Está en la página 1de 12

Psico(pato)logía y etiopatogenia de la Depresión mismos las variaciones de una enfermedad mental dada.

Los factores
Una aproximación psicodinámica integrada sociales y ambientales también contribuyen de manera importante a la
Juan Pablo Jiménez * 2002 variación. 4º Alteraciones en la expresión genética inducida por el
aprendizaje dan lugar a cambios en los patrones de conexiones
La melancolía, cuyo concepto no ha sido aún fijamente neuronales. 5º En la medida en que la psicoterapia es efectiva y produce
determinado ni siquiera en la psiquiatría descriptiva, cambios persistentes en la conducta –algo que, como veremos en el
muestra diversas formas clínicas a las no se ha logrado capítulo correspondiente, ha probado la investigación sistemática en
reducir todavía a una unidad, y entre las cuales hay
resultados de tratamientos psicoterapéuticos–, presumiblemente lo hace
algunas que recuerdan más las afecciones somáticas que
las psicógenas... Nuestro material se limita a un pequeño
a través del aprendizaje, produciendo cambios en la expresión de los
número de casos sobre cuya naturaleza psicógena no genes, alterando la fuerza de las conexiones sinápticas e induciendo
cabía duda. (Freud en Duelo y Melancolía, 1917e, [1915]). cambios estructurales que alteran el patrón anatómico de las
interconexiones entre las células nerviosas del cerebro.
1. Introducción Teniendo en mente esta perspectiva podemos emprender la
exposición sobre la psicopatología dinámica de la depresión.
En este capítulo consideraremos el estudio de la depresión desde el
punto de vista general de la Psiquiatría Dinámica, definida, según su
versión más moderna, como “una aproximación al diagnóstico y 2. El síndrome depresivo
tratamiento caracterizada por una forma de pensar sobre ambos – Depresión es un término del lenguaje cotidiano que desde el punto de
paciente y clínico–, que incluye los conflictos inconscientes, los déficits y vista del especialista abarca una variedad de condiciones diferentes.
distorsiones de las estructuras intrapsíquicas, las relaciones de objeto Todos nos hemos sentido “deprimidos” en algún momento de la vida,
internas y que integra estos elementos con los hallazgos aludiendo así a un estado de ánimo que identificamos con un conjunto de
contemporáneos de las neurociencias” (G. Gabbard 2000; énfasis mío). emociones tales como abatimiento, tristeza, decaimiento.
De este modo, la aproximación de la Psiquiatría Dinámica es sintética e Técnicamente, sin embargo, “depresión” es un síndrome complejo,
integradora y especialmente adecuada para el estudio de la depresión, que se inscribe dentro de los llamados trastornos del ánimo y que puede
pues, como queda claro en el epígrafe, ya Freud sospechaba que en la manifestarse como expresión de 3 categorías mórbidas principales, cada
etiología y en la terapéutica de este variado complejo sintomático una con características propias: trastornos depresivos (depresión mayor
confluyen factores psicosociales y biológicos. y distimia), trastornos bipolares y trastornos del ánimo debidos a
En un trabajo pionero, Eric Kandel (1998) propuso un “Nuevo Marco condiciones médicas o inducidos por substancias. Este capítulo se
Conceptual para la Psiquiatría” que deriva del conocimiento biológico refiere especialmente a los trastornos depresivos propiamente tales.
actual sobre la relación mente- cerebro. Con ese artículo, este autor, que En su presentación florida (depresión mayor moderada a severa), el
recibió el premio Nóbel de Medicina y Fisiología del año 2000, dio un síndrome depresivo tiene características típicas. Los/as pacientes
nuevo impulso a la aproximación de la Psiquiatría Dinámica, al plantear depresivos/as se sienten constreñidos/as en la vivencia de sí mismos/as,
que el análisis de la interacción entre los determinantes psicosociales y en sus relaciones con el medio social inmediato y en la percepción y la
biológicos de la conducta pueden ser mejor estudiados en el marco de perspectiva del propio futuro. Su ánimo está abatido y ansioso, se
los conocimientos biológicos actuales. Este conocimiento lo resume en sienten desamparados/as, a menudo hasta la desesperación. Sus
los cinco principios siguientes: 1º Todos los procesos mentales, aún los pensamientos son pesimistas y negativos, llenos de quejas y reproches
más complejos, reflejan operaciones cerebrales. 2º Los genes y las contra sí mismos/as, con una autoestima disminuida. Las tareas
proteínas que éstos producen son determinantes importantes de los cotidianas se prevén –en especial al despertar en las mañanas–, como
patrones de interconexión entre las neuronas cerebrales y su un camino difícil de recorrer, escarpado y lleno de obstáculos. El mundo
funcionamiento. 3º Los genes alterados, sin embargo, no explican por sí se vive como crítico, hostil y poco familiar, lleno de pérdidas potenciales,
con un futuro sin esperanzas. Desde el punto de vista motivacional,
*
Profesor Asociado, Director del Departamento de Psiquiatría y Salud Mental. Campus los/as pacientes han perdido de regla el interés por sus actividades y
Oriente. Facultad de Medicina. Universidad de Chile. Analista en función didáctica, Asociación hobbies. Presentan dificultades para tomar decisiones, se retiran de los
Psicoanalítica Chilena (IPA)
1
contactos sociales y se sienten dependientes de su medio más próximo. más bien baja, su relato lento. Esta vez el diagnóstico es de una
Conductualmente son inactivos/as, pobres en iniciativa, lentificados/as, depresión mayor.
quejosos/as, aun cuando también pueden estar irritables, agitados/as y Tradicionalmente, las distintas presentaciones de la enfermedad
presos/as de una angustiosa inquietud motora. Suelen comenzar muchas depresiva se clasificaban de acuerdo con las supuestas series causales
cosas sin terminar ninguna. De entre los síntomas somáticos más típicos subyacentes, en depresiones neuróticas (psicógenas), depresiones
destacan la presión en el pecho, las dificultades en el dormir (sueño endógenas (constitucionales) y las secundarias a enfermedades
interrumpido, despertar precoz con angustia) o la hipersomnia, la corporales (somatógenas). Sin embargo, la evidencia científica más
inhibición (o agitación) psicomotora, la pérdida del apetito y del peso (o moderna ha demostrado que la ecuación etiológica es más compleja: lo
aumento) y la disminución del interés sexual. La depresión severa puede más probable es que, en proporciones distintas, en todas las formas
complicarse con síntomas psicóticos como alucinaciones o ideas clínicas estén involucradas series causales de distinto origen.
delirantes, con ideas paranoides, con abuso de alcohol o drogas, o con Actualmente, tanto la clasificación CIE-10 como el DSM-IV orientan el
ideas o actuaciones suicidas. En el caso de que se presenten síntomas diagnóstico de acuerdo con descripciones transversales y con el curso
maníacos, hay que pensar en una enfermedad bipolar. temporal del cuadro. Así, existen episodios depresivos típicos y únicos,
episodios depresivos recidivantes, los que pueden ser leves, moderados
o severos, y trastornos distímicos, caracterizados por síntomas
3. Nosología, Epidemiología y Curso
depresivos moderados mantenidos en el tiempo, de comienzo temprano
Desde un punto de vista del diagnóstico, el/la clínico debe discriminar o tardío. Esto sin considerar las depresiones como fases del trastorno
dentro de diferentes presentaciones semiológicas. En términos muy bipolar ni las depresiones secundarias a medicamentos, abuso de
generales, la depresión es un fenómeno que se mueve dentro de dos sustancias u otras condiciones médicas (ciertas enfermedades que
extremos que determinan un espectro de estados de variada suelen cursar con sintomatología depresiva). Las depresiones graves
complejidad, gravedad y naturaleza. muestran de regla componentes somáticos (cambios en las funciones y
Por un lado, se encuentra la depresión como síntoma y motivo de ciclos vitales básicos, como alteraciones del sueño y del apetito, cambios
consulta, pero que rápidamente se diluye en otra situación anímica y en la vitalidad, sensaciones corporales y síntomas viscerales).
