Está en la página 1de 16

PHICCIOrt D E S U a c n i C I O N . l'REGlOS DE SUSGlilCION.

NÜM. II —AÑO XVIII.


^ --------
aSu. rjuuumtx. TniMKSTIlK. a fio . 8SIIK6THE.

DUlECTOR-PRCriETAlJO, b. ABELARDO DE CARLOS.


Madrid.................. 35 perda*. 18 pesetas. 1 0pesetas. ruarlo Rico...................... 12 pesos fuertes. 7 pesos fuertes.
AUMINSTILACION, CARRETAS, 12, PUNCH*AL.
Provincia»............ 40 id. 20 id. 11 id. Filipinas.......................... 15 i.1. 8 id .
Extranjero........... 50 id. 20 id. k Méjico y Rio de la Hata. 15 id. 8 id.
Madrid, l ó de Enero do 1871. Eu Jas demás Amóricas fijan ol Riccio log Bros. Agonica.
k

SUMARIO.
Ti \ to.—Rivintag e tta tili, j»ir vi Miiri|iu'» ilo Valle-Agogni—Ni»- Irò* kt.i Iu -
dos, por D. Kiiw ltl ) Mnrtiin-x do Vvlutu. Uh.mi» Wngticr, |«ir 1». Ali-
0 *111" Pilla y U»(ii.— Una inirtUn (•paiiola, |mr D. Marnici « ‘.ni*
»ileo do In K | .iiiuln.—1.1 Kxiniio. Sr. Tenk-nto generai I* FavitnAn Intuì»-
to (iipuiili-A blogrillìixix), por il Sr. VImmiiiiIorio Ito Antrlnii*.—Mario-
logii czjmGoln, porD. M U. y II.—Lnuvietimi» ikil Ideal ; HI rclruto «lo
I..nini, |ror I». I’imri:rln Oiu» la Ctulcna.— '. \ m m l n i r u a f llM o r t t m (plenaria
A Maria), p or D. Ini pi ilo Madra/o, iiuvlùmlco d< la IlUtorla.—LibKm
mirro*, jior I). Umilio Hodln.—Problema* ilo AJedrez, jor 1». Il Cairn-
do.—A»iioclo*.

Untiitnni,—BetroL» ilei lutili neo generai Kr. D. Facilitilo Infante, por k*


Bau. Ferva y I’nrl#. —lUliaio ilei inoe-trn comixHitor M. Il liarilo
Wagner; do fotografia, por cl Sr. Parili. —lillà do Cui»*: Ataquo y di­
fenili ilo Mauzanillo«I loda Novicinbro ultimo; cn*iul» de U»Ugo lire-
«ondai, por lofi Sree. Pollloer y Ovejero.—Ultima la« ilei proevso Ila
mino: loia y tortale«! do Sani« Margarita, prUion del ox-marli*:nl, y
vinta do Calili», u- idemla ile la neflora ex-iiiiiriKnla ; jkji il Sr. Ln-
pou».—Beline arte»: l a f io r a d e l n it ri e n f i d o m m g o ile R t e u r r t a i o n ,
ciuulro do M. Armitage, por X . — U n t e c u e t t n d o r , estndloy ilibojo del
Sr. D. Mariano Portuny, y grabadodel Sr. IUco.—Zaragoxa r Ai pucU»di'
la calla do Fiandra ol 4 del minai, inomotiuis unica de la Incita, jmr In»
Sres. Domile y llicO.—Suceso» doMadlH on la inanima del a del ne,limi
(contro gtatedo», i«»r lo» Sm. Eulocu y Martellai.—Ajedm.—Madrid :
Entrula do Ina tropea cu ol saloli do siòiuiiea del Cougrcoo, par lo» «oliare»
FclUccr y Maritimi.

REVISTA GENERAL

SU M A RIO .

Interior .— La tranquilidad renace.— Confianza.— La guerra


cantonal.— Entrega del fuerte de Atalaya.— Proposiciones
liara la rendición de Cartagena.— La guerra carlista.— bnn-
té*en Albacete.— Esperanzas pora el porvenir.— Politica.—
Manifiesto del Poder Ejecutivo.— Disolución de las Córte?,
de su mi sa y de la Comisión de gobierno interior.— El nue­
vo Ayuntamiento y la nueva Diputación provincial.
E xterior .— Crisis ministerial en Francia.— ¡su t-rmino pro­
bable.— La salud del emperador Guillermo.— Boda del Du-
Íue de Edimburgo y de La .gran duquesa Alaria de Rusia.—
¡estas en San Pete t»burgo. — Motín de estudiantes en Ate­
nas.— Inconsecuencias políticas.— Ultimas noticias.

Los tristes sucesos de Zaragoza y do VaHadoliil,— do que


dimos cuenta al final de la Revista do nuestro último nú­
mero,— han sido los únicos que han venido ¿ turbar la g e ­
neral satisfacción, la pública alegría por cl desenlace in­
esperado y feliz do la peligrosa situación en que nos ha­
llábamos la noche del 2 al 3 do Enero.
Do todas partos ha recibido plácemes y felicitaciones
el I’odcr Ejecutivo; do todas partes se lo han enviado pro­
testas de adhesíou y fidelidad, tanto procedentes del ejér­
cito como do las autoridades civiles y populares.
El desarme do los voluntarios se verifica también sin
resistencia, como no sea pasiva, y ésta ha hecho indis­
pensables algunas visitas domiciliarias para recoger los
fusiles no entregados espontáneamente.
Pero el país se muestra seguro del porvenir, tranquilo
sobre su suerte futura: renacen el sosiego y la confianza;
sigue mejorando cu la Bolsa el estado de los fondos pú­
blicos; en una palabra, todo iudica que te avecina el tér- E1 general Infante, f el 27 de Diciembre último,
18 L A IL U S T R A C IO N E S T A Ñ O L A Y AM ER IC AN A. N.° I I

mino de los graves males que nos han afligido durante los Antrinesy el Marqués de Castrosema; D. José Teresa pero hemos querido aducirlo para que vean nuestros loc-
cerca de un año. García y el Duque de Veragua; D. Alejandro Llórente y tores que en todas partes cuecen habas.
La guerra cantonal está igualmente próxima ¿ su íiu : D. Augusto Ullon. 12 d e E n e r o d e 1871.
ayer mañana publicó el Gobierno, por Extraordinario , la La Diputación provincial ha sufrido la misma suerte o
o o
plausible noticia de haberse entregado el fuerte de Atala­ que el municipio, esto es, que ha sido disuelta también ;
ULTIMA» noticias.—Nos cabe la satisfacción de termi­
ya. ¡j consecuencia do los efectos producidos por la arti­ pero aun no conocemos su composición, y «filo sabemos
nar la presente Revista con una fausta nueva, que el Go­
llería ; y hoy da la Gaceta otra no menos satisfactoria: la quesera su vice-presidente el Sr. D. Manuel Alonso Mar­
bierno publicó ú las altas huras de la noche de ayer 12 por
do haberse presentado al General en jefe del ejército fren­ tínez.
Gaceta extraon!inaria : — la de la sumisión definitiva de
te á Cartagena un mensaje de la ciudad, compuesto de o
o o Cartagena.
individuos do la Cruz Roja y do tres de la guarnición,
Ocupados exclusivamente en nuestros propios asuntos, Sega» el telégriuna del general en jefe, en la Numancia
con un oficio del titulado ProRideuto do la Junta, pidien­
hace dias que no tratamos de los exteriores , los cuales no se habían fugado los ex-generales Contreras y Fcrrer, los
do se suspendiesen las hostilidades y el nombramiento de
han ofrecido, en la pasada época de tregna y de vacacio­ individuos de la Junta y los presidiarios: nuestra escua­
una comisión para deliberar sobre la rendición.
nes, muy vivo ni muy palpitante interés. dra los perseguía, haciendo fuego á aquel buque.
El general López Domínguez contestó que no admitía
El que lo ofrece mayor es la crisis ministerial ocurri­ El brigadier López Pinto ocupó el fuerte de San Julián,
dicho escrito por no reconocer ni deber tratar con la Jnn-
da en Francia de un modo verdaderamente inesperado. y el brigadier Carmona el de Galeras y la plaza.
1a ; y que les daba de plazo hasta las doce del dia de hoy,
Debatíase en la Asamblea Nacional sobre si el nombra­ Asi ha quedado terminada la rebelión más impía, más
en cuya hora, si no se entregaban sin condiciones, volve­
miento de los maires ó alcaldes precedería á la discusión cruel y más criminal de cuantas registran los anales de
ría a romper las hostilidades con mayor energía.
de la ley do ayuntamientos ; el Gabinete, por el órgano nuestras dolorosas discordias civiles.
Asi, no es mucho suponer que pronto oudearú de nuevo
de uno do sus principales individuos, se halda declarado La Gaceta publica hoy los nombres de las perBOuas nom­
la gloriosa bandera española en las murallas del pueblo
favorable á esta medida, cuando llegando á la votación, bradas para componer la nueva Diputación provincial do
que ha tenido la desgracia de servir de asilo durante más
la Cámara, por 268 votos contra 226, acordó lo contrario, Madrid.
de cinco meses á una multitud de foragidos y criminales.
o
sufriendo una completa derrota los gobernantes. Según habíamos adelantado, el Presidente es D. Ma­
o o Apresuráronse éstos á presentar su dimisión al mariscal nuel Alonso Martínez; y entre sus individuos figuran el
Respecto do la insurrección carlista, sólo podemos con­ Mac-Mahon, quien se tomó tiempo para resolver, mani­ Marqué« de Vi vcl, el Comiede la Romera, D. Dionisio
signar un acontecimiento adverso: la entrada de la par- festando más tarde qne, ausentes gran número do Diputa­ López Robería (Director de E l Diario Espaíiol), D. Igna­
tifia Sautés en Albacete nyer domingo.—La ciudad sólo dos en el momento de votar, debía someterse á una segun­ cio José Escobar, que lo es de La E p oca; D. Esteban
so defendió seis horas, y los facciosos la ocuparon breve da prueba el pensamiento ministerial. León y Medina, D. Antonio Romero Ortiz, D. José Luis
tiempo, en virtud de la proximidad de fuertes columnas En efecto, la Asamblea consta de más de 700 represen­ Retortillo, D. Antonio Mantilla ( Director-propietario de
procedentes de Valencia y do esta capital. tantes, y suman monos do 500 los que han tomado parte L a Política), D. Francisco Sil vela, D. José Fontagut Gar-
Pero en cnanto Cartagena se halle en nuestro poder; en en la votación del dia 8. gollo, D. Bcrnardiuo Fernandez de Velasen (hermano del
cuanto sea posible destinar las considerables fuerzas allí Va un despacho telegráfico del 10 anuncia que la dere­ Duque de Frías), D. Manuel María José do üaldo, D. Sa­
empleadas en la persecución de los sectarios de D. Car­ cha y el centro formularán hoy lunes una interpelación turnino Esteban Collanles (hijo del Director de E l Eco de
los; por último , en cnanto ingresen en el ejército los sol­ sóbrela crisis, con objeto do obtener un voto de confianza España), y otras personas no menos conocidas por sus
dados que produzca el llamamiento de los mozos do la en favor del ministerio Broglic; y tal será seguramente condiciones de inteligencia y posición social.
reserva del alio actual, so podrán activar las operaciones el desenlace de la cuestión. Ei. M auqués db V alle A legue.
militares con objeto de poner término á la lucha fratrici­ En el estado do la Cámara y de los partidos en la veci •
da, que no sólo ensangrienta nuestro suelo, sino quo ani­ na República, habría ofrecido inmensas dificultades un ——Tsares»-— ----- — —
quila y destruyo las fuerzas vitales do la nación. cambio de Gallineto, que hubiera despertado ambiciones
Historiemos ahora la marcha política del nuevo Go­ NUESTROS GRABADOS.
nial dormidas, apetitos no satisfechos, y producido peli­
bierno establecido á consecuencia fie los sucesos del .'5 do grosas desavenencias entre los diferentes círculos parla­
Enero, y cuyos primeros actos h o m o H consignado en la mentarios. EL EXCMO. HESOR T E N IE N T E CIEN KitA L II. FACUNDO IN F A N TE
revista anterior. (VénHO pág. 23.)
A la Francia 1c conviene man quo a nadie el reposo y la
El más importante y trascendental do todos lia sido el tranquilidad,ú fin do curar sus mal corradas heridas, ar­
manifiesto dirigido al país por el Podor Ejecutivo, con fo­ reglar completamente lu Hacienda, y hacer frente con KiCAíUio WAGNER. (Véase pág. 19.)
cha 8 del corriente. resolución y energía ú las tentativas demagógicas y revo­
Esto documento, cuya redacción se atribuyo al distin­ lucionarias.
guido OHCritor y académico D. Juan Valora, lia Humado o ATAQUE Y DEFENSA DE MANZANILLO, EN I.A 1HLA DE CURA.
o O
jnslumotilo la atención, siendo objeto do vivas polémicas Indudablemente la insurrección separatista de Cuba
y apasionadas discusiones. No es tan notable como so suponía el alivio experimen­
tado eri su salud por el Emperador do Alemania. está haciendo desesperados esfuerzos, dentro y fuera do
Profundamente conservador, aunque decididamente re­ la isla, en los postreros tiempo» de su existencia.
publicano, habla un lenguaje viril y patriótico, y solicita La Gaceta de Augsburgo, aunquo confirmando las no­
Once dias después del apresamiento del Virginios, el 10
el concurso de todos los partidos para dominar las dificul­ ticias satisfactorios dadas sobre el particular, deja entre­ de Noviembre del año próximo pusado, alguna« partida«
tades presentes. ver cierta inquietud sobro el resultado de la enfermedad
rcuuidns de insurrectos do la manigua, componiéndola
Su declaración principal es la de considerar subsistente quoalligo itl Rey ya lió muy cerca do ocho semanas. respetable fuerza do 2.600 á 3.000 hombres, al mando do
el Código do 1869. sin más alteración quo la de sustituir Según aquel periódico, « no so debe esperar una pronta
jefes caracterizados, Modesto Diaz y Viceuto García en­
su art. .'53,—el que establece la monarquía, — con olio en curación; y puede asegurarse,— añade, —quo 8. M. no so tro otros, intentaron apoderarse por sorpresa de la impor­
que se determino,»—por medio de Córte« ordinarias,— la hallará en disposición do abrir en persona el Parlamento, tante ciudad y puerto de Manzanillo, cu la coBta oriental
form a y modo con i/ttc luindc elegir al supremo magistrado quo ha do reunirse el 12 do Febrero.» do la isla.
de la Nación, marcarulo sus atribuciones y eligiendo al p ri­ Sin embargo, el Principe imperial se dispone á asistir en
San Peterabiirgo al matrimonio del Duquo do Edimbur­ Eran las oneo y media de la uocbe, y los mal aconseja­
mero que ha de ocupar tan alto puesto. dos rebeldes atacaron la población por tres puntos, lo-
La alocución es, en realidad, sólo el preámbulo del de­ go con la gran Duquesa María de Rusia, pensando dete­ graudo en los primeros momentos, merced a su audaz
creto que le sigue: lié aquí su enérgico y vigoroso texto : nerse después en Moscou algunos dios; todo lo cual prue­ acometida y á la sorpresa de los habitantes, rebasar la linea
«La pública opinión, sirviéndose del brazo providencial ba que no es muy alarmante el estado de su augusto exterior de torreones que la defiende; pero en lu plaza do
del ejército, ha disuelto las últimas Cortes Constitu­ padre. Armas se hicieron fuertes los voluntarios y los soldados
yentes. Gran número de príncipes, — entre ellos el Emperador
del ejército quo en aquélla se hallaban, y alentados por
nEl país ha prestado á este acto su mas unánime asen­ de Austria,— visitaran la capital del imperio moscovita su patriotismo y por el noble ejemplo que les daba su dig­
timiento: el Poder ejecutivo de la República acepta toda con el fausto motivo indicado antes ; siendo magnificas no jefe superior, el gobernador teniente coronel Sr. Gu­
su responsabilidad, y en su consecuencia decreta lo si­ las fiestas preparadas, asi en celebridad del regio enlace, tiérrez, después de uri fuego nutridísimo, quo duró cuatro
guiente : como en obsequio de los ilustres huéspedes.
horas, rechazaron por completo al enemigo, que no huyó,
»Articulo 1." Se declaran disueltas las Cortes Constitu­ Solo faltará la reina Victoria, quien, á pesar de los de­ á pesar de todo, sin intentar repetir en aquella ciudad las
yentes de 1873. seos de su hijo y de las instancias de la familia imperial
horrendas escenas de Bayamo, prendiendo fuego ú las
» Art. 2.® El Gobierno de la República convocará Cortes rusa, no se ha decidido á salir del retraimiento en que principales casas de comercio.
ordinarias tan luego como, satisfechas las necesidades del vive desde la muerte de su inolvidable esposo. Hallábase en el puerto el vapor do guerra español Con­
orden, pueda funcionar libremente el sufragio universal.» o de del Vcnadito y también los cañoneros ri ni id y Ericsson,
o o
Corolario natural é inseparable de esta medida es la En Atenas ha ocurrido últimamente un nuevo ejemplo, cuyos comandantes enviaron á tierra, en auxilio de los
disolución de la Comisión de gobierno interior del Congre­ entre tantos, de un hombre político que se ha visto obli­ bravos defensores de la integridad nacional, toda la fuer­
so y do ia mesa de Jas Córtes Constituyentes de 1873, de­ gado ú oponerse, como ministro, ú una ley quo había de­ za de que podían disponer.
cretada el 9 por el Ministro de la Gobemaciou; y el iiotn- fendido con su palabra y con su voto cuando era diputa­ Los españoles leales tuvieron seis muertos y 30 heridos,
bramiento de varios es-diputados para encargarse del do do Oposición. y las pérdidas de los insurrectos ascendieron ú 80 y 120
Palacio de la Representación nacional, cuya custodia Los estudiantes de aquella capital, invocando cierta me­ respectivamente.
quedaba úntes liada, en el trascurso de una legislatura á dida legislativa, procedente de la revolución de 1863, pero Uu grabado presentamos en la pág. 21, hecho sobre
otra, a la mesa y a la Comisión de gobierno mencionada«. cuya aplicación se había siempre retardado, »acaban de croquis que nos lia remitido un testigo presencial: repre­
Las personas elegidas para tan delicado cargo son don reclamar armas para constituir una guardia cívica es­ senta la escena en que, después del incendio de las oasas,
Manuel Becerra,D. Julián García Sau Miguel, D. Ventu­ pecial.» el cañoucro Ardid y los fuertes de la plaza rompieron el
ra Olavarrieta, D. Femando León y Castillo, D. Angel El Sr. Deligeorges, jefe del gobierno griego, soba nega­ fnego contra los rebeldes derrotados y fugitivos.
Mansi, D. Autonio Palau y D. Benito Pasaron, todos, ó la do á tal pretensión, considerada peligrosa por él para la
mayor parte, pertenecientes á la Cámara disnclta. tranquilidad pública. En vano los estudiantes han hecho
o rX HDEL rnOCESO CONTRA e l mariscal BAZAINE.— la
o o presento á Deligeorges qne ellos se limitaban á reivindi­ FORTALEZA DE SANTA MARGARITA Y LA CIUDAD DE CANNES.
Otros nombramientos de no menor importancia ha he­ car un derecho, «en favor del cual había pronunciado
cho el Gobierno : entre ellos el del nuevo Ayuntamiento tantos y tan elocuentes discursos.» En la tarde del 9 de Diciembre último, el consejo de
de Madrid, formado de personas pertenecientes á todos El Ministro una vez en el poder, renegó al diputado guerra que presidia el Duque de Aumale, dictó sentencia
los partidos que no están en armas. oposicionista; haciendo uso de la fuerza para dispersar á en el proi-eso instruido contra el desgraciado mariscal Ba­
Asi en él vemos figurar individualidades tan señaladas los postulantes. zaine, declarando á éste culpable de la capitulación de
como el Duque de Feman-Noñez y el Conde de Toreuo; No es éste el primer caso, ni será el último, do las incon­ Metz y del ejército cu campaña, sin haber hecho todo lo
D. Manuel Sil vela y D. Víctor Cardenal; el Vizconde do secuencias políticas, ni de los arrepentimientos tardíos; que le prescribían el deber y el lionor, y condenándole
N.° II L A ILU S TR A C IO N E S P A Ñ O L A Y A M E R IC A N A . 10

