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Fase 5 – Recapitulación

Por
EDITH JOHANA ARANGO
WILBER ENRIQUE CÓRDOBA
YESICA JANETH TOCAGON
DEIBYS VALENCIA

Grupo 40006_57

Tutora
TATIANA HERNÁNDEZ

Curso: Sostenibilidad, desarrollo y calidad de vida


Universidad Nacional Abierta y a Distancia
Vicerrectoría Académica y de Investigación
Diciembre de 2021

CAPTURA DE PANTALLA DE PARTICIPACIÓN EN EL FORO


Introducción
Objetivos

 Identificar los principales riesgos de contaminación del agua dulce y sus

consecuencias para el medio ambiente.

 Establecer la relación entre el desarrollo sostenible y la contaminación del

agua dulce.

 Analizar las consecuencias de los altos niveles de consumo y la

contaminación del agua dulce.


CONTAMINACIÓN DE LOS RECURSOS HÍDRICOS EN COLOMBIA
Al hablar de desarrollo nos enfocamos en el desarrollo sostenible; dándole

lugar al avance y mejoramiento del país en cuanto a lo económico, social y

ambiental. El cuidado del agua es responsabilidad de los seres humano, la

podemos proteger evitando actos y actividades que se hagan uso de; Insecticidas,

pesticidas y fertilizantes, antibióticos y fármacos, Microorganismos patógenos,

Nitratos y fosfatos, Compuestos de origen orgánico, Contaminantes térmicos;

debemos de tomar conciencia y aprender a cuidar y conservar lo que nos hace

bien y no pasarlo por desapercibido porque los efectos provocados de algunos de

nuestros malos actos no se ven reflejados al instante, el agua es la fuente vida y

por ende debemos de cuidarla como el tesoro que es y pensar en el bienestar de

nuestras nuevas generaciones.

El texto de Gutiérrez Garza es una suma de conceptos de como del desarrollo con

la necesidad de superación de las personas y mejorar constantemente, su calidad

de vida, tener un mejor ambiente y sociedad, como también suplir sus

necesidades, le ha dado cabida al desarrollo sostenible o sustentable; el desarrollo

vela por hacer una sociedad preocupada por generar emprendimientos desde el

ámbito Neoclásico, factores muy importantes generadores de ingresos y

contribuyentes en el desarrollo sostenible, uno de estos sistemas más importantes

para generar progreso es la agricultura y la industria, los cuales funcionan con

reglas y objetivos diferentes pero con un mismo fin, de generar ingresos y


ganancias por medio de inversiones, con el propósito de crecer las tierras y

aumentar las inversiones para así generar más empleo, para que un país se

muestre en desarrollo debe tener en cuenta que la tasa de inversión rebase la tasa

de crecimiento de la población en un 10% de lo contrario deberá acudir por hacer

préstamos y aceptar inversionistas extranjeros para el desarrollo de proyectos

para así equilibrar la economía

Algunos autores como; Arthur Lewis, Whitman Rostow y Raúl Prebisch sustentan

que el desarrollo de los países es más que todo responsabilidad de los estados de

las estrategias, decisiones y proyecciones que hacen para superar la pobreza y

compararse con los países desarrollados para implementar acciones que puedan

resultar favorables, el desarrollo de un país y su evolución requiere de un proceso

extenso y trabajo continuo por lo que muchos países fracasan en el intento debido

a que los gobernantes en su mayoría no trabajan solo por el bien común si no que

tienen como prioridad lucrarse de dinero.

Algunos autores piensan que Latinoamérica necesita una economía estructuralista

para despegar su desarrollo como primero en el intercambio de mercancías o es

decir con tratados de libre comercio con algunos países, para hacer una

producción más extensa, por medio de materias primas que se consigan en el

exterior y luego de que el país se muestre capacitado para generar sus propias

materias primas dar lugar al desarrollo autónomo y la soberanía nacional lo que en

consecuente impactara en la expansión del mercado interno.


Las industrias han crecido vertiginosamente en los últimos años. A raíz de

la pandemia por COVID-19 muchas nuevas empresas han surgido atendiendo a la

demanda de productos y a la necesidad de empleo. De acuerdo con el Fondo

Monetario Internacional la economía en Colombia ha crecido mucho en los últimos

años y el país se encuentra ubicado en el tercer lugar en crecimiento económico.

Es necesario preguntarse si el desarrollo económico afecta negativamente a la

naturaleza. Un estudio realizado en 98 países del mundo señala que “un aumento

en la producción y comercialización de bienes supone también un incremento en

los índices de contaminación” Thai-Ha Le, Youngho Chang, Donghyun Park(2016).

A pesar de lo planteado por los anteriores autores no se puede generalizar la

situación en todos los países. Los países tienen a generar más contaminación a

medida que aumenta el crecimiento económico, sin embargo, en algunos países

desarrollados este crecimiento puede tener efectos poco nocivos. El estudio

muestra que los países menos desarrollados sufren un empeoramiento de la

calidad del entorno natural con un mayor del desarrollo económico. Esto se da

debido a que entre mayor actividad económica hay, mayor será el consumo de

energía, de agua y de servicios como transporte que genera consecuencias en el

medio ambiente.