vital. Ejemplos: Mujer de 37 años cuyo marido acaba de abandonarla por Con todo, no hay que olvidar que la depresión como síntoma aislado o
otra, dice estar muy deprimida, pero luego aparece que la emoción como queja subjetiva y motivo de consulta, aun cuando no alcance a
predominante es mucho más la impotencia rabiosa, la humillación y la constituir una depresión en regla, atraviesa todo el espectro de la
angustia frente al futuro; la pena o la sensación de minusvalía no son patología y puede incluso estar presente en formas leves en personas
evidentes. Otro, padre de cinco hijos, cesante desde hace un par de sanas sometidas a situaciones de vida difíciles. Estudios en los EE.UU.
meses, se queja de cansancio, abatimiento y dificultades para conciliar el muestran que el impacto socioeconómico y en requerimiento de servicios
sueño. La emoción central es el temor y la angustia de no poder sostener de atención médica de individuos con síntomas depresivos o depresiones
y alimentar a su familia. Aquí se trata más bien de un estado angustioso menores que no alcanzan a cumplir con los requisitos para el diagnóstico
con síntomas depresivos secundarios, en el marco de un trastorno de de depresión mayor o de distimia, es mayor que el de aquellos
estrés postraumático. formalmente catalogados como sufriendo de trastornos depresivos
Por el otro, está la depresión como enfermedad. En este caso, no es (Gabbard 1994).
infrecuente que la depresión no sea entregada como síntoma central, En todo caso, de acuerdo con datos disponibles en nuestro país, la
sino diagnosticada por el especialista o por un familiar o amigo cercano. prevalencia de trastornos depresivos en la población general mayor de
Ejemplo: Mujer de 49 años que se queja de una sensación de pesadez 15 años se sitúa entre el 7.5% y el 10%, y donde el 30% de las personas
corporal, embotamiento intelectual, dificultades en la memoria, consultantes en el nivel primario de atención sufre de cuadros
disminución del rendimiento laboral, pero, al preguntárselo, niega estar depresivos, cifra que aumenta en pacientes con comorbilidad física de
deprimida. Al interrogarla, refiere que sus síntomas disminuyen hacia la gravedad. (Minsal 2001) El que la depresión sea dos veces más
tarde y que despierta cerca de las tres de la mañana con una sensación frecuente en mujeres que en hombres es un dato que debe hacer pensar
dolorosa de opresión en el pecho. Su aspecto es algo marchito, su voz en condiciones etiológicas asociadas al género.

2
El impacto social y económico de la depresión en nuestro país es funcionamiento social y presentan más síntomas residuales después
considerable. La depresión ocupa el segundo lugar entre las primeras 15 del tratamiento. Ciertos desórdenes de personalidad parecen conducir
causas de disminución de “años de vida saludables perdidos por inevitablemente a la depresión (Typus Melancholicus), o contribuir a
discapacidad o muerte prematura” (AVISA) en mujeres. Además, la mantenerla. Por otra parte, factores de carácter pueden ser
incapacidad funcional de los/as pacientes depresivos/as es mayor que la responsables de una pobre adherencia al tratamiento
que se presenta en otras enfermedades crónicas como artritis, dolores medicamentoso.
de espalda, diabetes e hipertensión arterial. La depresión puede 2) Personalidad depresiva. A pesar de su larga tradición en la nosología
aumentar la disposición de las personas a presentar dolor físico y otras psicoanalítica, este diagnóstico no ha sido aún incorporado en las
enfermedades. Un 60% de los suicidios informados ocurre en relación clasificaciones por falta de investigaciones empíricas que lo
con un trastorno depresivo. Finalmente, los costos asociados con los sustenten. Sin embargo, es un diagnóstico que se sobrepone al
trastornos depresivos son muy elevados, siendo mucho menos desorden distímico del eje I. Tales pacientes presentan sentimientos
importantes los directos (fármacos antidepresivos, psicoterapias, etc.) crónicos de culpabilidad, desamparo, baja autoestima persistente,
que los indirectos (utilización de servicios de salud, ausentismo laboral, tendencia a castigarse y a criticarse, a establecer relaciones de
disminución de la productividad, muerte prematura por suicidio). (Minsal dependencia y a reaccionar catastróficamente frente a cualquier
2001) cambio. Un porcentaje de ellos/as responde al tratamiento con
En relación con el curso y la historia natural de la depresión, la antidepresivos. Además, estos/as pacientes pueden presentar una
revisión hecha por Roth & Fonagy (1996), muestra que el curso probable depresión doble, donde una depresión mayor se agrega al trasfondo
de la depresión varía de acuerdo con el subtipo considerado (depresión distímico. Tales pacientes requieren de medicación para el episodio
mayor, distimia o depresión doble) y con su cronicidad. En general, la depresivo agudo y psicoterapia para modificar los rasgos de carácter.
depresión se caracteriza por la alta probabilidad de recaída: el 75% de 3) Depresión caracterológica. Son pacientes con trastornos severos de
los/as pacientes seguidos/as por un lapso de 10 años, sufrieron un nuevo personalidad (borderline) que se quejan de depresión, pero no
episodio de depresión mayor y un 10% de ellos/as presentaron depresión alcanzan a cumplir con los criterios del eje I. Describen sentimientos
persistente. Probablemente, el 80% de los/as pacientes con desorden crónicos de soledad y vacío existencial junto a la percepción de que
distímico desarrollará finalmente una depresión mayor (depresión doble), sus necesidades emocionales no son satisfechas por los demás; se
lo que sugiere que distimia y depresión aguda son variantes de una sienten rabiosos/as y frustrados/as crónicamente.
misma condición. La probabilidad de recaída es mayor en pacientes con
diagnóstico de distimia; estos/as pacientes muestran un ciclo más rápido La evidencia disponible apunta en la dirección de que la psicoterapia
de recuperación y de recaída que aquellos/as con depresión mayor sola. juega un rol principal en estos cuadros donde la depresión tiende a
Finalmente, más de tres episodios previos de depresión mayor aumentan confundirse o interactuar con los rasgos de personalidad. En general,
la probabilidad de una nueva recaída. Como veremos en el capítulo este es el terreno en que se cultivan las depresiones resistentes al
correspondiente, estos datos deben tenerse en cuenta a la hora de tratamiento medicamentoso. En tales pacientes, la adherencia al
evaluar los resultados del tratamiento. tratamiento medicamentoso depende mucho más de la instalación de
una relación psicoterapéutica que en las depresiones mayores sin
alteración en el eje II. Se ha visto, además, que en las distimias la
3.1 Depresión y personalidad
psicoterapia efectiva tiende a ser más prolongada que en el caso de
Desde el punto de vista psicodinámico –tanto en el diagnóstico como pacientes con depresión mayor.
