celebrada en 1.° de
Mayo de 1915.
Se abrió la sesión a las 6.15 P. M.,
en la Biblioteca Nacional. Presidió
la sesión el Profesor Max Uhle y
asistieron los señores Agustín Cor-
tínez, Alberto Cumming, señorita
Amelia Sauval, Luis Páez, J. B. Isa-
kowitz, José María Medina, Enrique
Sanfuentes, A. Mackenna, Jorge
Barrios, R. E. Latcham, M. Coneje
ros, Martín Gusinde, C. Mandiola,
J. Vicente Salas, R. Rengifo, Tomás
Thayer Ojeda, M. Anríquez, E. Mat
ta Vial, Miguel Varas V., F. de
 ACTAS
Montessus de Ballore, W. Knoche
y Aureliano Oyarzún.
Se leyó y aprobó elacta de la se
sión anterior.
En seguida el señor presidente dio
lectura a su conferencia sobre sus
últimas investigaciones arqueológi
cas en Constitución, efectuadas du
rante los primeros meses del pre
sente año. Hizo una relación de las
cuevas o cavernas de la vecindad y
de su exploración de una de ellas;
en la que halló en las
capas que
forman el piso a la entrada de la
caverna, un esqueleto humano, cu
yo cráneo presentó durante la con
ferencia. Hizo una descripción de
los objetos de piedra hallados, cu
yos tipos eran paleolíticos. Éstos
objetos fueron también presentados
por el conferencista. No desarrolló
la última parte de su conferencia;
que versaba sobre las piedras de
tacitas, dejándola para la próxima
sesión, con el objeto de dar lugar a
los concurrentes una oportunidad
de examinar una colección de obje
tos de piedra de tipos paleolíticos,
presentada por el Dr. Aureliano
Oyarzún. Estos objetos formaban
parte de la colección que trajo de
Taltal el señor Augusto Capdeville
y que fué descrita por el señor Ri
cardo E. Latcham en una conferen
cia hace poco. Como el Dr. Oyarzún
se encontraba presente se le ofreció
la palabra, para que expusiera sus
ideas respecto estos objetos; lo que
hizo, dando cuenta de su descubri
miento, y haciendo notar la seme
janza que tenían con objetos simi
lares encontrados en Europa y otras
partes. Siguió una interesante dis
cusión en que tomaron parte los
señores Uhle, Oyarzún, Latcham,
Matus y otros.
Se levantó la sesión a las 7.35
P. M., quedando inscrito el señor
Uhle, para continuar la segunda
parte de su conferencia. Las pie
dras de tacitas.
Se levantó la sesión .Max.
—
Uhle. Ricardo E. Latcham.
—
DE LA SOCIEDAD 493
38.a Sesión, celebrada el 15
de Mayo de 1915
Se abrió la sesión a las 6 P. M.,
en la Biblioteca Nacional. Presidió
el señor Max Uhle y asistieron los
señores Ramón A. Laval, Alberto
Cumming. José María Medina, En
rique Matta V ial, Alejandro Ayala
L., Tomás Guevara, Enrique San-
fuentes Correa, Leotardo Matus, Is
mael Gajardo Reyes, Juan Luis Es
pejo, R. Rengifo, M. de la Cruz S.,
Señorita Amelia Sauval, Guillermo
M. Wicks, José Schmidt, Martín
Gusinde, Mauricio Cuq y el secreta
rio don Ricardo E. Latcham.
Se leyó y aprobó el acta de la se
sión anterior.
En seguida el señor Presidente
dictó su conferencia sobre Las pie
dras de tacitas.
Describió una de estas piedras
que había visitado en la vecindad de
Constitución y dio cuenta de las
excavaciones que llevó a cabo al
pie de ella donde se halló numero
sos objetos de piedra, y fragmentos
de alfarería, lo que presentó al exa
men de las personas asistentes. Ob
servó que el tipo de objeto corres
pondía a los hallados en la cueva
cerca del mismo lugar y cuya des
cripción había hecho en la sesión
anterior. Dedujo que la piedra de
tacitas que había encontrado, ser
vía sin duda alguna, como mortero,
en prueba de ello, presentó varias
piedras gastadas en sus bordes que
habían servido de manos, y que
fueron extraídas de la excavación
hecha en aquel sitio. Dijo que ha
bía examinado personalmente, mu
chas otras piedras de tacitas en di
versas partes del país, particular
mente, las de Quilpué, descritas por
el doctor Francisco Fonck y que to
das las que conocía habían eviden
temente cérvido al mismo propó
sito.
