CAPITULO III

CODIGO DE ÉTICA

Preámbulo.
La administración es; armonía organizacional, para lograr la calidad que demanda el
mercado, manteniendo una organización altamente productiva, profundamente humana,
competitiva y con un compromiso social, con base a ello, tomamos un compromiso con
nuestros clientes, colaboradores, compañeros, inversionistas y con la sociedad en general.

Por ello el propósito de este Código es enunciar las normas y principios éticos que deben
inspirar la conducta y actividad de los profesionales en Administración de Empresas.
Abarca los deberes y responsabilidades profesionales como: la comunidad, los clientes,
empleadores y colegas. Todos estos coexisten al mismo tiempo sin excluirse; ni implicar
niveles, pero debe de tenerse siempre en cuenta la primacía del interés general y luego los
deberes para con quienes encomiendan tareas y para con quienes existen lazos de
solidaridad profesional.

Los profesionales deben conducirse de una manera que resulte coherente con las normas y
el espíritu de este Código; realizando además los mayores esfuerzos para mejorar
constantemente la disposición y calidad de su actuación, contribuyendo así al progreso y
prestigio de la profesión.

De igual forma el Código de Ética presentado define todas aquellas acciones que están
permitidas o no, para el profesional de Administración de Empresas; pero sin mal
entenderse que todo lo incluido en este código esta tolerado, puesto que los profesionales
deben de seguir las normas éticas y legales más elevadas, puesto que en el ejercicio de su
profesión deberán tener presente que su actividad no solo está encaminada a los aspectos
administrativos, técnicos o financieros, sino también el deber cumplir una función
socialmente responsable y respetuosa de la dignidad humana.

Este Código de Ética establece los principios y reglamentos fundamentales que se

consideran esenciales para el desarrollo profesional y es aplicable a los siguientes
profesionales:
  A los Estudiantes de la Licenciatura en Administración de Empresas de las
Universidades Públicas y Privadas de El Salvador.
 A los profesionales que hayan alcanzado el grado de Licenciados en Administración
de Empresas, en El Salvador, ya sea que pertenezcan o no a un ente Colegiado.

Los profesionales de la Administración deberán de tener presente que al prestar un servicio

a la sociedad debe ser con base en el conocimiento científico, experiencia, habilidad técnica
y destreza profesional, con plena honestidad, además, de mantener su competencia
profesional, para lo cual procurarán la actualización de sus conocimientos, prestando
atención a los nuevos avances científicos y tecnológicos relacionados con su actividad de
trabajo.

Los profesionales de la Administración no aceptarán responsabilidad de clase alguna ni

asumirán cometidos para los que no se consideren capacitados, también, en todo momento
deberán de tener las precauciones y garantías necesarias, asegurándose que el resultado de
su trabajo no constituye riesgo para su persona o la sociedad.

Los profesionales de la Administración llevarán a cabo sus actividades profesionales con el

máximo respeto al medio ambiente y siempre en pos de un desarrollo sostenible que
beneficie a toda la sociedad.

En El Salvador no hay una entidad que se encargue de vigilar y supervisa el fiel

cumplimiento del código ético, pero esto tal vez pueda atribuirse a la asociación
salvadoreña de profesionales en administración de empresas.

Consideraciones
Primeramente, podemos definir que un Código de Ética es un documento donde las
instituciones, expresan sus los valores y los compromisos adquiridos que deben guiar la
actividad de las personas de la organización orientando la toma de decisiones basadas en la
buena conducta que deben de tener todos los colaboradores, además, se delimita los deberes
y derechos de quienes laboran en las diversas áreas de la organización.

Funciones que cumple el código de ética:

 Definir responsabilidades, derechos y obligaciones de todo el grupo de interés.

 Enmarcar la actuación de los colaboradores y orienta al empresario a actuar con
imparcialidad.
 Servir de criterio para la toma de decisiones, ya que indica las pautas de conducta y
los criterios por los cuales se regirán todos los colaboradores de la organización.
 Manifestar el compromiso de la Dirección de adoptar un enfoque ético en la gestión
empresarial
 Explicar los valores con los que la empresa quiere ser identificada.
 Dar prestigio a la empresa, pues entrega un mensaje sincero al público interesado
fuera de la empresa y esto hace que mejore la confianza de los inversionistas.

