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UNA HISTORIA DE DUELO Y ELABORACIÓN A TRAVÉS DEL ARTE


por: Eduardo Torres, artista, arte terapeuta y psicodramatista
Extracto del libro autobiográfico “Acabo de Despertar”

LA EMERGENGIA DE LA CREATIVIDAD EN LA URGENCIA


por: Francisca Onetto, artista y arte terapeuta
Reflexiones sobre la creatividad en atenciones online

BORDADO CREATIVO Y ARTE TERAPIA EN TIEMPOS DE PANDEMIA


por: Begoña Mata, artista y arte terapeuta
Adaptación creativa a la necesidad emergente

ARTE DE CUARENTENA
Arte terapeuta invitado: Gabriel Peña

COMUNICADO CONGRESO
por: Directiva ACAT y Comisión organizadora Congreso
Cambio de fecha del VII Congreso latinoamericano de arte terapia
Comité Editorial:
Edición contenidos y producción: Beatriz Alarcón
Edición y corrección de textos: José Luis Toledo
Claudia Silva

www.arteterapiachile.cl
Una historia de duelo y elaboración a través del arte:
Extracto del libro autobiográfico “Acabo de Despertar”

Eduardo Torres Nicolás


MA Arte terapia, Psicodrama
Director de Espaciocrea
eduardotorres@espaciocrea.cl

DESARRAIGO

En el colegio me han dado como tarea dibujar la cara de un oso, yo no se cómo hacer eso, es muy difícil para mí, por esto
le pido a mi abuelito Enrique que lo dibuje por mí.
El me responde, “no hijo, eso lo tienes que hacer tú, es tu tarea y yo se que puedes hacerlo”, esa respuesta no me gusta,
yo no sé hacerlo y quiero que él lo haga por mí.
Veo que toma dos hojas y dos lápices, me dice, “yo lo haré en mi hoja y tú copiaras en la tuya”. Toma su lápiz y comienza
a trazar un círculo en su hoja, me encanta ver como el lápiz va dejando su huella en la hoja blanca, disfruto el sonido de la
punta de grafito cuando raspa la textura del papel, luego continuamos dibujando las orejas, eran dos círculos más
pequeños que la cabeza, finalmente hacemos los ojos, la nariz y una boca sonriente. Fue como una especie de magia para
mi, donde solo había una hoja blanca, ahora estaba la cara de un oso sonriente, y yo la había hecho, me siento muy feliz
con este logro.
“Ves”, me dice, “pudiste hacer el oso y mira lo lindo que está”, esas palabras fueron muy importantes para mí, mi abuelito,
que no se reía con nada y que me hablaba muy poco, me estaba felicitando.
Desde ese momento comencé a dibujar casi todo el día, disfruto mucho el ver como las líneas van dando forma y voy
dejando mis huellas en el papel.
Cada dibujo que hago se lo muestro a mi abuelito, el siempre me dice, “está bien hijo, pero lo puedes mejorar, mira las
proporciones, fíjate en que esto está más arriba que esto otro”, etc. Lo vuelvo a hacer hasta que el me dice, “¡muy bien,
ahora sí, está muy bien hecho!
Esas palabras son oro para mi, siento que puedo hacer algo por mí mismo, puedo sentir que no solo soy una carga para
mis abuelos, que dejaron sus vidas para hacerse cargo de mí y de mi hermano. Sino que puedo hacer algo bien por mí
mismo, algo que me permite satisfacer mis necesidades afectivas, cuando dibujo no me siento solo, me puedo dar a mí
mismo lo que necesito, me doy afecto, me acompaño, dejo de sentir ese vacío inconmensurable por la falta de los abrazos
de mi mamita, ese vacío que me quita el aire y me aterra.

Desde que mis padres se fueron, siento que no pertenezco a este lugar, soy como una visita en casa de mis abuelitos, los
quiero mucho y ellos me quieren mucho, pero no los quiero molestar, siento que una parte de mí se fue con mis papás,
estoy embotado, no puedo sentir mucho, de hecho perdí el olfato, no siento olores, solo recuerdo el olor del plátano, pero
si huelo uno, no siento su olor.
Estoy adormecido, creo que si caigo o me golpean, no sentiré dolor, estoy como en otro mundo, en un mundo que puedo
ver cuando dibujo, en mis dibujos puedo estar en el lugar donde están mis papás, puedo sentir que estoy con ellos.