unánimemente, con arreglo á varios artículos del código montes iluminadas por los primeros rayos del albn,díce- gracias, ya para que los notables «le los partidos politá-
militar de Francia, á las últimas penas de degradación y los con palabra profética que ya lia resucitado Jesucristo; eos, exceptuando el cantonal y el carlista, como levantados
muerte. Pedro y Juan se levantan entonces, y siguen á la animosa en armas, deliberasen con seguridad é independencia so­
Después de notificada la sentencia ni procesado, todos Magdalena hasta el sepulcro de Jesús. bre la constitución del nuevo Gobierno.
los miembros del Consejo dirigieron al mariscal Mac- Este cuadro de Mr. Armitago lia sido recibido por los Madrid presentó enseguida el aspecto pintoresco, pero
Mahon, jefe del Estado, una solicitud de indulto, que tuvo inteligentes con extraordinario aplauso. imponente, de un vasto campameuto.
feliz éxito, pues fué conmutada la pena de muerte en la de En el patio del ministerio de la Gobernación se estable­
prisión por veinte nfios en una fortaleza del Estado, y la ció un fuerte reten de todas armas, y otros en los do Ha­
1 U N S E C U E S T R A D O R D , E S T U D I O D E D. M A R I A N O F O R T U N Y .
de degradación militar quedó exenta délas formalidades cienda, Fomento y Gracia y Justicia; el gobierno civil y
reglamentarias, aunque no de los efectos. Tenemos la satisfacción de ofrecer á nuestros suscrito- el ayuntamiento fueron ocupados por la Guardia civil y
Naturalmente, la seutenciadel consejo de guerra ha sido res otro artístico estudio del Sr. do Fortuny, cu el grabado «gentes de órden público, y las estaciones de los ferro­
apreciada de muy diferente manera por la prensa europea : do la pág. 25, y parcos debemos Her en elogios, tratándose carriles por fuerzas del ejército.
aplaudiéronla en Francia, aunque con pena, casi todos los de la obra de un artista de reputación europea, cuyo nom­ La Puerta del Sol fué intervenida militarmente desde las
periódicos Importantes, excepción liecha de los imperialis­ bre es una verdadera gloria de la España contemporánea. primeras boros de la mañana ; colocáronse centinelas en
tas, como ajustada á la rectitud y á la justicia; en Alema­ Un secuestrador es el modelo acabado, el tipo exacto do las bocacalles y en las aceras, quo no permitiau la reunión
nia se atendía á los debates sin gran interes y se recibía la esos repugnantes malhechores que áuu existen, principal­ de más de dos personas; circulaban sin cesar patrullas de
sentencia como suceso ya previsto; en Inglaterra, mientras mente en alguna de nuestras provincias meridionales, y cazadores y de infantería de marina, y en las entradas do
The Timen consideraba el fallo como justo, aunque extem­ quienes, para realizar sin peligro robos cuantiosos, se­ l is calles do Alcalá, Carrera de San Jerónimo, Mayor y
poráneo, The D a ily Telegraph creía que la vanidad fran­ cuestran á los individuos de familias pudientes, sometién­ Preciados se fijaron cañones de montaña con la dotación
cesa había sacrificado al mariscal Bazaine, pretendiendo doles á tratamientos crueles, hasta que aquél los satisfacen correspondiente.
probar que sólo por la traición pnedon ser derrotadas las el precio del rescate, casi siempre enorme. Parecidas precauciones se adoptaron en la Plaza Mayor,
legiones francesas, y The M orning-Post creía que el pro­ que fué ocupada por fuerzas de ingenieros y artillería ro
ceso, la condenación, el recurso de gracia y la conmuta­ dada, con cañones Ivrupp enfilando las calles «Ic Felipe I I i ,
S U ' E S O S D E ZARAGOZA.
ción de la pena, todo, en fin, balda sido una farsa arregla­ Ciudad-Rodrigo, Toledo y Atocha; en la de Santo Domin­
da de antemano. Si en casi toda la península fué recibida satisfactoria­ go, por algunas compañías de cazadores y Guardia civil y
Con motivo de la sentencia dictada contra el mariscal mente la inesperada noticia de los extraordinarios aconte­ várius piezas de artillería «le montaña; en la de Oriente,
Bazaine, se ha recordado en Francia que ninguno de los cimientos quo se desenvolvieron en Madrid, en breve tér­ por los regimientos de caballería de Villaviciosa y de Far-
condestables y mariscales condenados al último suplicio mino y con no escasa fortuna, en la mañana del 3 ; produ- nc8 ¡o ; en la de la Armería, por artillería rodada, y en la de
obtuvieron conmutación de la pena : el mariscal de Retz jéronse sangrientos conflictos en dos poblaciones impor­ Antón Martin, por un batallón de cazadores y más tropa
fué ajusticiado en Nántcs, en 1440; el conde de Saint Paul, tantes , Yalladolid y Zaragoza, á causa de la actitud que de línea, con otra sección de artillería y los cañones cor­
condestable de Francia, murió en el cadalso de la plaza de en ellas adoptaron los voluntarios de la república, decla­ respondientes.
(lléve, en 1473; el mariscal duque de Biron fué decapita­ rándose en abierta rebelión contra el nuevo Gobierno, ya Dispuesto todo con oportuna previsión para el caso des­
do en la Bastilla, en 1602; el duque de Montinorcncy su­ constituido. graciado de un combate en las calles, la Administración
bió al patíbulo en el capitolio de Tolosa, y el mariscal de Limitándonos tn este suelto á los sucesos ocurridos en militar estableció factorías en los Docks, Montaña «leí
Marillac cu la plaza de Gréve, en 1632 ; el barón do Luck- Zaragoza, parece que en la siempre heroica ciudad nl- Principe Pió y calle del Tribulote, fabricando on las pri­
nery el duque de Monchy perdieron su cabeza cu la gui­ guieu venia trabajando prèviamente en sentido cantona­ meras horas basta 25.000 panes para el consumo del ejér­
llotina de la revolución francesa, en 1704, y el infortunado lista, y que sólo faltaba un chispazo para que la mina pre­ cito de ocupación. •
mariscal Ney fué fusilado en Pnris eu Diciembre de 1816. parada reventase. Por último, las ambulancias de Sanidad militar estuvie­
Habiendo sido elegida la fortaleza de la isla de Santa Este chispazo fué la noticia de las ocurrencias de Ma­
ron preparadas con la anticipación conveniente, y la be­
Margarita para prisión de! mariscnl Bazaine, la traslación drid, y estalló al punto la rebelión, ulenazmentc provoca­ néfica asociación de la Cruz Roja estableció sus hospitales
de éstese verificó secretamente el 26 de Diciembre, último. d a — dice un parte oficial ¡«íblicado en la Gaceta del 5 — en todos los «listritos de la capital.
Llegado* al puerto de Antibes, embarcáronse en un va­ por la diputación y ayuntamiento.n Afortunadamente, la Sensatez y cordura del pueblo ma-
por del Estado, que les condujo on breves minutos á la En la misma noche del 3, la milicia insurrecta (com­
drilefio hizo inútiles todas estas precauciones : el órden no
isla do Santa Margarita, distanto de la costa dos kilóme­ puesta de siete batallones, do unas 1 . 0 0 0 plazas cadauno, so turbó dn lo más mínimo, y las tropas pudieron retirarse
tros. un escuadrón y 16 piezas de artillería ) empezó á reunirse
á sus cuartel«'« en la mañana del sigaíento din, después
Uno de nuestros grabados de la página 21 retrata la en varios puntos estratégicos designados do antemano, do publicado el bando del Capitán General para el desarmo
fortaleza de dicha isla, que lia de servir do prisión al ven­ tomó posiciones, ocupó algunos edificios públicos y de do la milicia
cido en Metz: está situada en el cabo del Esto de la isla, particulares, levantó en las calles numerosas barricadas, y Los grabodo* de la pág. 20 representan algunos deta­
frente ul cabo de Antibes; fué construida por Luis XI I I se preparó ni combato con mal empicada bizarría.
lles do I oh que dejarnos apuntados, y e l que npurecc en la
bajo los auspicios del cardenal Bicboliou, y es do impo­ KI capitali general do Aragón, Sr. D. Agustín de Bur­
j'ág. 32 figura el acto do ponotrar en ol salón do sosiouos
nente apariencia y solidez á toda prueba. gos, en vista del aspecto que prosontaba la ciudad, tomó
«leí Congreso las «los compañías do cazadores y Guardia
SitiaronIu los españoles en 1686, y también sufrió otro también posiciones, en la madrugada del 4, con bis tropas civil, pa-mdos los cinco minutos conoedidospor el Capitán
sitio en 1746 por fuerzas reunidas do austríacos y pia- do In guarnición y las columnas de los coronules Dolntrc y General á I o r señores Diputados para evacuar el Palacio do
monteses. Castillo, que se le hnbian incorporado en el mismo dia,
la Representación nacional.
Allí estuvo encerrado, en tiempo do Luis X IV , el miste­ reuniendo en suma unos 5.500 iiifnnt.es, 300 jinetes y 16 Constituido ya el nuevo Gobierno, con el nombre do
rioso personnjo conocida en la historia con el sobrenom­ piezas de artillería Krttpp. Poder ejecutivo de la República española, deseamos viva­
bre de Máscara t i c hierro, en un reducido aposento, quo A las doce y media de la tarde, habiendo resultado in­
mente que el cielo le conceda el acierto necesario para re­
todavía existe, cuyas paredes tienen un espesor de 13 pies fructuosos todos los medios de conciliación , una batería,
solver los graves problemas pondientes, y dar á esta po­
y cuya única y pequefia ventana está resguardada con tri­ situada en la antigua puerta de Santa Engracia, rompió bre pntrin, tan noble y tan desgraciada, paz, órden y ven­
ple reja de gruesas barras de hierro. un enérgico fuego, contra la barricada de la calle de C¡-
tura.
En la época del primer imperio fué también encerrado neja, defendida por los insurrectos y apoyada desde los E usebio M artínez de V elasco .
en el fuerte de Santa Margarita un hermano del padre de] balcones de las casas.
actual duque de Broglie, que era á la sazón arzobispo de Tal fué la señal del combate, que se generalizó bien
Gante y perseguido cruelmente por el gobierno de Napo­ pronto : los voluntarios se defendieron bizarramente, pero
RICARDO WAGMER.
león I. las tropas, atacando casi siempre á la bayoneta, tomaron
Ultimamente lia Bervido de prisión á varios jefes y sol­ una á una todas las barricadas, y conquistaron todas las A UN CA3ALLEP.0 ESPAÑOL.
dados de la insurrección de Argelia. posiciones de los rebeldes. Va teníamos dispuestos los materiales necesarios para
L a isla de Santa Margarita pertenece al grupo de las Estos, por fin , al llfgnr la noche, y bailándose ya ven­ emprender resueltamente la obra que prometimos en nues­
islas Lerins, y en la inmediata de Saint-Ilouornt, compra­ cidos , se retiraron por completo , y abandonaron fusiles, tro artículo anterior ; ya habíamos hecho examen de con­
da recientemente por un capitalista de Inglaterra,se ven cañones y demas efectos militares. ciencia, nos habíamos confesado y comulgado por lo que
las minas del famoso monasterio de Lerins, el más anti­ Seis horas duró la sangrienta jornada, con pérdidas do- pudiera tronar; baldamos tomado, en fin, las precaucio­
guo de la Galia. Iorosns por ambas partes, según indica el despacho oficial nes convenientes para que la pavorosa melodía infinita nos
También publicamos en la misma púg. 21 una vista do publicado en la Gaceta del 10. cogiese preparados, cuando lié aquí que la activa empresa
la pequefia pintoresca ciudad de Canncs, punto de resi­ El grabado que figura en la pág. 28, quo lia sido hecho de L a I l u s t r a c i ó n , empeñada, cual corresponde á sub
dencia que ha elegido la maríscala Bazaine para estar al sobre un croquis de testigo presencial, indica el aspecto nobles propósitos, en dar á conocer á sus numerosos lec­
cuidado do su esposo. que ofrecía la calle de Flaudro algunoB momentos antes tores todas las eminencias artísticas, encomienda á nues­
de comenzar la pelea, y sentimos no haber recibido en tras escasas fuerzas la biografía del ogro del porvenir, de
«LA HORA DEL ALDA EN EL DOMINGO PE RESURRECCION», tiempo oportuno otro cróquis que nos lia enviado el señor Ricardo Waguer, cuyo retrato aparece eu otro lugar do
CUADRO DE M. ARMITAGK. D. Gerardo Cubero, representando la toma déla barricada este número.
El hermoso lienzo que copia nuestro grabndo de la pá- de la calle do Cincja. En verdad «¡ue la galería art¡ático-tnusical «le L a I lus ­
gina24 osuna buena obra de arte, que acaba do presentar Para concluir, diremos con el digno y enérgico general t r a c i ó n exigía la publicación de la rcra efigies del gran
al juicio del público, en los salones de la Royal Academy Burgos: ¡tiempo es ya de que acaben para siempre esas maestro alcuiau. Sólo éste faltaba al lado de Verdi y tíou-
de Londres, el distinguido pintor Mr. Annilage, miembro horribles colisiones, que llenan de luto la patria y de ig ­ nod, cuyos magníficos retratos se han publicado anterior­
de aquella ilustrada corporación. nominia la historia! mente, para completar la trinidad musical hodierna, la
El asunto está fundado en los primeros versículos del eminente trinidad ¡talo-galo-germánica que cu la actuali­
S U C E S O S P O L ÍT IC O S D E M A D R I D , E N L A M A D R U G A D A dad rige los destinos de estos grandes pueblos.
capitulo xx del Evangelio de San Juan : María Magdalena, D E L 3 DEL. ACTU AL.
después de haber visitado el sepulcro del Salvador, marcha Ahí tiene V. á W agu er; ahí le tiene V., vive el cielo,
en busca de Pedro y Juan, los discípulos más queridos del Aunque cu la Revista general del número anterior nos insigne Calntllero español. Ahí le tenéis también todos v«>s-
Divino Maestro. ocupamos extensamente de los trascendentales sucesos po­ otros, los que seguramente imaginábala ver eu el célebre
Era la noche del sábado, y los baila sentados en un rin­ líticos ocurridos en esta capital en la mañana del 3 del maestro un ser fantástico, una aparición de ultra-tumba,
cón de una humilde cabaña, entristecidos y llorosos, y corriente, de nuevo los recordamos hoy cou el justo mo­ visiou diabólica rodeada de atributos eu.iemouiadys, des­
como si dudasen aún de la palabra de aquel que les bahía tivo de presentar los grabados de las páginas 21* y 32. pidiendo llamaradas de fuego, mezcla híbrida de Mefistó-
prometido resucitar de entre los muertos ni tercero día, y Evacuado el Congreso por los señores Diputados y ocu­ fcles, Bertram y Samiel.
estar con su Iglesia hasta la consumación de los siglos. pado por tropas del ejército, el capitali general del distri­ Ricardo W aguer ¡olí dolor! c-s un hombre de carne y
María Magdalena les dirige palabras de esperanza, y to, Sr. Pavia, adoptó iumediatamente las disposiciones ne­ Imeso , un hombre como otro cualquiera, un hombre su­
como en aquel momeuto apareciesen las cumbres de los cesarias al mantenimiento del orden , ya para evitar dcs- jeto, como los demás, á todas las coutingeuciaa do la vi-
20 L A IL U S T R A C IO N E S P A Ñ O L A V A M E R IC A N A . N." It

IlIfA IlD O WAGNER.

