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Aprenda a identificar los ladrones de su tiempo

Si usted es de los que dice frases como ‘no me alcanza el tiempo’, ‘si el día tuviera 25 horas’, ‘si
tuviera más tiempo’, ponga mucha atención a las recomendaciones positivas frente a este tema,
de dos profesionales de Areandina, para que no se le vuelvan comunes y para que sepa darle la
importancia adecuada a su tiempo, así como aprender a manejarlo adecuadamente.

Los ladrones del tiempo disminuyen la productividad y los niveles de concentración en el


cumplimiento de las metas académicas, laborales o personales. En algunas ocasiones, estos
distractores pueden ser por factores externos o internos. De acuerdo con Carla Johana Martínez,
docente del programa de Administración de Empresas, “problemas en la comunicación directa
dentro de las organizaciones, reuniones improductivas, interrupciones obligatorias o voluntarias
como las llamadas telefónicas, son factores que pueden afectar el rendimiento en el trabajo o en
cualquier actividad que se esté ejecutando”.

Identificar los factores

La profesional también indicó que los ladrones del tiempo, también refieren a reuniones que se
extienden más de lo necesario o que no están enfocadas, llamadas telefónicas que según ella
“llegan justo cuando estamos terminando un informe o aquellas que roban nuestra atención por el
solo placer de la observación, como el caso de una foto o video que nos envía algún familiar o
amigo”.
Las redes sociales

Otro de los factores externos, pero no menos importante, es la consulta constante de las redes
sociales que consume gran parte del día. Un estudio publicado por la revista Semana en el 2017,
comprobó que “por cada hora que los estudiantes interactuaban en redes sociales, se vio

deteriorado el rendimiento académico en un 8%, mientras que, en los trabajadores, la afectación


laboral fue del 25%”. Un porcentaje que la académica considera que el tiempo es un recurso
limitado y que en términos económicos para las organizaciones está relacionado con
la productividad y el costo asociado.

En el panorama de los factores internos se encuentra la procrastinación, palabra que proviene del


latín pro (a favor de) y crastinare (relativo al día de mañana) y que significa posponer, aplazar o
dejar para después.

Para Ana María Luna González, docente del programa de Psicología, “generalmente dentro de las
características de base de la procrastinación están las creencias irracionales, ya sea que algunas
personas sean demasiado perfeccionistas o les da miedo el fracaso, tienen demasiadas
expectativas en lo que esperan de ellos los demás, tienen una imagen pobre de sí misma,
sentimientos catastróficos, inseguridad, dificultad para la toma de decisiones, depresión o falta de
administración de tiempo, entre otras”.

Tareas claras

Aprenda a identificar los ladrones de su tiempo


Para Luna González, otro ladrón del tiempo es la improvisación, “al no tener claras las actividades
y su priorización, en estos casos las personas funcionan como bomberos apagando incendios y
todo se vuelve urgente olvidando lo realmente importante”. La académica señaló también que la
falta de motivación y la dificultad de dar una réplica negativa conlleva a una distracción en las
tareas. “Debemos ser conscientes que somos las personas que tenemos el control del tiempo y no
el tiempo de nosotros, tenemos la posibilidad de controlarlo y manejarlo a nuestro favor para
lograr nuestras metas y lo que siempre deseamos”, aseguró Luna.

Consejos para ser más productivos

Basados en los factores mencionados anteriormente, desde los programas de Psicología y


Administración de Empresas de Areandina, se sugieren herramientas para combatir a los ladrones
del tiempo y ser más eficientes en las tareas diarias:

* Planifique su día y haga una lista de tareas por orden de urgencia e importancia.

* Trate de aplicar la matriz de Eisenhower en la organización de sus tareas. Este ejercicio ayudará


a agilizar los pendientes del día: o urgente e importante: Incluya aquellas tareas que hay
que realizar de inmediato. Importante, pero no urgente: Son tareas que puedes programar para
hacer más adelante. Urgente, pero no importante: Tareas que puedes delegar en otra persona. Ni
urgente ni importante: Tareas que puedes descartar o eliminar.

* Enfóquese en las tareas y convénzase de que sí lo logrará por muy compleja que sea. Recuerde
que todo tiene solución y pida ayuda si es necesario.

*Haga una lista de chequeo de las tareas finalizadas, esto le ayudará a llevar un control para seguir
administrando el tiempo de lo que te queda por hacer.

* Controle el entorno y evite las distracciones al máximo como tener el televisor encendido, revise
constantemente el celular o consultar las redes sociales de manera innecesaria.

* Aprenda a decir ‘no’ cuando la situación lo amerite y no se comprometa con múltiples


actividades que no pueda realizar en el día. En caso de ser inevitable, reorganice sus prioridades y
defina nuevamente fechas de entrega para que el tiempo le alcance.

*Es importante tener presente que para lograr todo lo que desea, se necesita del esfuerzo y
dedicación.

DATO

IMPORTANTE

Según un estudio de la consultora McKinsey “los empleados actualmente destinan un 28% de su


tiempo en leer, escribir y responder e-mails, equivalente a unas 13 horas por semana”, lo que para
Martínez representa una pérdida de tiempo considerable si se tiene en cuenta que muchos de
estos correos son solo informativos y no tienen que ver con la gestión propia del cargo.

Importante
Si se hace un uso adecuado del tiempo y es controlado a favor, se convertirá en una herramienta
poderosa que hará que los sueños se puedan alcanzar más fácilmente.

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