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Misiego Definitivo
Misiego Definitivo
La poesía germánica
Sobre el Wildsith
El poema más antiguo en lengua inglesa es el Widsith que significa “el que viaja
a lo lejos”. En este poema, el material épico va encerrado en tres thulas o listas poéticas
que forman la parte principal del poema, alrededor de la cual se entreteje la historia
lirico- narrativa del scop. Para esta obra, existe la teoría de un juglar ficticio. Las
alusiones geográficas demuestran que el relato no se basa en las experiencias de un solo
viajero sino en un conjunto de tradiciones reunidas. La primera thula está formada sobre
el modelo de “A regía a B”. En esta parte aparece el personaje de Ródgar. La segunda
thula sigue el esquema “con la tribu C estuve”. En la tercera thula el modelo básico es “a
D busqué”. El poema acaba con nueve líneas de epílogo que equilibra las nueve de
prólogo.
Una teoría afirma que el scop ficticio es el ardid de un suplicante y el poema una
petición. En él, el autor pide veladamente algo. Según French, el poeta buscaba un señor
y por ello se obligó a demostrar su competencia citando numerosos nombres de reyes y
pueblos. Según Eliason, las enumeraciones que aparecen en el relato no son adornos ni
exageraciones: el poeta trata de pedir lo máximo para recibir lo mínimo.
Widsith está escrito en sajón occidental e incluye otros dialectos. Esto,
probablemente, debemos adjudicarlo a que ha sido copiado repetidamente por
numerosos copistas procedentes de diferentes regiones de Inglaterra. La composición de
la obra data del siglo VII.
Sobre Beowulf
El poema más largo e importante de la edad heroica anglosajona es el Beowulf .
Las aventuras del héroe del poema son más románticas que épicas: son escenas
puramente imaginarias que se hacen aparecer como reales, ensalzadas y embellecidas
por la imaginación. El modo de vida representado y el carácter del héroe desarrollado
desde la adolescencia a la madurez constituyen los elementos épicos del Beowulf. Esta
obra es mucho más moralizadora, deliberada y didáctica que el Cantar de los
Nibelungos. El poema es de carácter aristocrático.
A pesar de las influencias cristianas en el poema no hay ninguna referencia a
Cristo, a la Virgen o a los Santos. Esto significa que el poema no adquirió su forma
actual a manos de un escritor cristiano, puesto que de ser así no podrían explicarse estas
omisiones. Si dentro del poema cambiamos la palabra Dios por destino (wyrd), cambia
por completo el tono del poema y se convierte en pagano.
El Beowulf presenta, en los tres combates, diferentes “movimientos”: en las
distintas naturalezas y motivaciones de los antagonistas, en las progresivas dificultades
que Beowulf tiene que vencer para dominar a sus enemigos y en el cambio de escenario
del recinto acogedor de Hérot a la cueva sumergida y al ventoso promontorio.
Según Misiego, Beowulf debió formarse a partir de muchas leyendas que a su
vez se fundieron en un todo, es decir, que fueron recogidas en un poema por un solo
poeta.
Al acabar el poema, todos los familiares del héroe por línea materna han muerto.
Por línea paterna solo queda Wiglaf; éste es el último de la raza del héroe puesto que
Beowulf muere sin hijos. Esta soledad es el último de sus pensamientos antes de morir.
La suavidad y el atrevimiento sobrehumano se dan en el héroe: su gentileza cubre una
voluntad de hierro y es la que le hace llevar a cabo sus hazañas, no conoce el miedo e
inspira valor a sus hombres, es generoso y rápido en la ira, pero no precipitado en la
venganza. Es también algo fanfarrón, sin embargo esto es propio de los hombres del
norte y se repite en todas las sagas y narraciones de Islandia. En Beowulf se mezcla la
dignidad, la nobleza, la lealtad, el amor por la aventura con la prudencia, la ambición por
la fama y el orgullo.
Beowulf no sólo encarna el ideal de héroe sino también el ideal de rey, el justo
gobernante, el político prudente, constructor de la paz y defensor de su pueblo a costa de
su propia vida. La cualidad épica de esta obra reside en la purificación del héroe y en el
desarrollo de su carácter hasta la perfección. Al final, Beowulf representa al padre de su
pueblo, la imagen de un rey noble y valeroso que muere por su pueblo; aquí reside su
triunfo moral y con él se haya la purificación del héroe.