da, y cuyo defecto capital consistiría en haberse empeña­ positor aloman ; los que ayer agotaban el espíritu en sola ópera de Wagner, en España hay seres tan extraños,
do, pese á quien pese, en decir á los músicos grandes ver­ chanzonetas y burlas contra 6 us teorías; los que presumían tan omniscientes, que ex-catcdra y con la osadía más in-
dades, á riesgo do iucurrir, como la masa común de los que los fundamentos del drama musical de W aguer des­ ¡ creíble vilipendian al maestro aletnan, ceban por tierra (?)
mortales, en la* más extrañas extravagancias, en más do cansaban sobre movediza arena; los que fiaban, en tín, en sus doctrinos (que no conocen), y se ufanan, so muestran
una falsedad y en no pocas contradicciones. los años para ver completamente destruida la obra del orgnllosoa por haber combatido al que bautizan con los
Objeto de admiración para los unos, do burla para porvenir, se han visto obligados á fijar su atención eu el más saudios epítetos, atribuyéndole ideas que jamas lia
otros y de consideraciou y respeto para la generalidad, revolucionario del arte, cuyo nombre inspira hoy el ma­ sustentado y sistemas musicales de los que nunca hizo uso.
W agner ha conseguido lo que sólo á los artistas excepcio­ yor respeto en el mundo musical europeo. Pero dejemos á estos desdichados seguir entregados á su
nales es dado conseguir: una reputación incontestaldc y De aquí han surgido magnificas discusiones, admirables terrible propaganda. Cuando las operas de W agner seoi-
una popularidad grandísima en Alemania, su patria. Sus criticas que han desmenuzado todos los argumentos esté­ : gnu en Madrid, habrá que ver de parte de quién está el pú­
doctrinas, expuestas por el mismo con un vigor y una va­ ticos de Wagner, tratando al gran maestro con la conside­ blico, y entonces hablaremos. Entretanto, Caballero repañol
lentía que hacen ver bien á las claras convicciones arrai­ ración que so merece. Apologistas ardientes le han apoya­ y muy querido amigo, loa V. los siguientes apuntos bio­
gadas hasta el delirio, han sido objeto de critica en el d o ; detractores llenos de fe y de talento hanle combatido gráficos de aquel que tau admirablemente lia sabido us­
mundo musical entero. con lucidez é ingenio, y de esta noble contienda ,eu la qne, ted juzgar. A V. se los dedicamos, y en medio del trabajo,
Poeta, músico y literato musical, el maestro de Leipzig como siempre sucede, nadie se ha daJo por vencido, lian de la verdadera angustia que su redacción nos cuesta , cá­
ha sembrado en Europa la semilla de la discusión, reco­ podido, no obstante, apreciarse los provechosos resulta­ benos la satisfacción, algo vanidosa por cierto, de ofrecerle
giendo bien pronto sazonados frutos, quo más de una vez dos ; que allí donde 6 e esclarece una verdad ó se destruye una novedad, una verdadera novedad, si nuestra memoria
kau debido herir gravemente al audaz roformador. uu yerro, siempre hay beneficio para el arte. no miente.
E l tiempo no ha pasado eu balde para el célebre com­ Solameute en España, país donde no se conoce ni una Picor do Wagner, hijo de un modesto oficial de policio,
N.° Iï L A IL U S T R A C IO N E S P A Ñ O L A V A M E R IC A N A 21

ISLA DF. CURA.— A taque y pefexsa ni: Manzanillo, el 10 de X owkmiire último.— (Croquis de testigo presencial.)

1. Fuerte Gerona.— 2. Fuerte Zaragoza.— 3. Cusas incendiadas.— *. Manglar y camino fie Hnyamo.— 5. Ultimas posiciones (le los insurrectos.— 6. Vapor ilc guerra
Conde del Venadito.— 7. Cañonero Crienron. — 8 . Cañonero A rdid, haciendo fuego sobre los insurrectos fugitivos.

F R A N C IA . — Ú i .T I M A FA S E D E L PKOCESO B a ZA IN E .

isla y fortaleza de Santa Margarita, prisión del cx-manscal.

Cannes , residencia de la ex-niaríscala.


22 L A ILU STR A C IO N E S PA Ñ O LA Y A M E R IC A N A . N.° II

nació en Leipzig el 22 <le Mayo de 1813 y quedó huérfano Dos años, de 1840 á 1842, permaneció Wagner en París, mirador del maestro, levantóle el destierro en 1864, épo­
de padre ¡i los seis meses de su nacimiento. Casóse al poco pobre, lleno de privaciones, arreglando para piano las ca fiel advenimiento al trono de este Principe bajo el nom­
tiempo su madro en segundas nupcias con el cómico Luis óperas más en boga ( 1 ), y obligado á humillarse á las ma­ bre do Luis II, nombrándole su primer cappel-mristcr
Geyer. que era al mismo tiempo pintor. Contratado Geycr yores exigencias. Scldcsinger, editor de música y propie­ (maestro do capilla), y dándolo habitación en el m il pa­
para el teatro do Oreado, so estableció en cata ciudad con tario do la Gaceta Musical, ofreció á Wagner las colum­ lacio.
toda su familia y dedicó á su hijastro al estudio de la pin­ nas de este periódico, y en él aparecieron los primeros ar­ Las cábalas de la córte hicieron velvcr á Suiza á W a ­
tura. tículos del célebre reformador, que llamaron la atención gner ; pero más tarde volvió ú los favores del Rey de Ba-
No había cumplido W aguer siete altos, cuando su pa­ poderosamente, sin amenguar por esto las torturas mora­ vicra, quo desdo entóneos acá no lo lia abandonado.
drastro murió, dejándolo huérfano por segunda vez. El les y la miseria que afligían al pobre artista. La última ópera del eminente maestro, Los Maestros can­
niño arrojó bien pronto los pinceles y se presentó resuelta­ A fines do 1842, y hallándose en el colmo de la miseria, tores de Nuremberg (M eistcrsinger), nc estrenó en el Teatro
mente á un reputado músico,« quien suplicó le enseñara recibe W agner la noticia de que su Rienzi se va á poner Real de Munich, el 21 do Junio de 1868. Durante la prime­
los primeros rudimentos del divino arte. Hizolo asi el en escena en Dresde. Sin recursos para emprender el via­ ra representación Wagner se hallaba en el palco regio á la
maestro, y dos años más larde el jóven W agu er sabía lo je, vende por 500 francos, á la administración de la Ope­ derecha do Luis I I ; el público victoreó largo rato al mo­
bastante para tocar en el piano con precisión y colorido la ra, el poema del litigue fantasma, cuya propiedad se reser­ narca y á su artista favorito.
difícil overtura del Freyschiitz de Wcber, aunque sólo la va cu Alemania, y vuela á tyresdc para asistir en persona Últimamente W agner aspira á la creación de un teatro
había oido una vez en el teatro do Leipzig. á los ensayos del Rienzi. nacional alemnn, y su magnífica obra, K in g o f N ib i /ungen
Eu esta época W aguer interrumpió bruscamente las L a célebre artista señora Scbrmder-Devricnt es un po­ (E l anillo de los Nibctungen) , tetralogía sagrada, escrita
lecciones de piano y se apasionó por la poesía. Este apasio­ deroso concurso para W agn er; represéntase al fin la ópera, por él mismo, y do la «pie lia terminado t:es partes, titula­
namiento dió por resultado una terrible tragedia (o rnost y su éxito es tari grande, que el compositor es nombrado das Rheingold, L a juventud de Siegfricd y L a muerte de
terrible t r a g e d y , dice un biógrafo inglés), especie de com­ inmediatamente maestro de capilla del Rey do Sajonia. Siegfried, lia causado verdadero delirio en Baviera y en
binación do las obras do Shakspr are, K in g Lea r y Uanilet, Enardecido con el éxito de su R ien zi, W agner aprové­ todas las capitales de Alemania donde lia sido ejecutada.
en la cual perdían la vida nada tnénos que 42 personajes, chala influencia que le presta su nuevo cargo para poner Hemos terminado. Mal hilvanados é incompletos tal
y que por fortuna no llegó árepresentarse. en música el Duque fantasma (D e r flitgende JIollandá•), vez, abi tiene V., querido Caballero espaTiol, los apuntes
Una sinfonía de Beethoven, que entusiasmó ú Wagner, queso estrena en Dresde el 2 de Enero de 1843. Esta obra biográficos ded célebre fantasma del porvenir. Léalos us­
modificó sus inclinaciones, y desde aquel momento juró se representa en varios teatros de Alemania y el nombre ted con benevolencia, nada más le pedimos.
que sería músico. Dedicóse al estudio de la armonía y la de W agner crece por momentos. ¿Cuál es el puesto que la historia del arte musical asig­
composición bajo la dirección de W einlig, profesor do la Léjos de descansar después de tantas fatigas , Wagner nará mañana á Ricardo Wagner? No lo sabemos; pero, sea
escuela de Santo Tomas de Leipzig, y asistió al mismo no descansó, y dos años más tarde, el 21 de Octubre de cual fuere, no hayquo dudarlo, el porvenir será con W a ­
tiempo con afari á las aulas de la Universidad, donde es­ 1815, Be estrenaba en el teatro de Dresde el Tannhaüser, gner más justo que el pasado y tan respetuoso como el pre­
tudió con gran aprovechamiento y especial predilección los ópera en tres actos, letra y música del célebre compositor. sente.
antiguos clásicos, la filosofía, la estética, la historia ro­ El entusiasmo que esta obra produjo en el público fué tal, En cuanto á nuestra pobre opinión individual, admira­
mana y la mitología gentílica. que después «le haber llamado .i W agner a la escena al final mos sin reservas al gran maestro. ¡Cómo no admirarlo en
A estos estudios, continuados después concienzudamen­ de todos losados, los músicos de la orquesta, seguidos de estos tiempos eu quo el arte musical, anonadado y empe­
te, dice él mismo que debe su facilidad para escribir los una multitud imponente, se dirigieron con antorchas á la queñecido, espira por falta de servidores dignos de la
libretos do sus principales óperas. casa quo habitaba el maestro y ejecutaron bajo sus balco­ grandeza quo lia llegado á alcanzar! ¡Cómo no admirarlo
El primer ensayo musical de Wagner fué una overtura, nes una gran serenata, compuesta de piezas escogidas de cuando la figura del porvenir se lia impuesto á las nacio­
ejecutada en Leipzig en los conciertos de Gcwandhaus ; las óperas do Wagner y do Meyerbeer. nes más inteligentes fie Europa! ¿Qué loco, qué visiona­
poco tiempo después, á la edad do 19 años, escribió una Después del éxito colosal del Tannhaüser, Wagner com­ rio os ose que asi excita la atención general? ¡ Loco, vi­
sinfonía, que obtuvo éxito, pero cuyos defectos hicieron puso una nueva ópera, el Lohengrin, que ibaá ponerse cu sionario! Dctal tacharon á Montevcrde porque descubrió
comprender al compositor la necesidad do adquirir cono­ escena cuando estalló en Alemania la revolución de 1848. el trémolo; como tal trataron á Gluek célebres escritores;
cimientos completos del contrapunto y la fuga. Wagner, cuyas opiniones republicanas oran muy conoci­ con esos nombres designaron los franceses ni gigantesco
Estos trabajos, dice Clémoat, ocuparon á W agner du­ das, tomó una parte muy activa en aquídlos sucesos, ba­ Beethoven.
rante el año 1834, en quo tuvo que trasladar su residencia tiéndose en las callea y defendiendo borricadas con el ma­ Wagner... Leipzig....¿Quién sabe?
á Wftrzburgo, cuyo clima, más benigno quo el do Leipzig, yor ardimiento. Sofocada la insurrección, tuvo quo huir A ntonio P eña y GoRi .
fué beneficioso para la delicada salud del jóven compositor. herido á Suiza, refugiándose en Zurich, donde permaneció
Completamente restablecido á fines del citado año, Wn- desterrado durante Heisaños. --------------- -= -* x x # c * -« = = - ----------------
gnor fué nombrado director do orquesta del teatro de Mag- Lislz, íntimo amigo do W agner, y uno do los apóstoles
dehurgo, donde escribió su primera ópera, titulada D ie fie su inúsioa (ol celebérrimo pianista observó más tarde UNA POETISA ESPAÑOLA.
Fem (L o e Hadas), cuyo asunto está tomado de una novo- igual conducta cotí Bcrlioz, ií quien prestó inmensos servi­
la do Gozzi, y en la que el muestro imitó el estilo do W e- cios); l'ranz Lislz, repetimos, alma ardiente, apasionado Su. D . A iiklaudo u r Cáni.os.
bor, muy eu boga cu aquel tiempo en Alemania. La obra compañero y leal amigo, consiguió que el Lohengrin se
Am igo y señor m ió: E n trelas vários condiciones
do Wagner no llegó á representarse por motivos descono­ pusiera eu escena en Woin.ar, en Setiembre do 1850. Lislz
que recomiendan L a I mjstiiacion E spañola y A mk -
cidos; pero el célebre autor del Olieron diólo algunas lec­ en persona dirigió la orquesta. que le regaló ol final de la iticANA al aprecio do las personas de gusto, merece
ciones, que fueron muy provechosas, según declara W a ­ obra una batuta de plata. La ópera fio Wagner obtuvo un muy particular mención su constante afan de enaltecer
gner en una do sus obras literarias. éxito extraordinario, el nombro del muestro filé aclamado y popularizar olirns do mérito, atendiendo más á la ca­
La M u t a d i P a r tid , de Aubor, quo en 1830 oyó Wagner con entusiasmo y los teatros de Alemania ejecutaron sin lidad do los escritos que al nombro de sus autores. Tan
por vez primera, inspiróle una nueva producción, La N o v i­ interrupción su última obra, el Tannhaüser y el Duque laudable propósito añade quilates á L a I lustuación ,
cia de P a lm ito , que en aquel mismo año se estreuó en el fantasma. aparte de otras circunstancias, por hallarse muy di­
teatro de Magdeburgo. Esta ópera, cuyo argumento está Orgulloso W agner con justa razón , y creyendo sin duda fundida en la península ibérica y en las dilatadas re­
basado sobre el de la comedia de Shakspcare, Medida por el terreno suficientemente preparado para lanzar ni público giones del hemisferio americano que hablan nuestro
medida, no tuvo más que una representación. Wagner ex­ sus doctrinas revolucionarias, empezó á publicar desde el hermoso idioma, y por la estimación que lia sabido
perimentó tal deapecho por la caída de L a N ovicia de P a - conquistar y aumenta cada dia con más justicia el va­
destierro, en que todavía se bailaba, sus obras de literatu­
lermo, que abandonó el teatro de Magdeburgo, y se tras­ ra musical, en las que, entre ciertas nebulosidades meta­ lor de sus palabras.
ladó á Kfenigsberg, donde se encargó de la dirección de Sea, pues, el periódico que V . tan dignamente diri­
físicas, expuso con energía y lucidez sus teorías acerca del ge quien dé al público idea de un libro próximo á salir
orquesta de aquel teatro. arte.
No tardó mucho en dejar este destino y partir para Higa» á luz , en el cual luí reunido los frutos de su ardiente
E l urte y la revolución, L a obra de arte del porvenir y imaginación una jóven poetisa de mérito verdadero.
encargándose de la dirección de la capilla en este último
Opera y D ram a, fueron los primeros trabajos literarios de Imprímese el libro en la Coruña. Los composiciones
punto. La ambición empezaba á manifestarse en W agner;
Wagner, compendiados más tarde en su última obra lite­ coleccionadas en él van precedidas de un P r ó lo g o , que
su apacible vida do director no le satisfacía; ansiaba bri­
raria, Cuatro poemas de óperas, traducidos en prosa francesa tuve la satisfacción de escribir en Junio último, para
llar corno músico, y su país no le ofrecía para esto las ma­
y precedidos de una carta sobre la música, por R . Wagner. que sirviese de humilde pórtico á tan bien ornamenta­
yores garantías.
Poco tiempo después de la publicación de este opúsculo, do edificio, y que dice de esta suerte :
Casóse en Riga con una artista de talento y corazón, y .<En tiempos de perenne agitación , cuando el ánimo
destinado á preparar la opinión de los franceses cu favor
so decidió á emprender la marcha á París, creyendo que
del Tannhaüser, representóse esta obra en París , el 13 de desmaya fatigado por zozobras y angustias que se acre­
los franceses apreciarían sus ideas y estimularían su ta­
Marzo de 1861, y fue silbada con estrépito. Los franceses, cientan cada vez más contemplando las nubes que os­
lento. Á este efecto escribió en pccos dias el poema de curecen el horizonte, apénas se concibe que haya quien
henchidos de ese amor propio, de esa suficiencia que tanto
B i e n a l , ó e l ú l t i m o d e l o s t r i b u n o s ; compuso el primer acto pueda separar sus ojos de tan amarga realidad para
han proclamado; los franceses, qno no conciben en artes,
de la ópera, trabajó algo en los demas, y embarcóse en espaciarse en las serenas y dilatadas regiones de la
en política ni en literatura, nada que se parezca á su
R iga, llevándose el R i t n z i , con la esperanza de ponerlo en inspiración poética. De estas almas privilegiadas que
cien mil millones de veces cacareada Francia, llenaron á
escena en la capital de Francia. Y aquí comienza el epi­ en medio del común estrago nos halagan y recrean con
Wagner de insultóse invectivas, pusiéronle eu ridículo, el perfume de sus delicados pensamientos, como viole­
sodio más triste de la agitada existencia de Wagner.
condenaron v rb i et orbi sus doctrinas, llenaron los perió­ ta oculta entre zarzales, y á quien no arrebata su aro­
F.l buque que lo conducía naufragó en las costas de No­
dicos satíricos de caricaturas que representaban al autor ma el huracán que troncha los árboles más robustos, es
ruega, y sólo á fuerza de grandes penalidades pudo W a ­
del Tannhaüser cu las inás bufonescas posturas, mientras la jóven D oS a N aucisa P ekez R eo to , autora de los
gner llegar á Boulogne-sur-Mer. Falto do recursos para
llenaban el inundo de admiración elevando basta las nu­ lindos versos que van á continuación de las presentes
continuar el viaje, tuvo que detenerse cuatro dias eu esta
bes á Meillbac, Halevy y O f feubaeh. líneas.
población, donde afortunadamente residía por algún tiem­
No faltaron, sin embargo, artistas corno Berlioz y crí­ Apartada del tráfago cortesano, donde rara vez se
po el ilustre autor de Los Hugonotes.
ticos como Rcyer y Gasperini, que trataron extensa y con­ dan paz las pasiones asoladoras que vician y secan el
Presentóse á él el desgraciado artista, y Meyerbeer, que
cienzudamente las obras de Wagner, censurando sus aber­ corazón, la inspirada poetisa cuyas obras me han in­
era grande en todas cosas, le proporcionó recursos y car­ ducido á trazar estos renglones, ha consagrado sus
raciones y poniendo de relieve sus admirables cualidades.
tas de recomendación para París. Esto ocurría en 1840. ocios al culto de las musas, buscando en sn ameno tra­
'Tristón et Iseult fué la penúltima ópera de Wagner, es­
Una vez eu París, W agner tuvo que apurar hasta las to aquella dulce satisfacción que nace de cuanto realza
crita durante una corta estancia del autor en Yenecia en
heces el cáliz de la amargura. Pillet, que era director de y ennoblece el espíritu. Léjos de manchar la inspira­
1852, y representada con gran éxito eu Munich , el 10 de
la Academia real de Música, se negó á aceptar el R ie n zi; ción en él lodazal de los errores qne aspiran á concluir
Junio de 1865. El Príncipe real de Baviera. entusiasta ad-
más benévolo el del teatro del Renacimiento, pidió á W a ­ para siempre con la verdad y la justicia, destruyendo
gner su partitura ; entrególa éste lleno de alegría, y cuando los cimientos eu que descansa el edificio social, conser­
se iban á empezar los ensayos, quebró la empresa, cerróse i va en el santuario de su pecho, como fuego que alum­
(1) Hemos visto un ejemplar fie La Favorita, de Donizetti,
el teatro, y quedó Rienzi relegado al olvido. arreglada para piano por R. Wagner. bra, pero no abrasa, el amor á la religión, á la moral,
N.“ II L A IL U S T R A C IO N E S P A Ñ O L A Y A M E R IC A N A . 23