Capítulo I (Disposiciones Generales)

Art. 1. El presente Código de Ética contiene el conjunto de normas de conducta deseables
para los profesionales en Administración de Empresas con énfasis en el desempeño de sus
responsabilidades y relaciones en una empresa o institución, ante las leyes, y los
trabajadores, con valores y principios éticos de compromiso, honestidad, lealtad,
sinceridad, profesionalismo y bien común.

Art. 2. El objeto de este Código es contribuir a potenciar la participación y regular el

comportamiento de los Administradores de Empresas dentro de procesos productivos de
una empresa o institución, dada su función de ser coordinadores líderes y dignificar su
profesión.

Art. 3. A los profesionales a quienes se les aplicará este Código de Ética serán aquellos que
hayan obtenido su título de Licenciado en Administración de Empresas.

Art. 4. El Administrador de Empresas utilizará sus conocimientos profesionales,

únicamente en labores que cumplan con la moral, las buenas costumbres y con
responsabilidad social.
Art. 5. En el ejercicio de sus funciones deberá estar libre de impedimentos para mantener su
integridad de juicio, autonomía y objetividad.

Art. 6. Los Administradores de Empresas que ejerzan otra función, deberán acatar estas
reglas de conducta, independientemente de las otras normas señaladas para esa otra
función.

Art.7. Los casos en los que exista duda acerca de la interpretación del presente código
deberán someterse a revisión por un comité de licenciados en Administración de Empresas.

Art.8. El profesional en Administración de Empresas no debe utilizar en su actuación

profesional los títulos que posea o el cargo que sustente, para su propio beneficio y en
perjuicio de los demás.

Art.9. El Licenciado en Administración de Empresas deberá advertir profesionalmente todo

aspecto que atente contra la administración de una entidad o institución e incluso del
Gobierno de El Salvador.

Art. 10. Toda opinión técnica o informe que realice el Administrador de Empresas debe
contener la expresión de su juicio fundamentado en elementos precisos y objetivos, sin
ocultar o desvincular los hechos.

Art.11. El ejercicio profesional del Administrador de Empresas debe ser consciente y

digno, sin distorsionar la realidad y sin atentar contra la ética y la moral.

Capítulo II (De la Responsabilidad en el ejercicio profesional)

2.1 Responsabilidad en el ejercicio de sus facultades con otros profesionales

Art. 12 son consideradas acciones antiéticas, antiprofesionales y en contra de los principios

de un profesional en administración de empresas, las siguientes:

 Realizar comentarios que atenten contra la dignidad y trabajo de otros profesionales

para sacar ventaja en el ejercicio de sus funciones.
 Atribuirse trabajos, ideas de mejora, procesos y señalamientos que no sean propios
o de los cuales no se es autor principal o participante en su elaboración o
presentación.
  Colocar en puestos de trabajo a personas por conveniencia, parentesco o cualquier
afinidad, dejando fuera a profesionales que tengan las competencias para
desempeñarse en el puesto.
 Recibir a facilitar dádivas de cualquier índole para conseguir los resultados
esperados en cualquier actividad en el ejercicio profesional.
 Atribuirse funciones que no le competen y que no estén señaladas en las funciones
del cargo que sustente.
 Firmar documentos que vayan en contra de las leyes, normativas, reglamentos y
acuerdos que estén vigentes, tanto gubernamentales como de la organización.
 Tener preferencias con los colaboradores y marginar a otros en el desarrollo de las
actividades, programación de tareas y recompensas que sean política de la
organización.
 Tratar de sustituir a un colega u otro profesional mientras esté desempeñando un
cargo público o privado.
 Realizar conspiración sin fundamentos en contra del gobierno o de la empresa
privada.
 Valerse de ventajas en el desempeño de un cargo para competir deslealmente con
otros profesionales y colegas, o para impedir la publicación y difusión de
investigaciones, actividades individuales o institucionales de los Licenciados en
Administración.
 Cometer arbitrariedades o permitir que se comentan injusticias contra cualquier
persona dentro de la organización o en el lugar de trabajo.
 Propiciar o realizar actividades en contra de la Asociación Salvadoreña de
Profesionales en Administración de Empresas.