“Desarraigo” Pintura de Eduardo Torres, año 2001

Siento que por fin, desde que dibujo, me he podido acercar a mi abuelito Enrique, me gusta verlo sentado en su sillón,
leyendo, rayando sus libros, haciendo experimentos, él es muy inteligente, logra crear luz con unos pocos alambres y una
papa, crea mecanismos en su taller que se mueven, disfruto mucho su compañía silenciosa, aunque a veces me hace
preguntas para que yo descubra las respuestas.
Un día dibujé la cara de Jesús y se la mostré, me quedó realmente bien, en el colegio me dicen que dibujo muy bien,
cuándo la ve, se enfureció, me dijo que sacara esa imagen de su vista, que ese hombre le quitó a sus hijos y lo quiere lejos
de nuestra casa.

Mis abuelitos perdieron a sus 4 hijos, primero las hermanas de mi papá murieron muy pequeñas, luego el hermano de mi
papá sufrió un infarto a los 15 años, mientras jugaba fútbol con mi abuelito, murió en sus brazos y luego mi papá ya no
está acá con nosotros.
Muchas veces vi llorar a mi abuelito sentado en su sillón, desconsoladamente, mi abuelita lo abrazaba y lloraban juntos,
con una pena asfixiante.
Yo también lloraba al verlos con esa pena tan profunda, esa pena en la que sientes que estás vació por dentro, tu cuerpo
es una cáscara, que ni siquiera tienes sangre ni entrañas, solo sientes frío y soledad, sientes que no perteneces a nada,
que no tienes raíces, que estás solo en un universo infinito.

“Un Día en el Mar”, Óleo y tinta sepia sobre tela, Eduardo Torres

Pronto cumpliré diez años y estoy preocupado, mi abuelito se ha enfermado y lleva varios meses en Santiago, en casa de
mi tía Adriana, hermana de mi abuelita Fresia. Lo extraño mucho, espero se mejore pronto para que no se pierda mi
celebración.
Hoy viajamos a Santiago para visitarlo, ¡estoy muy contento porque podré verlo y abrazarlo!, apenas llegamos a la casa
de la tía Adriana corrimos con mi hermano a verlo, estaba en cama, con su pijama de franela a rayas, un poco flaco, puedo
recordar sus manos huesudas, su cara con una mezcla de niño anciano que guarda un sufrimiento inevitable, sus ojos
hundidos, su calor, el era mi papá ahora.
Estaba en la habitación del fondo y no se levantaba, pero me siento muy feliz de estar nuevamente con él.
Hoy volvemos a Copiapó, será mí cumpleaños, pero mi abuelito no pudo volver con nosotros, tendrá que quedarse en
Santiago hasta que mejore.
Espero con ansias su regreso, quiero abrazarlo y volver a estar con él, pero eso nunca ocurrió, a los pocos días mi abuelita
nos anunció a mi hermano y a mi que nuestro abuelito acababa de morir.
Mi pena es muy profunda, no puedo parar de llorar mientras la tía Mónica García me pone mi pijama para dormir, lo
extraño mucho y me doy cuenta que el viaje a Santiago fue para despedirnos de él.

“Cumpleaños Feliz” Óleo y tinta sepia sobre tela, Obra de Eduardo Torres, año 2012

Puedo perderlo todo, pero tengo el dibujo, es en este espacio donde me vuelvo a sentir vivo, tranquilo, me puedo conectar
con el calor de mi mamita, recuerdo su olor, sus caricias, puedo sentirme junto a ella, creo que en este espacio en el que
estamos solo yo, un papel y mi lápiz, he encontrado mis raíces, es mi lugar de pertenencia. Este fue el gran regalo de mi
abuelito Enrique, muchas gracias, te amo con todo mi corazón.
La emergencia de la creatividad en la urgencia

Francisca Onetto Larraín


Artista visual / Ma. Arte terapia
francisca.onetto@gmail.com

La pandemia actual nos ha llevado a buscar diferentes formas de trabajar, encontrando maneras distintas que las
habituales para ir al encuentro del otro. Esta vez es a través de una pantalla, donde el contacto físico y la observación de
los movimientos no verbales del otro son menos accesibles, estos se ven realmente interferidos por el espacio-tiempo
que se genera en las diversas plataformas online.