á las tradiciones de su patria; y afligida ante el espec­ L a misma leyenda pinta de esta suerte la agitación RECUERDOS.
táculo tle las miserias que nos rodean , vuelve los ojos y sorpresa de la heroína al ver al jóven marinero qne
i. Rico perfume, tibio y sfuive ;
á otros tiempos para cantar con el Fervor do un alma la obliga á huir:
Y aga armonía, lánguidos ecos,
pura los prodigios de la F e , los inefables encantos de Flores hermosas, dicha del alma
la Esperanza, las satisfacciones y consuelos que en­ «So turba un punto herido su pobre pensamiento;
Palpita apresurado su pobre corazón ; Son los recuerdos.
gendra la Caridad. Persuadida del acierto con que ex­ »Rudos dolores qne el pecho hieren .
Turbadas sus pupilas se anublan un momento ;
clamaba el satírico bilbilitano: Penas crueles, trisies tormentos
La agita vaga mezcla de pona y de contento,
De asombro y de temor.» Que las heridas do! alma enconan
Cu i rnalus cst nemo, ipda bonua rase polest? (1), x Son los recuerdos.
Y ya que hablo del poemita rotulado E strella, cúm­ »Mas ¡ay ! la vida sin ellos fuera
h u ye d e los q u e ah o ra o to r g a n ig u a le s d erech os al m al pleme observar, como de pasada, que la Introducción Ave sin cauto, planta sin riego...
Dulces ó tristes, vida del alma
y a l bien (d e s v a r ío q u e c ie g a m e n te n os a rra s tra al p r e ­ en prosa que le precede, escrita con amenidad y soltu­
Son los recuerdos, i»
c ip ic io d e la a n a rq u ía m oral m ás v e r g o n z o s a ), y s ig n e ra, revela excelentes disposiciones para escribir y nar­
con á v id o s o jo s el lu m in oso fa ro q u e nos g u ia a l in ­ rar; dotes que liarían de la autora una buena novelis­ L A S T R E S CORONAS.
m o rta l s e g u r o , fu en te d e to d a p e rfecció n y b e lle z a , ta , si se aplicase con afición al cultivo de esc género «Corona esplendorosa y refulgente,
p o rq u e s a b e , c o m o e l in s ig n e d ra m á tic o a n d a lu z d el literario. Que con su brillo fulgurante sólo
s ig lo XVII, q u e Pero donde más campa y luce su inspiración es en Halaga al mundo deslumbrado y necio,
las composiciones líricas, sobre todo en las de cortas Es la de oro.
uSólo en Dios hay hermosura »Noble corona que las sienes cific
dimensiones, tales como L a protección de M aría, Sus­
Que eterna ha do ser en él» (2 ). Del genio celestial y sacrosanto,
piros, Recuerdos, L a s tres coronas, E l ultimo rayo de
Y al alma halaga con su brillo puro,
Animada de tan gallardo espíritu, la modesta poeti­ sol, A un ruiseñor, ¡Ay tristes de los que se quedan! y Es la de lauros.
sa cuyo nombre aumenta el ya numeroso catálogo de cuantas nacen del encanto que le produce la contem­ »Corona santa de inmortal recuerdo,
ilustres damas que honran el Pindó español, ha bos­ plación de la naturaleza, ó de los sentimientos y afec­ De inmarcesible gloria, y bendecida
quejado con.no escaso arte, y á veces con vigoroso co­ tos que conmueven su corazón. En éstas brilla por lo Sólo de Dios á los augustos ojos,
lorido y felicísimos toques, cinco interesantes cuadros cornun tal sencillez, tal candor, tal delicadeza de pen­ Es la de espinas.»
con el nombre de leyenda» titulados E s tr e lla , B la n ca , samiento y de form a, que difícilmente podrían hallarse
SU SPIR O S.
H o n rilla , Luz del ciclo y .Vuestra Señora de la B a rca . en otra parte que en el alma de una mujer buena y
« L a leyenda, en la acepción inmediatamente tomada sensible. a Cándido, cual la flor qne abre su cáliz,
A qu í es donde la autora, cuya fantasía utiliza en A la triste existencia viene el niño ;
del francés que hoy se da entre nosotros á esta pala­
Y al abrir á la luz sus tiernos ojos,
bra (escribía hará cosa de veinte años mi querido ami­ ocasiones discretamente el elemento dramático, deja
Lanza nn suspiro;
go y compañero el laborioso académico D . Eugenio do ver á las claras de lo que es capaz, y cómo no hay » Yo el jóven cu la edad de las pasiones
O ch oa), es un género de composición nuevo en Espa­ musa más inspiradora y simpática que la verdad del De belleza y amor ángel purísimo.
ña, <’> mejor dicho, es una forma poética recien impor­ sentimiento que no se revuelca en el fango do groseras Y, preso el corazón, cautiva el alma,
tada , un tambre nuevo y nada m ás; pues en cuanto á pasiones, y que se eleva á Dios guiada por sanas y g e ­ Lanza un suspiro.
la índole do las composiciones hoy designadas con él, nerosas ideas. »E l término á tocar de su carrera
N o resisto á la tentación de copiar aquí este elo­ Llega el viejo, cansado peregrino,
no sólo filé conocida de nuestros poetas desde la for­
Y al cerrar á la luz sus yertos ojos
mación del habla v u lg a r, mas constituyó en todo tiem­ cuente y expresivo diálogo do la linda composición ti­
Lanza un suspiro.
po nuestra verdadera poesía nacional bajo el dictado tulada ¡A y !
» L a mísera existencia quo cruzamos,
de romance. ¿Qué otra cosa son, sinó, nuestros roman­ Y en que tanto lloramos y sufrimos,
u— Adiós, alma de mi alma.
ces más que verdaderas leyendas? ¿Qué son éstas, ta­ — No partas, el marinero. Es ¡ a y ! desde la cuna hasta ol sepulcro
les cuales hoy se usan, sino verdaderas novelas en ver­ — No hay nubes en el espacio. Sólo un suspiro.»
so , históricas ó fantásticas ? » — Pero las hay en mi pecho.
Encarecer aquí el mérito de las precedentes compo­
A si es en efecto; y sin em bargo, comparando los » — ¿Qué te agita de ese modo?
— Un'fatal presentimiento. siciones seria, mi señor D . Abelardo, ofender la ilus
romances antiguos más parecidos á las leyendas mo­
— Tus temores son quimeras. trocion de Y . y de los lectores do sti elegante periódi­
dernas con muchas do las que hoy se escriben , por no
— ¡Oh, no partas, por el cielo! co. Porqne la conoce y estima según merece, no incur­
decir con casi todas , echarémos do ver algunas dife-
ii— Sereno está el horizonte. rirá jamás en tamaña falta su afectísimo amigo y se­
’ rendas notables , tanto en la contextura del plan y en — No está mi ánimo sereno. guro servidor Q. S. M. 11.
la agrupación y distribución de los sucesos, como en — Adiós, que el cielo me ampara. Manuel CaRetk.
la forma y carácter de las narraciones, y hasta en la — Nuestro adiós será el postrero.»
misma versificación. En prueba do ello, confrontad con ----------- —« i e «n tii Hit» ■■
los antiguos romances caballerescos ó históricos , mo­ L o que dejan ontrovor estos versos, que rovelan con
riscos ó novelescos , sin exceptuar los que componen tanta concisión y energía el estado espiritual do ambos EL E * « o . S «. TE N IE N TE GENERAL D. FACUNDO R IF A N T E .
la ingeniosamente restaurada historia de L a In fa n tin a amantes, causa honda impresión en el ánimo, y despier­
A P U N T E S B IO O R Á PIC O S.
de F ra n cia (cuya trama es tal vez la que más se acer­ ta en él desdo luégo interés muy vivo. E sta sencilla
ca al giro corriente) con E l estudiante de Salamanca, manera do trazar un cuadro poético recuerda algunas L
ile Espronceda, y L a azucena m ilagrosa, del Duque de canciones y baladas de Uhland, de N ovalis, do Sclii- Recuerdo haber leído, no sé dónde, quo lu Providencia no
Rivas, ó con E l Capitán M ontoya y M a rg a rita la tor­ 11er, sin renegar de su honroso parentesco con los can­ tiene cu su misterioso lenguaje más quo esta única palabra,
n era , del fecundo y desaliñado Z o rrilla ; y sin tener cioneros españoles del siglo xv, ni ¡(rescindir d é la her­ adelante: sea para el bien, sen para el mal, trátese do un
ojos de lince advertiréis desde luégo cuán exacta es mosa naturalidad y halagüeña nitidez de que apenas se
individuo, trátese de un pueblo. Y así os on verdad. Si
mi observación. Si no la comprobaran ejemplos tan efi­ cuidan hoy entre nosotros ciertos ingenios, como si á
observamos con detenimiento la vida de un individuo ó la
caces, las cinco leyendas comprendidas en este volu­ los hijos de la fantasía que carecen de tales dotes
historia de un país, repararemos que si principia para ésto
men , que van por el camino donde ha recogido Z o r­ fuera nunca dado alcanzar existencia duradera.
el bienestar y la prosperidad, ó la muerte y la fortuna para
rilla tantos aplausos , abonarían de suyo mi parecer. Cuando la señora Perez R e o jo exclama, dirigién­
aquél, esta palnbra adelante, que constante resuena en sus
N o cometeré la indiscreción de hacer aquí un dete­ dose á otra amable poetisa:
oidos, conduce ú ambos al oolmo de la felicidad y la dicha..
nido análisis de estas bien imaginadas leyendas: sería «Y o amo las flores del amonó prado, Por el contrario, si comienza la desgracia para uno y el
desvirtuar en cierto modo el placer que su lectura ha Amo los peces del baílente rio, decaimiento inoral y material para otro, esa misma pala­
de causar á las personas de gusto. Sólo añadiré á lo di­ Amo la nieve del invierno helado,
bra adelante, siempre adelante, qne la Providencia mur­
cho, que abundan en ellas rasgos de verdadera poe­ Y el sol gerininador del rico estío,
sía , pintoras de buen sabor literario, trozos que ar­ Y el pájaro que canta sosegado mura implacable á sn lado, lleva al individuo como á la
guyen facilidad en el manejo de la versificación y del Entre la fronda del boscaje umbrío, nación, inevitablemente y como por rápida pendiente, has­
lenguaje poético. Dfgaulo estas estrofas del romance Y la nube que cruza el firmamento, ta sepultarlos en la ruina, en la desgracia y quizás en la
Y las estrellas, y la mar, y el viento » ; muerte. Entre otros muchos, sírvannos de ejemplo en los
que retrata al paje Y orá n en la leyenda nominada
B la n ca : cuando á renglón seguido le oímos decir que guarda pueblos, que en los individuos no hace al caso por verse
«¡A y ! A sí la mariposa, dentro del alma un tesoro do amor, de esperanza y do diarios, el romano en sus diferentes épocas, la infeliz Po­
Pintada y viviente flor, fe, no turbada por el áspero ruido de la existencia mun­ lonia. la moderna Prusia y nuestra querida cuanto amada
Tiende venturosa y libre danal (agriadísima y borrascosa en estos dias de cas­ patria.
Sus bellas alas al sol. tigo y de prueba para nuestra España), fácilmente Ningún ejemplo, en efecto, puedo citarse más claro y
»A si la aromada rosa comprendemos por qué logra sacar de su lira tan dul­ patente qne España. La altiva, poderosa y noble España,
Abre su fresco boton
. Á los halagos suaves ces tonos, por qué nos seducen y encantan los bien sa­ para cuyos dominios no se ocultaba el sol, terror de lo»
Del céfiro bullidor. zonados frutos de su cristiana y patriótica inspira­ mares con su Invencible, descubridora de mundos, respe­
» Así el pájaro felice ción. tada por sus famosos tercios, patria de renombrados pin­
Entona nlegre canción, ¡ La religión ! ¡ L a patria ! ¿ En qué otra fuente se tores, de grandes capitanes, de sabios teólogos, de ilustres
Libre en sus ricos palacios hallarán las nobles ideas y generosos sentimientos que políticos, de eruditos autores; nación, en fin, la primera
De follaje y de verdor.» ambas inspiran? ¿Qné manantial comparable al suyo por aqnel entóneos on el mundo, sumida hoy en la desgra
en puras y salutíferas aguas? ¿ Dónde tan rico venero cía, triste, abatida, desamparada, sin poder fijar la épo­
E n el breve diálogo que da principio á la leyenda
de acciones heroicas y de creaciones inmortales ? D i­ ca precisa donde dan comienzo sus desdichas, sin saber á
titulada E s tre lla , hay estos sentidos versos :
chosa una y mil veces la inspirada antora de estas
quién achacar sus infortunios, sin divisar, ni siquiera en
« — Parte, hijo mió: la suerte P oesías, qne en medio de la común degradación ali­
lejano horizonte, el remedio á tantos males: y es, qne e ó Io
Inflexible así !o manda; menta y refrigera el mimen en raudal tan cristalino.
Pero deja que llorando oye esa voz oculta que, infatigable y cruel, le dice, ade­
Dichoso yo, qne debo á sn amable benevolencia, y á la
Se alivie mi pena amarga. lante. adelante, siempre adelante; auméntense tus sufrimien­
de un amigo mny querido, la satisfacción honrosa de
" Deja que viertan mis ojos tos, crezcan tus dolores, llora, llora afligida tus desgracias,
aplaudir en esto lugar á quien tanto lo merece. »
Tristes raudales de lágrimas... pero adelante, hasta qne llegues al término que solo Dios
¿No he de llorar, si te pierdo, Los versos citados en el Prólogo qne antecede bas­
Si pierdo contigo el alma! tan para dar á conocer qne doña Narcisa Perez Reo- puede conocer.
»¿N o he de llorar, si te llevas yo es, como ya be dicho, una poetisa de mérito ver­ ¡Pobre patria querida ! Apenas pasa nn día sin que un
De mis ojos la luz clara. dadero. Sin em bargo, para que los lectores de L a nuevo dolor venga á aumentar los muchos tuyos ; y como
La ventura de mi pecho. I lustración se persuadan de ello más y más, ínterin si no bastasen las desdichas políticas, la Providencia, mur­
El orgullo de mis canas!» pueden adquirir tan bien sentidas poesías, incluyo aquí murando siempre adelante, te arrebata tus hijes unís queri­
tres de las qne mejor revelan el delicado sentimiento y dos y ciudadanos más ¡lustres. Ayer, patria mia, perdías
(1) Para quien nada es malo, ¿qué puede ser bueno? buen gasto poético do la antora. Seguro estoy de quo en el difícil arte de Yelazquez y Morillo, ni renombrado
[2) »IB A DE A mescl’A. Fula y muerte de San Lázaro, ni Y . ni el público han de estimar exagerado el elogio. Rosales; en el inspirado decir de Lope y Moratin, al laq-
L A I L U S T R A C I O N E S P A Ñ O L A Y A M E R IC A N A .
Un secuestrador, es'adió del í-r. D. Mariano Fortuny.
26 L A IL U ST R A C IO N E S P A Ñ O L A Y A M ER IC A N A . n ; ti