Con respecto a Wiglaf, podemos decir que no solo ayuda al héroe en la lucha
sino que también se transforma en un testigo y compañero en la muerte del rey, además
de ser su heredero. Sus acciones reflejan el sentido del deber basado en la idea de
lealtad.
En la pelea final contra el dragón existen tres puntos de vista: el de Beowulf, el
de sus hombres y el del público.
El punto de vista de Beowulf es muy simple: tiene que hacer un trabajo y lo hará
sin retroceder ni un solo paso.
El punto de vista de sus once compañeros no es tan simple: por un lado, su jefe
está en peligro les pide que estén a su lado en el triunfo o que mueran con él. Por otra
parte, Beowulf les ordena que se mantengan fuera de la lucha. Así, diez de sus hombres
obedecen su mandato, mientras que Wiglaf escoge la alternativa más honrosa y entra en
la lucha contra el dragón.
El público sabe que Beowulf va a morir y que esto traerá la ruina al pueblo. De
esta manera la catástrofe tiene caracteres de tragedia nacional. Con respecto a los
funerales, el fin recuerda al principio.
Las dos divisiones estructurales más importantes proporcionan al poema el
contraste juventud-ancianidad. En la primera parte, el ideal del perfecto caballero, la
fuerza mental y física se relacionan con la juventud. En la segunda parte, el ideal del rey
germánico, protector y bondadoso se relaciona con la ancianidad. Este contraste
estructural juvenud- ancianidad se relaciona también con éxito y fracaso y, en un sentido
amplio, con la grandeza y decadencia de las naciones.
En la primera parte del poema, predomina el tono heroico con la evocación de
conceptos como el de buen rey. En la segunda parte domina el tono elegiaco similar al
de los poemas La Ruina y El Navegante. El autor piensa tristemente en las desgracias
que han caído sobre el héroe y sobre su pueblo.
Según el código de leyes de la sociedad anglosajona un hombre vale más que una
mujer. Sin embargo, la mujer anglosajona tenía derechos legales y se le concedía un
cierto respeto, debía ser vista y no oída. El elemento sexual está virtualmente ausente de
la literatura anglosajona.
Sobre Waldo, la esposa de Ródgar en Beowulf, podemos decir que era una dama
elegante y graciosa, famosa por su tacto y diplomacia.
Micaela Misiego: “La expresión del sentimiento” en Los orígenes de la civilización
anglosajona
II
III
Hay tres poemas en la literatura anglosajona que suelen incluirse entre las elegías
y que no tratan de las desgracias del hombre como un aspecto de su existencia temporal,
sino de la felicidad o desgracia en las relaciones humanas, entre hombres y mujeres. De
ellos, el Mensaje del enamorado es apenas una elegía: un mensajero lleva a la esposa
un mensaje de su marido, una llamada para que se reúna con él al otro lado del mar, en
exilio desde luego, pero en un destierro en el cual el marido puede prometer a su esposa,
la hija de un príncipe, que podrán de nuevo distribuir tesoros desde su sitial. No hay
duda ninguna sobre el tono de guardado optimismo cuando el mensajero trata de
convencer a la dama de que su marido le es verdaderamente fiel.
El lamento de la esposa es un poema en el que ella está casada con un noble y
que vivió feliz con él hasta que este se hizo a la mar, dejándola al cuidado de sus
familiares, tan poco amables con ella, que se vio obligada a buscar protección en otra
parte. A la vuelta del marido, los parientes la calumniaron y él la desterró al lugar que
ella describe como una cueva bajo un roble. Se lamenta de la separación y de la vida
desolada que vive allí. Entristece también a la esposa pensar que la conducta del marido
encierra una mente mala y está segura de que, aunque presente al exterior una apariencia
alegre, su interior es melancólico. Este poema no puede ser a lo más, posterior a la mitad
del s. X. También resalta la fijeza antitética que presenta el poema. Es la más desolada,
con una completa ausencia de esperanza.