¿Qué es?

El lenguaje de señas o signos, es una forma de expresión y

composición gestual y espacial, con percepción visual, por la cual los sordos
y sordomudos pueden establecer un canal de comunicación con su entorno
social.

Sin embargo, este lenguaje puede ser aprendido por cualquier bebé desde
los 4 meses de edad y comenzar a expresarse entre los 6 y 9 meses de
edad, que es la etapa donde comienzan a desarrollar con precisión su
coordinación motora. Además, es una manera de establecer un vínculo más
fuerte entre tú y tu hijo y que puede continuar aunque ya haya comenzado a
hablar.

¿Para qué sirve?

Desde que nacen, los bebés tienen la necesidad de comunicarse con

nosotros para expresar sus necesidades y deseos. Por ello, desde un principio
utilizan el llanto como herramienta para darse a entender y poco a poco
van incluyendo otras cosas como balbuceos, soniditos y movimientos para
llamar nuestra atención hacia lo que quieren comunicarnos.

La necesidad de comunicarse es innata y hoy en día sabemos que no

tenemos que esperar a que ellos puedan emitir sus primeras palabras para
comunicarnos con nuestros bebés. De esto se trata el Baby Signing

1.Algunos estudios sugieren que aprender a comunicarse con lengua de

signos puede contribuir a adquirir antes el lenguaje así como un mayor
desarrollo intelectual cuando el niño tiene 5 o 7 años de edad.

2. Cuando hablamos de ayudar a un niño a desarrollar un apego seguro

hablamos de que una de las características más importantes consiste
en atender sus demandas y necesidades y para ello es importante entender
lo que nos quiere decir.

3. Ayuda en muchos momentos a reducir la frustración que sienten los bebés

entre 9 y 18 meses de edad al poder transmitir lo que quieren a sus padres
de una manera que nosotros podemos entender.

4. Es divertido y una manera genial de empezar a comunicarte con tu hijo y

conocerlo y comprenderlo como podéis ver en este vídeo en el que podéis
ver un bebé de 10 meses con un vocabulario amplísimo.

¿Cómo empezar?

El Baby signs se puede iniciar desde muy pequeños, pero es ideal empezar
sobre los 6 meses de edad. Que el bebé se mantenga sentado, que
comience a utilizar la pinza, que empiece a señalar, que busque la
interacción comunicativa, trayéndonos objetos, o llevándonos a algún lugar
para contarnos alguna cosa.., Todo ello son señales que nos indican que es
un buen momento para comenzar. Podremos introducir rutinas, aprender
vocabulario nuevo, hablar de hechos pasados, de pensamientos, de
emociones, de preferencias de juegos, etc. Los niños podrán expresar cuando
no quieren comer más, si tienen hambre, sed, sueño, si les duele algo… ¿No
es genial?

¿Puede retrasar el habla?

En teoría no. Hay mucha polémica respecto hasta que punto es bueno o no; y
si puede retrasar que el niño empiece a hablar al poder comunicarse con
gestos o no. Como presupondréis hay opiniones de los dos tipos. La cuestión
es que cada niño es un mundo. Hay varios estudios que demuestran o han
estudiado que sí es beneficioso y útil. Creo que combinándolo siempre con
la palabra hablada y una vez vaya llegado el momento en que pueda
hablar, utilizar menos los signos y más el lenguaje verbal, no tiene porqué
ser perjudicial, sino todo lo contrario.