2.2 Responsabilidad con los proveedores

Art. 13. El Administrador de Empresas no favorecerá a proveedores en las compras de la

institución o empresa para la cual presta sus servicios profesionales.

Art. 14. El Administrador de Empresas no podrá recibir dadivas de proveedores a cambio

de contratos que impliquen revisión de ofertas para la contratación de bienes o servicios.
Art. 15. El Administrador de Empresas podrá certificar a sus proveedores haciéndoles saber
de forma escrita los requisitos que deben cumplir.

Art. 16. El Administrador de Empresas mantendrá estricta confidencialidad de los

productos que le suministran y de los servicios que le prestan sus proveedores.

Art. 17. El Administrador de Empresas está en la obligación de velar por que se les
cancelen las facturas a sus proveedores en el tiempo estipulado en las políticas de pago de
la entidad a la que presta sus servicios profesionales

Art. 18 El Administrador de Empresas debe exigir que los proveedores cumplan con los
compromisos pactados, caso contrario debe notificar el incumplimiento de lo contratado y
podrá tramitar la cancelación del contrato.

2.3 Relaciones con los clientes

Art. 19 El Administración de Empresas deberá abstenerse de entablar competencia con otro

colega, reduciendo sus honorarios y ofreciendo sus servicios por una cantidad menor, luego
de tener conocimiento de los honorarios ofrecidos por otro colega.

Art. 20. El profesional en Administración de Empresas está en su facultad de no

proporcionar visto bueno y validez a documentos técnicos en general, que no hayan sido
revisados, estudiados o ejecutados personalmente o elaborados por algún colaborador, bajo
su supervisión.

Art. 21. En caso de formar parte de una sociedad y se desvinculare la relación con esta, por
cuestiones éticas, el profesional no podrá ofrecer sus servicios a los clientes de dicha
sociedad.

Art. 22. El Administrador de Empresas no podrá aceptar comisiones o gratificaciones que

provengan de otras partes, en razón de perjudicar al cliente.

Art. 23. El Administrador de Empresas está obligado a informar a sus clientes, de sus
relaciones comerciales con otros clientes u otras circunstancias que puedan influir en la
prestación del servicio o entrega de bienes que se preste.
Art. 24. El Administrador de Empresas deberá abstenerse de proporcionar información de
sus clientes, sin el consentimiento de este último.

Art. 25. El administrador de Empresas que se desempeñe o ejerza de forma independiente,

deberá tener en cuenta la responsabilidad que tiene al expresar juicio profesional o emitir
un documento técnico, para el cual debe tener un criterio imparcial, considerando que la
Sociedad de Administradores espera siempre de él, una actitud profesional.

Art. 26. El Administrador de Empresas podrá presentar a sus clientes propuesta de sus
servicios profesionales, siempre que alguien se lo solicite y no recurra a procedimientos que
vayan en contra de la profesión o alguno de los artículos de este código.

Art. 27. El Administrador de Empresas deberá puntualizar en qué consiste la prestación de

sus servicios profesionales y cuáles serán las limitaciones en el desempeño de sus
actividades.

Art. 28. El Administrador de Empresas podrá asociarse con otros colegas para proporcionar
un mejor servicio al cliente y este último debe conocer los perfiles y experticia de los
representantes de la asociación.

Art. 29. La Asociación mencionada en el artículo anterior podrá darse a conocer con el
nombre de uno o más socios y serán los miembros de esta quienes decidan su nombre.

2.4 Confidencialidad en el ejercicio profesional

Art. 30. El Administrador de Empresas debe mantener en resguardo la información de sus

clientes y proveedores, la cual es de estricta confidencialidad y sólo pueden conocer las
partes involucradas.

Art. 31. El administrador de Empresas es responsable de mantener una relación de absoluta

reserva y confianza con su círculo de gestión y servicios profesionales prestados.

Art. 32. El Administrador de Empresas sólo podrá revelar información que esté en su
poder, siempre y cuando sirva para su defensa ante cualquier autoridad, juez o tribunal que
los solicite.
2.5 Publicidad para el ejercicio profesional.