en las consecuencias para el tratamiento–, es esencial poner atención en
la interfase entre depresión y personalidad. La relación entre depresión y
personalidad puede tomar tres formas:
4. Etiología
1) Depresión mayor en el eje I, complicada por la coexistencia de
En relación con la etiopatogenia de los trastornos depresivos, existen
desorden de personalidad en el eje II. De regla los/as pacientes que
estudios que relacionan eventos traumáticos tempranos, tales como
presentan patología en el eje II muestran peores resultados en el
3
separaciones y pérdidas en la infancia, con una mayor vulnerabilidad en elimina la validez de las teorías psicogenéticas. Estamos recién al inicio
la edad adulta a padecer trastornos afectivos. En un estudio que incluyó del estudio de las correlaciones mente-cerebro (Köhler & Dahme 1996).
a 1.018 parejas de mellizas mujeres, Kendler y cols. (1992) Por cierto, el hallazgo de una serie causal de naturaleza psicológica
documentaron un riesgo aumentado para la depresión mayor en aquellas en los trastornos afectivos no permite afirmar que una intervención
mujeres que habían sufrido una separación de la madre o del padre en la psicológica necesariamente pueda hacer desaparecer el cuadro
niñez o en la adolescencia. Estos estudios confirman los hallazgos de depresivo. Pero, lo contrario también es verdadero: la existencia probada
Brown & Harris (1978) y de Bowlby (1980). Es probable que eventos de factores genéticos en los trastornos afectivos tampoco permite colegir
dolorosos en la infancia temprana sensibilicen los receptores cerebrales que el tratamiento deba ser sólo farmacológico. Lo que está detrás de
a los neurotransmisores, de modo tal, que ideas o imágenes asociadas a esta compleja relación entre etiopatogenia y terapéutica es una
estados depresivos actúen en la edad adulta como estímulos determinada concepción de la relación mente-cerebro que resumimos
condicionados capaces de desencadenar un episodio depresivo mayor esquemáticamente en la introducción a este capítulo.
en personas genéticamente vulnerables, incluso sin que suceda una En un futuro ya no tan lejano, el avance en las técnicas de diagnóstico
pérdida externa o exista un agente estresor en el medio ambiente por neuroimágenes –como son, por ejemplo, la tomografía
(modelo de respuesta kindling). En todo caso, otros estudios (van Praag computarizada por emisión de un fotón único (SPECT) o la tomografía
1989) muestran que cerca del 75% de pacientes con depresión severa, o por emisión de positrones (PET)– facilitarán no sólo el diagnóstico de
sus familiares, son capaces de identificar un evento ambiental con condiciones psiquiátricas, sino también servirán para monitorear los
significación etiológica, dentro de los 6 meses anteriores a la aparición de progresos de una psicoterapia. Esto es algo que ya se ha hecho en el
la enfermedad. El fenómeno del kindling también permite explicar porqué caso del tratamiento del trastorno obsesivo compulsivo (TOC). La
los estresores psicosociales juegan un papel mucho más importante en evidencia científica ha mostrado que tanto los medicamentos
el desencadenamiento del primer episodio depresivo y van perdiendo antidepresivos del tipo inhibidores de la recaptación de la serotonina (por
progresivamente relevancia en los episodios recidivantes posteriores ejemplo, la Fluoxetina), y terapias conductuales específicas son efectivos
(Post 1992). en la reducción de los síntomas de pacientes con TOC. Diversas
Los trastornos afectivos, en especial las depresiones mayores y la investigaciones han postulado el papel del sistema cerebral córtico-
enfermedad bipolar, tienen un fuerte componente genético. La estriatal-talámico en la mediación de los síntomas del TOC. El TOC se
transmisión familiar de depresión y manía sugiere la existencia de asocia con una hiperactividad funcional de la cabeza del núcleo caudado
factores que condicionan trastornos a nivel neuroquímico. La alteración derecho. Después de un tratamiento exitoso, sea sólo con medicamentos
de los ritmos biológicos circadianos en la depresión mayor es una de las (del tipo Fluoxetina) o con modificación conductual exclusiva, se observa,
manifestaciones más claras de tales trastornos. Sin embargo, las por medio de las técnicas de neuroimágenes descritas, una disminución
razones dadas más arriba apuntan a una serie causal psicológica sustancial de la actividad (medida como tasa de consumo de glucosa) en
independiente, y en interacción con las causas genéticas y bioquímicas, la cabeza del núcleo caudado derecho.
que está relacionada con estresores ambientales tales como duelos, Eric Kandel (1998) plantea que estos hallazgos sugieren que cuando
pérdidas y separaciones. el/la terapeuta habla con su paciente y el/la paciente escucha, el/la
Como vimos al principio, ya Freud planteaba una etiología múltiple en terapeuta está no sólo haciendo contacto visual y verbal sino que,
los trastornos afectivos. Sin embargo, como afirma Cabrera (2000 simultáneamente, la maquinaria neuronal en el cerebro del/a terapeuta
p.136), “cualquiera que sea la alteración bioquímica subyacente, los/as está teniendo un efecto indirecto, y probablemente persistente en el
pacientes experimentan la depresión desde el punto de vista psicológico, tiempo, sobre la maquinaria neuronal del cerebro de su paciente.
como un menoscabo de la autoestima, en el contexto de relaciones Probablemente, lo contrario es también verdadero. En la medida que
interpersonales fallidas. Además, las alteraciones genéticas no explican nuestras palabras producen cambios en la mente de nuestros/as
la gran variedad de cuadros depresivos que observamos en la práctica pacientes, entonces las intervenciones terapéuticas también producen
clínica”. Por otra parte, las hipótesis bioquímicas son aún muy cambios en sus cerebros. Desde esta perspectiva, concluye Kandel, los
incompletas y tampoco dan cuenta de todas las manifestaciones clínicas. enfoques biológicos y psicosociales convergen.
De este modo, la confirmación de procesos biológicos subyacentes no Los estudios empíricos sobre resultados terapéuticos muestran que,
en general, el mejor tratamiento de los estados depresivos es la
4
combinación de medicación antidepresiva con psicoterapia. Si bien se El que la depresión sea una reacción, significa que lo esencial no es la
tiende a pensar que los cuadros depresivos leves responden a pérdida misma, sino cómo ésta es codificada, interpretada por el
psicoterapia y los graves más bien a terapias biológicas, hay ciertas pensamiento consciente y la fantasía inconsciente que organizan la
evidencias que muestran que tanto la psicoterapia como la medicación experiencia de la pérdida. Así, el objeto debe ser psíquicamente
son capaces de producir cambios funcionales y estructurales en el construido como perdido. Más tarde, en Inhibición, Síntoma y Angustia
sistema nervioso. Aún sin considerar el efecto de la psicoterapia en su (1926d), destacó que la depresión aparece cuando persiste el deseo por
propio mérito, suficientes evidencias muestran que la psicoterapia el objeto perdido acompañado por la representación de su
aumenta significativamente la adherencia al tratamiento medicamentoso inaccesibilidad. La convicción de que el deseo por el objeto no puede ser
(Roth & Fonagy 1996). satisfecho produce el característico sentimiento de dolor. Así, el afecto
Finalmente, la relación descrita entre depresión y personalidad, es depresivo posee una cualidad especial, como señal de pérdida
otro argumento a favor de una interacción etiopatogénica entre factores consumada, diferente de la ansiedad como señal anticipatoria de peligro.
biológicos y psicológicos. Esta compleja interacción lleva a Cabrera a
afirmar que “sin la comprensión psicoanalítica no es posible abordar el
5.2. Carácter patológico del desear del depresivo
tratamiento de pacientes con depresión resistente” (2000 p. 136).
