EL VELORIO

Existen muchos rituales que son realizados en los velorios de un ser querido, y dentro
de mi familia también son aplicados algunos de ellos. El 17 de Enero del 2015 es una
fecha que marcó nuestras vidas, ya que fue la fecha donde falleció Juan Ramírez
Cardozo mi abuelo paterno.

Desde su velorio hasta el día de su entierro se siguió muchos rituales, ya que todos los
familiares decidieron trasladarlo al lugar en donde el habitó hasta sus últimos días para
poder realizar el velatorio, el cual duró 3 días como es de costumbre en mi familia,
velar todo ese tiempo a un ser querido; por otro lado, durante el lapso de tiempo que
duró el velorio, se preparó las comidas favoritas de mi abuelo, tales como, el
shurumbo, los buñelos con quesillo y miel, entre otros más, y esto con el fín de invitar
a todos los presentes y de alguna u otra forma tener presente y recordar a nuestro
querido abuelo con sus platos preferidos. También durante estos tres días, se veló
junto a su ataúd todas las prendas y cosas pertenecientes a mi abuelo, los cuales
fueron envueltos en sus propias sabanas, como parte de un ritual que siempre
practicaban sus familiares; una vez que se culminan los 3 días de velorio, se procedió
a realizar el entierro, el cual se llevó acabo en el distrito de Yuracyacu, perteneciente a
la provincia de Rioja el día 20 de Enero del 2015, el traslado desde el lugar en el que
se realizó el velatorio, fue desde el Caserío de Sinamal, que pertenece al distrito de
Yuracyacu el cual queda ubicado a unos 15 minutos del cementerio del mencionado
distrito, en donde todos los familiares y amigos cercanos de mi abuelo, estuvieron
presentes, y nos acompañaron en la caminata que se realizó con el ataúd en hombros,
pero antes de emprender rumbo al cementerio, se realizó un ritual más, el cual fue
levantar y bajar el ataúd 3 veces seguidas y luego llevarlo a los hombros de las
personas que lo iban a cargar, por otro lado, se movilizó por toda la casa al ataúd, con
el fín de hacer una despedida general por todo su hogar.

Una vez que realizaron todos estos rituales, con el ataúd en hombros nos dirigimos
hacia el cementerio, y toda la trayectoria se recorrió a pie, llevando consigo una foto
de mi abuelo y su cruz para ser puesta en su tumba. Cuando se llegó al cementerio,
se realizó una misa dirigida por un miembro de la Iglesia Católica la cual tuvo una
duración de 15 minutos, y luego se procedió a enterrar el ataúd en el nicho, el cual se
encontraba ubicado en el mismo terreno en el que fue enterrado el cuerpo de mi
abuelita Petronila Díaz Alarcón, la cual había fallecido poco tiempo atrás. Para
proceder con el entierro del ataúd, se permitió por unos minutos más dejar ver el rostro
como símbolo de una última despedida, luego se pasó a colocar el ataúd en el nicho y
en donde se roseaba agua bendita por todo el ataúd, otros echaban sus rosas como
señal de una última despedida.

Finalmente para culminar con todo este proceso de velorio y entierro, los hijos de mi
abuelo llevaron a lavar al río las prendas de este, para luego repartírselas entre todos
ellos, y quedar con algún recuerdo material de mi abuelo. Cuando se realiza las visitas
al cementerio, mis tíos siempre llevan caramelos, gaseosas, cerveza y galletas, para
que coloquen en las tumbas de mis abuelitos, como parte de un ritual más que
realizan en honor a sus seres queridos.

ALUMNO: JUNIOR ELIAS RAMIREZ CARRASCAL.

Ilustración 1. Ritual de Subida y Bajada (3 veces) de despedida a Juan Ramírez Cardozo

(20/01/2015)

Ilustración 2. Rozeo de agua bendita en el entierro. (20/01/2015)