Lo anterior nos lleva a reflexionar sobre cuál será el nuevo marco de trabajo, un encuadre que tiene al otro muchas veces
cortado a la mitad, del pecho hacia arriba. Vemos algo similar a una “foto de carnet” de la persona en frente y escuchamos
ruidos ambientes que no tienen relación ni con la respiración ni con la gestualidad de quien está ahí -como pasaría en la
consulta- sino que lo que estamos escuchando es el sonido de lo que pasa alrededor, lo cual nos lleva a improvisar sobre
cómo generar el espacio apropiado e íntimo para el encuentro desde lo simbólico, ya que lo real no es manejable por el
profesional.

Es aquí donde cobra importancia el concepto de


maleabilidad del Arte terapeuta, esa capacidad de
adaptarse y de flexibilizar en todo momento. Al mismo
tiempo se evidencia la necesidad de desarrollar la
creatividad para utilizarla en beneficio del encuentro con
el otro, sin tener muchos elementos que nos ayuden a
percibir si vamos por buena senda o no, Respecto de
cómo se va sintiendo el otro, sólo queda confiar en ese
rostro que vemos intentando acompañar a quien está al
frente mientras suena una cadena de baño, el llanto de
un niño o un “perdona salgo ahora”. No queda más que
hacer vista gorda y poner en marcha toda la creatividad
que tenemos dentro, ya que la demanda y la necesidad
del espacio terapéutico está ahí, es urgente prestar un
servicio que se presenta como una fuente de aire en un
contexto de encierro.
Imagen autorizada por participante
Creatividad

La creatividad es la capacidad, o la facilidad, para crear o inventar que tiene todo ser humano, es inherente a la especie y
es un espacio que si se utiliza de manera positiva para la persona puede tener efectos tan o más significativos que un
Diazepam, con la diferencia que estos pueden durar más tiempo porque hay un trabajo de elaboración interno previo. La
creatividad en arte terapia es una herramienta que utiliza el arte terapeuta y el participante al mismo tiempo. Por una
parte, la creatividad del arte terapeuta se utiliza como una herramienta para llevar y/o acompañar al otro a lugares donde
se piensa que estará mejor, esto se produce desde los movimientos transferenciales y contra transferenciales que se crean
en el vínculo terapéutico. Por otra, la creatividad de el/la participante, quien al acceder a ese espacio imaginario propuesto
por el arte terapeuta lo completa a su manera con sus olores, formas y colores, creando su propio espacio.

El espacio creativo, en el acompañamiento a través del arte terapia, tiene esta cualidad de darnos la posibilidad de
llevarnos al espacio imaginario, onírico y/o imaginativo, nos da la oportunidad de transformar nuestra realidad concreta
con tan sólo un cerrar de ojos, con mirar a un punto fijo podemos emprender un largo viaje, viaje que vivenciamos de
igual manera que si lo viviéramos, experiencias que cambian su forma, pero no el fondo en esta nueva modalidad de
trabajo online.

Emergencia

En un cotidiano donde el peligro es algo que acecha, el


miedo ya no es sólo una emoción. Si no, que se hace
carne cuando la amenaza de una infección es real, ¡urge
emerger!

Es precisamente una de las temáticas que emergen en


sesiones de arte terapia en estos últimos meses de
trabajo en modalidad online. Se trabaja muchas veces en
torno al miedo, o bien pavor de ser devorado por este
virus en términos de humanidad y al mismo tiempo se
trabaja con los movimientos internos de cada quien que
no tienen relación con el virus precisamente; pero, que
hacen que las neurosis previas a la pandemia se vuelvan
inmanejables en el encierro. En tiempos de pandemia
urge emerger, se hace cada vez más presente la urgencia
por existir/salir, en un contexto donde está prohibido
salir, prohibido tener contacto con “otros”, prohibido
continuar con todo lo que estabas acostumbrado a hacer
Imagen autorizada por participante
día a día, ¡urge emerger!
Por un lado, se genera una urgencia de emerger, de salir, de sentir libertad, esa que por seguridad está coartada. Por otro,
he podido constatar a través de algunas sesiones realizadas por videoconferencia todo lo que emerge en estas situaciones
donde cada quien está encerrado en sus lugares habitados y se genera un encuentro “virtual”. Encuentro que se vuelve
casi más cercano que cuando el encuentro se hace de cuerpo a cuerpo, lo que me lleva a reflexionar en torno a si ese
cuerpo, al cual le he entregado tanto protagonismo en el encuentro real con el “otro” ¿mantiene ese rol principal?