En la depresión, entonces, encontramos un intenso sentimiento –y
una convicción–, de que un deseo, que se vive como central para la
5. Psicodinámica
economía psicológica del sujeto es imposible de satisfacer. Claro que no
Desde los trabajos pioneros de Karl Abraham (1911) y Freud (1917e), se trata de cualquier deseo. Diferentes autores han construido un cierto
han sido muchos los autores psicoanalíticos que han contribuido a catálogo de deseos en base al estudio psicoanalítico de variados/as
enriquecer la teoría psicodinámica sobre los desórdenes afectivos. Hugo pacientes deprimidos/as:
Bleichmar (1996) nos ofrece una visión integrada, crítica y actualizada,
de los diferentes aportes, que seguimos de cerca en la presentación a) Deseos de satisfacción instintiva o de experimentar niveles bajos de
siguiente. 1 Por su parte, en los últimos 40 años, teóricos de orientación tensión mental y física (depresiones secundarias a estados de
cognitivo conductual han ofrecido modelos etiopatogénicos si no privación crónica o a situaciones de estrés prolongado).
totalmente compatibles al menos complementarios con la perspectiva b) Deseos de apego, que van desde los más normales de contacto
psicodinámica. físico o comunicación emocional con un otro significativo, hasta los
más patológicos de fusión con el objeto (depresiones secundarias a
separaciones, especialmente importante en niños y adolescentes,
5.1. Duelo, pérdida y separación como modelos de la dinámica
“hospitalismo”).
depresiva
c) Deseos narcisistas, que también van desde los normales deseos de
control de los propios impulsos y emociones, de buen funcionamiento
En Duelo y Melancolía (1917e), Freud ofreció un modelo que, como
psíquico, de ser querido o apreciado, hasta deseos más patológicos
condición universal, pudiera explicar los diferentes tipos de depresión.
de cumplir con ideales de perfección física, mental o moral, de ser
Así, caracterizó la depresión como la reacción a una pérdida de un objeto
objeto de admiración sin límite, o de tener un control total sobre sí
real o imaginario. Este objeto puede ser una persona amada, o algo
mismo o sobre los demás. La no realización de tales deseos más
abstracto que tomó el lugar de ella, como el propio país, un ideal, etc. 2
patológicos está en la base de las llamadas depresiones narcisistas.
1
d) Deseos relacionados con el bienestar de la persona querida. Si el
Para el detalle histórico y bibliográfico o la profundización conceptual, sugiero consultar sujeto se ve a sí mismo como siendo el agente causal del daño o
este trabajo.
2 sufrimiento del objeto, se originará una depresión cuyo componente
Como lo han hecho notar muchos autores, el término “objeto” no es un término feliz, pues
da a la psicología psicoanalítica un sesgo mecanicista que no hace justicia a la realidad muy principal será la culpa.
humana de la práctica clínica. La patología surge siempre en el contexto de experiencias
interpersonales fallidas. Téngase entonces presente que cuando hablamos de “objeto” –y en significativo. Quizás el término ha seguido usándose porque apunta a una representación
el texto lo haremos repetidamente– nos referimos a personas o a cualquier situación, cosa interna, a un “objeto” del mundo interno, que es, precisamente, lo que en última instancia
(material o ideal) que tiene significación sólo en su relación con una persona, con algún otro cuenta en la psicodinámica.
5
a) La existencia de un deseo que ocupa un lugar central en la economía
Desde luego este catálogo no es exhaustivo ni tampoco excluyente. psicológica del sujeto; fijación que no puede ser reemplazada o
De hecho, en un/a paciente dado/a podemos encontrar una combinación compensada por otros deseos.
de deseos patológicos (i.e. por la convicción de su no posibilidad de ser b) El sentimiento de desamparo e impotencia frente a la realización de
satisfechos). Sin embargo, la detección del deseo principal y de los ese deseo, con la correspondiente representación de sí mismo como
círculos viciosos que se engendran en relación con él, tiene una incapaz de satisfacer el deseo.
importancia de primer orden a la hora de planificar una psicoterapia con c) Sentimiento de desesperanza no restringido al presente, sino que
un/a paciente depresivo/a singular. abarca también el futuro.
d) El estado depresivo y la inhibición psicomotora son consecuencias
afectivas y motivacionales del sentimiento de desamparo e
5.3. La autoestima depresiva: Impotencia, desamparo,
impotencia (autoestima disminuida).
desesperanza
Ahora bien, la planificación del tratamiento de un/a paciente
Un segundo componente de la depresión, correlativo al sentimiento de
depresivo/a particular, exige diferenciar entre los siguientes distintos
desesperanza que surge frente a la imposibilidad de satisfacer un deseo
elementos:
intensamente aspirado, es la representación de sí mismo como una
persona impotente, incapaz de modificar la situación: no se puede
1. El estado depresivo mismo.
renunciar al deseo pero tampoco se lo puede satisfacer. El estado
2. El desorden depresivo clínico que está constituido por el estado
depresivo consiste así no sólo en la imposibilidad de realizar el deseo,
depresivo, los intentos defensivos de restauración del estado de
sino también y más significativamente, en una representación de sí
bienestar premórbido, las complicaciones de la depresión, y los
mismo como impotente, incapaz de satisfacción, que tiñe la totalidad de
círculos viciosos que mantienen y profundizan el estado depresivo
la vivencia. Dada la estrecha relación entre la representación de sí
(entre los que se encuentran los beneficios secundarios).
mismo y el nivel de funcionamiento mental y corporal, en la medida del
3. Los estados de disminución o desaparición del deseo.
desamparo y la impotencia, las mociones que tienden hacia el objeto del
4. Los factores que predisponen el estado depresivo y lo desencadenan
deseo son desactivadas, lo cual explica la apatía y la inhibición propia de
(caminos por los que una persona individual llega a deprimirse).
los estados depresivos.
La predisposición a la depresión está así determinada por la fijación a
experiencias tempranas de desamparo e impotencia, las que han dejado 5.5. Círculos viciosos que mantienen y profundizan la depresión
su impronta en la memoria más arcaica (procedimental). De este modo,
Teóricos cognitivo-conductuales han destacado que en la instalación y
cada vez que la persona con predisposición depresiva se siente incapaz
desarrollo de un desorden depresivo suelen establecerse círculos
de realizar sus aspiraciones (por razones reales o imaginarias), se
viciosos que deben ser desarticulados con el tratamiento: los
reactivan automáticamente aquellas experiencias en que predominan los
pensamientos y sentimientos depresivos impactan la conducta del/a
sentimientos de impotencia y, con ellas, los mecanismos neuroquímicos
paciente, conduciendo a niveles de inactividad que pueden contribuir a
patológicos. Este modelo, que tiene cierta base empírica, es un buen
cambios en el nivel neuroquímico, los cuales, a su vez, exacerban los
ejemplo de interacción etiopatogénica entre factores ambientales y
componentes afectivos y cognitivos de la depresión. Además, el individuo
genéticos.