Art. 33. El Administrador de Empresas no podrá hacer publicaciones de su experiencia

personal, por el contrario, debe mantener una conducta ética y moral de alto nivel,
manteniendo siempre decoro, dignidad, integridad, prestigio personal y profesional.

Art. 34. El Administrador de Empresas deberá buscar créditos y prestigio para su persona a
través de un desempeño ejemplar de sus actividades en entidades públicas o privadas.

Art. 35. El Administrador de Empresas no debe realizar publicidad de su profesión,

aprovechándose de eventos políticos, religiosos o de cualquier índole que afecte contra los
principios éticos y morales de la profesión.

Art. 36. El Administrador de Empresas podrá elaborar trabajos técnicos, documentos o

folletos con presentación sencilla y que van en pro del colectivo de la profesión y que no
buscan intereses personales.

2.6 Establecimiento de honorarios por el ejercicio profesional

Art. 37. El Administrador de Empresas deberá establecer el monto de sus honorarios de

acuerdo con los servicios profesionales prestados.

Art. 38. El Administrador de Empresas no podrá recibir comisiones directamente por el

contratante por actividades en las que esté apoyando a otro colega, a excepción de que la
asociación lo permita.

Art. 39. El Administrador de Empresas sólo podrá conceder participación de los honorarios
resultantes de su trabajo a personal o colegas con quienes comparta el ejercicio profesional.

2.7 Actividades incompetentes con el ejercicio de la profesión

Art. 40. El Administrador de Empresas debe tener claro que no deberá aceptar funciones o
actividades que requieran de su independencia, si para las mismas se encuentra limitado.

Art. 41 El administrador de Empresas no podrá aceptar cargos o funciones que resulten

estratégicamente imposible desarrollar de forma independiente.

Art. 42. El Administrador de Empresas no deberá aceptar actividades para las cuales no ha
sido formado académicamente.
Art. 43. El Administrador de Empresas no debe participar en entidades similares a aquellas
en las que tenga interés como empresario o socio, sin dar a conocer la situación al cliente
interesado en sus servicios.

Art. 44. El Administrador de Empresas por sus facultades éticas deberá abstenerse de
ofrecer sus servicios a los clientes de otro profesional de esta misma rama.

Capítulo III (Su competencia en las diferentes áreas)

3.1 Relaciones dentro de la entidad para la que ejerce sus servicios profesionales

El Licenciado en Administración de Empresas debe ser líder y lograr que en la entidad o

empresas para la que presta sus servicios profesionales, las actividades se desarrollen de
forma eficiente y efectiva, buscando la mejora continua, el estudio científico, con las
competencia y habilidades requeridas para sus colaboradores y tomado en cuenta los
valores y la filosofía de dicha entidad o empresa en las áreas siguientes:

3.1.1 Finanzas

Art. 45 Velar por que las finanzas de la empresa sean las óptimas para contar con liquidez y
no afectar los flujos de efectivo en las labores cotidianas de la entidad.

Art. 46 Mantener controles de movimiento de las cuentas por cobrar y evitar atraso en los
ingresos de la entidad o empresa.

Art. 47 Asegurar que las cuentas se mantienen con cifras positivas al momento del pago de
salarios.

Art. 48 Revisar los estados financieros por lo menos una vez al mes para tomar decisiones
efectivas en el momento oportuno.

3.1.2 Auditoría

Art. 49 Garantizar el cumplimiento de las normas de control interno de la entidad o

empresa para la que labora.

Art. 50 Realizar Auditorías Internas en todas las áreas de la empresa en las que se vea
involucrado el movimiento de efectivo.
Art. 51 Solicitar resúmenes gerenciales de los exámenes practicado por cada auditoría.

Art. 52 Requerir el apoyo de auditorías externas siempre que considere necesario para la
transparencia de los resultados.

3.1.3 Recursos Humanos.

Art. 53 Elaborar actualizaciones a los manuales de puestos, funciones, perfil de puestos.

Art. 54 Participar activamente en la actualización de políticas, normas y reglamentos de la

institución y velar por que favorezcan al capital humano y con ello se logren los objetivos y
metas de la entidad.

Art. 55 Garantizar un efectivo proceso de reclutamiento y selección, apegado al reglamento

interno y perfiles de puestos de la entidad y realizarlos de forma transparente sin favorecer
a ningún candidato ni transgredir las normas.