El cuerpo que siente más allá de lo racional, que percibe al otro desde lo no verbal, que lo huele, lo siente, lo mira y lo
observa al mismo tiempo, en el encuentro real de la consulta. Ese mismo cuerpo pierde vías de acceso al otro en la
modalidad online, ya no se huele, no se ven los movimientos que sólo se perciben estando presente, no se escuchan de
la misma manera los suspiros o la respiración. Este cuerpo en el cual confío más que la cabeza deja de tener muchas de
esas vías comunicativas anteriormente nombradas y eso hace que sólo queda lo visual y el escuchar al otro de la manera
más activa posible para que lo racional/verbal no tome el lugar que tiene la comunicación no verbal en nuestro espacio
terapéutico. El encuentro con el otro, se hace desde un lugar seguro, muchas veces íntimo, con materiales escogidos por
la persona que está del otro lado, materiales que encuentra cerca, materiales que debe transformar para poder darles
otra lectura, materiales que son parte del mobiliario de su cotidianeidad que antes ni siquiera había visto, porque la
rapidez de la vida no se lo permitía, pues ahora desde esta quietud, desde este estar ve y le busca el lado sorprendente,
el que lo hace soñar, el que le permita seguir viviendo.

La búsqueda del movimiento es


urgente, participantes de sesiones de
Arte terapia vía online se han
encontrado circulando y re circulando
desde el gesto con un sólo lápiz como
una manera de poder respirar en este
encierro según sus relatos; otros, se
han visto rayando el horror de no
saber qué va a pasar llegando a
descubrir un agujero negro, negro tan
negro que resulta una luz que permite
una nueva intervención desde lo
pictórico; y así, siguen pasando los
días, en encierro, lo que cambia es la
manera de pensar y soñar este
encierro utilizando elementos que
recobran una nueva vida al ser vistos
después de tanto tiempo.
Esta nueva modalidad de trabajo me ha llevado a reflexionar sobre la mirada al otro, esa mirada que no tiene que ver sólo
con los ojos, sino que con todo el cuerpo y la percepción que este nos brinda. Lo cual me lleva directamente a asociarlo
con la primera mirada de la madre, y me pregunto: ¿no actuará la pantalla como esta primera mirada que refleja quién se
es?, ¿no será que la pantalla permite esa mirada real de la madre suficientemente buena? (Winnicott, 1971) o estará
ayudándonos la pantalla a percibir esa presencia-ausencia tan necesaria para el desarrollo de sí mismo?

Si bien no se está en cuerpo físico directo, sí se está en presencia y a pesar de no poder mirar directamente al otro ya que
muchas veces la persona enfoca su rostro y los movimientos de sus manos están bajo la vista del lente, lo cual hace que
mis ojos no puedan ver el gesto ni la imagen real. Lo que sí se puede ver es el rostro de la persona mientras hace reflejo
de lo que realmente le está pasando mientras vive este recorrido de crear en compañía del otro. Podríamos decir que se
está en la intimidad de la creación solitaria; pero, con otro que te está conteniendo y muchas veces manteniendo con su
mirada.

Proponerle a un otro la posibilidad de poner en imágenes lo que se intenta decir en palabras será siempre el punto de
anclaje de nuestra práctica, cuando la palabra se nos vuelve poco efectiva, es posible en algunos casos que la imagen
venga a terminar la frase que no se pudo terminar, y esta frase que no tiene palabras; sino, colores, gestualidad y textura
visual, abre paso para generar otro diálogo entre estas dos pantallas que intentan encontrarse.

Referencia

Winnicott, D. (1971). Jeu et réalité, L’espace potential. Paris: Ed Gallimard.


Bordado Creativo y Arte terapia en Tiempos de Pandemia

Begoña Mata
Artista y Postítulo en Arte terapia
artebegomata@gmail.com

Entonces a través del arte, podemos establecer un mundo que adviene sobre el otro donde el tiempo
real puede disiparse, aunque sólo sea por un instante, para que ingresemos en esa otra
dimensión espacial y temporal que permite la creación artística. Pero siempre para regresar al
mundo cotidiano, con lo adquirido, con lo aprendido, con esa nueva forma de ver y vernos en las vida.
Pablo Melicchio, El arte nos puede salvar

Desde hace un tiempo, resulta evidente que el arte y el hacer, han sido una forma potente de expresarse y manifestarse.
Los acontecimientos sociales que se han suscitado en nuestro país desde octubre del 2019 y acompañado de esto, todo
lo que ha generado el Covid-19, trajo consigo un cambio en la forma de sociabilizar y de comunicarnos. En una primera
mirada observé cómo el arte mural, el fanzine, las ilustraciones y el arte textil, comenzaron a llenar nuestros muros y redes
sociales de imágenes que hacían cuenta del sentir de muchas personas. Luego a través del confinamiento las personas se
volcaron en el trabajo manual y sin duda, volvieron su mirada a labores de antaño; como el tejido y el bordado, generando
una nueva construcción visual de la mano del arte textil. Desde ese momento, no he dejado de observar mi entorno y
comprender que muchas de las cosas que hacía antes cómo artista y arteterapeuta necesitaban sufrir una transformación,
frente a las necesidades que han ido surgiendo.