Es importante tener en cuenta que aunque el desarrollo económico tiende a

afectar negativamente a la naturaleza, en los países desarrollados y con altos

ingresos normalmente se hace una adaptación de las leyes, las normas y los

reglamentos que regulan la contaminación. Además en estos países se hace una


veeduría más amplia de los casos que atentan contra el medioambiente y se ha

generado una conciencia ciudadana que promueve el cuidado de la naturaleza.

Por el contrario, los países en vía de desarrollo no tienen normas tan severas para

la producción de sus materiales, por esta razón, las distintas actividades

económicas dejan peor huella en el medio ambiente que en los países más

desarrollados.

Si bien el crecimiento económico produce contaminación ambiental se han

establecido las siguientes medidas para contrarrestarlo. En primer lugar, las

empresas suelen manejar una política de cuidado y tratamiento del agua especial.

Esta se basa en la publicación de material de sensibilización en espacios en los

cuales se encuentren grifos o fuentes de agua para alertar acerca del cuidado que

debe darse a este recurso. Otra medida que se tiene en cuenta es la reutilización

del agua para realizar productos en cuanto sea posible. La reducción del plástico

es otra medida que se establece para frenar la huella ambiental. Es importante

tener en cuenta que el plástico en su mayoría tiende a arrojarse al suelo y los

cuerpos de agua y es muy difícil frenar la contaminación por este.

Con el fin de disminuir la contaminación las empresas tienen la obligación de

incluir un Sistema de Gestión Ambiental (SGA). El SGA se basa en la norma ISO

14001, que permite que una empresa u organización realice controles sobre las

actividades, productos o servicios que causan impactos sobre el medio ambiente.

Este es una metodología que promueve actividades para minimizar los impactos

ambientales negativos que causa la empresa y mejorar la eficiencia en sus


operaciones respetando siempre al medioambiente. El seguimiento en este

sistema se realiza por medio de capacitaciones, inspecciones, manejo de

registros, políticas y objetivos. Para concluir se pueda afirmar que sí es posible

mantener el crecimiento económico sin afectar negativamente a la naturaleza,

pero es un proceso que implica compromiso de las industrias y sensibilización

acerca de la importancia del medio ambiente.

No teniendo presente que el reparto desigual es el primordial de los

determinantes para caracterizar una diferencia vinculada con el agua. La escasez

de información y de conocimientos técnicos, así como restricciones en temas de

recursos financieros necesarios para desarrollar la infraestructura hídrica,

disminuyen las maneras de uso eficaz del agua, lo cual perjudica el abasto

mundial de recursos a todos los sectores de la sociedad y de la economía. Una

creciente contaminación de los cuerpos hídricos y la reducción de las inversiones

en mantenimiento y ampliación de obras relacionadas con el agua (suministro de

agua potable, energía hidroeléctrica, transporte, turismo y esparcimiento) además

contribuyen a suscitar desigualdades en materia de disponibilidad del agua y van

en detrimento de la salud, con lo cual se convierten en elementos determinantes

de la pobreza y la exclusión. La riqueza hídrica del continente tiene además

dimensiones positivas, en que una utilización eficaz del recurso por ejemplo el

riego para producción de alimentos y seguridad alimentaria, generación

hidroeléctrica y transporte comercial mediante cuerpos de aguas naturales y

artificiales ha aumentado las oportunidades de bienestar para comunidades,


países y regiones. En diversos casos los beneficios económicos de esas

actividades han contribuido a respaldar programas sociales que favorecen la

incorporación social.

La dinámica demográfica es uno de los más importantes determinantes en la

administración sustentable de los recursos hídricos, integrado su uso eficaz y

equitativo. El agua es un recurso dependiente del clima, por lo que los cambios

experimentados por el sistema climático dificultan además una administración

equitativa, y posiblemente seguirá siendo este La situación en un escenario de

calentamiento global universal. En un escenario de creciente tensión hídrica

(sequías o inundaciones) los sistemas de abasto de agua y los servicios

vinculados con el agua estarán sujetos a más grandes presiones gracias a

impactos en la infraestructura y/o alteración de la función de aquellos servicios por

componentes como por ejemplo la migración. Tal situación se incrementa el valor

de conseguir convenios sobre ingreso y uso de agua anterior a que se alcancen

fronteras irreversibles.

