Está en la página 1de 4

HABITO 4

GANAR-GANAR

Resumen: Pensar ganar/ganar es el fundamento para llevarse bien con los demás en forma
efectiva y duradera. El cuarto hábito es el del beneficio mutuo. Porque pensar en ganar/ganar
es creer que no solo yo puedo ganar, sino que todos podemos. Es difícil pero muy agradable.
Por el simple hecho de que te interesa que los demás tengan éxito al igual que tú, es creer que
hay suficiente éxito para compartir.

Cuarto hábito de efectividad: Pensar en ganar/ganar.

Muchos pensarán que la vida entera se trata de competencia, pero en realidad no es así en las
relaciones, ya que estas son de suma importancia para nosotros.

Frecuentemente competimos con otras personas para ser mejores, ya sea en la escuela, en
nuestras actividades recreativas, e incluso cuando empecemos a trabajar, nos veremos
influenciado por el deseo de competir para ser recocido como el mejor. El problema es que
muchas veces caemos en la actitud Ganar- Perder (uno gana y otro pierde), y esta forma de
pensar siempre terminará perjudicando a ambas partes.

Afortunadamente, existe una forma mucho mejor. Se conoce como el pensar Ganar-Ganar, la
cual es una actitud hacia la vida, un marco de referencia mental que dice: “Yo puedo ganar, y
tú también. No es o tú o yo, sino ambos”. Pensar Ganar-Ganar es el fundamento para llevarse
bien con los demás

Ganar/Ganar es tener Valentía y ser considerado al mismo tiempo.


Tengamos en cuenta que nuestro modo de pensar (nuestros pensamientos) influye en nuestras
interacciones con otros de forma positiva o negativa.

Y pensar en Ganar/Ganar es un modo de pensamiento que busca el beneficio mutuo en


nuestras relaciones. Pero hay otros esquemas de pensamiento:

GANAR-PERDER

Ganar-Perder es una actitud competitiva y orgullosa. “No me importa que tan bueno sea, en
tanto que yo este encima de ti “. “El pastel del éxito es tan sólo de éste tamaño, y si tu obtienes
un pedazo grande, entonces me tocará menos a mi”. Las relaciones, amistades y la lealtad son
secundarias para ganar el juego, y ser mejor y salirse con la nuestra es lo importante.

No debemos sentirnos mal si a veces pensamos en Ganar-Perder, porque muchas veces somos
formados y condicionados para hacer esto desde muy pequeños. Pero tenemos la oportunidad
de ser proactivos y elevarnos por encima de este condicionamiento Ganar-Perder.

Algunas de las cosas que hacemos cuando tenemos una actitud Ganar-Perder son:

 Utilizar a otras personas, físico o emocionalmente, para tus propios propósitos


egoístas.

 Tratar de avanzar a expensas de los demás.

 Difundir rumores sobre otra persona (como si disminuir a alguien te hiciera más
fuerte).

 Insistir con siempre salirte con la tuya, sin que te importen los sentimientos de los
demás.

 Sentir celos o envidia cuando le sucede algo bueno a otro.

A fin de cuentas, Ganar-Perder generalmente te llevará a estar solo en el mundo, sin amigos
que quieran compartir contigo.

PERDER-GANAR

Al principio, Perder-Ganar se puede ver bien, pero es tan peligroso como Ganar-Perder.
Cuando estamos condicionados con la forma de pensar y actura Perder-Ganar,
decimos: “Hazlo a tu manera. Siempre salgo perdiendo”. “Haz lo que quieras conmigo. Todos
los demás lo hacen”.

Perder-Ganar es una actitud que establece bajas expectativas y compromete nuestros


principios. Una actitud de debilidad, en donde prefieres ceder a todo, en vez de defender tus
ideas, dejas que los demás se salgan con la suya, y luego te veras a ti mismo fijarte bajas
expectativas y comprometiendo tus normas una y otra vez.

Si adoptas Perder-Ganar como tu actitud básica ante la vida, entonces los demás te pisotearán,
además siempre tendrás que ocultar tus sentimientos, lo que no es saludable.

Perder-Ganar está bien si el asunto no es importante para ti. Que los demás ganen en las
cuestiones pequeñas. Pero siempre defiende las cosas que sean importantes para ti.

PERDER-PERDER

Perder-Perder es negativo. Y expresa “si yo me hundo, re hundes conmigo”.