A través del confinamiento comprendí, que para ejercer


cómo arteterapeuta y llegar a ser un aporte en este
nuevo contexto, debía reformular la forma de llegar a las
personas y abordar el proceso creativo desde una
manera más llamativa, generando un nuevo setting, que
estuviese a la altura de las circunstancias de
confinamiento y alejamiento social, sin dejar de crear
herramientas potentes de acompañamiento, reflexión y
observación interna de las personas.

Fue ahí donde decidí crear un número de talleres


enfocados en la autorreflexión a través de las
herramientas técnicas del arte textil.
Donde al coser un muñeco o confeccionar una medalla bordada, se podía generar instancias de diálogo con personas de
distintas ciudades, diversos contextos, edades y género. Este acompañamiento y conexión que se generó a través de telas
e hilos, abrió una nueva forma de crear espacios de bienestar dentro del confinamiento y de hacer entender al otro que a
través de la pantalla hay alguien que está ahí para escuchar, ayudar o simplemente aportar con la enseñanza de técnicas
que le facilitarán el estar en confinamiento de una manera más lúdica.

En sesiones individuales y grupales los participantes, lograron mirarse, mirar su entorno, reflexionar u observar lo que
ha ido aconteciendo en nuestro país. En estos momentos de diálogo, de trabajar con materiales, de buscar cosas que
puedo reutilizar en casa o de sacar de contexto objetos; los talleres hicieron que se llenaran espacios de tiempo que a
veces pueden parecer eternos dentro de un encierro incierto en un contexto determinado. Bordar una palabra, armar un
autorretrato o construir un contenedor de buenos deseos, de alguna forma, para los participantes, creo espacios de
desconexión con la realidad externa, pero conexión con lo interno, con las mil formas de agradecer el estar sano, de
valorizar cosas que han construido en tiempos de pandemia o de las fortalezas personales que han debido utilizar para
afrontar los retos que se van presentado en el encierro.

Las muestras de agradecimiento, la curiosidad por saber más sobre el arte terapia, la comunicación a través de redes
sociales y los registros de las obras que me fueron enviadas y que compartí con la autorización de los participantes, siento
que muestran que es posible generar instancias creativas y enriquecedoras en cualquier contexto que se nos presente,
siempre y cuando exista las ganas, la flexibilidad y la forma de abordar estos desafíos de una manera abierta y sincera.
Después de esta experiencia creo que dos personas que
se miran a través de una pantalla pueden lograr una
conexión a través de los materiales, pueden dialogar
frente a un a obra y crear espacios de autocuidado en
conjunto. Creo que como arteterapeutas, esta nueva
realidad, está abriendo una gran posibilidad a través de
estos nuevos medios y lo que tal vez en un principio
vimos como una dificultad, pensando en cómo armar una
sesión, el setting, un taller o una conferencia, según mi
experiencia, ha permitido ampliar nuestra labor a lo
virtual y a las nuevas tecnologías. Abrir un espacio de
conexión con el otro y un momento de acompañamiento
en tiempos de dificultad puede ser una herramienta muy
enriquecedora y potente, que debemos comenzar a
explorar como arteterapeutas y abrirnos a esas
posibilidades que están tan cerca de nosotros.
ARTE DE CUARENTENA

Gabriel Peña Sierra


Psicólogo y Postítulo en Arte terapia
gabriel.ps.arteterapia@gmail.com

Estas obras surgen de la forzosa reclusión en cuarentena


por la actual situación COVID-19 durante lo corrido del
2020. Así, si bien siempre he tenido interés por el cuerpo
y los espacios que cotidianamente son habitados, que se
tornan extensión de ese cuerpo; durante la pandemia
empezaron a surgir dibujos y pinturas que provocan
cierta nostalgia por el encuentro del otro, de la otra. La
necesidad del contacto no sólo físico sino nutritivamente
afectivo y vincular, asimismo de los espacios,
centralmente la casa, que evocan el punto de encuentro
para compartir con la familia o los amigos, pero también
para las soledades en quienes no compartimos el hogar
con otro ser humano y hemos enfrentado el aislamiento.