deprimido tiene un impacto depresivo sobre los que lo rodean,
contribuyendo así a la evitación y rechazo social de los que suelen
5.4. Elementos del estado depresivo quejarse los depresivos. Aún más significativo es que los individuos
deprimidos suelan no darse cuenta como: 1) El afecto actual colorea e
Resumiendo, los componentes que pueden considerarse definitorios
influye en la forma en la cual los eventos y la información están siendo
del estado depresivo son:
evaluados, procesados, almacenados y recuperados. 2) La inactividad
conductual está exacerbando el proceso depresivo. 3) La conducta social
inusual está contribuyendo inadvertidamente al proceso de mantención
6
de la depresión. La representación de sí mismo como impotente, tipos de peligro. El que ciertos/as depresivos/as manifiesten angustia
contenido de la autoestima disminuida, actúa como un potente sesgo de como uno de sus síntomas centrales, desplieguen síntomas agorafóbicos
confirmación, de acuerdo con el cual las personas deprimidas están o preocupaciones hipocondríacas que no existían previamente, puede
predispuestos a atender selectivamente –y de modo automático–, a deberse a que el sentimiento inicial de impotencia e incapacidad para
aquellas características de los eventos que son representativas de sus cumplir los deseos ha teñido la totalidad de las representaciones de sí
propios defectos (reales o imaginarios), ignorando las que son mismo. Se reduce el sentimiento de potencia para enfrentar la realidad
disconfirmatorias. Esto amplifica la autoevaluación negativa de la en general y los peligros imaginados aumentan. Las representaciones de
persona deprimida. sí mismo como incapaz, inferior, débil e impotente, establecen una
condición psíquica tal, que cualquier cosa o situación aparece como
amenazante. En tales casos, la inhibición del depresivo puede dejar paso
5.6. Defensas intrapsíquicas contra la depresión
a la agitación o a la hipervigilancia paranoide.
Intrapsíquicamente, a su vez, el dolor propio del estado depresivo
activa una serie de movimientos defensivos. Estos procesos tienden a
5.7. Preguntas que ayudan al diagnóstico del carácter patógeno del
aliviar el sufrimiento depresivo. Por ejemplo, la rabia es un intento de
desear
recuperar el objeto perdido. La rabia por la pérdida también debe
entenderse como una reacción normal de la primera fase del duelo, la Si definimos la esencia de los desórdenes depresivos como el
fase de protesta. De la misma manera, la restauración de lo perdido sentimiento de desamparo, impotencia y desesperanza frente a la
puede efectuarse en la fantasía (por ejemplo, en sueños que niegan la posibilidad de realizar un deseo al cual el sujeto está fuertemente fijado,
pérdida). En otros casos, el depresivo puede recurrir al llanto cuyo entonces es terapéuticamente de la mayor importancia hacer un
impacto en los otros lleva naturalmente a entenderlo como petición de diagnóstico preciso de las características y cualidades de este deseo. En
ayuda. También los autorreproches, como formas de autocastigo por la este diagnóstico, Bleichmar nos ayuda con un conjunto de preguntas:
pérdida, pueden entenderse como intentos de disminuir los sentimientos
de culpa y por esa vía recuperar el amor del superyo. 1) ¿Es el carácter patológico del deseo lo que hace imposible su
Cuando el dolor por la depresión es prolongado, los mecanismos satisfacción? ¿No son las expectativas que el mismo deseo impone
restaurativos se muestran insuficientes para mantener la ilusión de que el las poco o nada realistas para este sujeto? Este suele ser el caso de
deseo pueda ser satisfecho. Entonces, de análoga manera a lo que personalidades narcisistas que tienen modelos grandiosos con los
sucede durante la última fase del duelo normal, en que los deseos de cuales aspiran a identificarse (ideal del yo grandioso).
apego por la persona perdida son desactivados, la estrategia final de la 2) Si el deseo aparece como realista, ¿no será que la imposibilidad de
mente deprimida es, precisamente, movilizar defensas masivas en contra su realización reside más bien en ciertas características de la
del propio funcionamiento mental, con el intento de abolir de una vez el personalidad del sujeto?. Por ejemplo, representaciones depreciadas
desear, el pensar y el sentir. Este podría ser el caso del estado mental de sí mismo, superyó severo, diversos tipos de patologías que
descrito por Spitz (1946) en las fases terminales del hospitalismo o en los provocan fracaso, como personalidades limítrofes, obsesivas, déficits
procesos severos de desapego que tienen lugar cuando una pérdida cognitivos o de otro tipo.
importante no es compensada por un objeto sustitutivo adecuado 3) ¿No será que el deseo es percibido como irrealizable a causa del
(Bowlby 1980). En situaciones vitales extremas, como en personas que impacto de experiencias pasadas que tiñen los lentes a través de los
han sufrido el tormento de campos de concentración o han sido cuales se ven las circunstancias actuales, otorgándoles una
sometidas a torturas y otros sufrimientos prolongados e intolerables, apariencia negativa? (Desesperanza aprendida). ¿No será que la
suelen presentarse estados de anestesia que se expresan como una realidad actual sobrepasa “realmente” al sujeto? Por ejemplo,
irrecuperable incapacidad de “experimentar” nada nuevo. situaciones de guerra o convulsión social, enfermedad severa. Ciertas
Hay momentos en que el afecto depresivo se retira a un segundo depresiones de la edad media de la vida aparecen cuando el sujeto
plano y da paso a un sentimiento de ansiedad producido por el miedo a percibe oscuramente, pero no acepta, una disminución en sus
perder un objeto que hasta ese momento se sentía como protector, o por facultades debido al declinamiento propio de la edad.
la pérdida de la confianza en la propia capacidad de enfrentar diferentes
7
4) ¿Por qué el deseo no puede ser reemplazado por otro? ¿Cuáles son con los otros. Por otra parte, mientras más inconscientes sean los
las razones emocionales que subyacen a la fijación a este deseo ataques, más trascenderán a la conducta (actuación). Sin embargo, en
particular que por efecto de la depresión se transforma en interés del análisis y por razones didácticas, conviene hacer la diferencia.
irrealizable? Esta última pregunta es crucial, pues su respuesta nos Igualmente compleja es la relación entre agresión y culpa.
orientará sobre las posibilidades de éxito que tiene una psicoterapia
en un caso particular. Una respuesta positiva al dilema de cambio que
5.9.1. Agresión y deterioro de los objetos internos
la pregunta plantea, es decir, el que la elaboración psicoterapéutica
logre el reemplazo desiderativo, promoverá necesariamente el Pensemos en una mujer cuyo narcisismo patológico la lleva a atacar a
crecimiento psíquico y la maduración en el sujeto que sufre la su marido sobre la base de la rivalidad que siente con él. Esta paciente
depresión, protegiéndolo de una recaída. no perderá oportunidad para denigrar a su pareja, transformándolo así,
desde un objeto previamente idealizado, en uno completamente
devaluado. Pero, ya que el esposo funciona para esta mujer como un
5.8. La depresión como un estado común final
tipo de “posesión narcisista” (simultáneamente a funcionar como rival), la
Si la disminución de la autoestima, donde el sentimiento de representación de sí misma como alguien que está casada con un ser
desamparo, impotencia y desesperanza frente de la realización de un tan devaluado la hará sentir fracasada, sin ninguna esperanza de poder
deseo fuertemente anhelado es el núcleo común de todo estado llevar una vida de pareja satisfactoria. En estos casos, es adecuado
depresivo, entonces es posible llegar a tal estado a través de diferentes hablar de “destrucción del objeto”, porque, en la realidad psíquica de
vías, aun cuando ninguna de ellas sea una condición necesaria. estos/as pacientes la denigración persistente del objeto conduce a su
Cualquier condición, sea que pertenezca al mundo interno, a la pérdida como objeto estimulante capaz de sustentar el propio narcisismo.