reado Bretón ; en el divino saber do Santo Tomas y Santa esta cartera, que desempeñó con el mismo celo é inteli­ sia, hecha casi toda á pié ; pero la Índole de estos apun­
Teresa, al erudito Salvó, y en la complicada ciencia «lo gencia que todos sus destinos anteriores y á completa sa­ tes no me permite ser más extenso; á más que no podría
Cisneros, Floridablanca y López, al ilustro Ríos Rosas: tisfacción de 8 . M., volviendo ni gobierno militar de Ma­ referir con exactitud tanta penalidad como de sus mismas
pero no basta, a d e la n t e , repite desapiadada y sin cesar la drid, en cuyo difícil puesto tuvo nueva ocasión de lucir bocas he oido viirins veces. Entraron por fin en el depar-
Providencia, y hoy lloras á un ciudadano, no inénos re­ su pericia militar, mandando toda la caballería, y obte mento de Santa Cruz, dundo por equivocación el general
nombrado. no menos notable, no menos ilustre ; al probo« niendo una victoria contra las huestes do D. Carlos quo español loa redujo á prisión, y áun uno do ellos, I). Anto­
al hónrado, al reputado militar y eminente patricio gene­ nio González, fué puesto en capilla para ser fusilado.
con su rey s o i- d is a n t á la cabeza so aproximaron á la ca­
ral Infante. pital. Sobre la permanencia do Infante y elevación al minis­
No voy á escribir su biografía ; ni tengo dotes suficientes En 1838 y 1839 pasó á Valencia de segundo cabo de terio en el alto Perú, debo decir dos palabras, porque la
para ello, ni mi espíritu, embargado en estos momentos aquella capitanía general, hostilizando continuamente á ignorancia 6 la envidia ha querido hacer, de un hecho
por la pena, ni la índole de esta acreditada publicación,me los carlistas y destruyendo las partidas de más importan­ sencillo, un cargo ásu nunca desmentido patriotismo. Era
lo permiten : sólo sí es mi intento, yunque cia, como las de Yatova y Falencia, por lo que fué ascen­ Infante muy amigo del presidente Sucre, que le rogó repe­
dido á general (1840), ocupando varias capitanías genera­ tidas veces aceptase el cargo de ministro del Interior.
«Con luto en el corazón y llanto en los ojos», les en diferentes provincias; emigró nuevamente en 1843, Aunque aquella república era ya independiente do Espa­
consignar estos breves apuntes, entresacados á la ligera volviendo en 1847, y siendo nombrado al año siguiente te­ ña, se negó resueltamente, pero al fin las encarecidas sú­
de interesantes documentos que debo á la bondad de su» niente general. Desterrado á Palma de Mallorca por cau­ plicas de Sncre y sn apremiante necesidad, pues carecía de
inconsolables bija y nieta, y que dedico, como humilde sas políticas, fué nombrado por la Junta revolucionaria, en bienes de fortuna, le obligaron á aceptar, poro no sin
homenaje de cariño y respeto, al ilustre finado, que como 18ñ4, capitán general de aquellas islas, cargo que dejó por convenir únte» en CBtas tres condiciones : primera, qne no
militar es modelo de honor y valentía, como político, ad­ babor sido también nombrado por el Gobierno, director de había de ser perseguido ningún español, como basta en­
miro su lealtad y nunca desmentido patriotismo, como la Guardia civil, elevado puesto que ejerció á satisfacción tonces sucedía: segunda, que él no había de ratificar nin­
particular quería como á un segundo padre, y como ciuda­ de tan benemérito cuerpo, basta el 19 de Julio de 1856, guna medida que directa ni indirectamente atacase los in­
dano le lloro como en estos momentos debe llorarle la en que presentó su dimisión. Do cuartel en 1857 y 58, tereses de España; tercera, que si ocurría en algún tiempo
patria. fué nombrado, el 19 de Diciembre de 1859, vocal de la el desembarco de alguna expedición española, se retiraría
II. clase de generales del Consejo de Gobierno y administra­ de su puesto y saldría del país inmediatamente. Estas con­
ción del fondo de redención y enganches del servicio mi­ diciones fueron cumplidas religiosamente por Sucre, y
La vida militar del general Infante es muy notable. litar, hasta 18G0 (18 de Agosto), que pasó á la presi­ por esto permaneció Infante dos años en el Ministerio, con
Nacido en Villanueva del Fresno, provincia de Badajoz, dencia de la sección de Guerra y Marina del Consejo de gran sat'sfaccion délos españoles allí residentes ; al cabo
el 19 de Febrero de 1786 hizo sus primeros estudios con Estado. Renunció en 1863, quedando otra vez de cuartel de loa cuales, y á pesar de haber vivido y mandado en el
gran aprovechamiento en la capital nombrada, continuán­ este año y el 64, volviendo al mismo destino el 65 (28 país más rico del inundo, bajó de aquel puesto tan pobre
dolos en Sevilla. Bien pronto manifestó su decidido entu­ do Junio) y tornando a renunciar en 1866 (15 de Julio). que más no era posible, como cuando entró.
siasmo por la vida del guerrero, y cuando comienza en Por último, después de la revolución de Setiembre de Después de once años de emigración, y en cuanto se
1808 esa gran epopeya de nuestra historia que so llama 1868, en la que no tomó parte activa, fué nombrado pre­ concedió la amnistía de 1834, vuelve Infnnto á España,
guerra do la Independencia, admiración y envidia de pro­ sidente del Consejo de redención y enganches, que des­ ocupando el puesto de procurador á las Córtes de este año,
pios y extraños, corre veloz á Badajoz, donde la .Tunta, empeñó con talento y discreción hasta Junio de 1872, que para el que había sido elegido por Extremadura. Con
haciendo justicia á sus buenas cualidades, le nombra sub­ pnsóá la Dirección gonoral del Cuerpo y Cuartel de Invá­ igual distinción le honraron los electores de esta provin­
teniente del regimiento «leales de Fernando VII.» En este lidos, en cuyo destino diócl último suspiro. cia para las Constituyentes de 1837 ; formó parto de la mi­
destino y siguiente año (1809) se batió bizarramente en Durante esta larga y brillante carrera obtuvo las si­ noría en las Córtes moderadas de 1838, y fué nombrado
las rofiidas acciones del Campo do Velada, y más tarde en guientes cruces: cruz concedida por la batalla dcTalavera ministro de la Gobernación en 1841, en el ministerio lla­
las de Talayera de la Reina, donde por su distinguido la Reina; id., id., por la de Albuera ; id., id., por la demado de González.
comportamiento recibió el empleo de teniente y la cruz (Luciana y tercer ejército; id. de primera clase de San Infante dirigió el departamento de la Gobernación des­
de esto nombre <1 28 do Octubre del mismo año, asistien­ Femando por la do Moguer; id. do tercera clase de la mis­ de el 21 de Mayo do 1841 linsta el 17 de Junio de 1842. Eu
do también con esta graduación á la retirada que el Duque ma nacional órden por las ocurrencias di- Valencia; gran 1843 emigró á Portugal, de donde vino en 1847, cuando
de Albnrquerquo verificó (1810) desdo el Tajo á la isla do cruz de la real y militar órden de Kan Hermenegildo, con fué elegido diputado por el distrito do Betanzos, provin­
León. Tomó después parte, acreditando su valor, en la ba­ la antigüedad del año 40 y pensión desde el 65; condeco­ cia de la Corufin. Desde 1848 á 18.53 desempeñó los im­
talla do Chidana ; ataque y asalto del castillo do Niebla’ rado con la cruz del valor cívico, y por último, «los veces portantes oargos do Consejero Real y Senador vitalicio
donde fuó herido; Alimera, donde mereció ser escondido á declarado benemérito de la patria. del Reino. Por haber hablado en la cuestión de ferro-car­
capitán, y acciones de Zajar, Pujol y campos de Mislata. En Tul es la vida militar dol ilustre finado. Algunos, poco riles , como su moralidad y honradez le aconsejaban, fué
el sitio y bombardeo do Valencia filé hecho prisionero, pe­ enterados, sin duda, do tan brillante hoja do servicios, han desterrado á las [filas Baleares.
ro se fugó al poco tiempo; encontróse después en las accio­ supuesto equivocadamente ni general Infante más político Después del triunfo do la revolución do 18.54 y encon­
nes do Puerto Cárcel, Puerto do la Ollería y bloqueos do quo militar: esto os un error; im hay necesidad de repe­ trándose decapitan general de las Balearos, por nombra­
Tarragona y Tortosu. tir lo escrito : repásese con detenimiento, medítese y dí­ miento de la Junta revolucionaria, fué también nombrado
Siendo capitán de la compañía de Caballeros Cadetes en gasenos con imparcialidad si el soldado quo asisto á diez embajador cu Roma, cargo que no aceptó ñ su venida ú
1819, tuvo que emigrar al extranjero, á causa do rus opi­ Madrid.
reñidas acciones y nueve sangrientas batallas y cuenta 64
niones liberales. Boro en este tiempo tuvo lugar un he­ nf.os sido moRCs y treco dina de servicios efectivos, y más Las Córtes Constituyentes do 1854 le eligieron presi­
cho que no debo pasar en silencio. Yendo á las órdenes de 74 con nbonos, puede, por importante que sen su talla dente, cargo que, según lo oimos vúrias veces, era el quo
del coronel Gusano , y en el camino de Chidana á la isla política, perder el carácter militar. No ; no lo creemos, y más le enorgullecía de todos los que bnbja tenido en su
de León, fue atacada, batiilay dispersada esta columna por por eso lo liemos presentado como militar valiente, en­ larga carrera política y militar.
fuerzas superiores enemigas, muertos ó heridos casi todos tendido y pundonoroso, modelo do lealtad y honor. Consejero de Estado diferentes veces, Senador del Rei­
los jefes, y áun prisionero el mismo Casano. Infante en­ Pasemos á considerarle como político. no y socio de gran número de corporaciones científicas y
tóneos, y ya en la retirada, reúne los dispersoB restos, literarias, nacionales y extranjeras, lia llegado hasta hoy,
toma el mando de las huidas fracciones, y despreciando la III. que los nclinqnes y los años han arrebatado á la patria este
vida con temerario arrojo, habla á los soldados, rehace su
No inénos notable que la militar, y más si cabe, es la ciudadano, que debe ser admiración por muchos conceptos
espíritu, les recuerda su honor, y poniéndose á la cabeza, de la época actual, como ilustre político y eminente hom­
vida política del general Infante (1).
los conduce nuevamente á la pelea. Esta vez el triunfo
La lucha continuada contra los franceses, exponiendo bre de Estado.
más completo, la derrota total del enemigo y el recobro
á cada momento la vida por la independencia de la patria, IV.
del prisionero coronel Casano es el premio de tanta bi­
hizo nacer en Infante desde temprano un amor profundo
zarría. El general D. Carlos Espinosa hace especial men­ De D. Facundo Infante, como particular, ¿qué lie de
ción en el parte al Gobierno de hecho tan glorioso, que se por la libertad. Por esta causa emigró en 1819 hasta que
decir, que rio parezca pálido para los que tuvieron el gusto
publica en la G a c e t a , proponiéndole ademas para la debida fué elegido diputado por Extremadura para las Córtes or­
de tratarle? Buen hijo, buen esposo, traen padre, era tam­
recompensa. dinarias de 1822, en cuya legislatura fué elegido secreta­
bién inmejorable amigo de sus amigos. En las elevadas
rio del Congreso.
Disuelto el ejército constitucional, emigró á América posiciones qne ocupó, tuvo ocasión de hacer el bien, y lo
sien lo teniente coronel; vuelto cuando se concedió la am­ Cuando las graves circunstancias politices por que entón­ hizo á infinitas familias ; pocos habrán llamado á su puer­
nistía de 1834, dedicóse á combatir á los carlistas, por lo quo eos pasaba España exigieron la convocación de Córtes ex­ ta, siempre abiert \á la desgracia, sin ser socorridos, á ve­
alcanzó el empleo de coronel. Hallábase desempeñando traordinarias, últfmas do la época constitucional, también ces con más do lo que permitía su escasísima fortuna; que
interinamente la subsecretaría del ministerio de la Guerra, mereció Infante el sufragio de sus electores para represen­ ejercer la caridad era uno do sus mayores placeres. Dulce
cuando S. M. se sirvió conferirlo la propiedad de este im­ tar á Badajoz. Caído este régimen, y condenado dos veces de carácter, como hemos visto á pocos , era por todos que­
portante destino (14 de Octubre), en el cual continnaba á muerte por haber votado la incapacidad dol Rey en Se­ rido, por todos amado, por ricos y pobres, por nobles y
cuando so decretó la famosa quinta llamada de Mendizá- villa. tuvo que emigrar por segunda vez, pasando á Amé- plebeyos.
bal, que despachaba interinamente este Ministerio, por lo nca en unión do los distinguidos patricios general Seoanc, Pero su carácter distintivo era la moralidad y la honra­
que Infante fué quien organizó todo cuanto se hizo reía su hermano D. José y D. Antonio González, después pre­ dez; después de tan elevados puestos como ocupó en vida,
tivo á guerra. sidente del Consejo de Ministros y hoy más conocido por de Ministro aquí y en América, presidento de la Asamblea
Por su quebrantada salud, triste resultado de las heri­ el de Marqués de Valdcterrazo. Largo y penosísimo fné el y director general de diferentes armas, muere Infante
das eu campaña y fatigas de las emigraciones, se vió en viaje qno Infante y sus dignos compañeros hicieron á pobre, repitámoslo muy alto para honra suya, muy pobre;
la necesidad de renunciar el mencionado cargo de subse­ bordo de un mal buque de vela, que varias veces estuvo á y si su única bija Eugenia, viuda de Aranda, y su nieta
cretario el 20 de Mayo do 1835; pero el Gobierno, cono­ punto de naufragar. Llegados á Rio Janeiro con muy po­ Encarnación , heredera ésta, por sn padre, del condado de
ciendo lo que valia Infante, no quiso privarse de la ayu­ cos recursos, emprendieron el viaje por tierra al Perú, atra­ Humánes, no tuviesen, como tienen, una fortuna inde­
da de tan entendido militar, nombrándole, después de su vesando las desiertas provincias de San Pablo, Cuyaba y pendiente por parte de su marido y padre respectivamen­
ascenso á brigadier, gobernador militar de Madrid, cargo otras,para dirigirse á la de Mato-Grosso, desde donde en­ te, quedarían reducidas á nna situación inmerecida, pues
que se bailaba vacante á la sazón, por salida del mariscal traron eu la provincia de Chiquitos, pueblo de indios, y casi nada reciben del que las deja un nombre ilustre y es­
de campo D. Antonio Barutell, y cuyo nieto, dicho sea de hoy parte de la república de Bolivia. Largo de contar seria clarecido.
paso, el bravo y entendido comandante capitán D. Juan y sobremanera curioso, los trabajos, privaciones y su­ Después de una penosa y dolorosa enfermedad, y de
Antonio Mac-Crohon, hijo del digno general de este ape­ frimientos que experimentaron durante esta larga trave- cumplir los delires religiosos, el silbado. 27 de Diciembre,
llido , era eu la actualidad ayudante de campo del gene­ dió su alma á Dios, rodeado de sus afligidas hija, nieta y
ral Infante. (1) Por causas ajenas á la volontnd del ilustrado Director sobrinos, de los doctores Losada y Baselga, del digno ca­
Eu 1837 y por enfermedad del Conde de Almodovar, de esta publicación, á ultima hora he tenido que reducir á la pellán de los Inválidos, Sr. Rubinos de Castro, que cum­
mitad la parte militar y retirar por completo la política, am»
ministro de la Guerra, encargóse el general Infanto de bas escritas con alguna extensión. plió admirablemente los tristes debereB de su miuisterio, y
N.* II L A ILU ST R A C IO N E SP A Ñ O L A Y A M ER IC A N A . 27