Art. 56 Velar por un clima laboral favorable para los colaboradores y Jefaturas de la
empresa.

Art. 57 Crear planes de capacitación, entrenamiento y fortalecimiento del capital humano.

Art. 58 lograr la fidelidad del recurso humano para fomentar el hacer carrera dentro de la
organización y evitar la rotación de personal.

Art. 59 Proponer un plan de incentivos acorde a las políticas y finanzas de la empresa y

necesidades de sus colaboradores.

Art. 60 Velar por el cumplimiento de los horarios de los colaboradores y evitar las jornadas
incrementadas innecesariamente.

3.1.4 En entidades educadoras a través del rol de docencia.

Art. 61 Mantenerse actualizado con temas relacionado al área en la que se imparte clases.

Art. 62 Respetar a los alumnos sin importar su condición social, sexo, ideología política o
religión.

Art. 63 Evitar la confianza con los alumnos para evitar falta de respeto por parte de estos.

Art. 64 No Aceptar dádivas de los alumnos a cambio de una nota.

Art. 65 Mantener un adecuado ambiente en el salón de clases y fomentar la participación de
los alumnos.

Art. 66 Enfocar su rol de facilitador en pro del aprendizaje de los alumnos de forma clara,
precisa y concisa.

Art. 67 No discriminar, humillar, ni tratar con vocabulario soez a los alumnos dentro y
fuera del aula de clases o de la institución para la que presta sus servicios.

3.1.5 Producción.

Art. 68 Velar por que las normas de la planta de producción sean de conocimiento de los
colaboradores para evitar sanciones.

Art. 69 Proponer la mejora continua en los procesos de producción garantizando eficiencia

y efectividad en los recursos.

Art. 70 Mantener un plan de control mantenimiento a las instalaciones y control de plagas,

para generar un ambiente de salubridad para las personas que desempeñan los procesos de
producción.

Art. 71 Realizar estudio de la distribución en planta para garantizar ergonomía y efectividad

en los procesos productivos.

Art. 72 Garantizar la entrega y el uso de Equipo de Protección Personal (EPP), a los

colaboradores que por sus actividades deben utilizar dicho equipo.

Art. 73 Velar por que los estándares de calidad ofrecidos por la empresa se cumplan en el
proceso productivo que permitan satisfacer las necesidades y exigencias de los clientes.

3.1.6 Asesoría Científica

Art. 74 Se debe contar con los conocimientos y las competencias necesarias que
comprueben la experticia en los temas a realizar la asesoría.

Art. 75 Utilizar un vocabulario acorde a los temas en los que se esté realizando la asesoría.

Art. 76 Respetar las opiniones de los participantes en las asesorías y dar respuestas certeras
de forma de despejar de manera total las dudas de los participantes.
Art. 77 Realizar pruebas de carácter técnico que permitan la comprensión de las asesorías.

Art. 78 Presentar un informe por escrito de los temas en los cuales se proporcionó la
asesoría.

3.1.7 Consultor.

Art. 79 El administrador de Empresas debe lograr el aprendizaje de las personas a las que
está brindando asesoría a través de su experiencia y formación profesional.

Art. 80 El administrador de Empresas deberá expresarse de forma respetuosa en todo

momento de sus consultorías.

Art. 81 El administrador de Empresas deberá explicar sus temas con veracidad y enfocarse
en temas de la realidad.

Art. 82 Bajo ninguna circunstancia el Administrador de Empresas podrá autoproclamarse

autor de temas siempre y cuando sean propiedad de otro autor.

Art. 83 El Administrador de Empresas deberá explicar temas de los cuales posee

conocimiento especializado y del área de la administración.

3.1.8 Para todas las áreas de una organización

Art. 84 Todo Administrador de Empresas debe tratar a todas las personas con respeto y
amabilidad sin importar el cargo que cada uno sustente.

Art. 85 El Administrador de Empresas debe utilizar vocabulario acorde a su formación para

dirigirse a los miembros y superiores de la entidad para la que labore.

Art. 86 El administrador de Empresas debe planificar las actividades de la entidad teniendo

en cuenta las competencias y habilidades del equipo de trabajo.