estructura de personalidad, a una biografía traumática o a una situación Este es el proceso que se desarrolla en personas que, como el
de la realidad externa actual, si produce una baja en la autoestima, mencionado, atacan continuamente a sus seres más cercanos. Como
puede conducir a una depresión. Revisaremos algunas de los caminos resultado, nada aparece como digno de valor, lo que termina en un
más transitados por los/as pacientes depresivos/as. Cada una de estas mundo vacío de objetos valiosos o estimulantes, un mundo que es
vías está guiada por factores diferentes o áreas de patología. Desde inevitablemente comparado con el mundo imaginario, lleno de objetos
luego, los diferentes factores pueden combinarse y estar en interacción idealizados y que aparece como inalcanzable. Desde luego, al lector no
recíproca. se le escapará que la envidia puede jugar un rol importante en esta
dinámica. Son pacientes que “supuran” amargura y que junto con
sentimientos crónicos de desilusión, persisten en una actitud de crítica
5.9. Agresión y depresión
despiadada a cualquier proyecto que emprenda alguien con quien
La experiencia clínica muestra que el manejo patológico de la rivalizan.
agresión es uno de los caminos principales que conduce a la depresión. Siguiendo a Bleichmar, definimos una “posesión narcisista” como
Sin embargo, tal afirmación es demasiado general como para servir de todos aquellos objetos (persona o cosa) cuya valoración –o
guía clínica, es necesario discernir cómo diferentes formas de agresión devaluación–, repercute directamente en la representación y, desde
pueden producir el sentimiento de desamparo descrito. Fueron luego, en la evaluación que el sujeto tiene de sí mismo. Es el caso de
especialmente Freud (1917e, 1923b) y M. Klein (1935, 1940) quienes padres que consideran a sus hijos como prolongación de ellos mismos:
más contribuyeron a esclarecer los mecanismos dinámicos por los cuales Por un lado los critican permanentemente y, por otro, cualquier fracaso
la agresión conduce a la depresión. Resumiendo, Bleichmar distingue de ellos es sentido como una falla personal. Pero también una casa, un
entre los efectos de la agresión dirigida a las representaciones internas automóvil, un amigo, un amante, etc. puede tener el valor de posesión
de los objetos o a la representación del sí mismo, de los efectos que narcisista. En un nivel más abstracto, lo pueden ser un partido político,
produce cuando está dirigida hacia el objeto externo real o en contra de una organización religiosa o un movimiento ideológico. Un “objeto de
las funciones del sí mismo. Naturalmente, ésta es una distinción algo actividad narcisista” en cambio, es aquel que permite al sujeto realizar
artificial, pues es poco probable que alguien pueda restringir sus ataques una actividad que le garantiza su propio valor. Por ejemplo, el paciente
a su fuero interno sin que la agresión se manifieste en la interacción real para un/a cirujano/a, el piano o el violín para un/a virtuoso/a, el
8
estudiante para un/a profesor/a, etc. Desde luego, el ejercicio de la
sexualidad puede ser una importante fuente de gratificación narcisista.
5.9.2. Agresión en contra del objeto externo
He conocido pacientes infieles compulsivos, que necesitaban estar
permanentemente “inflando” su frágil autoestima con nuevas conquistas. Si el/la sujeto no sólo despliega su agresión en contra de las
Por cierto, una vez que las llevaban a la cama, perdían el interés en representaciones de los objetos dentro de él/ella, sino que también la
ellas, cada vez que no lograban su objetivo de conquista, se sentían actúa en el mundo externo, destruyendo amistades, relaciones familiares
deprimidos y vacíos. Recién después de años de análisis empezaron, en y de trabajo, o relaciones laborales y oportunidades de vida), comienza a
una suerte de retrospectiva, a sentir culpa por el “uso” que habían hecho producirse un deterioro gradual de situaciones reales de vida, de
de esas mujeres. La ausencia de “objetos de actividad narcisista” puede impotencia para realizar deseos amorosos y para lograr éxito y
explicar los profundos desbalances que algunas personas sufren durante reconocimiento de su entorno. En estos casos la depresión (y he visto
los fines de semana y las vacaciones: Un maestro de educación casos que han llegado hasta la desesperación y el suicidio) es el
secundaria, consultó por “depresiones de fin de semana”. Con una resultado de una falla en la creación de condiciones que hagan posible la
personalidad con rasgos obsesivos, muy aprehensivo con sus hijos y realización de otros deseos que son centrales para la persona. Personas
alumnos (vivía con el angustioso temor de que algunos de sus alumnos que pasan su vida atacando aquello que, en su negación omnipotente
se accidentara durante las clases prácticas de química), los fines de dicen no necesitar, o con la idea de que podrán recuperarlo después,
semana sentía que lo invadían sentimientos de vacío, terminan dándose cuenta, a una edad en que es demasiado tarde para
autorrecriminaciones y temor por el futuro. Combatía parcialmente estos cualquier reparación. Suelen consultar (si es que lo hacen) porque no
pensamientos trabajando arduamente en tareas manuales en su casa. toleran el sentimiento depresivo de pérdida y de daño irreparable, y suele
Tenía un superyó muy severo y no podía disfrutar del tiempo libre, apoderarse de ellos/as una culpa persecutoria insoportable. Es el caso
durante la terapia se hicieron conscientes intensos sentimientos inmortalizado en el personaje de Don Juan Tenorio (“Que largo me lo
agresivos en contra de sus familiares y alumnos. fiáis...”).
Por otro lado, hay individuos que atacan sus “objetos de actividad Las situaciones descritas hasta ahora se presentan en personalidades
narcisista”. Denigran permanentemente su trabajo o profesión por con diferentes grados de narcisismo patológico y explican un cierto
considerarlos por debajo de los estándares a que aspiran. Estos ataques número de depresiones que aparecen en el contexto de crisis de la edad
causan que el/la sujeto se sienta impotente frente al cumplimiento de media de la vida.
deseos de realización personal. La profesión en cuestión aparece como
poco valiosa en comparación con otras (idealizadas) que se sienten
como inalcanzables. Este era el caso de una paciente que consultó y que
en la base de su depresión se hallaba la sensación de que, dada su 5.9.3. Agresión dirigida hacia sí mismo
condición de mujer, no había podido alcanzar las metas profesionales
Este punto toca el complicado papel que juega el masoquismo en
que ella sentía merecer, mientras que su marido, según ella, mucho
ciertas depresiones. La agresión, proveniente de un superyó
menos capaz, había logrado éxitos profesionales más altos. En esta
patológicamente severo, en la forma de una autocrítica continua,
época en que despierta la conciencia colectiva sobre la situación de
deteriora las representaciones de sí mismo. Pero, la autoagresión
discriminación de la mujer, la consideración de los factores asociados al
también ejerce un efecto negativo sobre el funcionamiento mental. Un
género se impone en la evaluación psicodinámica.
sujeto que se odia a sí mismo consume sus energías en una guerra
En este sentido, no son pocas las mujeres que deben abandonar sus
interna, ataca e inhibe las funciones de su yo y se prohíbe la satisfacción
estudios o el ejercicio de una profesión en razón de la crianza de los
de sus deseos. Como consecuencia, se desarrolla un sí mismo
hijos. Esta situación, que en un momento parece lo más natural, puede
empobrecido, e incapaz de sustentar la propia estima. Este proceso de
sin embargo tener efectos importantes años después, cuando los hijos
“autodigestión” se da paralelo con un proceso de duelo por aspectos de
abandonan el hogar y se produce lo que se ha llamado el “síndrome del
sí mismo, que se han perdido a causa de la agresión dirigida hacia
nido vacío”. En ese momento no es raro que emerjan intensos
dentro.
resentimientos en contra de la pareja y de los hijos, cuyo mal manejo
puede desencadenar una depresión.
