PROFESOR: CARLOS CASTILLO Video 1 Juan Alfonso carrizo nació en el departamento de piedras blancas Catamarca un 15 de febrero de 1895 fue maestro y un patriota cabal. Uno de los pensadores de la época Enrique Prevedel o Miguel Cruz es un autor prolífico nacido en 1947 en San Miguel de Tucumán cuya obra remite con frecuencia el núcleo religioso de nuestra cultura titulada la cultura fundacional argentina. Esta obra lleva a reflexionar al lector sobre las graves mutilaciones de nuestra conciencia histórica y nos hace notar que el pasado anterior a la independencia transcurre bajo la égida del Virreinato del río de la plata' fundado en 1776 y que nuestro original pertenencia al Virreinato del Perú y el estudio de su irradiación étnica y cultural al actual norte argentino hace parecer que no importara, señala como si el país estuviera en una oscura nebulosa colonial hasta su iluminación por la ilustrada monarquía borbónica con la creación del Virreinato del río de la plata como resultado de esa educación histórica realizada por el influyente centralismo portuario de buenos aires. El Tucumán nace como gobernación fundada en el magnífico siglo 16 en 1563 por real disposición de Felipe segundo incluía en su territorio las actuales provincias de Jujuy, Salta, Tucumán, Catamarca, Santiago del Estero, La Rioja y Córdoba crítico del sistema educativo positivista del liberalismo, nos dice que esta dimensión de la cultura del Tucumán sea hoy desconocido por el resultado de la política educativa impuesta desde el siglo 19. Ya que su ubicación mediterránea alejada del puerto trajo marginación, aislamiento, ausencia del nuevo progreso y cruda pobreza, pero quedaron virtualmente intactas las raíces de su cultura que sobrevivieron a la modernidad e inclusive resistir firmemente hasta el embate final de la masificación La gobernación del Tucumán y el Virreinato del Perú conservo las raíces fundacionales de la cultura Argentina por el contrario el Virreinato del Rio de La Plata se quedó con el desplazamiento de nuestro eje político desde el pacifico al atlántico con el poder y la riqueza económica subsecuente desde los tiempos de contrabando colonial. El Tucumán seria el custodio de la cultura de la tradición y aquí es donde miguel cruz se fija en la obra de carrizo calificándola de monumental compilando cantares tradicionales, a partir de ese viaje que realizo para trasladarse hacia Tucumán comprendió y declaro absurda la concepción cultural y educativa de la ilustración. Él nos dice que la cultura no vive en libros ni en bibliotecas sino que vive en los que la crean es decir en los que aprecian la creación, la juzgan, la desechan o la acogen amorosamente en su propia alma. Nuestra poesía fundacional, pese a haber sido considerada como propia por los criollos campesinos no se distingue de la cultura de superficie urbana porque sus temas sean argentinos y los otros foráneos al contrario su rica densidad obedece a la secular sedimentación que hicieron en su cancionero los temas de las culturas todas del mediterráneo y se expande por eso en un universalismo que oscurece con su amplitud las colonizaciones limitadas de ciertos cosmopolitismo letrados. En su gran mayoría los cantares del Tucumán reconocen tres variantes y adaptaciones: su origen es español y su semejanza con las composiciones recopiladas en otras regiones de américa pero en todos los casos la totalidad de las composiciones de nuestro cancionero están hechas sobre modelos de versificación netamente españoles. Video 2 El segundo video nos cuenta sobre la obra de Juan Alfonso Carrizo pero esta vez es analizado por Don Roque Raúl Aragón, su padre tuvo larga actuación en la política y llegó a ser intendente de San Miguel de Tucumán él fue historiador y docente y también llegó a incursionar en programas de radio y televisión, entre sus principales obras tenemos la poesía religiosa argentina genio y figura de José Hernández y la política de San Martín. Nos cuentan algunos testimonios sobre Juan Alfonso Carrizo por Roque Raúl Aragón: dice que lo vio por primera vez en su casa, describiéndolo como un hombre moreno y corpulento de pelo corto y entrecano. Caminaba con cierto agobio y parecía embolsado en un traje azul, tendría entre 10 y 12 años pero quedó grabado, porque a la noche en la mesa, mi padre nos contó que ese hombre que había conversado toda esa tarde con él era un gran entendido en cuestiones de campo y se sabía muchísimos versos. Su padre había mandado a Carrizo para que hablara con la gente del lugar, según su tío cada vez que la chinita le llevaba un mate le agradecía con una copla distinta, también por esos días se habló de él en la casa de su otra abuela Manuela Gancedo que de chica había vivido en Loreto donde aprendió el quechua, ella tenía guardado en su memoria un gran acopio de cantares además ella hacía versos como todo el mundo antes aunque sin salirse de la forma de la copla. Carrizo sabía todos esos cantares que ella le decía. En unos de sus viajes el padre de Roque le entrega una carta de presentación a Carrizo para dársela a Avelino Sandoval, propietario montañés que vivía en San Pedro de Colalao. Apenas don Avelino leyó esa carta le dijo “don Juan Alfonso Carrizo con gusto lo atenderé si me trae de buenos aires una donosa mujer” después celebraba con una risotada su propia ocurrencia, Carrizo se acordó de cantares que el recopilador no conocía e incluyó más tarde en el cancionero de Tucumán
Entre la gente común, frente a ellos ha sentido la grata sensación de estar
fascinado y a lo largo de su vida los ha llevado en la memoria como modelos secretos a los cuales acudir en los momentos de perfilarse para algo. Contaba que cuando nombraba a la Patria de alguna manera relacionaba con la poesía y los pueblos, diciendo que las coplas que se cantaban en los diferentes pueblo se cantaban con diferentes aires y al leerlas las iba relacionando con las que había oído y se encontraba las mismas pero a veces parecidas, es decir que tenían algunas variantes, y esas variantes las iba anotando en el margen de las hojas. De aquí comprendió que los cantares, las tradiciones no son las mismas en todos los pueblos, países, etc. Además comprendió la tradición como el fondo común fundamental universal íntimo y al pueblo como su depositario, cabe aclarar que no el único ni el mejor, sino el que lo es por naturaleza.