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Siete grandes combates de Tecún Umán

Siete grandes combates cruelmente sangrientos fueron necesarios para dominar al


señorío de los quichés, quienes lanzaron sus huestes a los conquistadores, siendo
capitaneadas muchas de ellas por el valiente príncipe y señor Tecún Umán.

El primer combate sangriento en tierras de Guatemala fue a orillas del río Tilapa,
limítrofe entonces entre Suchitepéquez (Xuchiltepéquez) y Soconusco. De allí pasó a
combatirse en Zapotitlán, en el mismo departamento de Suchitepéquez. Aunque las
batallas eran sangrientas, los indios no se acobardaban ni ante la caballería, que
causaba los máximos estragos ni ante la artillería, que a la mayoría de otros pueblos
había aterrorizado. La tercera gran batalla fue en la cuesta que sube a
Quetzaltenango (hoy llamada de Santa María Jesús), en la cual, a pesar de la
desventaja del terreno, lograron imponerse las fuerzas de Alvarado.

Los indios no desisten en su empeño de dominar a los españoles y aunque


derrotados en la cuesta, preparan un nuevo ataque para cuando bajen los castellanos
hacia las barrancas de Olintepeque, donde una poderosa escuadra bélica de seis mil
indios del señorío quiché de Utatlán preparaba la cuarta batalla. El príncipe
Azumanché fue uno de los héroes y el capitán de las fuerzas quichés en ese combate
tan sangriento en el que se tiñeron enrojecidas por la sangre las aguas del río
Olintepeque, al cual llamaron Xequijel y que quiere decir "río de sangre".

La populosa Xelajú, que gobernaban diez príncipes, cada uno administraba sobre
8,000 indios, al saber el desastre de Xequijel, quedó deshabitada.

La dirección de la guerra pasó a Tecún Umán, príncipe del Quiché y se aprestaron a


la última contienda en las llanuras de Quetzaltenango. Durante más de dos horas la
suerte pareció indecisa. Entonces Pedro de Alvarado decidió que la caballería, al
mando de don Pedro de Portocarrero y Juan de Chávez, atacara un ala del escuadrón
de Tecún Umán que trataba de dividir en dos la infantería de Alvarado para cercar una
parte y personalmente don Pedro atacó a la parte que iniciaba el movimiento
envolvente.

Allí se hallaron frente a frente el gran guerrero quiché, Tecún Uman y el capitán
invicto, Pedro de Alvarado. Cuenta la leyenda que sobre el príncipe Tecún volaba, por
arte de magia un Quetzal que lo protegía. Tecún Umán atacó tres veces al capitán
don Pedro y logró en una, darle muerte a su caballo, fue socorrido don Pedro con otro
caballo y logró atravesar con su lanza el pecho de Tecún Umán, cayendo al instante
el quetzal.

Al saberse la muerte de Tecún, los de Utatlán se enardecieron en la lucha; pero ante


la inutilidad de sus esfuerzos, procuraron, en buen orden, retirarse a los montes.
Cuando los españoles victoriosos regresaron a Quetzaltenango, sólo encontraron una
ciudad desierta, sin víveres, ni utensilios.
Monumento a Tecún Umán

El 22 de marzo de 1960 se emitió en Ciudad de Guatemala, el Decreto 1344 por


medio del cual se declaraba a Tecún Umán, Héroe Nacional y símbolo de la defensa
de la nacionalidad guatemalteca y para honrar su memoria se declaraba el 20 de
febrero de cada año Día de Homenaje a Tecún Umán, así como la construcción de
monumentos que perpetúen su memoria.

Es así como el 6 de marzo de 1961 se emitió el Acuerdo Gubernativo signado por el


presidente Miguel Ydígoras Fuentes y el Ministro de Hacienda y Crédito Público
Manuel Bendfeldt J. por medio del cual se cedía a la Municipalidad de Guatemala un
área de terreno de la Finca “La Aurora” para erigir el Monumento a Tecún Umán.

Cuatro años más tarde, en 1965, se coloca a un costado del bulevar Liberación una
escultura de Tecún Umán de 6.5 metros realizada por el artista plástico Roberto
González Goyri.

El lugar ha servido de escenario para diversas manifestaciones sociopolíticas y


culturales, por eso, la comuna capitalina ha realizado trabajos de remodelación e
iluminación de la plaza en honor al héroe nacional.

La figura de Tecún Umán, héroe nacional de Guatemala, constituye un símbolo que


fomenta el patriotismo y la defensa de la nacionalidad guatemalteca.

Casa del Migrante Tecún Umán

Casa del Migrante Tecún Umán

La Casa del migrante de Tecún Umán nace como proyecto en julio de 1995 y empieza
a hacerse realidad en septiembre del mismo año. La construcción de la Casa del
Migrante viene a ser un refugio para todas la personas migrantes que migrando hacia
el Norte ven truncado el sueño americano.

En vista de las violaciones denunciadas por los migrantes, en el año 1996 se crea la
oficina de derechos humanos con dos objetivos principales: Detectar las violaciones
de los derechos humanos de los migrantes y dar seguimiento a las mismas y crear en
la frontera sur occidental de Guatemala una cultura de derechos con la formación de
promotores jurídicos en la región.

La casa brinda a toda persona migrante, hospedaje 3 días, alimentación, asistencia


social, laboral, jurídico - legal, médica y otras necesidades básicas que puedan
necesitar mientras permanecen en la institución.

La ciudad de Tecún Umán, lugar fronterizo entre Guatemala y México, dista a 81


kilómetros de la cabecera departamental y a 251 kilómetros de la capital, con 27,000
habitantes locales y una población flotante de 30,000 personas aproximadamente. El
quehacer de su población gira en torno a aspectos de carácter histórico, sociocultural
y económico; aunque muchos de sus habitantes se dedican a la agricultura y también
llegan de otros lugares (migrantes temporeros) a trabajar en el campo. Otros se
dedican a la albañilería, carpintería y herrería.

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