Art. 87 El Administrador de Empresas deberá buscar estrategias que permitan que cada área
de la empresa se convierta en previsora de actividades inesperadas.

Art. 88 El Administrador de Empresas tiene la responsabilidad de ser organizador y valerse

de su experiencia y formación, con el objetivo de lograr eficiencia y efectividad en
cualquiera de los departamentos.
Art. 89 El Administrador de Empresas deberá hacer valer su capacidad y dirigirá a la
organización tomando en cuenta las decisiones del resto de profesionales líderes de la
entidad.

Art. 90 El Administrador de Empresas podrá controlar las tareas de las áreas de la empresa
implementando indicadores alcanzables y lógicos para la entidad.

Art. 91 El Administrador de Empresas deberá buscar que el área donde se desenvuelve

ejecute las actividades programadas en el tiempo oportuno.

Art. 92 El Administrador de Empresas tiene la obligación de integrar los procesos,

actividades y las relaciones personales para garantizar en la empresa una sinergia ideal para
el logro de las metas y objetivos.

Art. 93 Todo Administrador de Empresas debe practicar valores, crear un ambiente de

trabajo agradable y buscar el beneficio para el capital humano y para la entidad.

Capítulo IV (De la responsabilidad ante la sociedad)

Art. 94 El Administrador de Empresas destaca por su la dignidad y principios de verdad,

justicia, respeto, responsabilidad y honestidad, de igual forma debe de mostrar respeto a los
derechos humanos, la igualdad, la inclusión, la equidad, la conciliación entre la vida
familiar y el trabajo, el desarrollo individual, la no violencia y la cultura de la paz.

Art. 95 Todos los Administradores de Empresas deberán en todo momento mostrar un

comportamiento apropiado, basado en el respeto, la cortesía y la buena educación, de
acuerdo con las normas éticas, considerando siempre en primer lugar la dignidad y
centralidad de la persona humana, así como sus valores y principios fundamentales.

Art. 96 Todos los Administradores de Empresas deberá de presentar un comportamiento

íntegro acorde con los valores éticos, establecidos en este código.

Art. 97 Los Administradores de Empresas debe de ser personas íntegras con genuina
conciencia social que sean líderes capaces de desarrollar programas de compromiso social
que fomentan la profesión como servicio, esto es, con visión solidaria que colabore de
forma responsable en proyectos de desarrollo social orientados al bien común, para crear un
mundo más justo y equitativo.
Art. 98 Los Administradores de Empresas deben de estar comprometidos con la
sustentabilidad, principios de respeto y preservación del medio ambiente en todas sus
actividades sustantivas, desarrollando estrategias, políticas y acciones para aumentar la
eficiencia en el manejo de los recursos y el cuidado ambiental.

Art. 99 Los Administradores de Empresas en todas las actividades que estos desarrollan
deberán de estar comprometidos en desarrollar políticas y acciones que fomenten el manejo
eficiente de los recursos, en especial el de la energía eléctrica, espacios, recurso humano y
del agua.

Así como promover proyectos de mejora tecnológica en equipos e instalaciones para

reducir el impacto ambiental; además de implementar prácticas ecológicas exitosas y
viables, como el uso y consumo de materias primas biodegradables.

Además, siempre deben de estar comprometidos de hacer un uso racional y eficiente de los
recursos ambientales que tengan a su disposición.

Art. 100 Los Administradores de Empresas deberán tratar a sus congéneres con respeto,
propiciando un entorno de trabajo agradable, saludable y seguro.

Art. 101 Los Administradores de Empresas deben de implantar políticas de seguridad y

salud en el trabajo y adoptadas medidas preventivas establecidas en la legislación vigente,
con la finalidad de proporcionar a los trabajadores un ambiente de trabajo respetuoso con su
salud y seguridad.

Art. 102 Los Administradores de Empresas, en todas sus actuaciones en las empresas que
desarrollen sus cargos, deberán de tener en cuenta todos aquellos principios éticos que
vayan acorde del bienestar de la comunidad donde la empresa o institución se encuentre
instalada.