El señor Tomás Guevara dijo que
no estaba completamente de acuer
do con el conferencista, en cuando
existían un número de piedras con
excavaciones, que no se podían
atribuir a ese fin, y que por tradi-
 494 ACTAS DE
ción y por observación actual eran
consideradas sagradas y servían
como objetos de culto. Admitía que
algunas de ellas podrían haber ser
vido para morteros, pero a la vez
era preciso formar otra categoría,
que sería la de las piedras sagradas.
Alrededor de este tema siguió un
interesante debate en que tomaron
parte los señores Uhle, Guevara,
Latcham, Santa Cruz, Matus y San-
fuentes.
El señor Joaquín Santa Cruz
anunció que mandaría a la sección
un trabajo sobre las piedras horada
das usadas en el Perú como armas.
Quedó inscrito para la próxima
sesión, el señor Leotardo Matus,
con un trabajo intitulado Uso de la
piedra enChile, y prometió presen
tar los objetos sobre los cuales ver
sará su tema.
Por lo avanzado de la hora se le-
vantó la sesión a las 7.45 P. M.
•
Se levantó la sesión Max
.
—
Uhle. Ricardo E. Latcham.
—
39.a Sesión, en 12 de Junio de 1915
Se abrió la sesión a las 6 P. M.,
en la Biblioteca Nacional. Presidió
el Prof. Max. Uhle y asistieron los
señores Ramón A. Laval, Clemente
Barahona Vega, Gmo. M. Wicks,
Carlos Sage, A. Mettler, Luis Páez,
José María Medina, Agustín To-
rrealba Z., Alberto Cumming, Mar
tín Gusinde, Fernando de Montes
sus de Ballore, señora Charlotte
Uhle, señoritas Leonila Avalos y
SECCION FOLKLORE
20.a Sesión, en 30 de Marzo de 1915
Se abrió la sesión a las 6 P. M.,
en la Biblioteca Nacional. Presidió
don Ricardo E. Latcham y asistie
ron las siguientes personas: señora
S. Revillo de Sauniére, señorita Ma
tilde Sauniére, señores Emilio Errá
zuriz, Federico Carvallo, Baudilio
Ventura S., Heriberto Cifuentes,
LA SOCIEDAD
Celmira Zúñiga y el Secretario don
Ricardo E. Latcham.
Se leyó y aprobó el acta de la se
sión anterior.
Se dio lectura a una comunica
ción del señor Joaquín Santa Cruz,
en que este señor daba cuenta de
una obra que tiene en preparación,
relacionada con los orígenes y pro
bable derivación de los pueblos in
dígenas chilenos. La carta era un
breve resumen de las conclusiones
al respecto a que llegaba el autor.
El presidente hizo ver que fal
tando los datos y pruebas en que
se basaban las conclusiones, no se
pudo poner en discusión este tema,
y que convenía aguardar la presen
tación de la obra.
En seguida se dio lectura a un
corto trabajo sobre Piedras Hora
dadas, presentado por el mismo se
ñor Santa Cruz. A continuación el
señor Ricardo E. Latcham hizo un
breve resumen de los diferentes
usos comprobados que han tenido
esta clase de piedras en diferentes
partes del mundo, y al efecto pre
sentó a los concurrentes unos gra
bados que ilustraban estos empleos.
El Presidente agregó unos nuevos
datos y también presentó nuevos
grabados.
Siguió un interesante debate so
bre este tema, en que tomaron par
te el Presidente y los señores To-
rrealba, Latcham, Matus y otros.
Se levantó la sesión a las 7.45
P. M., quedando inscrito el señor
Leotardo Matus para la sesión pró
xima, con un trabajo sobre El uso
de la piedra en Chile.
Alcides Castro, Roberto Ochoa,
Carlos Sage, Guillermo M. Wicks,
Jorge O. Atria, Roberto García
Huidobro, José María Medina, José
Schmidt, Martín Gusinde, Clemente
Barahona, Fernando de Montessus
de Ballore y el secretario.
Se leyó y aprobó el acta de la se
sión anterior.
En seguida el secretario dio lec-