¿Qué necesitamos, consultoría o coaching?

Ing. Daniel Rosales – Máster Coach Ontológico Profesional (*)

La implacable dinámica de cambio permanente coloca a las empresas ante situaciones constantes
de incertidumbre generándose muy habitualmente dudas acerca de que tipo de asistencia
profesional se requiere para no perder eficiencia operativa y proyección a futuro.
La mayoría de las empresas Pymes reportan padecer los mismos problemas: equipos de venta
que no pueden adaptarse a las bruscas variaciones de los mercados, desajustes importantes entre
las áreas, compras no abastece oportunamente, producción no cumple con los plazos prometidos,
la productividad no hace rentable al negocio, mantenimiento no puede sostener los planes
preventivos, hay reprocesos injustificados, no cuentan con los recursos financieros cuando los
requieren, suben los costos, baja la facturación y la operación entra en zona de riesgo.
Lo que curiosamente nos dicen la totalidad de los empresarios, sin excepción alguna, es que en
sus organizaciones tienen problemas de comunicación, que no logran que sus gerentes y jefes se
coordinen entre sí, que entiendan y hagan cumplir las políticas y procedimientos que la
Dirección establece. Este cuadro de situación, extrañamente repetido, genera desconcierto, ¿qué
necesitamos? ¿quién nos puede ayudar a ordenar esto?, un consultor? Pero en qué?...si tengo líos
en todas partes…¿cuál es la prioritaria?
En la pregunta misma está el compromiso de lo que se está buscando: respuestas, de alguien que
“sepa”, buscamos “saberes” que puedan ser transferidos, de manera urgente!!! Acaso hay alguien
que pueda encontrar “todas” las respuestas necesarias, las que se necesitan ahora y las que se
necesitarán en el futuro, que no sea el equipo directivo de la organización? Quizás les esté
faltando alguna competencia específica, pero sólo podrá aplicarse efectivamente cuando estén
cubiertas las competencias genéricas que posibiliten aprenderlas en toda la organización.
Esas competencias genéricas son las que desarrolla el coaching: comunicación efectiva con el
cliente (tanto el externo, el interno y, fundamentalmente con el “cliente interior”, o sea,
cada uno consigo mismo), crear una cultura de compromiso en “hacer que las cosas pasen”
en vez de la recurrente cultura de “explicar lo que pasa”. El coaching genera líderes, tanto
en lo personal como para la coordinación de acciones, construye equipos, que interactúen
con objetivos comunes, lo que, paradójicamente, no es lo que, habitualmente, más incentiva la
dirección de las empresas, quizás confundidas en la práctica perversa e ineficiente de “dividir
para reinar”.
La calidad de vida, el clima laboral, la motivación y capacidad de diseñar futuro es cada vez más
responsabilidad de la mirada responsable y sistémica de los líderes de la organización. Líderes
que sean capaces de generar preguntas inteligentes que hagan aprovechar la totalidad de los
recursos con que cuentan los colaboradores, más que pretenciosas respuestas iluminadas que
abarquen todas las necesidades. Esto, se desarrolla a través del coaching.

(*) Director de Escuela Latinoamericana de Coaching® (www.elacoaching.com.ar))