do sus amigos y servidores ¡todos llorando, que, como dice villa. En 1847 consintió en aceptar el ministerio de Gracia Roo. P. F ray Ma n u el P a le t y F e r r e r , religioso fran­
Sorra: y Justicia, y más tarde los de Comercio, Instrucción y ciscano exclaustrado y misionero apostólico ; falleció en
Los ojos dos fuentes son, Obras públicas y el de Hucicnda, en cuyos alto« cargos pre­ Barcelona el 21 de Enero.
Por donde sale á torrentes
L a pena del corazón. sentó notabilísimos proyectos, debiéndosele la vigente ley D. Joaquín Sancho, ex-diputado constituyente y go­
de contabilidad, la publicación ile los presupuestos y cuen­ bernador que fué do la provincia de Guadalajara ; muerto
Sí, todos llorábamos al ver desaparecer del inundo de los tas generales y otras importantes reformas, como el arre­ en dicha capital gn 24 do Enero.
vivos al padre amante, al amigo verdadero, al amo cari­ glo de la Deuda pública de 1851. Los obras rentísticos de D. R icardo de B orros y A ruedondo, Duque de San
ñoso, al militar bizarro , al general entendido ; que todo Bravo Murillo, tanto las ya coleccionadas como las disper­ Ricardo, hijo dol difunto infante de España D. Francisco
esto era el probo, recto é ¡lustre político general Infante. sas, forman un gran número de volúmenes: sus últimos de Paula y hermano del ex-rey consorte; murió en París,
Embalsamado por orden del Gobierno, hoy lia sido con­ trabajos han sido publicados en un diario absolutista, y por consecuencia de una afección á la garganta, en 28 do
ducido ásu última morada, que es la bóveda do Atocha, están dirig:dos ni cxáincn y censura de los actuales presu­ Enero.
tributándosele los honores debidos á bu importancia políti­ puestos. Al funeral de Bravo Murillo, verificado en la hu­ D. Manuel L lórente y P astor , mariscal de Campo, de
ca y alto rango militar. milde parroquia de San Pedro do Madrid, asistieron las cuartel en Madrid. Este insigne veterano so halló en la
Pocos momentos áritos de morir se informaba del estado personas inás importantes de todos los partidos, cual si campaña del año 1805 contra los ingleses, asistió ú la con­
de la guerra carlista y cantonal, esas dos heridas por don­ quisieran significar que la muerte de aquel hombro cons­ quista de Portugal con los franceses, hizo toda la guerra de
de se desangra la nación , y decia al Dr. Losada : o Diga tituía una perdida nacional. Considerado exclusivamente la Independencia, fué diputado y secretario de las Oírte«
usted que mi último suspiro es para mi patria. » Sí, ilustro como escritor, dehe proclamársele con justicia como un no eu la época del 20 al 23, y peleó en las filas del ejército de
patricio, descansa en paz y el Hjicfio de los justos ; que la tamilísimo prosista que sabe elevarse, y ser natural alterna­ la Reina durante los siete años de la guerra civil; fnlleeió
patria, á no ser ingrata, no puede nunca olvidar qne en tivamente, según las exigencias del asunto. á la edad «le 81 años, en Madrid, á 28 de Enero.
vida fuiste siempre mártir por ella, peleando por su inde­ A pesar de que, como hemos dicho, son muy numerosos D. J uan A ntonio Za r a t ieg ü í , mariscal de campo;
pendencia , sufriendo por su libertad, viviendo para su fe­ sus trabajos, y áun se conservan iuédiLos muchos do ellos, murió en Utrera.
licidad y muriendo para bu desgracia. los publicados bastan para formarle una sólida reputaciou. Doña G ertrudis G ómez de A vellaneda de V erdugo, no­
E l V izconde dk los A ntiunes . Vieron la luz en los años que mediaron desde el G3 al 67, y tabilísima poetisa ; muerta en Madrid el dia l.° de Febre­
Madrid, 30 de Diciembre de 1873. constituyen cinco abultados volúmenes. El primero contie­ ro. Había nacido en Puerto Principo en 1816, y cuando
ne tres opúsculos, á saber : A t e n t a d o c o n t r a la v i d a d e l a R e i ­ en 1840 llegó á la Península, sus notables poesías le habían
n a , M i te s ta m e n to y m i s c o d i r i lo s p u l í tic o s y L a D e s a m o r t i z a ­ conseguido una reputación. Entre sus obras, cuya última
NECROLOGÍA ESPAÑOLA. c ió n . En el tomo segundo van incluidos seis, entre los cuales edición constituyo cinco tomos abultados, citarémos los
(1 8 7 3 .) los más dignos do estudiarse y mencionarse son los titula­ dramas B a l t a s a r , A l f o n s o M a n i ó , L a h i j a <le la s f lo r e s , L a
dos : L a p a s ió n p o l í t i c a , T r a t a d o d e l a S o b e r a n ía , y A p u n t e s A v e n t u r e r a , L a v e r d a d v e n c e a p a r ie n c ia s , S a ú l, L a h ija d e
Año el que acaba de trascurrir de desventuras sin cuen­
p a r a l a U is t o r i a d e l a u n ió n lib e r a l . Los demas tomo« tratan r e y R e n é , T r e s a m o r e s , etc. De sus novelas, G u a l i m o c i n ,
to para la nación española , no podía menos de registrar
del arreglo de la Deuda, de la defensa de la Reforma del 52, E l a r t i s t a b a r q u e r o , E s p a t o l i n o , D o l o i e s , L a v e la d a d e l
sensibles pérdidas do hombres eminentes, para qne su re­
y D e l 2 >a sa d o, p re s e n te y p o r v e n i r d e l a H a c ie n d a d e E s p a ­ h e lé c h o , L a B e l l a T o d a , L a O n d in a d e l la g o , etc. No no«
cuerdo fuera más triste. Políticos reputados, valerosos je ­
ñ a ; joya de inestimable precio par.i los que se consagran detendréinoB, á detallar sus numerosa« poesías líricas, poro
fe« del ejército y armada, inspirados poetas y artistas fa­ citaremos, para terminar esta ligera reseña, el precioso
á los estudios económicos.
mosos han desaparecido de entre nosotros, dejándonos sns
D. J oaquín R oca y Cornet , respetable y respetado es­ D e v o c i o n a r i o p o é t i c o , que es uno de los trabajóse!) qne más
obras ó el recuerdo de sus hechos. Limitando muchísimo la
critor católico, fundador que fué, en unión de Balines, de brilla la inspiración de la ilustre escritora cnbana.
reseña necrológica ; pasando en silencio numerosos nom­ periódico titulado L a R e l i g i ó n ; murió cu Barcelona en 10 I). J osé Qüirooa y González, catedrático do la Escuela
bres que con justicia reclaman un lugar en ella, éun re­ de Enero. Recordamos entre sus obras las titularlas E l P a ­ especial do Veterinaria; murió en Madrid en 12 do F e ­
sulta de tales dimensiones que ocasiona profunda tristeza d r e d r f a m i l i a , R e g la s s e n c illa s d e C o r t e s ía , L a s r e p ú b lic a * brero.
y ha tle ronovar muchas lágrimas. a n tig u a s y m o d e rn a s y E n s a y o c r i t i c o s o b r e la s le c t u r a s d e l a K xomo. S r. D. F rancisco A i-aricio y P ardo, brigadier do
é jto c a . Esta última cu ríos volúmenes. También tradujo al ejército, condecorado con la gran cruz del Mérito militar,
D. P edro C ami-oredonno y G erm án , arquitecto do la castellano la obra de Augusto Nicolás titulada D e l P r o t e s ­ la placa de San Fernando y otra« varias de distinción por
Real Academia de San Fernando y profesor numerario de t a n tis m o y d e to d a s la s h e r e jía s en s u r e l a c i ó n c o n e l s o c i a ­ méritos do guerra; talleció en 2 «lo Febrero.
la escuela espocinl de Arquitectura; murió en Madrid el lis m o . E xcmo. S r . D. A ntonio n i la I glesia , mariscal de cam po;
día 1.* do Enero.
I). J osé M aría W eb e r , uno de los m arinos que asistie­ m uerto en Sevilla.
I). Vicente CüADUUPANl, jefe de Administración y so
ron á la gloriosa derrota d o T rafu lg ar, m uerto en B arcelo­ E xi mo. S r. I). S alvador C lavijo y Pló, Mariscal «le
cretario dolSupremo Tribunal do las Ordenes; muerto en
Madrid en 2 de Enero.
na en los primero« dias del mes de Huero. Campo del Cuerpo de ingenieros, muerto en Madrid en 2
ÜjXCMO. S r. 1). Ramon K kyhskr, gobernador que fué do de Febrero. Contaba G3 año« do edad y más de 48 du ser­
1). Manuel i»e B árbara y U nzaoa, gentil-hom bre que fuá
Valencia, y una do las personas mas caracterizadas en di­ vicio« efectivos : entre éstos merecen citarse los quo proH-
de Cám ara de Doña Isabel I I ; murió en Madrid en el m is­
mo dia que el anterior.
cha polilociou, donde murió. tó durante la guerra civil, en la cual so distinguió noto­
E xcmo. S k. D. J osé de A rias U pJ a, m inistro que finí do
E xcmo. S ii. I). F ernando de S antistíban y T kagqia, ma- riamente, sobre todo durante el sitio do Morelln. Es autor
riscnl do Campo, gentil hombre ríe Cámara y oficial que do várins obras militares que han logrado gran aceptación
G racia y Ju sticia durante ol bienio p ro g resista; murió cu
fué del Ministerio ile la Gtiorra ; condecorado con las gran­ y do un notable T r a t a d o d e T o p o g r a f í a .
la Corulla ol dia A de Enero.
I). Manuel MARMAN!, Benndor que filé do los Parlamen­ des cruces de San Hermenegildo, Isabel la Católica, el D. J uan F rancisco L oros, Gobernador civil de la p ro ­
tos do Italia y España, en la primera do cuyas naciones Mérito militar y otras por acciones «lo guerra; murió en vincia de P aten cia, en cuya capital murió el dia 3 do P o ­
pasó á in?jor vida en los primeros dias del mes de Enero. Madrid en 12 do Enero. brero.
E xcmo. S r. D. J oaquín de B oülionv y F onseca , maris­
Es autor de bastante número de.Jiras históricas y políti­ E xcmo. S r . D. J uan J osé P iernas y R amos, Inspector del
cas escritas en uno y otro idioma, que con igual perfec­ cal do Campo do los Ejércitos, gran cruz do la órden do Cuerpo de Sanidad militar, gran cruz deja órden del Mé­
San Hermenegildo, Comendador «lo las de Carlos III é Isa­ rito militar; muerto en Madrid á4 de Febrero.
ción dominaba. Entro las españolas merece citarse su H i s ­
bel la Católica, etc. ; murió en Madrid en 13 do Enero. D. M anuel María B a k ie r y , antiguo jefe de la sección
t o r i a d e la R e g e n c ia d e E x p a r t e r o , y una curiosa R e s e ñ a d e
R osa B ianco , natural do Santa María do Erboedo, y de CorreoB, profesor del Ateneo científico y literario, in­
la s r e la c io n e s d i p l o m á t i c a s d e E s jx t ñ a d e s d e C a r lo s I h a s ta
muerta orila Coruña repentinamente á la respetable edad dividuo do la Sociedad Económica Matritense, y autor do
n u e s tr o s (H a s .
D. R amón G onzález B ande, secretario honorario de S. M., de 114 años. varias obras científicas, entre las que citarémos su A r i t m é ­
jefe de Administración jubilado; murió en Madrid en 5 D. J osé R amon C alvo , reputado actor; muerto en Ma­ t i c a e x p lic a d a á lo s n iñ o s , muy generalizada entre los mis­

de Enero. • drid en 17 de Enero. Nació cu Murcia en 10 do Mayo 1806 mos ; murió en Madrid á 4 de Febrero.
D. Ma n u el J osé de T orres y T orres , decano del Co­ y era hijo de D. José Calvo y do doña Leonor Rubio. Vino E xcmo. S r. D. F ernando de Camus y N e v e , brigad ier
legio de Abogados de Barcelona ; m uerto en aquella capi­ á Madrid y comenzó á trabajar en el coliseo del Príncipe de ejército y caballero gran cruz de la órdgn do San H e r­
ta l en 6 de Enero. el primer año del teatro Español, orí unión de Latorre, Ro­ menegildo ; murió en Madrid en 8 de Febrero.
E xcmo. S r . D. R amón de S bntmanat y df. S akxz , mar­ mea, Arjona y Valero. Innumerables son los papeles don­ D. L u is Gonzaoa dk Pons y de F ú stkr , ductor oh juris­
qués de Castelldosrius, barón de Santa Puu, grande de de logró repartir por igual el aplauso del vulgo y la san­ prudencia inuy reputado en su profesión , autor de algunos
España de primera clase; falleció en Barcelona en 7 de ción favorable do los inteligentes; el primero en que se apreciables trabajos literarios y presidente que fué do los
Enero. distinguió fué el V a le n t ín R o m p e la n z a s , de L a E s c u e l a d e juegos florales de Barcoloua en uno de los primeros con­
E xcmo. S r. D. L uis T omás de Villanueva F ernandez la s r o q u e ta s , triunfo que no fué más que precursor de otros sistorios ; murió en la capital del antiguo Priueipado en
DE Córdoba, Duque de Mcdinaceli, Santistébau y otros muchos, igualmente merecidos. De esta verdad puede ol dia 10 de Febrero.
títulos ; murió en París casi repentinamente, en cuya po­ convencerse quien le haya visto en J o r g e e l A r m a d o r , S a ú l, E xcmo. S r. D. F ederico F aild e y Mo n je , capitán de
blación se le hicieron suntuosos funerales. L a A lq u e r ía de B r e ta ñ a , B r u n o e l T e je d o r , Is a b e l la C a tó ­ navio, brigadier honorario de la Armada; murió en Ma­
D. A ntonio F r e ir e , relator de la Audiencia de Sevilla ; l i c a y otras muchas. drid en 21 de Febrero.
muerto en aquella población en 8 de Enero. D. W enceslao Ayoüals de I zco, ex-diputado á Cortes I lmo. S r. D. V icente García González, segundo jefo
D. C elestino de F rías S ai. azar y T orres V ildósola, re­ y alcalde que fué de Vinaroz ; escritor popular, cuyas quo fué de la Dirección del Tesoro ; murió en Madrid en
dactor que fué de L a R e p ú b l i c a I b é r i c a , E l N u e v o M o is é s , obras tuvieron durante alguri tiempo gran aceptación : 23 de Febrero.
L a P r e n s a y otros periódicos ; muerto en Madrid en 9 de figuran entre las mismas L a e s c u e la d e l p u e b lo , L o s v e r d u ­ E xcmo. S r . D. V icen te A süero y Cortázar , doctoren
Enero, antes de haber cumplido 25 años, cuando se halla­ g o s d e l a h u m a n id a d , M a r í a l a h i j a d e u n j o r n a l e r o , L a M a r - medicina y c¡rujia, catedrático jubilado de la universidad
ba preparando la publicación de un libro de artículos, poe­ q u e s a d e B e l l a f l o r , P o b r e s y r ic o s ó l a b r u ja d e M a d r i d , L a de Madrid, individuo de la Academia de Medicina y C¡-
sías, cuentos y novelas, que pensaba titular M o s á ic o . Fundó y diri­
M a r a v i l l a d e l s i g l o y L o s 2 >obres d e M a i l r i d . rujia de la misma capital, donde falleció en 23 de Fe­
E xcmo. S r. D. J uan B ravo M urillo , una de las perso­ gió en Madrid una sociedad literaria y editorial, á cuyo brero.
nes inás eminentes de nuestra patria. Murió en Madrid ¡ i 10 cargo corrió también la publicación de algunos periódicos E xcmo. S r . D. L orenzo A brazóla , diputado á Córtes
de Enero. Nació en Junio do 1803 en Fregenal de la Sierra, satíricos ; muerto en Madrid á la edad do 71 años en el dia desde la legislatura de 1837, senador vitalicio más tarde,
y en 1825 recibió el título de abogado eu la Universidad 17 do Enero. Ministro de Gracia y Justicia en diferentes épocas, y de
de Sevilla; poco más tarde fuá nombrado catedrático de D. Manuel L orenzo y A uranz, joven y reputado pro­ la Gobernación en 1839 ; muerto en Madrid en 23 de Fe­
filosofía de la misma, dejando al cabo do algún tiempo la fesor músico ; murió eu Jerez de la Frontera. brero. El Sr. Arrazola había desempeñado también la pre­
cátedra por el foro. Trasladado á Madrid ó inscrito en el E xcmo. S r. D. P edro Caro y R ipoll , mariscal de Campo sidencia del Tribunal Supremo de Justicia, y estaba con­
Colegio de Abogados, adquirió notable crédito como ju­ de los ejércitos nacionales, Consejero supremo de la decorado con la grau cruz de Carlos III y de Isabel la
risconsulto , y fundó el B o l e t í n d e J a r is p r u d e n c ía y l e g i s l a ­ Guerra, caballero gran cruz de Isabel la Católica y San Católica. Durante algunos años dirigió con notable acierto
c ió n y E l P o r v e n i r , y empezó á brillar en el Parlamento, al Hermenegildo, Comendador de la de CárIo3 III, etc, ; fa­ la Revista titulada E n c i c l o j i e d i a c s j m ih o Ui d e d e r e c h o y a d ­
<jue Je habían llevado los sufragios de los electores de Se­ lleció en Madrid á 21 de Enero. m in is t r a c ió n .
28 L A IL U ST R A C IO N E S P A Ñ O L A Y A M ER IC A N A . N." II

Excuo. S r. D. T omás V ela y A churre , brigadier de ca- su cabeza caia otra vez sobre el respaldo del Billón, re­ ¿Era ol orgullo satisfeclio del pintor? ¿Era una conse-
balleria, gran cruz do la orden militar de San Hermene­ cobrando c-l punto de apuyo predilecto de todo indolente cuencia de nqmd amor entrnfiahle (pio <1 poeta y el artista
gildo y condecorado con otras muclias por acciones do soñador, y volvía á quedar sumergido en profundo arro­ cousagran a veces usti creacion miìs perfetta? ¿Era el
guerra ; murió en 24 de Febrero. bamiento. recngimiuito p re o tiT s o r denqm lla explosion di i orgullo
E xcmo. S r. D. F ernando U uuin p e C é u s y P a r eja , c a ­ ¿Cu<i érala causa de aquella extática contemplación? ixaltado, a cuyo impulso Miguel Angel boria con el mar*
ballero gran cruz de las órdenes de Isabel la
Católica y de la do San H erm enegildo, con otras
v aria s por acciones de g u e rra , ex-diputado ó
Cortes, gobernador que fue de la provincia do
M adrid, m inistro jubilado del Tribunal Supre­
mo de G uerra y M arina, e tc., e tc .; murió en di­
ch a capital á 2 5 de Febrero.
(&• c o n t in u a r á . )
O. Y B.

LAS VÍCTIM AS DEL IDEAL (1 ).

E L RETRATO D E LAURA.

I.
Llovía aquella noche si Dios tenía qué llover,
y el trueno rugiu en el espacio : el termómetro
marcaba dos grados bajo coro. El calor que des­
pedía la estufa en el estudio do Víctor estaba
reforzado por el de un brasero, cuya lumbre,
amontonada en forma do pirámide, se derra­
maba como uua lluvia do oro por los taludes que
do cuando en cuando oprimía distraídamente
Víctor con ol disco de uua badila monumental,
y contribuía á desarrollar on el espacioso recinto
un calor que convidaba á la pereza.
El agua repiqueteaba en los cristales de la
gran claraboya del estudio, cuyo rasgado cua­
drilongo se inflamaba en la penumbra al res­
plandor dorada relámpago, simulando el fondo
fantástico de mi cuadro de Breughel infernal: y
entóneos las armaduras, bis platos árabes y los
objetos metálicos de toda especie (pie decoraban
caprichosamente las altas paredes y los ángulos
oscuros del estudio, despedían reflejos de fuego,
animábanse instantáneamente, y como por un
efecto galvánico, los rostros do las estatuas,
bustos, tapices y maniquíes que poblaban aquel
extraño museo de antiguallas, y todo volvía á
la oscuridad.
Y digo á la oscuridad, portum la llama de uua
lámpara romana, que puesta "obro un mueble de
ébano in< rustido do bronce y marfil, reliquia
preciosa de los esplendores del llenacimiento,
ardía avaramente en un rincón, no difundía sus
rayos más allá de una zona do luz muy escasa,
que dejaba en la penumbra la casi totalidad del
estudio.
El mechero do la lámparo, vuelto Inicia la pa­
red , alumbraba de lleno un lienzo en que so veia
asombrosamente pintada una cabeza de mujer,
más admirable aún que por la belleza del tipo y
la magia sin igual del estilo, por la incompara­
ble poesía de la expresión.
Era un rostro dotado de ¡ndeiiniblo encanto,
en el que los reflejos de uu alma pura, cando­
rosa y virginal, armonizaban de tan extraño mo­
do con la vehemencia de una organización ar­
diente y apasionada, que no era posible discer­
nir cuál de estos dos rasgos, admirablemente fun­
didos por el pincel del artista, pesaba más en la
balanza de la simpatía que despertaba en el al­
ma aquella imagen encantadora.
Parecía el rostro de un ángel en quien Dios
hubiera encendido, para castigo, el fuego délos
afectos de la tierra.
Sentado orí un sillón enorme de cuero, en el
punto matemático adonde dirigía su mirada
aquel mágico retrato, cuyas tintas revelaban por
su frescura una regiente ejecución, Víctor con­
templaba embebecido la creacion que acababa
de brotar de su paleta maravillosa, y se estre­
mecía de emoción cada vez que la roja luz de un
relámpago, haciendo palidecer la lámpara que
la alumbraba, prestaba ú aquella pintura los
signos fugaces de uua fautásticu vitalidad.
Y entonces el pintor intentaba romper el pro­
fundo embeleso en que le sumergía la contem­
plación de su obra; sus ojos se desviaban de
prouto de la línea que ejercía sobre ellos tan
poderosa atracción,y su mano, guiada por un
impulso maquinal, atizaba descompasadamente
la lumbre del brasero. Pero á los pocos instan­
tes su mirada volvía á buscar el foco de luz que
la lámpara concentraba en el encantado lienzo;

(1) Este es el titulo general de una serie de no­


velas que escribe el autor, de la que forman parte la
presente y la que con el titulo de Una vidim a del
ideal ha publicado L a I lustración . ZAItAGOZA.—Aspecto de la calle de Flandro el 4 del actual, momentos antes de la lucha.
N.° I! L A ILU ST R A C IO N E SP A Ñ O L A Y A M E R IC A N A 29

M A O R I I».— S u c e s o s d e l :i d e l a c t u a l .