9
5.10. Agresión y culpa la educación religiosa, no dejan de haber personas que están
profundamente convencidas de que sólo aceptando la propia maldad
La relación entre agresión y culpa es tan compleja como lo es aquella
podrán ser queridas por los demás. Esta convicción, cercana al
entre agresión y depresión. La fuente más obvia de culpa surge del
masoquismo, se constituye en un potente inhibidor de cualquier afecto
impacto de los propios impulsos o deseos inconscientes: En la medida
rabioso o impulso agresivo, incluso de aquellos que podrían ser vistos
en que el deseo o impulso sea trasgresor, parece natural que la persona
como adaptativos. Tales sujetos suelen ser objeto de abuso por
se sienta culpable, y esto es válido tanto para deseos de carácter sexual
personas inescrupulosas o desconsideradas.
como agresivos. Sin embargo, cabe hacerse la pregunta de por qué
Con todo, la dinámica más importante en la relación de agresión con
ciertas personas viven con tanta culpa deseos que otros parecen aceptar
culpa es la descrita por Freud en su clásico trabajo Duelo y Melancolía
sin mayor problema. Aquí se despliega un margen que puede ser
(1917e). En este trabajo, los autorreproches y autocríticas del paciente
aprovechado terapéuticamente. La pregunta es: ¿Por qué los deseos de
deprimido son entendidos como resultado de la introyección de la
esta persona son percibidos por ella de tal modo que los evalúa como
agresión originariamente dirigida hacia el objeto abandonado o perdido.
transgresores? o ¿qué condiciones llevaron al establecimiento de un
El sí mismo es reprochado en la conciencia y el objeto en el
superyó con estándares tan estrictos (a veces tiránicos), que determinan
inconsciente. En especial, en este punto se da la conexión entre
una conciencia moral hipercrítica, con un sadismo que está
depresión y duelo patológico. Mientras mayor haya sido la ambivalencia
permanentemente acechando al yo? Es un conocimiento aceptado y
previa del doliente con el objeto perdido o abandonado, mayor será la
general que después de una terapia psicoanalítica exitosa, el superyó es
probabilidad de que el duelo se atasque y desemboque en una
mucho más tolerante con los deseos e impulsos que afloran desde el
depresión. Objetivo de la psicoterapia será entonces permitir que los
inconsciente. El sujeto hace propio aquello de que “entre el dicho y el
procesos psicológicos detenidos del duelo se “descongelen” y prosigan
hecho hay mucho trecho”, esto es, distingue mejor entre la fantasía
su curso normal.
omnipotente y la realidad, lo cual, por un lado, amplía su capacidad de
Naturalmente, las relaciones descritas entre agresión y culpa pueden
introspección y con ello su vida interior y, por otro, posibilita una actitud
combinarse e interactuar de distintas maneras. Tarea del clínico será
más reflexiva y menos impulsiva.
describir en detalle, en cada paciente en particular, las distintas
Existen algunos individuos que han sido criados por padres
dinámicas que lo/a han conducido a la depresión.
excesivamente culpógenos, que inculcan en sus hijos una identidad
global de ser personas malas, agresivas o dañinas, lo cual determina
representaciones de sí mismo que predisponen al sujeto a sentirse 5.11. La depresión como fracaso en el logro de ideales
culpable frente situaciones nimias (piénsese en la caricatura que
Bibring (1953), psicoanalista de la escuela de la “Psicología del Yo”,
proyecta Woody Allen de las madres judías). Por su parte, una
planteó que la depresión es un estado afectivo primario que no estaba
religiosidad muy conservadora que fomente los sentimientos de
necesariamente relacionado con la agresión volcada hacia sí mismo.
culpabilidad puede llegar a penetrar profundamente en las
Consideraba que la depresión surgía de una tensión entre los ideales a
representaciones de sí mismo. Esta puede ser una explicación de porqué
los que se aspira y la realidad. Esta descripción se ajusta bien a
después de una terapia exitosa, personas que previamente eran
pacientes en los cuales existen aspiraciones narcisistas –que pertenecen
practicantes, abandonan, no sin resentimiento, su fe y religiosidad.
al ámbito de los ideales del yo–, y que son fuertemente anheladas, como:
Solemos recibir pacientes católicos con fuertes represiones sexuales y
1) El deseo de ser valioso, amado, apreciado, de no ser inferior o
con dificultades para tomar contacto consciente con sus propias
indigno. 2) El deseo de ser fuerte, superior, grande y seguro, de no ser
fantasías e impulsos agresivos. Recuérdese que, de acuerdo con el
débil e inseguro. 3) El deseo de ser bueno, cariñoso, de no ser agresivo,
catecismo católico, se peca por “pensamiento, deseo, acción u omisión”.
malévolo o destructivo. Para algunas personas, estas aspiraciones son
En esto parece haber una concepción que identifica sentimiento de culpa
estándares de conducta que necesitan ser mantenidos a toda costa.
con pecado, concepción que he criticado en otra parte (Jiménez 1999) y
Pero, cuando frente a algún tropiezo en la vida se toma conciencia de la
que en algunas personas educadas católicamente predispone a padecer
incapacidad –actual o imaginada– de estar a la altura de tales
depresiones, por la vía de reforzar la fantasía de omnipotencia de los
estándares, se produce depresión, por la vía de una disminución –
propios deseos. Es por otra parte muy cierto que, independientemente de
crítica–, de la autoestima, pues, para Bibring, cualquier frustración o
10
herida narcisista que abaje la autoestima puede producir depresión: La El primer tipo de personalidades narcisistas puede deprimirse
persona deprimida se siente siempre desamparada e impotente. directamente cuando, en razón de la pobre representación que tienen de
Por su parte, Arieti (1977) postuló una “ideología” personal existente sí mismas, se sienten impotentes e incapaces de obtener el objeto del
previamente en pacientes profundamente deprimidos/as, personas que deseo, y lo dan por perdido. En tales casos la depresión es más o menos
nunca vivieron para sí mismas sino para satisfacer los deseos y crónica y forma parte de la personalidad. Pero también pueden
necesidades de otra, que Arieti denominó el “otro dominante”. Este tipo deprimirse indirectamente, por la vía de no enfrentar la vida, evitando
de personas creen –con un tipo de convicción inconsciente, es decir, exponerse a situaciones que les producen miedo o vergüenza. Así,
irrefutable a través de la argumentación corriente–, que la vida no tiene terminan siendo personas inhibidas, que renuncian al contacto
sentido si no son capaces de provocar la reacción que desean –habría interpersonal y a aprender de nuevas experiencias, dejando pasar
que agregar, desesperadamente–, en el “otro dominante”. Se adhieren sistemáticamente las oportunidades que ofrece la vida, con el
rígidamente a un plan de vida en absoluto realista que, por otra parte, consecuente empobrecimiento personal. La secuencia de desorden
tampoco pueden abandonar. Tellenbach (1961) describió en términos narcisista, vergüenza, evitación fóbica, déficit yoico y pérdidas reales,
semejantes el “Typus Melancholicus”. De este modo, diversos autores concluye finalmente en un sentimiento de impotencia e incapacidad de
han ilustrado la íntima relación entre la calidad y el tono de las relaciones cumplir los deseos anhelados. La crisis de la edad media los enfrenta
interpersonales más inmediatas y la mantención de la propia autoestima. con una sensación de amargo fracaso vital.