Capítulo V (De las sanciones)

Art. 103 El Administrador de Empresas que infrinja este Código de Ética Profesional será
sancionado por el Consejo de Administradores de Empresas debidamente colegiado de El
Salvador.
Art. 104 Para la imposición de sanciones el Consejo se tomará en cuenta la gravedad de la
infracción cometida, evaluándola de acuerdo a la trascendencia que la falta tenga para el
prestigio y estabilidad de la profesión.

Art. 105. Según la gravedad de la falta cometida por el profesional de la Administración de

Empresas, la sanción podrá consistir en:

a) Amonestación verbal.
b) Amonestación escrita.
c) Suspensión temporal en el ejercicio de la profesión entre uno y veinticuatro meses.
d) Expulsión y cancelación definitiva de la matrícula en el Registro del respectivo
Consejo de Administradores de Empresas.

Art. 106. Las sanciones contenidas en el presente Código por las infracciones cometidas
son de carácter administrativo institucional, independientemente de las acciones civiles y
penales a que hubiere lugar.

Se considerarán sanciones graves las siguientes:

Art. 107. El profesional que cometa infracción grave y contraria a la dignidad profesión de
la Administración de Empresas directa o indirectamente, que intervengan en actos
indebidos con sus clientes y/o empleadores o en cualquier otro organismo para obtener,
aceptar o conceder subrepticia o claramente beneficio propio o a favor de terceros y/o cause
daño a otros.

Art. 108. El profesional que valiéndose de su función o cargo que desempeña, obtenga
algún tipo de beneficio personal o a favor de terceros en forma directa o indirecta.

Art. 109. El profesional en la Administración de Empresas, cualquiera que fuera el campo

en el que actúa, es responsable de sus actos, si al expresar su opinión sobre el asunto que
haya examinado o sobre cualquier información de carácter profesional.

Capítulo VI (Disposiciones Transitorias y Vigencia)

Art.110. Las asociaciones, sindicatos y todas aquellas instituciones de profesionales de la

Administración de Empresas, deberán adaptar sus Estatutos a las disposiciones del presente
Código, dentro de los tres meses siguientes contados a partir de la fecha de su vigencia.
Art. 111. En los sesenta días siguientes contados a partir de la vigencia de esta Ley, deberá
ser aprobado un Reglamento Especial que regulará la integración funcionamiento del
Tribunal de Honor y Justicia y el régimen disciplinario de procedimientos y sanciones.

Art.112. El presente Decreto entrará en vigencia ocho días después de su publicación en El

Diario Oficial.

Estrategias de Implementación

Las estrategias para implementar la aceptación, apoyo y aprobación de un Código de Ética

como Normativa para el Ejercicio de la Profesión del Administrador de Empresas en El
Salvador, deberán realizarse en los escenarios y protagonistas relacionados con la
profesión. En tal sentido, hará falta coordinar acciones entre:

a. El gremio de profesionales y sindicatos;

b. Los gremios cercanamente relacionados como contadores y auditores;
c. Las universidades que imparten la especialidad;
d. Las demás asociaciones o colegios de profesionales;
e. Los medios de comunicación.

Dichas estrategias se propondrán:

 Dar a conocer los motivos o justificación del Proyecto de Código de Ética;

 Convencer de la conveniencia de dicha normativa para la superación, dignificación
y cualificación de los Administradores de Empresas y de las organizaciones de
distinto tipo en las que ellos se desempeñan.
 Indicar que se avanza por conseguir que las personas que quieran ejercer la
profesión puedan conseguir un nivel de estudio adecuado en la licenciatura en
administración de empresas para que los profesionales salvadoreños sean
competentes en el desenvolvimiento de sus obligaciones dentro del país.

Por último, será de mucha importancia será concientizar a todos y todas o, a la mayoría de
Administradores de Empresas, para que su persona sea importante para el capital de trabajo
calificado que cada vez se necesita más y pueda cumplir satisfactoriamente con los fines y
actividades:

a. Promover la superación del clima laboral, cultural, científica y ética de los que
ejercen la profesión;
b. Enaltecer la profesión para que cumpla la función social que le corresponde dentro
de la sociedad salvadoreña;
c. Defender y proteger la libertad del ejercicio de la profesión;
d. Contribuir al desarrollo económico y social del país;
e. Formar parte de Federaciones o Confederaciones de Profesionales en
Administración de Empresas y carreras afines.