1, Una avanzada en los barrios bajos—2. Alrededores del Congreso á las oclio de la mañana.— 3. Ki-tarion de caballería en la pla7n de Oriente.— * . Patrulla de Guardia civil.—
5. Puestos de infantería y artillería cu la Puerta del Sol, esquina del café Imperial.
30 L A IL U ST R A C IO N E S P A Ñ O L A Y A M ER IC A N A . N.° II

tillo á su estatua predilecta, llamándola imperiosamente brosa á las voluntades de Enrique, y era á veces basta Víctor cerró los ojos como una victima resignada que se
á la vida ? juguete de sus caprichos. dispone al sacrificio; exhaló un profundo suspiro, y dijo :
No ; Victor tenia la conciencia de su genio ; pero no co­ Pues bien, una noche que Victor, arrellanado en su si­ —Sé que contigo es inútil toda resistencia. Llévame
nocía el orgullo que suele inspirar la dificultad vencida. llón junto á la estufa, dejaba flotar su espíritu entro el adonde quieras y líbrame cuanto ántcs del F í a crucia que.
Ademas, aquella admirable pintura no era un esfuerzo ex­ sueño y la vigilia, Enrique entró á deshora en el estudio. me reservabas para esta noche.
traordinario de su talento, acostumbrado íi producir ma­ Al oir la puerta, aquél abrió los ojos, y reconociendo á Y diciendo esto, Víctor so levantó perezosamente de su
ravillas. su amigo, murmuró entre un suspiro y uu bostezo: sillón y se vistió para salir.
Otra era, pues, la causa de la visible fascinación que — ¡ A h! ¿ eres tú, Enrique ? Á la puerta esperaba un coche de alquiler. A los pocos
sobre él ejercía aquella encantadora imagen, y voy á ex­ — S i, yo soy ; despierta, espíritu fantástico, y asómate momentos los dos amigos penetraban, el uno impetuosa­
plicársela á mis lectores mientras la lluvia sigue azotando por un iiiBtanlc á la realidad, respondió el pintor áulico mente y el otro como á remolque, en el teatro de Jovo-
los cristales de la claraboya y el embrujado lienzo conti­ con la fraseología que le era habitual; necesito de tí. 11 anos.
núa solicitando la atención de Víctor con invencible poder — ¿De mi?....Habla, ¿qué aires te traen por el estudio Habia aquella noche un baile de abonados; la concur­
de atracción. á esta hora desusada ? rencia era brillante y nnmerosa, como dijo después la ga­
Víctor era un artista cuyo nombro había pregonado la — Cefirillos bonancibles do un amor afortunado, dijo cetilla, 3' cuando llegaron Víctor 3' Enrique reinaban en
fama por toda Europa. El genio de la especulación, ve­ Enrique arreglándose delante de una gran cornucopia el el salón una atmósfera, una confusión y un desbordamien­
hículo moderno de rápidos movimientos, que lleva á los úl­ lazo de la corbata; vístete. to de luz, que estuvieron á punto de rendir el aliento »lo
timos rincones del mundo las primicias de todo aquello — ¿Que me vista? exclamó Víctor con tono doliente, nuestro célebre pintor, acostumbrado hacia algunos me­
que está destinado á cotizarse muy alto en el gran mer­ cambiando de postura en el sillón. ¿Para qué? Ya sabes ses á estas tres gollerías de la existencia humana : el si •
cado del siglo, habia extendido desde muy temprano la que me he propuesto no salir de casa por la noche. lcncio, el espacio y la media luz.
reputación del artista, y los grandes mercaderes que Bir- — Cambia de propósito ; eso se ve todos los dias. Pero Enrique hendió la muchedumbre, llevando en pos
ven de agentes intermedios entre el arte y el capricho, se —Es tarde, Enrique; déjalo para mañaua. á su víctima, 3' so disponía á recorrer por segunda vez el
disputaban el monopolio de sus obras. —Imposible, Victor ; se trata de una cita amorosa. salón, cuando dos dominó» de raso azul le atajaron el paso
Con la ayuda de esta palanca poderosa, que tenia por — ¡ De una cita amorosa!....¡ Amor un positivista!..... entonando al mismo tiempo un dúo de falsetes, que sacu­
punto de apoyo el mérito superior de Víctor, sus cuadros — Sf, amigo mío, se trata de una mujer incomparable. dió basta en sus fibras más recónditos el sistema nervioso
habían llegado en poco tiempo á tal grado do estimación, — Ya, de una mujer bella, jóven.... y rica probable­ de Víctor. Pero afortunadamente aquella tempestad de,
que no habia objetos de lujo más codiciados por la frívola mente. notas penetrantes fué de cortísima duración, pues Enrique
vanidad, ni joyas de más alto valor para los grandes co­ — No, de una mujer rica á ciencia cierta, y problemá­ casi en el mismo instante ofreció el brazo á una de las
leccionistas. ticamente jóven y bella. máscaras, y haciendo á su amigo una seña para que eje­
Pero Victor era un soñador, y un soñador indolente ¡ l*o imaginaba! dijo Victor poniendo los ojos en cutase la misma evolución con la otra, empezó á derivar
como todos los do su especio. Una herencia cuantiosa, ad­ blanco; una mercancía....¿ y qué teugo yo que ver con ese de la corriente con el propósito no muy disimulado de
quirida en los momentos en que recogía los primeros lau­ articulo de comercio ? perderse al primer descuido entro la gente.
reles artísticos, había cortado en sus brillantes albores — Mucho, toda vez que ese articulo do comercio, como Pero la influencia de aquella atmósfera densa, á que no
una carrera gloriosa. Víctor pintaba poco y soñaba mucho ; tú le llamas, necesita que le cubra esta noche el pabellón estaban acostumbrados sus pulmones, do aquel movimien­
pintaba lo puramente preciso para despertar do cuando en de la amistad. La bandera salva la mercancía. to acompasado do las animadas corrientes que surcaban el
cuando en las altas regiones del capricho y de la fortuna — Explicate, hombro del siglo. pavimento, de aquel monótono rumor, salpicado de gritos
el deseo de sus obras y promover entro sus admiradores — Escucha, hombre de las nieblas. E l l a va esta noche agudos y guturales que se elevaban en el espacio, resol­
una guerra do conquista cada vez que su pincel daba se­ al baile del teatro de Jovellanos, donde espero oir de sus viendo 011 un insoportable zumbido los múltiples ruu\i>s
ñales de vida. labios, huérfanos do padre y madre, un argentino si de del salón, habían producido ya en el cerebro de Víctor el
Pero en breve desaparecieron también estas raras mani­ pecho que lia de ponerme en .posesión de su mano y su efecto de la embriaguez.
festaciones de su genio, y Victor so dió á soñar con tan fortuna....Pero e l l a tiene una tia, como la almendra tiene ( S e c o n t in u a r á . )
firmo propèsilo de reducir á esta única señal de vida las una cáscara, y esta cáscara me incomoda. P ebrorin G arcía Caukna.
funciones de su entidad moral, que no volvió á acordarse — Pártela, dijo Victor; ¿qué quieres quo te diga ?
más que en una sola ocasión do su gloriosa paleta. — ¡Víctor! exclamó Enrique con énfasis cómico ; no me
Y era quo Víctor so lmbia enamorado do una sombra, obligues á abominar del primer pintor do mi siglo. Te digo
do una vision , do un producto de su fantasía. Ilabia ima­ que esta noche necesito do tu amistad.
C0NS0LATR1X AFFL1CT0RUM.
ginado una mujer tal como puedo concebirla una imagi­ — ¿Para qué? ( P ! , AIUA k MAHÍA.)
nación ociosa que no comprendo lu vida sino en condicio­ — Para que por espacio de una hora lmgas perder ¿cea Amparo y consuelo
nes uxtrañas al planeta ; lmbia imaginado un alma bella tia funesta la conciencia del tiempo y del espacio; es de­ Del ánima mía,
en nn cuerpo hermoso, un ángel en una mujer, algo pare­ cir .pura que me libertes por nlgtiuos minutos do su cala­ Olí Reiua del cielo,
cido áuna llama rutilante encerrada en los cristales mági­ mitosa vigilancia. Va en ello mí dicha, mi porvenir, una Olí Virgen María,
cos do un fanal : y una vez on posesión do esta soñada hilera de casas en las Vistillas, y una tahona en Avnpiés. La pena me acosa,
Atiende amorosa
imagen, Víctor lo dió sobro el lienzo apariencia humana, y Va en ello ademas el decora del arte : si me cobo con ella, Mi humilde oración;
se durmió cu el lecho do flores de la ilusión, resuelto á no ya no pintaré. Agobian dolores
despertar hasta quo el cuerpo do aquella sombra, si por di­ — lié ahí el objeto do todos tus deseos y de todas tus Mi pecho antes fuerte,
cha existía en la tierra, viniese algún dia á realizar la su­ ilusiones, repuso Víctor suspirando ; eras un filósofo abor­ Latidos do muerto
ma do los felicidades soñadas. recible, Enrique; pero si al menos no abusaras de mi sim­ Me da el corazón!
El iris ansiado
Y desde aquel punto el pintor abandonó sus pinceles, y patía. ¿ Por qué me obligas á representar un papel supe­ Alcánzame, olí Madre¿
el hombre exhaló un gemido lastimero cada vez que una rior á mis fuerzas? Jamas desairado
mano amiga ó enemiga lo llamó á la realidad de la vida, ó — Es un sacrificio licróico, sobrehumano, digno de la De Dios, nuestro padre,
le mostró el abandouado sendero do la gloria. epopeya: lo sé, y por eso no se lo pido á nadie sino á ti. Ha sido, Señora.
Pero mi dia Victor sacudió de improviso las ueblinas — ¡Calla y no me obligues al menos á agradecerte la Tu auxilio, que implora
La estirpe de Adan.
do su espíritu y se agitó en su locho de vapores. El por­ preferencia ! Tu elogio es más autipático que la hora de De la hosca tormenta
tento estaba realizado ; habia encontrado á la mujer so­ tormento que me quieres hacer pasar al lado de esa vieja. La furia quebrantas,
ñada. — Pues miro, no, repuso Enrique con la voz arrulladora Y duerme á tus plautas
Escucheu mis lectoras cómo so realizó este prodigio. de quieu desea hacer pasar gato por liebre : la tia es rela­ El bronco huracán.
tivamente jóven, y no has visto mujer que sepa conservar Yo he visto otras veces
II. Del pecho la lava
mejor su ixermosura. Para eso se pinta sola.
Helarse en las heces
Víctor tenia un amigo : este amigo bc llamaba Enrique, — Bien, ya veo cómo se pinta ; ahora dime, ¿ó qué lla­ Que el labio apuraba,
y era la única criatura humana cuya voluntad pesaba de mas tú r e la t iv a m e n t e jóven? El nombre invocando
algún modo sobre aquel espíritu indoleuto y dormilón. — Hombre, por ejemplo, suponiendo una sucesión de Que el cetro nefando
Enrique era un pintor adocenado, uno de esos artistas que guarismos desdo el 1 al 1 0 0 , está más cerca del que em­ Quebró de Luzbel.
no producen sino á la sombra del favor oficial. Positivista pieza que del que acaba. Pero, áuu suponiendo que sea Hoy es, cual entonces,
Tu nombre, olí María,
y descreído por excelencia, no abrigaba el menor entusias­ vieja 3' fea, ¿te negarás acaso á tender á tu amigo una El áncora mia,
mo por un arte que no le proporcionaba los medios de pa­ mano protectora? ¿Tu egoísmo de soñador habrá llegado Mi espada y broquel.
sar la vida alegremente. En este punto llevaba á tal ex­ tan al cabo que no quieras robar una llorad la contempla­ Entonces, la horrenda
tremo la despreocupación y hasta el menosprecio de sus ción deesa imagen inverosímil en quien adoras tu propio Batalla reñida,
propias obras, que uua vez recibido el precio del trabajo que genio, para labrar la dicha de un hombre honrado que La escuadra tremenda
bahía mendigado en los antesalas, él era el primero que tiene el buen sentido de vivir á flor do tierra? Del Orco vencida,
Que aullando asnltalm
levantaba el látigo de la sátira para hundirlo en el ri­ Y al decir e sto , Enrique señaló con ademan dram ático El ánima, esclava
diculo. •• la inim itable pintura ante la cual hem os visto á V íctor De fiero dolor ;
Este era el artista : en cuanto al hombre, Víctor era de­ sumergido en profundo éxtasis. Vision deleitosa,
masiado inexperto y distraído para seguir las sinuosidades —¡ Inverosímil! dijo Víctor suspirundo; imposible, di­ Cual viento de eslió,
de aquel árido corazón de materialista. Ademas, la sim­ rás mejor. Cual fresco rocío,
Templaba mi ardor.
patía os uu principio caprichoso de nuestra constitución; —Sí, imposible, repitió Enrique , y tú mismo has dado Mi sueño velaban
no siempre sabe lo que quiere, y muchas veces, coutra to­ proporciones fabulosas al absurdo, prestaudo apariencia Tus ángeles bellos:
das las teorías de los filósofos que explican sus fenómenos visible ú tu tipo ideal. ¿No era bastante encontrar reuni­ Al viento ondulaban
y todas las previsiones de la humana sabiduría, se pro­ das en una mujer las cualidades morales con que sueña tu Sus blondos cabellos:
nuncia precisamente en favor do aquello qnc nos es dese­ deseo; aquel alma entusiasta por el arte, aquel corazón Cual sol rutilante
Brillaba el diamante
mejante y está en desacuerdo con nuestro» niáa arraigados apasionado y vehemente, aquel dualismo extraño en que Del bélico arnés;
instintos. se funden el ángel y la hurí del paraíso, aquel no sé qué So el codo ya vueltas
El hecho es que Victor, que no tenia un átomo de posi­ de novelesco y de extraordinario que constituyen la esen­ Las largas espadas,
tivista, que consideraba su arte como nn sacerdocio, aun­ cia de tu creación? Pero eres pintor y no concibes el fon­ De herir embotadas,
que habia abandonado las prácticas del culto, y «pio odia­ do sin la forma. No me opongo, sueña cnanto quieras y La punta á los piés.
Y pues vencedora
ba, como puede odiar un distraído, á los hombres de espi­ espera la encarnación de tu sueño por los siglos de los bí- Con ellos tú fuiste,
rito ágil y de flexible organización avezados á explotar el glos; yo, por mi parte, no tengo tanto tiempo que perder. Defiéudeme ahora,
campo de la vida, se plegaba con una ductilidad asom- Responde, ¿quiereshacer lo que te pido ? Qne esto3- aun más triste :
N.° II L A IL U ST R A C IO N E S P A Ñ O L A Y A M E R IC A N A . 31