El derecho a un medio ambiente sana del agua y sus piezas ha sido identificado

por primera ocasión en el inicio del testimonio de Estocolmo adoptada en la

Conferencia de Estocolmo de la ONU sobre el Medio Ambiente Humano, de 1972,

que instituye: “El hombre tiene derecho importante a la independencia, el equilibrio

y el goce de condiciones de vida idóneas en un medio de calidad tal que le

posibilite llevar una vida digna y disfrutar de confort, y tiene la solemne obligación

de defender y mejorar el medio para las generaciones presentes y futuras”


Se deja en claro que para el logro de un avance relevante hacia la meta del

desarrollo sustentable se necesita eliminar las desigualdades sociales. Hay

desigualdades gracias a fallas de los sistemas y procesos de gobernanza. Ésta

debería propender, por lo menos, a conseguir fines económicos, sociales y del

medio ambiente a grado local y nacional en forma coordinada, incorporada,

participativa, cíclica y balanceada. Sin embargo, como lo expone la exploración,

los conflictos que hay en medio de las políticas económicas, sociales y del medio

ambiente permanecen alimentando desigualdades sociales y van en detrimento de

la consecución de metas de desarrollo sustentable.

El agua está en el centro del desarrollo sustentable y resulta primordial para

el desarrollo socioeconómico, unos ecosistemas saludables y la supervivencia

humana. El agua es un recurso reducido e vital que es clave para la paz humano y

solo funciona como recurso renovable si está bien gestionado. El agua puede dar

por sentado un serio reto para el desarrollo sustentable sin embargo, gestionada

de forma eficiente y equitativa, el agua puede jugar un papel facilitador clave en el

fortalecimiento de la resiliencia de los sistemas sociales, económicos y del medio

ambiente a la luz de unos cambios rápidos e indescifrables.

La agricultura es, con diferencia, el más grande consumidor de agua en

todo el mundo, representando el 70% de las extracciones de agua

internacionalmente, aunque esta cifra cambia de manera considerable entre

territorios. Para 2050, la agricultura deberá generar un 60% bastante más de

alimentos en todo el mundo y un 100% más en las naciones en vías de desarrollo.


Las naciones más desarrolladas poseen una proporción mucho más grande de

extracciones de agua dulce para la industria que las naciones menos

desarrollados, donde se destaca la agricultura. A enorme escala, la globalización y

la manera de alargar las ventajas de la industrialización a todo el planeta

equitativamente y sin impactos insostenibles sobre el agua y otros recursos

naturales es la cuestión clave. Y, internacionalmente, se considera que 748

millones de individuos siguen sin tener ingreso a una fuente mejorada de agua y

que 2.500 millones siguen sin ingreso a unos servicios de saneamiento mejorados.

Por otro lado, la mayoría de este incremento ocurrirá en las naciones en vías de

desarrollo, que poseen una capacidad reducida para afrontar a dichos rápidos

cambios. Por consiguiente, el desarrollo de los recursos hídricos para el aumento

económico, la igualdad social y la sostenibilidad ambiental está estrechamente

vinculado con el desarrollo sustentable de las localidades. Tal vez el desafío de

más grande relevancia para el desarrollo sustentable que ha surgido en las últimas

décadas es el alcance de la crisis ecológica universal, que se está convirtiendo en

una barrera para el desarrollo humano. A partir de la perspectiva ecológico, los

esfuerzos para un desarrollo sustentable no tuvieron triunfo. La creciente

comprensión de las fronteras planetarias globales, que tienen que ser respetados

para defender los sistemas de soporte de la vida de la Tierra, tiene que ser la base

del futuro marco de desarrollo sustentable.

Las metas de Desarrollo del Milenio (ODM), acordados en el año 2000,

poseen la finalidad de minimizar a la mitad la cantidad de personas sin ingreso


sustentable a agua potable y a servicios básicos de saneamiento entre 1990 y

2015.

Un total de 748 millones de individuos no poseen aún ingreso a una fuente

mejorada de agua potable y los indicadores existentes no abordan preguntas en

relación con la estabilidad y confiabilidad del abasto de agua.

Se necesitan mejoras reales para diversa una cantidad enorme de millones

de individuos si se pretende conseguir el derecho humano a un agua potable

segura. La meta de los ODM sobre el saneamiento es un desafío todavía más

apremiante: 2.500 millones de individuos carecen en la actualidad de ingreso a

servicios de saneamiento mejorados y bastante más de 1.000 millones aún

practican la defecación al aire independiente. 

• Bastante más de 1.700 millones de individuos viven en la actualidad en

cuencas fluviales en las que la tasa de uso del agua es mayor a la de recarga, lo

cual lleva a la desecación de los ríos, la extenuación de las aguas subterráneas y

la degradación de los ecosistemas y los servicios que prestan.

 • Mientras las naciones se desarrollan y la población crece, se prevé que la

demanda mundial de agua (en términos de extracción) incremente en un 55% para

2050. Ya en 2025, 2 tercios de los habitantes del mundo podría estar viviendo en

territorios con inconvenientes de agua si persisten los patrones de consumo

recientes.
• Las pérdidas económicas de un abasto inadecuado de agua y

saneamiento se estiman en un 1,5% del producto interior bruto de las naciones,

según un análisis de la Organización Mundial de la Salud referente con el

cumplimiento de los ODM.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Thai-Ha Le, Youngho Chang, Donghyun Park,Trade openness and environmental

quality: International evidence,Energy Policy,Volume 92, 2016,Páginas 45-55,ISSN

0301-4215,https://doi.org/10.1016/j.enpol.2016.01.030.

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