En el segundo tipo de desorden narcisista (narcisismo maligno, con
grandiosidad y omnipotencia a través de la denigración de los objetos), la
5.12. Depresión narcisista
depresión no es crónica. Aparece en momentos en que colapsa la
Aun cuando agresión y culpa son componentes importantes de grandiosidad personal después de haber negado por mucho tiempo la
muchas depresiones encontramos un grupo de estados depresivos cuyo realidad y las propias limitaciones. Como vimos más arriba (5.9.1 y
núcleo no es la culpa, sino el sentimiento de frustración por no haber 5.9.2), en estos casos la depresión es el resultado final de un narcisismo
logrado especiales aspiraciones narcisistas del sí mismo. En tales destructivo en las relaciones interpersonales y en la capacidad de
depresiones no suelen encontrarse auténticos sentimientos de culpa, autocuidado.
sino de rabia impotente o sentimientos de desamparo y desesperanza en
conexión con un quiebre de un concepto idealizado del sí mismo. El
5.13. Sobredeterminación de los factores dinámicos involucrados
sentimiento predominante no es la culpa sino la vergüenza y humillación.
en la depresión
La vergüenza es el resultado de un conflicto que afecta el sentido de sí
mismo y la evaluación narcisista en la presencia (real o imaginaria) de un Hemos descrito, siguiendo a Bleichmar, distintas vías paradigmáticas
otro significativo. En la culpa el peso está en la preocupación por el daño que son el resultado del estudio psicoanalítico de pacientes deprimidos.
y sufrimiento infligido en el objeto (lo que supone una identificación con el Los factores descritos son teóricamente independientes, pero, en la
otro); en la vergüenza, en cambio, lo que importa es la sensación de práctica y en un/a paciente particular, lo más frecuente es que
inferioridad narcisista frente a un testigo real o fantaseado. encontremos una combinación de factores –que suponemos actúan
Bleichmar destaca que en la literatura psicoanalítica se han descrito simultánea o sucesivamente–, cuyo “peso” conjunto da por resultado una
dos tipos de desórdenes narcisistas de personalidad. El primero se da en depresión clínica.
personas caracterizadas por una baja autoestima permanente o por la La ventaja de un modelo integrado como el presentado, es que
dificultad de sostener una representación valorizada y cohesionada de sí permite entender la depresión precisamente como un proceso dinámico,
mismos (narcisismo “a la Kohut”). El segundo se da en personalidades y no como una categoría diagnóstica cerrada. Tal comprensión se orienta
con incapacidad de depender de otros, muy omnipotentes y envidiosas, naturalmente hacia la aplicación de una terapéutica pluralista capaz de
que atacan y desprecian sus objetos, mostrando una fusión defensiva integrar, según sea el caso, medidas farmacológicas, psicoterapéuticas o
entre el ideal de sí mismo, los objetos ideales y las imágenes de sí de rehabilitación psicosocial. Además sirve de guía para planificar una
mismo, donde la agresión juega un rol central en las relaciones de objeto psicoterapia de orientación psicoanalítica que pueda eventualmente
interno y externas (narcisismo patológico “a la Kernberg”). complementarse con terapias de otras orientaciones.

11
Referencias Post RM (1992) Transduction of psychosocial stress into the neurobiology of
recurrent affective disorder. Am J Psychiatry 149: 999-1010.
Abraham K (1911) Notes on the psychoanalytic investigation and treatment of Spitz R (1946) Anaclitic depression. Psychoanal. Study Child 2: 313-341.
manic-depresive insanity and allied conditions. En: Selected Papers on Tellenbach H (1961) Melancholie. Berlin Göttingen Heidelberg: Springer.
Psychoanalysis. New York: Basic Books, 1953, pp. 137-156. Van Praag H (1989) Moving ahead yet falling behind: a critical appraisal of some
Arieti S (1977) Psychotherapy of severe depression. Am J Psychiatry 134: 864- trends in contemporary depression research. Neuropsychobiology 22:
868. 181-193.
Bibring E (1953) The mechanism of depression. En: Affective Disorders.
Psychoanalytic contributions to their study. P Greenacre (ed.) New York:
International Universities Press, pp. 13-48.
Bleichmar H (1996) Some subtypes of depression and their implications for
psychoanalytic treatment. Int. J. Psycho-Anal. 77: 935-961.
Bowlby J (1980) Loss: Sadness and Depression. Attachment and Loss, Vol 3.
London: Hogarth Press.
Brown GW, & Harris TO (eds.) 1989) Life Events and Illness. New York: Guilford
Press.
Cabrera J (2000) Depresión: Una mirada integrativa. Rev. Chil. Psicoanal. 17
(2): 133-142.
Freud S (1917e ]1915]) Duelo y Melancolía AE 14.
Freud S (1923b) El Yo y el Ello. AE 19.
Freud S (1926d [1925]) Inhibición, síntoma y angustia. AE 20.
Gabbard GO (1994) Psychodynamic Psychiatry in Clinical Practice. The DSM-IV
Edition. Washington: American Psychiatric Press, Inc.
Gabbard GO (2000) Psychodynamic Psychiatry in Clinical Practice. Washington,
London: American Psychiatric Press, Inc.
Jiménez JP (1999) Determinismo, libertad y responsabilidad en Freud (otro
ejercicio de diálogo entre psicoanálisis y teología). Teología y Vida. XL
(1-2): 5-24
Kandel ER (1998) A New intellectual Framework for Psychiatry. Am J Psychiatry
155 (4): 457-469.
Kendler KS, Neale MC, Kessler RC, et al (1992) Childhood parental loss and
adult psychopathology in women: a twin study perspective. Arch Gen
Psychiatry 49: 109-116
Klein M (1935) Una contribución a la psicogénesis de los estados maníaco-
depresivos. En: Contribuciones al Psicoanálisis. Buenos Aires: Paidós,
1964, pp. 253-278.
Klein M (1940) El duelo y su relación con los estados maníaco-depresivos. En:
Contribuciones al Psicoanálisis. Buenos Aires: Paidós, 1964, pp. 279-
301.
Köhler Th. & Dahme B (1996) Psychobiologische Grundlagen der
Psychotherapie. En: W. Senf & M Broda (eds.) Praxis de Psychotherapie.
Ein integratives Lehrbuch für Psychoanalyse und Verhaltenstherapie.
Stuttgart New York: Georg Thieme Verlag, pp.242-249.
Minsal (2001) La Depresión. Detección, diagnóstico y tratamiento. Guía clínica
para la atención primaria. Santiago: Ministerio de Salud.
Roth A & Fonagy P (1996) What works for whom? A critical review of
psychotherapy research. New York London: Guilford Press.

12

También podría gustarte