La mirada de lo interno y lo externo, del ir hacia adentro,


de la casa por el encierro, pero también dentro de
nosotros mismos para reflexionarnos, comprendernos,
contenernos… que de ello habla también el autorretrato
como interés artístico.
COMUNICADO
VII CONGRESO LATINOAMERICANO DE ARTE TERAPIA

Directiva ACAT
Organización VII Congreso Latinoamericano Arte terapia

Debido a los efectos de la Pandemia del COVID-19 que ha tenido serias implicancias en el mundo y las consecuentes
restricciones sanitarias, como son suspensión de actividades presenciales, cierre de fronteras a personas extranjeras,
entre otros, la Asociación Chilena de Arte terapia [ACAT] ha debido posponer la realización del VII Congreso
Latinoamericano de Arte terapia que se iba a realizar en el mes de noviembre del presente año. Esta decisión se toma en
base a la dificultad que presenta una parte importante de los asistentes e invitados que desean participar.

El evento ha sido reprogramado para las fechas de 19, 20 y 21 de noviembre de 2021, en el mismo Hotel Bosque de Reñaca
de la ciudad de Viña del Mar. Trataremos de mantener el programa lo más intacto posible, pero comprendemos que esto
depende de la disponibilidad de los presentadores. Además, en caso de abrirse espacio para nuevas presentaciones, se
avisará de la convocatoria con anticipación.

Estamos conscientes de que tendremos que esperar un año más para la ejecución del VII Congreso Latinoamericano de
Arte terapia y poder compartir nuestras experiencias de forma presencial. Queremos que esta espera sea un tiempo para
fortalecer nuestra comunidad y crear nuevos lazos. Por lo que con el objeto de actualizarnos y mantenernos en contacto
hemos planificado dos instancias a disposición de los inscritos al Congreso, por lo que de querer sumarse, debieran generar
de todas maneras sus inscripción prontamente:

1. Encuentros de Arte terapia En total son 9 encuentros mensuales online, gratuitos para todos los inscritos al
congreso, durante los meses de octubre a diciembre 2020 y de marzo a agosto 2021. En estos espacios virtuales
invitaremos a expertos a realizar presentaciones, talleres y encuentros de diálogos en torno a diferentes temáticas
de interés para nuestra profesión. La información de estos eventos será entregada a través de correo y nuestras
redes sociales. El primer encuentro será el 20 de octubre a las 19 horas (Chile) con el tema “Arte terapia en
contextos educativos”
2. 6 cursos dictados por EspacioCrea, auspiciador del congreso sorteados entre los inscritos al congreso. Los
ganadores fueron:
a) Curso Online en Vivo de Arte Terapia y Mindfulness
- María Paz Zamorano, Terapeuta Ocupacional Cesfam Dr. Symon Ojeda, Chile
- Karen Salome Sosa Meneses, Estudiante Universidad Finis Terrae, Chile
b) Taller Internacional de Danza Movimiento Terapia y Los aspectos no verbales del Trauma
- Elisa Rivera, Estudiante Universidad Autónoma, Chile
- Juliana Montoya, Estudiante Universidad Pontificia Bolivariana de Colombia
c) Curso Online en Vivo de Introducción al Arte Terapia
- Sofia Lasa, Estudiante Escuela Argentina de Arte terapia
- Marcela Medrano, Voluntaria Hospital Italiano Argentina

En representación de la Asociación Chilena de Arte terapia, esperamos que este cambio sea bien acogido. Lamentamos
las dificultades o inconvenientes que esta nueva fecha del Congreso pueda generar. Si necesita mayor información puede
visitar nuestra página web o realizar consultas a nuestros correos:

- Página web: www.arteterapiachile.cl/congreso


- Correo consultas generales congreso: consultas7congresoat@gmail.com
- Correo inscripciones congreso: inscripcion7congresolatinoam@gmail.com
- Página Espaciocrea: www.espaciocrea.cl
- Correo consultas Espaciocrea: contacto@espaciocrea.cl

Con mucho afecto,

Cecilia Byrne Asenjo


Presidenta Asociación Chilena de Arte Terapia
Directiva Asociación Chilena de Arte terapia
Organización VII Congreso Latinoamericano de Arte terapia

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