Su esfuerzo confunda nNo esperamos lucro, porque cuando afanosamente so han dedicado muchos fuera de España, mientras qne en
La saña Iracunda busca pan, nadie so para á comprar versos, n nuestra patria nadie ha escrito sobre esta materia con tan­
Del genio «leí ma!.
Del negro pecado, Todos los romances do la presente C o le c c ió n son buenos, ta extensión y profundidad como el Sr. Armongol y
Ay Madre, son hijos y muchos de ellos superiores y perfectos. Asi la empresa Comet.
Los malos prolijos intentada con esta publicación ha de tener el más favora­ Oportunamente nuestro autor observa que el estado de
Que sufre el mortal. ble éxito, porque dichos romances ofrecen tanto lujo de IaB cuestiones penitenciarias en España es una prueba ple­
Si el cielo dispuso pocsia, tal belleza de lenguaje, tal riqueza de armonía, na de la indiferencia que corroe á cata sociedad, cuya gra­
Procela tan larga,
Beber no rehusó de lozanía y de vigoroso estilo, que su lectura causa inde­ ve afección la tiene como dormitando al borde del preci­
La pócima amarga cible deleite, empeña la atención, regala el oido y admi­ picio y sin despertar á las voces do alerta que dan los po­
De llanto y dolores, ra y embelesa la mente. cos que áun tienen aliento.
De angustias y horrores Esta obra, impresa con gran belleza y lujo, contiene una
Que, infiel, merecí. por D. Francisco Balajucr y Primo,
F a f r i r a c ió n d e ju b o n e s ,
ingeniero industrial, químico y mecánico, 2.a edición. Ma­ introducción y diez cajdtulos quo por menudo y completa­
Mas contra rebeldes drid : 1873. (Librería de Cuesta.)
E insanos intentos, mente discuten, esclarecen y resuelven todo lo referente á
Mi voz, mis lamentos, El presente tomo de la colección de M o n o g r a f í a s in d u s ­ una cuestión de tanta trascendencia é importancia. Los
Levanto háeia tí! t r i a l e s contieue seis partes, que son: composición de los
elogios unánimes que la prensa y las personas entendidas
Comillas, 8 de Octubre 1873. jabones, fabricación en general, id. de los jabones duros, han tributado al trabajo del Sr. Armengol demuestran que
P edro de Madrazo, id. de blandos, id. de los fríos, y por último, jabones de dicha notable obra merece estudiarse por cuantos intenten
tocador. conocer el asunto quo trata, y que es un libro qne honra
La claridad de las explicaciones y los grabados del tex­ al docto jurista, relator de la audiencia de Barcelona, á
to aumentan el valor de la presente monografía, que lia quien se deben unos E s t u d io s p e n it e n c ia r io s , tan útiles, con­
LIBROS NUEVOS. merecido elogios de la prensa industrial. venientes, completos y profundos.
E milio I I uklik .
R o m a n c e r o E s p a ñ o l. C o le c c ió n d e R o m a n e e * h is t ó r ic o * y t r a -
d ie ia n a lr * , escritos por los Sres. Boccherini, Cabiedes Casti­
por D. F. Balagucr
M a n u a l p r á c t i c o d e a n á lis is d e los v in a s ,
llo y Soriano, Clark, Larrnga, Muñoz y Huir., Navarro y y Primo, ingeniero, 2.a edición corregida y considerable­
Oonzalvo, Ossorio y Bernard, Vera y otros. Madrid, 187». mente aumentada. Madrid : 1873. (Librería de Cuesta.)
(Librería de Cuesta, Carretas, 9.) CARTAGENA.
La casa editorial de los Sres. Cuesta, cuyos libros de
Nnestro colaborador artístico el Sr. de Pelliccr lia
El pueblo no puede estar sin poesía; necesita cantar, fondo son importantes y abrazan todos los ramos de la
salido para dicha plaza á tomar apuntes sobre el terre­
alegrarse en sus fiestas, celebrar á héroes y sucesos que agricultura é industria, acabado publicar la segunda edi­
no, ú fin de ilustrar con ellos las páginas de nuestra
fijan su atención ó influyen en su suerte. No hay socie­ ción do esta notable obra, útilísima para agricultores, fa­ publicación con tanta exactitud y abundancia do deta­
dad en que la poesía deje do ser un hecho, y en quo este bricantes y comerciantes. lles como lo hizo cuando realizó su viaje al campa­
hecho no produzca sus frutos más ó menos sazonados, más El anunciado M a n u a l da á conocer los procedimientos mento de las tropas sitiadoras.
ó menos gratos. El pueblo, que tiene más desarrollada la más sencillos y que mejores resultados suministran para
fantasía que el entendimiento, necesita un medio de con­ analizar los vinos, y prescindo de cuantos sedo tienen in­
servar en la memoria los acontecimientos notables, los teres científico ó que exigen para practicarse completo y AJEDREZ.
preceptos de la moral y de la política, y este medio no es extenso laboratorio y grandes conocimientos químicos.
Las adulteraciones de los vinos forma la segunda parte PROBLEMA NÚM. 1.
otro que la poesía.
de dicho M a n u a l. Siempre que el asunto lo exige, se acom­ (De Mr. P. Morphy.)
Los autores del R o m a n c e r o p o p u l a r que hoy anuncia­
pañan grabados en el texto. La obra de ( j u c h o trata es muy IILANCAH. R * 8 . - 1 ) r 8.— C H 3.— P n 8.— P « 7.— P. K A.— P * B.
mos, han intentado sustituir la inmensa cantidad de ro­ NEG RAS. U r, 8.— D n 2 — T * 2.— T n 8.— A ii H.— A c 8.— C r, R.
mances, que adulan los malos instintos contando hazañas importante para un país como España, quo por su riqueza —V l 8.—P II J.-P o A.— I> K 7. — P K « . —P u 7.— P C 6 .- P s 7.—
vinícola figura en primor término cutre todos los del mun­ P n a.
do ladrones ú obscenos amoríos, con lecturas provechosas
do. Como dicho libro es tan necesario para muchos, no Ju egan las blancos y dan m ate en ocho jugadas.
do grandos hechos históricos.
Hé aquí los títulos y asuntos que componon la colec­ tardará en ngotarso esta segunda edición, con tanto esme­
ro redactada por ol Nr. Balaguer, autor do iiumorosos tra­ PROBLEMA NÚM. 2.
ción del nuevo R o m a n c e r o p o p u l a r :
(D E D . A N T O N IO V I C E N S , D E P A L M A . )
uL a esposa de P a d illa .— L a c a lle d e la C a b e z a .— L a bajos notables é importantes para la industria.
N E C RAS.
t o r r e de. Io n L u ja n r s . — E l v o t o <le A l f o n s o V I . — E l C a rd e ,
A lm a n a q u e b u fa j>ara 1874: Madrid, Darán.
nal C u n e r o s . — L a b a t a l l a de. O t u m b a . — A l a l a vd e u n c a n ­ D K G H
d i l . — E l n u e v o m u n d o .— E l a lc a ld e , d e M ó * t o le s . —F r a n c i s ­ Contieno esto lindo folleto bellisima« composiciones do
c o de A v e lla n e d a . E l r e l o j ele S a n P lá c id o .— L a s T r i n i ­ loa Krcs. Ilartzcnbnsoh, Itetos, Rui/. Aguilera, Bantistéban,
t a r ia s d e s c a lz a s .— E l c o m p r o m is o d e C u s p e . - L a b a t a lla d e Catalina (D. Manuel), Sepúlvoda, Perillán y otros de nues­
( j lia d ,d í te .— L a p e ñ a d e lo s e n a m o r a d o s . I ) . A l/ o n s o V I I /. tros primeros escritores, siendo la nula notable una, algo
— L o s h e r m a n o » C a r v a j a le s . —T r a f a l g a r . — L a m u e r t e d e u n verde, del Sr. Valora. Publica además excelentes caricatu­
a r t i s t a . —G r a n a d a . — P e d r o d e V e r a .— A lfo n s o V I en des­ ras do los Eres. Cubas y Luqui», una de ellas al cromo, y
t i e r r o . — L a p r i s i ó n d e Q u e v c d o .— E l A v e M a r í a . — L a C a m ­ cuantos atractivos puede reunir una publicación do este
p a n a d e H u e s c a . —E ! m e j o r p e e m i ó d e l a r t e . — L a v ic to r ia género.
d e L e p a n t e . — E l C r is t o d e l S o c o r r o . — J a q u e al re y .— E l Natural os, por tanto, quo este A l m a n a q u e llame la aten­
m u la t o d e M o r i l l o . — M u e r t e d e Lope, de V e g a .— E l l a u r e l ción del públícu.atioionado á la literatura cómica y ú los
de la Z u b ia .— D o ñ a J u a n a la L o c a .— E l t r i b u t o d e la s dibujos picantes de las bailarinas y otras gentes de buen
c ie n d o n c e lla s . —Z a r a g o z a . — L a p e r l a d e A v it a . — L a c o n ­ humor.
q u i s t a d e M á l a g a . — E l R a s t r o .— V i l l a m c d i a n a . — E l s u p l i ­ A g e n d a d e b o ls illo , verdadero inseparable,
c io d e D . A l v a r o d e L u n a .—B a ile n .— J u s t ic ia d e l re y d on
P e d r o . — A l v a r ez d e C a s t r o .— U n a a v e n t u r a d e O lm e d o .—
ó libro de memoria, diario pnra el año 1874. Con el calendario y
la Guia de Madrid. Libro muy curioso y «le eran utilidad
E l s o p lo de. l a m u e r te .— E l p r i n c i p e D . C a r l o s . — ¿ C o n tr a para uso de todos los negociantes, comerciantes, banque­ BLANCAS.

D i o s ú c o n t r a e l r e g í —L a m u e r t e d e E s c o b e d o .— E l c a b a ­ ros, etc., y en una palabra, para toda clase de personas. Con- Ju eg an estas y d an m ate en cu atro jugadas.
tieuc, ademas de otras muchas é importantes noticias: 1.®Ley R . Cañedo.
lle r o de G r a c ia .— L a A r g a n z u e lo .» de presupuestos para el año económico de 1872-73 que conti­
Los autores de Ins anteriores notabilísimas composi­ núa vigente para el de 1873-74 según la ley de 6 ue Agosto
ciones expresan el objeto que al publicarlas se han pro­ de 1873. Apéndice letra C. Bases relativas al impuesto sobre
puesto, en los términos siguientes :
derechos reales y trasmisión de bienes.—2.° Ministerio de
Hacienda. Decreto creando impuesto* ext raordinarios y tran­
ANUNCIOS.
.a... Tan pronto como se dibujó en nuestra alma una sitorios de Guerra.—3.° La G u ia d e M a d r i d ha sido revisada
concepción poética, quiso escaparse del recinto donde con mucha escrupulosidad y completada notablemente; el REGALO PARA AÑO NUEVO.
C a le n d a r io - A lm a n a q u e , libro en blanco diapordia ; la Nueva
pretendíamos aprisionarla : quiso revestir el atavío nacio­ tarifa de correos enmendada, puesta en cuadro, para el fran­ Ninguuo seguramente puede hacerse á las señoras y se­
nal, ornarse con las glorias patrias, y llegar hasta e l p u e ­ queo prévio de las cartas ordinarias y certificadas, muestras ñoritas, que mejores resultados y distracciones les pro­
b l o , hasta ese pobre pueblo, cuyo amor es para todos una
de comercio, periódicos, impresos, libros, pruebas de impren­ porcione, que la excelente máquina de coser
ta, tarjetas de vista, de retratos fotográficos, y medicamen­
necesidad, y cuyo servicio es uu problema ¡nsolulde, un tos pnra España, el extranjero, Ultramar y posesiones de SILENCIOSA PERFECCIONADA,
verdadero logogrífo 6 ¡ se apaga la antorcha de la fe, si se Africa; las tarifas y reglamentos de I09 coches á la calesera
la mejor do cuantas hasta el dia se conocen y la única
y de plaza ; las tnrifns.de todos los ferro-carriles de España,
que tiene guias y aparatos para cuantas clnses de laborea
vola el cielo de la esperanza y se rompen los lazos de la con las horas de salida y llegoda de todos los trenes ; las ca­
caridad. puedan ocurrirse, sin necesidad de hilvanar y preparar.
lles y plazas de Madrid, etc., etc. Madrid, librería de Bai-
b Escribamos para ol pueblo, dijimos; recordémoslo su lly-Balliére, plaza de Santa Ana, 10- Recomendamos á nuestras Snscritoras que, antes de com -
prar ninguna máquina, pidan á D . A n t o n i o d e P a z , de, S a n '
historia y sus tradiciones para que so goce en ellas como C a le n d a r io A m e r i c a n o para 1874, ta n d e r , las muestras de labores, precios, modelos y domas
se goza el anciano en los dulces recuerdos de su juven­
ó sea calendario español hecho on forma del americano. Ma­ pormenores, que les remitirá grátis, en la seguridad do qne
tud. Despertemos en él todo el entusiasmo de sus mas san­ drid, librería de Bailly-Balliére, plaza de Sonta Ana, 10. quedarán sumamente complacidas y optarán por tan exce­
tas empresas para que sienta robustez en su corazón. Lu­ lente máquina, recomendada por el infinito número de per­
chemos contra esas torpes apologías del crimen, y contra Los calendarios de esta librería son indispensables y es­ sonas que la usan.
esas mal rimadas aberraciones do la fantasía con quo tan tán tan acreditados que no hay necesidad de recomen­
DICCIONARIO POLITÉCNICO ILUSTRADO,
frecuentemente se lo emponzoña. darlos.
1>K L is BILLAS »»TUS.
nllé aquí la historia do nuestro trabajo, de nuestros sa­ ó libro de memoria diario para el
A g e n d a d e B u fe te
ARQ U ITEC TU RA, ESCULTURA Y PINTURA,
crificios, de nuestras aspiraciones: lié aquí, en fin. la his­ año de 1874, con noticias y guia de Madrid (Bailly-Bailiére).
por D. J<J«6 M. Foch y Brossa.
toria de nuestro R o m a n c e r o español. Agenda de ta la r a n d e r a y d e la p la n c h a d o r a para el año Ilii.tra Jo con gran numero Je (Trabajo» intercalado» en el lefio.— Publícate
nS¡ hemos cumplido bien nuestro propósito, no liemos de 1874 (Bailly-líalliére). por t t r i r t Je 39 columna», a 1,30 pésela» caja t t r u .
de juzgarlo nosotros. Hemos hecho uu libro. ¿Quiéu esta­ E«tas agendas están ya tan generalizadas por su gran
rá destinado á fijar definitivamente su critica? utilidad material y positiva, que son indispensables on EL CONSULTOR ARTISTICO,
dNo esperamos aplausos, que no pueden producir las ma­
to las las casas, tanto particulares como de comercio. CORRESPONDENCIA ENTRE A«TIST«A» f CONSTRUCTORES.
nos ocupadas por el fusil y ennegrecidas por la pólvora. P E R IÓ D IC O Q U IN C E N A L ,
E s tu d io s p e n it e n c ia r io s . L a R e in c id e n c ia ,
nNo ambicionamos gloria. ¿Pnede alcanzarla el ciego ! Organo Je la eontlrocrjen y deroraclen Je rjllc io e . lluitraJo con una limjna
que canta en la plaza pública miéutrns que entorno suyo l»o r D. Pedro Ai-mongol y Gornet. Barcelona: 1873. meniuat.

la piqueta allana los palacios y devora las fábricas el in­ El tomo que aquí auunciamos es importantísimo, y su Sutcricion : un aBo. 10 peaeia*; irme*lre. 5,5 pet«U i. y trimeaire, 3,5 pete-
la *.— Dirigí rae pare amha» publicaciones A O. Jote M. Foleh r Uro*-.«, «■ Bar­
cendio ? estudio puede resolver uu gran problema social á que se celona (Canuda, 17), y ea toda* tai librenai Je la Península y Ultramar.
32 L A IL U ST R A C IO N E SP A Ñ O L A Y A M ER IC A N A . N.° IT

M A D R I D . — S u ceso s del 3 d e l a c tu a l .

E n trad a do las tropas tu t i salo» do sesiones del Congreso.

ANUNCIOS : Un franco la linea. DL T DL T üñ ^ R EC L A M O S : Precios convoncloualeB.

El Sr. D. A D O L P I I E F W I O , 10, ruó Tai ti out, Paría, e» el único agente en Francia de LA ILUSTRACION ESPAÑOLA Y AMERICANA
y de LA MODA ELEGANTE ILUSTRADA.

P E R F U M E R IA
DE LA
Agua de Toilette NO MAS TOrrUBAS PHOGBEblVA»
I.UIA tos •Anri.t.n< nt A-Coe.---

VER DAD A LAS FLORES DE & O W K IA N K


James SM1THSON
VIOLETA DE PARMA Pora volver inrnodlol*
m eóle U l„» iJibelloa y -i la
barba so color natural en

THOREL lodos matices.

QUí MIC0- PE I! F ÜMISTA. s r ii‘ »Nunv

DIPLOMA DE MÉRITO EN L A EXPOSICION DE VIENA.


<’on esta Tínturn tioliny teg
P A R I S , 17, R u é de Buci, 17. P A R I S . sitiad de lavar la calveza,l
ni después, su aplicación u0
cilla v pronto el resulta«
mancha la piel ni daña la
L DIPLOMA DE UElUfO i L a r a ja r a m p U ta ,n
E ET_jJ £ u N£
CML( 0 * « L LEGRAN D
CHARDIN-HADANCODRT CREMÉ-ORIZA Eipo:iaoa Universal
d e Vierta
Pon3. y en las pnneioobai r er
». ruis do América- ijl

16'"», B o u leva rd d e S e b a s to p o l, 16ii|S


lia sido concedido
P A R IS po r el jurado
Se b«IU de venta en U Administración de
Depósitos en todos las Cudades del lando. A S A R A II F É L I X . i \ MOIIA II.II. YVr». II.ts 1RAI»v.
^ G ^ A N D , P A R F UÍ \ Í Í por >u maravillo»» Carretas, 12, principal.— Se remite > provincias.
P te c io : p o e ta » 7 ,5 0 .

PRODUCTOS AL ÁCIDO FÉNICO.


El doctor Dtclat, Inventor del Anda f t n u » , que ha E 'I r it campa »ble preparación
EAU ( A j i u a do la s liadas')
FEES
¿encubierto el »ecteio de curar »1 cólera. Brbr* amarilla. as intuios i y se funde con facilidad:
Y OTROS PRODUCTOS DE SU CASA-
Srbrr. prrnlclou« y tifoidea», coqueluche, ele., por ma­ iln frescura y lirillante* ni culi',
llín del l ’a fn .T i a •■»oaiaocc, prrrlo 4 franco» (Scwiou Sala recompenu prueba ru>n Impotente »e ii la com LtlV tVThrilhlltJ
impide que se formen arrugas cu petenna m alra dicho» notable» piuiliirlo» . que araliar- 1
ú t la Academia de C ienciat de P a r tí. 29 de Setiembre
él, y destruye y lime desaparecer de obtener, por aquel »ucean, detrebo de franquicia en
d t IflTit. ataba de divulgar también el medio de ru­
la r la» qnrmadur»», llaga», enaipela». y »obre lodo la»
las que Se lian fnniindn til, t con* toda» laa rtudade» de Europa
rnfrrmrdade» de la piel, le a d a rleet. too al GLVCo-ruu- '■ n i la hermosura b u l* U edad
mtt> avanzada. AGGA DE LAS HADAS.
a ig o «: I franco 50 céntimo» el franco.
Igualmente ha ronncguldo curar la dlaenleria, la» en- AGUA D E T O IL E T T E 1>E L A S H A D A S .
(•im rdadoi de pedia, la djspepaí», la i »H uela», la m -
rirlatina, el croup. la» liebre» bilioi»» y toda» la» enfrr-
43 , rué R i e h e r , P a r í s .
medade» crónica», con el u*odei Staor o tem í e a t M jc i TQUTtS LLS PARFUltEBlE^ Tor mayaren Madnd. Agencia franco espafiola.
(»nten o-raíatu ti). precio, 5 franco»- — Oepóulo en Ta­ Sordo. 51.
ri», 0, atenúe Victoria, ebet Chanamg- D t p ó ñ t c p a r tic u la r ,
en todas Ibs perfúmenos y peluquerías de provincia
y del eiiraujero.
N U EV O GUIA CONTY,
Se halla de venia en la Administración de
P A R IS EN POCHE. ABANDONAR por el cubierto mrUI rtlt
blanco de la c j -j Lvovirsc rr Rioovs.—Los pedido'
L.% MOUt ELEGISTE I L I H T K I IM .
tladrld: Admloittraclon da L * * » » » fx «G »!rr * . Cartela», l í

P r e c io e n P a r t s : 8 fr. 5 0 cén tim o », Carretas, 12, principal.—Se remite a provincias.


Mr. Adotphe Evrig, 10, roe Taitbout, Taris (Precios de I ÜADJ1ID.—In-i i •' - «<tv ni ti«Alitmlt y li‘,
bricsi. P r e c i o ; p eseta* 7 ,5 0 , a i c t u j e v t B t t i 1t u i n v i a a .
Hue Richeücu, 1IV.

También podría gustarte