Y es lo que generalmente sucede cuando se reúnen dos personas Ganar-Perder. Si lo que se
quiere es ganar a toda costa, y la otra persona también quiere ganar a toda costa, entonces
ambos terminarán perdiendo. Perder-Perder también ocurre cuando una persona se obsesiona
de forma negativa con otra persona.

GANAR-GANAR

EL BUFFET EN QUE PUEDES COMER TODO LO QUE PUEDAS

Ganar-Ganar es creer que todos pueden ganar. Es


al mismo tiempo agradable y difícil. Te preocupas por los demás y quieres que todos tengan
éxito. Pero también te preocupas por ti mismo, y también quieres tener éxito. Ganar-Ganar es
más abundante. Es creer que hay suficiente éxito para dar y repartir. No es lo tuyo o lo mío. Es
de todos.

¿CÓMO PODEMOS PENSAR GANAR-GANAR?

Obteniendo la victoria privada, y evitando dos hábitos “enfermadores”.

*Ganar Primero la Victoria Privada: Todo comienza con nosotros mismos. Si no pagamos el
precio para ganar la victoria privada, nos será muy difícil pensar en Ganar/Ganar. Nos
sentiremos amenazado por los demás. Nos será difícil sentirnos feliices por sus éxitos. Será
difícil compartir elogios o el reconocimiento. Las personas inseguras se sienten celosas con
mucha facilidad.

Recordemos que primero necesitamos sentirnos bien con nosotros mismos para lograr
sentirnos bien con los demás. La seguridad personal es el fundamento para Ganar- Ganar.

*Superar los dos hábitos “enfermadores” que pueden enfermarnos desde nuestro interior.
Sus nombres son competir y comparar. Es prácticamente imposible pensar en Ganar/Ganar
teniéndolos con nosotros:

**Competir: la competencia puede ser muy saludable. Nos impulsa a mejorar, a dar más de
nosotros mismos. Sin ello, sin ello no podríamos saber hasta dónde podemos llegar. Pero hay
otro lado de la competencia que no es tan saludable. La diferencia es la siguiente: la
competencia es saludable cuando competimos contra nosotros mismos, o cuando nos desafía
dar lo mejor de nosotros mismos. La competencia se hace oscura cuando relacionamos
nuestra autoestima con el ganar, o cuando la utilizamos para ponernos por encima de otro.

**Comparar: Compararnos con los demás sólo puede traernos estrés y desilusiones. Tenemos
que comprender que todos estamos en distintos programas de desarrollo. Social, mental y
físicamente. El compararnos con los demás nos hace sentirnos como en una montaña rusa.
Subimos y bajamos, sintiéndonos inferiores en un momento y superiores en otros, confiados
en un momento, e intimidados al siguiente. La única buena comparación es compararnos con
nuestro propio potencial.

Los beneficio de pensar en Ganar- Ganar.

Primero tienes que tener en cuenta que el Ganar-Ganar se contagia. Al darse cuenta de que
eres de corazón generoso, ayudas a los demás a tener éxito y estas dispuesto a competir el
reconocimiento, tus compañeros de clase y otras personas querrán compartir más contigo.

Sin embargo, hay veces en que no importa cuándo se trate, no se puede hallar una solución
Ganar/Ganar. Puede ser que la otra persona se incline tanto por el Ganar/Perder, que ni
siquiera tengas ganas de acercártele. En tales situaciones, no debes rebajarte o permitir que te
pisoteen. En vez de ello, opta por Ganar/Ganar o no hay trato. En otras palabras, si no puedes
hallar una mejor solución que funcione para ambos, decide no jugar.

PEQUEÑOS PASOS QUE NOS AYUDAN A CRECER.

1. Ubica un aspecto de tu vida en donde más luches con las comparaciones. Tal vez se trate de
ropas, rasgos físicos, amigos o talentos.

2. Si prácticas deportes, demuestra el espíritu deportivo. Elogia a alguien del equipo


contrincante al terminar el partido.

3. Si alguien te debe dinero, no temas mencionárselo de forma amistosa.

4. Sin importar si ganes o pierdas, juega con barajas, juegos de mesas o de computadora con
los demás, sólo por divertirte.

5. Piensa en una persona a la que consideres un modelo de Ganar/Ganar. ¿Qué hay en esa
persona que más admiras?

También podría gustarte